EducaciÓn Crisis de La Sociedad Actual
EducaciÓn Crisis de La Sociedad Actual
EducaciÓn Crisis de La Sociedad Actual
Pero tambin, resulta indispensable la transformacin personal de los seres humanos que
/ participan de l. Los profesores debemos ser referencia en este sentido. Qu pasa con el
proyecto de vida del profesor? En qu est aquel profesor recin titulado, lleno de ideas
nuevas que quera implementar con sus alumnos, para ayudar a formar mejores personas?
Las condiciones descritas han llevado a muchos docentes a anestesiar su talento y sus
inquietudes de genuino educador ya que no se vislumbran perspectivas para poder cambiar
el sistema .educativo imperante. Aunque suene duro, nos parece que estamos en presencia
de un sisl~ma educacional en creciente deshumanizacin. Obtener una buena calificacin es
ms importante que aprender; temer al profesor, ms que respetarlo, cumplir con ciertas
exigencias escolares porque as lo exige el mercado laboral pero no por un genuino objetivo
de desarrollo educativo. Existe una creciente incomunicacin entre alumnos y profesores,
entre colegas, entre profesores y apoderados, etc. El profesor se ha visto obligado a
convertirse en un "domador" ms que en un educador, como su vocacin St:lo seala.
Nos guste o no, tenemos que tomar conciencia que se ha producido un divorcio entre un
modelo de sociedad economicista y la necesidad de una educacin al servicio del
desarrollo humano pleno. Esto hace que todo anuncio de mejora resulte una falacia si no
aborda los temas de fondo, que no son slo un problema de recursos. Tambin es un
problema existencial y de sentido.
, Los educadores de hoy debemos ser la voz y la accin de lo mejor del ser humano, ser
quienes levantemos esperanza y quienes mostremos en la prctica que una nueva y mejor
forma de vivir es posible. En tal sentido es necesario trabajar con ahnco y resolucin por
orientar a la educacin en una direccin humanizad ora y transformadora. Hoy, ms que
nunca, resulta carente de sentido una educacin que reproduzca las bases de un mundo que
desaparece.
Esta necesidad ya ha sido captada por muchos educadores e investigadores que vienen
planteando algunos desarrollos interesantes en esta lnea. Jorge Osorio ha desarrollado
algunas ideas en relacin a las bases para un nuevo paradigma en educacin. Para Osorio la
crisis que vivimos corresponde a un cambio de poca, lo que atribuye al hecho que vivimos
una crisis de nuestra imagen matriz como sefes humanos. Seala la necesidad de
sistematizar una nueva teora del valor humano, no solo como un factor econmico, sino
como una nueva sntesis tico-cultural. Dice:
"No solamente es preciso una nueva educacin, sino tambin una novisima
alfabetizacin tico-cultural que habilite, capacite y haga competente a los seres
humanos en la creacin de nuevos cdigos para las relaciones humanas, para
organizar el poder y la participacin, para resguardar los derechos humanos, para
superar las discriminaciones, para construir sociedades de equidad. Esta debe ser
la estrategia para revertir esa especie de sida cultural y espiritual que
mencionbamos como una de las consecuencias perversas del progreso" (Osorio,.
pagina 9)
Ideas como esta, expresan con claridad la necesidad de abordar las transformaciones en la
educacin en sus aspectos ms esenciales y no simplemente en su "externalidad". En tal
sentido nos parece necesario recalcar la necesidad que tenemos de construir nuevos
conceptos paradigmaticos que nos permitan fundamentar una idea de educacin acorde con
las necesidades de un nuevo milenio que se inicia; esto nos pone en situacin de pensar las
bases de un desarrollo humano no solo para las acuciantes necesidades del hoy, sino
adems que nos entregue las herramientas eficaces y pertinentes para la construccin de
una nueva civilizacin, una civilizacin propia de una cultura mundial izada e
interconectada. El carcter humanizador o deshumanizador que contenga este inevitable
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proceso transformador depender en mucho de lo que hagamos hoy. De ah la importancia
que adquiere la construccin de este nuevo paradigma educativo.
