En 2017 vi esta película es mi casa, que ya no es mi casa. En el cuarto en el que crecí, que ahora es de alguien más. Estaba acostada en mi cama. Me acuerdo que me tuve que sentar mientras pasaban los créditos porque no podia parar de llorar. Hoy la volví a ver y llore también, y me acorde porque tenia esta aplicación. Era para acordarme de cosas como esa, de lo significante que puede ser una película en nuestras vidas no solo como objeto/arte sino como memoria. Lo que nos devuelve. Otra vez volví a tener 19.
Un poco como acordarse de un sueño…