La Fortuna de Maquiavelo en España
La Fortuna de Maquiavelo en España
La Fortuna de Maquiavelo en España
RESUMEN ABSTRACT
Anlisis de la fortuna de Maquiavelo en Espaa a travs The analysis of Machiavellis fortune in Spain through
de la revisin de las primeras traducciones del Prncipe: the review of the first translations of The Prince: three
tres traducciones manuscritas pertenecientes al siglo handwritten translations belonging to the 17th century
XVII y dos traducciones editadas del siglo XIX. El and two translations edited in the 19th century. The
anlisis comienza con un apartado dedicado a la fortuna analysis begins with a section on Machiavellis fortune
de Maquiavelo en Espaa: se estudia cundo y cmo se in Spain: when and how the author was banned from
dio la prohibicin del autor en este pas y cmo esta the country and how this fact influenced the spread of
prohibicin influy en la difusin de sus obras, ya sean his works, both in the original and in translation. Then
en versin orginal que traducida. A continuacin, se the rise and the main features of the first handwritten
examinan cmo nacen las primeras traducciones and printed translations of The Prince in Spain are going
manuscritas e impresas del Prncipe en Espaa y cules to be examined.
son sus caractersticas principales.
PALABRAS CLAVE: Historia del pensamiento poltico, KEYWORDS: History of political thought, political essay,
ensayo poltico, Nicols Maquiavelo, traduccin espaola. Niccol Machiavelli, Spanish translation.
1. Introduccin
Se puede decir que son dos los factores que han determinado la fortuna del Secretario
Florentino a lo largo de la historia. El primero obedece a la trascendencia y a la
modernidad de su teora poltica: la reflexin de Maquiavelo sobre el comportamiento
humano presenta un carcter universal que se relaciona con cuestiones sociales y morales
de fundamental importancia, de ah el enorme alcance de su concepcin antropolgica y
de su filosofa de la historia1. El segundo se refiere al hecho de haber sido un autor
largamente prohibido, lo que le proporcion un formidable nmero de detractores y
defensores que originaron una constante reflexin y discusin sobre sus teoras en dos
lneas de pensamiento contrapuetas: el maquiavelismo y el antimaquiavelismo. Raab2 sintetiza
este aspecto como la historia del choque del pensamiento poltico laico contra una
ideologa cristiana comnmente aceptada.
Pero no toda Europa reaccion de igual modo a la prohibicin de Maquiavelo en
el Index Librorum Prohibitorum (Roma, 1559). Los pases de confesin protestante, como
Inglaterra, Alemania y Holanda, ignoraron el veto, de manera que las obras del autor
florentino fueron ledas y traducidas sin dificultad. Curiosamente tambin Francia, aunque
de confesin catlica, hizo caso omiso de la prohibicin y las obras de Maquiavelo fueron
aceptadas y traducidas: algunos han querido explicar este hecho como resultado de la
proteccin directa de la Reina Madre, Catalina de Mdicis, considerada por la historia una
figura favorable a la poltica maquiavelista3.
Espaa y Portugal, sin embargo, incluyeron a Maquiavelo en los ndices de autores
prohibidos. Portugal prohibi en su ndice de 1581 nicamente los Discorsi, en cualquier
lengua: a pesar de seguir el ndice tridentino (1564), que condenaba claramente a
Maquiavelo, el ndice portugus prohbe la nica obra del autor traducida al castellano, tal
vez como seala Puigdomnech4 porque Portugal tema ms las obras que podan
67-68 (1960), 1-15) no encuentra, sin embargo, argumentos para afirmar que la reina conociera y se
comportara en la poltica francesa segn los principios de Maquiavelo, pero reconoce que los editores y
traductores de sus obras actuaron bajo la proteccin de la Corona.
4 H. PUIGDOMNECH, Maquiavelo en Espaa. Presencia de sus obras en los siglos XVI y XVII, Madrid,
entrar a travs de la cercana Espaa, a la que le unan estrechas relaciones, que las que
pudieran llegar en versin original.
En Espaa se dieron unas circunstancias especiales. La dinasta de los Habsburgo
estuvo guiada durante los siglos de Oro por la idea de la unin del Estado en la fe, idea
que haba heredado de los Reyes Catlicos: la defensa de la unidad religiosa se identificaba
con la defensa de la unidad del Estado. Para poner en prctica esta idea, la monarqua
espaola se sirvi de la Inquisicin, pero en Espaa el Santo Oficio funcion como un
tribunal de la Corona, pues dependa del rey y del Inquisidor General, y ostent una
notable independencia respecto a Roma5.
Esta independencia se aprecia claramente en la actitud inicial que mostraron las
autoridades espaolas frente a las obras del Secretario Florentino: el autor no aparece en
los primeros ndices promulgados en la pennsula, que pertenecen a 1547, 1549 y 1551. La
Corona se mostr asimismo favorable al autor: en 1552 Carlos V aprob la publicacin de
la primera traduccin espaola de los Discorsi sulla prima deca di Tito Livio por ser muy util
y provechosa para cualquier prncipe6, como se lee en el privilegio real firmado por el
emperador en Valladolid en 1550, y permiti que el editor Giovanni Lorenzo Ottevanti la
dedicara al heredero, el entonces prncipe Felipe II: [...] para que pueda en breve tiempo
venir en conocimiento delo que es necessario para aadir a su Imperio lo que pueda [...] 7.
