Guia Practica Clinica para El Diagnostico de Tea
Guia Practica Clinica para El Diagnostico de Tea
Guia Practica Clinica para El Diagnostico de Tea
89(866)
Ministerio de Salud Pública del Ecuador. Trastornos del Espectro Autista en niños y adolescentes:
detección, diagnóstico, tratamiento, rehabilitación y seguimiento. Quito: Ministerio de Salud Pública,
Dirección Nacional de Normatización-MSP; 2017.
104p: tabs:gra: 18 x 25cm
ISBN 9789942 22 231 2
1. Trastorno Espectro Autista. 5. Tratamiento.
2. Guía de Práctica Clínica. 6. Rehabilitación.
3. Detección. 7. Seguimiento.
4. Diagnóstico. 8. Salud Pública.
Esta Guía de Práctica Clínica (GPC) ha sido adaptada de guías internacionales, por profesionales de las
instituciones del Sistema Nacional de Salud y especialistas expertos en la materia, bajo la coordinación
de la Dirección Nacional de Normatización del Ministerio de Salud Pública. En ella se reúnen evidencias y
recomendaciones científicas para asistir a profesionales de la salud y pacientes en la toma de decisiones
acerca del diagnóstico y tratamiento de los Trastornos del Espectro Autista.
Estas recomendaciones son de carácter general y no definen un modo único de conducta procedimental
o terapéutica, sino una orientación basada en evidencia científica para la misma. La aplicación de las
recomendaciones en la práctica médica deberá basarse además, en el buen juicio clínico de quien las
emplea como referencia, en las necesidades específicas y preferencias de cada paciente, en los recursos
disponibles al momento de la atención, así como en las normas existentes.
Los autores han declarado sus conflictos de interés y han procurado ofrecer información completa y
actualizada en el documento. Sin embargo, en vista de la posibilidad de cambios en las evidencias
científicas, se recomienda revisar el prospecto de cada medicamento que se planea administrar para
cerciorarse de que no se hayan producido cambios en las dosis sugeridas o en las contraindicaciones
para su administración. Esta recomendación cobra especial importancia en el caso de medicamentos
nuevos o de uso infrecuente.
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-No Comercial-Compartir Igual
3.0 Ecuador, y puede reproducirse libremente citando la fuente sin necesidad de autorización escrita, con
fines de enseñanza y capacitación no lucrativas, dentro del Sistema Nacional de Salud.
Dr. Juan Pablo Aguilera Camacho, médico familiar, Centro de Rehabilitación Integral Especializado
Nº 5 (CRIE Nº 5), Cuenca.
Mgst. María Elisa Arévalo Peñafiel, Investigadora en Ciencias de la Salud y Estimuladora
Temprana en Salud. CRIE Nº 5, Cuenca.
Dr. Francisco Ochoa Arévalo, médico especialista, Trastornos del Neurodesarrollo. CRIE Nº 5,
Cuenca.
Lcda. Vicenta Pacheco Encalada, fonoaudióloga, CRIE Nº 5, Cuenca.
Lcda. María Belén Palacios Ledesma, psicóloga educativa, CRIE Nº 5, Cuenca.
Lcda. Jeanneth Peralta Cuji, psicóloga clínica infantil, CRIE Nº 5, Cuenca.
Dr. Roberto Tapia Peralta, psiquiatra infanto juvenil, Hospital Vicente Corral Moscoso, Cuenca.
Mgst. Martha Cobos Cali, psicóloga clínica infantil, Universidad del Azuay, Cuenca.
Mgst. María Fernanda Coello Nieto, psicoterapeuta, Universidad del Azuay, Cuenca.
Mgst. Cayetana Palacios Álvarez, especialista en detección e intervención temprana, Universidad
del Azuay, Cuenca.
Mgst. María Victoria Alvear Peña, educadora especial, Centro de Apoyo Psicopedagógico Integral.
Lcda. Fabiola Quinde Maza,terapista ocupacional, Centro de Apoyo Psicopedagógico Integral.
MSc. Esteban Bonilla, magister en neurociencia molecular.
Equipo de colaboradores
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Detección:
Diagnóstico:
Tratamiento:
Abordaje y rehabilitación:
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Seguimiento:
15
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
4. Introducción
Los trastornos del espectro autista (TEA) se definen –según el Manual Diagnóstico y
Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM por sus siglas en inglés) V, como un grupo de
alteraciones del desarrollo que ocasionan deficiencia en diferente grado, de las habilidades
e interrelaciones sociales (las cuales no están adaptadas al contexto social), alteraciones en
la comunicación verbal y alteraciones en la comunicación no verbal de niños y adolescentes;
manifestándose en todos los estratos económicos-sociales, sin distinción de raza, etnia
y sexo (5,6). Sin embargo, tomando en cuenta la diversidad y complejidad de los TEA,
abordada en la literatura científica y verificada en la práctica clínica, se debe además
considerar al autismo como un espectro, (7) de condiciones multidiversas (8,9), las mismas
que interfieren en los procesos de tipo comunicativo-relacional, en el procesamiento de la
información (10–12), en la capacidad sensoperceptiva, (13) y que también se manifiestan en
una marcada diferencia de la consciencia individual y social (14). Las personas dentro del
espectro autista pueden presentar otro tipo de comorbilidades que aumentan su complejidad
(15). Esta diversidad de condiciones y comorbilidades puede ubicar a las personas con TEA
en una posición de desventaja social.
Según el DSM-V, las principales características de las personas con TEA son dos: a) deficiencias
persistentes en la comunicación social y en la interacción social en diversos contextos, y
b) patrones restrictivos y repetitivos de comportamiento, intereses o actividades (16,17). La
Organización Mundial de la Salud en la 67ª Asamblea realizada en el 2014, refiere que los TEA
son problemas del desarrollo que se manifiestan en la primera infancia y en la mayoría de los
casos persisten a lo largo de toda la vida (18).
Para el diagnóstico de los TEA, al no existir marcadores biológicos fiables, se usan criterios
clínicos estandarizados en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM
por sus siglas en inglés) V, con el apoyo de la Clasificación Internacional de las Enfermedades
(CIE-10). Estos criterios se refieren a la sospecha de autismo y pueden causar confusiones con
otras patologías como deficiencia cognitiva, trastornos psicóticos, trastorno de déficit atencional
con hiperactividad (TDAH), entre otros. Por este motivo, deben ser verificados a través de
instrumentos especializados y aplicados por profesionales que tengan la capacitación adecuada
para realizarlos. Asímismo, partiendo de un modelo de atención biopsicosocial, aparte del
diagnóstico con criterios clínicos de los TEA, se requiere un enfoque multisistémico e integral que
permita elaborar un perfil funcional de la persona (19–21).
Datos recientes de la Encuesta Nacional de Salud Infantil de los Estados Unidos de Norteamérica
2011-2012 (22), cuya fuente fueron los padres de familia, indican que la prevalencia de los TEA
se estima en un 2 %. Sin embargo, para la Red de Monitoreo para Prevención de Autismo y
Discapacidades del Desarrollo, del Centro para el Control de Enfermedades (CDC por sus siglas
en inglés) (23), la prevalencia en los Estados Unidos es de 1 por cada 88 niños, con una incidencia
de 1 en 54 hombres y 1 en cada 252 mujeres. Esto representa un incremento del 23 % respecto al
año 2006, considerando a los TEA un problema de salud pública internacional (24).
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Según un último estudio realizado en Estados Unidos y publicado por el CDC en 2014, la prevalencia
del TEA fue de 1 por cada 68 niños y adolescentes o de 14,7 por cada 1 000 habitantes. Estos
resultados surgen del seguimiento de 363.749 niños y adolescentes provenientes de 11 centros
ubicados en diferentes estados del país. Cabe recalcar que existen reportes de prevalencia de
TEA en países europeos y Canadá que estiman una prevalencia del 1 % (26,27).
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
5. Justificación
Los padres de familia y/o responsables que están al cuidado de un niño y adolescente con TEA
no tienen la orientación adecuada sobre las acciones que deben considerar en la condición que
tiene su hijo. Este problema radica en la ausencia de una adecuada orientación por parte de los
profesionales de la salud que atienden a los niños y adolescentes con TEA.
Otros limitantes en la atención integral de las personas con TEA son: la falta de detección temprana
por desconocimiento de los criterios clínicos, la variabilidad del tratamiento farmacológico,
la heterogeneidad del manejo psicoterapéutico, la falta de seguimiento y la ausencia de una
evaluación funcional y de discapacidad de estas personas.
En Ecuador, no existe ningún instrumento normativo que guíe y facilite la detección temprana,
el diagnóstico, el tratamiento y el seguimiento de niños y adolescentes con TEA, ni que provea
información útil que pueda ser direccionada a los cuidadores de personas con estos diagnósticos.
De ahí que se realicen diagnósticos inadecuados y tardíos, con exclusión social de las personas
con TEA y sus familias. Al no existir un método unificado para el adecuado diagnóstico temprano
y oportuno del TEA, se manifiesta una dispersión de criterios, lo cual contribuye a la ausencia de
registros nacionales claros y confiables.
Por todo lo expuesto, es de prioridad nacional la adaptación de una Guía de Práctica Clínica,
que aspira a ser un instrumento útil para los profesionales implicados en la detección temprana,
diagnóstico, tratamiento, rehabilitación y seguimiento de los niños y adolescentes diagnosticados
con TEA en el Sistema Nacional de Salud; que adicionalmente contemple un enfoque orientador
para madres, padres, familiares y otros implicados en el cuidado de estas personas, con la
finalidad de mejorar la calidad de vida de estas familias ecuatorianas.
6. Objetivo general
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
7. Objetivos específicos
• Identificar acciones para la detección temprana de síntomas de los TEA para un diagnóstico
apropiado y oportuno.
• Definir cuáles son las pruebas diagnósticas e instrumentos de evaluación eficaces y
adecuados para el país, para confirmar o descartar la presencia de los TEA.
• Describir las intervenciones médicas, farmacológicas y de rehabilitación más adecuadas
para el tratamiento de niños y adolescentes con diagnóstico de TEA.
• Identificar intervenciones y buenas prácticas que se enmarquen en el Plan Estratégico
Nacional de Salud Mental 2015-2017 para el tratamiento de niños y adolescentes con
diagnóstico de TEA.
• Proponer recomendaciones para la detección temprana, diagnóstico, tratamiento,
rehabilitación y seguimiento de las personas con TEA.
8. Alcance
La presente guía está dirigida a todo el Sistema Nacional de Salud y brinda recomendaciones
para ser aplicadas en todos los niveles de atención.
9. Glosario de términos
Apgar familiar: es una herramienta o instrumento que indica cómo los miembros de una
determinada familia perciben de manera global el nivel de funcionamiento familiar (30).
Aptitudes potenciales o potencialidad: capacidades que pueden ser desarrolladas por una
persona (31).
Dismorfías: anormalidades en alguna parte del cuerpo de un ser vivo, causadas en su desarrollo (34).
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Funciones ejecutivas: son los procesos que asocian ideas, movimientos y acciones simples
para que en conjunto se generen conductas y acciones complejas dependientes de la corteza
prefrontal, implicadas en el control, regulación y planificación eficiente de la conducta humana y
cognición (35).
Funciones sensoriales: entrada de la información del entorno al sistema nervioso de amplia gama
de informaciones, que conforma el mundo que nos rodea, es proporcionada por los receptores
sensoriales que detectan estímulos tales como: tacto, sonido, luz, dolor, frío, calor, etc. (37).
Neurorehabilitación: recuperación de las funciones del sistema nervioso a distintos niveles (39).
En lo que se refiere a las causas del autismo, la conclusión general refiere un origen
multidimensional (44), el mismo que incluye tanto factores genéticos como ambientales. Desde
diversas disciplinas y perspectivas, diversos autores han aportado con datos acerca de posibles
causas, pero los hallazgos no han podido ser generalizados y no se ha podido llegar a una etiología
definida. Al respecto, desde la perspectiva de la determinación social de la salud, esto se debe a
que pueden ser distintas dimensiones que intervienen en los TEA, las mismas que se expresan
en el fenotipo y genotipo de una forma diversa. Varios investigadores exploran alteraciones de
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
tipo genético como posibles causas que ocasionan perturbaciones a nivel cerebral en etapas
tempranas (durante el embarazo o después del nacimiento) (45-49). Las apreciaciones de las
causas médicas subyacentes varían ampliamente, pero éstas probablemente se producen en
menos del 10 % de los niños y adolescentes con TEA (50).
