Pero que divertida película de una cocina que no es sobre la cocina.
Nos dieron historia, música, drama, amor, antojos, risas y justicia divina, la disfruté un chingo.
Pero que divertida película de una cocina que no es sobre la cocina.
Nos dieron historia, música, drama, amor, antojos, risas y justicia divina, la disfruté un chingo.
oh, I miss my mom.
La disfruté mucho y volví a llorar con esa pinche escena llena de orgullo. La familia es eso que es complicado de amar y que evoluciona con el tiempo y las vivencias, qué increíble voltear hacia atrás y entender todo; así como te puedes identificar con un personaje distinto cada que la ves.
Pero qué divertido estuvo estooooo, sentí que estaba viendo Destino Final otra vez. Por más historias en el místico Maine, por favor.
Fácil de ver.