Qué increíble. No me esperaba que fuera tan graciosa!!!
El final no me acabó mucho en su momento, pero después de reflexionar un poco creo que está muy on point. Las actuaciones de diez, la verdad.
Qué complicado eso del deseo. Para que exista el deseo es necesario un obstáculo, qué interesante!! Me ha encantado la figura del policía como esa tercera persona voyeur y reprimida, que esconde su deseo mediante el poder y la violencia. He amado los planos de los cuerpos desnudos
En según que cosas, recuerda a Alcarràs, con esos matices intimistas y costumbristas que tanto me gustan a mi (y a Laia). Muy muy recomendable
Cómo hacerme llorar sin salir de una habitación. La cámara no sale prácticamente de la casa de Charlie, pero es capaz de contarnos la vida del personaje y entenderle de una forma muy cercana: sentir cuál es realmente el peso del duelo. Me encanta cómo se han abordado las relaciones que tiene el protagonista con los demás personajes y el significado que construyen las redacciones o los ensayos.