Otras investigaciones han demostrado que existen casos de autismo por alteraciones anatómicas,
especialmente ubicadas en las porciones inferiores cerebelosas, acompañadas por pérdida
celular. (51) Evidencias clínicas de tipo neuroanatómico, bioquímico, neurofisiológico, genético
e inmunológico, lo consideran como un trastorno neurobiológico complejo relacionado con la
afectación de diversos circuitos neuronales que están bajo la influencia de factores genéticos y
del contexto, lo que afecta al “cerebro social” (52).
Recientes estudios indican que no es posible explicar una etiología genética para los TEA
a través de un solo gen. El modelo actual sugiere la participación de diversas alteraciones
genéticas en distintos niveles (distintos genes en distintas áreas cromosómicas) tales como:
gen del transportador de serotonina (SLC6A4), gen del receptor del glutamato (GRINK2),
gen del receptor A del ácido-gamma-aminobutírico (GABA-A), gen de la subunidad beta
3 del receptor GABA (GABRB3), entre otros. Dicho esto, está claro que los TEA tienen un
fuerte componente genético, demostrado por altas concordancias en gemelos monocigóticos
(hasta 90 %) y la alta probabilidad de tener otro hijo afectado en padres y madres con hijos
con TEA (estimaciones recientes van desde 10 % a 20 %, con tasas más altas para varones
que mujeres) (52,54-57).
21
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
de inicio temprano. Sin embargo, hasta el momento, no se han establecido vínculos consistentes
o factores ambientales específicos (59–61). Adicionalmente hay una creciente tendencia a la
investigación destinada a comprobar los correlatos neurales (medida por electrofisiología o
neuroimagen) que sería capaz de pronosticar la posibilidad para desarrollar TEA (62,63).
Algunos autores refieren que en la mayoría de casos de TEA, el desarrollo del niño/a es normal
hasta el final del primer año o al año y seis meses de vida. El alcance de los objetivos del
neurodesarrollo (motores, comunicativos y de relación social) se cumplen de manera adecuada
hasta las edades mencionadas (44,64). Hacia los 18 meses, la mayor parte de los padres y
madres describen las primeras manifestaciones de alteraciones en el desarrollo, frecuentemente
con pérdida de habilidades previamente adquiridas, como las relacionadas con el lenguaje (una
sordera extraña que no responde cuando se lo llama, ni cuando se le da órdenes, y que reacciona,
en cambio, a otros estímulos auditivos).
La mayoría de personas con TEA presentan una pérdida progresiva de habilidades. Las
descripciones clásicas de síntomas presentes desde el nacimiento o estancamiento del
desarrollo, no parecen estar tan apegadas a la realidad clínica. Sin embargo, se debe entender la
regresión como una de las dimensiones alteradas de manera continua en los TEA, definida por el
momento y la gravedad de la pérdida de habilidades. Esto explicaría el enmascaramiento de una
lenta regresión en aquellas personas con mayores alteraciones y con una presentación clínica
más temprana. Adicionalmente también se podría explicar la pérdida de habilidades brusca en
presentaciones clínicas tardías (65).
A través de los años, las personas con TEA pueden presentar un declive en el rendimiento
cognitivo, aunque también un aumento en el aspecto verbal del cociente intelectual (CI). Al
parecer, la adquisición de un lenguaje funcional antes de los seis años y un rendimiento de CI
de más de 70 son factores de buen pronóstico (menor declive cognitivo), junto a un CI verbal y
cognitivo sobre 70. Por estas razones, aquellas personas afectadas por síndrome de Asperger,
tienen el mejor pronóstico dentro de los TEA (68).
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Con este equipo, se conformaron grupos de trabajo para la síntesis de las recomendaciones en
cuanto a detección temprana, diagnóstico, tratamiento, rehabilitación y seguimiento.
La metodología de esta guía se elaboró con la herramienta internacional ADAPTE 2.0 (1), la cual
brinda las herramientas necesarias para la adaptación de guías de práctica clínica. El tema de
la guía se seleccionó mediante la calificación de los criterios del baremo (69), definidos por la
autoridad sanitaria, a través de los que se obtuvo un puntaje de 21, equivalente a una prioridad
alta para la salud pública.
Se elaboraron preguntas generales y preguntas clínicas. Para elaborar las preguntas clínicas
se utilizó el formato PICO (paciente, intervención, comparación y resultado por sus siglas en
inglés), con la finalidad de guiar la información científica en el proceso de búsqueda y así facilitar
el desarrollo de las recomendaciones por el equipo de trabajo. Las preguntas PICO fueron
estructuradas y revaloradas por el mencionado equipo (70).
El equipo de trabajo de adaptación seleccionó como material de inicio guías de práctica clínica
con los siguientes criterios:
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
• National Collaborating Centre for Women’s and Children’s Health (UK). Autism: recognition,
referral and diagnosis of children and young people on the autism spectrum. Londres: RCOG
Press; 2011 Sep (2).
• National Collaborating Centre for Mental Health (UK). Autism. The management and support
of children and young people on the autism spectrum. Leicester: British Psychological
Society; 2013 (3).
Revisiones y validaciones
Para la presente guía, se utilizó el sistema Oxford del Centro de Medicina Basada en Evidencia
(OCEBM por sus siglas en inglés) para niveles de recomendación y grados de evidencia científica
en criterios de detección, diagnóstico, tratamiento, rehabilitación y seguimiento (72).
En esta guía, el lector encontrará, al margen derecho de las páginas, la calidad de la evidencia
y/o el grado de fuerza de las diferentes recomendaciones presentadas. Las recomendaciones se
encuentran sustentadas por evidencia calificada, para lo cual se colocó la escala utilizada, según la
fuente primaria, después del número o letra del nivel de evidencia y recomendación (ver anexo 2).
El símbolo ü representa un punto de buena práctica clínica sobre el cual el equipo de trabajo
y el grupo de validación externa acuerda. Por lo general, son aspectos prácticos sobre los
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
que se quiere hacer énfasis y para los cuales probablemente no existe suficiente evidencia
científica que los sustente. Estos aspectos de buena práctica clínica no son una alternativa a las
recomendaciones basadas en la evidencia científica, sino que deben considerarse únicamente
cuando no existe otra manera de destacar dicho aspecto.
La detección temprana y oportuna de los TEA es fundamental para acompañar a los padres y
madres de estos niños y niñas en el proceso relacional con sus hijos/as, además de desarrollar
modos de comunicación que les permitan relacionarse socialmente desde temprana edad. Para
la detección oportuna es importante identificar algunas conductas que pueden ser señales de
alerta y que varían de acuerdo a la edad del niño/a (tabla 2), aunque dichas alertas no indiquen
necesariamente la presencia de autismo (6,48). Habiendo dicho esto, existen señales de alerta
inmediata en el niño o adolescente que deben direccionar al clínico a sospechar de TEA y tomar
las acciones correspondientes de referencia hacia un equipo multidisciplinario (48):
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Fuentes: Charman T. Diagnosis of autism spectrum disorder: reconciling the syndrome, its diverse origins, and
variation in expression (16); Grupo de Trabajo de la Guía de Práctica Clínica. Guía de práctica clínica para el
manejo de pacientes con trastornos del espectro autista en atención primaria (48) ; Mazefsky CA, McPartland JC,
Gastgeb HZ & Minshew NJ (73); Pellicano E Do Autistic Symptoms Persist Across Time? Evidence of Substantial
Change in Symptomatology Over a 3-year Period in Cognitively Able Children With Autism (74); y Collège des
médecins du Québec et de l’Ordre des psychologues du Québec. Les troubles du spectre de l’autisme l’évaluation
clinique (75). Elaboración propia.
La detección temprana de los TEA puede darse en cualquier nivel de atención, pero idealmente el
riesgo para desarrollar TEA debe ser identificado en el primer nivel de atención (tabla 3).
Primer nivel de atención en salud. En este nivel, es necesario identificar a los niños y
adolescentes de riesgo para cualquier tipo de alteración del desarrollo, pero en particular, para los
TEA. Dentro del control de niño sano, es necesario realizar un tamizaje a través de la vigilancia
evolutiva del neurodesarrollo de rutina, que debe incluir una valoración integral del niño o niña y
una entrevista a los padres y madres (tabla 3) (76).
Dentro del tamizaje del neurodesarrollo en el primer nivel, existen momentos específicos donde
la sospecha de TEA debe ser corroborada lo más pronto posible. Esos momentos son el retraso
en las áreas de lenguaje y desarrollo social mediante la prueba de Denver II (formulario 028 test
de Denver II, anexo 3). Dicho retraso también puede ser producto de una evaluación a través de
la Lista de Verificación Modificada de Autismo para Niños Pequeños (M–CHAT por sus siglas en
inglés) (anexo 4) (66,76).
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
El propósito de evaluar el desarrollo dependerá de la edad del niño. Por ejemplo, en recién
nacidos las pruebas logran detectar problemas neurológicos, pero en niños de un mes a seis
años de edad se pueden detectar potenciales problemas del desarrollo. Se debe tener en cuenta
que los resultados del test Denver II son medidos de una forma objetiva y que la prueba tiene
una buena confiabilidad en la aplicación y replicación (correlación superior a 0,90 cuando se
aplica varias veces). Adicionalmente, es importante destacar que el test Denver II no evalúa la
inteligencia y no debe ser utilizado para propósitos diagnósticos. La aplicación e interpretación de
esta prueba debe ser dirigida de una manera ajustada por el personal entrenado (77,78).
El test Denver II explora al niño o niña en 20 tareas simples (ver anexo 3), que se ubican en cuatro
sectores (79):
• Personal-social
• Motor fino adaptativo
• Lenguaje
• Motor grueso
Segundo y tercer nivel de atención. En estos dos niveles, es posible realizar una investigación
a profundidad de niñas y niños identificados con riesgo de autismo (detección de señales de
alerta) (76).
Aparte de la evaluación de lo mencionado para el primer nivel de atención (en caso de que no se
la haya realizado en dicho nivel), en el segundo y tercer nivel de atención en salud se debe utilizar
el test M-CHAT. Este test o cuestionario para autismo en niños pequeños ha sido probado para su
uso entre los 16 y los 30 meses de edad, y está constituido por dos secciones, una para padres
(nueve preguntas) y otra para el explorador (cinco preguntas) (ver anexo 4) (24,80). El M-CHAT
investiga 3 conductas claves ausentes en los niños con autismo (24,80):
• Gestos protodeclarativos
• Seguimiento de la mirada
• Juego de ficción
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Las acciones de tamizaje del segundo y tercer nivel que se repiten se las debe hacer de acuerdo al criterio del
clínico, especialmente si las mismas no fueron realizadas en el primer nivel. Fuentes: Ministerio de Salud de Chila
(Minsal). Guía de Práctica Clínica de Detección y Diagnóstico Oportuno de los Trastornos del Espectro Autista
(TEA)(76); J Javaloyes MA. Autismo: criterios diagnósticos y diagnóstico (77); SIGN Assessment, diagnosis
and clinical interventions for children and young people with autism spectrum disorders. A national clinical
guideline (78); Frankenburg WK, Dodds J, Archer P, Shapiro H y Bresnick B. The Denver II: a major revision
and restandardization of the Denver Developmental Screening Test (79); Díez-Cuervo A et al. Guía de buena
práctica para el diagnóstico de los trastornos del espectro autista (66); ]; Robins D, Fein D, Barton M y Fuentes
J. Cuestionario del desarrollo comunicativo y social en la infancia (M-CHAT)(80); Volkmar Volkmar F, Siegel M,
et al. Practice Parameter for the Assessment and Treatment of Children and Adolescents With Autism Spectrum
Disorde(24) Elaboración propia.
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Cuando el niño o niña es referido después de los dos años, el diagnóstico confirmatorio de los
TEA se realizará a través de los criterios clínicos del DSM-V con el apoyo de los criterios del CIE-
10 (anexo 5) (2).
