04 Mes de Tammuz
04 Mes de Tammuz
De acuerdo con el Sefer Ietzirá, cada mes del año judío tiene una letra del alfabeto hebreo, un signo
del zodíaco, una de las doce tribus de Israel, un sentido, y un órgano controlador del cuerpo que le
corresponde.
Con el mes de Tamuz empieza la "estación" (tekufá) del verano. Los tres meses de esta estación
son: Tamuz, Av y Elul y corresponden a las tres tribus del campamento de Reuven (Reuven,
Shimón y Gad), que estaban ubicadas al sur.
Tamuz es el mes del pecado del becerro de oro, que dio lugar al rompimiento de las Tablas. En ese
día, el 17 de Tamuz, comienza el período de tres semanas (hasta el 9 de Av), que conmemora la
destrucción del Santo Templo de Jerusalén.
Este, es el mes en que los espías que Moshé/Moisés envió recorrieron todo Israel para ver la tierra
e informar al pueblo, regresando la víspera del 9 de Av).
Color: Naranja
Letra: Jet ח
La forma de la letra Jet está compuesta de las dos letras anteriores del alef-beit, la vav y la zain,
que corresponden a los dos meses previos, los meses de Iyar y de Siván. Estas letras están
conectadas en la parte superior por un "puente" delgado. Con relación al sentido de la vista, la
forma de la jet representa la dinámica de la luz espiritual, emitida por los ojos (la vav) y la luz
física, que vuelve del objeto observado a los ojos (la zain).
La palabra Tamuz se lee en hebreo: "tam" - "vav zain". Tam significa "conecta". De este modo,
leemos en la palabra Tamuz "conecta" - "vav zayin". La unión de estas dos letras forman la letra
jet.
Mazal: Sartán (Cáncer- el cangrejo).
Uno de los significados de la raíz del término sartán, seret, es en general: "cinta". En particular (en
el hebreo moderno), una cinta de "película" (un film).
El significado espiritual referente al sentido visual propio del mes de Tamuz es la capacidad de
"entrever" la realidad física para vislumbrar su origen Divina. De acuerdo con este pensamiento,
se entiende que la palabra sartán está compuesta por dos palabras: sar y tan, que literalmente
significan: "dejar de lado el cuerpo" (para revelar el alma), es decir sacar la "cáscara" externa de
la realidad (a través del poder de la visión profunda) para revelar el "fruto" y la fuerza vital de la
realidad interna.
Tribu: Reuvén.
El nombre Reuvén viene de la raíz "ver", el sentido correspondiente al mes de Tamuz.
La piedra preciosa correspondiente a la tribu de Reuvén en el pectoral del sumo sacerdote es el
odem, el rubí, que debido a su fuerte color rojo (odem significa rojo) es la piedra más llamativa.
El rojo es el más seductor de los colores, lo que implica tanto la caída del hombre (en hebreo odem
(rojo) se escribe igual que adam (hombre)), como en el pecado del becerro de oro o la elevación y
rectificación últimas del hombre con la llegada del Mashíaj.
Sentido: La vista.
El verano (el período de Tamuz) representa las "vacaciones" de los ojos. Es el tiempo en que uno
tiene que "cubrir" sus ojos para ver sólo aquello que es recatado y bueno (en el mundo en general
y en particular en el prójimo). La capacidad de cuidar y enfocar la vista correctamente conduce a
la rectificación del "sentido" visual.
Al final de la bendición de Moshé a Israel dijo (Devarim/Deuteronomio 33:28): "betaj badad ein
Yaakov" (confiado y apartado está el ojo de Yaakov). La palabra betaj, "confiado" es el acrónimo
de tres palabras: brajá tov jaim, bendición, bien y vida. Estos son los tres puntos centrales para
rectificar la vista, como está dicho (Devarim/Deuteronomio 11:26): "Mira que pongo delante de
vosotros hoy la bendición y la maldición. La bendición,..." y posteriormente
(Devarim/Deuteronomio 30:15-19): "Mira que pongo delante de ti la vida y el bien, la muerte y el
mal... escoge, pues, la vida". Con respecto a estos tres conceptos (brajá tov jaim) la persona debe
entrenar a los ojos (tanto física como espiritualmente) para ver sólo la dimensión positiva interna
de la realidad y no centrarse en la realidad externa, la "cáscara" negativa.
Este es el significado de "confiado y apartado está el ojo de Yaakov". El sentido del ojo judío ("el
ojo de Yaakov") es exclusivamente para ver ("sólo") lo que es digno de "confianza": La bendición,
el bien y la vida que Di-s otorga.
Miembro dominante: La mano derecha.
En general, la mano derecha y su dedo índice, en particular, sirven para dirigir y enfocar la vista.
Cuando se leen los rollos de la Torá, es costumbre señalar cada palabra con un "dedo" de plata. Es
costumbre también usar la mano
derecha para hacer señales y así
indicarle al que lee la Torá la
entonación musical.
El novio le coloca el anillo
matrimonial a la novia en el dedo
índice de la mano derecha. Esta
acción eleva a la pareja al nivel de
"mi paloma" (Shir HaShirim/Cantar
de los Cantares 5:2), lo que refleja la
expresión intensa de amor trasmitida
por la contemplación incesante de los
ojos de ambos (que tornan los ojos
rojos como el rubí): "Tus ojos son
como palomas" (Shir
HaShirim/Cantar de los Cantares
5:1).
