Shakespeare - Hamlet (Trad. A. Alegria)

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William Shakespeare

(1s64-1616)

I.,A TRAGEDI.A DE

HAMLET
PzuNCIPE DE DINAMARCA

(1601)

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traducción I
de
Alonso Alegría i
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Lima .t

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1995 t
1
'l.!
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ESTE UBRETO NO ESTÁ FORMATEADO TÉCNICAMENTE Y EN NINGÚI.¡ CASO
DEBE SER TOMADO COMO EJEMPLO DE FORMATO PROFESIONAL. .¡
Í
NOTA DEL TRADUCTOR
HAMLET tuvo su estreno absoluto en 1600 o 1601, en el Old Globe Theatre de
Londres, bajo la dirección del autor qüen también l:lizo el papel del Fantasma; el
papel de Hamlet estuvo a cargo de Richard Burbage.

l"a presente es u.na versión corregida y ligeramente aumentada de la que se usó


para el estreno en Lima, a cargo del Teatro Nacional Popular, en el Teatro
Municipal en julio de 1975. El reparto (en orden de aparición) de ese estreno
mundial fue el siguiente:

Bernardo... Edmundo Torres


Francisco... Walter Zambrano
Horacio... Oswaldo Fernández
Marcelo... Carlos Ortecho
Claudio... Hudson Valdivia
Cornelio... Celso Pastor
Laertes... Luis Felipe Ormeño
Polonio... Manuel D'Elorio
Hamlet... Edgard Saba
Gertrtrdis... Etty Elkin
Ofelia... Mirna Costa
Fantasma... Edmundo Torres
Reynaldo... Juan Rodríguez
' Rosencrt¡.nt2... Joaquín Vargas I
Guildenstern... Augusto Cabrera
Actor Primero... Raúl Vela
Act¡:r2... Cremilda Vela
Actor Segundo... Celso Pastor
Actor Tercero... Juan Rodríguez
Actor Cuarto... Ricardo Eyzaguirre
Fortimbras... Carlos Ortecho
Capitárn Noruego... Walter Zarnbrarto
Dama de la Reina... Carmen Aguilar
Mensajero... Raúl Vela
Sepulhrrero Primero... Edmundo Torres
Sepulturero Segundo... Celso Pastor
Osric... Augusto Cabrera
Cortesanos y cortesanas, soldados daneses y noruegos,
marinos y pueblo... Jorge Alvarez, Carlos Borjas, Aníbal Diaz, Freddy
Guevara, Javier Montes, Georgina Ovalle, Amado Tiznado.

Director: Alonso Alegría


Directora Asistente: Clara lzaneta.
Asistente de Dirección: Laura Castro
Jefe de Producción: Tito Cacho
Diseño General de la Producción: Jorge Jara French
Vestuario: Mocha Graña
Utilería: Arturo Villacorta
Luces: Arturo Nolte
Sonido: Arturro ElÍas
*

PRIMER ACTO

Escena Uno

[Francisco en su puesto. Entra hacia él Bernardo]


BERNARDO
¡Quién va!

FRANCISCO
¡No, contesta tú¡ ¡Quieto! ¡Santo y seña! ¡Quién va!
BERNARDO
¡Viva el Rey!
.FRANCISCO
¿Bernardo?

BERN'ARDO
Sí.

FRANCISCO
Llegas a üempo. Puntual y sin demora.

BERNARDO
Las doce han dado; vete a dormir, Francisco.

FRANCISCO
Gracias por el relevo, muchas gracias. Este frío amargo me pesa en
el corazón.

BERNARDO
¿Y la guardia? ¿Tranquila?

FRANCISCO
Ni un ratón se mueve.
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO I. escena I página 4

BERNARDO
Entonces... buenas noches. Si encuentras a Horacio y a Marcelo,
mis compañeros de guardia, que se apuren.

[Entran Horacio y Marcelo]


FRANCISCO
Creo que ahí están. ¡Alto! ¡Quién va!

HORACIO
Amigos de esta tierra.

MARCELO
Y súbditos de Dinamarca.

FRANCISCO
Buenas noches a todos.

MARCELO
Ah bien. Pues adiós, buen sotdado. .¿Quién está en tu puesto?

FRANCISCO
'' Bernardo está. Buenas noches

[Muüs Francisco]

MARCELO
¡Eh! ¡Bernardo!

BERNARDO
Oigan, qué-- ¿Horacio está ahi?

HORACIO
Por pedazos.

BERNARDO
Bienvenido, Horacio; Marcelo, bienvenido.

HOT<ACIO
Bueno, y... ¿ha vuelto a aparecer esa cosa por aquí?
BERNARDO
No he visto nada.

MARCELO
Horacio dice que no es más que fantasÍas nuestras, Y ro se deja
convencer de [ue hemos visto ya dos veces esa horrible aparición'
por eso Ie he pedido que monie guardia con nosotros esta noche,
para que se coflvera?a., si se presenta rmta vez más ese fantasma. Y
para que le hable.

HORACIO
Vamos, vamos, no va a aParecer.

BERNARDO
Siéntate un rato, Y déjanos de nuevo meter en tus orejas tan
impermeables a esto qL" te hablamos, 1o que hemos visto dos
noches seguidas.

HORACIO
Muy bien, sentémonos. Y escuchemos a Bernardo hablarnos de eso'
,

BERNARDO
Anoche mismo, cuand,o esa misma estrella iluminaba el mismo lugar
del firmamento donde ahora brilla, Marcelo Y Yo, mientras daban la
r¡.na--

MARCELO
Silencio, calla. Mira que ahÍ viene de nuevo'

BERNARDO
En la figura del difunto reY.

MARCELO
T\r tienes estudios, Horacio. Háblale.

BERNARDO
¿No es acaso idéntico al rey? FÍjate, Horacio'

HORACIO
Idéntico, sí. Me hace temblar de miedo y de asombro.
Shakespeare / Aleería FIAMLET ACTO I. escena I página 6

BERNARDO
Quiere que le hablen.

MARCELO
Pregúntale, Horacio.

HORACIO
iQué eres tú que invades esta noche y usurpas esa faz y esa
armadura con el que el difunto rey solía andar? ¡Por los cielos, te
exijo por los cielos qué me hables!

MARCEIO
Se ofende.

BERNARDO
Miren, se aleja.

HORACIO
Detente ¡Habla, habla! ¡Te exijo que hables!

[Mutis fantasma]
:
MARCELO
Se ha ido y no contesta.

BERNARDO
¡Y, Horacio, qué nos dices! Tiemblas y estás páüdo. ¿No es acaso
algo más que fantasía? ¿Qué piensas de esto?

HORACIO
Juro por Dios que yo no lo creyera sin haberlo confirmado con mis
ojos.

MARCELO
¿No es acaso parecido al rey?

HORACIO
Tan parecido como tu a ti mismo. Esa es la mismísima armadura
que llevó puesta al derrotar a los Noruegos. Y yo lo vi fruncir el ceño
de esa forma al entrar en batalla con los Polacos. Es muy extraño.

MARCELO
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO I. escena I Pá9ina 7

Dos veces antes, y a esta misma hora, ha pasado caminando


marcialmente por aquí, delante de nosotros'

I""H:":"qué pensar, exactamente, pero imagino que esto presagia


algo terrible para el reino.

MARCELO
Muy bien, sentémonos, y que explique quien 1o sepa por qué nos
y
fatigan tanto, todas tas noóh"s, óorr. estas gUardias tan estrictas
crueles; por qué se funden cada dÍa mil cañone" y se compran
del
extranjéro ta¡tas máquinas de guera; por qué se reclutan tantos
carpinteros de marina y para quáforzarlós ta¡to que yano saben
de
doáingos. ¿eué hay ¿itras de este sudor apresurado que hace
juntará dia óón h nóche? ¿Quién me puede informar?
HORACIO
Yo puedo; o por lo menos el nrmor que colTe. Este rey Hamlet,
nuestro difirnto rey, el que acaba de aparecérsenos ahora"' pues fue
retado a singular combate por el viejó Fortimbras, entonces rey
de
Noruega. Nuestro rey 1o herrotó y ese rey Fortimbras hubo de
L.á"ri], ¡unto con su iid", todas 1a tierras que tenía conqÚistadas
por las €rnnas. Por su parte nuestro rey había ápostaclo iguales
tr*"", qrre hubieran sid,o de Fortimbras, de haberunFortimbras
principito
triunfado. Ahot. bien: el jovencito Fortimbras, slf, hÜo,
sin crianza nirespeto... pL". ha venido reclutando aquí y alla, en la
frontera sur de su pxs, un ejército de gente resuelta y perdida, a
quien el harnbre obiiga a intentar cualquier empresa peligrosa' Y eI
It propósito de este imberbe Fortimbras no es otro que conqüstar
li
nuev€unente por las armas lo que su padre perdió, legalmente, en el
torneo. Esta es la cau.Sa principal de tanto preparativo, de nuestras
guardias y de toda la agitación que hay en el reino'

BERNARDO
Pues si no es ésa, no sé cuál pueda ser. Creo que cuadra que Se nos
apaÍe?Ía el rey difunto vestiáo de armadura, ya qne es él mismo el
motivo de estas guerras.

HORACIO
Puede ser,' sí, un mal presagio. En la época *á: anügua y
triunfante d.e la vieja Roma, poco antes de que Julio' César cayese
asesinado... pues {uedaron áe pronto vacios los sepulcros, y los
Shakespeare / Alesría HAMLET ACTO I. escena I página 8

cadáveres amortajados vagaron por las calles gimiendo y


balbuceando mientras estrellas con estelas de fuego hacÍan llover
sobre Roma u.na densa garúa de sangre. Y los mismos cielos ahora
nos muestran estos antrncios gr¡e presagian sucesos quizás
terribles.

[Entra el fantasmal
HORACIO (cont.)
Silencio, miren, ahí llega nuevamente. Le hablaré, aunque me
reviente. Detente, sombra. Si eres capaz de hacer algun sonido, si
tenes voz, pues ¡háblame! Si hay algún bien qué hacerte que te
diera a ti descanso y a mí indulgencias, ¡háblamel Si sabes de algo
que amet:raze'. a tu país y gu€, enterándonos, podamos evitar, ¡pues
háblamel ¡Habla por Dios! ¡Háblame! ¡Detente y habla! ¡Detén1o,
Marcelo!

MARCEI,o
¿Con milanza?

HORACIO
¡Si hace falta, sí! .'i

BERNARDO
¡Está aquí!

HORACIO
¡Aquí está!

MARCELO
Se fue. k ofendimos: siendo él tan majestrroso no debimos tratar de
violentarlo; y ya que es invulnerable como el aire... pues nuestros
mandobles le resultan burla.

BERNARDO
Casi nos iba a hablar cuando cantó ese gallo.

HORACIO
Y entonces se asustó. Como a u.n reo a quien llaman con terrible
orden. Yo he oído decir que al cantar el gallo todo espíritu errante
por la tierra o por el mar vuelve a su guarida.
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO I. escena 1 pásina 9

MARCELO
Será verdad, se fue al cantar el gallo. Dicen algunos que para Noche
Buena, cuando celebramos el nacimiento de1 Señor... esta ave del
amanecer se pasa canta¡rdo la noche entera. Y entonces, dicen,
ningún fantasma pena; la noche es s€¡.na, ningún hada se mueve,
todas las brujas pierden sus poderes... así de dulce y bendita es esa
noche.

HORACIO
parte. Ya amanece. Demos fin a la
Así me han dicho, y yo lo creo en
guardia, y vayamos a contarle al joven Hamlet 1o que hemos visto
esta noche. Por Dios que este fantasma mudo ha de hablarle a é1,
más que a nosotros. ¿t es parece que le hablemos del asunto? Es
nuestro deber de lealtad.

MARCELO
Hagámoslo, les ruego. Y yo sé donde encontrarlo esá mañana.

[Muüs todos]
Shakespeare / Aleería FIAMLET ACTO I. escena 2 páeina l0

Escena Dos

[Entran Claudio, rey de Dinamarca, Gertntdis, la reina, Polonio y su hijo Laertes,


Hamlet y acompañamiento]

REY
Aunque es reciente aún la cruel memoria del deceso de mi caro
hermano Hamlet, y aunque era propio de mí y de mi reino
contraernos a un sollozo de pesar... tanto han combatido en mi la
raz,on y los sentimientos que, con sabia tristeza, pienso ahora tanto
en mi hermano corrlo en mí mismo. Y así, con alegría en los
funerales y dolor en las bodas, pesando en igual balanza, el placer y
la aflicción, decidí tomar por esposa a quien sólo un tiempo atrás
fuera mi hermana, pero que ahora reina conmigo sobre esta fiel
nación guerrera. Y tampoco en esto he desdeñado yo rnrestro
consejo, que autonzó tart buenamente mi decisión. Os lo agradezno.
Pero ahora hace falta que estéis enterados de que el joven
Fortimbras, suponiéndonoi débiles e inerines a causa de la muerte
de mi hermano, pensa.ndo que nuestro reino estaría quebrado y
desunido, ha dado en molestarme con mensajes pidiendo que le
devolvamos las tierras que perdió su padre en justo torneo con mi
hernano. El asunto es el sig,iüente: el rey de Noruega, tío de
Fortimbras, está enfermo y confinado a su lecho, y apenas tiene
noticias de los propósitos de su sobrino;yo le he escrito,
[muestra una carta]
y aquí yo le suplico que le impida a su sobrino seguir con sus
planes, ya que esas tropas son súbditos de su reino y los pertrechos
parte de su tesoro. Ve tu, joven Cornelio, y como emisario mÍo
llévale esta carta al viejo rey de Nomega. Te doy poder para negociar
con ese rey, pero sólo según consignan los detalles aqui escritos.
Adiós. Y que hr prontihrd hable bien de hr lealtad.

CORNELIO
En esto, como en todo, mostraré mi lealtad

REY CLAUDIO
Yo no lo dudo. Adiós.

[Mutis Cornelio]
REY CI.Á.UDIO
Y ahora, buen Laertes, ¿qué contigo? Me has hablado de alguna
petición, ¿de qué se trata? iQué podrías suplicar, mi buen la'ertes,
qr" ,ro i.."t" al instante mi regalo? Esta cabeza tao es más íntima
COn este coraz,on, esta mano más necesaria para esta boca qUe tU
padre para el trono de los daneses. ¿Qué quieres tú de mí, Laertes?

LAERTES
Vuest¡o permiso para volver a Francia, de donde vine
voluntariamente pará presenciar vuestra coronación, cumpüendo asÍ
con mi deber dé teañaA. Pero ahora yo debo confesar que mis
pensamientos y deseos melven a Francia... sujetos, claro está, a
vuestra licencia.

REY CI,AUDIO
¿Has obtenido ya el permiso de tu padre? ¿Qué dice Polonio?

POLONIO
Me ha imporhrnado tanto con su ruego que al fin he accedido, pero
muy a regañadientes. Os suplico permitáis que se ausente.

REY CI,AUDIO
Vete, en buena hora, Laertes, cuando desees. HaA lo que te haga
más feliz. Pero Hamlet, sobrino mío, mi hijo...

HAMLET
[Aparte]
Algo más que pariente y menos que paciente.

REY CI,AUDIO
¿Como es que estás aún bajo una nube?

HAMLET
No hay tal, señor: me pongo mucho al sol.

REINA GERTUDIS
Mi buen Hamlet, abandona ya ese luto, y mira al rey como a tu buen
amigo. No busques p€rra siempre a tu padre bajo el polvo. Tü sabes
que es asÍ: todo 1o que vive debe morir.

HAMLET
Sí, señora, así es.
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO I; escena 2 pásina 12

REINA GERTUDIS
Pues si lo sabes, ¿por qué aparentas otra cosa?

HAMLET
¿"Aparentas", señorú No, señora, es lo que es. Yo no sé aparentar.
No son la capa negra, buena madre, ni el luto acosftrmbrado, ni los
suspiros, ni el río que desciende de los ojos, ni el semblante
angusüado ni todas estas formas, maneras y expresiones de dolor
las que podrían demostrar mi pena. Ellas son, ciertamente,
apariencias, ya que muy bien podrían ser fingidas. Yo llevo adentro
algo que está mas allá de la apariencia, y esto no es más que el
vestuario del dolor.