La visin positiva de esta obra de Maquiavelo se observa igualmente en las palabras que
aparecen en la segunda edicin de la traduccin, que se public en 1555: muy utiles y
provechosos para cualquier principe o gobernador8. Sabemos, adems, que Felipe II
posea un ejemplar de Il principe que l mismo haba anotado y que posteriormente se
encontr en la Biblioteca de El Escorial9.
Los aos pasan y la actitud oficial espaola a favor de Maquiavelo no se modifica:
la primera prohibicin romana en el Index de 1559 no tuvo ninguna consecuencia en este
pas pues el autor no aparece en el ndice del inquisidor Valds fechado en el mismo ao.
5 Cfr. J. M. GARCA MARN, Inquisicin y poder absoluto (siglos XVI-XVII) , Revista de la Inquisicin, I
(1991), 105-119.
6 Cito a travs de H. PUIGDOMNECH, Maquiavelo en Espaa, 42.
7 Cito a travs de H. PUIGDOMNECH, Maquiavelo en Espaa, 43.
8 Cito a travs de H. PUIGDOMNECH, Maquiavelo en Espaa, 43.
9 As lo indica Alberto Lista en la nota (1) del prlogo a su traduccin de Il principe (A. LISTA, Prlogo del
traductor espaol, en N. MAQUIAVELO, El principe, Traducido del toscano al espaol, Madrid, Imprenta
de D. Leon Amarita, 1921, i-xx, x).
Habr que esperar al ndice del cardenal Quiroga de 1583 para ver prohibido en Espaa a
Maquiavelo, que aparecer tambin en los ndices posteriores (1612, 1632, etc.). Esta
prohibicin tarda permiti que las obras del autor florentino circularan libremente en este
pas durante casi veinticinco aos despus de la primera prohibicin de Roma.
Sin embargo, puede considerarse paradjico el escaso nmero de traducciones
espaolas de las obras de Maquiavelo anteriores al siglo XIX. Desde que las primeras
obras del autor comienzan a editarse en Italia La Mandragola en 1518 y el Arte della guerra
en 1521 hasta la publicacin de la primera traduccin espaola de Il principe que
aparece en 1821 en Madrid en la Imprenta de Len Amarita y que fue realizada por
Alberto Lista, pasan ms de trescientos aos en los que solo ven la luz dos traducciones
editadas y tres traducciones manuscritas. Las traducciones editadas pertenecen al siglo
XVI: la primera es una traduccin del Arte della guerra que se public como una obra
original de Diego de Salazar en 1536 en Alcal de Henares, con el ttulo Tratado de re
militari; la otra es la traduccin de los Discorsi realizada por Ottevanti en las dos ediciones
indicadas ms arriba, 1552 y 1555, que fueron publicadas por Guillermo de Millis en
Medina del Campo. Las traducciones manuscritas son las tres que hemos presentado
como manuscritos 902, 1017 y 1080, pertenecientes al siglo XVII.
La explicacin ms simple para esta escasez de traducciones espaolas en un
periodo tan largo sera la de atribuirla a la prohibicin del autor y de todas sus obras a
partir del ndice del cardenal Quiroga de 1583. Sin embargo, esta explicacin queda
invalidada por el hecho de que la prohibicin no impidi que las obras del autor
circularan en versin original: como demuestra el estudio de Puigdomnech10, a pesar del
veto, las obras de Maquiavelo estaban presentes en diferentes bibliotecas privadas
espaolas, al menos hasta la mitad del siglo XVII, as como tambin lo estaban las
versiones de algunos de sus imitadores y plagiarios. De manera que, si circularon sus
obras, lo hicieron tambin sus ideas, al igual que estaba ocurriendo en los pases donde el
autor no haba sido prohibido, como Francia o Inglaterra. Invalida tambin esta
explicacin el hecho de que la prohibicin espaola fue bastante tarda: entra en vigor
veinticuatro aos ms tarde que el veto romano y esto dio un margen de ms de sesenta
H. PUIGDOMNECH, La presencia de Maquiavelo en las bibliotecas espaolas de los siglos XVI y XVII,
10
aos, desde la publicacin de las obras de Maquiavelo en Italia, en los que se podran
haber traducido sus obras, como se hizo en otros pases de Europa.
Otra hiptesis es la que defienden Bertini11, Bertelli e Innocenti12 y
Puigdomnech13: estos estudiosos cosideran que los lectores espaoles instruidos de aquel
periodo conocan bien la lengua italiana y, por tanto, las traducciones no fueron
necesarias. Esta hiptesis est avalada no solo por la semejanza evidente entre la lengua
espaola y la italiana, sino tambin por el hecho de que el italiano era la lengua de buena
parte del imperio y representaba la cuna de la cultura renacentista. A esto debemos aadir
que exista una estrecha relacin entre los dos pases: Italia era un destino comn para los
hombres de la Iglesia, los artistas, los intelectuales, los cientficos, los soldados y los
diplomticos espaoles, mientras que Espaa era importante para los editores y los
comerciantes italianos.
