Taller de Primeros Auxilios
Taller de Primeros Auxilios
Taller de Primeros Auxilios
PRIMEROS AUXILIOS
CURSO:
ESTUDIANTE:
SENA
2018
CARTAGENA BOLÍVAR.
PRIMEROS AUXILIOS
1. Signos vitales
Los signos vitales reflejan funciones esenciales del cuerpo, incluso el ritmo cardíaco,
la frecuencia respiratoria, la temperatura y la presión arterial. Su proveedor de
atención médica puede observar, medir y vigilar sus signos vitales para evaluar su
nivel de funcionamiento físico.
Los signos vitales normales cambian con la edad, el sexo, el peso, la capacidad
para ejercitarse y la salud general.
Los signos vitales son mediciones de las funciones más básicas del cuerpo. Los
cuatro signos vitales principales que monitorizan de forma rutinaria los profesionales
médicos y proveedores de atención médica son los siguientes:
Los signos vitales son útiles para detectar o monitorizar problemas de salud. Los
signos vitales se pueden medir en un instituto médico, en casa, durante una
emergencia médica o en cualquier otro lugar.
¿Qué es el pulso?
El pulso normal de los adultos sanos oscila entre los 60 y 100 latidos por minuto. El
pulso puede fluctuar y aumentar con el ejercicio, las enfermedades, las lesiones y
las emociones. Las mujeres mayores de 12 años, en general, tienden a tener el
pulso más rápido que los hombres. Los deportistas, como los corredores, que
practican mucho ejercicio cardiovascular, pueden tener frecuencias cardíacas de
hasta 40 latidos por minuto sin presentar problemas de ningún tipo.
Cuando el corazón impulsa la sangre a través de las arterias, notará sus latidos
presionando con firmeza en las arterias, que se encuentran cerca de la superficie
de la piel en ciertos lugares del cuerpo. El pulso se puede sentir en la parte lateral
del cuello, en la parte interior del codo o en la muñeca. Para la mayoría de las
personas lo más sencillo es tomarse el pulso en la muñeca. Si utiliza la parte inferior
del cuello, asegúrese de no presionar demasiado y nunca presione sobre ambos
lados del cuello al mismo tiempo para no bloquear el flujo de sangre al cerebro.
Cuando se tome el pulso:
Con las yemas de los dedos índice y medio, presione suavemente pero con
firmeza sobre las arterias hasta que sienta el pulso;
Comience a contar las pulsaciones cuando el segundero del reloj marque las
12;
Cuente el pulso durante 60 segundos (o durante 15 segundos y después
multiplíquelo por cuatro para calcular los latidos por minuto);
Al contar, no mire el reloj continuamente, más bien concéntrese en las
pulsaciones;
Si no está seguro de los resultados, pídale a otra persona que cuente por
usted.
Si su médico le indicó que se controle el pulso y tiene dificultades para
hallarlo, consulte a su médico o enfermera para obtener indicaciones
adicionales.
Las pautas del NHLBI ahora definen a la presión sanguínea normal de la siguiente
manera:
Estos números deben usarse únicamente como guía. Una única medición elevada
de presión sanguínea no necesariamente indica un problema. Su médico deseará
ver varias mediciones de presión sanguínea durante varios días o semanas para
poder llegar a un diagnóstico de hipertensión (presión sanguínea alta) e iniciar un
tratamiento. Una persona que habitualmente presenta una presión sanguínea
inferior a la normal puede considerarse hipertensa con mediciones de presión de
menos de 140/190.
Es necesario contar con una dotación adecuada de elementos para prestar los
primeros auxilios en caso de presentarse una emergencia por caída en alturas. A
continuación se definen de forma general los elementos necesarios para atender la
emergencia. Camilla plástica en polietileno de alta densidad, impermeable a todos
los fluidos, de fácil manejo, con arnés tipo araña con refractivos.
Elija una bolsa o maletín para llevar los artículos sanitarios que sea espacioso,
resistente, fácil de trasportar y de fácil apertura. Las cajas de plástico duro con asas
o los recipientes que se utilizan para guardar materiales de artes plásticas son
ideales, porque son ligeros, tienen asas y son muy espaciosos.
Una hemorragia se produce cuando la sangre brota de los vasos sanguíneos como
consecuencia de una lesión. Si la sangre se vuelca hacia el exterior del organismo,
estamos ante una hemorragia externa. Las más frecuentes ocurren en los miembros
superiores o inferiores.
¿Cómo se clasifican las Hemorragias?
Según el lugar al que va la sangre que se pierde, las hemorragias se clasifican en:
Externas
Internas
Exteriorizadas
Para este tipo de vendaje se indican las vendas de rollo (en general, de algodón) de
distintos anchos, dependiendo de la zona que se deba vendar; las angostas sirven
para las manos y las muñecas; las medianas, para los brazos y los tobillos; las
anchas, para las piernas.
Las principales técnicas de vendaje aplicadas en estos casos son las siguientes:
Vendaje Circular
Vendaje en espiral
Se usa para vendar los dedos, los brazos, las piernas. El vendaje se debe realizar
desde la parte distal (la más alejada del corazón) hacia la proximal (las mas cercana)
, colocando la venda en posición ligeramente oblicua.
Utilizar vendas del tamaño adecuado, según la zona que se deba vendar.
Colocar el vendaje sobre el apósito
Sujetar la parte enrollada de la venda con una mano la libre con la otra
Vendar de izquierda a derecha
Superponer por completo las primeras dos vueltas de venda, a fin de
asegurar bien el vendaje
Mantener la misma presión durante la aplicación del vendaje, de modo que
la tensión resultante sea homogénea.
Sujetar una vez que se termine de vendar, el extremos de la venda con un
alfiler de gancho, con tela adhesiva o con la misma venda, cortándola al
medio en su extremo y anudándola luego de dar un par de vueltas
Hay síntomas que pueden hacernos sospechar que se produjo una hemorragia en
un órgano interno, aunque muchas veces esos síntomas aparecen de manera
tardía. La existencia de síntomas depende de la cantidad de sangre que se pierda.
Palidez
Sudoración fría
Pulso rápido y débil
Dificultad para respirar
Pérdida del conocimiento
Somnolencia
Incoherencia
Hipotensión
Debilidad
Causas renales
1 Traumáticas. Contusiones, heridas o cálculos renales.
2 Tóxicas. Anticoagulantes, antibióticos.
3 Infecciosas. Infección renal.
4 Neoplásticas. Carcinoma.
5 Intrínsecas. Patología renal.
Hemorragias anales
6. Asfixia
7. Rcp