REY CIAUDIO
Es bueno y noble, Hamlet, rendirle a tu padre estos lúgubres
honores. Pero por qué, si sabemos que la muerte es común y
natural, ¿por qué habremos de tomarla tan a pecho? ¡Vaya, que
esto es faltar al cielo, a los difuntos y a la naturaleza! Te mego, deja
ya ese dolor tan a deshora, y piensa en mi como en u.n padre. Es
sabido que tú eres heredero de mi reino, y que te amo con el mismo
afecto que un padre tiene por su hijo. Y en cuanto a tu intención de
regresar a Wittenberg, es demasiado opuesta a mi deseo. Yo te
ruego, te exhorto a que te quedes con nosotros, como regalo y alegría
de tu madre y mi primer cortesano y más: mi hijo.

REINA GERTUDIS
No dejes que tu madre haya rezado en vano, Hamlet. Te ruego
pernÉrnezcas con nosotros. No vuelvas a Wittenberg.

HAMLET
Os habré de obedecer, madre.

REY CIAUDIO
Vaya respuesta gentil y cariñosa. Quédate en Dinamarca, aquÍ
conmigo. Vamos, señora: esta decisión de Hamlet, tan amable y
espontánea, me alegra el coraznn. Por tal motivo, todo brindis que
esta noche haga el rey de Dinamarca habrán de proclamarlo los
cañones hasta el cielo. Y cuando beba el rey, el firmamento mismo
habrá de hacerle eco, repiüendo ese trueno terrenal. Ven, vamos ya.

[Trompetas. Mutis de todos menos Hamletj


Shakespeare / Alegría IIAMLET ACTO I. escena 2 - pásina 13

HAMLET
Y si esta carrre demasiado densa
se ablandara, derritiera, disolviera
en un rocío Ieve...
O si el Eterno no hubiera establecido
su ley contra el suicidio...
Dios, Dios: que vanas, rancias,
inútiies y chátas me parecen las cosas y los usos
de este mr-mdo.
¡Ma1dito, maldito sea!
Es un jardín baldío Ya marchito,
poseídó por los fmtos más pestilentes y obscenos'
iQ,r. ella pudiera, al fin, llegar a esto!
Que sólo a los dos meses de la muerte,
--[o, ni tanto, ni dos meses--
de la muerte de un reY tan excelente
que compararlo con este otro sería
.b*p^t t al dios Apolo con L¡'n vulgar enano"'
Un rey tan amante de mi madre
qr. rrt podía permitirle a las brisas del cielo :

po'sarse en su rostro con rrrdeza--


¡cielos y üerra! ¿es que debo-recordarlo?
V"y", rr.i madre se abrazaba de mi pad're
como si "i el apetito pudiera acrecentarse
con aquello que lo nutre,
y si embargo antes de un mes--
No puedo más Pensarlo.
¡Veleidad, üenes nombre de mujer!
Menos de un corto mes, y antes de gastar
los zapatitos con que acomPañara
el cadáver de mi padre, deshecha en lágrimas,
pues ella, ella misma--
¡Por Dios, un animal salvaje
carente de entendimiento
hubiera guardado luto por más üempo!
--se casa con mi tÍo;
hermano de mi Padre,
pero no más Parecido al reY mi Padre
que yo a Hércules.
Ántes del mes, y con los ojos aún enrojecidos
por la sal de ese llanto ignominioso,
)

Shakespeare / Alegría HAMLET ACTo I. escena 2 páeina 14

pues... se casa.
Ah, qué infame ligerez,a hay en correr
con tanta destreza
a las sábanas blandas del incesto.
No es bu.eno, ni podrá terminar bien.
Pero estalla, corao.ón,
porque debo detener mi lengua.

[Entran Horacio, Bernardo y Marcelo]


HORACIO
Buenos días, señor.

HAMLET
¿Horacio? ¿Eres Horacio o es que estoy soñando?
HORACIO
El mismo, mi señor.

HAMLET
Mi buen amigo, ¿qué te trae aquÍ de wittenberg, Horacio? ¿Marcelo?

MARCELO
Mi señor

HAMLET
Que gusto verte.
[A Bernardo]
Buenos días señor mío.
[A Horacio]
Pero dime, por dios, ¿por qué has vuelto de wittenberg ahora?

HORACIO
Ganas de no hacer nada, mi señor.

HAMLET
No, tú nunca fuiste un holgazán. Dime, ¿qué asuntos te traen aqui
a Elsinor? Te enseñaremos a beber como una cuba en dos por tres.

HORACIO
Vine a ver los funerales de vuestro padre.
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO I. escena 2 páeina 15

HAMLET
¡Que no se burle de mí mi condiscípulo! Querrás decir a las bodas
de mi madre.

HORACIO
La verdad, que fueron muy seguidas.

HAMLET
¡Economía, economÍa, Horacio! Los asados del funeral sin¡ieron de
c€unes frÍas para el matrimonio. Yo hubiera preferido encontrarme
con mi peor enemigo que presenciar lo que pasó ese día. Mi padre,
me parece estar viendo a mi padre.

HORACIO
¡Dónde, señor!

HAMLET
En la imaginación, Horacio.

HORACIO
,. Yo 1o vi sólo unavez; era un magnífico rey.

HAMLET
Fue ¡rn hombre, nada más, hombre completo.
Jamás veré yo nada parecido.

HORACIO
Señor, creo que anoche 1o he visto.

HAMLET
¿Visto? ¿A quién?
HORACIO
Señor, al rey rn-lestro padre.

HAMLET
¿Al rey mi padre?

HORACIO
Estos camaradas, Marcelo y Bernardo, 1o habían visto dos veces,
cerca de medianoche, mientras montaban guardia. Con gran
secreto me lo contaron; fui a acompañarlos la tercera noche. Y
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO I. escena 2 página 16

volvió :urLavez más la aparición, tal como ellos la habían descrito. Yo


conocÍ a vuestro padre. No son más parecidas estas manos.

HAMLET
Pero, ¿dónde pasó eso?

HORACIO
Señor, en la plataforma sobre el mar.

HAMLET
¿Y no le hablaron?

HORACIO
Yo le hablé, señor, pero no me respondió. Una vez pensé que hacía
u¡,n gesto como para hablar, pero entonces cantó el gallo y el
fantasma huyó despavorido.

HAMLET
Es muy extraño...

HORACIO i
Pero es cierto, señor, como que estamos con vida, y hemos pensado
nuestra obligación hacéroslo saber.
qL¡.e era

HAMLET
Por cierto, por cierto, amigos, pero esto me turba. ¿Hacen la guardia
también esta noche?

TODOS
SÍ, señor.

HAMLET
¿Armado, dicen?

TODOS
Armado, sí señor.

HAMLET
¿De arriba a abajo?

TODOS
Señor, de pies a cabeza.
HAMLET
Entonces, no le vieron la cara.

HORACIO
Sí, señor: llevaba alzada la visera

HAMLET
Y, ¿se le veÍa molesto?

HORACIO
Más bien apenado que furioso, señor.

HAMLET
¿Pálido o encendido?

HORACIO
No, muy palido.

HAMLET
¿Y los miraba fijamente? i

HORACIO
Tcdo el tiempo.

HAMLET
Ojalá yo hubiera estado ahÍ.

HORACIO
Mucho os hubiera asombrado, señor.

HAMLET
Ya lo creo, ya 1o creo. ¿Se quedó mucho tiempo?

HORACIO
Como quien cr¡enta hasta cien sin mucho apuro.

BERNARDO Y MARCELO
Más, más.

HORACIO
No la vez que yo estuve.
§hakespeare / Aleqría FIAMLET ACTO I. escena 2 página 18

HAMLET
Su barba era gris, ¿no es asÍ?

HORACIO
Tal como yo en vida se la vi: negra con hilos de plata.

HAMLET
Iré a la guardia esta noche. Quizrás caminará ottavez.

HORACIO
Volverá, segurarnente.

HAMLET
Si se presenta en la forma de mi padre le hablaré, aunqrle el infierno
mismo se me abra y me pida callarme. Y a ustedes les mego, así
como han ocultado hasta ahora esta visión, oculten también cuanto
suceda esta noche. Yo sabré recompensar su lealtad. Adiós. ks
haré una visita en la plataforma entre las once y las doce.

TODOS i

Es nuestra obligación serviros, señor.

HAMLET .

No, por qué; es vuestra amistad la que me ampara. Adiós.

[Mutis todos menos Hamlet]


HAMLET (cont. )
El espíritu de mi padre... ¿armado? Algo anda mal. Sospecho una
traición. Ojalá hubiera llegado la noche. Pero hasta entonces, debo
aguardar con el ánimo tranquilo.
l,os crÍmenes habrán de conocerse
aunqu.e toda la tierra los oculten.

[Mutis]
*
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO I. escena 3 página 19

Escena Tres

[Entran Laertes y su hermana Ofelia]


IAERTES
Ya está embarcando mi equip4je. Adiós. Y déjame saber de ti muy
pronto.

OFELI.A
No 1o dudes.

I,AERTES
Y en cuanto a Hamlet y sus demostraciones de amor, no son más
qug el perfume de un insta¡rte.

OFELI.A
¿Nada más que eso?

LAERTES
" No creas, no, que es más. Quizas é1 te aine ahora con pure",a, pero
debes darte cuenta de que et príncipe no tiene voluntad en estas
cosas. El no puede, como cualquier mortal, elegir por cuenta propia
porque de su elección depende la seguridad y la felicidad de todo el
reino. Hamlet tendrá que pedir el consentimiento de toda
Dinamarca para casarse. Piénsalo así, y piensa cómo se habría de
manchar tu honor si creyeras en sus cantaletas o perdieras ttr
coraznrt, o le abrieras tu casto tesoro a su indómito capricho.
Témelo, Ofelia. Témelo, querida hermana, y manténte siempre muy
lejos de la ocasión del deseo.

OFELIA
Segurré tu consejo; pero tú, hermallo, no hagas como algún mal
sacerdote: no me señales el camino espinoso de la castidad mientras
tú recorres la senda de los placeres como un libertino. Tienes que
practicar tu propia doctrina.

LAERTES
No temas tú por mí. Ya debo irme.

[Entra Polonio]
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO I. escena 3 página 20

POLONIO
¿TodavÍa aquí, Laertes? ¡Pues qué vergüenzal
¡Embarca, embarca! El viento sopla favorable
y te están esperando.
Ven, recibe mi bendición.
Y lleva estos preceptos en tu memoria
para que ellos cuiden de tu carácter:
No le prestes lengua a ttrs pensamientos
ni pongas en práctica ningún pensamiento desorbitado.
Sé familiar y afable, pero jamás vulgar.
Aquellos amigos que tengas de lealtad probada,
aférralos a tu corazón con lazos de acero;
pero no gastes trr ma¡to acaricia¡rdo
' cada amistad recién salida del cascarón;
Cuídate de entrar en una riña,
pero, una vez adentro,
cuídate de que trr oponente se cuide de ü.
Dale a cada hombre ttr oído, pero a ninguno tu voz.
Acepta la crÍtica de cada quien,
pero reserva tu propia opinión.
Que tt¡ vestido sea tan costoso
como pueda comprarlo tu bolsa I
pero sin ostentación:
rico, pero jamás extravagante
porque el hábito casi siempre hace al monje
y en Francia los más nobles y poderosos
tienen un delicado gusto en estas cosas.
Jamás prestes, ni menos pidas prestado
porque prestando, con frecuencia uno pierde
tanto el préstamo como el amigo prestatario,
y el pedir prestado le hace perder el filo a la amistad.
Pero por encima de todo, ten presente 1o siguiente:
sé siempre fiel a ti mismo,
que de eso ha de desprenderse
como el día se desprende de la noche,
que no podrás serle infiel a nadie.
Adiós. Y que mi bendición
haga madurar en ti lo que te he dicho.

LAERTES
Adiós, querido padre.

POLONIO
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO I. escena 3 páeina 2l

Te esperan. Vete.

LAERTES
Adiós, Ofelia.
[La abraza)
Y recuerda todo aquello que te he dicho.

OFELIA
lo tengo bien guardado en la memoria.
LAERTES
Adiós.

[Mutis Laertes]
POLONIO
¿Y qué es lo que te ha dicho, Ofelia?

OFELIA
Algo acerca del príncipe Hamlet.

POLONIO :
Ajá, muy acertado. Me han pasado lavoz de que ultimamente él te
ha estado dedicando mucho üempo, y que tú misma has estado más
bien libre con tus favores. ¿Qué ñay ustedes? Dime la verdad.
"rr-tre
OFELIA
ultimamente, señor, me ha hecho declaraciones de amor con gra.n
ternura.

POLONIO
¿Amor? ¡Bahl ¿Ternura? ¿Y tu le has dado oídos a esas
declaraciones como dices?

OFELIA
Señor, yo no sé qué es lo que deba pensar.

POLONIO
Pues vaya, que yo te lo enseñaré. Eres muy beba, si has tomad.o
esas bobadas por verdades. Y tendrás que desabebarte, qrre.si no,
-por seguir con este estilo-- terminarás haciéndome bobear, y
babear, dándome un bebe bobo de ese vivo.

.l

\r
,l
OFELIA
Me ha hablado de amor, pero en forma muy honesta, señor.

POLONIO
¿Ah, sÍ? pues forma no más será. ¡Vamos, vamos!

OFELIA
Y me ha jurado su arnor por casi todos los santos del cielo.

POLONIO
Ajá, trampas para
9Mú palomas. yo sé muy bien que cuando
hierve I,a sangre la lengua se vuelve pródiga en juramántos. Son
fuegos fahros, hija. De ahora en adelante sérás un poco más avara
con ttr persona. No rindas tus murallas con sólo que te propongan
parlamentar. Y piensa que es muy joven y que áa" .ap'iao
99. tu. En fin, Ofelia, no creas en sus promesa",
""butg.
que son luj'uria
disfrazada de piedad para mejor seducii. y en fin-: de ahorá en
adelante no habrás_ de cr'tJzaÍ palabra con el principe Hamlet.
CuÍdate de hacerlo. Vamos ya.

OFELIA
Seré obediente, señor. j:

[Muüs todos]
*-
t-

Escena Cuatro

[Entran Hamlet, Horacio Y Marcelo]


HAMLET
Muerde este viento; hace mucho frío.

HORACIO
Es un viento agudo Y Penetrante.

HAMLET
¿Qué hora es ya?

HORACIO
Creo que aún son menos de las doce.

MARCELO
No, las doce han dado.
:
HORACIO
¿Sí? No me di cuenta. Entonces ya va a ser la hora en la que el
fantasma acostumbra Pasar.

[Trompetas y dos disparos de cañón]


HORACIO
¿Eso qué significa, mi señor?

HAMLET
Es el rey, que no duerme esta noche y se divierte, Y apuesta a beber
de un trago grandes jarros. Y mientras va engullendo el vino blanco,
timbales y tto*petas, celebran rebuznando cada uno de sus triunfos
sobre el vino.

HORACIO
¿Es costrrmbre de aquí?

HAMLET
shakespeare / Alegría FIAMLET ACTO I.escena 4 página 24

¡Y vaya cómo! Pero es costumbre que más valdría romperla que


seguirla. Porque los pueblos y paÍses vecinos nos miran *ul y rro,
maldicen, llamándonos borrachos.

[Entra el fantasma]

HORACIO
Mirad, señor, ahÍ viene.

HAMLET
¡Angeles y ministros de la Gracia, defiéndannos! Hamlet,'""áUr
rey, padre,
señor de Dinamarca. ¡Contéstame! No me dejes de
ignorancia y dime por qué ha abierto sus fauces el sepulcro para
arrojarte a ti anuestro espacio. ¿Qué puede significar ."top
¡DÍmelo! ¡Por qué! ¡para qué! ¡eué ha| que hLer po, át

[El fantasma hace señas]

HORACIO
Os invita a alejaros con é1, como si quisiera hablar con vos a solas.

h{ARCELO i
itlo vayáis, señor.

HORACIO :

No, no vayáis.

HAMLET
No hablará. Yo tengo que seguirlo.

HORACIO
¡No, señor, no!

HAMLET
¿Por qué? No tengo nada qué temer. No me importa mi vida ni un
comino, y mi alma, ¿acaso no es tan inmortal como esa sombra? Me
pide que lo siga. Voy con é1.

HORACIO
¿Y si os tentara al filo del abismo que surge sobre el mar? ¿si ahí se
transformara en un espanto, un ente tan monstruoso que ll,enara de
locura vuestro seso? pensadlo, pensadlo: por sÍ ... lugar
perturba y hace que surjan, sin mayor moüvo,"ólopesadillas de
infiernos y de muerte en qüen contempla el mar desde su cumbre y
siente cómo ruge Por debqjo.

