Casa Colonial Porteña
Casa Colonial Porteña
Casa Colonial Porteña
Como todos los que estamos en el tema sabemos nunca se ha hecho una compilacin
importante de planos de viviendas porteas, siendo el artculo de Torre Revello antes
citado el que ms planos ha presentado. Todos esos planos al igual que la mayora de los
publicados en la bibliografa provienen de la coleccin del Archivo General de la
Nacin[i] y forman parte de los expedientes formados entre 1784 y 1792 por orden del
Virrey Vrtiz, como parte del reordenamiento urbano por l iniciado. Son el resultado
de la obligacin preexistente pero nunca totalmente acatada- de deslindar los terrenos
por un tcnico, construir al frente en los terrenos, y presentar planos para su aceptacin
antes de edificar. Fueron en origen por ms de 100, de los que hemos logrado ver 80 de
ellos an en el Archivo. Es interesante observar que de ese conjunto los textos clsicos
han reproducido solo 29 (el 35 %) mientras que el 65 %, es decir, 54 planos, an
permanecen inditos. De esos 29 planos hay 18 publicados una sola vez, hay 8 que lo
han sido dos veces y slo 3 han sido reproducidos tres veces (el 7 %) y ambos son casas
de 2 y 3 patios.
Por fuera de esos textos es tan reducida la muestra de planos publicados que
prcticamente se incrementa con el plano de la Casa de la Virreina publicado por
Buschiazzo[ii] y reproducido infinidad de veces, otra de Saa y Fara de 1789[iii] y muy
pocas ms. No cabe dudas que como muestrario de planos sobre casas en una ciudad
como Buenos Aires, es por lo menos, insuficiente. Los documentos en cuestin son, o
por lo menos eran, unos 25 ms de los que he podido revisar. Todos son productos de la
Ordenanza del 18 de febrero de 1784 y quienes los juzgaban eran los arquitectos
mayores Pedro Preciado y Juan B. Masella. Esta disposicin fue reconfirmada por el
Intendente General Francisco de Paula Senz el 28 de julio, y el 23 de noviembre fue
determinada la decisin de que no era posible hacer ninguna construccin sin
aprobacin previa. Gracias a esa decisin hoy tenemos este archivo documental nico.
La Domus ya citada, formada por patio y pasillo a la que se podan adicionar locales de
alquiler o casas menores.
La Pequea Domus, para uso de su propietario formado por una sala al frente, zagun y
patio al que abran los ambientes.
Este esquema nos llev a las siguientes dudas: no sabemos en qu medida ese muestreo
es arbitrario, siendo la mayor parte casas construidas en un momento de auge
econmico y de densificacin del permetro del casco colonial, para familias de muy
bajos recursos o con sentido especulativo; no sabemos si all vivan o no sus
propietarios, ni siquiera sabemos con detalle la ubicacin de esas casas en el plano de la
ciudad. Menos an sabemos acerca de las condiciones de vida, de las formas de cocinar,
evacuar desperdicios, nmero de habitantes por cuarto, formas de dormir y de comer,
que son bsicas para comprender el uso de los espacios domsticos. Lgicamente no es
dable suponer que las costumbres relatadas por los viajeros sobre las grandes familias
tradicionales en el centro hayan sido en algo similares a las de los negros libertos de la
periferia. Asimismo el recorte temporal nos lleva a preguntarnos si esa tipologa eran
preexistentes, si era el resultado de cambios o remodelaciones acordes con nuevas ideas
y formas de vida como muchos planos parecen demostrar-, y menos an nos dice cmo
era el resto de las casas de la ciudad.
Si hacemos un anlisis directo de los planos que hemos revisado es necesario primero
dejar de lado 10 de ellos (el 11,90%) por tratarse de simples reformas sin indicar las
dimensiones o la forma de toda la casa; en total manejaremos 74 planos que incluyen
223 viviendas, que asumiendo un mnimo de 5 personas en cada una -lo que es muy
bajo por cierto-, nos da un universo de 1100 personas. Nuestra revisin nos permite
clasificar los planos de la siguiente manera:
Vivienda mnima: se trata de una casa de un nico ambiente o pieza, colocada sobre la
lnea municipal nueva obligacin-, con entrada por la parte de atrs desde el patio o
fondo, y que puede o no tener zagun de acceso desde la calle. La fachada habitual,
ms o menos decorada, presenta una puerta y dos ventanas.
