Medicos y Boticarios Puntanos de Antaño
Medicos y Boticarios Puntanos de Antaño
Medicos y Boticarios Puntanos de Antaño
PUNTANOS DE ANTAO
Jess Liberato Tobares
(Ao 1994)
INDICE
PALABRAS PRELIMINARES........................................................... 2
La Primera Noticia ........................................................................... 4
Los Primeros Mdicos..................................................................... 5
Mdico Prisionero............................................................................ 6
Remedios y Curanderos ................................................................. 7
Dr. Feliciano Trinidad Barboza....................................................... 8
Dr. Carlos Juan Norton.................................................................. 11
Dr. Armando Coussinet................................................................. 12
Clera .............................................................................................. 12
Los Primeros Boticarios ............................................................... 13
El Hospital....................................................................................... 15
Dr. Salomn Stern.......................................................................... 16
Dr. Ejea Martnez ............................................................................ 17
Mr. Rovere....................................................................................... 17
Dr. Agustn Vila .............................................................................. 18
Dr. Hugo Pieruccetti ...................................................................... 19
Dr. Cornelio Prez.......................................................................... 19
Defunciones.................................................................................... 19
Clera .............................................................................................. 20
El Consejo de Higiene ................................................................... 21
Connotaciones de un pleito.......................................................... 23
Otros Mdicos Puntanos .............................................................. 23
Boticas Y farmacias....................................................................... 24
Droguera ........................................................................................ 26
Galenos y Boticarios del Interior ................................................. 27
Departamento La Capital .............................................................. 27
Departamento Pringles.................................................................. 27
Departamento Pedernera .............................................................. 28
PALABRAS PRELIMINARES
Invito al ocasional lector a volver brevemente a un tiempo en que el mdico fue perito
de dolencias fsicas y espirituales, psiclogo y sacerdote, consejero y padre; y el
diagnostico un vuelo metafsico ms cerca de la adivinacin que de la realidad
objetiva.
Eran otros tiempos, otros los medios que el mdico dispona para cumplir su misin:
sin radiografas, ni anlisis, ni diagnsticos computarizados.
Pero eran las mismas angustias, los mismos dolores y el mismo profundo reclamo
aferrndose al ltimo aliento de la vida.
Aquellos mdicos de antao curaban hombres, no rganos ni enfermedades; el
hombre en su colosal magnitud existencial.
Aqullos fueron los tiempos del mdico humanista, que humildemente se acercaba a
la angustia de su hermano porque saba que la medicina no es una ciencia abstracta
sino un servicio del hombre para el hombre.
Ha pasado el tiempo y ha llegado la medicina estrictamente cientfica, rigurosamente
tecnificada, donde se borran los ltimos vestigios de un humanismo solidario
proscripto por la satnica robotizacin del hombre.
Pero al propio tiempo los gestos de solidaridad, de modestia abnegacin que los
mdicos nos entregan todos los das, sostienen firmemente la espereza. Es el alba de
la vida que vuelve.
San Luis, Primavera de 1994.
Jess Liberato Tobares.
La Primera Noticia
Mdico Prisionero
Con los prisioneros realistas tomados en Chile por el General San Martn, llega
en 1818 el cirujano Jos Mara Gmez.
Este mdico gozaba de muy especial privilegios. Las relaciones que mantena
con sus connacionales se limitaban, al parecer, al aspecto estrictamente
profesional.
Cuando los espaoles confinados en la nsula puntana se sublevan el domingo
8 de febrero de 1819, el Dr. Gmez no tiene participacin en la asonada.
Veamos lo que sobre el particular dice Mitre: Poco antes del asalto del cuartel
presentbanse a la puerta de la casa del teniente gobernador que se hallaba
situado en una esquina de la plaza - Carretero, Morgado y Morla, solicitando
una audiencia, que les fue concedida en el acto. Al entrar en su despacho, lo
encontraron en compaa de su secretario, el Capitn de Milicias Manuel
Rivero, y el Dr. Jos Mara Gmez, mdico espaol
confinando, de
temperamento tan tmido, que por no comprometerse intimando relaciones con
sus compatriotas enfermos, les tomaba el pulso sin apearse de su mula (segn
confesin propia), por lo que haba sido reprendido por Dupuy, al recomendarle
los asistiese con ms cuidado.
1
Remedios y Curanderos
Historia de San Martn y de la emancipacin sudamericana, pgs. 445/446- Edit. Anaconda, Bs. As.
1950.
2
Autor citado Pringles- Retazos de vida y tiempo, pg. 106- Bs. As. 1947
3
Acta de Cabildo de San Luis, 30-08-1819.
1
Con fecha 14 de enero de 1818, Don Jos Pedernera desde El Morro pide a
Dupuy se autorice al Pbro. Don Jos Castro que por su inteligencia y la
necesidad que padecemos en este lugar de hombres que tengan alguna
inteligencia para hacer algunos medicamentos me venga a asistir.
Mil ochocientos treinta y cuatro es un ao de peripecias para quienes tienen
que defender las poblaciones puntanas del ataque de los indios.
Con fecha 27-6-1834 Don Pablo Lucero desde El Morro comunica que hay
incendios en los campos y que la escarlatina asola su campamento. Da noticias
de soldados heridos y enfermos.1
Eran tiempos en que se careca de medios para el cuidado de la salud y haba
que recurrir al curandero que administraba remedios elementales.
Desde el Campamento del Morro, Don Pablo Lucero cursa aquel ao una
comunicacin en la que le dice al gobernador de la provincia: hallndose el
que firma con ocho individuos enfermos gravemente en el escuadrn de su
mando hizo comparecer al curandero Feliciano Lpez para que reparase de la
salud de stos, quien a ms de ser tan antiqusisimo ya cuasi pasado de su
edad, sordo y muy destenuado, no se encuentra medicinas con que poder
hacerles la ms mnima diligencia aguardientes se busc diciendo para
despasmar hinchazones infladas y no se ha podido encontrar en parte
alguna2
Hace notar que dos enfermos estn desechos abajo al perder el miembro
otros dos roturas en el pecho, fstolas viejas que se han echado a perder
nuevamente.
Para nuestra mentalidad modernista resulta realmente inverosmil que en
aquellos tiempos ni siquiera aguardiente fuera posible conseguir para utilizarlo
como remedio. Y seguramente de esas repetidas circunstancias habr nacido
la expresin ni para remedio, tan comn en el habla del paisano de San Luis.
Ms suerte tuvo Francisco Caimo en 1844 pues un expediente criminal de
aquellos tiempos da cuenta que el nombrado se lav la mano herida con
aguardiente y se la at con un pauelo.3
Por otro documento de 1837 Don Pablo Lucero comunica que dos oficiales
enfermos, Capitn Isidro Alaniz y Tte. 2 Juan Facundo Carmona, por carecer
de mdico en Renca se presentarn al gobierno pidiendo auxilio para reparar
su salud.4
Al ao siguiente Don Pablo comunica el fallecimiento del soldado Rafael Sosa,
enfermo de viruela.5
El 15 de febrero de 1868 desde Villa Mercedes el Coronel Iseas pide un
mdico o un curandero y medicamentos para combatir la viruela. Dice que ha
establecido el lazareto pero por ahora los enfermos slo se curan con hierbas.