Rigobon14, sin embargo, se muestra contrario a esta hiptesis. En primer lugar,
argumenta que la finalidad de algunas de estas primeras traducciones podra indicar que el
conocimiento de la lengua italiana no estaba tan generalizado: en la dedicatoria de
Ottevanti a la traduccin de los Discorsi se lea para que mejor se pueda entender y una
de las traducciones manuscritas, el ms. 902, se haba realizado a peticin de Carlos II, que
no conoca la lengua italiana. En segundo lugar, considera que la existencia de
traducciones francesas, por ejemplo, no puede llevarnos a pensar que la clase culta
francesa no conociera la lengua italiana. La primera argumentacin de Rigobon puede ser
confutada ya que, por un lado, la finalidad didasclica era general en las traducciones de
este periodo y sola aparecer expresa en los prlogos, dedicatorias o prefacios de los
traductores; por otro, que el rey Carlos II no conociera el italiano se debe a que su
preparacin intelectual se vio mediatizada por una salud muy precaria y no podemos
generalizar este particular a la clase de los intelectuales espaoles de aquel momento. La
segunda argumentacin, sin embargo, es totalmente vlida y Rigobon la concluye con dos
hiptesis: una, la posibilidad de que en Francia, por tradicin, pudieran tener una mayor
acogida las obras de corte poltico y esto favoreciera las traducciones; y otra, que quiz en
Espaa la recepcin atenta de Maquiavelo perteneciera por naturaleza a una lite.
Independientemente de cules sean las razones, lo cierto es que como seala
Rigobon15 la fortuna de la obra y del pensamiento de Maquiavelo en Espaa no parece
sujeta en este periodo a una difusin editorial de las traducciones de sus obras.
Prince. Part 1: From the Sixteenth to the First Half of the Nineteenth Century, Amsterdam, New York, Rodopi,
2010, I, 115-167. Cfr. 3.1.
Esta hiptesis se ha visto reforzada por el estudio que Rius Gatell y Casas Nadal 19
presentan en la introduccin a su edicin de 2010. Las hiptesis que se haban barajado en
estudios anteriores eran dos: Gerber20 lo consideraba perteneciente al siglo XVII por la
grafa y porque identificaba como texto fuente una edicin testina21; Puigdomnech22, sin
embargo, adelantaba la fecha a finales del XVI al igual que Bertelli e Innocenti23 o
primeros aos del XVII. De este modo, se poda relacionar el manuscrito con el entorno
del duque de Sesa y Soma, Antonio Fernndez de Crdoba, que en noviembre de 1584 y
en junio de 1585 solicit al Consejo de la Inquisicin la autorizacin para editar en
castellano varias obras de Maquiavelo con las expurgaciones que fueran necesarias e
incluso bajo el nombre de otro autor24. Rius Gatell y Casas Nadal, sin embargo, despus
de un anlisis exhaustivo del manuscrito, afirman no poder presentar seriamente la
hiptesis segn la cual el manuscrito puede corresponder a una de las traducciones para
las que el Duque haba pedido permiso25. Siendo claramente la testina el texto fuente, la
fecha del manuscrito saltara al siglo XVII, hiptesis avalada por una nota al margen que
aparece en el folio 6r (cap. III) y que dice: Gran ejemplo Catalua. Rius Gatell y Casas
Nadal explican que esta frase se refiere a una ocupacin violenta que sufri Catalua que
identifican con la Guerra dels Segadors de 1640, detalle que podra suponer una nueva
referencia temporal para el manuscrito: creen que la nota, ms que referirse a un hecho
concreto, se refiere al conflicto latente entre la Monarqua espaola y Catalua durante los
reinados de Felipe III (1598-1621) y Felipe IV (1621-1665), que supuso un alejamiento
recproco26.
La traduccin es bastante fiel tanto en lo que se refiere al contenido como a la
forma. Las variantes que encontramos dentro del texto a veces tambin al margen,
las tachaduras, los pasajes subrayados y las observaciones o comentarios al margen hacen
porque en la portada apareca el dibujo de la cabeza del autor. Aunque aparecieron con fecha de 1550, se
imprimieron entre 1609 y 1650: era frecuente que los editores siguieran publicando las obras del autor
despus de su prohibicin pero con pies de imprenta falsos, con el fin de evitar posibles sanciones.
22 H. PUIGDOMNECH, Maquiavelo en Espaa, 117-118.
23 S. BERTELLI, P. INNOCENTI, Bibliografia machiavelliana, LXVI.
24 H. PUIGDOMNECH, Maquiavelo en Espaa, 113.
25 R. RIUS, M. CASAS, Il Principe de Maquiavel, 36.
26 R. RIUS, M. CASAS, Il Principe de Maquiavel, 40-41.
Testina: ...egli non h durare fatica alcuna guadagnarli, ... (III, 4-5)
Ms. 1084: ...l no trabaja en ganarlos la voluntad... (III, 6v).
Testina: ...dallaltra paurosi di non errare, perche non intervenisse loro come a quelli che
sono stati spogliati. (III, 4).
Ms. 1084: ...y por otra, medrosos de no herrar porque a ellos no les acontezca lo mismo
que a los despojados. (III, 5v).
Testina: Et bench da i Cartaginesi fusse due volte rotto, et ultimamente assediato, non
solamente pot difendere la sua citt, ma... (VIII, 20).
Ms. 1084: ...y aunque los cartajineses le dieron dos rotas y ltimamente le sitiaron, no
solamente no pudo defender su iudad, pero... (VIII, 28v).
Son numerosas las variantes de traduccin que aparecen dentro del texto y suelen mejorar
la primera propuesta, como se observa en los siguientes ejemplos:
Testina: I Venitiani mossi (comio credo) dalle ragioni sopradette, nutrivano le sette
Guelfe e ghibelline... (XX, 54).
Ms. 1084: Los veneianos mouidos, segn creo, de las racones dichas alimentauan
fomentauan las faciones guelfas y gilbellinas (XX, 72r).
Por lo que se refiere a los elementos paratextuales, las notas al margen son de dos tipos.
