sin dudas, Flow se ha convertido en una de esas películas que voy a recomendar a ojos cerrados, sentí tantas emociones y cada que pasaba algo mi corazón parecía que iba a estallar… Gints Zilbalodis hizo un trabajo excelente, la animación es tan pulcra y tan inmersiva que aun así, incluso después de haberla terminado, sigue dejando sensaciones inexplicables.
me sentí reflejada con él Gato y la Garza, dos animales que en sí, tienen las escenas que más tocaron fibras…
me parece increíble como siempre termino buscando películas que me hacen sentir en mi punto más bajo, y esto realmente no se debe a que las mismas sean o tengan que ser específicamente “buenas”, sino humanas.
la vi sin expectativas, siendo (la primera vez) que me animo a reproducir una cinta que toca éstos tipos de temas y al ver opiniones tan ambiguas respecto a ella, me hace pensar, realmente cómo esperaban que fuera? a veces la perspectiva más cruda y difícil de tragar, es lo que tal vez necesitamos para tomar consciencia
