Historia Clinica Cuba
Historia Clinica Cuba
Historia Clinica Cuba
GENERALIDADES
Aprender a entrevistar.
Es por ello, que para el aprendizaje de la confección de historias clínicas, recomendamos el estudio
teórico, simultáneo a la práctica sistemática.
La historia clínica puede presentarse en dos tipos de formato: en formato escrito o en formato
electrónico. Aunque el objeto de este manual, es la confección del documento escrito, se
brindarán algunos elementos sobre la historia clínica en formato electrónico.
La historia clínica informatizada, ahorra tiempo y permite trabajar en red, pero es más costosa y si
no existe una seguridad informática adecuada, se pierde uno de sus aspectos éticos
fundamentales: el carácter confidencial, que se fundamenta en el derecho que tienen las
personas a la intimidad y a la reserva de toda la información relacionada con su salud.
La influencia del contexto clínico en el paciente es muy difícil de captar sólo con el manejo de
bases de datos. Además, todos los programas tienen sus limitaciones y es reconocido que la
informatización de la historia clínica, es una de las asignaturas pendientes de la informática
médica como disciplina.
Historia clínica Hipocrática: orientada según el origen de las afecciones, sus antecedentes,
enfermedad actual y exploración. Suele utilizarse en el ámbito académico y es la que
preconiza en esta Guía.
Historia clínica orientada según el tiempo: adecuada para determinados servicios, como
por ejemplo el de urgencias, donde se da mayor relevancia al último acontecimiento
destacable.
b. Orden de ingreso.
i. Historia psicosocial.
j. Discusión diagnóstica.
t. Hojas de evolución.
v. Hoja de egreso.
El interrogatorio, o anamnesis (que quiere decir volver al recuerdo) se divide en: anamnesis
próxima y anamnesis remota; la primera, comprende el motivo de consulta y la historia de la
enfermedad actual, mientras que la segunda, incluye el resto del interrogatorio.
El interrogatorio se basa en las técnicas de la entrevista médica y es requisito indispensable
establecer una relación médico- paciente satisfactoria.
La entrevista médica es una forma especial de comunicación humana, con dos polos
fundamentales: el enfermo que solicita ayuda y el médico que trata de obtener datos confiables,
para establecer un diagnóstico y buscar solución a los problemas del paciente.
Aspectos que deben tomarse en cuenta durante la entrevista:
Respeto: ser transparente y honesto, preservando los puntos de vista del enfermo.
Tranquilidad inteligente: habilidad para escuchar y observar con un sentido perfecto del
tiempo y una tranquilidad que a la vez que está alerta, es pacificadora.
Los datos de identidad personal comprenden: nombre y apellidos, edad, sexo, color de la piel,
estado civil, procedencia y ocupación. Algunos de estos datos, pueden intervenir en el diagnóstico
de muchas enfermedades, cuyas características y frecuencia varían según la edad, sexo, raza y
zonas geográficas. El dato de la ocupación, tiene un valor diagnóstico singular, ya que existen
ocupaciones que incrementan el riesgo de padecer ciertas afecciones así mismo puede hablarse
de enfermedades profesionales, como el saturnismo, en los que trabajan con plomo, bagazosis en
los trabajadores del bagazo, entre otras. También existen enfermedades, que incapacitan a la
persona para desarrollar determinadas profesiones, por ejemplo: los epilépticos, no deben ser
choferes, ni trabajar en alturas.
Dentro del método clínico, fijar el motivo de consulta, o ingreso, constituye la formulación del
problema. Este se refiere a las dolencias principales del enfermo y consiste en la anotación breve
de los síntomas, que lo hacen acudir o consultar al médico; es importante reflejar en la historia
clínica, lo que dice exactamente el paciente, o sea, sus propias palabras. Ej.: “dolor de cabeza”,
“falta de aire”, “fiebre”, “vómitos”, “dolor en la boca del estómago”, “expulsión de sangre por la
boca”, etc.
No deben incluirse diagnósticos, ni la interpretación de los síntomas por el enfermo, evitando
términos como “cifras tensionales elevadas”, “glicemia alta”, “ictericia”, “diabetes”, “Estoy
intoxicado”, etc.
2. 4. Historia de la enfermedad actual
No es más que la ampliación del motivo de consulta, o ingreso, pues incluye datos acerca de los
síntomas que presenta el enfermo en el momento actual, o que lo han traído a la consulta, así
como su comportamiento y evolución hasta el encuentro con el facultativo. La anotación de esta
información, de forma cuidadosa y ordenada, se denomina cronopatograma.
Puede emplearse la siguiente técnica:
Determinar si en el curso de la
enfermedad, el paciente ha acudido a
algún médico, ha recibido alguna
indicación, o tratamiento y qué efectos
han tenido los mismos.
2. 5 Anamnesis remota
Traumatismos: Se refiere a traumas físicos intensos, en los que el paciente haya sufrido fracturas
óseas, pérdida del conocimiento, o haya necesitado hospitalización. Algunos traumas importantes
resultan olvidados y pueden acarrear consecuencias un tiempo después de ocurridos, tal es el caso
del hematoma subdural crónico, la epilepsia postraumática, la cefalea postraumática, etc.
Hábitos tóxicos: Aquí se trata de cuantificar el hábito y el tiempo de consumo. Puede lograrse a
través de preguntas como las siguientes:
¿Usted fuma?, ¿Qué fuma? (cigarrillos, tabaco, pipa), ¿Cuántos cigarrillos, tabacos, o
pipas fuma al día? ; ¿Desde cuándo fuma?
¿Usted bebe?, ¿Qué acostumbra a beber? (bebida fuerte, cerveza, vino, aguardiente
casero); ¿Con qué frecuencia bebe?; ¿Qué cantidad bebe cuando lo hace?.
Aparato respiratorio:
Aparato cardiovascular:
Dolor torácico: Se indagará sobre las mismas características, referidas para el aparato respiratorio.
Entre las variedades principales de dolor torácico, según su origen, se encuentran: dolor de origen
respiratorio, dolor de origen cardiovascular, dolor de origen musculoesquelético, dolor de origen
gastrointestinal y dolor de tipo psicógeno. El siguiente cuadro describe algunas de sus
características:
Síncope: Pérdida de la conciencia y del tono postural con caída al suelo y recuperación tras un
breve intervalo de tiempo. Condiciones de aparición (esfuerzo, posición de pie, defecación,
micción). Síntomas previos (sensación de miedo, palidez, náuseas, sudoración). Recuperación.
Cianosis: Coloración azulada de la piel y las mucosas. ¿Se ha puesto “morado” alguna vez?
Aparato Digestivo:
Diarreas: Número, cantidad, consistencia de las heces, color, presencia de pus, sangre o flemas,
síntomas acompañantes (cólicos, pujos, tenesmo).
Disfagia: Dificultad para tragar (atoro). “¿En qué lugar siente el atoro?” , “¿Cuándo comenzó?”,
“¿Sucede cuando ingiere sólidos, líquidos, o ambos?”, ¿Cómo se alivia?. Síntomas acompañantes
(dolor, pirosis, regurgitaciones, sialorrea).
Pirosis: Sensación quemante retroesternal, cómo ácido que sube del epigastrio a la garganta.
Sistema genitourinario:
Dolor: Sordo, o tipo cólico, localización, intensidad, irradiación, condiciones de aparición, alivio,
síntomas acompañantes.
Nicturia: La cantidad de orina eliminada por la noche, es mayor que por el día. “¿Cuántas veces se
levanta por la noche a orinar?”.
Retención urinaria: El paciente no puede orinar, por una obstrucción a la salida de la orina. “¿Se
ha “cerrado” alguna vez para orinar?”.
Sistema ginecológico:
Menopausia: Fecha de la última menstruación (“¿A qué edad tuvo su última menstruación?”)
Leucorrea: flujo (Preguntar por la cantidad, color, olor, síntomas acompañantes: dolor, prurito,
etc.)
Sistema hemolinfopoyético:
Adenopatías: “¿Ha notado algún aumento de tamaño de sus ganglios (“glándulas”, “peloticas”,
“abultamientos”)?”
Sistema nervioso:
Cefalea: Localización, intensidad, periodicidad, irradiación, calidad del dolor (pulsátil, opresivo,
punzante, “en casquete”, etc.), modo de comienzo, factores desencadenantes, modo de alivio,
síntomas acompañantes (visuales, vómitos, etc.). Como la cefalea es un síntoma extremadamente
común, ofrecemos un cuadro con las características de los principales tipos de ésta.
Convulsiones: Precisar si las crisis son focales, o generalizadas, si existen síntomas prodrómicos, o
iniciales (aura), frecuencia de las crisis, descripción del ataque, duración y recuperación,
mordedura de lengua, traumas, relajación de esfínteres, estado postictal. Como en muchas
ocasiones el enfermo pierde la conciencia, es necesario interrogar a las personas que observaron
la crisis.
Otros datos:
1. Caracterización socioeconómica:
Edad
Sexo
Escolaridad
No. de hijos
Convivencia familiar
Ocupación. Si es jubilado, “¿Qué tipo de trabajo realizaba?”. Tiempo que lleva jubilado. Motivo de
la jubilación.
Si es ama de casa, “¿Trabajó alguna vez?”, “¿Qué tipo de trabajo realizaba?”; motivo por el que
abandonó el trabajo.
Sexualidad: satisfecha o no, ¿problemas?.
Religión.