TAMMÚZ - EL
ATRIBUTO DE LA VISIÓN
En principio es válido aclarar, para aquellos que no lo saben que Israel, siguiendo la sabiduría de
la Torá (Shemót/Éxodo 12) determina el ciclo del tiempo a partir de la luna, la cual es santificada
cada mes. El inicio del mes está entonces determinado por el nacimiento de la luna (molád), y cada
mes (jódesh en hebreo) posee su propio nombre. Precisamente la palabra mes: jódesh comparte
raíz con la palabra jadásh: nuevo, esto nos permite deducir, que cada mes tiene una energía nueva,
que lo caracteriza y define.
Conocer acerca de las particularidades de cada mes nos permite introducirnos en la dimensión del
tiempo con una mirada renovada, y nos abre las puertas a la posibilidad de intentar habitarlo a
partir del sentido.
ACERCA DE TAMMÚZ:
La Torá nos ordena contar los meses a partir de Nisán (Aries, el mes que corresponde a la salida
de Egipto: Pésaj). Nisán es seguido por Iyár (Tauro) y luego por Siván (Géminis).
Estos tres meses son considerados de despertar espiritual, desde arriba hacia abajo, tal como lo
revelan los hechos sucedidos durante ese tiempo: la liberación judía de la esclavitud de Egipto,
(Nisán), el Maná que caía del cielo y les permitía alimentarse en el desierto (Iyár), y la entrega de
la Torá (Siván).
Tammúz representa el cuarto mes, y con él se inicia el periodo de los siguientes tres meses
(Tammúz, Áv y Elúl) en los cuales tenemos la responsabilidad de ascender espiritualmente, de
abajo hacia arriba, incluso en lo referente a los aspectos más mundanos. Durante este mes
sucedieron hechos lamentables para el pueblo judío, basta con señalar que el 17de Tammúz fueron
rotas las primeras brechas de la muralla de Jerusalén durante el primer y segundo Templo. Tristes
hechos que motivaron la determinación del ayuno del 17 de Tammúz.
Como dijimos anteriormente Tammúz, el primer mes del verano (en Israel) inicia la serie de los
tres meses (Tammúz, Áv y Elúl) de trabajo espiritual “de abajo hacia arriba” en procura de
crecimiento y rectificación de todos los aspectos de nuestra vida.
Tammúz, cuyo signo es Cáncer = Sartán en hebreo (el cangrejo) está vinculado según el Séfer
Ietzirá, al atributo de la visión. Es notable como una visión errada de los hechos nos puede conducir
a elecciones equivocadas y por lo tanto a caminar senderos desvinculados de nuestra
esencia....”caminos sin corazón”.
Es importante recalcar que durante este mes existe un incremento de la sensibilidad, y es un tiempo
en el que la vista puede nublarse. Es común escuchar la frase “El ojo ve y el corazón siente”, y
difícilmente exista persona que no lo haya experimentado alguna vez. Esta expresión de sabiduría
popular coincide con la de nuestros sabios al referirse al sentido de la visión como la causa
primordial de los pecados corporales.
La Torá nos señala dos acontecimientos trascendentes que nos permiten profundizar en la energía
de este mes:
Es durante este mes de Tammúz que el pueblo de Israel construye el becerro de oro, lo que
represento la caída más profunda en las redes de la idolatría. Sobre este acto determina la Torá en
Nombre de Di-s: “En el día de Mi selección, recordaré esto” (Shemót/Éxodo 32:34).
Este pecado, y convengamos que no se trata de un pecado menor, menos aun si recordamos que
tan solo habían pasado días desde que el mismo pueblo recibiera la Torá en el monte Sinaí, se
debió a una falla en el sentido de la visión, ya que el satán mostró al pueblo judío una falsa visión
del cuerpo sin vida de Moshé, ya en los cielos. En el lenguaje de los sabios: la novia traiciona al
Novio estando aún bajo la juppá (palio nupcial).
El segundo hecho que nos ayudará a comprender la naturaleza delicada de la energía de este mes
es el suceso que leemos en la Parashá Shelaj-Lejá cuando Moshé envía a los espías a Canaán, con
el propósito de investigar y traer información sobre esa tierra, a la cual estaban los judíos próximos
a entrar. La misión de los espías duró 40 días, (la mayor parte de ellos corresponden al mes de
Tammúz). Esta misión fracasó debido a la falsa información que transmitieron los espías, y por
consiguiente la entrada del pueblo judío a la tierra de Israel se postergó. Debido a la errónea
interpretación de los espías al investigar la tierra de Israel, se considera que el sentido de la visión
no fue utilizado con pureza y santidad (Zóhar-Shelaj-Lejá). El profundo deseo de los espías de
permanecer como príncipes en el desierto nubló sus vistas hasta tornarse incapaces de apreciar las
oportunidades que ofrecía la tierra. Fue así que transmitieron al pueblo un informe negativo como
está escrito (Bemidbár/Números 13:32): “...una tierra que se devora a sus habitantes...”.
Dos sucesos lamentables y un denominador común: la visión errada de la realidad.
Sin embargo purificando su corazón, el hombre purifica también su sentido de la visión, y puede
ver en cada ocasión y en cada hecho la revelación de Di-s, y rendir honor a Su presencia.
Tal vez sería bueno reflexionar desde nuestra interioridad, con honestidad y con coraje..
- Con cuánta pureza somos capaces de mirar a nuestro alrededor?....
- Qué profundidad alcanza nuestra visión de la realidad?....
- Qué tanto apreciamos con “buenos
ojos” las oportunidades que nos da la
vida?.
Que seamos capaces de
comprometernos con un trabajo
exhaustivo y cotidiano sobre nosotros
mismos en procurar de elevarnos
sobre nuestras propias limitaciones.
Jódesh Tammúz Tóv uMevoráj / Mes
de Tammúz Bueno y Bendecido !!!