HAMLET
Me sigue llamando.
[al fantasma]
Ve, qrre Yo te sigo.

MARCELO
No habréis de ir, señor.
HAMLET
Suéltenme.

HORACIO
Por favor, señor. No habréis de ir.

HAMLET
Mi destino me convoca y me hace fuerte como un tigre. Me llama
aún. ¡Déjenme! Por Dios, que volveré fantasma a quien ose
detenerme. ¡Digo que me suelten!
[Al fantasma]
:

Ve, que yo te sigo.

[Mutis Fantasma y Hamlet]


HORACIO
Está fuera de sí.

MARCELO
Sigárnoslo. No debemos obedecerle.

HORACIO
Vamos ya. En qué terminará todo esto.

MARCELO
Algo se está pudriendo en Dinamarca.

HORACIO
Ya se sabrá.

MARCELO
No, sigámoslo.
[Mutis todos]
Shakespeare/ Alepría HAMLET ACTO I. escena 5 páeina 27

Escena Cinco

[Entran el Fantasma y Hamlet]


HAMLET
¿Dónde me llevas? Habla atrora. No doy un paso más.

FANTASMA
Escucha bien.

HAMLET
Escucho.
FANTASMA
Casi ha llegado mi hora, cuando debo entregarme nuevamente a las
llamas sulfurosas del tormento.

HAMLET
Dios mío, pobre fantasma.

FANTASMA
No te apiades de mí. Más bien préstale atención a 1o que voy a
decirte.

HAMLET
Habla. Debo escuchar.
FANTASMA
Y deberás vengarte, cuando escuches.

HAMLET
Qué.

FANTASMA
Yo soy el alma de tu padre, desünada cierto tiempo a deambular en
la noche y a quemarse en las llamas durante el dia. AsÍ será, hasta
que los pecados que en vida cometí se consuman también y sean
purgados. Lo tengo prohibido, eue si yo te contara los horrendos
secretos de mi cárcel, tu joven s¿rngre se congelaría, tus ojos se
saldrían de sus órbitas y las briznas de tu rizado pelo se pondrían de
Shakespeare / Alegría ÉIAMLET ACTO I. escena 5 páeina 28

punta como espinas sobre el lomo del agreste puercoespín. Pero


este fuego eterno no está hecho para los oídos de seres aún
mortales. ¡Atiende, atiende, dy, atiende! Si alguna vez amaste al rey
tu padre...

HAMLET
¡Dios mío!

FANTASMA
Venga su cruel y atroz asesinato.

HAMLET
¿Asesinato?

FANTASMA
Asesinato atroz, como siempre lo es, pero éste más monstn¡oso y
vergonzante.

HAMLET
Dimelo pronto, que mi vengarlza será más rápida que el
pensamiento.

FANTASMA
Se ha hecho pensar eue, dormido en mi jardín, l¡na serpiente
p,onzoñosa me mordió, dándome muerte. De esa inanera se engaña
en forma aleve a todo el noble pueblo de Dinama.rca. Has de saber
que la serpiente que mordió a h¡ padre se ciñe ahora su corona.

HAMLET
¡Ah, mi alma profética! ¡Mi tÍo!
FANTASMA
sí. Y ese engendro adulterino e inceshroso, mediante filtros y
regalos traicioneros está satisfaciendo ahora mism.o su h:rbio apetito
por mi reina. Ay, Hamlet, que ttr madre haya podido caer de esa
manera, entregarse a un engendro cuyos dones naturales eran nada,
comparados con los mÍos. Pero el deseo anidará en un radiante
ángel, y ha de saciarse en un lecho celestial y alimentarse de
carroña. Pero escucha, creo sentir la brisa de la an-lrora. Seré breve.
Mientras yo dormía en mi jardín, como era mi costumbre por las
tardes, a esa hora tranquila llegó hasta mi tu tío trayendo consigo
una ampolla de veneno. Y en mis oidos vertió su vil ponzoña. Ese
lÍquido recorre los ámbitos del cuerpo tan rápido como el azogue,
Shakespeare / Alegría FIAMLET ACTO I. escena 5 páeina 29

coagul€¡.ndo la sangre a su paso como se corta la leche con el ácido.


AsÍ ocurrió conmigo. Y en ese instante me cubrió una costra de
lepra repu.lsiva y perdí, a un tiempo, de mano de mi hermano, mi
vida, y mi reina, y mi corona. Oh matdad, perfidia horrible. ¡No Ia
soportest No dejes que el lecho real de Dinamarca cobde el torpe
incesto y la lujuria. Pero como fuera que emprendas tu proeza, no
enturbies tu razóD, d dejes que tu alma conciba ningún castigo para
tu madre: déjala a ella rendir cuentas ante el cielo, y mientras tanto,
deja que las espinas de cruel remordimiento que hay en su pecho la
arañen y la sangren. Adiós, ahora mismo. Adiós, adiós, adiós.
Acuérdate de mí.

[Mutis Fantasma]
HAMLET
¡Ay, ejércitos del cielo! ¡Ay, üerra!
¿Qué más? ¿Invocaré al infierno?
¡Detente, detente, corañrr, sopórtalo!
¡Músculos, carrres, no envej ezcarL de pronto,
sosténganme erguido, sosténganme!
iQue te recuerde?
Ay, sí, sÍ, pobre fantasma,
mientras haya aún memoria
en este globo enloquecido.

Sí, sí, que yo de esta pizarra he de borrar


todos recuerdo bello intranscendente,
toda la habladurÍa de los libros,
toda forma e imagen del pasado
que juvenhrd y eshrdio ahí escribieron
y solo tu mandamiento vivirá
en el libro y volumen de mi mente,
puro y sin rneznla con nada menos noble.
Sí, sÍ, por Dios.
¡Ay, mujer tan infame!
¡Ay, asesino, asesino! ¡Sonriente, afioz asesino!
Mi libreta, si, hay que anotarlo,
¡hay que escribirlo pronto!
Que uno puede sonreír, y sonreír, y ser un asesino.
Por 1o menos sÍ es posible en Dinamarca.
IEscribe]
Pues, bien, querido tío: ahí 1o üenes.
Ahora a cumplir mi juramento.
Shakespeare / Aleería FIAMLET ACTO I. escena 5 página 30

Me dijo: "Adiós, adiós, acuérdate de mí".


Jurado está.

[Entran Horacio y Marcelo]

MARCELO
¡Príncipe Hamlet!

HORACIO
¡Dios lo ayudel

HAMLET
AsÍ sea.

MARCELO
¡Señor, señor!

HAMLET
¡Hola, amigos! ¡Vengan, vengan!

MARCELO
¡Qué pasó, señor!

HORACIO
iQué noücias nos dais?
HAMLET
¡Maravillosas!

HORACIO
Contadlas, señor.

HAMLET
Jamás, que las revelarán.

HORACIO
Yo nunca, señor, por los Cielos.

MARCELO
Ni yo tampoco, señor.

HAMLET
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO I. escena 5 páBina 31

Bueno, pues, qué les parece, quién se 1o hubiera podido imaginar.


¿Guardarán el secreto?
HORACIO Y MARCELO
SÍ señor, por los Cielos.

HAMLET
¡Bueno pues! Les contaré qu¡.e no hay en toda Dinamarca peor
villano que... aquel qLle es, por cierto, un gran bandido.

HORACIO
No hace falta un fantasma salido de su tumba para enterarnos de
eso, señor.

HAMLET
Cierto, estás en lo cierto y entonces, sin más ni más, me parece
bueno darnos un apretón de manos y despedirnos. Ustedes, a 1o
que los llamen sLts asuntos y deseos, que todo hombre tiene asuntos
y deseos, sean cuales fueren pero yo... pues a re?,ar.

HORACIO
Son palabras muy sall.'ajes y confusas, mi señor.

HAMLET
Lamento ofenderte, Horacio, de todo corazón. SÍ, de todo corazón.

HORACIO
No hay ofensa, mi señor.

HAMLET
¡No, la hay, por San Patricio qrre la hay! ¡Y gran ofensa, por cierto!
Pero en cu¿ulto al fantasma que vimos, pll.es les diré que es un
fantasma honesto. Pero en cuernto a ese deseo de saber lo que ha
pasado entre é1 y yo, les rlego reprimirio como mejor les parezca. Y
ahora, mis buenos amigos, porque son ustedes mis amigos, son
soldados honorables y hombres cultos, concédanme un simple favor.

HORACIO
¿CuáI es, señor?

HAMLET
Nunca dejar saber lo que han visto aquÍ esta noche.
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO I. escena 5 páeina 32

HORACIO Y MARCELO
Señor, jamás lo haremos.

HAMLET
Por cierto, pero júrenlo.

HORACIO
Yo no lo haré, señor, os 1o aseguro.

MARCELO
Ni yo tampoco, señor.

HAMLET
¡Sobre la cruz de mi espada!

MARCELO
Ya 1o hemos jurado, señor.

HAMLET
Insisto, sí, insisto, ¡sobre mi espada! Insisto.

FANTASMA
[Debajo del escenario]
¡Juren!

HAMLET
[Al fantasma]
¡Ajá, chiquillo! ¿Tú también quieres que juren? ¿Estás ahí, mi fiel
4migo?
[A Horacio y Marcelo]
Ya escuchan a ese tipo en el sótano: vamos, v€unos, júrenlo.

HORACIO
Proponed el juramento, mi señor.

HAMLET
Nunca hablar de lo que ahora han visto. Juren por mi espada.

FANTASMA
[Desde abajo]
¡Juren!

HAMLET
¿Aquí y acullá? Mudémosnos. vengan acá, caballeros, y pongan
ót á u.r las manos sobre mi espada, y juren por su ctuz que jamás
hablarán de lo que han escuchado.
FANTASMA
[Desde abajo]
¡Juren por su espada!
HAMLET
¡Bien dicho, viejo topo! ¿Puedes moverte tan rápido por dentro de la
tierra? Vengart, veng€u1, amigos.
HORACIO
¡Cielo y tierra, que esto es muy extraño!

HAMLET
¡Y por extraño, entonces, bienvenido! Hay más cosas en el cielo y en
la üerra, Horacio, que aquello que te enseñan tus lecturas. Vengart
acá y prométanme que nunca, por más curioso o extravagante que
fuera mi comportamiento --ya que quizás decida yo que me conviene
asumir una apariencia de locura-- jamás hará¡r notar que saben algo
sobre mí en ese sr:ntido. No, ni siqüera con un simple movimientr¡
de cabez,a ni cruzándose de brazns ni diciendo ambigüedades como
"bueno bueno, ya se ve", o "podriamos si .pudiéramos" o "si
habláramos dirÍamos" o "de otra forma sería, si así no fuera" o
cualquier otra confusa expresión que denotara que algo saben de mí:
eso jamás. Júrenlo ahora, y que el cielo y la gracia los a5pden en sll
hora de más necesidad.

FANTASMA
[Desde ab4jol
¡Juren!
HAMLET
Descans d yd, descansa, fantasma enloquecido.

[Juran]
HAMLET (cont. )
Pues bien, amigos: les agradez*o de todo corazót. Y todo aquello
que el pobre Hamlet pueda hacer para significar su gratitud y su
amistad, habrá de hacerlo, con la ayuda de Dios. Vámonos juntos, y
una vez más, por favor, los dedos sobre los labios, les ruego.
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO I. escena 5 páeina 34

Nuestro tiempo está fuera de quicio. Qué maldición, qué maldición


haber nacido para que tener que enderezarlo. No, vengan, vámonos
juntos.

Fin del Primer Acto


SEGUNDO ACTO
Escena LJno

[Entran Polonio Y ReYnaldo]


POLONIO
Entrégale este dinero y estas carta's' Re¡rnaldo.
REYNALDO
AsÍ 1o haré, señor.
POLONIO
Ven a.cá. Sería un adrnirable gol¡re de prudencia qrre te inforrnaras
Lrn poco de su cornPortarniento.
REYNALDO
Así pensaba hacerlo. "

POLONIO
SÍ, es br:ena idea, rnrry br:ena. idea. Haz corno si 1o conocieras, y
coglo si pensaras qLre ét es un atorrarate, inclinado a tal o cr¡al vicio,
así o a.sá, pero nadá tan violento que ptreda deshonrarle. Habla sólo
de los usos y cosü¡mbres de los jóvenes, colllo qr:e 1o has visto en
rlraa co¡11ilona, o jqgando a los dados, o bebiendo, o co1¡1o qtre lo has
visto entrar a. trña-casa pública, vale decir burdel o algo así por el
estilo.
; REYNALD.
¡Pero señor...t
POLONIO
¡Ah, tÍr qrrieres saber por qué esta táctica.t Pues es Proceder con
gr.r, corál:ra.. Cargándole está.s falta.s a rni hijo entrarás en
óonfianza con tu interlocLltor, y él te dirá qtre sí, qrte lo han visto
aqr:Í o allá, y qlre sÍ tiene los wicios qrre le irnpr:tas. ¿Lo enüendes
ya? Sacarás áe rnentiras verdades, que asi es coITIo nosotros, la
gente Ce talento y de prudencia., solernos descubrir con indirectas la
verda.d rnás directa,, y con argucias, artificios y disirnulaciones, lo
qr-re Se errctrentra escondido en cr-ralqlrier cosa. ¿Me ha's entendido?
REYNALDO
Señor, qr:edo enterado
POLONIO
pues entonces, buen via-je. Exarnina por ti rnisrno sus costtrrnt:res,
pero déjalo qrre siga su ca-rrrino.

[Mutis Reynaldo. Entra Ofelia]


POLONIO (cont.)
¡Ofelia! Dirne qrré sr:cede.
OFELIA
Señor, señor, estoy tan a.s'ustada...
POLONIO
¡Pero por qr-ré, en el nornbre de Diosl
OFELIA
Señor, rnientra.s bordaba en mi habitación ltegó el príncipe Harnlet-..
descornptJ.esto, la casaca abierta, sit:' sornbrero, la's rnedias Darry
strcias y caídas sobre los talones, tana párlido corrao str carnisa', la's
piernas ternblándole y la. rnirada... corrlo si htrbiera venido del
infrerno para hablar del terror del otro rnundo... a'sÍ se nae presenta--
POLONIO
Loco de arnor por ti.
OFELIA
Señor, yo rao 1o sé, pero eso temo.
póloNro
éQué te dijo?
OFELIA
Me torna de la rnr:ñeca ft¡ertemente. . Luego exüende sr¡ brazo y con
la otra rrr€¡.no sobre la frente se nae qrrida rnirándorrre como si frrera, a
retrata.rrne. Estuvo largo tiernpo asi, y por frn rne sacude
ligerarnente el brazo y rntreve la cabeza, cor¡lo asintiendo, hasta tres
veces, y h:ego strelta. tra strspiro tá.n prof'r-rndo qLre pa.rece
deshacérsele en peda-os todo el ctrerpo, y parece qlre la vida se le va.
Desptrés rne strelta y retrocede, sin dejar un instante de rnira-rrne,
con:¡,o si tuviera ojos en Ia nllca, y así sale de rni ctrarto y ca-rnina
largo trectro, sin jarnás qtritarme los ojos de encirna..
POLONIO
Ven, ven conrnigo. Voy en busca del rey. Esta es la. tipica locl.ra. de
arnor. Es r¡raa pena. Y Qué, ¿le tras dicho algo rnlf,y dr¡ro
últirnarnente?
OFELIA
No señor, yo sólo he recha-zado sr:s cartas y me he negado a verlo,
tal corno vos rnisrno rrre habéis rnandado.
POLONIO
¡ptres rnás qtue sr¡frciente para volverlo locot Larnento haberlo
jgzgado tan rnal. Pensé que sólo qr:ería destronrarte. Ven, vanaos a-
ver al rey. E'ste aslrnto hay qrre revelarlo pronto. Y es rrrlry trrgente
hacerlo, auraqrre sea doloroso. Ven ya-
[Mutis todos]
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO II. escena 2 pásina 38'

Escena Dos
[Entran Clan:dio, Gertn¡dis, Rosenc rantz, y Guildenstern]
REY
Bienvenidos Roser:cra:;ttz y Guildenstena. La necesidad qr:e tengo de
veros ha provocado wuestra urgente llegada. Algó habrá{s oido de la
transforrrlación strfrida por Harnlet. Ya no es el rnisrno, Qué ca.usa
prrede haber para este carnbio, salvo la rntrerte de str padre, no
puedo irna.ginar. Por eso os ruego a. vosotros dos, ya qLre sois sus
arnigos y condiscÍpulos y habéis crecido jtrntos desde niños, que os
qrredéis aqtri, era Elsinor, lrrr tiernpo. Con vuestra cornpañía
entretenedle y tratad de hacerle g:oza:r de los pla.ceres; averigr:.ando,
eso sí, en ct¡a.nta oca.sión podáis encontrar, si aqtrello que lo aqtreja
es algo qtre ¡ao conozco. Porgtre sólo conociendo la camsa de str pena
la podré yo aliviar.
REINA
Hamlet ha hablado rnr¡cho de vosotros, y no creo qr-re haya dos
persona.s rnás qr:eridas por é1. Si tenéis éxito, vuestra en'¡.presa
recibirá ruaa recornpensa propia. de trn rey.
ROSENCRANTZ
Vuestra.s rna.jestades sólo tendrÍan qrre ordenarlo y no pedirlo.
GUILDENSTERN
Pero nosotros obedecernos y po¡aerrros a vuestra disposición ntrestras
personas p¿rra todo aqtrello que gustéis rnandar.
REY
Gracias arnigos. Pero os ru.ego: en este instante, id a verlo.
[Mutis Rosencrantz y Gtrildenstern. Entra Polonio]
POLONIO
Prirnero: Ha vuelto el enrisario que rnandasteis a Norrrega., señor.
Segundo: Estoy seguro de que he encontrado la causa exa"cta de la
loctrra del btren Harnlet.
REY
Háblarne de eso. Eso rne interesa.
POLONIO
Será rnejor qtre prirnero deis atrdiencia aI ernbajador. Y rni noticia
serwirá de ¡rostre a ese fesün.
Shakesoeare ,/ Alegría HAMLET ACTO II- escena 2 páeina 39

REY
FIa-Io pasar errtonces.

