A ver…si le quitamos el espantoso CGI, los forzados intentos de inclusión y progresismo, la falta de rigor histórico que pretende aparentar, la trama predecible y aburrida, los chistes cliché y vergonzosos, las innumerables lagunas y conveniencias del guion, así como los personajes arquetípicos y gastados… sí tiene alguna que otra broma que puede hacer gracia en un ambiente familiar.
Media estrella por eso y por Leonardo da Vinci gay.