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
La actividad de los niños y adolescentes con TEA presenta una amplia diversidad, cuyos
síntomas y signos evolucionan en el tiempo. El equipo de trabajo de esta guía ha decidido
incorporar la Clasificación Internacional de Funcionamiento, de la Discapacidad y de la Salud
para la Infancia y la Adolescencia (CIF-IA) por los criterios que recogen las capacidades
funcionales neurocognitivas y sociales, tomando en cuenta el contexto social en el que se
desenvuelve la persona con TEA (24,87–90).
Los síntomas centrales del TEA se puntualizan por grados de severidad de acuerdo a criterios
del DSM-V (67,73,91). Al incorporar los criterios de la CIF-IA, es posible lograr una cuantificación
más exacta de la funcionalidad de cada persona, lo que se ajusta más a la realidad de los TEA.
De este modo, es posible clasificar a los TEA en tres categorías funcionales (tabla 4) (21,92).
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
La inflexibilidad del
Funcionalidad comportamiento causa
Leves Dificultad para
Inteligencia en actividades una interferencia
1 (necesita iniciar interacciones
normal y participación significativa con el
ayuda) sociales
socio familiar funcionamiento en uno
o más contextos.
Las categorías del perfil funcional se encuentran a la izquierda. Se presentan las clasificaciones respectivas
del DSM-V y de la CIF-IA, así como las necesidades individuales, comunicación social y comportamientos
repetitivos correspondientes a cada categoría. Fuentes: Manzano Garrido J. El espectro del autismo hoy: un
modelo relacional (93); Falkmer T, Anderson K, Falkmer M y Horlin C. Diagnostic procedures in autism spectrum
disorders: a systematic literature review (87); Volkmar F et al.; American Academy of Child and Adolescent
Psychiatru (AACAP) Committee on Quality Issues (CQI). Practice Parameter for the Assessment and Treatment
of Children and Adolescents With Autism Spectrum Disorder(24); Just M, Cherkassky V, Keller T y Minshew
N Cortical activation and synchronization during sentence comprehension in high-functioning autism: evidence
of underconnectivity (88); Fombonne E Epidemiology of pervasive developmental disorders (89); World Health
Organization, International classification of functioning, disability, and health - children and youth version (90);
Bölte S, et al. Classification of functioning and impairment: The development of ICF core sets for autism spectrum
disorder (21); Artigas-Pallarés J, Gabau-Vila E, Guitart-Feliubadaló M. El autismo sindrómico: I. Aspectos
generales (92). Elaboración propia.
Mediante el perfil funcional del niño y adolescente con TEA, se establecen las necesidades
individuales y familiares; promoviendo la inclusión socioeducativa y el potencial de integración
(tabla 4) (93)
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Subpreguntas
• ¿Cuáles son los antecedentes familiares que se debe investigar para determinar la etiología
de los TEA?
Evidencias / recomendaciones Nivel / grado
Los estudios complementarios se tienen que individualizar de acuerdo a los datos obtenidos
de la historia clínica y la exploración física, si los factores son genéticos, ambientales o E: 2b/R: B
metabólicos, para determinar si se trata de TEA primario o secundario (2,3).
Las pruebas genéticas se deben considerar si está indicado clínicamente, pero no
llevarlas a cabo de forma rutinaria, en los niños y adolescentes con TEA. Estas pruebas
E: 2b/R: B
deben llevarse a cabo de conformidad con la práctica genética local, especialmente para
detectar síndrome X frágil (2,3).
Realizar EEG y potenciales evocados cuando existan evidencias de daño neurológico,
E: 2b/R: B
epilepsia, anomalías de tipo auditivo o de procesamiento sensorial (2,3).
Realizar exámenes metabólicos si la persona presenta letargia, vómitos cíclicos,
crisis convulsivas de inicio temprano, dismorfias, hipo o hipertonía, hiperamonemia,
E: 2b/R: B
acidosis metabólica, ataxia, distonías, retraso en el crecimiento, alteraciones cutáneas,
alteraciones oculares y/o alergia a algunos alimentos o problemas intestinales (2,3,76).
Revisar en la historia clínica si existe algún miembro de la familia con TEA, porque los
padres de un niño y adolescente con TEA tienen mayor probabilidad de tener otro niño E: 5 /R: D
con iguales características (2,3,76).
En los TEA la diversidad de síntomas del neurodesarrollo que se presentan ocupa el centro
de atención en lo que al tratamiento se refiere, por lo que se dejan de lado las comorbilidades
que repetidamente se manifiestan. Las que con más frecuencia aparecen son: retraso mental,
trastornos de ansiedad (fobias, trastorno obsesivo-compulsivo o TOC, crisis de pánico), trastornos
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
del estado anímico (depresivo, trastorno bipolar), trastorno por déficit de atención e hiperactividad
(TDAH) y el trastorno disruptivo del comportamiento. De acuerdo a varios estudios la comorbilidad
de los TEA oscila entre el 40 % y el 70 %, los mismos que han revelado una relación inversa entre
la edad de la persona y los niveles de comorbilidad (55,56,92,94).
Existen otras comorbilidades que pueden presentarse en las personas con TEA, como:
Epilepsia. Existe una amplia variación entre los índices de comorbilidad que se plantean entre
los TEA aunque los resultados varían de acuerdo al método de análisis empleado. Sin embargo,
se mantienen como factores de riesgo el retraso mental, el género, la gravedad en los rasgos
autistas, la historia familiar y la regresión en el desarrollo. Las anormalidades epileptiformes en el
EEG son comunes en los niños y adolescentes con TEA (10 % al 72 % según los reportes). No hay
recomendaciones basadas en evidencia para el tratamiento de estas “convulsiones subclínicas”
y existe debate sobre si estas tienen alteraciones en el lenguaje, cognición y conducta. No se
solicita EEG a las personas con TEA que no manifiesten epilepsia; sin embargo debe mantenerse
el respectivo monitoreo (57,61,95,96).
Alteraciones del sueño. Las madres reportan tres problemas específicos del sueño en relación
con el dolor: parasomnias, trastornos respiratorios y duración del sueño (99,100).
Trastorno por déficit de atención e hiperactividad. Los niños y adolescentes con TEA y TDAH
pueden presentar un funcionamiento cognitivo inferior, deterioro social grave y mayores demoras
en el funcionamiento adaptativo (101,103,104).
Subpregunta
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Para elaborar el diagnóstico de TEA es necesario verificar los criterios establecidos en el DSM-V
y considerar en la evaluación síntomas que pueden confundirse con una amplia diversidad de
patologías, entre las principales:
Trastorno reactivo del vínculo. Se manifiesta con síntomas en su expresión social, marcado
como “…demasiado inhibido, hipervigilante o ampliamente ambivalente y contradictorio (ej.
vigilancia fría, resistencia a satisfacciones o comodidades, una mezcla de acercamiento y
evitación)…” (106) mientras que el tipo desinhibido muestra una “…sociabilidad indiscriminada
con incapacidad para manifestar vínculos selectivos apropiados.” (106) En ambos casos se
diferencia la sintomatología del trastorno reactivo del vínculo con el TEA (24).
Trastorno obsesivo compulsivo (TOC). Los niños y adolescentes con TOC presentan intereses
restringidos y conductas inusuales semejantes a los TEA; sin embargo el lenguaje y las habilidades
comunicativas no se alteran (66,107,108).
Retraso mental. Aunque el retraso mental y los TEA pueden aparecer a la vez, es necesario
hacer una diferenciación ya que en el retraso mental severo a profundo aparecen síntomas como
movimientos estereotipados que pueden ser motivo de confusión. (66)
Mutismo selectivo. Las personas con este trastorno tienen capacidad de hablar y comunicarse
normalmente, exceptuado en precisas situaciones con personas desconocidas o en su medio
escolar; mientras que, en los TEA, ya hay alteraciones desde el inicio de la adquisición del
lenguaje (109).
Esquizofrenia. Aparecen alteraciones del pensamiento que pueden simular a las ideas fijas o
intereses restringidos del TEA (110).
Trastorno por movimientos estereotipados (TME). Son movimientos repetidos similares a los
del TEA y retraso mental, impidiendo su diferenciación. El diagnóstico diferencial se establece por
medio de los criterios de TEA, en caso de cumplir alguno se descarta el TME (111).
Trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH). Los criterios diagnósticos tanto
de TEA como TDAH se engloban; de hecho estos cuadros frecuentemente son comórbidos. Los
síntomas de inatención se confunden con problemas en la interacción social (103,112).
34
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Subpreguntas
• ¿Cómo hacer el diagnóstico diferencial entre TEA y los trastornos específicos del desarrollo?
• ¿Cómo hacer el diagnóstico diferencial entre TEA y deficiencias sensoriales?
• ¿Cómo hacer el diagnóstico diferencial con trastorno reactivo del vínculo?
• ¿Cómo hacer el diagnóstico diferencial entre TEA y TOC?
• ¿Cómo hacer el diagnóstico diferencial entre TEA y retraso mental?
• ¿Cómo hacer el diagnóstico diferencial entre TEA y el mutismo selectivo?
• ¿Cómo hacer el diagnóstico diferencial entre TEA y esquizofrenia?
• ¿Cómo hacer el diagnóstico diferencial entre TEA y trastorno por movimientos estereotipados?
• ¿Cómo hacer el diagnóstico diferencial entre TEA y TDAH?
• ¿Cómo hacer el diagnóstico diferencial entre TEA y trastornos de ansiedad?
35
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
13.4 Tratamiento
Subpregunta
• ¿Cuáles son los cuidados médicos generales que requieren las personas con TEA?
Evidencias / recomendaciones Nivel / grado
Los niños y adolescentes con TEA requieren los mismos cuidados básicos de salud que
los niños en general y se benefician de las mismas actividades de prevención como las
inmunizaciones. Además de esto, pueden requerir cuidados específicos relacionados con E: 5 / R: D
condiciones etiológicas subyacentes como el síndrome de X frágil o la esclerosis tuberosa;
o con otras condiciones como la epilepsia, frecuentemente asociada a TEA (64).
El tratamiento farmacológico de los TEA debe ser decidido por el médico tratante
(especialista en neurología infantil, psiquiatra infanto-juvenil y/o afines, del equipo
multidisciplinario en el tercer nivel de atención). La decisión deberá ser tomada en ü
conjunto con la familia y/o cuidador y, de ser posible con el niño/a o adolescente con
TEA. El inicio del tratamiento farmacológico deberá ser reportado en la historia clínica.
36
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
¿Cuáles son las situaciones que ameritan tratamiento farmacológico en los TEA?
Subpreguntas
• ¿Cuáles son las comorbilidades más frecuentes que se asocian con TEA?
Cuando existe algún tipo de comorbilidades frecuentes (retraso mental, conductas repetitivas,
rigidez conductual, trastorno obsesivo compulsivo, trastorno de movimientos estereotipados,
trastornos de ansiedad, depresión, TDAH y trastornos disruptivos del comportamiento, trastornos
del sueño), los médicos especializados serán los únicos que podrán prescribir un tratamiento
farmacológico. Para ello, deberá estar claramente diagnosticada la comorbilidad.
• ¿Cuáles son los medicamentos que se indican para conductas repetitivas – rigidez
conductual – síntomas obsesivo- compulsivos / trastorno obsesivo-compulsivo – trastorno
de movimientos estereotipados?
Evidencias / recomendaciones Nivel / grado
Para tratamiento de primera línea con síntomas severos, conductas repetitivas – rigidez
conductual – síntomas obsesivo- compulsivos / trastorno obsesivo-compulsivo – trastorno
de movimientos estereotipados; se recomienda:
Fluoxetina (115,116) 1b / R: A
Risperidona (117–120) 1b / R: A
Aripiprazol* (121–123) 1a / R: A
Ácido valproico (124) 1b / R: A
* Medicamento no consta en el Cuadro Nacional de Medicamentos Básicos 9.a revisión. Conforme la norma
vigente, requiere justificación técnica para evaluar pertinencia de adquisición y financiamiento por parte de la Red
Pública Integral de Salud.
37
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
• ¿Cuáles son los medicamentos que se indican para el clúster que incluye hiperactividad,
impulsividad, inatención, TDAH?