En la primera mitad del siglo XIX acta en San Luis, el Dr. Feliciano Trinidad
Barboza (cirujano), hombre de bien ganado prestigio pues adems de ejercer
funciones de galeno tuvo destacada actuacin en la vida cvica de la aldea de
entonces.
El 21 de agosto de 1829 firm juntamente con otros honorables vecinos de San
Luis una enrgica intimacin al gobernador delegado Calixto Mara Gonzlez
instndolo a deponer el mando y llamar a elecciones.1
Fue el primer presidente de la Legislatura de San Luis, elector de Presidente y
Vicepresidente de la Nacin en 1859 y gobernador interino por un brevsimo
lapso en 1867 al delegar en l sus funciones el Gobernador Don Justo Daract.
Muri en la epidemia de clera en 1868.
En 1838 lo encontramos actuando en un proceso criminal donde Dorote
Caldern hiere al chileno Crespn Sambrano. El arma empleada es un cuchillo
y la herida sobre la ceja izquierda, de dos pulgadas de largo, hasta el hueso de
profundidad y con abundante hemorragia segn el informe del Dr. Barboza.
A Fs. 21 del expediente, dicho facultativo presenta una Planilla de gastos
serios en la curacin del herido Sambrano en medicina y asistencia:
Por certificado de la herida
y primera curacin
$3
Por 4rs. Ilar de To
Por 6rs. Blsamo Copayba
Por 4rs. Blsamo Arceo
Por 19 visitas de curacin
a 2 y medio rs.
$5
$4
$6
$4
7
$10
$2
Nez y Vacca, Historia de San Luis, t II, pgs. 331/ 333- Edit. Godeva, San Luis, 1968.
Isidro Capdevilla
Obsrvese esta ltima cuenta que a la luz de la matemtica actual no parece
del todo exacta.
La pelea entre Caldern Y Sambrano se produjo frente a la pulpera de Don
Santiago Francisco Laborda que tambin tena herrera. 1
Volviendo al Dr. Barboza digamos que en su juicio sucesorio encontramos los
siguientes recibos:
Por una junta mdica
$5
Por una visita a 2 medios
$2
$7
San Luis, diciembre 14/ 1868
E. Lesage
Debe
6 pldoras
1lavativa
1 linimento
bebida
agua de alquitrn
lino
$.75
$.38
$.50
$.75
$.37
$.75
$ 3,50.
Don Fco. Barboza al Dr. Carlos Juan Norton por mi asistencia mdica a su
Padre Dn. Trinidad Barboza ya finado:
Por 6 visitas
Por una consulta
$5
$5
$10
$0,50
$8
$10
$0,25
$ 0,25
$2, 1
seis libras de azcar blanca dos botellas de vermouth y una libra de chuo. El
Dr. Norton permaneci cinco das en el Fortn Chalanta.
Clera
A fines de 1867 hay alarma de clera en Renca4 y no sabemos si con esto se
relaciona un pedido que se recibe de Villa Mercedes.
Desde all solicitan la remisin de un remedio: Pan Kimagogo5.
En los primeros das de enero de 1868, aparece las epidemia de clera en
San Luis, causando la consiguiente alarma por la carencia de recursos para
combatirla. El da 6 de enero muri, en pocas horas, el respetable vecino y
guerrero de la independencia Jacinto Roque Prez; luego cuatro ms y a partir
de ese instante, tom los caracteres de una verdadera y aterradora plaga. La
poblacin huy en masa a la campaa, pues de 6.000 habitantes, no quedaron
700 contando entre ellos al gobernador Lucero Sosa, algunos empleados de la
administracin y la comisin de socorros, presidida por Don Justo Daract, y de
la cual fue uno de los miembros ms activos y abnegados Don Juan Jos
Boussy.
Archivo Histrico de San Luis, Carpeta N 172, documento 19394; Carpeta N 177, documento del 511- 186.
2
Jess L. Tobares San Francisco del Monte de Oro pg. 6, San Luis, 1978.
3
Archivo Histrico de San Luis, Carpeta N 179, documento del 4- 12- 1868.
4
Archivo Histrico de San Luis, Carpeta N 177, documento del 27-2-1867.
5
Ibdem, carpeta N 177 documento del 5-10-1867.
1
Archivo Histrico de San Luis, Carpeta N 243, documento 13624 del 31-5-1856.
El Diario de San Luis20-7-1978.
7
8
La Intendencia de Polica
a la botica
DEBE
Por 8 hojas de receta que en todo el mes de setiembre del corriente ao, se
despacharon para los enfermos de Polica, segn las recetas que se adjuntan
Cinco pesos 25c.
$5.25
San Luis, Octubre de 1868.
Severo Gutirrez de Castillo
Vo. Bo.
Cordn
ORDEN N 333
Pguese por Tesorera provincial a D. Severo del Castillo la cantidad de cinco
pesos veinte y cinco centavos que se adeudan por la medicina suministrada a
los enfermos de polica en el mes de septiembre del corriente ao. Recjase el
recibo para constancia.
San Luis, octubre 20 de 1868
Lucero y Sosa
Faustino Berrondo. 1
La otra pieza documental que conocemos es el expediente en la causa seguida
en 1864 a Silvestre Lpez por haber vendido una medicina indebida.
Se presenta al Juez del Crimen, Don Cipriano Penna y dice que su seora
esposa se halla gravemente enferma y a su juicio envenenada a consecuencia
de haber tomado un remedio que le vendi por chuo don Silvestre Lpez. El
que compr el remedio fue un nio llamado Mercedes Laconcha.
El Juez del Crimen Don Vctor C. Guiaz se dirige al Profesor de Farmacia
Don Severo Gutirrez del Castillo ordenndole revise a la enferma. El
diagnstico de Castillo es que no hay sntoma de envenenamiento sino una
ligera gastroenteritis (irritacin del vientre y estmago) y principios de tialismo
(irritacin de las encas por aplicacin del mercurio o sus preparados)
producido todo por la accin de una sustancia que dice haber tomado por
chuo en la noche del da 2 del corriente. A juzgar por la fisonoma, el
consentimiento de la presin de la mano sobre el vientre y estmago y el
estado del pulso, creo terminar favorablemente su padecimiento.
El nio Mercedes Laconcha declara que Pena lo mand a comprar medio real
de chuo a la botica del Sr. Castillo que encontr cerrada. Fue entonces a la
botica de Rolladn y la seora le dijo que no haba chuo y que lo poda
encontrar en la casa de negocio del finado Abalos, que sin embargo de estar
serrado llam a la puerta y pregunt a Don Silvestre Lpez si tena a vender
chuo y le compr medio real.