Algunas presentan reflexiones o comentarios del traductor sobre las ideas expuestas por
Maquiavelo, como por ejemplo la que aparece en el captulo XXI, en la que el traductor se
muestra, al igual que el autor, contrario a la neutralidad del Prncipe: Gran racn destado
se saca de aqu: la neutralidad pierde al amigo y no gana al enemigo (XXI, 76v); o la del
captulo II, donde al afirmar Maquiavelo que los estados hereditarios presentan menos
dificultades para ser conservados, el traductor aade una valoracin personal:
Dificultosso precepto por los diuerssos accidentes que el tiempo trae consigo (II, 1r).
Las otras notas presentan variantes de traduccin, como cuando se propone en nota
ynjuriar como variante de ofender (VII, 27v), le sobrevino la muerte como variante
de morir (VII, 25v) o la frase esponerse a que cualquiera pueda decir la verdad en su
parecer es abenturar el respeto como variante de quando cualquiera puede deirte la
berdad, te falta la reuerenia (XXIII, 79v).
Por lo que se refiere a las supresiones, a veces comportan un intento de simplificar el estilo
del original:
Testina: I principali fondamenti che habbino tutti gli Stati, cosi nuovi, come vecchi,
misti, sono le buone leggi e le buone armi; e perche non possono esser buone leggi doue non sono
buone armi, e doue sono buone armi conviene che siano buone leggi, io lasser indietro il
ragionare delle leggi e parler delle armi (XII, 29).
Ms. 902: Los principales fundamentos, que tienen todos los estado assi nuevos, como
antiguos, y mistos, son las buenas leies, y las buenas armas, y porque donde hai buenas
armas, es preciso que haia buenas leies, dexare aparte el hablar de las leies, y discurrire
solo de las armas (XII, 25r).
Otros casos se deben a meros despistes del traductor, provocados con frecuencia por la
repeticin de algunas palabras: en estos casoso desaparece el fragmento comprendido
entre la palabra y su repeticin:
Testina: [...] laltra, il non hauere loro Cardinali, quali sono origine di tumulti tra loro; ne mai
staranno quiete queste parti qualunque volta habbino Cardinali, perche questi nutriscono in Roma
[](XI, 29).
Ms. 902: [...] otra el no tener Cardenales, porque estos sustentan en Roma [...] (XI,
25v).
Las modificaciones pueden darse en el plano sintctico y afectar al orden de palabras dentro
de la frase o a la subordinacin; otras veces, sin embargo, implican el uso de algunas
tcnicas de traduccin. En el ejemplo siguiente, identificamos un caso de generalizacin:
Testina: [...] e cos il Principe ne trahe sempre pi utilit, che di coloro il quali seruendolo
con troppa sicurt, stracurano le cose sue (XX, 55).
Ms. 902: [...] y as el Principe saca siempre mas utilidad, que de aquellos que sirvindole
con sobrada seguridad, omiten su servicio [...] (XX, 48v).
Testina: [] rispondo con le ragioni dette di sopra, Che non si debba mai lasciar seguire
uno disordine per fuggire una guerra; perche ella non si fugge, ma si differisce tuo
disavantaggio [] (III, 7).
Ms. 902: [...] respondo con las razones arriba dichas, que jamas se debe dexar nacer un
desorden, por huir una guerra; porque essa no se huie, sino se difiere con poca ventaja tuia
(III, 7r).
Solo hemos identificado un error de traduccin provocado por una mala comprensin del
original y, como veremos ms adelante, este mismo error se da tambin, curiosamente, en
otras traducciones espaolas. Cuando Maquiavelo trata el principado hereditario, afirma
que este ser ms fcil de mantener que un principado nuevo y hace referencia al caso del
Duque de Ferrara, que, contrariamente a lo que dice la traduccin, no pudo resistir estos
ataques por motivos que eran ajenos a su condicin de prncipe antiguo en aquel
dominio.
Testina: Noi abbiamo in Italia per essempio il Duca di Ferrara, il quale non h retto gli
assalti de Viniziani nel LXXXIIII. ne quelli di Papa Iulio nel X. per altre cagioni che per
essere antiquato in quel Dominio (II: 1).
Ms. 902: Tenemos en Italia al Duque de Ferrara, por exemplo, que resistio los asaltos
Venecianos en el 84 y los de el Papa Julio en el 10 no por otra causa, que por hallarse anticuado
en aquel dominio [...] (II: 2r).
Otros errores obedecen a simples distracciones del traductor y, en algunos casos, vienen
subsanados en el mismo texto:
Testina: [...] parte per inuidia de Fiorentini, e parte per paura [] (VII, 18).
Ms. 902: [...] parte por embidia contra los Franceses, digo Florentines, y parte por miedo [...]
(VII, 16v).
sino tambin el singular estilo de la obra. Podramos considerarla una versin abreviada que
presenta varios errores de traduccin32. Veamos algunos ejemplos.
Adems de la supresin de la dedicatoria a Lorenzo de Mdicis, identificamos la
supresin de un pasaje al principio del captulo II, donde Maquiavelo dice que esta vez no
razonar sobre las repblicas porque ya lo ha hecho anteriormente: se refiere a su obra
Discorsi sulla prima decada di Tito Livio. Algunas referencias de este tipo, que el autor lleva a
cabo para contextualizar el tema tratado o sus mismas palabras, han sido eliminadas en
esta traduccin:
Testina: Io lascer in dietro il ragionare delle Repubbliche, perche altra volta ne ragionai
lungo. Volterommi solo al Principato; e ander nel ritessere queste orditure di sopra,
disputando come questi Principati si possono gouernare e mantenere. Dico adunque che
nelli Stati ereditari e assuefatti al sangue del loro Principe, (II, 1).