Unidad bsica ampliada: es similar a la anterior pero posee dos o tres habitaciones, un
negocio de esquina u otro espacio diferenciado; son probablemente unin de vivienda-
trabajo y no se aparta, por cierto, del modelo bsico, es decir, de la adicin de unidades
especficas en base al esquema predeterminado.
Casa de patios en serie: es el modelo clsico de hasta tres patios encadenados, rodeados
por cuartos y salas, habitualmente con el comedor separando los patios. De los 8 planos
de este tipo de casas (solo 3,8 % del total) slo tres de ellas (el 1,4 %) son casas de tres
patios.
Si bien no es aceptable aceptar este muestrario de planos en forma directa, ya que no
hay duda de que no son la representacin exacta de la ciudad en esa poca, s es factible
pensar que por lo menos representa el conjunto de obras hechas en la ciudad en esos
aos, y analizarlo como tal. En primer lugar es factible observar que ms del 80 % de la
poblacin para la que se est construyendo vivira en uno a tres ambientes, y que por lo
tanto las casas de patios son slo una minora, quizs significativa por su importancia
social, por su ubicacin central o por sus dimensiones y caractersticas arquitectnicas,
pero no por su cantidad.
Tipos Cantidad
Porcentaje
de vivienda de planos
I
28 13,2 %
II 157 73,6
%
III 20 9,4
%
IV 8 3,8
%
Asimismo se ve que gran parte de las familias vivira en casas mnimas de renta, con
dimensiones que incluso hoy consideraramos reducidas y con un alto grado de
hacinamiento familiar, sin baos y en la oscuridad. Algunos estudios hechos por Miguel
Guern han avanzado sobre el tipo de propietarios y la distribucin en la ciudad de las
viviendas, lo que es de extrema importancia en este nivel del problema[i].
Esto nos lleva a pensar que si la vivienda de un solo cuarto o ambiente era comn en la
ciudad, aunque posiblemente tambin en la periferia para el final del siglo XVIII, el tipo
de vida que se llevaba a cabo all es necesario reconsiderarlo. Sin duda est ms cerca
de lo que habitualmente se concibe como el hbitat rural o semirural, es decir, con una
cocina (en realidad un fogn) al aire libre en el patio-fondo trasero, donde adems se
coma, lavaba la ropa, jugaban los chicos en la tierra, deambulaba algn cerdo y muchas
gallinas. La vida interior deba reducirse al mnimo, en especial al dormir, de una forma
no muy lejana al rancho de la campaa. Es comn ver fotografas de casas hacia 1880
an, donde se trabaja en tareas domsticas y de produccin de escala familiar en patios
y lugares abiertos. Este es un tema antropolgico que debera ser tomado ms en
consideracin y abre lneas importantes para la investigacin en historia urbana.
Otro aspecto hace al crecimiento de la casa: si podemos suponer que hay un proceso de
adicin a partir de un ambiente y un zagun lateral, este sistema sigue la medianera
como apoyo de sus unidades; esto implica un estudio ms profundo de la evolucin de
la parcela urbana, el lote, que en los inicios del siglo XIX posiblemente se
institucionalice en los tradicionales 8,66 metros. Cul es la relacin de ese sistema de
crecimiento con la casa romana si siquiera lo hay?, acaso siquiera exista en la mente
de los pobladores ese modelo como el final del crecimiento de su casa? Al parecer el
sistema bsico propuesto es respetado por lo menos en tres de los cuatro tipos
establecidos, aunque se le hacen variantes al adicionarle un negocio de esquina, por
ejemplo, y la casa de patio slo se diferencia al colocar un comedor u otros ambientes
grandes en sentido perpendicular. Y la relacin entre estos tipos y la casa chorizo es
tambin un tema abierto a consideracin.
Este es otro tema interesante ya que la legislacin en el siglo XVIII tardo insiste en dos
aspectos: la lnea municipal para cerrar la manzana y tener fachadas corridas, y
delimitar los lotes con tapias o pared de cualquier tipo, incluso de cardones o tunas.