El Juez del Crimen entendi que no siendo farmacutico el expresado Lpez
no pudo ni debi tener drogas en su casa de negocio para vender al pblico.
(Sentencia del 23-11-1864).
Por el dictamen se le pagan a Don Severo Gutirrez del Castillo $4. La seora
de Pena debi gastar $15 en remedios y $40 en honorarios al mdico que la
asisti. No se dice en el expediente quin fue ese mdico.2
En 1862 hacen un arreglo Don Severo Gutirrez del Castillo y Don Valentn
Vargas y se hace mencin a $450 que Vargas le debe a Gutirrez del Castillo
1
2
El Hospital
El antecedente ms remoto que conocemos es una comunicacin del Marqus
de Sobremonte por la cual pide se informe si se dispone de medios para
instalar el hospital, en caso de que ello se considere necesario.4
Tenemos noticias, adems, de dos expedientes de los cuales no hemos podido
tomar razn por no encontrarse en le Archivo General donde tienen los
siguientes registros: Fernando Luca Sndico Pide creacin hospital,
Administrativo N 2 ao 1781, Ra Jos V. Permuta terreno para hospital,
Administrativo N 35 Ao 1875.
Creada en San Luis la Sociedad de Beneficencia que comenz a funcionar en
1857 bajo la presidencia de Doa Paula Domnguez de Bazn, se concibi
inmediatamente la idea de instalar el hospital. Al respecto dice el historiador
Juan W. Gez: Inter se instalaba el hospital, en la manzana que hoy ocupa el
Colegio Nacional, se abra una escuela de nias cuya direccin se confiaba a
la distinguida dama Tomasa L. Lucero de Jofr y como segunda a Josefa L.
Lucero, la inolvidable misia Chepa como se la llamaba cariosamente, severa y
Archivo General de San Luis-Civil N 14 Ao 1862.
Archivo General de San Luis-Alejandro Olses-Inventario N 148 Ao 1888.
3
Diario Clarn pg. 18, 21 abril 1968.
4
Archivo Histrico de San Luis, Carpeta N 1 documento 514 del 5- 5- 1787.
1
2
Otra noticia vinculada con el arte de curar nos trae la prensa escrita de aquellos
tiempos: Aviso al Pblico: D. Antonio Ejea Martnez, Doctor en medicina
examinado y aprobado por el Tribunal de Medicina de la Nacin Argentina en
Buenos Aires; miembro titular de la Asociacin Mdica bonaerense; y mdico
propietario de la Sociedad de Beneficencia Mutua Espaola de Buenos Aires.
Recin llegado a esta ciudad desde el litoral, ofrece al pblico sus servicios
profesionales. Casa de D. Teodoro Gigena. San Luis, noviembre 30 de 1876.3
Mr. Rovere
Por esos das de la dcada del 70 aparece en San Luis un tal Mr. Rovere que
vende un mgico especfico contra la viruela: Preservativo y curativo de la
viruela. Depurativo y desinfectante. Este poderoso especfico es el agua
fnica con que el distinguido Dr. Decla en diferentes ocasiones salv de la
viruela a una gran parte de la poblacin de Pars y sus cercanas: el mismo Dr.
afirma que desde 9 aos que administra el agua fnica que no solamente cura
la viruela sino que la precave con completa seguridad, en su numerosa
clientela, no ha visto nunca, que la viruela ataque a una familia o a una persona
que haga uso del agua fnica, estuviese o no vacunado. En vista de tan
buenos resultados, universalmente reconocidos, la direccin sanitaria de Pars
la ha adoptado como el ms seguro profilctico de las enfermedades
contagiosas. Con el fin de ser til a los habitantes de esta capital Mr. Rovere
les ofrece esa sustancia a un precio mdico al alcance de todos y preservar de
ese modo al pblico de San Luis, de tan terrible enfermedad. El precio del agua
Diario El Oasis, 15 de diciembre de 1867 N 77.
Diario El Oasis, 8 de mayo 1877 N 110.
3
Diario El Oasis 1 de diciembre de 18766 N 78.
1
2
fnica es de un peso la botella, esta cantidad puede durar una semana para
una persona adulta.
Modo de hacer uso del agua fnica: las personas grandes y arriba de 15 aos
tomarn dos onzas o sea la tercera parte de un vaso de tamao ordinario por la
maana y a la noche a la hora de acostarse. Los nios menores de edad
tomarn la mitad de la dosis indicada. Los niitos que tomen o no el pecho se
les dar una cucharada grande o chica segn la fuerza de la criatura.
Como curativo se mezclar 3 partes de agua pura y una parte de agua fnica y
se le dar al enfermo por cucharadas en el curso del da y noche y cuando las
viruelas tomen un color negro se les pondr unos paitos de agua fnica.
Como desinfectante se rociar el cuarto, cama u objetos que se temen
contagiosos. En las epidemias ser bueno lavarse las manos y la cara con
agua fnica antes de salir a la calle y para visitar a los enfermos ser muy
eficaz rociar la ropa que uno lleva con la misma agua.
Jacinto Rovere.
Vive en la casa de la finada Jacinta Lucero al lado del Hotel La Unin1.
Tiempo despus Mr. Rovere anuncia una vacuna: Aviso Buena Vacuna. Mr.
Rovere la tiene experimentada. Como todo trabajo merece su precio, dispuso
vacunar a 2 reales por cada persona y fuera de su casa ser convencional.
Garante el buen xito de la inoculacin2.
En la dcada del 70 del siglo XIX llega a San Luis el Dr. Hugo Pieruccetti, joven
mdico de origen florentino que gustaba de las reuniones sociales a las que
concurra con asiduidad y en las que ejecutaba al piano trozos de peras
italianas.
En agosto de 1877 es designado mdico de polica1 y poco despus se instala
en el Colegio Nacional donde atiende a los enfermos. Cobra por visita un peso,
por consulta cuatro reales y asiste gratis a los pobres.
Admite consultas o visitas a cualquier hora del da o de la noche en que sea
solicitado.2
Defunciones
De que mora la gente en esos tiempos? Una lista de personas fallecidas en
1877 nos dar una idea aproximada del problema. Tambin esta noticia nos
llega por va de la prensa escrita de San Luis de antao:
Damiana Chaves, fiebre, edad 10 das, puntana.
Francisca lucero, viruela, edad 15 aos, puntana.
Julia Laguna, fiebre, edad 2 aos 3 meses, puntana.
Flix Ponce, repentina, edad 60 aos, puntano.
Nicanor Rodrguez, fiebre, edad 8 aos, puntano.
Eustaquia S. de Olmos, saratn, edad 45 aos, puntana.
Nicanor Rosales, clico, edad 25 aos, puntano.
Domingo Aguilar, fiebre, edad 3 meses, puntano.