Ms. 1017: Los Prinipados hereditarios donde la sangre del Prinipe ha seoreado
subessivamente... (II, 3v).
Encontramos dos casos de supresin en un pasaje del captulo III, dedicado a los
principados mixtos. El primero afecta a una afirmacin del autor segn la cual no se
deben consentir los desrdenes para evitar una guerra porque esta no se evita,
simplemente se retrasa. Es posible que la frase haya sido eliminada para evitar su
repeticin pues Maquiavelo ya la haba escrito algunas pginas antes. El segundo caso
afecta a un pasaje en el que el autor contextualiza sus palabras.
Valentino (che cos vulgarmente era chiamato Cesare Borgia figliuolo di Papa Alessandro) occupaua la
Romagna: perch dicendomi il Cardinale Roano che glItaliani non si intendeuano della guerra, io li
resposi che i Francesi non s intendeuano dello stato, perch intendendosene, non lascerebbero venire la
Chiesa in tanta grandezza: Et per isperienza se visto che la grandezza (III, 7-8).
Ms. 1017: Y si alguno dixere que el Rey Luis dexo que Alexandro 6 ganasse a la Romana
y Espaa el reyno de Napoles por evitar una guerra, respondo con la conclusin arriva
[dha], y si otros dixessen la fe que el rey havia dado al Papa de hazer aquella impressa por
el por la dispensaion de su matrimonio, y el capelo del Cardenal de Roan, respondo con
lo que adelante se dira del modo como los Prinipes deuen obseruar la fe y la palabra, en
fin el Rey Luis perdio la Lombardia por no guardar ninguna de las reglas necesarias al que
quiere conservarsse en un estado reien conquistado, ya se visto por experiencia que toda
la grandea... (III, 11r).
Testina: Di questa materia se ne potria dare infiniti esempi, ma voglio solo esser
contento duno, seguito alla memoria de padri nostri. Messer Annibale Bentivogli auolo
del presente Messer Annibale, che era Principe in Bologna, essendo da Canneschi, che gli
congiurorono contro, ammazzato, ne rimanendo di lui altri che Messer Giouanni, che era
in fasce, subito dopo tal homicidio, si leu il popolo, e ammazz tutti i Canneschi. Il che
nacque dalla beniuolenzia popolare che la casa de Bentiuogli haueua in quei tempi in
Bologna: la qual fu tanta, che, non vi restando alcuno che potessi, morto Annibale,
reggere lo Stato, e auendo inditio come in Firenze era uno nato de Bentiuogli, che si
teneua fino allora figliuolo dun fabbro, vennero i Bolognesi per quello in Firenze, e li
dettono il gouerno di quella citt, quale fu gouernata da lui fino tanto che Messer
Giouanni peruenne in et conveniente al gouerno (XIX, 46-47).
Ms. 1017: Mier Aniual Ventivollo seor de Bolonia fue muerto por conjuraion de los
Canescos y en effetuando la conjuraion se leuanto el Pueblo y mato todos los conjurados
por el gran amor que tenian a su seor (XIX, 62v).
Por ltimo, sealamos que quedan eliminados tambin los versos de Petrarca con los que
Maquiavelo termina el ltimo captulo, despus de haber solicitado la intervencin de la
En este apartado analizaremos las dos primeras traducciones del Il principe publicadas en
lengua espaola, que datan del siglo XIX. La primera pertenece al ao 1821 y fue
publicada en Madrid en la Imprenta de Len Amarita, con dos posibles reimpresiones:
Pars, Imprenta de J. Smith, 1824 y Pars, Imprenta de Pillet Ain, 1838. El ttulo de la
portada es: EL PRINCIPE DE NICOLAS MAQUIAVELO, TRADUCIDO DEL TOSCANO AL
ESPAOL. Aunque el nombre del traductor no aparece ni en la portada ni en el prlogo
ni en nota, su identificacin ha sido posible porque en la nota (1) de la pgina xviii del
prlogo el traductor explica que su traduccin haba sido anunciada en el nmero 20 de
El Censor, peridico poltico y literario del Madrid de aquella poca. Consultando dicho
artculo se observa que su autor es Alberto Lista (1775-1848), uno de los intelectuales ms
importantes de aquel periodo, ilustrado prerromntico sevillano y uno de los fundadores
de dicho peridico. Lista reconoce tambin en el prlogo haberse servido de una
traduccin francesa, que l considera la mejor, realizada por el abad Aim Guillon de
Montlon (1758-1842): Machiavel comment par Napolon Buonaparte, manuscrit trouv dans le
carosse de Buonaparte, aprs la bataille de Mont-Saint-Jean, le 18 juin 1815 (Paris, Nicolle, 1816)33.
Lista propone una versin en la que el traductor est presente a travs de
diferentes intervenciones que afectan especialmente al plano de la forma, muchas de las
cuales son un claro eco de las intervenciones llevadas a cabo por Aim Guillon, con el que
comparta algunas caractersticas importantes como el ser clrigo, una formacin
neoclsica, el vivir en un periodo de importantes cambios polticos y sociales frente a los
que adoptaron una visin crtica, as como su voluntad de dar a conocer a Maquiavelo.