[Muüs Polonio]
REY
Dice que ha encontrado la- camsa del tra.storno de trr hijo.
REINA
Dudo qr-¡.e sea. otra que la- principal: la rnuerte de su padre y nuestra
boda tan inrnediata.
REY
BLreno, habrernos de aclararlo.

[Entra Cornelio con Poloniol


BERNARDO
Bienvenidos, t)L¡enos arnigos. Di, Cornelio, qrré noticias del gran rey
de Noruega.

CORNELIO
Pues os sa.lr¡da. mr-ry respetuosarnente, señor. FIa. rnandado detener
el acopio de a.rrnas y solclados que hacÍa. el joven Fortirnbras. ¡El rey
pensaba qrre iban a rnarchar contra Polonia y ¡ao contra nosotrosl
Dolido por el abr¡so que de é1 había hecho slf sobrino,
aprovechándose de str eda.d y de str sah¡d tan desrnejorada, rnanda
arrestarlo. Fortirnbras obedece, recibe reprimendas del re);.y al frn
prornete n-L¡.nca. rnás al-at las arrna.s contra vuestra rn4jesta.d.
Entonces el rey, gozoso, le otorga a. F'ortirnbras sesenta rnil coroÍr.a.s
de renta antral y órdenes de ernplear los solda.dos y pertrectros
recogidos ya. no contra nosotros sino contra los polacos. Y os enwíá
este pedido: que perrrritáis libre paso por vuestro territorio a las
tropas de ese joven, pa.ra. qrre así pueda acor¡aeter con éxito srl
guerra contra. Polonia. Tal paso lil¡re sería de actrerdo a la.s
condiciones de púy segtrridad qrre aqr.rí están escritas.
REY
Me place. Más tarde leeré, contestaré, y pensaré sobre este asunto.
Id a desca.ns¿Lr. Esta noctre festejarernos juntos. Elienvenido.
[Mutis Cornelio]
POLONIO
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO II. escena 2 página 40

Pues terrninó rnuy bien ese negocio. Sobera.no rrruy arnado, y vos
señora. Extenderse en qrré consiste el br¡eno gobierno y el deber
bien curnplido o por qué el dÍa es dia., la noclre es noche y el üernpo
el tiernpo no serÍa sino perder el dÍa, la noche y el tiernpo. Por lo
tanto seré brev€, y8 que la brevedad es el alrna del ingenio. Vuestro
noble hijo está loco. Loco lo lIarno, porque tratar de defrnir lo que es
an¡téntica locrlra, ¿qrfé otra cosa será sino locura? Pero en fin,
dejernos eso.
REINA
Al grano, al grano, Polonio, con rrlenos artifrcios.
POLONIO
Ningún artificio, rni señora, para nada. Que está loco es verda.d. Y
es verdad qtre es trrra pena. Y es trna pena qLre sea tan verda.d
rrna infeliz frgttra, pero en fin, no tiene cornpostlrra pues prornetÍ no
rlsar rnás a¡tificios. Tengo una hija. --1a tengo rnientras sea. rnía--
qüien, fijaos, traciendo gala d.e obediencia rne ha entregado esto.
Escuchad y colegid.
ILee]
"Al celestial idolo de rni alma, la rnuy bellísirna Ofelia". Esa es una
mala fra.se, trna vil fra.se, orntty bellísirna' es l¡fra rnala frase. Pero
habéis de esct¡char. Dice.
oEn stt[lee]
rrar-ry excelente y blanco seno, estas etcétera"
REINA
¿Vino esto de Harnlet pa.ra ella?
POLONIO
Br:ena señora, espérad. r.rn tarrto, seré fiel.
Iee]
"Dr¡da qrre so¡a de ftrego las estrellas
duda si al sol el movirniento falta,
dr¡da lo cierto, adrnite lo dudoso,
pero no dudes de rni arnor las ansias.
"Oh querida ofelia, soy tan rnalo en estos rnernesteres... no tengo
ningún arte para expresar rnis pena.s, pero qrre sÍ te arno con loctrra,
si, corr locura, ptredes creerlo. Adiós. Tüyo para siernpre, arnada
rnÍa, rnientras le qtrede vida a este esqr.releto... Harnlet."
POLONIO
y rne lo ha
Con gra.n obediencia rne ha rnostrado esto Ofelia rni trija,
contado todo sobre slrs galanteos: cr:ándo, córno y dónde han
ocr¡rrido. Todo rne lo ha confesado.
Shakesoeare / Ategría HAMLET ACTO II' esceng 2 páqina 41

REY
¿Pero córno tra recibido ella- sr: arnor?
POLONIO
¿Que pensáis vos de rní?
REY
Que sois un hornbre leal y honorable'
POLONIO
Y tre de probar qrre lo soy. Pero ¿qué hubierais Pensado vos, si en el
rnomento de enterarrne de esta páJión en ciernes -- ya gne rrre enteré
rnucho antes ae q.r" rni trija m"-to coratá'ra-- si y9 no hrrbiera-torna'do
cartas en el a.srinto? ¿Ót¡C t*rbierais pensado?príncipe, No. Me plrse
inmed.iatarn"rrt" a traUa:á, y le dije: "Flarnlet es l¡n no está
a. trr alca¡rce, esto no <lebe contintlar". Y le prohibí,-acto seguido,
adrnitir diafogo nipiesentes de su señor. Dicho y hecho en
por rni hlja
trfa gran
y-tristeza.,
entonces ét, sa-biénd.os" recl1'azado, se surnergió
de la. tristeza pa.só al a5nrno, del aJn-rno al insornnio, del
insornnio a la. langr:idei, de ahí cayó en t¡n gra-n a'tr¡rdimiento y por
fin, por natural dáüna.ciórt, en la cruel locqra en la cr¡al se deba'te y
qr:e todos larnentarnos.
REY
¿Crees qrre sea. así?
I
REINA
Puede ser, segLlrarnente.
POLONIO
[respecto acabeza Y tronco]
Separa.drne ésta de esto, si resultara otra cosa'
REY
¿Córn'o podrernos consta.ta'rlo?
POLONIO
AlgUnas veces pasa h¿sta cr:atro horas segr-rida.s carninando de r:n
ladc a otro por esta galerÍa--
REINA
Así es.
POLONIO
AquÍ le soltaré a rni hija.. Vr¡esa rnerced y yo estarem'os tras uny
cortina.je. Ol¡ser-r¡aréis bien el encuentro. Si Harnlet no la arl:r'¿¡.ra,
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO II. escena'2 página 42

si no ftrera. ésa Ia razótl- de su locura, renu.nciaré a ser el consejero


de este reino y rne dedicaré a la agricultura.
REY
Lo intentaretrros.
REINA
Mirad que atrí viene leyendo, eI pobre.
POLONIO
Dejádrne a solas cora é1, os 1o sr:plico. Idos, por Dios.
[Mutis Rey y Reina.]
POLONIO
¿Córno está rni buen prÍncipe Harnlet?
HAMLBT
.¡Vaya,
Dios rne arnparet
POLONIO
¿Me conocéis, señor?
HAMLET
Perfectarnente. T\i vendes pescado.
r!' PoLoNIo
No 1o soy, señor.
HAMLET
Pues ojalá frreras ta.n tronrado corno é1,

PoLoNIo
¿Honra"do, señor?
HAMLET
Ya lo creo, señor; porque ser honra.do, en este rnundo, es ser rrno
entre diez rnil.
POLONIO
Eso es rrruy cierto, señor.
HAMLET
¿Tienes una hija?
POLONIO
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO II. escena 2 páeina 43

La tengo, señor.
HAMLET
No la dejes carninar por la calle. La concepción es una bendición
pero no en la forrna er¡ que ella concebiúa... pLres arnigo... ¡rnucho
cr.ridado!
POLONIO
[Aparte]
CQué decís de eso? Siernpre con el terna de rni hüa. Está rerna.tado,
rernata.clo. Pero no rr:e conoció, dijo que yo era. un pescadero. I-€
hablaré otra. vez.
[A Flarnfet]
CQué leéis, señor?
HAMLET
Palabras, palabras, pala.bras.
POLONIO
¿Y qué es lo que dicen?
HAMLET
¿Quién y qrrién?
POLONIO
Lo que dice ese libro, señor.
HAMLET
Infundios, señor. Porque aquÍ están diciendo que los v§os tienen
barbas gri::es, rostros llenos de arn:gas, ojos legañosos y rina. gran
falta de seso- Todo lo cr¡al rrre pa.rece cierto pero no hay" por qué
ponerlo por escrito. Porque vos rnisrno, señor, podríais llegar a. tener
rni edad si es qLle, como el cangrejo, carninarais para atrás.
POLONIO
[Aparte]
Atrnqr:e es locr¡ra, es locura con rnétodo.
[A Harnlet]
¿No qureréis poneros a la sombra señor?
I{AMLET
¿La sorntrra, de la turnba.?
POLONIO
Por cierto, eso es ponerse a la sornbra".
[Apa.rte]
Shakespeare / Alegría HAMLET. ACTO II- escena 2 pásina 44

Qtré inteligentes sor¡ a veces sr:.s locr:ras. Lo dejaré, y veré la forrna


de qtre él y rni trija. se encr¡entren.
[A Harnlet]
Mi señor, os pido rrtrestro perrniso para privaros de rni presencia.
HAMLET
No podríais privarrne de nada que corr rnás gusto yo misrno
entregaría... salvo rni vida, salvo rni vida, sa.lvo rni vida.
[Entran Rosencrantz y Guildenstern]
POLONIO
Adiós, rni señor.
HAMLET
Estos viejos estirpidosl
¡

POLONIO
Si btrscáis al prÍncipe Hamlet, helo ahi.
ROSENCRANTZ
[A Polonio]
Buen dÍa., señor.
[Mutis Polonio]
GL]ILDENSTERN
¡Mi estirnado señort
ROSENCRANTZ
¡Mi rnuy qrrerido señort
HAMLET
¡Mis excelentes arnigost ¿Córno estás, Gtrildenstern? ¡Atr,
Rosencrantzt ¡Eluenos muchachosl ¿Córno están los dos?
ROSENCRANTZ
Corno ctralqrrier rnortal de cr:alquier parte.
GI'ILDENSTERN
Felices de no estar demasiado felices. No serernos la plunra del
sorr¡t¡rero de la Diosa. Forttlna, pero...
HAMLET
Tarnpoco la suela de sus zapatos.
ROSENCRANTZ
Tarnpoco, señor.
HAMLET
pntonces le andarán por Ia cintura, o q'glizás en el centro rnisrno de
sr:.s afectos.

GUILDENSTERN
Pues sí: casi sonaos slf,s secretarios privados'
HAMLET
¿Secreta.rios coll secreteos en sl¡s partes rnás privadas? ¡Pues
claro,
{tre ta Fortr:na es L¡na puta! éQué hay de nuevo?

ROSENCRANTZ
Nada, señor, salvo qrre el rnundo se ha. wuelto tronrado.
HAMLET
Entonces se acerca el juicio frnal. Pero esa noticia no es cierta' Otra
pregunta". ¿Qué casügo tran rnerecido t¡stedes de rnalaos de la diosa
Fortuna para qtre los traya- rnandado a- prisión aqr-rí?
GUILDENSTERN
¿Prisión, señor?
HAMLET
Dinarnarca es una Prisión.
ROSENCRANTZ
Entoncesltarnbién 1o es el rntrndo. .

HAMLET
si, y nauy grande, donde hay rmrchos reclusos, carceleros y
calabozos. Y Dinarnarca es L¡n'o de los peores'
ROSENCRANTZ
No pensarnos 1o rnisrno, señor.
HAMLET
Entonces rfo lo será para, ustedes, porque no hay nada qLle sea rnalo
ni bueno, salvo en lá opinión de cáda. tlno. Para' rní, es r¡na cárcel'
Pero d.Íga::nae, con1o arnigos, ¿qué hacen aqrrí, en Elsinor?
ROSENCRANTZ
De visita., señor. Nada rnás.
ShakesBeare / Alesría HAMLET ACTO II. escena 2 página 46

HAMLET
¿No los rnandaron venir? Les agradezco La. cornpañía pero, ¿vinieron
porque qrrerían venir? ¿Es una. visita espon!ánea? Varrros, varnos.
No señores, ¡hablen!
G(.IILDENSTERN
¿Qt¡é debernos decir, señor?
HAMLET
Cualquier cosa, con tal gue sea. cierta.. Los rnandaron venir. Hay
algo de confesión era srf,s rniradas. Yo sé qrre el br:en rey y la reina
los rnandaron venir. Pero se€L¡:. francos y abiertos conrnigo. ¿Los
rna.ndaron venir o no?
ROSENCRANTZ
[Aparte a Gr¡ildenstern]
CQué dices tú?
HAMLET
[Aparte]
Pues bien, ya les tengo ptresto el ojo.
[A ellos]
Si son arnigos rnÍos, no rne rnientan.
GI.JILDENSTERN
Señor... pr¡es sí, r:os mandaron venir.
HAMLET
Y yo les voy a decir porqué, y a-sÍ no tendrán qr:re seguir traicionando
su jtrrarnento al rey. Sur:ede qtre desde ha,ce trn tiernpo --pero no sé
pqr qné can¡sa-- he perdido toda rni alegría-, y he abandonado todas
rnis distracciones de costtrrnbre. Y en werdad, rni áurirno está tan
abatido qtre este bellísirno ort¡e que es la Tierra rrre parece tln estéril
prornontorio, esta. rnagnífica tróüeda, el aire, fijense, este firrnarnento
altivo que nos étrbre, este techo mqiestuoso adorrado con fuego de
oro... vaya., pues rao me parece nada rnás qtre una pestilente rr:Lezcla
de va.pores. ¡Qué obra rnaestra es el hornbret ¡Cuám noble en
r¿¡.zonarrlientot iQr¡é infinita.s sus factrltadest ¡Err sar forrna y
rnovirniento, qtré dúctil y adrnirablel ¡En la acción, es corno rln
ángelt ¡En cornprensión, casi como r:n diost ¡La belleza de este
rnundo, el paradigrna de los anirnalesl Y sin ernbargo, ¿qué es, para
rnÍ el hornbre, sino la quintescencia del polvo? Et horrrbre no trle
deleita --[o, ni la. rnujer tarnpoco, Rosencrar:tz, ya que pareces estar
diciéndolo con tu sonrisa.
ROSENCRANTZ
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO II. escena 2 Páeina 47

Mi señor, no había tal en rrris pensarrrientos.


HAMLET
Entonces, ¿por qué reÍas cr.rando dije qr-re el hornbre no rrre deleita?

ROSENCRANTZ
Porqrr.e si fuera asi, señor, qué n:tal recibiréis a. los actores que
encontra.rnos al venir-
HAMLET
¿Qtré actores son?