Evidencias / recomendaciones Nivel / grado
• ¿Cuáles son los medicamentos que se indican para el clúster que incluye agresividad,
irritabilidad, reacciones explosivas, autolesiones, trastorno explosivo intermitente?
Evidencias / recomendaciones Nivel / grado
* Medicamento no consta en el Cuadro Nacional de Medicamentos Básicos 9.a revisión. Conforme la norma
vigente, requiere justificación técnica para evaluar pertinencia de adquisición y financiamiento por parte de la Red
Pública Integral de Salud.
• ¿Cuáles son los medicamentos que se indican para el clúster que incluye fenotipo bipolar
(ciclaciones conductuales con ira y euforia, disminución de la necesidad de sueño, irritabilidad,
agresión, autoagresiones, hipersexualidad), trastorno bipolar tipo 1 o no especificado?
38
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
* Medicamento no consta en el Cuadro Nacional de Medicamentos Básicos 9.a revisión. Conforme la norma
vigente, requiere justificación técnica para evaluar pertinencia de adquisición y financiamiento por parte de la Red
Pública Integral de Salud.
• ¿Cuáles son los medicamentos que se indican para el clúster que incluye trastornos del
sueño o del ritmo circadiano primario o diagnóstico de trastorno del sueño no especificado?
Evidencias / recomendaciones Nivel / grado
Tratamientos de primera línea para síntomas severos con trastornos del sueño o del E:
ritmo circadiano primario o diagnóstico de trastorno del sueño no especificado:
Melatonina * (164,165) 1a
Antihistamínicos (Hidroxizina*)(166) 5
* Medicamento no consta en el Cuadro Nacional de Medicamentos Básicos 9.a revisión. Conforme la norma
vigente, requiere justificación técnica para evaluar pertinencia de adquisición y financiamiento por parte de la Red
Pública Integral de Salud.
• ¿Cuáles son los medicamentos que se indican para el clúster que incluye fenotipo depresivo
(cambios marcados a partir de los síntomas basales como aislamiento, irritabilidad, tristeza
o crisis de llanto, falta de energía, anorexia, pérdida de peso) – Diagnóstico de trastorno
depresivo mayor o trastorno depresivo no especificado?
Evidencias / recomendaciones Nivel / grado
Tratamientos de primera línea para síntomas severos con fenotipo depresivo o trastorno
E:
depresivo mayor o trastorno depresivo no especificado:
2b
Fluoxetina (167)
1b
Sertralina (168)
• ¿Cuáles son los medicamentos que se indican en el clúster que incluye síntomas de ansiedad
o diagnóstico de trastorno de ansiedad generalizada o trastorno de ansiedad no especificado?
Evidencias / recomendaciones Nivel / grado
Tratamientos de primera línea para síntomas severos con síntomas de ansiedad o E:
trastorno de ansiedad generalizada o trastorno de ansiedad no especificado:
Fluoxetina (115) 1b
39
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Se debe garantizar que las personas con TEA tengan acceso a todos los servicios sociales y de salud.
La evaluación, diagnóstico y abordaje de los TEA debe realizarse por parte de equipos
multidisciplinarios, con la suficiente formación en el tema. Las intervenciones y cuidados
proporcionados deben planificarse tomando en consideración las necesidades especiales de
cada individuo, así como su contexto familiar y social. Los profesionales a cargo del abordaje
de los TEA deben conocer la red de atención en salud de manera que realicen intervenciones y
derivaciones adecuadas, oportunas a otros equipos de salud de las personas diagnosticadas con
TEA y sus familiares. Los lugares donde se brinden servicios de salud a personas con TEA deben
estar adecuados de manera que faciliten el acceso y disminuyan las incomodidades propias de
las diferencias sensoriales (visuales- auditivas).
En cuanto al manejo integral de los TEA, se debe incluir un plan de rehabilitación individualizado
que incluya procesos terapéuticos, sociales, educativos, formativos, comunitarios y sociales,
con el fin de mejorar la calidad de vida y la integración del niño y adolescente al medio social,
familiar y ocupacional si fuese el caso (76). Por tanto, el plan de rehabilitación se sustenta en el
perfil funcional (tabla 4), tomando en cuenta las funciones neurocognitivas que son de carácter
individual y de acuerdo con la condición de cada persona. El enfoque rehabilitador para personas
con TEA debe contemplar las siguientes dimensiones (169,170):
• Interacciones sociales
• Comunicación y del lenguaje
• Comportamiento
• Funciones psicomotoras
• Funciones emocionales
• Funciones ejecutivas, atencionales y de memoria
• Funciones sensoriales y perceptuales
• Actividades de la vida diaria (higiene personal, vestida y desvestida, alimentación)
• Aprendizajes escolares
• Participación social, profesional, entretenimiento y vida asociativa, entre otros
Existen modelos de abordaje que toman en cuenta las características principales que están
alteradas en el TEA. El modelo DENVER creado por Sally Rogers en los años ochenta, dentro
del programa de discapacidad del desarrollo, realizado por la Universidad de Colorado Health
Sciences Center (UCHSC por sus siglas en inglés), consideró que en la base del modelo, está
la familia y que los tratamientos deben ser individualizados ya que el TEA es un problema en la
interacción social; por tanto su base debe ser en la dinámica social. En la misma perspectiva
se encuentra el programa de entrenamiento y educación relacionado con la comunicación para
niños y adolescentes con TEA (TEACCH por sus siglas en inglés) centrado en el entrenamiento
para el desarrollo de habilidades sociales y de comunicación, incluido el entrenamiento a
padres y madres (171).
40
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
41
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Ayuda a las personas a dominar las actividades de la vida diaria como comer,
Terapista ocupacional vestirse, utilizar el baño de manera independiente. Se centra en el desarrollo de la
motricidad fina y en optimizar la función superior del cuerpo y mejorar la postura.
Favorece la labor conjunta que deben realizar la escuela y la familia en beneficio
del niño y adolescente con este trastorno, contribuyendo de forma integral al
Trabajador social mejoramiento de su calidad de vida, desde el ámbito familiar, económico y social.
Se dedica a la evaluación, diagnóstico y tratamiento de funciones mentales que
afectan al desarrollo del aprendizaje y actividades cotidianas como lateralidad,
nociones témporo-espaciales, memoria, conducta, psicomotricidad, atención
Psicorehabilitador
y concentración.
Es quien asiste a los niños y adolescentes para que tengan medidas
pedagógicas adecuadas, reciban los apoyos técnicos, humanos y materiales
necesarios; de forma temporal o permanente, para ayudarles a progresar en el
Educador especial
currículo escolar en un contexto educativo favorable e integrador.
Fuentes: Miranda Fernandes FD, De La Higuera Amato CA, Molini-Avejonas DR. Resultados de terapia de
lenguaje con niños del espectro autista (172); León -Andrade C Una visión personal de la psiquiatría actual ,
con énfasis en el papel de la Psiquiatría (173); Martos-Pérez J, Llorente-Comí M. Tratamiento de los trastornos
del espectro autista: unión entre la comprensión y la práctica basada en la evidencia (174); [173]; Barthelemy
C, Boiron M, Adrien JL, Dansart P, Guerin P & Lelord G Evaluación, rehabilitación e integración: progresión
gradual hacia los demás. (175); Zalaquett D, Schönstedt M; Angeli M; Herrrera C & Moyano A Fundamentos de
la intervención temprana en niños con trastornos del espectro autista. (176); Minsal. Guía de Práctica Clínica
de Detección y Diagnóstico Oportuno de los Trastornos del Espectro Autista (TEA). (76). Elaboración Propia.
42
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Existen varias alternativas para la rehabilitación, algunas con poco sustento científico y otras que
tienen fundamento teórico sin evidencias científicas; sin embargo en la aplicabilidad terapéutica
se consiguen resultados favorables para la persona con TEA (tabla 6 y 7). Para mayor detalle de
cada terapia, referirse al anexo 6.
Se describe una lista integral de terapias más aplicadas para la rehabilitación, menos aplicadas y de eventual
aplicación. Para mayor información sobre cada terapia referirse al anexo 6. SAAC: Sistemas Aumentativos y/o
Alternativos de Comunicación; PECS: sistema comunicativo de intercambio de imágenes por sus siglas en inglés;
TEACCH: entrenamiento y educación relacionado con la comunicación para niños autistas y discapacitados
por sus siglas en inglés; SCERTS: apoyo a la comunicación social/emocional/ transaccional por sus siglas en
inglés. Fuentes: Departamento de Discapacidad y Rehabilitación (2011) (76); Castro C, Alcantud F & Rico D
(2012) (179); Ruiz M (2015) (180); Zalaquett D, Schönstedt M; Angeli M; Herrera C & Moyano A (2014) (176);
Seijas R (2015) (181); Montalva N, Quintanilla V & Del Solar P (2012)(182) ; Grupo de Trabajo de la Guía de
Práctica Clínica (2009) (48); MINISTERIO DE SALUD Y PROTECCIÓN SOCIAL. INSTITUTO DE EVALUACIÓN
TECNOLÓGICA EN SALUD (2015) (183); Mulas F, Ros-Cervera G, Millá M, Etchepareborda M, Abad L & Téllez
M (2010). (184) . Elaboración propia.
43
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Fuente: Minsal. Guía de Práctica Clínica de Detección y Diagnóstico Oportuno de los Trastornos del Espectro
Autista (TEA).(76). Elaboración propia.
Una vez que se haya establecido con claridad el perfil funcional del niño y adolescente con
TEA y se haya definido el abordaje, se debe desarrollar un plan de seguimiento; a cargo de los
profesionales respectivos. Este plan debe considerar el abordaje individual y familiar.
• Observación directa: evaluación llevada a cabo a través del terapista mediante observación
espontánea del niño y adolescente con TEA.
• Evaluación inicial de todos los puntos fuertes y dificultades que tiene la persona, luego
una planificación de cómo el terapista va a trabajar tomando en cuenta los principios de
rehabilitación en los pacientes con TEA.
El espacio para el abordaje y rehabilitación tiene que ser estructurado y predecible, en el que sea
posible anticipar lo que va a suceder. De ser posible se debe evitar los ambientes con demasiados
estímulos (ruidosos, desorganizados e hiperestimulantes). (185) En lo referente a la infraestructura
física, esta debe tener condiciones de accesibilidad, que no afecten a la sensibilidad del niño y
adolescente. En general, si las instalaciones lo permiten, transmitirán un ambiente agradable y
práctico al mismo tiempo, con condiciones óptimas de iluminación donde los niños y adolescentes
puedan sentirse cómodos; planteando como un gran módulo didáctico, que permite libertad de
movimiento y autodependencia, herramientas básicas para su rehabilitación.
44
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
El Modelo de Atención Integral del Sistema Nacional de Salud Familiar Comunitario e Intercultural
(MAIS-FCI) promueve la participación comunitaria como un medio y un fin para el mejoramiento
de las condiciones de vida de la población; orientando el accionar integrado de los actores del
Sistema Nacional de Salud hacia la garantía de los derechos en salud y el cumplimiento de las
metas del Plan Nacional de Desarrollo para el Buen Vivir al mejorar las condiciones de vida
y salud de la población ecuatoriana. Esto permitie fortalecer el proceso de la recuperación,
rehabilitación de la salud y cuidados paliativos para brindar una atención integral, de calidad y de
profundo respeto a las personas en su diversidad y su entorno, con énfasis en la participación
organizada de los sujetos sociales. (186)
Subpreguntas
• ¿Cómo realizar el plan de abordaje y rehabilitación de acuerdo al perfil funcional del niño y
adolescente con TEA?
• ¿Qué profesionales deben intervenir en el abordaje y rehabilitación del niño y adolescente
con TEA?
• ¿Cuáles son las metodologías para alcanzar un abordaje y rehabilitación adaptado para los
niños y adolescentes con TEA?
• ¿Cuál es el protocolo de seguimiento en el proceso de abordaje y rehabilitación para los
niños y adolescentes con TEA?
• ¿Cuáles son los espacios terapéuticos adecuados para el abordaje y rehabilitación de los
niños y adolescentes con TEA?
• ¿Cómo establecer la rehabilitación comunitaria y cuidados domiciliarios en los niños y
adolescentes con TEA?