Timoteo Gatica, viruela, edad 15 aos, puntano.
Irene Salina, viruela, 40 aos, puntana.
Manuel Villanueva, quebradura, edad 55 aos, mendocino.
Diario El Oasis, 30 de agosto de 1877 N 158.
Diario El Oasis, 6 de noviembre de 1877 N 160.
3
Diario El Pueblo, 1-11-1894.
1
2
Clera
2
3
El Consejo de Higiene
Por la Ley N 34 del 14 de octubre de 1889 se crea el Consejo de Higiene
Pblica compuesto por tres profesores de medicina y un farmacutico; todos
ad honrem.
Tendra como atribuciones reglamentar y vigilar el ejercicio de la medicina
como as tambin controlar la actividad de las parteras, dentista, flebotomistas,
veterinarios, etc.
Deba visitar los edificios pblicos y privados e inspeccionar y fotomentar la
propaganda de la vacuna. Indicaba a las autoridades competentes las medidas
profilcticas para combatir o prevenir las enfermedades endmicas, epidmicas
y trasmisibles. Indicar , adems, las medidas preventivas que considere
convenientes a fin de evitar el uso y expendio de carnes cansadas, bebidas
adulteradas u otros elementos nocivos para la salud pblica3.
Pasan 10 aos y recin entonces el Gobierno de la Provincia dispone su
integracin. Por decreto del 28 de abril de 1899 se designan como miembros
titulares a las siguientes personas: Presidente Dr. Jos Mara de la Torre;
Vocales Dr. Manuel B. Arias y Dr. Juan Jos Mguez Iarra. Miembros
honorarios, Dr. Abel J. Domnguez y Prof. Dalmiro S. Adaro.4
Poco despus, en su mensaje a la Honorable Legislatura, el gobernador Don
Adeodato Berrondo se refiere a este organismo en los siguientes trminos:
Este departamento prestar, fuera de duda, beneficios incalculables en la
provincia y sobre todo en esta ciudad donde la higiene pblica est por dems
abandonada desde muchos aos, sin que los gobiernos se hayan ocupado de
su creacin teniendo en cuenta la benignidad de nuestro clima, y que las
enfermedades epidmicas no se arraigan aqu fcilmente. Y un prrafo final
digno de destacar: Mucho influir tambin el Consejo, en que desaparezca el
curanderismo, ejercido por personas que sin ttulo de idoneidad, constituye un
verdadero azote en la provincia, causando daos irreparables en la asistencia
de los enfermos.5
En febrero de 1900 la Comisin del Consejo de Higiene cursa al gobernador
Don Narciso G, Gutirrez una nota aconsejando las medidas a tomar en razn
Boletn Oficial , enero 1 de 1887 N 124, Pg. 428
Diario El Oasis, 17 agosto 1867 N 43.
3
Libro Copiador de Leyes- Ao 1899, fs.95-Legislatura de San Luis.
4
Boletn Oficial-Ao I, de mayo 13 de 1899-N 4, pg.34.
5
Boletn Oficial-Ao I, de mayo 27 de 1899-N 5, pg.44./45
1
2
Connotaciones de un pleito
A comienzo del presente siglo, el Dr. Jos Mara de la Torre demanda Dr. N. N.
persiguiendo el cobro de la suma de $250 por atencin mdica practicada al
profesional demandado, su esposa, cuatro hijitos y una sirvienta.
Selase en la demanda que los pacientes padecan postrados de diversas
enfermedades entre ellas la escarlatina hacindoles tantas visitas diarias
cuantas requirieron en la marcha de las enfermedades, con toda puntualidad y
hasta aplicndole personalmente los distintos remedios recetados en aquellos
casos que por la delicadeza del paciente, la gravedad del mal o la necesaria
mayor prolijidad para el mejor xito lo reclamaba1
Recurrimos a este pleito que es el ms viejo que conocemos en San Luis,
donde se demanda el pago de honorarios mdicos, para hacer notar la
naturaleza de las funciones que el mdico cumpla en esos tiempos.
La aplicacin personal por el galeno de los remedios recetados al paciente,
significa que aqul realizaba tambin tareas que en nuestros das estn a
cargo de enfermeros.
Con esto creemos completar el cuadro del mdico de antao en su triple
funcin de galeno-boticario-enfermero.
Boticas Y farmacias
Otro aviso de la misma botica ofrece artculos de fantasa para curar diversas
enfermedades. Rene a la comodidad la baratura. Se ha recibido entr otras
cosas, collares para facilitar la salida de dientes y evitar las alferecas,
epilepsias, aires y convulsiones en chicos y grandes. Estos se venden al gusto
del comprador, por ms o menos precio segn el nmero de cuentas que
quieran tomar. Estn al alcance de pobres y ricos. Lpez Otero, San Luis,
enero 16 de 1882.1
Por esos tiempos sabemos que se ha mudado la botica del Pueblo del Dr.
Agustn Vila que antes estuvo frente a la plaza Principal (hoy Plaza
Independencia). En abril de 1882 estaba ubicada sobre calle Rivadavia una
cuadra al norte del Parque Pringles, es decir lo que es ahora la Plaza Pringles.
En enero de 1885 encontramos instalada a la botica El Aguila de Don Paulino
Sol2, y al mes siguiente avisa que cuenta con los servicios de un nuevo y
acreditado farmacutico, Don Fernando Campagnoni.3
El diario El Comicio, en su edicin del 5 de marzo de 1892, inserta un aviso
de la botica La Caridad de Lpez Otero.
En 1904 encontramos el siguiente aviso publicado tambin en la prensa
puntana: Botica del Indio. Se avisa que suspenden las ventas al fiado
hacindose stas al contado. Las personas que con anterioridad han arreglado
sus cuentas con esta casa, podrn seguir sirvindose de ella en la forma que
antes lo han hecho. San Luis, mayo 26 de 1902. Ubaldo Lpez Otero (hijo)
Nota: En pagos atrasados se reciben animales vacunos.4
Por decreto del 15 de octubre de 1906 firmado por el gobernador Rodrguez
Jurado, se autoriza al Sr. Eloy Snchez a abrir una farmacia en calle Coln N
224 al 226.5
En 1907 existen en San Luis dos farmacias y una botica:
Farmacia San Luis de Don Eloy Snchez, farmacia El Aguila de Don Arturo
Larrauri y la botica El Indio de Don Ubaldo Lpez (hijo).
En ese ao de 1907 el Gobierno de la Provincia acepta el ofrecimiento de Don
Eloy Snchez de proveer medicamentos a la Polica de la Capital a razn de
$0,49 por cada receta facultativa con recargo de un diez por ciento en los
especficos, artculos antispticos y ortopdicos.6
Otros farmacuticos que actuaron en San Luis frente a farmacias que en
algunos casos an continan su actividad, fueron: Don Ovidio Domeniconi,
propietario y director tcnico de ola farmacia Domeniconi ubicada inicialmente
en la calle San Martn en el solar que hoy ocupa el Banco de la Nacin
Argentina. Inici sus actividades el 5 de febrero de 1935.