Valoración de la enfermedad:
Es la exploración del enfermo, mediante maniobras en las que se utilizan los órganos de los
sentidos del explorador (inspección, palpación, percusión y auscultación), e instrumentos sencillos
como el estetoscopio, el esfigmomanómetro, el martillo percutor, el diapazón, linterna,
termómetro, cinta métrica, pesa y tallímetro.
Se divide en:
Comprende los siguientes aspectos: hábito externo, deambulación, marcha, actitud en el lecho y
de pie, fascies, piel, mucosas y faneras, examen del tejido celular subcutáneo, del panículo
adiposo, del sistema osteomioarticular (SOMA), peso, talla y temperatura.
Faneras: Pelo: cantidad, distribución, implantación, calidad, color, largo, grosor, resistencia. Uñas:
forma, aspecto, resistencia, crecimiento y color; recordar que existen uñas patológicas (en vidrio
de reloj, en cuchara, uñas de Terry, etc.).
Tejido celular subcutáneo: Determinar si está infiltrado, o no, por edema, mixedema, o enfisema
subcutáneo. Las características de estas alteraciones, deben determinarse mediante la inspección
y la palpación: distribución, color, temperatura, sensibilidad y consistencia.
Panículo adiposo: Estará disminuido, o aumentado según el paciente (delgado, u obeso). Observar
si existe alguna disposición anormal de la grasa (giba de búfalo, obesidad fasciotroncular,
lipomatosis, lipodistrofia).
Examen del SOMA:
Músculos: Inspección: volumen muscular, atrofias, tumoraciones, simetría, forma y movimiento.
Palpación: dolor, consistencia, motilidad activa y pasiva.
Huesos: Inspección: comparación de un lado con otro, para determinar la presencia de
deformidades y alteraciones viciosas. Palpación: comprobación de presencia de deformidades,
aumento de volumen, medición del largo.
Articulaciones y tejidos periarticulares: Inspección: precisar aumento de volumen, deformidad,
cambios de coloración, grado de flexión y extensión, desviaciones articulares en uno, u otro
sentido. Es muy importante la inspección de las manos (la carta de presentación del artrítico), en
busca de nódulos de Bouchard, de Heberden, tofos, desviación cubital de los dedos, dedos en
huso, signo del embudo, dedos en cuello de cisne, etc. Palpación: comparación de las
articulaciones para precisar cambio de temperatura, consistencia gomosa (engrosamiento
sinovial), o fluctuante (derrame sinovial). Se realizarán maniobras de exploración articular, como
flexión, extensión, abducción y adducción, para determinar limitación de los movimientos, o dolor.
En dependencia del cuadro clínico del enfermo, se pueden realizar maniobras específicas como:
maniobra de Fabere, Lasegue, Bragard, Trendelemburg, peloteo de la rótula, meniscos, ligamentos
laterales de la rodilla, etc.
Peso: expresado en kilogramos.
Talla: expresada en centímetros.
Temperatura: puede ser tomada en la boca, axila, o recto y se expresa en grados Celsius.
Cuello
Tórax
Abdomen
Extremidades
Columna vertebral.
Cabeza
Cráneo: Tamaño (normocefálico, macrocefálico, microcefálico), índice cefálico (dolicocefálico,
braquicefálico, normocefálico), altura (hipsicefálico o turricefálico, platicefálico, normocefálico).
Cara: Implantación de los cabellos en la frente (normal, baja, alta, con entradas), surcos y trofismo
de la frente, mejillas, mentón, ojos (color, pupilas, iris, conjuntivas, córnea, exoftalmos,
estrabismo, arco senil, cataratas, etc.), pestañas, cejas, nariz (aspecto, forma tamaño) y orejas
(implantación, tamaño, conducto auditivo externo).
Cuello
Inspección: Forma y tamaño (ancho/corto; delgado/largo), desviaciones (tortícolis), latidos
visibles, distensión venosa yugular (explorar si existe reflujo hepatoyugular), aumento de volumen
localizado (tumores, bocio, adenopatías, etc.) y movimientos (flexión, extensión, lateralización y
rotación).
Palpación: Explorar cadenas ganglionares en busca de adenopatías (preauriculares,
retroauriculares, occipitales, submentonianas, submaxilares, carotídeas, laterales del cuello,
supraclaviculares), tiroides y pulsos carotídeos (presencia, o ausencia, simetría, intensidad).
Auscultación: Identificar presencia de soplos en regiones carotídeas, supraclaviculares, o en región
tiroidea.
Tórax
Tipo normal, o patológico (tísico, enfisematoso, infundibuliforme, cifoescoliótico, piriforme,
coniodeo, etc.). Deformidades unilaterales (dilataciones o retracciones). Es muy importante la
exploración de las mamas en la mujer (inspección, palpación).
Abdomen
Inspección: alteraciones de la piel, alteraciones del volumen (prominente, plano, excavado,
aumento localizado, o asimétrico), movimientos abdominales en relación con la respiración,
movimientos peristálticos visibles y latidos aórticos visibles.
Palpación: Primero se palpa la pared abdominal (palpación superficial), para determinar sus
características: flaccidez, o contractura, grosor, abovedamientos localizados (tumores, quistes,
lipomas), signo de Godet, sensibilidad (dolor), exploración de la región umbilical, inguinal y línea
media (hacer que el paciente puje para detectar hernias). A continuación se realiza la palpación
visceral (profunda), que puede ser monomanual, o bimanual, para detectar la presencia de dolor,
tumoraciones, o visceromegalia. Al palpar una tumoración abdominal, o visceromegalia, deben
precisarse las siguientes características: forma, tamaño, localización, consistencia, profundidad,
carácter de la superficie, presencia de latidos, relación con los movimientos respiratorios y
órganos vecinos, así como la presencia, o ausencia de dolor.
Percusión: Determinar si existe hiper, o hipotimpanismo, matidez, matidez de declive, o
desaparición de la zona de submatidez hepática, etc.
Auscultación: Identificar la presencia de ruidos hidroaéreos (normales, aumentados, disminuidos,
o ausentes).
Combinación de palpación y percusión: Maniobra de Tarral (onda líquida) para determinar la
presencia de ascitis.
Extremidades
Sus principales aspectos ya han sido abordados, en el epígrafe referido a la exploración del SOMA.
Aquí es necesario consignar si están simétricas, si no hay acortamientos, amputaciones, o
alargamientos.
Columna vertebral
Determinar la presencia de cifosis, lordosis, escoliosis, cifoescioliosis, palpación de las apófisis
espinosas en busca de dolor y de los puntos entre dos apófisis espinosas (a 2 cms a ambos lados
de la línea media). Realizar las maniobras específicas para columna vertebral, indicadas para el
SOMA.
Aparato respiratorio
Inspección: Frecuencia respiratoria. Movimientos respiratorios. Expansibilidad torácica. Ritmo
respiratorio (describir tipo). Presencia de tiraje, abovedamientos y retracciones.
Palpación: Expansibilidad torácica y vibraciones vocales (conservadas, aumentadas, disminuidas, o
abolidas).
Percusión: Sonoridad pulmonar (normal, hipersonoridad, timpanismo, submatidez, matidez).
Auscultación: Murmullo vesicular (normal, disminuido, ausente), ruidos adventicios, o estertores,
auscultación de la tos y auscultación de la voz (pectoriloquia, broncofonía).
Aparato cardiovascular
Inspección: Latido de la punta (presencia, o ausencia, localizaciones, modificaciones patológicas,
como latido en escalera, en cúpula de Bard, etc.).
Palpación: Palpar región precordial desde la punta, hasta la base, en diferentes posiciones;
palpación del choque de la punta, región subxifoidea y hueco supraclavicular. Es necesario precisar
vibraciones valvulares palpables, frémito, ritmo de galope diastólico, roce pericárdico y latidos
arteriales, o venosos.
Percusión: Determinar área de submatidez cardiaca y sus alteraciones (disminuida agrandada).
Auscultación: Debe realizarse con el enfermo sentado, en decúbito supino y en decúbito lateral
izquierdo, para determinr los ruidos cardiacos en los focos de auscultación: punta, aórtico,
pulmonar, tricuspídeo y mesocardio. Identificar presencia de ritmo de galope, chasquido de
apertura de la mitral, acentuación, o desdoblamiento de los ruidos, clicks, soplos y arrastres. En el
caso de los soplos, debe precisarse: momento, localización, intensidad, tono, timbre, irradiación y
modificación con diferentes maniobras.
Aparato digestivo
Boca: Examen de los labios, encías (cambios hipertróficos, inflamación, hemorragia, presencia de
pus, absceso, ribete obscuro, etc.). Dientes (presencia de caries, falta de piezas dentarias,
manchas, diente de Hutchinson, supuraciones, absceso apical, etc.). Lengua (coloración, volumen,
atrofia de la mucosa, ulceraciones, tumoraciones, leucoplasia, tipos de lengua patológica: escrotal,
velluda, geográfica, etc.). Bóveda palatina (paladar hendido, ojival, etc.), cara interna de las
mejillas (estomatitis, aftas, signo de Koplick, estado del orificio de salida del conducto de Stenon),
piso bucal (frenillo, orificios de las glándulas sublinguales, venas raninas).
Orofaringe: Examinar velo del paladar, amígdalas y pared posterior de la faringe.
Maniobras y puntos dolorosos abdominales: Punto vesicular (maniobra de Murphy), punto
apendicular, o de Mc Burney, dolor a la descompresión brusca (Blumberg), maniobra de Rovsing
Meltzer, etc.
Hígado: Determinar el borde superior, por percusión y el borde inferior, por palpación, según las
distintas maniobras (acecho, enganche, etc.). De encontrarse una hepatomegalia, describir:
tamaño, consistencia, sensibilidad y si la superficie es lisa, o presenta nodulaciones.