Evidencias / recomendaciones Nivel / grado
En el plan de rehabilitación se toman en cuenta las funciones neurocognitivas que deben
rehabilitarse en los niños y adolescentes con TEA y así favorecer el desarrollo funcional,
ü
las habilidades sociales, el simbolismo a través del juego, la autonomía en actividades de
la rutina diaria y capacidades adaptativas.
El abordaje del TEA en niños y adolescentes se realiza en forma multidisciplinaria
(psiquiatra, neuropsicólogo, psicólogo clínico, psicólogo infantil, psicólogo familiar,
neuropsicomotricista, estimulador temprano en salud, fonoaudiólogo, terapista físico,
E: 5 / R: D
terapista ocupacional, trabajador social, psicorehabilitador, psicólogo educativo,
educador especial) con la finalidad de favorecer un adecuado manejo y desarrollar la
autonomía (76).
Al no existir evidencia definitiva respecto a resultados favorables para ningún modelo de
intervención, se recomienda la interacción de diversos enfoques terapéuticos, para la ü
atención de las necesidades individuales de los niños y adolescentes con TEA.
45
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
13.6 Seguimiento
Inicialmente se debe explicar, ya que es un deber ético, legal y moral de parte del equipo de
profesionales encargados, el comunicar sobre la condición del paciente con TEA; prevaleciendo
siempre el respeto a los derechos de esta y de su familia, de manera considerada y apropiada
(188). En el caso del TEA la persona encargada de anunciar el trastorno, debe ser una persona
que se encuentre vinculada con el caso, siendo el médico la persona idónea (189).
Es importante reflexionar sobre que el paciente con TEA y su familia tienen derecho a conocer
la realidad y recibir información correcta no solo del tema, sino de la condición en sí, con el fin
de razonar en lo posible la situación actual y venidera. Se deben evitar términos excesivamente
técnicos o pronósticos definitivos. El médico, además de lo antes citado debe tener la capacidad
para respetar, escuchar y acompañar de manera personalizada a la persona y su familia. El
médico no solo debe ser capacitado para formalizar el diagnóstico oportuno y tratamiento;
sino poseer la calidez competente para comunicar a la familia y así ayudarlos a tolerar esta
información, acompañándolos en el proceso. (190)
La información que se dé a los padres o representantes legales debe ser clara (considerando
el nivel cultural y académico de quienes reciben la información), acertada y sobre todo digna;
comunicando así de manera ajustada todos los detalles del trastorno. (191–193)
46
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
explicación detallada del mismo (169). Es importante tener en cuenta el momento que vive la
familia y lo que este anuncio suscita en el entorno familiar; por tanto, es fundamental que el
profesional que anuncie el diagnóstico tenga en cuenta este contexto y sea consecuente con
esta realidad (194,195).
¿Cuál debe ser el contenido de la información que se debe dar a los padres y de qué forma?
Es importante que el médico no solo diagnostique al paciente con TEA, sino que investigue cuál es
el entorno del mismo, que defina cuáles serían las consecuencias favorables y desfavorables del
trastorno, involucrando a la familia y que se establezca un vínculo de confianza entre familiares
y profesionales (196–198).
El equipo de salud está destinado a atender a los niños y adolescentes con TEA, guardando
un nexo de comunicación y acompañamiento a la familia, durante el proceso diagnóstico
e intervención. Su rol es concluir todos los informes de cada uno de los profesionales que lo
conforman, suscitando diálogos y alcanzando acuerdos, compromisos de responsabilidad común,
que permitan mejorar la atención del niño y adolescente.
Dicho equipo de salud está conformado por: médico, psicólogo, terapista del lenguaje y/o
fonoaudiólogo, terapista ocupacional, estimulador temprano; profesionales que desde sus
diferentes áreas, proyectarán una atención integral de calidad, cumpliendo acciones objetivas y
cálidas de prevención, diagnóstico e intervención, con el objetivo de mejorar la calidad de vida
en todos los ámbitos cotidianos. De este modo, ajustando regularmente los procesos de atención
integral, regulando fortalezas, debilidades y conflictos que pudieren presentarse en su accionar,
será posible construir cambios eficientes y oportunos en la atención a la persona con TEA cuando
sea necesario (13,170,200).
El informe de la condición del niño y adolescente con TEA afecta e influye en la dinámica de la
familia, perturba a los miembros y los desequilibra, generando crisis emocional y psicológica
consideradas hasta cierto punto, como esperadas. Esta indisposición puede ser crónica o
temporal, por lo cual es importante que todos los miembros del entorno familiar reciban apoyo
psicoterapéutico.
47
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Toda familia se adapta a los cambios de estructura y constitución utilizando recursos familiares e
individuales que le admitan afrontar la situación. Por lo tanto es de suma importancia la intervención
de un terapeuta familiar que les oriente hacia un manejo funcional de la discapacidad, teniendo
claro y como meta final apoyar a la familia a convivir con la discapacidad.
Es necesario sugerir que los padres se citen con otras personas cuyos hijos tenga el mismo
diagnóstico, mediante redes informales u organizaciones estructuradas, para crear lazos de
comprensión, apoyo e interrelación; en las cuales se obtendrá como beneficio el apoyo afectivo.
Adicionalmente se debe brindar información a los padres sobre las fases de reacción por las
que posiblemente atravesarán hasta lograr una adecuada adaptación y organización familiar, las
cuales presentarán un ciclo de desarrollo diverso en cuanto a duración y grado de afectación en
cada familia, así tenemos:
¿Cómo hacer el anuncio de la condición del niño y adolescente con TEA a su familia?
Subpreguntas
48
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Subpregunta
El plan de acompañamiento a la familia, al niño y adolescente con TEA, iniciará con la información
recogida a través de la entrevista para generar el genograma y los resultados del Apgar Familiar,
instrumentos que orientarán las directrices que se deberán tomar para que el abordaje sea
individualizado; teniendo como objetivo la atención a las necesidades específicas del paciente
con TEA, y en las que se observen también aspectos referentes a información e instrucción sobre
la discapacidad, asesoría y consejería familiar; a fin de alcanzar alivio, equilibrio psicológico y
emocional de todos los miembros, asesorando en el manejo, participación y apoyo en el abordaje
integral del niño y adolescente con TEA.
49
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Subpreguntas
• ¿Cuáles son los criterios para analizar la dinámica familiar antes de determinar un plan de
apoyo?
• ¿Qué información de apoyo es eficaz para el acceso al acompañamiento de la familia y
cuidadores del paciente con diagnóstico de TEA?
• ¿Cuáles son los principales problemas asociados con la atención a las familias y cuidadores
del paciente con diagnóstico de TEA?
Evidencias / recomendaciones Nivel / grado
El plan será individualizado, en función a las necesidades específicas de la familia y el
ü
paciente con TEA.
Establecer puntos de referencia de la dinámica familiar desde el enfoque estructural,
ü
relacional y de cohesión.
Usar Genograma para analizar la estructura familiar y/o Apgar Familiar para determinar
E: 5 / R: D
niveles de funcionalidad y disfuncionalidad (ver anexo 7) (30).
Los familiares y cuidadores serán informados por los profesionales de la salud sobre la
etiología del TEA y características del trastorno, así como alternativas de abordaje. ü
Los familiares y cuidadores conocerán con detalle el perfil funcional del niño y adolescente
ü
con TEA, para mayor asertividad en su manejo.
Los familiares y cuidadores conocerán y deberán estar de acuerdo con el plan terapéutico
ü
propuesto.
Los profesionales de la salud informarán a los familiares y cuidadores sobre los riesgos
ü
de tratamientos alternativos que no tienen fundamento científico comprobado.
50
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
15. Abreviaturas
ABA Terapia basada en análisis
ACP American College of Physicians
ADH hormona antidiurética
ADI-R Entrevista para el diagnóstico de autismo revisada.
ADOS Escala de observación para el diagnóstico de autismo.
AINE antiinflamatorio no esteroideo
APADA Asociación de Padres para la Protección y Defensa de las personas con Autismo
APS Atención primaria de salud.
ARA II antagonistas de los receptores de la angiotensina II
ASC Condición del espectro autista
BVS Biblioteca Virtual en Salud
CAPI Centro de Apoyo Psicopedagógico Integral
CDC Centers for Disease Control and Prevention
CI cociente intenlectual
CIE 10 Clasificación internacional de enfermedades, décima revisión.
CIF-IA Clasificación Internacional del Funcionamiento, de la Discapacidad y de la Salud
para la Infancia y la Adolescencia
CIMA Centro de Intervención Multidisciplinario para el Autismo
CMA Canadian Medical Association
CRIE centro de rehabilitación integral especializado
DSM IV Diagnostic and statistical manual of mental disorders. 4ª ed.
DSM V Diagnostic and statistical manual of mental disorders. 5.ª ed.
EAIS equipo de atención integral de la salud
ECV enfermedad cerebrovascular
EEG electroencefalograma
EKG electrocardiograma
ENI exploración neuropsicológica nfantile
GIN Guidelines International Networks
GPC guía de práctica clínica
ICC insuficiencia cardíaca crónica
ICOX2 inhibidores de la ciclooxigenasa 2
ICSI Institute for Clinical Systems Improvement
IECA inhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina
INR intertanional normalized ratio
IRM Imagen por resonancia magnética.
ISRS inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina
kg kilogramo
L litro
MAIS Modelo de Atención Integral de Salud
MAO monoamino oxidasa
mEq milimol
mcg microgramo
M-CHAT Lista de Verificación Modificada de Autismo para Niños Pequeños
mcl microlitro
51
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
mg miligramo
ml mililitro
mm3 milímetro cúbico
MSP Ministerio de Salud Pública
NGC National Guideline Clearinghouse
NHMRC National Health and Medical Research Council
NICE National Institute for Health and Clinical Excellence
NZGG New Zealand Clinical Guidelines Group
OCEBM Oxford Centre for Evidence-Based Medicine
OMS Organización Mundial de la Salud.
PEATC potenciales auditivos evocados del tronco cerebral
PECS Sistema de Comunicación por Intercambio de Imágenes
PICO paciente, intervención, comparación y resultado (outcome)
RM resonancia magnética
SCERTS Social Communication, Emotional Regulation, Transactional Support
SIGN Scottish Intercollegiate Guidelines Network
SNC sistema nerviosos central
SNS Sistema Nacional de Salud
TOC trastorno obsesivo compulsivo
TDAH trastorno de déficit de atención con hiperactividad.
TEA trastorno del espectro autista
TED trastorno específico de desarrollo
TEACCH Treatment and Education of Autistic and Related Communication Handicapped
Children
TGD Trastorno Generalizado del Desarrollo.
TME trastorno por movimientos estereotipados
UASB-E Universidad Andina Simón Bolívar, sede Ecuador
UCE Universidad Central del Ecuador
UCHSC University of Colorado Health Sciences Center
UDLA Universidad de las Américas
WISC-IV Escala de Inteligencia de Wechsler para niños –IV.
WNV Escala No Verbal de Aptitud Intelectual de Wechsler.
52
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
16. Referencias
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64
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
17. Anexos
Declaración PRISMA
(n = 554)
PRISMA: descripción del proceso de búsqueda y selección de las guías de práctica clínica a ser adaptadas. (202)
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Tomado de: : Manterola DC, Zavando MD; Grupo Mincir. Cómo interpretar los “Niveles de Evidencia” en los diferentes
escenarios clínicos (203).
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
La información que contiene este cuestionario es totalmente confidencial. Los datos personales
que aparecen al final están separados del resto del cuestionario para proteger la confidencialidad
de sus respuestas. Le garantizamos que no se realiza ninguna difusión de los datos aquí
contenidos.
Seleccione rodeando con un círculo, la respuesta que le parece que refleja mejor cómo su hijo o
hija actúa normalmente. Si el comportamiento no es el habitual (por ejemplo, usted solamente
se lo ha visto hacer una o dos veces) conteste que el niño o niña NO lo hace. Por favor, conteste
a todas las preguntas.
Solo para uso oficial (no
rellenar) ------------------------------------------------------------------------------
1.- ¿Le gusta que le balanceen, o que el adulto le haga el “caballito” sentándose en sus rodillas,
Si No
etc.?