Orlando S. LHuiller, propietario y director tcnico de la farmacia San Luis
ubicada en Coln 788, que inici sus actividades en 1944.
Aurora Sosa Reboyras de Corts, propietaria de la farmacia Corts ubicada
en la esquina de San Martn y Ayacucho, quien ejerci su direccin tcnica
desde el 2-11-1945 al 22-9-65.
Jorge F. Fernndez, director tcnico de la farmacia Rivadavia desde el 5-71944 al 1-7-1951.
Diario El oasis, 1-2-1882.
Diario El oasis, N 822, 18-1-1885.
3
Diario El oasis, N 337, 26-2-1885.
4
Diario La Reforma, 20-4-1904.
5
Boletn oficial sin nmero, pg. 9.
6
Boletn oficial, 28-2-1907, pgs. 18/19.
1
2
Droguera
Diez aos antes de finalizar el siglo pasado aparece en San Luis la primera
referencia de una droguera. Este es el texto del aviso periodstico: Tenemos
el gusto de participar a esta poblacin el nuevo y primer establecimiento de
Droguera que vamos a establecer, cuya apertura se anunciar tan pronto
como est listo el local que para su instalacin se est construyendo en la
misma casa de negocio que tenemos en calle General Pedernera esquina
Rivadavia. Este establecimiento completar la deficiencia que se notaba hace
tiempo y mayormente hoy, que esta localidad va a ser dotada de varias boticas
particulares, quienes podrn hacer sus compras sin las demoras y perjuicios
del FerroCarril a los plazos de prctica y al pblico en los artculos del ramo,
ya para las artes, o de uso medicinal como aceite de bacalao, vinos tnicos de
quina, zarzaparrilla, jarabes, pldoras, etc. titulados especficos al mismo precio
que por mayor, cuyo beneficio para el comprador podr calcular
aproximadamente en la mitad del actual, para lo que nos pondremos en
comunicacin con casas europeas. Confiamos para el empleo de este fuerte
capital en la confianza y proteccin que por tantos aos este pblico nos ha
sabido dispensar. Lpez Otero e (hijos).2
1
2
Departamento La Capital
Beazley. Por decreto del 18 de julio de 1911 se autoriza a Jos C. Vitaliani a
instalar farmacia en Beazley.2
Los primeros mdicos que actuaron en este pueblo son los siguientes: Dr.
Pramo, Dr. Ernesto Urtubey, Dr. Tiaco Dimitris (de origen griego) a quien le
sucedi el Dr. Atilio Rojo.
El Dr. Elmino Tosi fue mdico desde 1948 a 1966. A l le sucedi el Dr.
Horacio Fernndez quien estuvo all hasta 1967.
Desde entonces hasta 1976 en que fue dejado cesante por disposicin del
llamado Proceso de Reorganizacin Nacional, ejerci all como mdico el Dr.
Omar Washington Leyes.3
Al Dr. Leyes le sucedieron los Dres. Mario Filipa, Dr. Ramn Faustino Maluf,
Dra. Nadia Serafi Sadaca y Dr. Alvarez Ato (peruano).
En este pueblo durante varios aos, estuvo instalado con botica Don Francisco
Randazzo.
Departamento Pringles
En 1952 eran mdicos aqu el Dr. Justo Surez Rocha y el Dr. Luis Pratto, y
tena botica Don Ciriaco Palacio.
Posteriormente se instalaron aqu los Dres. Osvaldo Ledesma, Nora Allende de
Ledesma, Carlos Lunardi y el farmacutico Mario Abel Palacios.
Saladillo. Aqu fue mdico el Dr. Elmino Tosi desde 1946 a 1948.
Departamento Pedernera
El Morro. Promediando el siglo pasado Don Jos Casimiro Van Sice,
hallbase establecido en San Jos del Morro, a dos cuadras al este de la plaza,
con un importante negocio de tienda, botica y almacn1.
Juan Llerena. En 1944 acta el Dr. Elmino Tosi. El 20 de marzo de ese ao le
llevan a su consultorio una nia de San Jos del Morro de 14 aos, Rosa
Castillo, afectada de difteria complicada con crup. La paciente llega al
consultorio en grave estado y de inmediato (porque no haba nafta para recurrir
a otro centro asistencial), el Dr. Tosi le practic una traqueotoma.
Al da siguiente la enferma estaba fuera de peligro y el pueblo de Juan Llerena
expresaba masivamente su reconocimiento al facultativo.2
Nez y Vacca, historia de San Luis, t. II. pg. 491.
La voz del Sud 28-3-1944. Operacin de alta ciruga hecha por un mdico en Juan Llerena. En
condiciones sumamente penosas y mediante la cual se salv una vida. Juan Llerena 23-3-44. El pueblo
de J. Llerena se encuentra an emocionado por un hecho verdaderamente trascendental. El da 20 del
corriente mes transportaron del Morro al consultorio del Dr. Elmino Tosi, recin instalado en Juan
Llerena, la enferma Rosa Castillo, de 14 aos de edad, quien presentaba una difteria complicada con
Crup. La enfermita se encontraba muy grave, ya casi asfixiada por el Crup. No se dispona de nafta ni de
medio de movilidad para trasladarla en tiempo til a un hospital, el caso ya era perdido.
Entonces el Dr. Elmino Tosi con una seguridad y pericia nica puso a la enferma en una mesita de
operacin que l tiene y de inmediato oper con carcter de urgente a la enferma que se ahogaba. La
operacin si bien penosa por los escasos medios que dispona tuvo un xito brillantsimo y esta maana
en presencia de las autoridades del pueblo y de los ms destacados comerciantes y vecinos que se haban
reunido para tributar al destacado profesional el agradecimiento del pueblo de Juan Llerena, el Dr. Elmino
Tosi sac el tubito que le haba puesto despus de la operacin para que respirara por l y declar con
honda emocin ya fuera de todo peligro a la enferma. Esta no es exhibicin, es un acto de justo
reconocimiento haca un profesional que recin instalado se jug toda su reputacin profesional en una
operacin desesperada posponiendo y sacrificando su conveniencia de no exponerse a un fracaso
irreparable a la corazonada de querer arrancar de la muerte y disputarle una vida humana ya estrangulada
por el Crup de los ms graves.
Esta es la segunda hazaa que cumple este profesional en nuestra provincia y nos consta que esta
operacin es de tan alta ciruga y tan delicada que muchos colegas del Dr. Tosi han puesto en duda la
ejecucin de dicha operacin, que se llama Traqueotoma y que slo es factible para las mximas
cabeceras que honran la ciencia de nuestro pas. Al Dr. E. Tosi le expresamos el agradecimiento de los
parientes de la enfermita que tan milagrosamente pudo arrancar de la muerte, y el del pueblo de Juan
Llerena que se queda admirado ante semejante hazaa cientfica y que brindar a este profesional toda la
colaboracin y el aprecio a que se ha hecho acreedor.
