Es difícil de definir la perfección. Si me preguntan, les pondré esta obra audiovisual.
El maestro despertó de su letargo. Bajó del cielo y en un alarde de humildad e inconmensurable modestia compartió una ínfima parte de su conocimiento con nosotros, simples mortales.
Nietzsche una vez desarrolló en “Así habló Zaratustra” el concepto del superhombre. Lo que no sabía el bigotes era que ese termino es una mierda y palidece frente a la magnificencia del gran Don José Sánchez Mota…