2.- ¿Muestra interés por otros niños o niñas? Si No
3.- ¿Le gusta subirse a sitios como, por ejemplo, sillones, escalones, juegos del parque, etc.? Si No
4.- ¿Le gusta que el adulto juegue con él o ella al “cucú-tras”? (taparse los ojos y luego
Si No
descubrirlos, jugar a esconderse y aparecer de repente)
5.- ¿Algunas vez hace juegos imaginativos, por ejemplo haciendo como si hablara por teléfono,
como si estuviera dando de comer a una muñeca, como si estuviera conduciendo un coche o Si No
cosas así?
6.- ¿Suele señalar con el dedo para pedir algo? Si No
7.- ¿Suele señalar con el dedo para indicar que algo le llama la atención? Si No
8.- ¿Puede jugar adecuadamente con piezas o juguetes (por ejemplo cochecitos, muñequitos o
Si No
bloques de construcción) sin únicamente chuparlos, agitarlos o tirarlos?
9.- ¿Suele traerle objetos para enseñárselos? Si No
10.- ¿Suele mirarle a los ojos durante unos segundos? Si No
11.-¿Le parece demasiado sensible a ruidos poco intensos? (por ejemplo, reacciona tapándose
Si No
los oídos, etc.?
12.- ¿Sonríe al verle a usted o cuando usted le sonríe? Si No
13.- ¿Puede imitar o repetir gestos o acciones que usted hace? ( por ejemplo, si usted hace una
Si No
mueca, él o ella también lo hace)
14.- ¿Responde cuando se le llama por su nombre? Si No
15.- Si usted señala con el dedo un juguete al otro lado de la habitación….¿Dirige su hijo o hija
Si No
la mirada hacia ese juguete?
16.- ¿Ha aprendido ya andar? Si No
17.- Si su hijo o hija se da cuenta de que usted está mirando algo atentamente. ¿Se pone a
Si No
mirarlo también?
18.- ¿Hace su hijo o hija movimientos raros con los dedos, por ejemplo, acercándose a los
Si No
ojos?
70
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Datos confidenciales del niño o niña
Nombre y apellidos:
Fecha de nacimiento:
Sexo: Varón___ Mujer____ Teléfono de contacto:________________________
Dirección:_____________________________CP_________________
Localidad______________________________________
Nombre de la persona que rellena el cuestionario:
Parentesco con el niño/niña: madre___ padre____ otro: (especifique)____________
Tomado de: Robins D, Fein D, Barton M. Cuestionario del desarrollo comunicativo y social en la infancia
(M-CHAT) (80)
71
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
1. Un déficit parcial o total en el desarrollo del lenguaje oral que no es acompañado por actos
compensatorios como el uso de gestos o mímica como medios alternativos.
2. Fallas relativas en la capacidad de iniciar o mantener intercambios conversacionales (en
cualquier nivel de nivel de desarrollo del lenguaje en el que se presente) en los cuales hay
una falta de respuesta con el otro interlocutor.
3. Uso repetitivo y estereotipado del lenguaje, o uso idiosincrásico de palabras o frases.
4. Anormalidades en el tono, prosodia y entonación del habla.
1. Preocupación que abarca uno o más patrones de intereses restrictivos y estereotipados, que
es anormal en su intensidad, o en el foco de interés de por sí.
2. Adherencia aparentemente compulsiva a rutinas y rituales específicos y no funcionales.
3. Manierismos motores repetitivos y estereotipados, que involucran movimientos de aleteo y
revoloteo de manos y dedos, o también movimientos complejos de todo el cuerpo, entre otros.
72
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Se trata de un trastorno global del desarrollo que difiere del autismo, bien en la edad de inicio,
bien en que no cumple el conjunto de los tres tipos de criterio. Así, el desarrollo anormal o alterado
se manifiesta por primera vez solo después de los tres años y no se puede demostrar suficientes
anomalías en una, dos o tres de las áreas de psicopatología requeridas, para el diagnóstico de
autismo (la interacción social, la comunicación y el comportamiento restrictivo, estereotipado y
repetitivo) a pesar de la presencia de anomalías características en las otras áreas.
El autismo atípico suele presentarse en individuos con retraso mental profundo, cuyo nivel de
rendimiento muy bajo dificulta la manifestación del comportamiento desviado especifico requiere
para el diagnóstico de autismo.
Es un trastorno descrito hasta hoy solo en niñas, cuya causa es desconocida, pero que se ha
diferenciado por sus características de comienzo, curso y sintomatología.
El desarrollo temprano es aparentemente normal o casi normal, pero se sigue de una pérdida
parcial o completa de las habilidades manuales adquiridas y del habla, junto con retraso en el
crecimiento de la cabeza y aparece generalmente entre los siete meses y los dos años de edad.
Las características principales son la pérdida de los movimientos intencionales de las manos,
estereotipias consistentes en retorcerse las manos e hiperventilación. El desarrollo social y del
juego se detiene en el segundo o tercer año, pero el interés social suele mantenerse.
73
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Se trata de un trastorno global del desarrollo (diferente del síndrome de Rett) que se define por
la presencia de una etapa previa de desarrollo normal antes del comienzo del trastorno, por una
fase bien definida de pérdida de capacidades previamente adquiridas, que tiene lugar en el curso
de pocos meses y que afecta como mínimo a varias áreas del desarrollo, junto con la aparición de
anomalías típicas en la socialización, comunicación y comportamiento. Con frecuencia hay una
fase de la enfermedad poco definida, durante la cual el niño se vuelve inquieto, irritable, ansioso
e hiperactivo; a lo cual sigue una decadencia y pérdida del lenguaje y habla, seguido por una
desintegración del comportamiento.
74
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Este síndrome suele acompañarse de varios tipos de retraso del desarrollo, ya sean específicos
o globales.
No es bien conocida hasta qué punto esta forma de comportamiento está en función de bajo
CI o de un daño cerebral orgánico. Tampoco está claro si los niños con retraso mental leve que
presenta un síndrome hipercinético deberían ser clasificados aquí o en F90, en la actualidad se
incluyen en F90.
Se basa en una combinación de una hiperactividad grave inapropiada para el nivel de maduración,
de estereotipias motoras y de retraso mental grave. Para un diagnóstico correcto deben estar
presentes los tres aspectos. Sin embargo, si se satisfacen las pautas para el diagnóstico de las
categorías F84.0 F84.1 o F84.2 el diagnostico será el correspondiente a una de ellas.
75
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
A. Ausencia de retrasos clínicamente significativos del lenguaje o del desarrollo cognitivo. Para
el diagnóstico se requiere que a los dos años haya sido posible la pronunciación de palabras
sueltas y que al menos a los tres años el niño use frases idóneas para la comunicación. Las
capacidades que permiten una autonomía, un comportamiento adaptativo y la curiosidad por
el entorno deben estar al nivel adecuado para un desarrollo intelectual normal. Es frecuente la
presencia de características especiales aisladas, a menudo en relación con preocupaciones
anormales, aunque no se requieren para el diagnóstico.
B. Alteraciones cualitativas en las relaciones sociales recíprocas (del estilo de las del autismo).
C. Interés inusualmente intenso y circunscrito a patrones de comportamiento, intereses y
actividades restringidas, repetitivas y estereotipadas, con criterios parecidos al autismo;
aunque en este cuadro son menos frecuentes las estereotipias y preocupaciones inadecuadas
con aspectos parciales de los objetos o con partes no funcionales de los objetos de juego.
D. No puede atribuirse el trastorno a otros tipos de trastornos generalizados del desarrollo,
a trastorno esquizotípico (F21), a esquizofrenia simple (F20.6), a trastorno reactivo de
la vinculación en la infancia de tipo desinhibido (F94.1 y .2), a trastorno anancástico de
personalidad (F60.5), ni a trastorno obsesivo compulsivo (F42).
A. Un total de seis (o más) ítems de los apartados (1), (2) y (3), con al menos dos ítems de
(1) y uno de (2) y (3)
1. Deterioro cualitativo en la interacción social, manifestada por lo menos por dos de los siguientes
razonamientos:
76
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
a. Inquietud que abarca uno o más patrones de intereses estereotipados y restringidos, que es
anormal o en intensidad o en el foco de interés en sí.
b. Adherencia aparentemente inflexible a rutinas o rituales específicos y no funcionales.
c. Movimientos motores estereotipados y repetitivos (Ej.: aleteo de manos o dedos que implican
todo el cuerpo).
d. Preocupación persistente por partes de objetos.
B. Retraso o funcionamiento anormal en al menos una de las siguientes áreas, con inicio
antes de los tres años:
• Interacción social.
• Uso social y comunicativo del lenguaje.
• Juego simbólico o imaginativo.
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
C. Los síntomas han de estar presentes en las primeras fases del período de desarrollo (pero
pueden no manifestarse totalmente hasta que la demanda social supera las capacidades limitadas,
o pueden estar enmascarados por estrategias aprendidas en fases posteriores de la vida).
D. Los síntomas causan un deterioro clínicamente significativo en lo social, laboral u otras áreas
importantes del funcionamiento habitual.
E. Estas alteraciones no se explican mejor por la discapacidad intelectual (trastorno del desarrollo
intelectual) o por el retraso global del desarrollo. La discapacidad intelectual y TEA con frecuencia
concuerdan; para hacer diagnósticos de comorbilidades de un TEA y discapacidad intelectual,
la comunicación social ha de estar por debajo de lo previsto para el nivel general de desarrollo.
Especificar si:
78
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
(Nota de codificación: Utilizar un código adicional para identificar la afección médica o genética
asociada).
Asociado a otro trastorno del desarrollo neurológico, mental o del comportamiento (Nota
de codificación: utilizar un código(s) adicional(es) para identificar el trastorno(s) del desarrollo
neurológico, mental o del comportamiento asociado(s).
Con catatonía (véanse los criterios de catatonía asociados a otro trastorno mental.
(Nota de codificación: utilizar un código adicional 293.89 [F06.1] catatonía asociada a trastorno
del espectro del autismo para indicar la presencia de la catatonía concurrente).
Procedimientos de registro
Para el TEA asociado a una afección médica o genética conocida, a un factor ambiental u otro
trastorno del desarrollo neurológico, mental o del comportamiento, se registrará el mismo asociado
a (nombre de la afección, trastorno o factor) (p. ej., trastorno del espectro de autismo asociado al
síndrome de Rett). La gravedad se reconocerá de acuerdo con el grado de ayuda necesaria para
cado uno de los dominios psicopatológicos (p. ej., “necesita apoyo muy notable para deficiencias
en la comunicación social y apoyo notable para comportamientos restringidos y repetitivos”).
Grado 3
“Necesita ayuda muy notable”
Las deficiencias graves de la comunicación social verbal y no verbal causan alteraciones graves
del funcionamiento, limitado inicio de las interacciones sociales y respuesta mínima a la apertura
social con otras personas. Por ejemplo, una persona con pocas palabras inteligibles que raramente
inicia interacción y que cuando lo hace, realiza estrategias inhabituales solo para cumplir con las
necesidades y únicamente responde a aproximaciones sociales muy directas.
79
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Grado 2
“Necesita ayuda notable”
Grado 1
“Necesita ayuda”
Sin ayuda in situ, las deficiencias en la comunicación social causan problemas importantes.
Dificultad para iniciar interacciones sociales y ejemplos claros de respuestas atípicas o
insatisfactorias a la apertura social con otras personas. Puede parecer que tiene poco interés
en las interacciones sociales. Por ejemplo, una persona que es capaz de hablar con frases
completas y que establece comunicación pero cuya conversación amplia con otras personas falla
y cuyos intentos de hacer amigos son excéntricos y habitualmente sin éxito. Los problemas de
organización y de planificación dificultan la autonomía.
80
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Enfoques sensoriomotrices
Terapia neuropsicomotora
La aplicación de esta terapia inicia desde la etapa sensoriomotora (desde el nacimiento), está
dirigida a pacientes con cualquier tipo de trastorno del desarrollo, limitación o discapacidad y
puede desarrollarse en sesiones individuales y/o grupales.