[Trornpeta.s]
GUILDENSTERN
Pues aquÍ están llegando.
HAMLET
Bu.eno, a.rnigos, bienvenidos a Elsinor.
Un abrazo. Sean nauy
bienvenidos. Pero rni tÍo-padre y rni rnadre-tía están rnuy
eqrrivocados.
GUTLDENSTERN
¿En qtré señor?
HAMLET
Sólo estoy loco cua::do el viento sopla. del nor-noroeste. Cuando
. sopla del sur, distingo perfectarnente entre un gawilán y Lrn serrucho.

[Entran los actores] ¡r


i1

HAMLET (cont.)
Bienvenidos, naaestros, se¿r¡a todos bienvenidos. Qr¡é alegría vgrlos
bien. Ah, viejo arnigo, te ha crecido la, ba¡ba desde que nos vifnos
por úlürna- vez. ¡Y trsted, mi joven darna y rni señoral ha crecido
bastante desde la últirna. vez ql¡e la. wi. ¿Pero la. voz? ¿Sigue tan
clara y cristaliraa corrro siernpre? Maestros, searlr bienvenidos, qrre yo
soy corno un águila y rne La¡tzo sot¡re la presa. sin rnás trárnite.
Dénrne a.hora rnisrno t¡na. mr¡estra de str arte. Varnos, rrn pa-saje
apasionado.
ACTOR I
Qué pasa.je, rni br¡en señor.
HAMLET
Shakespeare / Ategría .HAMLET ACTO II- escena 2 pásina 4g

varnos a, ver... sí. rJno que siernpre rne gustó. El de Hécuba, en esa
grarr tragedia qrre fr:e tan buena qu.e nllnca trrvo éxito. Era caviar
para la.s rnasas. Va.rnos, varnos, ¿córno cornienza?
[Declarna con sencillezl :

"Más ¡ay! quien wiese a Hécr:ba, la. reina


correr descalza y, con copioso llanto
arraerraraÍ las llarna.s; tosco r¡tanto
ciñe sr¡ pelo qr:e el dolor despeina.;
et1. vez de vestidltra.s, una rnanta
qrre en sr¡ pavor le a.rrebató al desierto
cr¡bre sr¡ ar:rgosto y an$-rstiado cr-rerpo...
[Al Actor]
Pues bien, sigue trr.
ROSENCRANTZ
Por Dios, señor, qué bien recitado. con btren acento y buena
expresión.
HAMLET
tAl actorl
Sigue tú, sigue
ACTOR. I
Más ¡a5rt qtrien viese a Hécuba, la. reina
correr descalza y, con copioso lla.nto
a;rr:.,erlaar las llarna-s --tosco rna.nto
ciñe sr-r ¡relo qr-re el dolor despeina.;
er7. vez cle vestidttra.s, una rnanta
que en su pavor le arrebató al desierto
cr:bre su enjuto, atorrnentado cuerpo--
qtrien wiera este dolor, dolbr qtre espanta
de traidor acrls€Lra. al cruel Destino;
ya parpadea el sol, tiembla la arena
a¡:te eL feroz estallid.o de sr: pena-
porqare Hécuba ot)senra, ya sin tino
desrnernbra ya el cadáver de sr-r esposo,
separanedo sl¡s ca.rrres trozo a. t¡ozo
con sll espada, ¡no, dioses, no, y,a es tarde!
¡ya escr¡chasteis el grito de str entrañat
Nada podéis hacer, todo está trecho:
y esa angustia qtre llena vuestro pecho
rnal redirne el dolor qr:e la acornpaña.
GUILDENSTERN
Mirad córno ernpa.lidec€, y üene lágrirnas en los ojos.
Shakespeare / Alesría HAMLET .4CTO II. escena 2 o4eina 49

HAMLET
Ya está bien. Otro dÍa. rne harás oír todo el pa-sqje.
[A Rosencrarltz)
Vayan a disponer que estos actores sea.n bien servidos y
acornodados.
ROSENCRANTZ
Les darerrros exactarnente lo qr:e rrrerecen, señor.
HAMLET
¡Por Dios, hornbre, Do, rntrchísirno rnásl ¡Dale a cada qrrien lo que
m.erece y nadie escapa. una btrena tundat Trátalos de act¡erdo a
conao Er te consideras a. ti misrno. Llévenlos ya-

GUILDENSTERN
Venid, señores.
HAMLET
Siganlo, a.rnigos. Mañana tendrernos tlna representación.
[Aparte al Actor I]
Ven y escrlcha, carnarada. ¿Ptreden presentar "La rntterte de
Gonzalo"?
ACTOR I
Sí, rni señor.
HAMLET
La verernos rnañana por la noche. Tfr podría-s, en caso ¡aecesario,
aprenderl'r: trn parlarnento de unas doce o dieciséis líneas¡ qrre yo te
escribiria para inserta.rlo en la pieza., ¿no es así?
ACTOR I
Por supuesto, señor.
HAMLET
Mr:y bien, elatonces. Sigue a esos señores. Arnigos tod.os, bien
venidos a. Elsinor.

ROSENCRANTZ
Mr-rchas gracias, señor.

[Mutis todos, rtlenos Harnlet]


HAMLET
Gracias a ti...
Shakespeare /Aleería HAMLET ACTO II. escena 2' Ésina 50

Akrora ya estoy solo.


Qué infarne y rniserable esclavo soy.
¿No es asornbroso que este actor aqrri,
apenas en rtn sueño de Pasiones,
rrna, ficción, pueda forzar s'ur akna
tan fácilrnente, tan a su capricho
que le surjan torrentes de los ojos,
se le qr.riebre lavoz y su apariencia
esté de actrerdo hasta el rnínirno detalle
con todo lo qr:e siente no de vera.s,
y todo por srl sirnple volunta.d?
¿Y todo por... nada?
¿Por Hécuba?
¿Pero qtrién es Hécuba para é1, o él para Héctrba
que tenga qrre llorarla de ese rnodo?
éQué haria é1 si tr¡viera el cn:el rnotivo
para e1 dolor qne, en carnbio, tengo yo?
Pues atrogarÍa el escenario en llanto
y rornpería este silencio con palabras ta:n terribles
Qrre harían enloqrrecer a 1os culpa.bles,
derretirse de ter-or a los sensatos
y confundir a los pobres inocentes
haciendo que se anulen de pavor
las factrltades todas, ojos y orejas
inútiles por siernpre después de eso.
Mientras qrre yo,
torpe e indeciso vagabundo,
girno, corrro un sonárnbtrlo sin lengua;
no rne ha,go cargo de la rnisión qtre tengo
y digo y hago sirnplernente nada.
No, no trago na.da., ni siquiera por un rey
a qu.ien le qrritan la üda y los derectros
en forrrra. ta.n rnalvada.
¿Soy r-rn cobarde?
¿Quién rne insulta., qrrién rne dice villano?
¿Quién rne escnpe en la frente? ¿Quién rne ar.r€Inca
los pelos de la barba y rne los sopla
en la. cara? ¿Me rettrerce la nariz?
¿Me hace tragar que soy r:n rnentiroso?
¿Quién rne veja de todas esas forrnas?
Por Dios, qLre yo tendría que soportarlo,
poique no puede ser sino qtre tengo
entrañas de palorna, que si no,
ya hubiera alirnenta.do de carroña
a todos los gallinazos de este reino
con la.s inrm¡ndas tripas de ese esclavo.
Asesino lujurioso y sanguinario,
¡asesino lascivo, cruel, rnalditol
¡traicionero asesinot ¡Ah, vettga nzal
Vaya. Qué asno soY.
Esto sí qare es valeroso, sí: qrre Yo,
el hijo de un noble padre asesinado
a quien cielo y e1 infrerno impulsan
a 1á venga:aza., rne Ponga' a desahogar
rrri corázón con palabra's y con gritos,
¡qrre rrre ponga a rnaldecir corno una
putal
¡rnaldito, rnaldito seat
Pensar, ¡>ensar en otra' cosa.
Mrnrn...
He esctrchado qr¡e a veces los culpables,
al presenciar r¡na obra. de teatro
se irnpresionan de tal forma con 1o visto,
que cónfiesan sr¡s acciones más horrendas'
Yo haré que estos actores representen
delante de rni tÍo una tragedia
qrre irnita. bien la rntrerte de rni padre.
Obsen¡aré y sondearé a' rni tío,
su rostro y sr¡ expresión: si ernpalidece
si tiernbla y se desarrna.,
-gl sabré ctrál es rni
yo ctrrso
far.tasrna que he wisto puede ser el dernonio
y el dernonio és cap'- de asr¡r¡rir cualqrrier forrna inocente
quizas aprovechando rrri tristeza y rni angustia
!---¡iorqrre
ds rnas po¿eroso cuando está rnás débil--
há qr-lerido engañarrne para que yo'no rne condene'
Pará veragarrrle necesito una base rnás segura
::

q.. .p.ttás las palabras de r¡n fa:rta-srna-


Esta representación será Ia leY
que desnude Ia conciencia de1 rey-

Fin del Segundo Acto


shakesr:eare / Aleería HAMLET ACTo II. escena 2 página 52

TERCER ACTO
Escena 1

[Entran Rey, Reina, Ofelia, Polonio, Rosencra.ntz y Guildenstern]


REY ,.

¿No harr logrado averiguar la raz,ón de sr.r locura?


ROSENCRANTZ
Confiesa que se siente alterado, pero se niega a. hablar de la causa.
GLIILDENSTERN :

Con locr¡ra rrlLry sabia se retira cr¡ando qlreremos llevarle a ese


terreno.
REINA
¿Los recibió arnat¡lernente?
ROSENCRANTZ .:
Corno todo un caballero. ,

GL'ILDENSTERN
Pero despr.rés de rnüctro forzar st¡s sentirnientos, creo yo.
ROSENCRANTZ
sin qtrerer averiguar ningtrna cosa de nosotros, y lrrrly dispuesto a
da-r respuesta a ntrestras pregtrntas.
REINA :
¿Trataron de converrcerlo de entretenerse con algo?
ROSENCRANTZ :

Pues stlcede, señora, que encontrarnos en el carnino a tlnos actores


y los trajirnos corr nosotros. Nos pareció que Harnlet encontraba en
ellos algún placer. Estám aqrrí, en vuestra. corte y, según creo, tienen
ya. orden de representar esta noctre delante de vosotros.

POLONIO
AsÍ es, y r¡le tra pedido qrre os ruegue a \ruestras rrrajestades qtre
presenciéis esta. represerrtación.
Shakesqear,e / Aleería HAMLET ACTO III. escena I ,páeina 53

REY
Con todo gusto; rne agrada qr.re Flarnlet se entrrsiasrne por algo.
Caballeros, dadle un poco rnás de ánirno y convencedlo de qrre se
entregue a, tales pasatiernPos.
ROSENCRANTZ
Así lo trarernos, señor.
[Mutis Rosencrantz y Guildenstern]
REY
Dr¡lce Gertrurdis, déjanos tarnbién, porgtre era secreto he lla.rnado a
Harnlet aquÍ para qr.te encuentre a Ofelia corrao de casualidad. Su
padre y yo, espÍas niuy legÍtirnos, r3.os esconderem.os y, vier:do sin ser
vistos, jtrzgarernos este enctlentro para así deterrninar si es el arnor o
es otra. cosa el rnotivo de sr¡ locura.
REINA
Te obedez,co. Y por rni parte, Of-qlia, yo qr:isiera qlfe frrera tu belleza,
la dtrlce callsa de su triste desvarío, porque a.sí podrían tus wirtudes
devolverlo a st¡ antigr:o ser, para, bien de ustedes. dos.
OFELIA
Señora., ojalá.

[Mr:üs Reina]
POLONIO
Ofelia, ven aqrrí. Señor, si os .place, nos esconderernos. Ofelia, lee
err este rnisal, para que la sirnulación de tal a.ctividarl disirnule qr¡e
estás ta.n sola en este siüo. Ya lo oigo llegar. Vayámohos, señor. Es
el arnor, señor, ya lo veréis.

[Mutis Rey y Polonio. Entra Harnlet]


HAMLET
Ser o no ser, la alternativa es esa.
Si habrá de ser rnás noble?
, ¿Sufrir en la rnente los dardos y lanzas de r:na fortr¡na horrenda?

¿O torna.r las arrnas contra Lln rrlar de problerrra.s


para, ha.ciéndoles frente, derrota.rlos?
Morir. Dormir. Nada rnás.
Y con tln sueño decir qlre terr¡ainarnos
Ia angustia y los rnil torrnentos naturales
qu.e son trerencia propia de la c€Lrne.
' Es r¡rra. consurnación devotarnente deseable:
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO III. escena I página 54

. rnorir, dorrnir. Dorrnir. Tal vez soñar.


Ah sÍ, ése es el escollo:
porque ya surnidos en eI sueño de la rnuerte
y despojados de este tráfago rnortal,
¿qué sueños no vendrán? Eso nos detiene,
es ése el rniedo que por frn consigr:e
que el infortr:nio tenga larga vida.
Porqr,re, ¿quién soportaría con paciencia
los a-zotes y las burlas del tiernpo,
la injuria del opresor,
la sot¡erbia del orgtrlloso, .

la-s ansiedades del arnor despreciado,


la lentitr¡d de la justicia,
la insolencia del fi.rncionario,
y el escarnio qtre rnerece de los torpes
el rnérito paciente de los débiles,
si ptrdiera por sí rnisrno cer:t ar sLl caso
cor:r. rula daga, con rut puñal desnudo?
¿Qr-rién cargaría fa.rdos tan pesados
que hacen gernir y sudar toda r¡na vida
a no ser por ese áiedo de algo ignoto
rnás allá de la rntrerte
--el pa.ís jarnás descubierto
de donde no regresa. ningún via.jero--
ese rniedo qLre nos tl¡rba la voltrntad, y nos obliga
a sorneternos a los espantos qtre sufrirnos
antes ql¡e escapa-r a. otros qr.¡e no conocernos?
Es a.sí como la conciencia nos convierte en cobardes,
y es a.sí con3.o el color original de nr¡estras decisiones
se enturbia cuando lo,llurnina- el pálido pensarniento,
y errapresas de gra.n valor y rnérito
dernasiado bien rniradas, carnbian de ctrrso
y dejan de llarna.rse acción.
Pero silencio, la bella Ofelia...
[A Ofelia]
Ninfa., recuerda rnis pecados en tr¡s oraciones.
OFELIA
Mi señor, ¿córno habéis estado todos estos días?
HAMLET
Te agradezco hrrrnildemente. Mtry bien, ¡nuy bien, rnuy t¡ien.
OF'ELIA
Señor, tengo rect¡erdos de vos qrre hace tieinpo deseaba devolveros.
Os rtrego, recibidlos ahora.
HAMLET
No, yo rro, yo nunca te di nada.
OFELIA
Mi br:en señor, sabéis rnuy bien qr.e sí, y tarnbién palabras de tan
dglce aliento qrre hicieron rnás lu-iosa.s wuestras dádivas. Mr-rerto ya
e1 perfi:rne, reCibidlas nr¡evarnente, porque para un espÍritu noble los
ric-os dones se ernpobrecen cr-¡ando los donantes se tornan crureles-
Aquí tenéis, señor.
HAMLET
¡Ajá, ajál ¿Eres virtuosa?
OFELIA
¿Señor?
HAMLET
¿Eres bella?
OFELIA
¿Qué quiere decir sr.r señorÍa?
HAMLET
Qué si eres bella y virtrrosa, tu virtr¡d no debe rrtlnca. alternar con tr:
belleza.
OFELIA
Qué rnejor cornpañía para la belleza- qrre la virEud, señor.
,.i
HAMLET
Yo si te arné alguna vez.
OFELIA
Señor, eso nae tricisteis creer.
HAMLET
No 1o hubieras creÍdo: nttrtca te quise.
OFELIA
Mr¡y engañada estrr.ve.
HAMLET
Métete a Lrn convento. ¿Para qr-ré va.s a engendrar pecadores? Yo
soy rnás o rtaenos honesto, pero podría acr¡sarrne a mÍ rnisrno de
pecados tales qrre rni rnadre no querria haberrne parido. ¿Por qrré
Shakesneare / Aleería HAMLET ACTO III- escena I náeina 56

y la tierra sujetos corno yo?