Hasta aqu los vecinos de Juan Llerena, ahora el corresponsal recuerda que el Dr. E. Tosi ha sido un
eminente catedrtico y que ha participado en varios congresos cientficos publicndose por cuenta del
gobierno argentino ms de 15 trabajos sobre enfermedades tropicales etc. estudiadas por este notable
profesional. Son ms de 20 aos que el Dr. Tosi ejerce en nuestro pas y es uno de esos tantos extranjeros
que honran mucho con su obra y su colaboracin nuestra ciencia mdica.
1
2
Justo Daract. A los mediados del presente siglo tenan farmacia aqu Vctor F.
Dimarini, Mario Eguinoa y Francisco Torres, y eran mdicos los Dres. Rubn
Plinio Acosta Oliver y Ernesto Borsani.
Posteriormente se instalaron los Dres. Miguel Eduardo Bilbao Godoy y
Salvador Bueno.
Departamento Chacabuco
Concarn.Por decreto del 9 de agosto de 1907 publicado en Boletn Oficial,
pg. 90, del 31 de aquel mes y ao, es autorizado para ejercer la profesin de
mdico en los Departamentos Chacabuco y San Martn, el Dr. Siegried Ernst,
quien actu hasta 1940. La autorizacin deca: Mientras no se establezca un
diploma por universidades nacionales.
Despus de 1940 actu el Dr. Miguel Salinas y tenan farmacia Don Enrique
Masramn y Don Juan Traversaro.
A mitad de este siglo se instalaron como mdicos los Dres. Gonzalo Olgun
Pereyra y Rafael J. Velazco, y como farmacuticos Don Humberto Bigalli y Don
Deodardo Antonio Ferreyra. Posteriormente se instal la farmacia de Gustavo
Alfonso.
Naschel. A mediados de este siglo era mdico en Naschel el Dr. Nicols Alim
Kiewicg y eran farmacuticos Don Alfredo Bonzi y Don Francisco J. Bruno.
Posteriormente se instal el Dr. Carlos Csar Castro.
Renca. En noviembre de 1814 Don Jos Santos Ortiz que era Comandante en
Renca, es herido por una partida de desertores en su estancia de Los Molles.
Lo asiste entonces un mdico de apellido Rodrguez.
Tilisarao. A mediados del siglo eran mdicos los Dres. Hctor Aguilar y Angel
Cocca, y tenan farmacias Jos Hevia, Francisco Gago y Avila Hnos.
Posteriormente se instalaron aqu los Dres. Dardo Aguirre, Italo Eugenio
Mazzoni, Ral Osvaldo Mazzuco, Carlos Antonio Salcedo y Alfredo Oscar
Muoz, y los farmacuticos Pedro Gil y Catalina Gil de Cignetti.
Villa del Carmen. En 1950 tena farmacia en Villa del Carmen Don Santiago
Snchez y era mdico el Dr. Daniel Luna Posadas.
Corresponsal.
Las Chacras. Desde 1928 a 1939 fue mdico en esta localidad el Dr.
Francisco Caravajal.
Desde 1935 a 1939 tuvo botica Don Rufino Tejerina. En 1942 tena botica Don
Deodardo Antonio Ferreyra quin ms tarde se traslad a San Martn y
posteriormente a Concarn.
San Martn. La primera noticia que tenemos del siglo pasado (que prueba la
falta de mdico), es de 1851. El entonces Comisario de Santa Brbara, Don
Santiago Guiaz, le escribe a Don Carmen Adaro suplicndole ayuda para
movilizarse en procura de salud.1
En la dcada del 70 de siglo pasado, llega a Santa Brbara Don Alejandro
Olses, educacionista alemn que adems de su funcin de Preceptor (Director)
de la escuela, ejerce el arte de curar. No slo auxilia a la gente necesitada sino
que les provee los medicamentos apelando a sus cortos recursos.
En 1884, Don Santos Allende comunica que el Juez de Paz de San Martn Don
Mauricio Fernndez est gravemente enfermo de viruela.2
En el presente siglo, durante varios aos (1920 a 1940) ejerci funciones de
mdico y boticario en San Martn Don Jos Quinto Ghirardotti, italiano, que
muri en esa villa el 31 de agosto de 1940 a los 70 aos de edad.
La primera farmacia que existi en San Martn se instalo en le ao 1938 y era
de propiedad de Don Oscar Mercau, de Candelaria. Funcion un ao en un
inmueble del costado sur de la plaza, propiedad de Don Carlos Juan Ponce.
En 1944 se instal con botica en la cuadra sur de la plaza, esquina S. E. Don
Deodardo Antonio Ferreyra.
En 1939 lleg a San Martn el primer mdico universitario: el Dr. Elmino Tosi.
Su esposa Elena Castellani de Tosi se instal con farmacia.
El Dr. Elmino Tosi a quien rendimos nuestro homenaje de recordacin y
gratitud, era oriundo de Srsena, Provincia de Forli (Italia) y haba recibido su
diploma de mdico en la Universidad de Pavia. Fue mdico de la Cruz Roja en
la Primera Guerra Mundial.
Radicado en la Argentina en 1924 (en Lagunilla Crdoba-) ejerci su profesin
en Chaco y Misiones (Bompland y Puerto Bermejo) y a partir de 1939 en San
Martn. All despleg una febril actividad comenzando por apoyar
decididamente la construccin e instalacin de la Sala de Primeros Auxilios
Santo Toms que se inaugur en 1942.
En ese medio carente de los elementos necesarios para una accin eficiente
en beneficio de la salud del pueblo, el Dr. Tosi supo encontrar soluciones a
problemas de suma complejidad. Para ello pona al servicio del juramento
hipocrtico dos altas virtudes: su deber y su coraje.
Un solo hecho basta para probar tal aseveracin.
En 1914 en la mina Los Avestruces se produce un gravsimo accidente a
consecuencia de cual mueren dos mineros y otro queda gravemente herido.
A ste, un bloque de piedra le haba destrozado una pierna y la hemorragia no
permita llevarlo a otro centro asistencial para ser intervenido quirrgicamente.
Sin vacilar el Dr. Tosi dispuso amputarle la pierna haciendo uso de elementos
sumamente precarios, entre ellos un serrucho de carpintero que le prest un
vecino que ejerca aquel oficio: Don Hilarin Lucero. La operacin se realiz en
1
2
Departamento Ayacucho
Candelaria. En 1937 no haba mdico en esta localidad y, Don Froiln Urquiza
haca los primeros auxilios.
La primera farmacia se instal en mayo de 1938 en la esquina N. O. de la plaza
y era de propiedad de Don Oscar Mercau (idneo de farmacia desde el 16 de
noviembre de 1936 segn ttulo expedido por la entonces Direccin General de
Salubridad).
