Al terminar de verla he quedado completamente confundido. No entendía nada de lo que acababa de ver. Sin embargo, tras haber visto un vídeo que explicaba todo, me ha parecido una jodida genialidad.
Sin duda volveré a verla pudiendo apreciar todos los sutiles detalles que le dan sentido a este peliculón.
Una gran secuela que no tiene nada que envidiar de la primera entrega.
Tanto planos como vestuarios, diálogos y actuaciones son tan increíbles y emocionantes que te transportan al glorioso imperio romano.
Ha sido un absoluto gustazo poder verla en el cine, incluso a pesar de la Charo hija de la gran puta y el imbécil de su marido que, en un continuado ejercicio de desconsideración y falta de civismo, no han callado la boca en toda la puta película.
La recomiendo fervientemente y si es posible, en una sala de cine.
Ave César y puta charca.