Integración sensorial
Se utiliza para niños y adolescentes que tienen disfunciones en el procesamiento de los estímulos;
la precursora de este tratamiento fue Jean Ayres. Las revisiones sistemáticas determinan que no
hay suficiente evidencia para apoyar el uso de este tipo de intervención y concluyen que es
necesaria mayor investigación. (175)
Esta terapia es aplicada desde la etapa sensoriomotora, está dirigida a pacientes con TEA,
trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), retraso del desarrollo, discapacidad
visual, discapacidad auditiva y discapacidad intelectual.
Integración auditiva
LEGO®
La terapia LEGO® fue desarrollada hace unos 15 años después de observar que niños y
adolescentes con autismo y otros trastornos se sentían atraídos por el juego de construcción
LEGO®, utilizándolo de forma estructurada y terapéutica en pequeños grupos; las sesiones se
centran en diseñar proyectos colaborativos, aumentar la interrelación en el grupo, ayudarles a
resolver los problemas que plantean. Solo ha aparecido un estudio de cohortes, de carácter
retrospectivo en el que se muestra que la terapia producía mejoras en habilidades sociales y los
síntomas autistas. Se hace necesaria más investigación. (182)
81
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Esta terapia se aplica a partir de los 2 años de edad, dirigida especialmente a pacientes con TEA.
Se desarrolla en sesiones grupales.
Arteterapia
Terapia artística que consiste en el uso del arte como vía terapéutica. Se emplea para trastornos
psicológicos, tratar miedos, bloqueos personales, traumas del pasado, TEA, TDAH, etc. Además
es considerada como técnica de desarrollo personal, de autoconocimiento y de expresión
emocional. Se aplica mediante diferentes manifestaciones artísticas: pintura, teatro, modelado,
collage, danza, escritura, música, etc. (205)
Bajo este marco, se incluyen las terapias que utilizan animales (perros, delfines, caballos)
para mejorar las dificultades que tienen los niños con autismo. Este tipo de terapias puede ser
agradable para los niños y adolescentes con y sin TEA, pero no se encuentran ninguna evidencia
científica de resultados. El grupo de Canadá, si refiere un estudio de casos y controles de terapia
con caballos donde se encontraron mejoras en el ámbito social. (183)
Se recomienda su aplicación desde los dos años de edad, está dirigida a pacientes con TEA,
lesión cerebral, discapacidad intelectual, discapacidad mental, discapacidad visual y discapacidad
auditiva. La terapia asistida con caballos no se recomienda en pacientes que tienen luxación
congénita de cadera y/o displasia de cadera.
Kinesiología aplicada
Es el estudio de los músculos y el movimiento del cuerpo humano, generando un equilibrio entre
el movimiento y la interacción de los sistemas de una persona,(206) está dirigida a pacientes con
cualquier trastorno del desarrollo, limitación o discapacidad.
Terapia ABA
ABA es una intervención que usa métodos derivados de principios científicamente establecidos
acerca de la conducta. Utiliza las bases de la teoría del aprendizaje para mejorar habilidades
humanas socialmente significativas. Su enfoque y objetivo principal es el aumento de la
consecución de conductas adaptativas y reducción de los comportamientos inapropiados,
logrando una mejor integración del niño y adolescente con su ambiente. (179)
82
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Se recomienda la aplicación de esta terapia desde los dos años de edad, está dirigida a pacientes
con TEA, TDAH, lesión cerebral, discapacidad mental, discapacidad intelectual, problemas
conductuales.
Tratamientos basados en el desarrollo: se aplican desde los dos años de edad, dirigidos
especialmente para pacientes con TEA; los tratamientos basados en el desarrollo incluyen las
siguientes metodologías:
Terapia ambiental: es un tratamiento planificado donde las interacciones del día están
diseñadas terapéuticamente con el objetivo de aumentar las habilidades sociales. Incorpora
estilos de aprendizaje y áreas de interés. Proporcionando un ambiente seguro con muchas
oportunidades sociales y de apoyo. Un estudio de casos y controles muestra beneficios de
los niños y adolescentes tratados frente a los niños/as y adolescentes que se encontraban
en lista de espera pero los métodos de contraste y el número de publicaciones obliga a
seguir investigando. (181)
Intervención basada en el juego para niños y adolescentes con TEA, se trabaja de forma
individual, en el contexto escolar y en casa. También trabaja mucho el mejorar la comunicación y
la expresión. Fue desarrollado en 1981, también llamado “modelo de desempeño escolar”. (175)
Un estudio cuasiexperimental evidenció mejoras significativas pero se hace necesaria mayor
investigación sobre este tratamiento. (182)
Se aplica desde los 18 meses, está dirigida a pacientes con lesión cerebral, TEA, TDAH,
discapacidad visual, discapacidad mental, discapacidad intelectual, utiliza el juego y se realiza
en sesiones individuales.
83
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Psicoanálisis
Comunicación facilitada
Esta técnica es aplicada por personas (facilitadores) que ayudan a guiar los dedos del paciente
con autismo sobre un tablero con letras o sobre el teclado de un ordenador, para que expresen
sus ideas y sus sentimientos. Se aplica desde la edad escolar en niños y adultos, actualmente no
se recomienda el uso de este método. (208)
TEACCH
Se aplica desde los seis años de edad. Este método incluye la participación de padres, educadores
y diversos profesionales para la utilidad de programas individuales, familiares, ambientales y
escolares; dirigido especialmente a pacientes con TEA.
SCERTS
Utiliza prácticas de otras terapias (ABA, TEACCH), promueve que el paciente inicie la
comunicación durante las actividades cotidianas. Se aplica desde los seis años de edad.
84
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
SCERTS puede usarse con niños y adultos de distintos niveles de habilidades del desarrollo,
incluso individuos verbales y no verbales.
PECS
Terapia cognitivo-conductual
Tratamiento psicoterapéutico que ayuda a los pacientes a comprender que los pensamientos y
sentimientos influyen en su comportamiento. No hay evidencia que respalde este tratamiento,
aunque puede resultar útil en personas con síndrome de Asperger o Autismo de Alto
Funcionamiento. (210)
Los Sistemas Aumentativos y/o Alternativos de Comunicación (SAAC) son sistemas no orales
de comunicación que se emplean para fomentar, complementar o sustituir el lenguaje oral. El
sistema comunicativo de intercambio de imágenes (PECS por sus siglas en inglés), es un tipo
de SAAC ampliamente utilizado en el campo de los TEA; recomendado específicamente para las
personas no verbales con TEA. (180)
85
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Para el registro de los datos del APGAR familiar se muestra un formato en el cuadro Nº 1. (30)
Cuadro 1
Cuestionario para la evaluación de la funcionalidad de la familia
Casi Algunas Casi
Preguntas Nunca Siempre
nunca veces siempre
Me satisface la ayuda que recibo de mi familia
cuando tengo algún problema y/o necesidad?
Me satisface cómo en mi familia hablamos y
compartimos nuestros problemas
Me satisface cómo mi familia acepta y apoya mi
deseo de emprender nuevas actividades
Me satisface cómo mi familia expresa afecto y
responde a mis emociones tales como rabia,
tristeza, amor
Me satisface cómo compartimos en mi familia
1. El tiempo para estar juntos
2. Los espacios en la casa
3. El dinero
¿Usted tiene un(a) amigo(a) cercano a quien
pueda buscar cuando necesite ayuda?
Estoy satisfecho(a)con el soporte que recibo de
mis amigos(as)
El cuestionario debe ser entregado a cada paciente para que responda las preguntas planteadas
en forma personal, excepto a aquellos que no sepan leer; caso en el cual el entrevistador aplicará
el test. Para cada pregunta se debe marcar solo una X. Cada una de las respuestas tiene un
puntaje que va entre los 0 y 4 puntos, de acuerdo a la siguiente calificación:
0: Nunca •1: Casi nunca •2: Algunas veces •3. Casi siempre •4: Siempre.
86
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Cuadro 2
Interpretación:
87
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Anomalías en el neurodesarrollo o
señales de alerta presentes realizar - Si el control es normal, realizar
seguimiento y control en seis meses
M-CHAT (control de niño sano).
+
Referir a segundo nivel de atención
para realizar reevaluación, despistaje
(M-CHAT) y/o diagnóstico diferencial
+ -
Si la evaluación es normal,
Si se confirma sospecha
realizar seguimiento y
diagnóstica, referir a tercer nivel
control en seis meses
de atención para confirmación
diagnóstica y manejo
multidisciplinario
Elaboración propia
88
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Tercer nivel
Se realizará la confirmación
del diagnóstico.
Manejo
Elaboración propia
89
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Tercer nivel
Abordaje y
rehabilitación
Perfil Tratamiento
Perfil funcional Comorbilidades
neurocognitivo farmacológico
Trastorno por
déficit de atención
e hiperactividad
Plan terapéutico
Enfoques
terapéuticos
90
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Ácido valpróico
Código ATC N03AG01
Tratamiento de conductas repetitivas, rigidez conductual síntomas obsesivo-compulsivos.
Indicación avalada en esta
Trastorno obsesivo-compulsivo / trastorno de movimientos estereotipados.
guía
Fenotipo bipolar y trastorno bipolar tipo 1 o no especificado.
Sólido oral 500 mg
Forma farmacéutica y
Líquido oral 200 mg/ml y 375 mg/ml
concentración
Líquido oral 250 mg/5ml
Adultos:
- Dosis inicial: 10-15 mg/kg/día vía oral dividida cada día–tres veces al día.
- Incrementos: 5-10 mg/kg/día cada 7 días.
- Dosis usual: 30-60 mg/kg/día vía oral dividida dos veces al día–tres veces al día.
- Dosis Máxima: 60 mg/kg/día.
Dosis
Niños: >10 años:
- Dosis inicial: 10-15 mg/kg/día vía oral dividida cada día–tres veces al día.
- Incrementos: 5-10 mg/kg/día c/7 días.
- Dosis usual: 30-60 mg/kg/día vía oral dividida dos veces al día–tres veces al día.
- Dosis Máxima: 60 mg/kg/día.
Hepatotoxicidad grave e incluso fatal que se presenta entre el primero y sexto mes de
tratamiento, riesgo aumentado en menores de 2 años o asociado a otros anticonvulsivantes.
- Incremento de hepatotoxicidad en pacientes con enfermedad mitocondrial hereditaria
(Síndrome de Alpers Huttenlocher)
- Cuando las concentraciones en plasma exceden los 110mcg/ml en mujeres o 135mcg/ml en
hombres, se incrementa el riesgo de trombocitopenia.
- Discontinuar si se presenta hiperamonemia, chequear los niveles de amonio si el paciente
se presenta aletargado o con un comportamiento anormal.
- Pancreatitis, tanto en niños como en adultos. Puede aparecer al poco tiempo de iniciar el
tratamiento o luego de muchos años. Sospechar en pancreatitis frente a síntomas como dolor
abdominal, náusea, vómito y anorexia.
Precauciones
- En exposición intrauterina, incrementa el riesgo de desarrollo cognitivo pobre o
malformaciones anatómicas.
- Puede producir falsos positivos en el test de cetonas.
- Lactantes, niños menores de dos años, adultos mayores.
- Insuficiencia renal.
- Trauma cráneo encefálico.
- Retardo mental o convulsiones.
- Desórdenes metabólicos congénitos.
- Uso concomitante con múltiples anticonvulsivantes.
- En pacientes con riesgo de sangrado.
- En enfermedades hepáticas.
Hipersensibilidad al medicamento o sus componentes. Enfermedad
Contraindicaciones hepática preexistente, insuficiencia hepática severa. Desordenes del ciclo de la urea. En
mujeres embarazadas o que planean embarazarse.
Frecuentes: náusea, vómito, diarrea, dispepsia, cefalea, temblor, somnolencia, ambliopía,
diplopía, mareos, nistagmus, tinitus, astenia, incremento del tiempo de sangrado,
trombocitopenia, aumenta el riesgo de infección.
Poco frecuentes: ataxia, dolor de espalda, cambios de humor, ansiedad, confusión,
parestesias, alucinaciones, catatonia, disartria, vértigo, incremento del apetito, ganancia
de peso, dolor abdominal, lentitud mental, sedación, ataxia, irritabilidad, insomnio, labilidad
Efectos adversos
emocional, visión borrosa, mialgias, disnea, exantemas, alopecia.
