No había visto esta película en mucho tiempo, Mark Ruffalo y Keira Knightley grabando un álbum es un combo inesperado pero que funciona muy bien.
Por alguna razón estuve esperando a que se enamoraran después de caminar por Nueva York escuchando sus playlists, es un giro positivo que no lo hicieran y mantuvieran esa relación de amistad y apoyo mutuo.
Gran soundtrack, gran concepto, una película muy disfrutable.