tra.t¡ríarnos de arrastrarnos entre eI cielo
Sornos todos nnos villanos, jamás nos creas una sola palabra a
ningr:no. Métete a tln convento. ¿Dónde está tr: padre?
OFELIA
Err ca.sa., señor.
HAMLET
Que se clar:s'uren las puerta-s para qr-r.e rro pueda hacer el tonto al
a.ire libre. Adiós.
OFELIA
Durlces cielos, socorro.
HAMLET
Y si te casas, pues te doy esta. rnaldición de regalo de bodas: aünque
sea.s tan casta corrr.o el hielo, tan pura colrto la nieve, no escaparás
la calurnnia. Métete a L¡n convento. ¡Vete, adióst O si te ernpeñas
en casarte, pues cásate corr. tln tonto, porqlre los sabios saben rnlf,y
l¡ien lo qtre trstedes les hacen crecer en la cabeza' ¡Vete a tln
convento, y prontot ¡Adiósl
OF'ELIA
Dios rnio, }razlo qLre vuelva en sí.
HAMLET
Y estoy enterado de sr¡.s pintr-rras, tarnbién, sí, rntly enterado. Dios
les ha dado Llna. c¿rra y trstedes se fabrican otra. Bailan, se
coratoraean, hablan como niñita.s, le ponen apodos a todo y se hacen
la-s tontas sólo pa-Ta esconder str lascivia.. Vete, vete, ya estoy hartb
de todo eso, ¡n1e ha trectro volverrne locot ¡Yo proclarno que se
acabaron los rna.trimoniost ¡Los qlre están casados yd, todos
segrrirán vivos... rrrenos unol Los dernás, pL¡es qr¡e se qr-reden corrro
están. ¡Métete a r.rn conventot ¡Vetet
[Mutis Harnlet]
OFELIA
Qr¡é noble naente he visto desrnernbrarse:
la, del cortesa-rro, del soldado, del estudioso,
el ojo, la lengua, la espada,
Ia es¡reranza strblirne de este reino,
el rnás bello y sag.az, el rnás juicioso
de los hornbres, totalmente, totaknente destrozado.
Y ahora soy yo la. rnás rnujer rnás desdichada
porque bebÍ la rniel de sr¡s prorrlesas,
y veo esa razón tan noble Y dulce
resonar discordante
cua.l carnpanas repicando en desorden y afrebradas,
. veo tln rostro incornparablernente bello
' hinctrado y desgarrádo por la. locura.
Ay, pobre, pobre de rní,
ver lo qu.e veo, haber visto 1o qrre vi.
[Entran Rey y Polonio]
REY
¿Arnor? Sqs sentirnientos rro vanHay por ese lado: ni 1o qr:e habló,
á..rrq.." falto de forrna, fi¡e locura. algo en sr¡ akna qtre incutra
trrr gir.tt peligro. Y para prevenirlo he decidido, con toda prontitrrd,
lo qüe os'diré: ha.brá d.e partir de inrnedia.to a Inglaterra, para cobrar
el tril¡uto qr-re raos deben. CQr-ré piensas de eso?
POLONIO
Será btteno, señor. Pero yo insisto en ql¡e el origen y el cornienzo de
slr ¡rena es el a¡rror jarnás cor-¡espondido. ¿Qt¡é te st¡cede, Ofelia.?
l:ernos
No, tao necesita-s con-tar¡los lo que dijo el prÍncipe Harnlet,- 1o juzgáris
escuchado to<1o. Señor, fra-céd co11lo grrstéis pero, si lo
apropiado, os aconsejo que esta rroche, desptrés de la
ráprá""t tación, str rnadre 1o interrogue y Ie sonsaqr:e el origen de sr¡
rr.át. Que trable francarnente con é1. Yo rne pondré, si os place, en
tln ftrgar octrlto para escuctrar sin ser visto. Si ella no logfa
averiguar nada, rnandadlo a Inglaterra o encerradlo donde vuestra
sabiduria os aconseje.
REY
ASi se hará. HaY que observarlo. La loctrra en'los Poderosos no
debe desctridarse.
[Mr. tis todos] *
Shakespeare / Aleería HAMLET- ACTO III" escena 2 páeina 58

Escena Dos
[Entran Harnlet y tres Actores]
HAMLET
Digan su letra, les ruego, corno yo la he declarnado, levernente y con
lengtra. ágil. Que si la rna.scan, con:lo hacen tantos de nr¡estros
actores, preferiría. que el pregorrero del pueblo dijera rni texto.
Tarnpoco serrr-rchen el aire a.sÍ con los t>razos, sino rnás bien
gesticr-rlen con suavidad, porque en rnedio del torrente, de la
ternpestad, y --por así decirlo-- del hura-cán de la pasión, deben
siernpre consen/ar r.rna ternplartza que la haga verosírnil.
ACTOR I
Pierda. cuidado, señor.
HAMLET
Pero no se pongan dernasiado blandos ta.rnpoco. tfsen, ptles, sll
br¡en sentido. Adectrar la pa.labra a la a.cción y la a.cción a Ia
pala.bra., esa es la consigna. Porque ctralquier cosa exagera.da va en
contra. del propósito misrno del teatro qlre tra sido y €s, desde el
principio y siernpre', ponerle delante, por así decirlo, un espejo a
nuestra realidad: rnostrarle a. la virtr¡d su propia irnagen y a la
rnaldad sr¡ verdadera natr¡raleza; y a la rnisrnÍsirna época. y mttndo
en q'Lre vivirnos, sr-r forma y su huella.
ACTOR II
Entendido, señor.
i,
HAMLET
Y qrre los qr-re hacen los papeles córnicos d.igarl y hagan lo qrre eI
amtor ha escrito. Porque hay algr:nos que se echan a reír de pronto
p€¡.ra. qure parte del público los siga, alrnqtre mientras ta.nto algún
pasa.je irnportante de la obra deba ser atendido por todos. Esa es la
rnás grande canallada del teatro y rnuestra trna arnbición r¡ar¡y triste
por parte de los tontos que la practican. Vayan ya a alistarse.
[Mutis actores. Entra Polonio]
HAMLET (cont.)
Y, ¿qué pasa, señor? ¿Presenciará el rey esta. píeza?
POLONIO
Y la reina tarnbién, y llegan pronto.
T

I
Shakespearg / Alegría HAMLET ACTO III. escena 2 ., páeina 59

HAMLET
Apúrense, arnigos.
[Muüs Polonio. Entra Hora.cio]
¡Hola, Horacio!
I{ORACIO
Aqtrí estoy, señor, a vuestro se¡r¡icio.
HAMLET
I{oracio, eres el hornbre rnás tronrado de cnaratos tre tenido la suerte
de conocer.
I{ORACIO
Señor, no es a.sí.
HAMLET
No, no pienses que te adulo, porqu.e, ¿qr¡é podrÍa lograr yo de ti, que
iro tienes de renta nada rnás qtre tu inteligencia y buen hurnor? No,
tú tras sido siernpre para rnÍ, desde que trrve Lrso de razñn, uD
hornbre capaz de recibir con la rnisrna cara tanto los premios corno
los reveses de Ia, fortuna. Darne tÍr trn hornbre qr-re no sea esclavo de
strs pasior¡es y 1o llevaré por siernpre en rni coraárt... [o, en el
corañt:- de rni corazóÍ1., corrro hago contigo. Dejernos eso. Esta.
noclre se representa una pieza para el rey. Una de sr-¡.s escerras es
sirnilar a las circr:.nstancias, qr:e te he contado, de la. rnt¡erte de rni
pa.dre. Te rtrego lo sigr-riente: cr¡ando vea.s esa escena, observa a rni
tío con toda la. intensidad de tu akna br¡ena. Si no sr-lrge su ocr¡lta
culpa en LlÍl parlarnento preciso, será qlre es" tlr3. demonio eI
fa.rrtasrna qrre hernos visto y mis sospechas tan raegras corno la
fragrra de Vt¡lcano. Fljate bien en r¡ri tío. Más ta.rde pasarenlos
sentencia sobre lo qr-re nos dijo sr: sernblante.
FIORACIO
De actrerdo, señor.
[Trornpetas. Entran el Rey, la Reina, Polonio, Ofelia,, Rosencrantz, Guildenstern y
otro s Caballeros y Acornpa-ñarniento]
HAMLET
Vienen a ver el espectáculo. Debo segr-rir haciéndorne el loco.
Elúsca.te r¡n sitio.
R.EY
¿Córno anda rni br:en sobrino Harnlet?
Shakespeare / Aleería HAMLET: -ACTO III: escena 2 páginá 60

HAMLET
Corno e1 ca.ngrejo, señor, rnucha.s gracias. Avartzando hacia atrás
rápidarnente.
REY
No tengo nada qLre ver con esa respr.resta, Flarnlet, esas pala-bras no
son rnÍas.
HAMLET
Y no son rrría.s tarnpoco, atrora que ya. las dije.
[A Rosencrantz,ll
¿pstán listos los actores?
ROSENCRANTZ
Sí, señor. Esperan rruestra señal.
REINA
Ven acá, qtrerido Harnlet, siéntate jurnto a rní.
HAMLET
No, qtrerida. rnadre. Aqrrí hay trn irnán más atrayente.

POLONIO
[Al Rey]
Ajá, ¿os fijáis, señor?
HAMLET
[A Ofelia]
Señora, ¿rrre acr:e$to en vuestro regazo? :

[Se echa a los pies de Ofelia]


OFELIA
No, señor.
HAMLET
Qr¡iero decir, rni cabeza sobre trr rega-zo.
OFELIA
SÍ, señor.

HAMLET
¿Piensas que te propuse algo indecer:te?
OFELIA
No pienso rra.da, señor.
Shakespeare / Alesría HAMLET ACTO III. escena 2 ' oáeina 6l

HAMLET
Bonito pensarrriento, reclina.rse entre las piernas de una bella.
OF'ELIA '1

¿De qrrién, señor?


HAMLET
De nadie.
OFELIA
Estáis contento, señor.
HAMLET
Quién, ¿yo?
OFELIA
Sí, señor.
I{AMLET
¡Pero que puede L¡no hacer sino estar contentot Si no, fijate que
contentá. se Ia ve a rni rnadre, y rrri padre acaba de rnorir hace dos
horas.
OFELIA
No señor: ya. hace cr:atro rneses.
HAMLET
¿Ah, sí? ¿Tanto? Br¡eno, entorrces qr.re el diablo se wista. de h:to, qr.re
-.?p rrre adornaré con rln traje de piel de zorro plhteado. ¡Por Dios!
ZQr¡e rni padre rnurió hace L¡.n par de rneses y-todavÍa no lo han
olvidado? Entonces haSr esper¿uazas que a r-rn gran hornbre se lo
recuerde hasta seis rneses d.espr-rés de rntrerto. Eso sí, c_on,tal qrre se
construya a sí rnismo trn rnan¡soleo.
[Trornpetas. Pantornirna. Entran a¡n rey y tlna. reina, rrruy arrrorosos,
abrazándose. Ella se arrodillá delante de é1 y le expresa su €urror. El la trace
levantarse, e inclina su cabeza sobre el ctrello de ella. El rey se echa sobre trn
banco de flores. EIla, viéndolo dorrnido, lo deja. Entra otro trornbre: le quita la
corona al rey, la. besa, echa veneno sobre los oídos del durrniente y se aleja. f,a
reina regresa., encuentra rnuerto aI r€y, gesticr:la" apasionadarnente. El
envenenador enarnora a la reina con regalos. Dura::te un tiernpo ella 1o recha-za
pero al frnal ella. a-cepta su arnor. Mutis actores.]
OFELIA
éQr¡é qrriere decir todo esto señor?
Sh.k"=o"... / Al"nrí. HAMLET ACTO III. 2 oá*i,-,.62
"r""r,¿

HAMLET
Pues, cararnba, gu€ es r.tna intriga encubierta. Y que la obra tiene
por terrla la rnaldad.
OFELIA
Segurarnente esa pantornima es el argunxento d.e 1a obra.
HAMLET
Lo sabrernos por boca de este üpo. Los actores no pueden guardar
secretos. Lo st¡eltan todo.
OFELIA
¿Nos dirá lo qtre signifrca. esta pieza?
HAMLET
Sí, y cua.lqrrier pieza qrre tú le enseñes. Jarnás tengas vergüenza de
mostrarle trrs piezas y él no dudará en decirte que pieza es cual, ni
de enseñarte para qrre sirwe cada Llraa..
OFELIA
¡Malcria.do, rnalcriado! Voy a rnirar la. obra.
[Entra actor qr-re dice el prólogo]
ACTOR I
Hurnildernente os pedirnos
que esct.rchéis esta. tra.gedia
disirnr:lando las faltas
que traya. en raosotros y en ella. :,
HAMLET
iQué es estot ¿Un prólogo o el poernita. de una serpentina?
OFELTA
Es rnr:y corto, señor, sÍ.
HAMLET
Corno arr:or de rntrjer

[Entran <los aci.ores corr:'o Rey y Reina]


ACTOR REY
Ya treinta. veces doce rrreses largos
han transcurrido desde qtre los dioses
del arnor y el hirneneo entrelazarott
Shakespe4re / Alegría HAMLET ACTO III- escena 2 páeina 63

con santos lazos nr:.estros corazones.


ACTRIZ REINA
Y quiera el cielo qr-re otros tantos años
de arnor y devoción aún corrtemos
a.ntes qrre el fr-r.ego de este arrror se apague.
Cr¡án grande es la pasión que a vos rne inclinan
os 1o diráur las prrebas qt-re os he dado
en cada insta.nte de tan la.rga vida.
ACTOR REY
Pronto habré de dejarte, reina rnÍa:
inevitable es ya.; cederán presto
a, la rmrerte rnis fi:erzas fa.tigadas;
tÍr vivirás goan:^do del obseqrrio,
los placeres y delicias de esta üerra. \
Acaso entonces tendrás un digno esposo.
ACTzuZ REINA
'¡No, no lo digáis, no digáis eso!
Pues sería traicionar rnis sentirnientos.
¿Yo un nuevo esposo? No, qrre quien se entrega
a. Lln nt-revo esposo es que rnató al prirnero.

I{AMLET
[Aparte]
Eso es pura hiel, purita hiel.
ACTzuZ REINA :

Motivos de interés qtrizás albergan :


la.s qr.re se ca.sa.¡a en segundas nupcias, I

no motivos de €urror; yo camsarÍa


segunda rntlerte a rni difi¡nto dr:eño
á-l aceptar en el lectro del primero
los besos de algún otro.
ACTOR REY
Yo no dudo
qr-re firrnernente crees 1o qtre dices;
pero sr¡ele octrrrir qlre proponerrros
por la pasión guiados, cosa-s tales
que r¡na vez olvidadas las pasiones
olvidarnos tarnbién nr¡estra.s promesas.
Tfr rne prorrretes no rendirte a nadie
cuando yo rn.t¡era. ¿Morirán tus votos
ct¡ando en el lecho final por fin rne veas?
Shakes¡eare / Alegría HAMLET ACTO III- escena 2 páeina 64

¡ICTRÍZ REINA
¡Lrrces rne niegue el sol, fmtos la tierrat
¡Que viva yo rnuriendo sin descanso,
desesperada. y en Prisión oscura;
qr-re cu.anta-s penas el ánirno entristecen
todas me turben a rní, y rrre destrlyan;
qlre rao encr:entre reposo en parte algtrna
si corno vir¡da celebro nLteva bodal
ACTOR REY
Mr¡cho has jtrrado y prorrretido. Ar¡1or,
déjarne ahora descansar aquí.
Quiero dorrnir Lu:l Poco.
ACTRTZ REINA
Dtrerrne al..ora.

