¿Es un puto caos que no sabes en ningún momento por dónde va a tirar, va lanzando minitramas que muchas veces no van a ningún lado, tiene a Ruffalo caricaturizando tanto a Trump que acaba sobreactuando lo que no está escrito y parece que no acaba de decidirse si quiere ser una sátira social potente o una comedia surrealista de Cartoon Network? Pues sí, todo eso es verdad, y sólo hace que la peli sea mejor.
Ésta es la obra de un director que sabe que ha tocado techo y ha decidido pasárselo bien haciendo lo que le da la gana, sólo puedo adorar eso.