Seramos capaces de imaginar manzanas abiertas, sin lmite claro entre una casa y otra,
sin lnea municipal, sin veredas y casi sin calle fsicamente delimitada? Ese sera
posiblemente el aspecto de gran parte de la ciudad en la que la gente podra circular por
adentro de la manzana con bastante libertad, superponiendo redes sociales y de
circulacin diferentes de las fsicamente establecidas por la estructura misma de la
ciudad. Las actas del Cabildo estn llenas de solicitudes para que se liberen calles
ocupadas con casas, cortadas arbitrariamente, o que un vecino ocupaba el terreno de
otro. Es indudable que el proceso iniciado por Vrtiz y completado por Rivadavia
signific un cambio profundo en la imagen fsica de la ciudad al consolidar la manzana,
al dejar claramente diferenciado lo rural de lo urbano.
Podemos cerrar estas notas con una descripcin que nos dej Francisco Millau
en 1772[i] en la que dice que de las 700 cuadras que tena la ciudad es decir unas 175
manzanas-, poco ms de un centenar estn enteramente fabricadas; en otras 300,
aunque se encuentren algunas que igualmente lo estn, en las ms no se unen los
edificios, dejndose ver por ellas muchos verdores y rboles que encubren
graciosamente esa falta. En el espacio que contiene las 300 cuadras restantes, estas estn
unidas de dos a cuatro y hasta ocho o diez juntas, que por varias partes cierran algunas
calles y formas unos grandes recintos cercados de tunas. En esta solo se ven edificios o
casas en alguna esquina. Quizs sea esta una imagen que se acerque ms a la que
hoy tenemos acerca de la ciudad antes del siglo XVIII.
Bibliografa
Buschiazzo, Mario J.
1941 Buenos Aires y Crdoba en 1728 segn cartas de los PP. Gervasoni y
Cattaneo, Buenos Aires
Difrieri, Horacio
1981 Atlas de Buenos Aires, 2 vols., Municipalidad de la Ciudad, Buenos Aires
Domnguez, Manuel A.
1984 Buenos Aires Colonial, Editorial Olimpo, Buenos Aires (hay edicin de
1943)
1969 El trasplante social, en: Historia Social y Cultural del Ro de la Plata 1536-
1810, Tipogrfica Editorial Argentina, Buenos Aires
Guiria, Juan
Guern, Miguel
Korn, Francis
1974 Buenos Aires, los huspedes del 20, Sudamericana, Buenos Aires
Kronfuss, Juan
Millau, Francisco
1929 Sin vestigios indgenas naci nuestra arquitectura, La Nacin , (27 de enero),
Buenos Aires
Schvelzon, Daniel
1990 Hacia una tipologa de la vivienda portea: la casa colonial en el siglo XVIII y su
conformacin, manuscrito, Instituto de Arte Americano, Buenos Aires
[i] La lista de los planos y su descripcin fue publicada por Furlong (1964)
[ii] Buschiazzo, Mario J. (1951), publica ese plano hecho por Ronnow mucho tiempo
antes.
[iii] Gazzaneo y de Paula (1974) presentan una planta muy interesante que valdra la
pena estudiar con ms detenimiento
[i] Furlong Guillermo (1924), quiz el libro ms importante sobre la arquitectura
colonial publicado por la generacin de pioneros
[ii] Torre Revello, Jos (1945), se basa en su estudio preliminar de 2938 y sigui en el
tema durante muchos aos, incluso repensando sus propias obras.
[iii] Domnguez Manuel, (1948), el mismo artculo fue ampliado en ediciones sucesivas
(1984 y 1985), algunas ideas las haba establecido en 1943
[iv] Buschiazzo, Mario J., public en esos aos una cantidad de trabajos en donde
asume esta postura, adems la difundi en los Anales que diriga y que se inauguraron
precisamente con el artculo de Domnguez, ya citado.
[v] Guiria, Juan (1941), fue un pionero en desarrollar este tema.
[vi] Nadal Mora Vicente (1946 y 1947), aunque no incluye plantas en sus libros.
[vii] Torre Revello (1928)
[viii] Navarro, Jos Gabriel (1938), public ese estudio pionero con el tema de la casa
en el continente en nuestro medio