Que Anora haya sido premiada es una clara muestra de lo desconectada que está nuestra sociedad de las verdaderas luchas por la dignidad y los derechos de las mujeres. Trata hablar sobre la prostitución y explotación, pero se pierde en su propio morbo y acaba haciendo lo que justamente dice criticar: cosificar a la mujer.
Las escenas de sexo no son innecesarias por completo, pero la excesiva cantidad de veces que se repiten a lo largo de la película desvirtúa…