A fines de 1938 el Sr. Mercau se traslada a San Martn y regresa a Candelaria
en enero de 1942 donde permanece hasta 1958 en que se traslada a San Luis.
Desde 1959 a 1963 se instala el botiqun de los hermanos Piscitelli que atiende
Pedro Andrs Alcaraz. Desde 1964 a 1972 funciona el botiqun de Moiss
Gauna La Candelaria. Con posterioridad funcionan los botiquines de DOSEP
y de la Sra. Avila de Albelo. Entre los mdicos que han actuado en Candelaria
se recuerda a los Dres. Cabezal, espaol (1948); Almeida, brasileo; Casimn,
francs (1949); Altricter, francs, (1950), Jos Santos Ortiz hijo (1965); Jorge
Alberto Ortiz (1972); Juan Carlos Ortiz (1977); Dra. Elena Czabn de Slinger y
Dr. Hugo Bruno (1978).1
Lujn. En 1870 era mdico en Lujn Don Antonio Silva Prez (homepata). En
1880 ejerca esas funciones otro homepata nacido en Mendoza: El Dr. Blas
Correa. El instal la primera botica que hubo en Lujn.
El Dr. Blas Correa era casado con Clementina Mayorga (hija de Don Braulio
Mayorga e Isabel Corvaln de Santa Brbara) y fueron los padres de Rosa
Correa de Calle. Don Blas Correa falleci en 1910 1911.
En 1890 era mdico en Lujn Don Antonio Riera (espaol), mdico homepata,
muy devoto, que tambin curaba con yuyos. Muri soltero en 1902.
Otros mdicos de Lujn fueron los Dres. Antonio Salvatti, Latini e Iparraguirre.2
Desde 1936 a 1940 tuvieron farmacia en Lujn, Marino Aceta (idneo) y
Yolanda Hortencia Gola de Aceta (idnea).
Quines. En 1918 actu en Quines el Dr. Ricardo Veiga Gmez (diplomado en
Espaa) que fue tambin maestro de escuela. En el ao 1941 era mdico aqu
Juan Fernando Sotura.
Tambin se desempearon en Quines los Dres. Mesana (sin ttulo) y Latini.
Doa Manuela M. de Cabaez Arce ejerci aqu la direccin tcnica de la
farmacia Ayacucho desde el 21-10-1944 al 15-5-1953. En 1952 tenan
farmacia en Quines, Jovino Fernndez y Severiano Rodrguez, y eran mdicos
los Dres. Tefilo Jacobo y Jos Santos Ortiz (fundador del dispensario).
San Francisco. En 1877 con motivo de la epidemia de viruela, estuvo
actuando en San Francisco el Dr. Salomn Stern de San Luis. Segn una
carta recibida por el diario El Oasis, el Dr. Stern es infatigable en el
Datos de la Sra. Hayde Funes de Arce, directora jubilada de la escuela de Candelaria, Coln 613, San
Luis, y de la Sra. Esther Mercau de Liceda, farmacutica, Belgrano y General Paz, San Luis.
2
Datos de la Dra. Mara Delia Gatica de Montiveros, Avda. Pte. Illa 78, San Luis.
1
Departamento Belgrano
Nogol. Un viejo expediente criminal da cuenta que en 1853 en Nogol hieren al
mdico Luis Quilamari, quien haba curado a Ilarin Moyano, enfermo a
consecuencia se un mate que le dieron con veneno.4
A mediados de este siglo era farmacutico en Nogol, Don Salustiano
Gonzlez.
Villa General Roca. Desde 1939 y por muchos aos fue mdico en esa
localidad el Dr. Hanna Abdallah.
En los primeros tiempos en su calidad de mdico de polica, deba atender al
vecindario de Villa General Roca, El Tala, San Antonio, Villa de la Quebrada,
Nogol, La Calera, Santo Domingo, El Zampal, etc.
Odontologa
La ms antigua noticia que tenemos relacionada con la odontologa en la
Provincia de San Luis, data de 1884. El texto del aviso publicado en la prensa
local es el siguiente: Arte dentario. Prtesis, ciruga e higiene de la boca. Dr.
Mn. Villaverde. Cirujano dentista de Pars. Miembro Honorario de la Sociedad
Odontolgica de Pars. Con certificado de celebridades mdicas de Francia y
del gobierno francs. Diploma de honor por sus aparatos patolgicos y sistema
de dientes y dentadura sin olor (Patentado).
Estar en San Luis quince das. Recibir a todas horas. Domicilio Hotel Pars,
frente al Parque Pringles.1
Ya entrado el presente siglo encontramos otro aviso relacionado con esta
especialidad mdica: F. Campos. Cirujano dentista. Por quince das ofrezco
mis servicios profesionales. Coloco dentaduras artificiales de oro y cauch.
Puentes y coronas de oro, orificaciones por sistema moderno y todo trabajo
concerniente a la profesin. Precios de acuerdo a la siguiente tarifa: Por
limpiar la dentadura $ 10.00 Id. extraccin $ 3.00 Id. extraccin con anestsico
$ 5.00 Id. obturacin con platino o cemento $ 10.00 dem orificacin desde
$ 20.00 Id. colocar un diente $15.00 Id. cada uno ms en la misma planta de
cauch $ 10.00 Id. trabajos en oro de puentes y coronas, dentaduras completas
y fijas y curaciones: convencional. Consultorio calle Chacabuco N 54 frente al
colegio Rivadavia. Horas de consulta de 8 a11 am y 1 a 5 pm.2
Veterinaria
La nica noticia que tenemos con relacin a esta especialidad mdica en el
siglo pasado en la ciudad de San Luis, es la siguiente: Clnica mdicoveterinaria de Rafael Reig. Se previenen, curan y palean todas las
enfermedades en los animales domsticos. Se aplican inoculaciones contra el
carbunclo (mancha, grano malo etc.). Se hacen todas las operaciones
indicadas, incluso la castracin en la vaca y chancha. Coln 3 entre Avda.
Espaa y los rieles.3
Pulperas y Almacenes
La venta de medicamentos en las pulperas y almacenes de ramos generales
de antao, es cosa averiguada y documentada.