Tacto rectal: El paciente puede estar en posición ginecológica, o genupectoral. Debe precisarse la
existencia de paquetes hemorroidales, el tono del esfínter, tumores palpables y las características
de la próstata (tamaño, consistencia, superficie y sensibilidad).
Aparato genitourinario
Riñones: Maniobras de palpación renal. Se recomienda, con el paciente acostado en decúbito
supino, proyectar la región lumbar hacia delante con una mano, mientras que con la otra colocada
en el abdomen, se trata de prensarlo contra la pared posterior.
Fosas lumbares: Detectar aumento de volumen, cambios inflamatorios, etc. Palpación y percusión
para determinar si son dolorosas, o no.
Puntos pielorrenoureterales (PPRU): Si son dolorosos o no. Se dividen en:
PPRU anteriores: Superior: unión de una línea horizontal que pase por el ombligo, con una
vertical, que pase por el borde externo del músculo recto anterior del abdomen; medio:
unión de la misma vertical, con la línea hilíaca ; inferior: mediante el tacto rectal.
Genitales externos: inspección y palpación a través del tacto rectal (ya descrito) y tacto vaginal
para precisar caracteres de la vagina (forma, posición y tamaño del útero) y las características del
cuello uterino y de los fondos de saco.
Sistema hemolinfopoyético
Examen osteomedular: Palpar los diferentes huesos, en busca de tumoraciones, o dolor
provocado. Percusión del esternón (signo de Dameshek: percusión dolorosa).
Adenopatías: Palpación meticulosa de las regiones ganglionares (retroauriculares, occipitales,
submentonianas, submaxilares, cervicales, supraclaviculares, axilares, epitrocleares, inguinales).
En caso de existir adenopatías, precisar: tamaño, consistencia, sensibilidad, adherencia a planos
profundos, fistulización.
Bazo:
Inspección: Apreciar aumento de volumen del hipocondrio izquierdo (en grandes
esplenomegalias).
Palpación: El paciente en decúbito supino, el médico a la derecha del enfermo, la mano derecha se
coloca sobre el flanco izquierdo, sin presionar demasiado (peligro de rotura esplénica). Se pide al
paciente que respire profundamente: un bazo palpable tropieza con los dedos del explorador.
Maniobra de Schuster: El paciente en decúbito lateral derecho, con la pierna derecha extendida, la
pierna izquierda flexionada y el brazo izquierdo por encima de la cabeza. El examinador al lado
izquierdo del paciente, palpará dicha zona, para determinar si existe o no, hipertrofia del órgano.
Búsqueda de manifestaciones hemorrágicas: petequias, equimosis, várices y hematomas.
Examen neurológico
Somnolencia
Obnubilación
Estupor
Coma
Tiempo
Espacio
Persona: autopsíquica y alopsíquica
Memoria: Puede ser de dos tipos: anterógrada y retrógrada. Los trastornos de la memoria,
que más importancia tienen desde el punto de vista clínico, son las amnesias; éstas
pueden ser:
Totales o parciales
De cálculo
De fijación
Afasias y disfasias
Disartria y anartria
Polilalia, bradilalia, ecolalia
Tipos especiales de voz que se pueden ver en algunas afecciones: voz farfullante, voz escandida,
de pájaro, voz cuchicheada.
Fascie parkinsoniana
Fascie de fumador de pipa
Fascie tetánica (risa sardónica)
Fascie miasténica
Fascie ansiosa
Fascie depresiva
Actitud:
Mediante la inspección y la palpación, serán explorados los diferentes grupos musculares del
cuerpo, precisando: aspecto, consistencia, relieve, contorno aumentado, o disminuido y actitud de
las extremidades, siempre comparando regiones simétricas. También se explora la resistencia de
los músculos, a la manipulación pasiva de los miembros, tronco y cabeza. El tono muscular puede
presentarse: normal, aumentado (hipertonía), o disminuido (hipotonía). Al examinar el tono
muscular, precisamos el trofismo, o estado de nutrición y desarrollo muscular; en ocasiones, es
necesario recurrir a la medición, para identificar una atrofia muscular.
Motilidad
Voluntaria:
Activa: Se le ordena al paciente que realice movimientos con sus diferentes segmentos
corporales: cabeza, cuello, tronco y extremidades.
Pasiva
Involuntaria
Reconocimiento de la presencia de movimientos involuntarios, tales como: tics, temblores, corea,
atetosis, fasciculacioes, mioclonías, convulsiones, etc.
Sensibilidad
Taxia (Coordinación)
Coordinación estática
Signo de Romberg simple: Con el enfermo de pie, se le ordena que permanezca en actitud firme,
con los pies juntos y los ojos cerrados. Normalmente, el paciente permanece de pie, sin presentar
oscilación de su cuerpo (el signo es negativo). Si el enfermo, en lugar de conservar la posición de
equilibrio, oscila y tiende a caer, el signo de Romberg es positivo. En ambos casos, el paciente
debe tener los brazos extendidos lateralmente. Según la dirección de la oscilación, se hablará de
anteropulsión, retropulsión, o lateropulsión.
Signo de Romberg sensibilizado: Se ordena al paciente que se pare con un pie delante del otro, o
levantando una pierna y que toque con el talón la rodilla de la otra pierna. Luego se le ordena
cerrar los ojos; si presenta oscilación y cae, el signo es positivo.
Coordinación dinámica:
Para los miembros superiores: maniobra índice – índice; maniobra índice– nariz; prueba dedo –
dedo.
Para los miembros inferiores: prueba talón – rodilla; prueba talón – punta del pie.
Otras pruebas para explorar la taxia, son la maniobra de las marionetas y la prueba de la
aprehensión de objetos.
Praxia
Movimientos intransitivos: Se le ordena al paciente: escribir sin lápiz, sacar la lengua, saludo
militar.
Movimientos transitivos: Abotonar y desabotonar la camisa, peinarse, encender un cigarro.
Movimientos imitativos: El explorador realiza un gesto y el paciente tiene que imitarlo.
Reflectividad
Pares craneales:
CAPÍTULO 6:
LOS SÍNDROMES
Síndrome de sacrolumbalgia
Concepto: Síndrome resultante del deterioro de los discos intervertebrales, a causa del
envejecimiento, o traumatismos.
Formas de presentación: sacrolumbalgia aguda, sacrolumbalgia crónica y ciatalgia vertebral
común.
Síntomas y signos:
Sacrolumbalgia: Dolor en región lumbar, de intensidad variable, pero habitualmente alta después
de una actividad física y se puede exacerbar con la tos, la defecación, etc.; dificultad para la
deambulación: el enfermo adopta posición antálgica (aplanamiento de la lordosis lumbar y
escoliosis). La duración es variable.
Ciatalgia vertebral común: Dolor unilateral que abarca la extremidad inferior. Presencia de
irritación de la raíz L5; el dolor es posteroexterno en el muslo, externo en la pierna, pasa sobre el
maléolo externo y cruza el dorso del pie, para terminar en los dos primeros dedos. El examen físico
muestra reflejo aquileano normal, con hipoestesia del territorio doloroso, disminución de la fuerza
muscular de los músculos elevadores del pie, peroneos y extensor del dedo gordo; el enfermo
presenta dificultad para mantenerse sobre el talón del lado afectado (signo del talón). Cuando se
trata de una ciática de S1, el dolor es posterior en el muslo y en la pierna, llega al talón y borde
externo del pie, para terminar en los tres últimos dedos. El examen muestra una disminución, o
desaparición del reflejo aquileano, hipoestesia en el territorio doloroso, sobre todo en el borde
externo del pie y en los tres últimos dedos; puede estar disminuida la fuerza muscular de la zona
posterior de la pierna, lo que impide al enfermo ponerse en puntillas (signo de la punta). En ambos
casos (L5 y S1) puede aparecer el signo de Lassegue. Según el tipo de ciática, la presión de la
región paraespinosa de L5, o S1, produce irradiación del dolor hacia la extremidad (signo del
timbre de Seze).
Síndromes bronquiales
Concepto: Disminución del calibre de la luz bronquial, que trae como consecuencia dificultad para
la salida del aire.
Incluye los siguientes síndromes:
Síntomas y signos:
Síndrome de obstrucción bronquial: Si la obstrucción es aguda (cuerpo extraño), el enfermo se
lleva la mano al cuello (signo universal de obstrucción), hay tos paroxística, disnea súbita,
rubicundez y cianosis exagerada. Si la obstrucción es lenta, la tos es menos pertinaz, la disnea
menos intensa y las fascies adquieren un tono azulado (abotagado azul). Inspección: normal, o
disminución de la movilidad respiratoria de la zona afectada. Palpación: estertores roncos y/o
disminución localizada de las vibraciones vocales. Percusión: hipersonoridad del área afectada.
Auscultación: murmullo vesicular normal , o disminuido localmente, estertores secos, o
subcrepitantes.
Síndrome de hiperreactividad bronquial: Disnea de tipo expiratoria, tos seca, o escasa, adherente,
o perlada. Inspección: inspiración corta y expiración larga, ortopnea, tiraje, cianosis, aleteo nasal.
Palpación: disminución de la amplitud del tórax, ronquidos, vibraciones vocales normales, o
disminuidas. Percusión: normal, o hipersonoridad con disminución de la matidez del área
cardiaca. Auscultación: murmullo vesicular disminuido localmente, estertores roncos y sibilantes
diseminados; pueden aparecer subcrepitantes al final de la crisis.
Etiología: Inflamación, obstrucción, broncoespasmo.