Raros: hepatotoxicidad, pancreatitis, síndrome de inhibición de la ADH, hiponatremia,
pancitopenia, trombocitopenia, mielosupresión, anemia aplástica, sangrados,
hiperamonemia, hipotermia, hipersensibilidad, anafilaxia, broncoespasmo, eritema
multiforme, síndrome de Steven Johnson, necrólisis epidérmica tóxica, alucinaciones,
psicosis, ideas suicidas, encefalopatía, coma, síndrome de ovario poliquístico.
91
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Fluoxetina
Código ATC N06AB03
Tratamiento de conductas repetitivas, rigidez conductual síntomas obsesivo-compulsivos.
Trastorno obsesivo-compulsivo / trastorno de movimientos estereotipados.
Indicación avalada en Fenotipo depresivo (cambios marcados a partir de los síntomas basales como aislamiento,
esta guía irritabilidad, tristeza o crisis de llanto, falta de energía, anorexia, pérdida de peso). Diagnóstico
de trastorno depresivo mayor o trastorno depresivo no especificado. Síntomas de ansiedad. O
diagnóstico de trastorno de ansiedad generalizada o trastorno de ansiedad no especificada.
Sólido oral 500 mg
Forma farmacéutica y
Líquido oral 200 mg/ml y 375 mg/ml
concentración
Líquido oral 250 mg/5ml
Adultos:
- Dosis inicial: 20 mg vía oral, cada día am.
- Incrementos: gradualmente después de 3 - 4 semanas.
- Dosis usual: 20 mg – 80 mg vía oral, cada día am, en varias tomas al día.
Dosis - Dosis máxima: 60 mg/día.
Niños 8-18 años:
- Dosis inicial: 10 mg vía oral cada día por 7 días.
- Incrementar de 1 a 2 semanas si es necesario. Dosis máxima 20 mg
- Dosis usual: 10 mg – 20 mg/día vía oral cada día.
Puede provocar pensamientos suicidas o cambio del comportamiento especialmente en
niños, adolescentes y jóvenes.
- Se debe observar cuidadosamente en busca de cambios del comportamiento, empeoramiento
Precauciones clínico, y tendencias suicidas. Estos eventos generalmente se producen en los dos primeros
meses de tratamiento.
- Suspender el tratamiento si se observa empeoramiento conductual o tendencias suicidas
que no sean parte de los síntomas usuales del paciente.
92
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
93
Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Haloperidol
Código ATC N05AD01
Tratamiento de conductas repetitivas, rigidez conductual, síntomas obsesivo-compulsivos,
Indicación avalada en trastorno de movimientos estereotipados, agresividad, irritabilidad, reacciones explosivas,
esta guía autolesiones.
Trastorno bipolar.
Sólido oral: 5 mg y 10 mg
Forma farmacéutica y
Líquido oral: 2 mg/ml
concentración
Líquido parenteral: 5 mg/ml
Sintomatología moderada
Adultos
Vía oral:
- Dosis inicial: 0.5–2 mg vía oral cada 8 h- 12 h. Aumentar dosis gradualmente según
necesidades y tolerancia.
- Dosis máxima: 100 mg vía oral cada día.
Vía parenteral:
- Dosis inicial: 2–5 mg intramuscular. Puede repetirse en 1 hora por razones necesarias, o a
cada 4–8 horas, si los síntomas han sido controlados adecuadamente.
Sintomatología severa
Adultos:
Vía oral:
- Dosis inicial: no exceder de 30 mg/día
- Dosis usual: 3 mg – 5 mg vía oral cada 8 a 12horas.
Vía parenteral:
- Dosis inicial: 0.5 mg – 30 mg intravenoso, a una velocidad de infusión de 5 mg/min. Repetir
Dosis a intervalos de 30 minutos por razones necesarias.
- Infusión continua: diluir la dosis correspondiente en 30 ml – 50 ml de solución salina para
administración intravenoso en 30 minutos.
Niños
3 – 12 años o de 15 – 40 kg:
- Dosis inicial: 0.05 mg/ kg/ día vía oral dividido en 2 – 3 dosis.
- Incrementos: 0.5 mg cada 5 – 7 días, de acuerdo a necesidades y tolerancia, hasta un
máximo de 0.150 mg/ kg/día vía oral.
Síndrome de Gilles de la Tourette y el trastorno de comportamiento
Adultos:
- Dosis inicial: 0.5 – 2 mg vía oral, dos veces al día o tres veces al día.
- Dosis usual: 0.5 – 5 mg vía oral, dos veces al día o tres veces al día.
- Dosis máxima: 100 mg/día en casos graves y resistentes.
Niños 3 – 12 años o de 15 – 40 kg:
- Dosis inicial: 0.05 mg/ kg/día vía oral dividido en 2 – 3 dosis.
- Incrementos: 0.5 mg cada 5 – 7 días, de acuerdo a necesidades y tolerancia, hasta un
máximo de 0.075 mg/ kg/día vía oral, preferiblemente hora sueño.
Debe administrarse bajo supervisión de un especialista.
Suspender el tratamiento si el recuento absoluto de neutrófilos es <1000 mm3.
Considere la posibilidad de suspender el tratamiento si se produce una disminución
inexplicable de leucocitos.
- Suspender el tratamiento en forma gradual si se ha utilizado por largo tiempo.
- No se recomienda en adultos mayores con psicosis asociada a demencia.
- Leucopenia, neutropenia, agranulocitocis.
Precauciones
- Antecedente de leucopenia inducida por fármacos,
- Contaje bajo de células blancas.
- Manía.
- Alcoholismo.
- Tirotoxicosis.
- Arteriosclerosis.
- Retención urinaria.
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Litio
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Quetiapina
Código ATC N05AH04
Indicación avalada en
Tratamiento de tercera línea para hiperactividad, impulsividad e inatención.
esta guía
Forma farmacéutica y
Sólido Oral 25mg y 300mg
concentración
Adultos:
- Dosis usual: 150 mg - 750 mg/día vía oral dividido cada 12 horas.
- Día 1: 50 mg/día vía oral C/12horas.
- Día 2 y 3: incrementar la dosis diariamente de 25 - 50 mg vía oral cada 8 - 12 horas hasta
Dosis 300-400 mg hasta el día 4. Luego se puede reajustar la dosis con incrementos de 25-50 mg
c/12 horas de al menos dos días.
- Dosis máxima: 800 mg/día.
Adultos mayores:
- Dosis usual: 50 – 200 mg vía oral cada día. Luego incrementar a 25-50 mg/día.
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Risperidona
Código ATC N05AX08
Tratamiento de conductas repetitivas, trastornos rigidez conductual, síntomas obsesivo-
Indicación avalada en
compulsivos, trastorno de movimientos estereotipados, agresividad, irritabilidad, reacciones
esta guía
explosivas, autolesiones. Trastorno Bipolar.
Forma farmacéutica y
Sólido oral de 1 y 2mg. Liquido oral de 1mg/mL
concentración
Trastorno de comportamiento
Niños < 20 kg
Dosis inicial: 0.25 mg que va incrementando 0.50 mg hasta el 4to día y luego de 0.25 cada
2 semanas.
Dosis máxima: 3 mg/día.
Niños > 20 kg
Dosis
Dosis inicial: 0. 50 mg que va incrementando 1 mg hasta el 4to día y luego se 0.50 cada 2
semanas.
Dosis máxima: 3 mg/día.
En pacientes con falla renal severa y hepática debería regular la dosis y no exceder 2 mg cada
día e incrementar los intervalos de dosificación. Se puede iniciar 0.50 mg dos veces al día e
incrementar en la segunda semana y no exceder los 2mg.
Psicosis relacionada a demencia por incremento de alteraciones cardiovasculares o
infecciones que pueden ser fatales.
- Incrementa el riesgo de enfermedad cerebrovascular.
- En pacientes con antecedentes de convulsiones, enfermedad de Parkinson, demencia,
hipovolemia, deshidratación.
- Se ha reportado leucopenia, neutropenia, agranulocitosis, en pacientes con factores de
riesgo o en antecedentes de leucopenia o neutropenia inducidos por medicamentos.
- Suspender el tratamiento al primer signo de disminución significativa de leucocitos (<1000/
μL) en ausencia de otros factores causales. Continuar monitorizando el recuento leucocitario
Precauciones hasta su recuperación.
- Niños o adolescentes.
- Riesgo de hipotensión ortostática.
- Asociado a cambios metabólicos como hiperglicemia, dislipidemia o ganancia de peso.
- En algunos casos la hiperglicemia asociada a antipsicóticos atípicos están asociados con
cetoacidosis, coma hiperosmolar y muerte súbita.
- En insuficiencia renal o hepática.
- En antecedentes de convulsiones.
- Si hay riesgo de neumonía por aspiración por disfunción esofágica o demencia de Alzheimer
avanzada.
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
Sertralina
Código ATC N06AB06
Tratamiento de conductas repetitivas, rigidez conductual síntomas obsesivo-compulsivos.
Trastorno obsesivo-compulsivo / trastorno de movimientos estereotipados.
Indicación avalada en Fenotipo depresivo (cambios marcados a partir de los síntomas basales como aislamiento,
esta guía irritabilidad, tristeza o crisis de llanto, falta de energía, anorexia, pérdida de peso) – diagnóstico
de trastorno depresivo mayor o trastorno depresivo no especificado. Síntomas de ansiedad. O
diagnóstico de trastorno de ansiedad generalizada o trastorno de ansiedad no especificada.
Forma farmacéutica y
Sólido oral 50 mg y 100 mg
concentración
Síntomas obsesivo compulsivos
Adultos:
- Dosis usual: 50 mg vía oral cada día.
- Incrementos: 25 mg – 50 mg/día cada semana por razones necesarias.
- Dosis máxima: 200 mg.
Niños:
6-12 años:
- Dosis inicial: 25 mg/día vía oral cada día.
- Incrementos: 25 mg – 50 mg/día a intervalos de 3 - 4 días o 50 mg cada 7 días.
Dosis - Dosis máxima: 200 mg/día.
>12 años:
- Dosis inicial: 50 mg vía oral cada día.
- Incrementos: 25 mg – 50 mg/día cada semana.
- Dosis máxima: 200 mg.
Síntomas de ansiedad social
Adultos:
- Dosis inicial: 25 mg vía oral cada día por una semana. Luego 50 mg vía oral cada día.
- Incrementos: 25 – 50 mg/día vía oral cada día cada semana por razones necesarias.
- Dosis máxima: 200 mg/día..
Puede provocar pensamientos suicidas o cambio del comportamiento especialmente en
niños, adolescentes y jóvenes.
-Se debe observar cuidadosamente en busca de cambios del comportamiento, empeoramiento
clínico, y tendencias suicidas. Estos eventos generalmente se producen en los dos primeros
meses de tratamiento.
-Suspender el tratamiento si se observa empeoramiento conductual o tendencias suicidas que
no sean parte de los síntomas usuales del paciente.
-Se ha reportados síndrome serotoninérgico con la administración de este medicamento, sin
embargo existe un riesgo mayor con la ingesta concomitante de otros agentes serotoninérgicos.
(triptanes, antidepresivos tricíclicos, fentanilo, litio, tramadol buspirona especialmente).
- Uso con precaución en pacientes con antecedente de convulsiones.
Precauciones -Se ha reportado episodios ansiosos, insomnio y pérdida importante de peso, que
generalmente se acompaña con disminución del apetito.
-Los cambios en las dosis generalmente no se reflejan en los niveles plasmáticos sino hasta
semanas después.
-El riesgo de presentar sangrado gastrointestinal incrementa, especialmente cuando se
administra conjuntamente con AINE, ácido acetil salicílico, o drogas que actúan sobre la
coagulación.
- Pacientes con glaucoma agudo de ángulo cerrado.
- Paciente con trastorno bipolar, puede incrementar el riesgo de manía.
- Pacientes con hiponatremia.
- Adultos mayores con deterioro cognitivo y alteraciones de las funciones motoras.
- Hiponatremia (anciano)
Hipersensibilidad al medicamento o a sus componentes, administración concomitante con
Contraindicaciones
pimozida o tioridazina, tratamiento con inhibidores de la MAO y disulfiram.
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Trastornos del espectro autista en niños y adolescentes: detección,
diagnóstico,tratamiento, rehabilitación y seguimiento
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