[El duerrne]
ACTzuZ REINA (cont.)
Que nr.rnca. nada se interponga entre nosotros
qtrieran Dios y los ángeles del cielo.
[Mutis Actt'tz Reina]
HAMLET
[A la Reina]
¿Y, señora, gué os parece la obra?
REINA
Esa rmrjer afirma dernasiado, pienso yo.
HAMLET
Ah, sí, pero ctrmplirá sLr prornesa.
REY
¿Sabes el argtrmento? ¿Contiene algo ofensivo?
HAMLET
¿Ofensivo? No, si todo es en brorna, de rnenüra., envenenan de
rnentira, rro, de ningr:na rna¡era, na.da ofensivo.
REY
¿Corno se lla.rna la obra.?
HAMLET
¡La Ratonera.! ¿Córno asÍ?Pues es u.n títr¡lo rnetafórico- Esta. obra
pn
está inspiracla e.r asesinato cornetido en Viena. El br:qrre se
llarna Gónzalo. Sr: esposa Bamtista.. Ya. veréis en ltn mornertto, es
un enredo infame peio, ¿qué irnporta-? Sr-r rnajestad y yo, que
tenernos las concieácias üápias, no r¡os dejarnos irnpresiona-r Por
estas cosas-

[Entra Luciano]
HAMLET (cont.)
Este es Lucia'no, sobrino del reY'
OFELIA 'Lrrt
E:<plicáis todo mejor qlre narra'dor'
HAMLET
y páá¡. o<plicar lo qrre pasa entre tu. arnante y tú, con ta'l rne
dejaras ver lo qr:e tracen'
OFELIA
Mr¡Y agudo, señor, sois rntrY agudo'
HAMLET
Te costaria r¡n buen gernido qr-ritarrne el filo'
OFELIA
¡Mejor Y Peor cadavezl
HAMLET
¡Igual qr-re en el rnatrirnoniol ¡Cornienza, asesino! Déjate de hacer
rrr..""aj y cornienza. ¡Va.rnost El cr:en¡o gra-na y ruge clarna-ndo
vengal:lza
ACTOR LT'CIANO
Negros designios, brazo ya' dispuesto
a. ejecutarlos, tósigo oPortuno,
sitio rernoto, favorable el tiernpo,
y nadie qrre 1o obsen¡e. ¡11ú, veneno,
confeccionado con horrendas hierba's,
con atroz Pronütud dale la mr:ertel
[Vierte el veneno en los oídos del Actor Rey]
HAMLBT
Shakespeare / Alegría FIAMLET "ACTO III. escena 2' página 66

Lo envenerra en su jardín, para qrredarse con su corona.. Se ilarna


Gonza-lo. Es trna. historia verÍdica., escrita en rrruy buen italiano. En
rrn rrrornento rnás veréis corno el a.sesino se queda con la. rnujer del
asesinado.
OFELIA
El rey se levanta.
HAMLET
Qué, ¿1o asustan fuegos fatu.os?
REINA
¿Qué os pasa, señor?
POLONIO
Suspendan la representa"ciónl
¡

REY
.lLrtzl lLtszl ¡Fuera.t
POLONIO
¡Lucest ¡Ltrcesl ¡Lucest
[Mutis todos rnerr.os Harnlet y Horacio]
HAMLET
ICanta]
Dejad qrre hrrya girniendo el cien¡o trerido
y el corzo ileso siga retoza¡:rdo:
cuandi uno vela, el otro está dorrnido,
y de este rnodo el rnundo va rnarchando.
Pues bien lo sabes tú, Darnón qrrerido,
y no te extrañará lo qtre discr:rro
este trono por todos rnaldecido
tiene por dueño a. ttn verdadero-- pavo reaL.
HORACIO
Podría.is haber cornpletado la rirna..
HAMLET
Ah, rrri buen Hora.cio. Apuesto mil libras a. la pala.bra de cste
fantasrna. ¿Lo nota.ste?
HORACIO
Mr¡y bien, señor.
HAMLET
¿En cuanto se habló del veneno?
HORACIO
SÍ, noté rrruy bien lo que le Pasó.
HAMLET
¡Aját Varnos, varnos, ¡rnúsicat Vengan, valrlos, ¡flamtast ¡Músical
¡Música!
ICanta.]
Si a nr¡estro rey la cornedia le disgr:sta'
¿por qr:é será? Pues porqa¡e no le gr:sta.
Si a nr¡estro rey la cornedia le disgrrsta.,
¿por qtré será? Pues porque no le gusta'.
Varnos, var¡l.os, ¡música!, ¡rnúsicat, rnúsical
¡

FIN DE LA PRTMERA PARTE1

'Esca d,ir¡isión en dos part,es, seccionando eI acEo en forma arbiEr.aria Pero


con plena justificación dramática dentro de]- conjrrntso de la Obra, fue lrecl. a
por eI Director para e]- montsaje de]. TNP e]- año 75-
Shakespeare / Alegría HAMLET . ACTO III. escena 2 página 68

SEGUNDA PARTE
TERCER ACTO (§ONTINIJACIÓN)
Escena 2 (Conünuación)
HAMLET
Si a nuestro rey la cornedia le disgr:sta
¿por qtré será? Pues porque no le grrsta.
Si a ntrestro re¡¡ la cornedia le disgrrsta,
¿por qr-ré será? Pues porque no le gusta.
Varnos, vanrlos, ¡rnúsical, ¡música-l; ¡rnúsica!
[Entran Roserrcra¡:tz y Gtrildenstern]
GIJILDENSTERN
Mi buen señor, perrnitidme una pa.la.bra cora vos.
FIAMLET
Señor, r¡n libro de tristoria entero, si grrstáis.
GUILDENSTERN
Señor, el rey...
HAMLET
Ah sí, ¿qr:é le pasa?
GUILDENSTERN
Está en sr-r trabitación, ErrJy descornpuesto.
HAMLET
¿Por el wino?
GUILDENSTERN
No, señor. Por la bilis.
HAMLET
Pues entonces rnejor será qr:e le pa.rticipes esto a- sL¡ médico. Porque
si yo ftrera a darle algún prrrgante qrrizás el rernedio le anrrnentaria
rnás la. bilis.
GUILDENSTERN
Señor, trata"d de hablar con coherer:cia, y no os vayáis del ter¡ra.
HAMLET
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO III. escena 2 r¡ágina 69

Me qrredo, entonces. Pronunciad-


GT.IILDENSTERN
La reina, vu.estra rr¡.adre, con gran aflicción de espíritrr me ha
rnandado por vos.
HAMLET
¡Pues bienvenido!
GLIILDENSTERN
No, señor, no hacen falta estas dernostraciones. Si os place darrne
Lrna. respr.resta. sensa,ta curnpliré el deseo de vurestra rnadre. Y si no,
pues con vuestro perdón daré por terminacla esta entrevista..
HAMLET
No ptredo, señor rnÍo.
ROSENCRANTZ
¿Qué, señor?
HAMLET
Da"ros rüaa respuesta sensata, señor: estoy loco, ¿veis? Pero señor,
os prorrreto que será \ruestra cr-ralqr:ier resptresta, serasa.ta. o no, qrle
yo pueda daros, o darle, como decÍs, a rni rnadre. Por lo tanto, se
aca.l¡ó. Varnos aI caso. Mi rnadre, decís...
ROSENCRANTZ
Pues bien, ella dice Io sigUiente: vuestro cornportanrriento la ha
llena.do de sorpresa y de asornbro.
HAMLET
Ah, ¡qué hijo tan rnaravilloso poder asornbrar a srl rnadre de tal
forrna.! Pero ¿qr:é viene despr:és de una adrniración ta.n a,bsoluta?
Recitadlo.
ROSENCRANTZ
Qtre desea hablar con vos en sll dormitorio, antes de qrre os recojáis.
HAMLBT
Obedeceré, aunqtre fuera diez veces rni rnadre. ¿Tenéis algo rnás qtre
negociar conrnigo?
ROSENCRANTZ
Señor, ¿alguna vez rtae trrvisteis cariño?
HAMLET
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO III. escena 2' páeina 7O

[referencia. a- sr:s diez dedos]


Y os lo sigo teniendo, os 1o juro por estos diez rmrgrientos la"drones.
ROSENCRANTZ
Mi buen señor, decidrne: ¿ct- ál es la causa de vuestra aflicción? Le
estáis cerrando la puerta. a vuestra propia libertad, aI no confrarle
vu.estra-s penas a Ltrr a.rnigo.
HAMLET
Señor, es que rni situación es delicada. No tengo futuro'
ROSENCRANTZ
¿Córno ptrede ser eso,'mi señor, si sois el treredero del trono de
Dinarna.rca, colrlo ya. lo ha procla.rnado el propio rey?
HAMLET
Atr sí, señor, pero rnientras crece el pasto, los... está Llra poco
gástado este refrán.

lCruLzan los Actores con sr-rs instrurnentos. Harnlet torna tlna" flauta]
HAMLET
¿Ves esta. flan:ta? ¿Puedes tocarla?

No, rni señor, rro ,,"t3sENcRANTz


HAMLBT
Te 1o ru.ego.
ROSENCRANTZ
Creedrne, señor, no puedo hacerlo.
HAMLET
Varnos, varrlos, es ta:: fácil corno rnentir. Pon ttrs dedos sobre estos
hr:eqtritos, dale aliento con la t¡oca y escuctra.rás rnuy elocr¡entes
rnelodía.s. ,Mira, esta,s son las llaves.
ROSENCRANTZ
¡Pero es qlle no puedo r:sarlas para tracer rnúsica, señort No tengo
la destreza.
HAMLET
¡Pues rniren en qrré cosa tan banal qr:isieran convertirrnel Qtrisieran
tocarrne corrro un instrumento; parecerÍa que conocen todas rnis
teclas y llaves; le arrancarían el corazín a rni secreto; rne ha.ría son¿rr
Shakesoeare / Alesría HAMLET ACTO II'I- escena 2 oágina 71

desde rni nota, rnás baja hasta el tope rnás alto de rni escala. Hay
rnucha y rnuy linda rnúsica escondida err este instrtrrnento rnio y
r¡stedes no pr:eden tocarla, pero ¡por los cla.vost ¿creen que soy rnás
fácil de tocar que esta flamta? Pues allnque nae cors.viertan en el
instrurrnento que se les antoje y aprendan córno funcionan todas rnis
lla.ves, ijarnás rne harán toca.r su infarne rnúsical

[Entra Polonio]
HAMLET (cont.)
Dios os bendiga, señor.
POLONIO
Señor, la reina querrÍa hablar con vos, ]f erf, forma inrnedia.ta..
HAMLET
¿Veis aqr:elIa nr¡be con forrna de carnello?
POLONIO
Cara-rnba, si, es cierto, es ca.si conxo r¡n carrrello.
HAMLET
Pienso qr-re es ttn zorrino.
POLONIO
SÍ, claro, tiene lorno de zorrino, efectivarnente.
HAMLET
O si no, corrro una ballena.
POLONIO
Muy parecido a Llna ballena,, sÍ.
HAMLET
Por 1o tá.nto iré donde mi rna.dre en rln morrento.
[Aparte]
Me siguen la corriente adonde sea.
[A Polonio]
Iré, de u.n rnornento a otro.
POLONIO
AsÍ le diré.
HAMLET
De un rnornento a otro se dice fáciknente. Dejadrne, arnigos.
Shakespeáre / Alegría HAMLET ACTO II'I: escena 2 páeina 72

[Muüs todos rnenos Harnlet]


HAMLET
Es Ia hora rrocturna de las brujas,
cuando cornienzan a bostezar los cernenterios
y el rnisrno infierno aspira y luego exhala-
infarnes plagas qrre invaden este rnr:ndo.
Atrora podrÍa- yo beber sangre tibia
y corneter a,ctos ta,n sangr-ientos
que el sol se estrerneciera al conternplarlos.
Silencio. A wer a. rni rnadre.
Coraútt, no te cotrompas;
no permitas qrre el alrna de Nerón,
el asesino de str rnadre,
penetre en este firrne pecho.
Debo ser cruel, tr)ero no rnolrstrtroso.
I- hablaré con palabras cotrro dagas
sin jarnás IJSa.r rni daga contra ella.
I-engrra y akna han de ser hipócritas en esto;
borno qrriera que eora pala.bra.s la fusügrre,
nllnca consienta. rni akna qtre la hiera.
IMutis]
Shakqspeare / Alegría HAMLET ACTO III- escena 3 página 73

Escena 3
[Entran Rey, Rosencranttz, y Guildenstern]
REY
No rne gusta su corrrporta-rniento, ni es segu.ro para rnÍ que stt locr:ra
siga desbordándose. Por 1o tanto, prepa.raos. Os da.ré
inrnediatarnente vLrestras instrucciones y él partirá con vosotros a
Inglaterra. l,as circunsta.ncias qrre atraviesa nr:estro trono pr:eden
no resistir Lrr:l peligro ta.n grande corno el qrre, hora a ttora., se
acrecienta con cada r:no de sr¡s insr¡ltantes disparates.
GUILDENSTERN
Nos prep€rrarerrtos. Es un deber sagrado proteger a aqr:ellos qlre
üven y se alirnentan por \ru.estra bondad.
ROSENCRANTZ
Y rnayor es e[ deber cr¡ando de la salud de un rey depende la
felicidad y eI bienestar de todo trn reino.
REY
Preparaos, os rL¡.ego, para este súbito viaje, qrre hay que ponerle
cadenas a este peligro que se despliega dernasiado librernente.
[Muüs Rosencrantz y Guildenstern. Entra Polonio]
POLONIO
Señor, está yendo al dorrnitorio de su rnadre. Me pondré detrás de
r:na cortina para escr:chan' 1o que sttceda. Segurarnente lo
interrogarán. Y como dljistcis, y fue algo rnrry bien dicho, y r¡auy
sabio fue decirlo, es necesario qrre algún otro oyente escr¡che desde
trn h:gar reservado 1o qtre el conf¡.ese- Las rnad.res son llevadas por
el cariño a. ser parciales: la reina podrÍa no corrtarrlos la verda.d.
Adiós, rni señor. Iré a veros antes de que os retiréis a dorrnir, para
participaros lo qrre kre averiguado.
REY
Gracias, querido señor.
[Mutis Polonio]
REY
Ah, pestilente pecado, su hedor llega ha.sta. el cielo;
üene sobre sí la rnaldición prirnera y rnás antigt.a,
el asesinato infarne de un herrna:ro.
Shakespeare / Alesría FIAMLET ACTO III. escena 3 página 74

No puedo rezar, por rnás que lo deseo.


Pero aunque esta rnano esturviera deforrnada
por una costra. de la sangre de rni herrnano,
¿no hay acaso en el cielo dr¡lce lluvia
sr:ficiente para lavarla hasta volverla
blanca corrro la. nieve?
Sí. Entonces rezaré. Mi falta será perdonada.
Ma.s ¿qtré forrna de oración ha de serrrirrne?
¿Perdonadrne rni atroz asesinato?
No pr:ede ser, ya qrre retengo aún
aqtrellos bienes por los qtre di Ia rntrerte:
rrri corona, rni poder y nai reina.
¿Pero acaso es posible algún perdón
cr¡a.ndo retengo los fnrtos de rni crirnen?
Aqtrí en la tierra la rnano crirninal
llena de oro, ptrede poraer de lado
a la jtrsticia y comprar con precio indigno
á los jr:eces, los testigos y la.s leyes.
Mas no es así en el cielo: a.11í no tray trarnpas
ni dobleces: nr¡estras falta.s corrrparecen
tal ctrales son; en el cielo no hay excrJ.sas.
lQr¡é hacerl ¡Qué hacerl Arrepentirse.
lQué no podrá lograr arrepentirset
Pero, ¿qué ptrede lograr cr¡ando r¡no peca
y no ptrede arrepentirse? lAtroz estado!
¡Conciencia negra como la. rnisrna rnuertet
¡Alrna entrarnpada que h-rcha por übrarse
y se trtrnde rnásl
¡Angeles del cielo, dadrne a5rudal
¡Intentarlo, intentarlot
Doblarse, doblarse rodilla.s conturnaces...
y qLre este férreo corazón se a.blande
corrro las carnes de r:n recién nacido.
Quizás traya esperalx.za.
[Se arrodilla.. Entra Harnlet]
HAMLET
Ahora podría hacerlo fáciknente, ahora,,
atrora qr:e está rezando. SÍ. Lo trago.
¿Y se va al cielo y qr:edo yo vengado?
Esto se juzgaria corno sigr.re:
trn villano rnata a rni padre y yo,
sr¡ único trijo,
¡en pago rnando aI villano al santo cielol
¡Va.rnos, eso serÍa recorrrpensa y no venganzat
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO III. escena 3 página 75

El rnató a rni padre burda"rnente, ahÍto de placeres,


con todos st¡s pecados a la vista, vigorosos.
¿Y córno esta-rá su crlenta. con eI cielo?
¿Pues qr:ien lo sabe sino eI rnisrno cielo?
Pero adivino qrre la sentencia de rni padre
no ha sido rnr:y liviana.
Y entonces, ¿a.caso estoy vengado
rnatando a este asesino ctrando está purgando sr¡ akna,
cr¡ando está listo y dispuesto para salvarse?
No.
Grrárdate, espada, que encontrarás Lrna ocasión horrenda.
Cr¡ando 1o encuentre dr¡rrniendo borracheras, atrllando de rabia,
o en el pla.cer incestr¡oso de sll car¡:'a.,
o apostando, o blasfernando,
o cornetierado, en fin, Lln acto indigno
que no terrga el más leve sabor de salvación,
entonces... entonces tropezarlo
pgra qrre sl¡s ta.lones pateen hacia el cielo
y su alrna se vuelva negra. y pérfida
corno el infrerno al grre via.ja. sin rernedio.
Mi rnadre rn.e espera.
Esto sólo te prolonga la a.gonía.
REY
[Levantándose]
Mis palabras wuelan,
rnis pensarnieratos se arrastra¡:l por la tierra.
Palabras sin pensarnientos jamás llegan al cielo.
IMutis]
ShakesoeaÉ / Aleería HAMLET ACTO III. escena 4 pásina 76