Por mucho tiempo ha existido en el mundo de la educacin, una discusin entre quienes
ven que la instruccin es la finalidad principal de la educacin, es decir que debera poner
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su ocupacin principal en entregar la informacin y los datos esenciales para que las
personas puedan incorporarse con eficacia en el mundo productivo; segn ellos la
educacin "perdera tiempo y recursos" al pretender desarrollar integralmente las
capacidades de las personas; por otra parte, otra visin plantea la necesidad de que la
educacin asuma una finalidad de formacin, aportando una visin de mayor amplitud y
con una concepcin de integralidad; y as entonces hemos asistido por mucho tiempo a esta
discusin entre "instructores" y "formadores" y en donde pareciera que los segundos se
acercaran a una visin ms humana de la educacin; ciertamente estaramos mas cercanos
a estos ltimos que a los primeros. Sin embargo es necesario hacer notar que en el concepto
de "formacin" contina implcita la idea de pasividad del alumno ya que alguien le "dara
forma" desde afuera; nos parccc que all sigue vigente el viejo paradigma que ve; al
estudiante como conciencia pasiva o simple reflejo de estmulos provenientes del medio.
La actual educacin concibe al ser humano como un ser racional, atribuyendo a la funcin
intelectual mayor preponderancia por sobre las funciones emotivas y matrices.
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su ocupacin principal en entregar la informacin y los datos esenciales para que las
personas puedan incorporarse con eficacia en el mundo productivo; segn ellos la
educacin "perdera tiempo y recursos" al pretender desarrollar integralmente las
capacidades de las personas; por otra parte, otra visin plantea la necesidad de que la
educacin asuma una finalidad de formacin, aportando una visin de mayor amplitud y
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acercaran a una visin ms humana de la educacin; ciertamente estaramos mas cercanos
a estos ltimos que a los primeros. Sin embargo es necesario hacer notar que en el concepto
de "formacin" contina implcita la idea de pasividad del alumno ya que alguien le "dara
forma" desde afuera; nos parece que all sigue vigente el viejo paradigma qu~ ve:=al
estudiante como conciencia pasiva o simple reflejo de estmulos provenientes del medio.
La actual educacin concibe al ser humano como un ser racional, atribuyendo a la funcin
intelectual mayor preponderancia por sobre las funciones emotivas y motrices.
"Es la emocin (dominio de accionf!S) desde donde se realiza o se recibe un hacer, lo que da
a ese hacer su carcter como una accin (agresin, caricia, huida) u otra. Por esto nosotros
decimos: si quieres conocer la emocin mira la accin, y si quieres conocer la accin mira la
emocin" (Maturanay Verden-Zoller. "Amor y juego")
El emocionar es una particular forma de estar en el mundo; esto quiere decir que la postura
corporal, la lnea de pensamiento y el actuar est determinado por el estado emotivo del
individuo; se transita por distintos estados emotivos. Lo esencial de esta idea es que el
emocionar determina un cierto dominio de acciones y no otro.
Ningn acto humano se sustrae de un tamiz emotivo que le acompaa. Cuando se piensa, se
conoce, se habla, se danza, se juega, etc., siempre se hace desde un particular modo
emotivo de estar en el mundo. De ah entonces que una verdadera educacin no puede
considerar como central slo lo racional y lo intelectual, y como algo secundario lo emotivo
y lo motriz. La educacin de la separatividad, que bloquea la expresin emotiva, produce
en el hecho una suerte de "castracin" que va inhibiendo este fundamental aspecto que hace
a lo propiamente humano.
En tal sentido afirmamos que una educacin que apunte a una habilitacin integral de las
capacidades del individuo posibilita el mximo desarrollo cognitivo y en consecuencia
mental. Slo la educacin que integre lo cognitivo, lo emotivo y lo motriz despliega el
mximo potencial de cada persona.
"Gran parte del sistema educativo est diseado para cumplir con ese objetivo, si piensas en
ello,' est diseado para la obediencia y la pasividad, para impedir que las personas sean
independientes y creativas" (en "La Sociedad Global")
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Creemos que aqu cabe la reflexin acaso miles de aos de evolucin del ser humano han
servido para culminar en una educacin que forme slo "productores y consumidores"?
somos los educadores meros entes funcionales a una concepcin economicista de la
sociedad? Pensamos que los educadores estamos en esta funcin por motivaciones de
mayor profundidad y sentido, y tambin creemos que lleg el momento de transformar esta
situacin, construyendo la educacin que nosotros aspiramos para el siglo XXI.
