“La próxima vez será la próxima vez. Ahora es ahora.”
Esta película me desarma emocionalmente. Es un abrazo reconfortante que me recuerda la fragilidad y belleza efímera de la vida: una vida que a pesar de las batallas diarias, se revela en momentos simples y hermosos, y que encontrar la felicidad en ellos es el verdadero significado de vivir.
Perfect days nos hace reflexionar sobre nuestra propia existencia, sobre las decisiones que hemos tomado y las que estamos por tomar. Nos impulsa a vivir cada día como si fuera perfecto, porque, en esencia, lo es.