Concepto: Lesión del parénquima pulmonar, que produce alteración alveolar, bronquial e
intersticial.
Incluye los siguientes síndromes:
Síndrome enfisematoso
Síntomas y signos:
Síndrome enfisematoso: Disnea mantenida, o a los mínimos esfuerzos, con ortopnea, fascies
rozada (soplado rozado), puede haber fiebre, tos o expectoración. Inspección: tórax en tonel.
Palpación: movimientos expansivos disminuidos, vibraciones vocales disminuidas. Percusión:
hipersonoridad pulmonar, disminución de la matidez del área cardiaca, descenso de las bases
pulmonares. Auscultación: murmullo vesicular disminuido, con expiración prolongada, estertores y
sibilantes, o húmedos cuando se asocia con infecciones.
Síndrome de condensación inflamatoria: Tos seca al comienzo y productiva después, de tipo
purulento, herrumbroso, o hemoptoico, fiebre con escalofríos y dolor en punta de costado.
Inspección: disminución de la respiración del lado afectado. Palpación: movimientos expansivos
disminuidos, vibraciones vocales aumentadas. Percusión: matidez. Auscultación: murmullo
vesicular disminuido, estertores crepitantes y subcrepitantes, soplo tubario, broncofonía
aumentada y pectoriloquia áfona.
Síndrome de condensación atelectásica: Las manifestaciones van a depender de la magnitud de
obstrucción. Puede ser masiva, parcial, o lobar y segmentaria. Inspección: disminución de la
respiración; si es masiva, puede haber retracción del hemitorax, tiraje y disminución de los
espacios intercostales. Palpación: movimientos expansivos disminuidos, vibraciones vocales
disminuidas, o abolidas. Percusión: matidez, puede haber desviación de la matidez del mediastino
hacia el lado afectado. Auscultación: murmullo vesicular abolido con silencio respiratorio,
broncofonía disminuida (no auscultación de la voz).
Síndrome de condensación tumoral: Astenia, anorexia y pérdida de peso. Puede presentar
síntomas y signos de un síndrome parenquimatoso, bronquial, o pleural.
Síndromes pleurales
Síntomas y signos:
Síndrome de interposición líquida: Dolor sordo en punta de costado, a veces de tipo abdominal,
respiración superficial de intensidad variable según modo de instalación y magnitud de la misma,
tos seca molesta y continua; puede haber febrícula, o fiebre. Inspección: normal si derrame
pequeño, abombamiento del tórax, disminución de la expansibilidad torácica. Palpación:
disminución de la expansión, vibraciones vocales abolidas; por encima del derrame, hay aumento
de las vibraciones vocales. Percusión: matidez en forma de parábola (curva de Damoiseau); por
encima del derrame, hay hipersonoridad, o timpanismo, columna vertebral mate. Auscultación:
murmullo vesicular abolido, pectoriloquia áfona, egofonía y murmullo vesicular intenso por
encima del derrame.
Insuficiencia ventilatoria
Insuficiencia difusiva
Insuficiencia en la perfusión
Insuficiencia combinada
Insuficiencia en la perfusión:
Concepto: Es un trastorno funcional en el que el gasto cardiaco, no es suficiente para satisfacer las
necesidades metabólicas del organismo, lo que provoca un fallo en la actividad de bomba del
corazón.
Síntomas y signos:
Por disminución del gasto cardiaco: debilidad, fatiga, laxitud, confusión mental, desorientación,
somnolencia, oliguria diurna y nicturia, pérdida de masa muscular y caquexia, disminución de la
presión arterial media, pulso débil, dicroto, o alternante respiración de Cheyne Stokes, piel fría,
sudorosa y pálida.
Por congestión venosa sistémica: edemas, ascitis, derrame pleural, dolor en hipocondrio derecho,
plenitud, anorexia, náuseas y vómitos, hepatomegalia, ingurgitación yugular, reflujo
hepatoyugular.
Por congestión venosa pulmonar: disnea, estertores crepitantes y sibilantes, tos, expectoración y
cianosis.
Otras: palpitaciones, anormalidades en la localización, amplitud y forma del latido de la punta,
soplos, aparición de tercer y cuarto ruidos cardiacos, ritmo de galope y taquicardia.
Etiología:
Con gasto cardiaco elevado: Beri Beri, fístula arteriovenosa, anemia, hipertiroidismo, enfermedad
de Paget.
Con gasto cardiaco disminuido: Hipertensión arterial, cardioangioesclerosis, infarto del miocardio,
valvulopatías, tromboembolismo pulmonar, miocardiopatías, miocarditis, arritmias, cardiopatías
congénitas, pericarditis constrictiva, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, hipertensión
pulmonar primaria.
Síntomas y signos:
Características comunes:
Localización: retroesternal (puede localizarse en el epigastrio, en el infarto agudo del miocardio.
Irradiación: miembro superior izquierdo, hombro, espalda, cuello, mandíbula.
Intensidad: variable, generalmente elevada.
Carácter: opresivo, compresivo.
Modificación: no se modifica con la tos, movimientos respiratorios, deglución o posición.
Diferencias:
Etiología:
Ateroesclerosis, espasmos arteriales, procesos inflamatorios, grandes dilataciones, o hipertrofias
ventriculares y la valvulopatía aórtica fundamentalmente.
Síndromes valvulares
Estenosis Mitral
Insuficiencia Mitral
Estenosis Aórtica
Insuficiencia Aórtica
Estenosis mitral
Concepto: Estrechez del orificio valvular mitral, que dificulta el paso de la sangre de la aurícula
izquierda, al ventrículo izquierdo durante la diástole.
Síntomas y signos: disnea, hemoptisis, cianosis, palpitaciones, manifestaciones embólicas, otros
síntomas de insuficiencia cardiaca, síntomas compresivos (disfagia, tos seca, disfonía), soplo
(ritmo de Duroziez: arrastre, o retumbe, soplo presistólico, el primer ruido en pistoletazo y el
desdoblamiento del segundo ruido).
Etiología: Causas congénitas y adquiridas, de origen reumático.
Insuficiencia mitral
Concepto: Incapacidad de la válvula para mantener cerrado el orificio auriculoventricular izquierdo
durante la sístole, lo cual trae como consecuencia el reflujo sanguíneo hacia la aurícula y la
consiguiente hipertrofia y dilatación de esa cavidad.
Síntomas y signos: Similares a los de la estenosis mitral, además del soplo holosistólico intenso,
en punta, irradiado a la axila y a la base del pulmón izquierdo.
Etiología: Además de las causas congénitas y reumáticas, se señalan el infarto miocárdico, la
endocarditis bacteriana y la dilatación del ventrículo izquierdo.
Estenosis aórtica
Concepto: Disminución del calibre del orificio valvular aórtico, lo que dificulta el paso de la sangre
del ventrículo izquierdo, a la aorta durante la sístole.
Síntomas y signos: Disnea por esfuerzo, dolor precordial, síncope, muerte súbita, palidez de la
facies, hipertensión arterial diastólica con diferencial reducida, soplo mesosistólico, alargado y
rasposo, más intenso en el foco aórtico, irradiado a los vasos del cuello y frecuentemente con
frémito.
Etiología: Congénita, reumática y arterioesclerótica.
Insuficiencia aórtica
Concepto: Incapacidad de las válvulas sigmoideas para mantener cerrado el orificio aórtico
durante la diástole, lo cual trae como consecuencia el reflujo de sangre, hacia el VI procedente de
la aorta.
Síntomas y signos: Disnea de esfuerzo, o paroxística nocturna, palpitaciones, palidez de la facies,
tensión sistólica elevada y diastólica disminuida, con gran diferencial, pulso duro y saltón, doble
soplo crural (de Duroziez), desplazamiento del latido de la punta, soplo diastólico suave,
aspirativo, en el borde esternal izquierdo; también puede auscultarse un soplo sistólico fuerte (de
acompañamiento), por una estenosis relativa de las valvas, como consecuencia de las
modificaciones ocurridas en la morfología del ventrículo izquierdo.
Etiología: Reumática, sifilítica, endocarditis, ateroesclerosis, hipertensión arterial y aneurisma
disecante de la aorta.
Síndrome de shock
Concepto: Insuficiencia del aparato circulatorio, para conservar el riego y las funciones celulares,
con un deterioro crítico del flujo sanguíneo a órganos y tejidos vitales.
Síntomas y signos:
Etapa I (shock compensado): Los síntomas son sutiles; presencia de hipotensión arterial ligera,
aumento de la frecuencia cardiaca, estrechamiento de la presión del pulso y ansiedad leve.
Etapa II (shock descompensado): Alteraciones del estado mental, disminución de la diuresis,
hipotensión, taquicardia, polipnea, pulso débil, rápido y filiforme, acrocianosis y diaforesis.
Etapa III (shock irreversible): Hipotensión crítica, taquicardia, anuria, coma, polipnea, o bradipnea,
piel fría cianótica.
Etiología:
Shock hipovolémico: hemorragias, deshidratación, quemaduras, peritonitis pancreatitis.
Shock cardiogénico: Infarto miocárdico y sus complicaciones, valvulopatías, miocardiopatías,
taponamiento cardiaco, miocarditis, fármacos depresores del miocardio, arritmias.
Shock obstructivo vascular: embolia pulmonar masiva, neumotórax a tensión, disección aórtica.
Shock distributivo: sepsis, anafilaxia, choque neurógeno, aplastamiento, crisis addisoniana,
hipotiroidismo profundo, fármacos.
