You're the devil. You're the godamn devil.
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Antes de Scorsese, el "gangster" en el cine constituía la personificación de una fuerza antitética de la sociedad. Una fuerza que según Coppola, estaba estilizada por trajes refinados y revestida por códigos de lealtad.
Después de Scorsese, ese mismo gangster fue obligado a poner los pies en la tierra. Se convirtió entonces en un mundano y alucinado hombrecillo, cuyas aspiraciones personales de "ser alguien" funcionaban ahora como excusa para esconder su miseria…