Esta voluntad est expresa en los prlogos de ambas traducciones: tanto Guillon como
Lista desean dar a conocer Il Principe teniendo en cuenta el contexto en el que fue escrita
33 Sobre una anlisis de la traduccin de Lista, cfr. M. B. ARBULU, La primera traduccin espaola
publicada de Il principe de Maquiavelo, en M.B. ARBULU y S. BAGNO (eds), Maquiavelo y Beccaria en mbito
iberoamericano, Padova, Unipress, 2006, 45-90. Para su comparacin con la traduccin de Guillon, cfr. M. B.
ARBULU, Il principe de Maquiavelo: huellas de la traduccin framcesa de Aim Guillon de Montlon en
la traduccin espaola de Alberto Lista, en M. B. ARBULU (ed.), Aim Guillon y Aberto Lista, traductores de
Maquiavelo, Padova, CLEUP, 2012, 79-149.
la obra, de manera que el lector pueda darle una interpretacin correcta; ambos llevan a
cabo una revisin histrica paralela de los detractores de Maquiavelo y sealan la
hipocresa de algunos de ellos que, criticndolo, sin embargo adoptaron sus mximas.
A continuacin analizaremos algunas de las intervenciones de Lista que siguen la
versin francesa y despus algunas intervenciones que el traductor espaol realiza de
manera independiente34.
En primer lugar presentamos un ejemplo de adicin de elementos:
INGLESE, 1994: [] non ho trovato, intra la mia suppellettile, cosa quale io abbia pi cara o
tanto existimi quanto la cognizione delle actioni delli uomini grandi, imparata da me con una
lunga esperienza delle cose moderne et una continua lectione delle antiche; le quali
avendo io con gran diligenza lungamente excogitate ed examinate, et ora in uno piccolo
volume ridotte, mando alla Magnificenzia vostra. [] (Dedicatoria, 181-182).
GUILLON, 1816: [] je nai trouv parmi les choses que je possde, rien qui me soit plus cher
et dont je fasse plus de cas que ma connaissance de la conduite des plus grands hommes dtat qui
ayent exist. Je nai pu acqurir cette connaissance que par une longue exprience des terribles
vicissitudes politiques de notre ge, et par une continuelle lecture des histoires anciennes.
Aprs avoir examin long-temps les actions de ces hommes-l, et aprs avoir mdit sur elles avec la plus
srieuse attention, jai renferm le rsultat de ce pnible et profond travail en un petit volume; et cest ce
petit volume que jenvoie VOTRE MAGNIFICENCE (Dedicatoria, 2).
LISTA, 1821: [...] he considerado que entre las cosas que poseo, ninguna tengo mas preciosa ni
de la que pueda hacer mayor caso, que del conocimiento de la conducta de los mayores estadistas que
han existido. Esta corta ciencia ha sido el producto de una experiencia muy larga de las terribles
vicisitudes polticas de nuestra edad, y de la lectura continua de los historiadores antiguos.
Despues de haber examinado mucho tiempo los actos de aquellos claros varones, y de haberlos meditado
con la mas profunda atencion, he recogido todo el fruto de un trabajo tan penoso en este pequeo volumen
que remito V. A. (Dedicatoria, XXII).
34No conociendo los originales sobre los que se basaron las traducciones que analizamos en este apartado,
hemos tomado como referente para los ejemplos citados N. MACHIAVELLI, De principatibus, testo critico a
cura di Giorgo Inglese, Roma, Istituto storico italiano per il Medio Evo, 1994.
INGLESE, 1994: Chi considera adunque luno e laltro di questi stati, troverr difficult
nellacquistare lo stato del Turco, ma, vinto che fia, facilit grande a tenerlo. Cos per adverso
troverr per qualche respetto pi facilit a potere occupare il regno di Francia, ma difficult grande a
tenerlo. Le cagioni delle difficult, [] (IV, 197-198).
GUILLON, 1816: Ainsi, quiconque voudra attentivement lun et lautre de ces deux tats,
trouvera quil y aurait beaucoup de difficult conqurir celui du Tur; mais que, si on
lavait conquis, il serait trs facile de le conserver. Les raisons des difficults pour
loccuper [] (IV, 36).
LISTA, 1821: Si se considera estas dos soberanas, veremos que se necesita vencer
grandes dificultades para apoderarse de un reyno gobernado como el del turco; pero que
tampoco hay cosa tan fcil como conservarle, despus de conquistado una vez.
Ciertamente es dificultoso apoderarse de un estado semejante; porque [...] (IV, 21-22).
Es posible que el traductor francs suprimiera esta frase porque realmente no aportaba
ninguna informacin nueva y Lista siguiera su ejemplo en la versin espaola.
Presentamos a continuacin un fragmento en el que podemos identificar diferentes
modificaciones llevadas a cabo por el traductor francs y que tienen un claro eco en el texto
espaol:
INGLESE, 1994: Sogliono el pi delle volte coloro che desiderano acquistar grazia appresso
uno principe farsegli incontro con quelle cose che infra le loro abbino pi care o delle quali
vegghino lui pi dilettarsi; donde si vede molte volte essere loro presentati cavagli, arme,
drappi doro, pietre preziose e simili ornamenti degni della grandezza di quelli. [] (Dedicatoria,
181).
GUILLON, 1816: Ceux qui veulent obtenir la faveur dun prince ont coutume de lui prsenter
les choses qui passent pour lui tre les plus agrables, ou dans la jouissance desquelles on sait
quil se complait davantage. Les uns lui offrent en consquence des chevaux; les autres, des
armes; ceux-ci, des toffes dor; ceux-l, des pierres prcieuses ou dautres objets galement
dignes de sa (Dedicatoria, 1-2).