Concepto: Cuadro clínico que resulta de una obstrucción completa brusca, o crónica, del flujo
sanguíneo arterial en una extremidad. Pueden distinguirse dentro de este síndrome, la
insuficiencia arterial crónica y la insuficiencia arterial aguda, cada una de ellas con sus propios
síntomas, signos y etiología.
Insuficiencia arterial crónica:
Síntomas y signos: Fatiga, claudicación intermitente, dolor, parestesias, cambios de coloración
(palidez, rubicundez, cianosis), cambios tróficos de la piel, frialdad, gangrena, disminución, o
ausencia de pulsos.
Etiología: Arteriosclerosis obliterante, tromboangiitis obliterante.
Insuficiencia arterial aguda:
Síntomas y signos: Dolor agudo lancinante, parestesias, impotencia funcional, hipostesia, o
anestesia, frialdad brusca, cambios de coloración (palidez, cianosis), taquicardia.
Etiología: Estenosis mitral, fibrilación auricular, otras cardiopatías.
Síndrome de insuficiencia venosa
Várices:
Concepto: Son dilataciones tortuosas y difusas de las venas, dadas por una insuficiencia valvular.
Síntomas y signos: Dilataciones sacciformes y tortuosas de las venas; si las várices son profundas,
hay dolor y fatiga en los músculos de las pantorrillas, que se alivia con el ejercicio y se exacerba
con la posición de pie, o sentado; además hay edema crónico firme e indurado.
Etiología: Aumento mantenido de la presión abdominal, secuelas de flebitis, o trombosis, ausencia
congénita de las válvulas.
Obstrucciones venosas: Tromboflebitis (trombosis consecutiva a la inflamación de la pared) y
Flebotrombosis (derivadas de alteraciones de la coagulación de la sangre y alteraciones hemáticas,
con alteración hemática o sin ella)
Síntomas y signos: Taquicardia, dolor, impotencia funcional del miembro, edema, discreta cianosis,
circulación colateral superficial manifiesta, úlceras postflebíticas.
Etiología: Traumatismos, infecciones, irritación química, inmovilización, encamamiento,
neoplasias, contraceptivos orales, insuficiencia cardiaca, posparto, posoperatorio.
Síndrome pericárdicos
Pericarditis aguda
Pericarditis constrictiva
Taponamiento cardiaco
Pericarditis aguda:
Síntomas y signos: Dolor, o molestia precodial, similar al de la cardiopatía isquémica, disnea,
ortopnea, tos seca, disfonía, o disfagia, fiebre, escalofríos, debilidad, pérdida de peso, ansiedad,
delirio, posición de plegaria mahometana, roce pericárdico (pericarditis seca, o al inicio y final de
una pericarditis con derrame), aumento del área de submatidez cardiaca, ausencia, o disminución
de los latidos cardiacos y tonos apagados.
Pericarditis constrictiva:
Síntomas y signos: Cianosis ligera, o moderada, pulso paradójico en ocasiones, hepatomegalia de
tamaño variable, reflujo hepatoyugular, ascitis, edemas en miembros inferiores, pulsaciones
mínimas (corazón tranquilo) área de submatidez cardiaca pequeña, ruidos distantes y apagados.
Taponamiento cardiaco:
Síntomas y signos: Intranquilidad, palidez cianosis, posición de plegaria mahometana, hipotensión
arterial, hipertensión venosa con ingurgitación yugular, corazón quieto, pulso rápido y débil, en
ocasiones, paradójico, disminución de la intensidad de los ruidos y hepatomegalia con reflujo
hepatoyugular,
Etiología: Bacteriana, micótica, reumática, tuberculosa, urémica, lúpica, neoplásica, traumática,
infarto miocárdico, ruptura de aneurismas.
Síndrome doloroso abdominal
1. Localización
Epigástrico alto (lesiones esofágicas bajas, gástricas altas, lesiones de las coronarias y de la aorta)
Epigástrico medio (lesiones gástricas vecinas al píloro, afecciones hepatovesiculares, pancreáticas,
apendiculares, trastornos psicovegetativos y neurológicos.
Epigástrico bajo (afecciones duodenoyeyunal e ileocecal)
Dolor posterior (úlceras yuxtapilóricas y duodenales, lesiones del páncreas y hernias del hiatus,
afecciones de columna vertebral, traumatismos, tumores lesiones neurológicas)
Hipocondrio derecho (enfermedades hepatobiliares, colitis angular, nefropatías, neuritis, fibrositis,
pancreatopatías de la cabeza, afecciones de pleura y diafragma)
Hipocondrio izquierdo (hernias del hiatus, lesiones del páncreas, úlceras gástricas, afecciones del
riñón, pleura, corazón y bazo)
Flanco derecho (colitis derecha, yeyunoileitis, cólico renal, perivisceritis y neuritis de la región)
Mesogastrio (enfermedades del yeyunitis e ileítis, aortitis, colopatías del transverso, neuralgia
mesentérica, saturnismo, tabes)
Flanco izquierdo (colitis izquierda, patología urinaria)
Fosa ilíaca derecha (apendicitis, tiflitis, ileítis, tuberculosis, tumores del íleon y ciego, afecciones
urinarias, psoítis, anexitis en la mujer)
Hipogastrio (ileítis, sigmoiditis, afecciones de vejiga, próstata y metropatías en la mujer)
Fosa ilíaca izquierda (colitis, sigmoiditis, afecciones genitourinarias, psoítis, neuralgias regionales)
2. Irradiación
Hacia arriba (de tipo anginoso, lesiones bajas del esófago, altas del estómago, yuxtacardiales, del
diafragma y las coronarias)
Hacia la izquierda (de la cola y el cuerpo del páncreas)
Hacia la derecha (afecciones hepatovesiculaes y duodenitis)
Hacia abajo (apendicitis aguda, lesiones ileocecales, úlceras perforadas de estómago, gastritis)
Hacia detrás (úlceras de curvatura menor, duodenales y procesos pancreáticos)
Irradiación universal (perivisceritis de estómago, duodeno, vesícula, tabes dorsal, peritonitis,
pancreatitis)
3. Periodicidad
4. Ritmo/ horario
Dolor con relación pandrial
Post pandrial precoz (gastritis, ptosis de estómago, discinesia cólica)
Post pandrial tardío (úlcera gástrica y duodenal, cólico hepático, tiflitis)
Dolor sin relación pandrial (perivisceritis, tumores, radicuitis)
5. Intensidad
6. Calidad
7. Modo de comienzo
8. Modo de calmarse
Espontáneo (discinesias)
Con alimentos (úlcera péptica)
Con analgésicos (cáncer)
9. Síntomas asociados
Concepto: Expulsión de sangre procedente de una lesión, situada en el tracto digestivo, desde la
boca hasta el ano.
Síntomas y signos: sangramiento digestivo alto (afección desde la boca hasta el ángulo
duodenoyeyunal), que se caracteriza por melena, melenemesis, o enterorragia (si el sangramiento
es masivo, o el tránsito intestinal es acelerado); sangramiento digestivo bajo (afección desde el
ángulo duodenoyeyunal hasta el ano), que se caracteriza por enterorragia. Otros síntomas son
mareos, vértigos, fatiga, palidez cutáneo mucosa, taquicardia, polipnea, signos de shock,
epigastralgia, ardor gástrico, petequias, equimosis, tumor palpable.
Etiología: úlceras, tumores, infecciones, várices, pólipos, divertículos, procesos inflamatorios,
prolapsos mucosos, cuerpos extraños, síndrome de Mallory-
Wiess, hernias del hiatus, ruptura de vasos sanguíneos, hemobilia, ampuloma de Vater, discrasias
sanguíneas, uremia, shock.
Síndrome disentérico
Concepto: Conjunto de síntomas y signos, que expresan la reacción de la mucosa rectal, a distintas
lesiones.
Síntomas y signos: Diarreas mucopiosanguinolentas, pujos, tenesmo rectal, toma del estado
general, anemia, pérdida de peso, anorexia, fiebre, artralgias, tumoración palpable al examen de
abdomen y al tacto rectal, proctalgia.
Etiología: Enfermedades inflamatorias del intestino, colitis por radiaciones, disentería basilar,
colitis inespecífica, colitis amebiana, abuso de supositorios, colitis esquistosomiásica, balantidiasis,
tumores, linfomas, papilitis y criptitis del ano, fístulas anales, afecciones de vejiga y aparato
ginecológico.
Síndrome ictérico
Síndrome ascítico
Síndrome nefrótico
Síndrome nefrítico
Concepto: Manifestaciones clínicas resultantes de una afección del glomérulo, secundaria a una
infección faríngea, o cutánea.
Síntomas y signos: Infección previa de la faringe o de la piel, hematuria, oliguria, edema
periorbitario al inicio, que después se hace generalizado, duro, de difícil godet, dolor abdominal en
los flancos, malestar, febrícula, hipertensión arterial, disnea, taquicardia, hepatomegalia,
Etiología: Estreptococo b hemolítico del grupo A.
Concepto: Proceso patológico resultante de la invasión y colonización de los tejidos del tracto
urinario.
Síntomas y signos:
Infección urinaria alta: fiebre elevada con escalofríos, toma del estado general, dolor lumbar
unilateral, o bilateral, que irradia hacia delante, orinas turbias, cefalea, vómitos, maniobra de
puño, percusión dolorosa, puntos pielorrenoureterales positivos, riñón palpable, pulso acelerado.
Infección urinaria baja: orinas turbias, poliaquiuria, micción imperiosa, ardor terminal, piuria,
hematuria, malestar, irritabilidad, uretra dolorosa, leucorrea, vaginitis, aumento de tamaño de la
próstata.