En sntesis una educacin integra, integral e integradora. Una educacin que nos
permita reencontrar la nostlgica unidad perdida entre e( mundo externo y la riqusima
interioridad del ser humano.
1:
4- Relaciones de coherencia versus relaciones de autoritarismo. discriminacin
violencia
Para el Nuevo Humanismo el ser humano se orienta hacia la felicidad y se aleja de lo que
le produce dolor. El ser humano aspira a su realizacin personal. Por ser un sujeto social y
gregario encuentra su sentido en la relacin con los otros. Esa relacin es plena cuando se
asume con una actitud activa, es decir se acta con reciprocidad en trminos de entregar a
otros lo que de ellos se ha recibido. En el tema de las relaciones pedaggicas afirmamos la
igualdad de todos los seres humanos que se relacionan en la prctica educativa.
Estamos ciertos que ello implica una alta exigencia tica y moral para el docente, ms que
en lo conceptual, en lo que hace a su actitud de vida prctica, pero nos parece que tal
exigencia es pertinente, dada la magnitud de la tarea y de las responsabilidades que implica.
Estos principios y valores no son algo solo para declamar o formular tericamente. Deben
ser por sobre todo, una actitud que todo el sistema educacional ponga en prctica, de
manera tal que opere como modelo para el nio y joven, porque lo ve aplicado, no porque
lo escucha en un discurso.
Hablamos entonces de una nueva coherencia y tica personal y social. Entendemos por
tica lo que tiene que ver con la preocupacin por las consecuencias de las propias acciones
sobre otro y que desde la escuela debera emanar para influir todo el quehacer social.
Planteamos la real participacin de los nios y jvenes en los objetivos, gestin y ejecucin
de todas las acciones educativas. Desde la perspectiva de que el alumno tiene conciencia
activa es que planteamos una gestin educativa que promueva una verdadera relacin
dialgica entre los actores, una comunicacin directa con nios, jvenes y padres.
Si los problemas medulares de la educacin nos afectan tanto, debera ser posible ponemos
de acuerdo y construir en conjunto una prctica educativa humanizadora e integradora
"Pocas veces a lo largo de la historia fue tan urgente la apuesta por una educaci6n
verdaderamente comprometida con valores de democracia, solidaridad y crtica, si se quiere
ayudar a los ciudadanos y ciudadanas a hacer frente a esas polticas de flexibilidad,
de.\'centralizaci6n, y autonoma que se estn propugnando desde las esferas laborales. Es
preciso formar personas con capacidad de crtica y solidaridad, si no queremos dejarlas
todavla ms indefensas. Mientras tanto van a ser las profesoras, profesores, estudiantes y
colectivos sociales progresistas, convencidos del valor de la educaci6n, quienes pese a toda
clase de obstculos, seguirn abriendo nuevas brechas, desarrollando prcticas educativas
ms democrticas, en las que los chicos y chicas pertenecientes a colectivos sociales no
hegem6nicos no sern discriminados" "Globalizaci6n e inter1isciplinariedad: el curriculum
integrado '').
Nos parece tambin revelador lo que expresa Maturana y Nisis de Rezepka al respecto:
> P
"Pensamos que la tarea de la educaci6n escolar, como un espacio artificial de
convivencia, es permitir y facilitar el crecimiento de los nios como seres
humanos que se respetan a si mismos y a los otros con conciencia social y
eco16gica,de modo que puedan actuar con responsabilidady libertad en la
comunidad a que pertenezcan". Maturana y Nisis de Rezepka "Formaci6n
Humana y Capacitaci6n")
Estamos diciendo, entonces, que la nueva educacin que se requiere, necesita poseer un
sentido de desarrollo humano y transfonnacin social como su finalidad principal,
marginndose entonces de la concepcin reduccionista que la pone al servicio del sistema
de relaciones de poder imperante. Muchos deben empujar en esa direccin, pero somos los
educadores los que jugamos el papel ms importante al dar la orientacin y la referencia en
tal sentido. As, entonces, proponemos el compromiso de la educacin con lo que podemos
denominar VALORES UNIVERSALES.