Obviando las cosas que envejecieron mal, que no son pocas, no entiendo muchas de las críticas.
Creo que refleja de muy buena manera el inexorable destino de la juventud burguesa en esa época (y todavía): el mas oscuro nihilismo. Pues cuando más allá del horizonte no hay nada y se carece de capacidad crítica y de organización (pasa por ser pijo), lo único que queda es quemar la actualidad, vivir del espejismo de la eterna juventud.
Además las actuaciones están…