Etiología: Bacterias (E. coli, Pseudomonas, Klebsiella, Proteus), hongos.
Síndrome anémico
Concepto: conjunto de síntomas y signos, determinados por una disminución de las cifras de
hemoglobina.
Síntomas y signos: Palidez cutáneo mucosa, astenia, disnea, cefalea, vértigos, lipotimias,
inestabilidad, inquietud, somnolencia, insomnio, zumbido en los oídos, pica, glositis, presencia de
soplos, trastornos de la sensibilidad, adenopatías, esplenomegalia, hemorragias.
Etiología: Trastornos en la célula madre, trastornos en la síntesis de ADN, trastornos en la síntesis
del hem, en la síntesis de globina, en la síntesis enzimática, en la interferencia externa en las
funciones de la médula, y en la supervivencia de los hematíes.
Concepto: Son aquellos procesos, en que la sangre se escapa del sistema vascular sin causa
aparente, o existe desproporción entre la causa y la intensidad del sangramiento. Puede ser por
trastornos primarios (vasculares y plaquetarios), o secundarios (mecanismos plamáticos de la
coagulación).
Síntomas y signos:
Por trastornos primarios: petequias (lesiones puntiformes), equimosis (morados) y víbices (forma
lineal como un latigazo).
Por trastornos secundarios: hemorragias de intensidad variable, hematomas.
Etiología:
Vasculares: Congénitas (Ehlers-Danlos, Rendú-Osler, osteogénesis imperfecta, pseudoxantoma
elástico), o adquiridas (escorbuto, Scholein-Henoch, alergia, mecánicas, drogas, vasculitis, uremia,
púrpura senil, enfermedad de las células plasmáticas, síndrome de Cushing).
Plaquetarias: Por función anormal (Bernard–Soulier, tromboastenia de Glanzman, uremia,
paraproteínas, drogas, síndromes mieloproliferativos), por producción disminuida (aplasia
medular, drogas, alcohol, leucosis, infecciones), por aumento de la destrucción (púrpura
trombocitopénica, coagulación intravascular diseminada, hiperesplenismo, síndrome hemolítico
urémico, drogas, infecciones, malformaciones vasculares, post transfusiones, por secuestro,
síndrome de Kasabach-Merrit).
Plasmáticas: Déficit de factores (II, V, VII, VIII, IV, XI), exceso de anticoagulantes circulantes.
Síndrome adénico
Concepto: Conjunto de síntomas y signos, producidos por un aumento de volumen de los ganglios
linfáticos.
Síntomas y signos: Aumento de volumen con dolor, rubor y sensibilidad al tacto; si son agudas,
pueden ser duras, o pétreas y adheridas, si son de origen metastásico, elásticas de consistencia
como el caucho, si obedecen a procesos linfoproliferativos. Pueden ser localizadas, o
generalizadas.
Etiología:
Localizadas: infecciones piógenas, linfogranuloma venéreo, enfermedad por arañazo de gato,
traumatismos, metastásicas.
Generalizadas: linfomas, leucemias, tuberculosis, SIDA, micosis, metástasis de neoplasias malignas,
mononucleosis infecciosa, enfermedades exantemáticas, drogas (fenitoína).
Síndrome esplenomegálico
Síndrome hipofisario
Concepto: Conjunto de síntomas y signos, que aparecen como resultado de un aumento
(hiperpituitarismo), o disminución (hipopituitarismo), de la función hipofisaria. Incluye los
siguientes síndromes: síndrome del lóbulo anterior y síndrome del lóbulo posterior.
Hiperpituitarismo
Síntomas y signos:
Por estimulación de la suprarrenal: Enfermedad de Cushing.
Por estimulación del tiroides: tirocoxicosis.
Por estimulación de las glándulas sexuales: hiperactividad ovárica o testicular.
Por aumento de la secreción de GH: gigantismo y acromegalia.
Gigantismo: inicio en la niñez, o adolescencia, crecimiento excesivo del esqueleto no armónico
(brazos y piernas), actitudes viciosas (pie plano, cifosis), debilidad y delgadez muscular,
susceptibilidad a las infecciones, infantilismo psíquico, retardo en el desarrollo genital.
Acromegalia: debilidad astenia, dolores difusos, aumento de peso, talla normal, o ligeramente
aumentada, incurvación de la columna vertebral, alteraciones de la cara (prognatismo mandibular,
aumento de arcadas surperciliares, cigomáticas, de la protuberancia occipital y diastema,
ensanchamiento de la nariz y crecimiento de las orejas, aumento del grosor de los labios y
macroglosia), piel engrosada y callosa con secreción sebácea y sudoral abundante, crecimiento de
las extremidades con manos en forma de pala y dedos en forma de salchicha, ensanchamiento de
los pies, esplacnomegalia, signos de hipertensión endocraneana y de la visión, signo de
hiperfunción tiroidea, suprarrenal, gonadal y diabetes.
Hipopituitarismo
Síntomas y signos:
Por supresión suprarrenal: insuficiencia suprarrenal.
Por supresión del tiroides: hipotiroidismo.
Por supresión de las glándulas sexuales: insuficiencia ovárica, o testicular.
Por supresión combinada: síndromes complejos.
Etiología: Síndrome de Sheehan, enfermedad de Simmons, tumores, infecciones, traumatismos,
hipofisitis, fibrosis.
Concepto: Diabetes insípida: emisión persistente y abundante, por encima de 3 litros de orina,
anormalmente clara y diluida sin azúcar.
Síntomas y signos: Polidipsia intensa de cualquier líquido (hasta 20 litros, incluso 40 litros), poliuria
constante y uniforme, pero clara y diluida, conservación del estado general.
Etiología: Traumatismos, hipofisectomía total, tumores (metastásicos, adenoma eosinófilo, o
basófilo), infecciones, granulomas (linfomas, sarcoidosis), diabetes insípida nefrógena, idiopática.
Síndrome tiroideo
Concepto: Conjunto de síntomas y signos, que aparecen como resultado de una
hiperfunción (hipertiroidismo), o de una hipofunción (hipotiroidismo), de la glándula tiroidea.
Síndrome de hipertiroidismo
Síntomas y signos:
Sistema circulatorio: taquicardia, calor, rubicundez, hipertensión arterial primaria sistólica.
Sistema digestivo: aumento de la frecuencia defecatoria, y del vaciamiento gástrico, polifagia.
Sistema muscular: temblor fino, cansancio muscular fácil, hiperreflexia general.
Metabolismo: pérdida de peso, hipocolesterolemia. Además se observa exoftalmo con los signos
típicos de Von Graffe, Moebius, y Dalrymple.
Desde el punto de vista afectivo: ansiedad, agitación, aumento de la libido al principio, para caer
en indiferencia al final.
Etiología: Enfermedad de Graves Basedow, tumores (benignos o malignos), tiroiditis crónica.
Síndrome de hipotiroidismo
Síntomas y signos:
Sistema circulatorio: bradicardia, palidez, frialdad, hipertensión arterial primaria diastólica.
Sistema digestivo: constipación, digestiones lentas, anorexia, aumento de peso.
Sistema muscular: debilidad muscular fácil, movimientos lentos, hiporreflexia en general.
Etiología: Mixedema primario, deficiencia de yodo, tiroiditis, tumores, tiroidectomía, radiaciones,
drogas antitiroideas, mixedema hipofisario e hipotalámico.
Síntomas y signos: Retraso mental, retraso del desarrollo, crecimiento demorado, dificultad para la
lactancia, prolongación del íctero del recién nacido, hernia umbilical.
Etiología: Aplasia tiroidea, o atireosis.
Síndromes corticosuprarrenales
Síndrome hiperglucémico
Concepto: Estado clínico y humoral, producido por un aumento de las cifras de glicemia en ayunas
(³7 mmol/l), o una prueba de tolerancia a la glucosa, por encima de los valores normales.
Síntomas y signos: Orinas abundantes (poliuria), excesiva sed (polidipsia), aumento del apetito
(polifagia), astenia, pérdidad de peso y prurito. Además, se pueden presentar otros síntomas y
signos producidos por complicaciones vasculares, neurológicas y cutáneas.
Etiología: Diabetes Mellitus tipo I y tipo II, diabetes gestacional, defectos genéticos en la función
de las células b, defectos genéticos en la acción de la insulina, enfermedades del páncreas
exocrino, endocrinopatías, inducido por drogas y sustancias químicas, infecciones, otros síndromes
genéticos asociados.
Síndrome hipoglucémico
Concepto: Estado clínico y humoral, producido por una disminución de las cifras de glicemia, por
debajo de 2,2 mmol/l.
Síntomas y signos:
Manifestaciones adrenérgicas: nerviosismo, inestabilidad emocional, temblor, hambre,
palpitaciones, parestesias, sudoración, palidez, midriasis, taquicardia, hipertensión arterial.
Manifestaciones neuroglucopénicas: excitación, diplopia, alteraciones de la conciencia,
intranquilidad, confusión, negativismo, amnesia, agitación, cambios de la personalidad,
convulsiones, coma.
Etiología: Hiperinsulinismo (tumores, drogas hipoglicemiantes, anticuerpos contra insulina,
anticuerpos contra receptores), tumores extrapancreáticos, fármacos (alcohol, salicilatos,
sulfonilureas), alteraciones hepáticas graves, insuficiencia renal crónica, sepsis, hipoglicemia
reactiva (alimenticia, galactosemia, intolerancia a la fructosa, idiopática).
Síndrome de malnutrición
Obesidad
Concepto: Acumulación excesiva y generalizada de grasa en el cuerpo, con hipertrofia total del
tejido adiposo. Existe un índice de masa corporal mayor de 30.
