no joke/no jockey
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Ti West culmina su trilogía con una acuarela de thriller trash que recorre los callejones del giallo sacando la podredumbre de Hollywood y del puritanismo ochentero. Habría que echar la vista atrás para encontrar a otro cineasta que haya diluido los neones en la noche de una forma tan sugerente como lo ha hecho West en MaXXXine, una película que vuelve a dinamitar el género desde dentro, trabajando con el poder estrictamente estético de la imagen.
Y es que, quitando Pearl…
Siento que toda la arquitectura del Bong Joon-ho de Parásitos se reduce en Mickey 17 a un conjunto de bocetos un tanto perezosos, maniqueos, incluso. No creo que se le pueda exigir una especial finura al cineasta en la articulación de las analogías, pero sí que siempre ha habido un sentido relatístico-formal coherente. Si en Parásitos era la verticalidad, en Snowpiercer la horizontalidad.
Esta pirueta sci-fi parece haber acusado mucha tijera en montaje y perder ahí casi toda su fuerza…
Mike Leigh firma uno de los trabajos más delicados de lo que va de año. Una cinta sobre la depresión con apenas un par herramientas (su concentración y su fragmentación del dolor) que realiza un orgánico in crescendo bajo una Jean-Baptiste magnética.
Para enmarcar, esas dos escenas que Leigh comunica mediante la puesta en escena: la cena de Pansy con su hijo y su marido y la comida de los tres con su hermana y sus hijas. Ambas compuestas a través de un plano fijo tan devastador como para ir de la ira a la pena.
“ay mira qué mono el abuelo yendo al cine”
el abuelo: hay demasiadas películas hechas por mujeres
Realmente sorprendente su control de los puntos gravedad de la imagen, su exquisito gusto por el zoom-in y su entrega absoluta a la escenificación flamenca. Aunque, bueno, supongo que lo mejor es que la película se edifique sobre nuestro mayor tesoro: la sobremesa.