entiendo el punto y la crítica que se quiere hacer (y la completa con éxito), pero llega a unos límites de repugnancia y estupidez que hacen perder algo de seriedad a una denuncia necesaria de la crueldad del mundo de Hollywood y el problema de los estándares en la sociedad
de todos modos, hace notar lo que quiere: enseña y transmite la sensación de ahogo y tensión a la que se somete la mujer pública, a la que las exigencias…