Síntomas y signos: Se describen dos tipos de obesidad: la ginoide, de carácter feminoide, más
frecuente en la mujer, de predominio en la mitad inferior del cuerpo y la androide, de tipo varonil,
predomina en la mitad superior del cuerpo. Se asocian con otras enfermedades, como son,
hipertensión arterial, cardiopatía isquémica, dislipidemia, etc.
Etiología: Obesidad exógena, endocrina (diabetes mellitus, síndrome de Cushing), disfunción
gonadal ( Síndrome de Stein-Leventhal), síndrome de Frolich), hipotiroidismo, afecciones del
hipotálamo (traumas, tumores, procesos inflamatorios), síndrome de Pickwick, genética-
familiar(genética, familiar, o genética familiar), indeterminada.
Delgadez
Concepto: Estado del organismo en el cual, el peso es inferior al que corresponde
teóricamente. Existe un índice de masa corporal menor de 20.
Síntomas y signos: Desaparece primero la grasa del vientre, luego la de los muslos, la de los
glúteos y la de la cara; hundimiento de los globos oculares, lo que produce una apariencia de edad
mayor, a la que corresponde biológicamente; exposición de las eminencias óseas.
Etiología: Alimentación incorrecta (falta de alimento, anorexia y dificultad para masticar o tragar),
por enfermedad (endocrina y procesos consuntivos) y constitucional.
Síndrome comatoso
Concepto: Estado de inconsciencia, en el cual se han perdido las fuciones de la vida de relación,
pero se conservan las de la vida vegetativa.
Síntomas y signos:
Coma: Depresión de la conciencia, boca entreabierta con secreciones, ojos cerrados, respuesta en
monosílabos, pérdida de la motilidad y sensibilidad, pero se conservan las funciones vegetativas
en la mayoría de los casos.
Coma carus: Grado mayor que el anterior, enfermo inerte, insensibilidad a todo estímulo.
Coma sobrepasado: Todo está abolido, incluso, las funciones vegetativas.
Etiología: Enfermedad cerebrovascular isquémica y hemorrágica, meningoencefalitis, tumores,
hemopatías malignas, status epiléptico, tóxicos, metabólico, endocrino, hipoxia.
Síndrome hemipléjico
Concepto: Pérdida de la fuerza muscular de una mitad del cuerpo, por una alteración funcional, u
orgánica. Puede ser hemiplejia fláccida, espástica o larvada.
Síntomas y signos: Parálisis facial central y de la extremidad superior e inferior, del mismo lado,
hiporreflexia osteotendinosa (fláccida), o hiperreflexia (espástica) del lado paralizado, signo de
Babinski, abolición de los reflejos cutáneo abdominales.
Etiología: Enfermedad cerebrovascular, tumores.
Síndrome parapléjico
Concepto: Consiste en la parálisis de dos mitades simétricas del cuerpo. Desde el punto de vista
topográfico existen dos variedades: central (cerebral y medular) y periférica. Según sus
manifestaciones clínicas se distinguen dos tipos: fláccida y espástica.
Síntomas y signos:
Paraplejía fláccida central: parálisis casi siempre completa, reflejos osteotendinosos y cutáneos
abolidos, trastornos vasomotores en las partes paralizadas, hipoestesia o anestesia tanto
superficial como profunda. Hay signo de Babinsky y trastornos esfinterianos.
Paraplejía fláccida periférica: Se observan los síntomas y signos anteriores pero están ausentes el
signo de Babinsky y los trastornos esfinterianos.
Paraplejia espástica (siempre es central): parálisis menos marcada, son contracturas de intensidad
variable, clonus del pie y de la rótula, signo de Babinsky, reflejos exaltados, reflejos vegetativos
(evacuación emuntorial, priapismo), anestesia superficial y profunda, retención de orina.
Etiología:
Central: accidentes vasculares, sífilis, tumores, mielitis transversa, hematomielia, esclerosis
múltiple, siringomielia, degeneración cordonal, anemia perniciosa, hernia discal.
Periféricas: poliomielitis, Guillain-Barré, alcoholismo, diabetes.
Síndrome parkinsoniano
Concepto: Manifestaciones que se producen por lesión y cese de las funciones del globus pallidus.
Existen dos formas de presentación: rigidez y temblor. Puede tomar un hemicuerpo
(hemiparkinson), o los dos.
Síntomas y signos: Cansancio fácil, sensación de llamaradas de calor, labilidad emocional,
alteraciones del sueño, disfunción sexual, lenguaje lento, fascies con ausencia de mímica, cara
sebosa, boca entreabierta con salida de la saliva, rigidez, cabeza semiflexionada sobre el tronco,
flexión del antebrazo sobre el brazo y de la pierna sobre el muslo, temblor fino de las manos y
dedos, que mejora con la intención, marcha a pequeños pasos, o rápida (festinante), hipotensión
ortostática, parestesias, dolores, pérdida de peso.
Etiología: Idiopático, infeccioso (postencefalítico), ateroesclerosis, postraumático, tóxicos,
fármacos, Parkinson heredodegenerativo (enfermedades del cuerpo de Lewy, Wilson, Huchington,
Halervoden Spatz, Parkinson familiar), Parkinson plus (asociado a demencia-esclerosis lateral
amiotrófica , Shy-Drager, etc.)
Síndromes sensitivos
Concepto: Pérdida de la facultad de la corteza cerebral, para reaccionar a los estímulos aportados
a ella, por las vías conductoras centrípetas.
Síntomas y signos:
Disociación siringomiélica: abolición de la sensibilidad térmica y dolorosa, mientras se conserva la
sensibilidad táctil y la profunda.
Disociación tabética: abolición de la sensibilidad táctil y profunda, mientras se conserva la
sensibilidad térmica y dolorosa.
Disociación periférica: anestesia superficial con conservación de la sensibilidad profunda.
Síndrome sensitivo parapléjico: anestesia absoluta por debajo de la lesión medular.
Síndrome de Brown- Sequard: abolición de la sensibilidad profunda del lado de la lesión y
alteración de la sensibilidad superficial del lado opuesto
Síndrome de los cordones posteriores: disminución de la sensibilidad profunda, en ocasiones
(etapa avanzada), de la superficial.
Síndrome de los cordones anteriores: alteración de la sensibilidad de tipo siringomiélica.
Síndrome del cono medular: anestesia en silla de montar y alteraciones esfinterianas.
Síndrome de la cola de caballo: anestesia en silla de montar, alteraciones esfinterianas y bandas de
anestesia a lo largo de la cara posterior y muslo.
Síndrome sensitivo periférico: anestesia absoluta correspondiente al nervio, o plexo afectado.
Etiología: Traumatismos, accidentes vasculares, infecciones, tumores, hernia discal, tóxicos,
avitaminosis.
Cefalea
Concepto: Sensación subjetiva de dolor, que va desde el reborde orbitario hasta la región occipital.
Síntomas y signos:
Síndromes primarios:
Migraña clásica: frecuente en mujeres, precedida de aura que puede ser visual, motora, sensitiva,
cognitiva, o psíquica, suele durar unos minutos y precede a la crisis, o coincide con ella. El dolor de
cabeza suele ser unilateral, pulsátil, o punzante, acompañado de náuseas, vómitos, fonofobia y
fotofobia, de duración entre 4 y 72 horas, aunque puede ser mayor (status migrañoso).
Migraña común: características similares a la anterior, pero no está precedido de auras.
Cefalea tensional, o por contracción muscular: el dolor es crónico, bilateral, constrictivo, no
pulsátil y asociado a la rigidez de los músculos del cuello, ocurre diariamente hacia el final del día;
su intensidad es oscilante.
Cefalea en racimos: más frecuente en el sexo masculino, unilateral, de localización orbitaria y/o
periorbitaria, extremadamente dolorosa, acompañada de disfunción autonómica (lagrimeo, ptosis,
miosis, congestión nasal, hiperemia conjuntival). El dolor aparece diariamente, a la misma hora y
dura días, o semanas (racimos); puede reaparecer a intervalos de meses, o años.
Síndromes secundarios: Varían según el proceso patológico; hay que considerar la forma
de comienzo (intenso en la hemorragia cerebral, o menos intenso, fluctuante, o gradual,
en los tumores cerebrales), la edad (la arteritis se presenta después de los 50 años y la
migraña no es frecuente después de esta edad).
Etiología:
Síndromes primarios: migraña clásica, migraña común, cefalea en racimos y tensional.
Síndromes secundarios: intracraneales (hematomas, hemorragias, malformaciones, absceso
cerebral, meningitis, encefalitis, vasculitis, punción lumbar, infarto cerebral), extracraneales
(sinusitis, trastornos de la columna cervical, arteritis de células gigantes, patología dentaria),
causas sistémicas (fiebre, viremia, hipoxia, hipercapnia, hipertensión arterial, alergia, anemia,
abstinencia a la cafeína u otras sustancias, depresión).
Síndrome meníngeo
Concepto: Cuadro clínico causado por la invasión, o agresión aguda de las meninges, por algún
proceso patológico, infeccioso, o no.
Síntomas y signos: Cefalea intensa, vómitos en proyectil, fiebre, sed, oliguria, anorexia,
constipación, fotofobia, convulsiones, parálisis, hiperestesia cutánea, contractura muscular
(opistótonos), signo de Kerning y Bruzinski, signo de Lewinson, raya meningítica de Trousseau.
Etiología:
Primarias: virus, bacterias, riketsias, hongos, espiroquetas
Secundarias: sarampión, varicela, reacciones posvacunales, hemorragias subaracnoideas.
