Me ha gustado un montón. A nivel visual es una pasada, tiene planos chulisimos que destacan porque no es la forma en la que te esperas que se grabe un documental. Tiene un estilo claro pero a su vez juega un poco con todo hasta autodescubrirse y crear su propia identidad. Me ha fascinado. No podía dejar de mirar la pantalla.
La banda sonora es otra salvajada. Nunca he sido mucho de flamenco y no creo que ahora vaya a…