LISTA, 1821: Los que se proponen alcanzar el favor de un prncipe, suelen regalarle cosas que
sean de su agrado, cuando no puede ser aquellas que ms desea; y asi unos le ofrecen
caballos, otros armas; estos telas de oro, y aquellos piedras preciosas otras alhajas igualmente
dignas de grandeza (Dedicatoria, XXI).
Las dos traducciones comienzan con una oracin de relativo con funcin de sujeto, lo que
implica que el orden sintctico del original ha sido alterado. En ambos textos se traduce
grazia por favor. Y tambin en ambos textos se traduce la frase original farsegli
incontro con quelle cose che infra le loro abbino pi care a travs de un verbo con un
complemento directo modificado por una oracin de relativo: en francs prsenter les
choses qui... y en espaol suelen regalarle cosas que.... Adems, las cosas que se suelen
regalar a un prncipe son descritas por Guillon como agrables y por Lista como de su
agrado, compartiendo la etimologa de los vocablos. Pero quiz es la parte final la que
demuestra claramente cmo Lista se sirve del texto francs: Guillon interviene en el plano
sintctico y sustituye la enumeracin de los regalos que Maquiavelo separa con comas por
dos construcciones distributivas que se inician con pronombres indefinidos y
demostrativos, construcciones que estn presentes tambin en la versin de Lista. Por
ltimo, este sigue nuevamente del texto francs en la sustitucin de la conjuncin
coordinada copulativa del original pietre preziose e simile ornamenti por la
disyuntiva o y en la adicin del adverbio igualmente.
En otros casos, sin embargo, Lista interviene en el texto de manera independiente.
El primer ejemplo hace referencia a un caso de adicin de elementos a travs de la tcnica
de la amplificacin:
INGLESE, 1994: Laltro milgliore remedio mandare colonie in uno o dua luoghi, che
sieno quasi compedes di quello stato: perch necessario o fare questo o tenervi assai
gente darme e fanti. Nelle colonie non si spende molto; e sanza sua spesa, o poca, ve le
manda e tiene, e solamente offende coloro a chi toglie e campi e le case per darle a nuovi
abitatori, che sono una minima parte di quello stato; e quelli che gli offende, rimanendo
dispersi e poveri, non gli possono mai nuocere; [...] (III, 188-189).
LISTA, 1821: Ser otro medio excelente enviar colonias una dos plazas que sean
como la llave del pais: medida indispensable, no mantener all un nmero crecido de
tropas. Estas colonias le cuestan poco al prncipe, y solo seran gravosas aquellos
individuos particulares que le inspirasen recelos que tratase de castigar, despojndoles de sus
haciendas y dndoselas otros moradores nuevos mas seguros. De este modo, como siempre es corto el
numero de los despojados, y estos en adelante no podrn causar dao por haber quedado pobres y
dispersos, se logra mas facilmente que se mantengan sosegados todos los dems [...] (III, 9).
En este pasaje, las dos amplificaciones parecen obedecer a una voluntad de aclarar o
explicar mejor el contenido del texto original, pero el traductor va ms all y no respeta el
sentido exacto de lo que dice el autor. La primera amplificacin afecta al sentido de las
palabras de Maquiavelo: la versin espaola parece justificar la expropiacin de estos
terrenos porque sus dueos podran ser peligrosos para el prncipe; sin embargo, en el
texto original esta justificacin no aparece, la expropiacin es considerada por Maquiavelo
simplemente como el mal menor: solo ofende a una minima parte di quello stato.
Igualmente, la amplificacin que aparece en la frase final del texto espaol altera
ligeramente el contenido de las palabras de Maquiavelo.
El segundo ejemplo, sin embargo, presenta un caso de modificacin:
INGLESE, 1994: [] Oltre a questo, non si pu con onest satisfare a grandi, e sanza
iniuria di altri, ma s bene al populo; perch quello del popolo pi onesto fine che quello
de grandi, volendo questi opprimere e quello non essere oppresso. Preterea, del populo ini-
mico uno principe non si pu mai assicurare, per essere troppi: de grandi si pu assicurare, per essere
pochi (IX, 225).
LISTA, 1821: Es ademas muy fcil contentar al pueblo sin cometer injusticia, y no lo es
tanto contentar los grandes; porque estos quieren egercer la tirana, y el pueblo se limita
evitarla. Por otra parte, puede un prncipe sin mucho trabajo contener los nobles que le son
contrarios, por ser corto su nmero; pero cmo podr estar seguro de la obediencia y de la fidelidad del
pueblo, si llega este separar sus intereses propios de los del prncipe? (IX, 62).
Lista lleva a cabo una modificacin en el plano suprasegmental ligada al plano sintctico
que afecta al carcter enunciativo de la frase original: la oracin enunciativa ha sido
sustituida por una interrogativa de tipo retrico, aspecto que se repite varias veces a lo
largo de la versin espaola, en pasajes donde parece que el traductor considera oportuno
acentuar la expresividad.