Síndrome cerebeloso
Concepto: Conjunto de síntomas y signos, causados por diversas lesiones, o trastornos que afectan
el cerebelo, o sus vías.
Síntomas y signos: Ataxia cerebelosa (marcha en zigzag, como de ebrio, con aumento de la base de
sustentación), dismetría, asinergia, adioadococinesia y disdiadococinesia, discronometría, temblor,
hipotonía, trastornos del lenguaje y nistagmo.
Etiología: Enfermedad cerebrovascular, tumores, aneurismas, abscesos, enfermedades
desmielinizantes, intoxicaciones, enfermedades degenerativas.
Síndrome vertiginoso
Etiología:
Vértigo periférico: Vértigo posicional benigno, laberintitis, neuronitis vestibular, vestibulopatías
tóxicas y traumáticas, trastornos vasculares del oído interno, enfermedad de Meniere,
hipertensión arterial primaria, hipotensión arterial, anemia, poliglobulia, menopausia,
hipotiroidismo, avitaminosis B, vértigo cervicógeno, enfermedad de Addison, insuficiencia renal
crónica, disproteinemias, hipoxia cerebral, hepatopatías, cinetosis, ansiedad, reflejo vagal, tapón
de cera.
Vértigo central: Accidentes vasculares vertebrobasilares, tumores del ángulo pontocerebeloso y
fosa posterior, esclerosis múltiple, epilepsia vertiginosa, migraña basilar, síndrome de Ramsay
Hunt, aneurismas, sepsis del sistema nervioso, traumatismos, vértigo posicional maligno,
insuficiencia vertebrobasilar, anoxia del sistema nervioso central.
Síndrome convulsivo
Concepto: Conjunto de manifestaciones clínicas, que tienen como elemento central un tipo de
movimiento involuntario llamado convulsión. Las convulsiones son sacudidas rítmicas y bruscas,
de grandes grupos musculares.
Síntomas y signos:
Crisis tónicas: Rigidez, o hipertonía, que afecta a todo el cuerpo, o parte de él.
Crisis tonicoclónicas: Existen períodos alternantes de crisis tónicas y relajación, lo que produce
flexión y extensión de los miembros, así como la pérdida de conciencia.
Crisis parcial: Limitada a una mitad del cuerpo, sin pérdida de la conciencia.
Etiología: Tumores, enfermedad cerebrovascular, trastornos humorales (hipoglicemia,
hipocalcemia, hiponatremia, hipoxia, uremia, tóxicos), secuelas perinatales, traumatismos,
meningoencefalitis, epilepsia esencial.
Síndrome extrapiramidal
Síndrome febril
Fiebre de origen desconocido (FOD): La fiebre es de más de 38° C y dura más de un mes;
no se encuentra la causa, hasta pasada una semana de estudio.
Existen cuatro tipos: FOD clásica, FOD asociada a pacientes neutropénicos, FOD en el nosocomio y
FOD en el paciente con SIDA.
Síntomas y signos: Temperatura corporal por encima de 38° C, piel y mucosas secas, labios
agrietados, herpes labial, taquicardia, polipnea, dolor de garganta, lengua saburral, sed, anorexia,
dispepsias, vómitos, constipación, oliguria, orinas oscuras, midriasis, fotofobia, dolor al
movimiento de los ojos, adenomegalia, esplenomegalia, excitación mental, delirio, decaimiento,
cefalea, mialgias, raquialgias, insomnio, somnolencia, estupor, convulsiones.
Etiología:
Infecciones: por bacterias, rickettsias, virus, parásitos, hongos.
Traumatismos: injuria por aplastamiento.
Neoplasias: linfomas, páncreas, hipernefroma, pulmón, hueso, hepatoma.
Enfermedades hematológicas: leucemias, anemias hemolíticas.
Accidentes vasculares: miocárdicos, pulmonares, cerebrales.
Enfermedades por mecanismos inmunes: conectivas, drogas, enfermedades séricas.
Trastornos metabólicos: gota, porfiria, hipertrigliceridemia, enfermedad de Addison, tiroides.
La historia clínica es más difícil de obtener en los ancianos, pues muchos de ellos son incapaces de
relatar sus síntomas de forma clara, o de situar éstos en orden cronológico, debido a trastornos de
la memoria, demencia (10 %), trastornos auditivos (20 %), visuales (15 %) y del habla, tales como la
disartria, o afasia, así como por enfermedades cerebrovasculares previas. La polimorbilidad que
usualmente está presente, crea dificultades para encauzar correctamente la entrevista.
Los datos a introducir en la historia clínica, en el caso de los ancianos, son más abarcadores, pues
resulta de gran valor conocer aspectos concernientes a la nutrición, aspectos sociales y
psicológicos, la historia sobre el uso de medicamentos y el nivel funcional premórbido; este último
es muy importante para evaluar el pronóstico y determinar si es posible mejorar la calidad de vida,
como objetivo fundamental del tratamiento.
Las personas de edad avanzada, no siempre aportan la totalidad de los síntomas, quizás porque
temen que se les pueda diagnosticar enfermedades graves, o simplemente porque asumen sus
problemas como parte del envejecimiento. Este hecho debe preparar al médico, para buscar la
parte oculta de los problemas del anciano, muchos de los cuales, atendidos a tiempo, pueden
atenuar la fragilidad y detener el tránsito hacia la discapacidad.
El examen físico es el mismo que se realiza a personas de cualquiera edad, aunque debe realizarse
con gentileza y adecuándolo a las limitaciones del paciente, teniendo en cuenta los cambios
anatómicos y fisiológicos propios del envejecimiento.
Los datos obtenidos por la anamnesis y exploración del paciente anciano, deben ser interpretados
en un contexto amplio; el médico debe saber dar a los síntomas y signos, la importancia que
tienen en particular, en este tipo de paciente. Si en alguna etapa de la vida, se aplica con mayor
certeza el adagio de que existen enfermos y no enfermedades, es en la ancianidad. Lo que a veces
consideramos llamativo, desde el punto de vista médico, no es lo que preocupa, o incapacita a la
persona mayor y a menudo, la situación de salud reflejada por la historia de la enfermedad,
obedece a múltiples problemas y no a uno solo.
A los efectos prácticos, es mejor pensar en términos de problemas, que en rótulos, o etiquetas
diagnósticas. Los problemas son aquellas condiciones que le dificultan al paciente geriátrico, vivir
de manera independiente en la comunidad. En la discusión diagnóstica debe hacerse, además de
una lista de los diagnósticos, una lista de los problemas. Esto facilitará, al tratar de dar solución, o
respuesta a los mismos, la conducta terapéutica del médico, o del equipo que atiende al adulto
mayor.
La historia clínica es uno de los aspectos que se descuida a menudo en la atención a los adultos
mayores; primero, porque no se les dedica el tiempo necesario para escuchar sus quejas; segundo,
porque no se les deja hablar y se hace un interrogatorio muy dirigido y escolástico; tercero,
porque a la hora de redactar el documento, se hace con deficiencias.
Sin dudas, son los ancianos los pacientes más agradecidos cuando se les escucha y atiende
debidamente; depositan en el médico toda su confianza, y el momento de la entrevista y el
examen físico, es crucial para el desarrollo de todo el proceso diagnóstico, como también es parte
de la terapéutica.
CAPÍTULO 8:
ERRORES MÁS FRECUENTES
Juicio y carácter, son atributos necesarios para un buen médico, además de atesorar un fuerte
componente de humanismo, como parte intrínseca de la profesión. La dedicación, lo que supone
utilizar el tiempo en el ejercicio de nuestra profesión, es fundamental. Muchos de los errores que
se cometen al confeccionar la historia clínica, se producen por actuar con rapidez. En estudios
realizados por Moreno, los internos consumen, en promedio, unos 14 minutos en la entrevista, y
este tiempo es menor en la Atención Primaria de Salud, respecto a la cual Borrell plantea, que el
encuentro con el enfermo es muy breve, de sólo 7 minutos como promedio.
Según Barreto Penié, algunas de las causas que condicionan errores en la historia clínica son las
siguientes:
Generalidades:
Información incompleta
Desorganización
Ilegibilidad
Deficiencias en la redacción y en el uso del lenguaje
En la Historia de la Enfermedad actual (HEA):
No establecer el cronopatograma.
Obviar problemas importantes.
No tomar información asociada a la semiografía (características de los síntomas).
Preferencia por información secundaria y terciaria.
No indagar sobre el momento del comienzo de la HEA.
No identificar claramente la queja principal.
Tipos de preguntas:
Que inducen a respuestas.
Breves y cerradas.
Desarrollo de la entrevista:
Interrumpir al enfermo (hablar simultáneamente al paciente).
Entrevista monótona.
Discutir con el paciente.
Permanecer distante (no mirar al paciente).
Emplear un lenguaje chabacano.
En el examen físico:
Omitir partes importantes de la exploración física: frecuencia respiratoria, pulsos periféricos, no
auscultar vasos del cuello, peso, talla, tacto rectal y vaginal, tensión arterial en miembros
inferiores, fondo de ojo.
Posiciones inadecuadas al explorar.
Examinar al enfermo por encima de la ropa.
Falta de habilidades para realizar maniobras.
No detectar los signos presentes.
No definir semiografía de soplos, visceromegalias, edemas, etc.
Deficiente examen neurológico.
En la discusión diagnóstica:
Ausencia de resumen de datos positivos.
No justificar los síndromes detectados.
Omitir síndromes fundamentales.
Selección errónea del síndrome a discutir.
Diagnóstico diferencial insuficiente.
Ausencia de rediscusiones