Gachas Migas Galianos Pisto manchego Cocido Chuletas de cordero a la brasa Su escudo lo forma un castillo ubicado sobre un cerro y a ambos lados ondean las banderas musulmana y de la Orden de Santiago respectivamente.
Las migas, suelen hacerse los días de septiembre cuando se realiza la vendimia pues mucha gente las acompañan con uvas. Y el pisto manchego con pimientos verdes, tomates y aceite de oliva.
Otros platos de la comarca son los duelos y quebrantos, el tiznao y somallao, el asadillo manchego, las gachas, y el pisto manchego, así como las judías verdes con el mismo aliño de las berenjenas.
Destacando la cabalgata en la que participan un gran número de habitantes del pueblo, las verbenas, y por supuesto el concurso de "Pisto", en el que todos se disfrazan y bailan hasta el amanecer, dando paso a la semana taurina con toros de cuerda, grandes concursos de ganaderías y toros "embolaos".
Verduras y hortalizas En cuanto a su riqueza hortícola, son excelentes las patatas pero sobre todo la menestra palentina o el pisto y los guisantes de Palencia.
Entre los platos típicos se encuentran: las migas, ajoarriero, morteruelo, gachas, pisto manchego, gazpacho manchego, platos con carnes de caza, comidas de pastores y todos aquellos que los agricultores elaboraban en el campo mientras trabajaban.
Platos típicos que se suelen tomar cuando tiene lugar la matanza son las gachas de almortas o el ajomataero y, de postre, las dulces migas de niño. Platos más ligeros son el pisto manchego o el moje de pimientos, elaborados a base de pimiento y tomate.
A veces se emplea la ratatouille como relleno o acompañamiento de la tortilla francesa. En Castilla-La Mancha, en España, existe un plato autóctono denominado pisto.
En el sur de Italia, también hay un plato llamado ciambotta que se prepara con patatas hervidas, berenjenas, tomates y pimientos, al que se pueden añadir otros ingredientes según la región. La popularidad del plato aumentó en 2007 con el estreno de la película Ratatouille. Pisto manchego Samfaina shakshuka
Hombre un día de brillantísimo cartel, tanto en lo de jugarse las vísceras al daca y toma por menos de un estornudo, como en lo de no dejar incólume tórtola alguna de las muchísimas que cometieron la torpeza de ponérsele a tiro de escopeta en el distrito, campo de sus hazañas, había conseguido, al echar el ancla en el puerto tristísimo de la vejez, ser mirado y remirado por todos los que le conocían, que eran todos o casi todos los que por aquel entonces, sin distinción de sexos, valían y podían darse pisto en el barrio, como un a modo de venerable patriarca y árbitro supremo, al cual acudían en todas sus diferencias a consultarle sus litigios y en demanda de sus siempre acertadísimos consejos.
Se llama sentido conservador al pisto de revolucionarismo, de progreso ó de retroceso, con quietismo; se busca por unos la evolución pura y la pura revolución por otros, y todo por empeñarse en disociar lo asociado y formular lo informulable.
Tesonero para el trabajo y ajeno a vicios, acosábale tan aviesa fortuna que, no embargante vivir echando el quilo de ocho a seis, maldito si medrar conseguía con la presteza que él deseara.
Pisto a pisto y gastando paciencia y fuerzas, llegó al cabo de años a ver juntos cinco mil duros.
Ricardo Palma