Estos ejemplos de las intervenciones de Guillon y Lista nos demuestran que su
manera de traducir obedece a los parmetros del contexto cultural y literario en el que se
formaron, es decir, la Ilustracin: la concepcin de la traduccin con una marcada
intencin didasclica, propia de una formacin de corte neoclsico como la suya, justifica
una firme presencia del traductor en el texto, que sola ser adaptado a la cultura y a la
lengua de llegada, sufriendo un proceso de nacionalizacin. Las intervenciones del traductor
estaban justificadas y en los dos casos que nos ocupan, las ampliaciones lingsticas, las
amplificaciones, las supresiones, as como la reorganizacin del discurso que en
Maquiavelo nace catico y espontneo estn siempre encaminadas tanto a facilitar la
comprensin de los contenidos de la obra, guardando fidelidad a las intenciones de sus
INGLESE, 1994: E Vergilio nella bocca di Didone dice: Res dura et regni novitas me
talia cogunt moliri, et late fines custode tueri (XVII: 259-260).
35 Para un estudio ms detallado de esta traduccin, cfr. M. B. ARBULU, Las primeras traducciones espaolas
editadas de Il principe de maquiavelo: la traduccin de 1842, Orillas. Rivista d'Ispanistica, 1 (2012).
(orillas.cab.unipd.it/orillas/articoli/numero_1/12Arbulu_astilleros.pdf)
36 A. ELAS DE MOLINS, Diccionario biografico y bibliografico de escritores y artistas catalanes del siglo XIX (apuntes y
datos), Barcelona, Administracin, 1889; M. MENNDEZ PELAYO, Biblioteca de traductores espaoles, vol I, en
Edicin Nacional de las Obras Completas de Menendez Pelayo, dirigida por M. Artigas, Madrid, C.S.I.C., 1952.
1842: Asi Virgilio por boca de Dido encuentra la escusa de la inhumandad ejercida en su reino, en
ser nuevo, diciendo: Res dura, et regni novitas me talia cogunt / Moliri, et late fines
custode tueri. La dura precisin y el reino nuevo / me obligan de este modo y por mis
fines / obrar, y defender nuestros confines ( XVII: 100).
Resulta, sin embargo, lgica la supresin del inciso que aparece en el captulo XV donde
Maquiavelo introduce entre parntesis la razn por la que ha utilizado el trmino toscano
misero: el inciso era til quiz para el lector original, pero intil para quien lee el texto
en espaol.
INGLESE, 1994: E questo , che alcuno tenuto liberale, alcuno misero, usando uno
termine toscano, perch avaro in nostra lingua ancora colui che per rapina desidera di avere: misero
chiamiamo noi quello che si astiene troppo di usare il suo; alcuno tenuto donatore, alcuno
rapace; [] (XV: 254).
1842: [...] asi uno es tenido por liberal, otro por mezquino; uno por prdigo, otro por
rapaz [...] (XV: 93).
INGLESE, 1994: Messer Annibale Bentivogli, avolo del presente Messer Annibale, che era
principe di Bologna, sendo da Canneschi, che li coniurorno contro, ammazzato, n rimanendo di lui altri
che messer Giovanni, quale era in fasce, subito dopo tale omicidio si lev il populo et ammazz
tutti e Canneschi (XIX: 271).
1842: Los Canneschi hicieron una conspiracion contra el prncipe de Bolonia, Anbal Bentivogli, al cual
asesinaron; mas qued un hijo suyo llamado Juan, que aun estaba en paales; el pueblo se levant
despus del homicidio y mat a todos los Canneschi (XIX: 114).
INGLESE, 1994: Filopemene, principe degli Achei, intra le altre laude dagli scriptori gli sono date,
che ne tempi della pace non pensava mai se non a modi della guerra []. E proponeva
loro, andando, tutti e casi che in uno exercito possono occorrere: intendeva la opinione loro,
diceva la sua, corroboravala con le ragioni: tale che, per queste continue cogitazioni, non
poteva mai, guidando li exerciti, nascere accidente alcuno che lui non vi avessi el remedio (XIV: 251-
252).
1842: Entre las muchas alabanzas que los escritores tributan Filopomenes, prncipe de los aqueos, es
que en tiempo de paz pensaba siempre en la guerra (...). Y siguiendo su camino les proponia
todos los casos que pueden ocurrir en un ejrcito, escuchaba la opinin de sus amigos, decia
la suya, la corroboraba con razones, de modo que con estas continuas meditaciones, al
guiar los ejrcitos no podia acaecerle ningun accidente al cual no hallase pronto remedio (XIV: 90).
Otras veces, sin embargo, la modificacin consiste en una mera simplificacin del original:
INGLESE, 1994: Discorrendo ora per opposito, le qualit di Comodo, di Severo (...) (XIX:
276).
1842: Al contrario, hallaremos en las calidades de Cmodo, de Severo () (XIX: 120).
Terminamos este apartado dedicado a las traducciones editadas haciendo referencia a los
errores: los escasos errores de comprensin del original que presentan no afectan al
mensaje de Maquiavelo. Sealamos a continuacin un error comn a ambas y que ya
veamos en el ms. 902:
INGLESE, 1994: Noi abbiamo in Italia, in exemplis, el duca di Ferrara, il quale non ha retto
alli assalti de Viniziani nellottantaquattro, n a quelli di papa Iulio nel dieci, per altre cagioni
che per essere antiquato in quello dominio (II, 185).
LISTA, 1821: Tenemos un egemplo de esto dentro de Italia en la persona del duque de
Ferrara, el cual pudo resistir los Venecianos en el ao de 1484, y al papa Julio II en el de
1510, solamente porque era un soberano antiguo en este ducado (II, 2).
1842: Tenemos de ello una prueba en el duque de Ferrara, que logr arrostrar los asaltos de
los venecianos en el ao 1484, y los del papa Julio en el 1510, solo por haberse anticuado en
aquel dominio (II, 3).
4. Conclusin final