As en el juicio sucesorio de Don Juan Moreno que en el siglo pasado tena
pulpera o esquina en San Luis y que se encontraba ubicado a 3 cuadras al
poniente de la plaza, se hayan inventariados los siguientes artculos de botica:
-Tres botellas de purgante $ 6;
-Una botella de aceite de ricino $ 2 5 reales
-Tres onzas de sal de Inglaterra $ 3 reales;
En el sucesorio de Don Pedro Jos Corvaln que en el siglo pasado tuvo
pulpera en Santa Brbara (hoy San Martn), se encuentran inventariados:
-1 libra 2 1/2 onzas de azufre;
-9 onzas cremol;
-2 libras 5 onzas de sal de Inglaterra;
-9 onzas de zen.1
En el sucesorio de Don Eugenio LHuillier, francs, que tena negocio de
almacn, panadera, etc., en Coln 36 de la ciudad de San Luis, est
inventariado en Botiqun integrado por 96 artculos, nmero por s mismo
demostrativo de la importancia de aqul. 2
A mediados del siglo pasado en San Francisco del Monte de Oro se vendan
medicamentos en las casas de comercio de Mauricio Orellano, Dolores Sosa
de Nez y Mariano Carreras; en Ro Seco (hoy Lujn) en las casas de Pedro
Olgun, Nicols Jofr y Juan Nez; en Santa Brbara en las pulperas de
Pedro Daz, Luis Mayorga y Gabino Allende; en Las Chacras, en la pulpera de
Don Santos Allende.
En la segunda mitad del siglo pasado en San Martn se vendan remedios en
las casas de comercio de ramos generales de Manuel Zavala, Bonifacio Fes,
y Santiago Torres.
En la dcada del 30 del presente siglo en la casa de ramos generales de
Bartolom Vergs de Bella Estancia, se vendan remedios como tnicos,
purgantes (entre ellos el pagliano un purgante muy fuerte), pldoras de vida,
pastilla del Dr. Andreu (para la tos), aceite verde, linimento, valeriana, etc.3
En Villa General Roca tena botiqun la casa de comercio de Don Julin
Abrahim; en La Botija la casa de Don Marcelino Sa; en Beazley, las casas de
Don Miguel Hissa y de Don Francisco Pagano.
VILLA MERCEDES
Centenario de la ciudad de Villa Mercedes pg. 252, Villa Mercedes (S. L.) 1956.
1
2
Clera
Con motivo de la existencia de clera en Rosario, el Gobierno de San Luis
dict un decreto con fecha 8 de noviembre de 1886 designando una Comisin
de Higiene en esta ciudad integrada por el Presidente de la Municipalidad Don
Pablo Menvielle, Don Antonio Ardiles, Gral. Leopoldo Nelson y los Sres. Juan
Bruneta y Juan Astri, que tendra las siguientes atribuciones: Realizar visitas
domiciliarias cuntas veces lo estime conveniente para mantener el buen
estado higinico del Municipio; inspeccionar cementerios, Hospital, Crcel,
Boticas
En 1874 tena botica en Villa Mercedes Don Francisco Mini y en 1893 Don
Francisco Pscopo era dueo de la Botica del Pueblo.
En el ao 1907 el Gobierno de la Provincia, por decreto el 8 de febrero acepta
una propuesta de este boticario; quien haba ofrecido proveer los remedios a la
polica a razn de $ 0,50 por receta y los especficos y artculos antispticos
con el 10% de recargo.
En octubre de 1883 Augusto Astri cirujano de las fuerzas de Villa Mercedes
pide autorizacin para ejercer la profesin de farmacutico. El 30 de noviembre
de aquel ao se le concede dicha autorizacin con sujecin a las leyes y
ordenanzas municipales vigentes y se ordena otorgarle el diploma
correspondiente.
En julio de 1894 se presenta Severo Echevarria y Matilla (espaol, natural de
San Sebastin, Provincia de Guipzcoa) pidiendo autorizacin -que se le
concede- para ejercer la profesin de farmacutico en Villa Mercedes.
Presenta comprobantes de haber trabajado como practicante de farmacia
desde mayo de 1879 hasta diciembre de 1884 a las rdenes del Licenciado en
Farmacia Alberto Matilla y Cuellas de San Sebastin y como hbil prctico a
las rdenes del Licenciado en Farmacia Luis de Caero y Miranda de la calle
de los Reyes N 7, Madrid.
Farmacias
En el presente siglo ejercieron como farmacuticos en Villa Mercedes,
Eleodoro Zeballos propietario y director tcnico de la farmacia Lavalle desde
el 1-4-1936 al 11-6-1964; Santiago D. Rola, propietario y director tcnico de la
farmacia Rola desde el 15-5-1937 al 3-11-1960; Rafael Santapau, propietario
y director tcnico de la farmacia Santapau desde el 21-12-1945 al 4-1-1955;
Pedro O.Rola, propietario y director tcnico de la farmacia Gualdoni1-1-1946;
Anglica P. de Corradi quien ejerci la direccin de la farmacia Ortiz el 1-71946 al 16-9-1955; Miguel Roca Costa, propietario y director tcnico de la
farmacia Roca desde el 20-9-1948 hasta 1979, ao en que todava estaba en
actividad; Mara Rosa Ortiz G. de Cattneo, quien ejerci la direccin tcnica
de la farmacia Avenida desde el 4-10-1944 al 4-11-1949.
Otras farmacias existentes en Villa Mercedes a mitad del presente siglo fueron
las de Vctor Hugo Aubert, de Lavalle 446; Edith G. de Delauny, de Pedernera
401; Ofelia C. de Doucet, de Avda. Mitre 1625; Ramn Echenique, de Avda.
Mitre 1161; Enrique Ferrer, de Balcarce 699; Juan Muract, de Junn 18 y Pedro
Ortiz, de General Paz 202.
Colofn
A travs de estas pginas rendimos nuestro homenaje a todos los mdicos
rurales que en una permanente aparcera con el dolor y la muerte, aliviaron el
sufrimiento ajeno y ejercieron un verdadero apostolado de solidaridad en
medios pobrsimos y abandonados. Muchos de ellos han muerto sin que nadie
los recuerde ahora.
Triste destino el del mdico de campaa que despus de aos de lucha ve
agotarse su ilusin atrapado por la rutina y la mediocridad del medio ambiente.
Y ms triste el de aqullos que discriminan diagnsticos y tratamientos segn
la posicin econmica del paciente. Son los que segn Jorge Orgz piensan
que al campo hay que ir a hacer plata, pues no es posible hacer ciencia.
Pero frente a estas tristes distorsiones profesionales est la otra hermosa
realidad, la del mdico recto y honesto que lucha con dignidad y no capitula
frente a la ignorancia y la pobreza de la gente, ni ante la indiferencia y la
desidia oficial.
Este es el mdico que en la comunidad asume categora de patriarca y tiene
idoneidad y autoridad moral para combatir las enfermedades fsicas y
espirituales.
El curanderismo, el alcoholismo, la mortalidad infantil, gravitan en su nimo
tanto como la desavenencia conyugal, el analfabetismo o el incesto.
Esos mdicos son los que junto al maestro rural dan testimonio, no de un
simple compromiso profesional sino de una honda vocacin de amor y
solidaridad.
Son los que prueban todos los das que la ciencia de Paracelso se niega a
entrar en la feria de los mercaderes. Los que frente al dolor levantan la
esperanza. Y los que ante la muerte mueren un poco porque en el hombre que
se apaga ven morir la luz por la que un da empearon el ms solemne
juramento.