Escena 4
[Entran Reina y Polonio]
POLONIO
Vendrá rnuy pronto. Habréis de int"erpelarlo. Decidle que srrs
brorna.s ya son dernasiado atrevidas para soportarlas y que vos
trabéis detenido y desviado de él rnuctros regaños del rey. Yo rne
esconderé aquí en silencio. Sed frrrne, por favor,
HAMLET
[Desde fi:era.J
¡Madre, rnadre, rna.drel
REINA

[Polonio se esconde detrás de la. cortina. Entra Harnlet] .:


HAMLET
Btleno, rnadre, ¿que strcede?
REINA
I{arnlet, tú has ofendido rnr¡cho a. tu padre.
HAMLET
Madre, t͡ has ofendido rntrcho a rni padre.
REINA
Varnos, vÉullos, contestas tontería.s.
HAMLET
Voy, voy, pregunta.s hipocresías.
REINA
Harnlet, ¿qué te pasa?
HAMLET
SÍ, ¿qrré pasa ahora?
REINA
¿Te olwidas de qr:ién soy?
HAMLET
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO JIJ. escena 4 oáeina 77

No, por Dios, de ninguna rnanera.: eres la reina, eres 1a arnada


esposa del herrnano de tu esposo, y tarnbién --y ojalá qrre no 1o
fueras-- eres nai rnadre.
REINA
No, te pondré en rrranos de qrrienes pr:.eden hablarte.
HAMLET
Ven, ven y siéntate. No has de rnoverte. No te irás hasta que no te
hayas rnira.do en Lln espejo donde vea.s 1o qr:e hay dentro de ti.
REINA
¡Qr¡é vas a. hacert ¿Vas a. rnatarrne? ¡Socorro, socorro' ayuda!
POLONIO
[Detrás]
¡Socorro, a5rudal
HAMLET
[Sa.cando su espada.]
CQué hay? ¿Un rata.? ¡Muerat ¡Mr:eral
[Hace un pase a través de Ia cortina y rnata a Polonio]
POLONIO
[Detrás de la cortina]
Me ha dado rnuerte.
REINA
Dios rnÍo, igué has hectro!
HAMLET
No, no lo sé... ¿Es el rey?
RETNA
Ay ¡qrre crirnen tan absurdo y tan sangrientot
HAMLET
Crirnen sa.ngriento, sÍ... casi ta.n sangriento
corno rna.tar a Lrn rey y cas¿rrse co¡a sL¡ esposa.
REINA
¿Matar a trn rey?
HAMLET
Shakespeaie / Aleería HAMLET ACTO III. escena 4 página 78

SÍ, señora, es lo qt. e dije.


[Corre la cortina y ve a Pol.onio nauerLo]
Pobre tonto entrorneüdo, rniserable y tern€rario... adiós, te tomé por
ttr señor. Ésta es tu suerte. ¿No ves que es lfn peligro ser
dernasiado servicial?
[A la reina.]
Deja ya de retorcerte las rnanos. Ca.lrna, siénta.te, y déjarne
retorcerte el corazón, qrJ.e es lo qrre haré, si tus hábitos rnalditos no
1o han endr¡recido ya del todo.
REINA
¿QuC he hectro yo para que así rne ultrajes?
HAMLET
tJn acto qrre hace de los votos nupciales algo tan falso como las
bla.sfernias de los tal¡úres. IJn acto qtre hace del rnatrirnonio r¡na
sirnple rapsodia de palabras. La faz del cielo se enciende y este
rnundo tan sólido se qrriebra y se enferrna de solo pensarlo, corno si
ya previera el jr.ricio frnal.
REINA ]

¡Ctrál es, Dios rraÍo, ese crirnen ta:: horriblel


HAMLET
[torna el retrato de su cr¡ello y el de la reina]
Mira este retrato y rnira éste.
Mira que gracia reside en esta frente.
Son forrnas tan dignas qLre pareceria
que todos los dioses hubieran participado en crearlo
p¿¡.ra da¡le al rnundo rf,n ser htlrnano qüe sirviera de rnodelo.
Éste era tu esposo.
Mipa ahora a éste, que corno trn fruto apesta.do
corronape a srJ. ga.llardo Lrerrnano.
¿No tienes ojos?
¿Pudiste dejar esta. bella cúspide
p+ra cebarte en este pantano? ¿No tienes ojos?
¿Ct":.á,l dernonio te ha podido engañar tanto
que te pongas a, jr-rgar gallina ciega?
Los ojos ciegos sin sentimiento, los sentirnientos sin ojos,
los oÍdos sin rna.¡:os ni ojos,
el clfa.to pr-rro y sirnple, no,
ni siqrriera Llna. parte enferrna. de sólo uno de los sentidos podrÍa
ha.berse eqr:ivoca.do tanto.
Vergüenz.a., vergiier:za, ¿dónde está tu rubor?
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO III- escena 4 páeina 79

REINA
Harnlet, no digas rnás. Me ¡ruelves los ojos sobre rni pr:opia alrna y
veo atlÍ tan negras y profi-rndas rnanchas que nunca podrán
borrarse.
HAMLET
iNo, pero vivir en el pestilente sr:dor de yLrn lect¡o infectol
¡Cocinándose en la corrrpción, enrnelándose haciendo €Lrnores
sobre esa cloaca irnPura....
.
REINA
No diga.s rnás. Esas palabras rne hieren cotrao dagas. ¡No rnás,
qtrerido Harnlett
HAMLET
Un asesirro y trn villano, t¡n esclavo qlre no es la. vigésima parte de la
décirna parte de tu señor, r¡n fantoche de rey, Lln ladrón del reino y
del gobienao qLre ha robado la preciosa corona. para rnetérsela en su
abornina.ble bolsillo...
REINA
Ya basta...

[Entra el Fantasrna.; la Reina no lo ve]


HAMLBT
Un rey de andrajos y rerrriendos...
¡Salvadrne y protegedrne corr vuestras alas, a.rcángeles del cielo!
¿Qtré desea ta¡ vene:ada sornbra? :

REINA
Dios rnio, está loco.
HAMLET
Vienes a. regañar a tu hijo negligente. ¡He dejado pasar el tiernpo y la
pasiónl Dejo alejarse el cr.rrnplirniento de trr terrible orden. ¿No es
asi? ¡Dirnelol
FANTASMA
No 1o olwides. Esta visita no es rnás qrre para anrivar tu propósito, ya
casi errrbotado.
REINA
¿Por qué rniras a-I vacÍo y conversas con el aire? Tü alrna se asorrra.
saJvaje por_ tus ojos. Tierno hijo, calrna y refresca el fqego de tu
locura.. ¿Adónde rniras?
HAMLET
¡A é1, a- él! ¡Mira, rnira qué pálido está, córno nos observa.! Su forrna
y sus rnotivos; juntos, predicándoles a las rocas, podrÍan hacerl¿s
capaces de... rto, no rne rnires, no r¡le rnires a.sí, qne con ese gesto
lastirnoso puedes transforrnar rnis propósitos rnás crtreles, y lo qr:e
tengo qtre hacer se esfllrnania, y correrían sola.rnente lágrirna,i, en vez
de sangre.
REINA
¿A qtrién le dices eso?
HAMLET
¿No ves nada ahi?
REINA
Nada rnás qrre lo qtre está a la wista.
HAMLET
¿No oÍste nada?
REINA
Só1o m¡estras voces.

HAMLET
Pero rnira, rnira atrí, ¡rnira córno sg aleja.t Mi padre, vestido corr¡o
cltando vivía. Mira, rnira por donde va. ¡Mira córno sale por ese
pórtico!
[Mtrtis Fantasrna]
REINA
Esto es sólo un invento de tu rnente, la locura es rnuy hábil pÉrra
crear estas alt¡cina,ciones.
HAMLET
¿Locr¡ra.? Mi ptrlso es tan regtrlar conao el trryo. No es locr¡ra 1o que
tre dictro. Ponrne a. prueba, y wolveré a decir lo dictro exa.ctarnente, y
eso es algo qrre no puede hacer trn loco. Madre, por Dios, no le
ponga-s ese bálsarno a tu alnaa, ni pienses ql¡e es rni locura y no tlr
pecado [o qrre ha.bla. confiésate ante el cielo, arrepiénteté de lo
pasado, evita lo qr-re ha de venir, y no [e espa.rzas estiércol a. la cizaña
para altrnentar st¡ vigor. Y perdónarne ésta. rni virtr¡d, porque en
Lstos tiernpos corn:.ptos la virtud rnisma ha de pedirle perdón al
vicio. SÍ, ña de ha.cerle reverencias y rogarle perrniso pa'ra- hacerle
un bien.
REINA
Ay, Harnlet, rne has partido en dos el corazÓn-
HAMLET
Entonces arroja lejos de ti la Peor parte,
y vive rnás pura corr la otra rnita'd-
Buena.s noches.
Pero rao vayas a la carna de rni tío.
Sirnula. trr virtrrd, si rro la tienes.
Refréna.te esta noclae, y con eso le darás
cierta fa.cilidad a la próxirna abstinencia.
Y la siguiente será aún rnás fácil.
Ntreva.rnente, t>uenas noches.
Y cr:ando desees recibir Ia bendición,
h.abré de pedirte yo que rne bendigas.
Yo rne a.rrepiento Por este señor;
pero el cielo lo ha qr.rerido asÍ:
castiga-rrne a rní corr é1, y a é1 conrnigo,
y qr¡e yo tenga qlre ser azote de los dos.
Voy a esconderlo y trabré de responder
poi ta rnr¡erte qr:e 1e di. Nr-¡.evarnente, buenas noctres'
Debo ser cruel sólo por ser bondadoso.
De esa forrna lo peor terrnina,
y cornienz.alo rnal'a solarnente. i

Una palabra rrtás, btrena señora..


REINA
CQr¡é debo hacer?
HAMLET
No ha.rás, de ningrrna forrna, esto qr:e te digo: dejar qtre el corrrpto
rey te tiente otra vez a srJ. carrra, te pellizqrre la.s rnejillas, te llarne su
raloncito ni perrnitirle, por un par de rnalolientes besos, o sobándote
y arna.sándo[e el cuello con sars rnalditos dedos, qr:e te haga contarle
todo este asqnto y revelarle qrre rro estoy loco, salvo grre así lo qrriero
aparentar.
REINA
Pero...
Shakeipeare / Alesría - HAMLEII ACTO III. escena 4 páeina 82

HAMLET
¡Ha-lo, sí, tra-lot ¡Sube a 1o a.lto de la torre y abre la puerta a la jatrla
de los pájaros, dejándolos wolar, para después dar r¡n traspiés y
rorrper tu propio cuello en la. caídal
REINA
Ten por segllro, si la.s palabra-s son de aliento, y el aliento es vida, no
tengo vida qr.re pueda sr:spirar lo qrre tÍr rne has confiado.
HAMLET
Debo irme a Ingla.terra; ¿lo sabÍas?
REINA
Dios rnío, sí, lo había olvidado. Así 1o han decidido.
HAMLET
Hay cartas que van selladas. Y los dos cornpañeros rníos, en qrrienes
confio tanto corr:'o en dos wÍboras veraenosa.s, llevan el encargo.
Deben arrebatarrne de aqr.rí y enrolarrne en las filas de los tontos.
Dejarlos hacer. Porqr:e es nrrry divertido ver al artillero reventar con
su propia bor¡rba., y hs cosas habrán de ir mrry rna.l si yo no puedo
ha.cer un túnel hasta una yarda por debqio de strs rninas y hacerlos
volar hasta. la. luna. Ah, sí, es muy agradable ver a. Lrna astucia
ltrctra.r contra otra a.strrcia.
[respecto a Polonio]
Este hornbre rne hará salir disparando. Arrastraré sr¡s htresos hasta
la otra habita.ción. Madre, t>r.renas noctres. Por cierto qr:e este
consejero está a.hora rnuy qtrieto, mr-ry gra.ve y mr¡y callado, cuando
,, €n vida fue un grantrja locr-la- e irnpertinente. Varnos, señor, hay
qrre daros buen frn. Btrenas noches, rnadre.

[Mr.tis la Reina, luego rnutis Harnlet arrastrando a Polonio]

Fin del Tercer Acto


CUARTO ACTO
Escena 1

[Entran el Rey y Ia Reina, con Rosencrantz y Guildenstern]


REY
Hay algo en estos suspiros. E><plícarne este llanto. Debo entenderlo.
¿Dónde está tr: trijo?
REINA
Dejadnos solos Lln nxolllento'
[Mutis Rosencrantz y Guildenstern]
REINA (cont.)
Ah, rni señor, 1o que he visto esta' noche.
REY
iQué pa.sa, Gertrudis? ¿Córno es!á Harnlet?
REINA
-fr¡erte.corno
Enloqr-recido el rnar y el viento ctrando disptrtan quién será
rnás En. su locura, sintiendo rnoverse algo detrás del
cortina.do, sa,ca su espada, grita' "¡una r:ata, ttna ratat" y, sin siquiera
verlo, le da la rnuerte al br¡en viejo.
REY
oh, crirnen fqnesto. Igual hr¡biera trecho conmigo,p¿rra si yo hr:biera
estado allÍ. Str libertad está plagada de artaerT.aas ti rnisrna,
para todos. ¿córno ha.bré de responder por esta rnt¡erte?
para rní,-rñe
ieo.q.r" han de ctrlpar a rnit Yo debería haberla previsto y
ieprirnido, aisla.do y controla.do a ese joven dernente. Pero tan
gf-"tta" fue rni atnór por é1 qlre no rne permitió entender cr¡án
áecesario era a.ctr:ar cón decisión y... colrro el hombre aqrrejado de
r:na enferrned.a.d rnortal, rne la. he ocr:lta.do a mí rnisrno y la he
oculta.d.o de los demás perrnitiéndole corToerrne la.s entrañas'
¿Dónde está Ha.rnlet ahora?
REINA
Fue a. disponer del ctrerpo de su vÍctirna, el cadáver sobre el cr:al SII
loctrra. sJ vuelve noble como el oro. Harnlet llora por 1o qtre ha
hecho.
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO IV- escena I oágina 84

REY
Gertmdis, desengáñate. No habrá salido el sol sobre los rnontes que
ya 1o habré despachado lejos de aqrrí, y tendré luego qrre explica.r y
disculpar su trecho infarrre.
ILlarna,ndo]
¡Eh, Guildensternl
[Entran Rosencra::tz y Guildenstern]
REY (cont.)
Arnigos arnt>os, br¡scad a5ruda. Harnlet, enloqrrecido, tra da.do
rrru.erte a Polonio y lo ha. sacado del dorrnitorio de sr.r madre. Id a
br¡scarlo y preguntadle dónde está el cadáver y tra.edlo a la capilla,
os 1o ruego, pero pronto, ¡prontot
[Mutis Rosencrantz y Guildenstern]
t;"*t¿
va.rnos, Gert.:di., thr§:-: rnás sabios consejeros y les haré
saber lo qtre ha octrrrido y lo qr.re pienso hacer. De esa rnanera. la
rnaledicencia., que apr.rnta. hacia rní, trabrá de er.rar el blanco y
perderse en el aire. Verl, ven, várnonos. Mi akna está llena de
angtrstia y desorden.
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO IV. escena 2 ., páeina ,85

Escena 2
[Entra Harnlet]
HAMLET
¡Bien guardadol
ROSENCRANTZ Y GUILDENSTERN
[Desde fuera]
¡Harnlett ¡Señor Harnletl
HAMLET
éQpé ¡1ido es eso? ¿Qr¡ién llarna a. Harnlet? Ah, a,quÍ vienen.
[Entran Rosencrantz, Guildenstern y otros]
ROSENCRANTZ
éQué habéis hecho, señor, con el ca'dáver?
HAMLET
Lo tre rnezclado con el polvo al que pertenece-
ROSENCRANTZ
Decidnos dónde está, para llevarlo a la capilla.
HAMLET
Ni lo sr.reñen.
ROSENCRAI\'TZ
Sr-reñen qr:é.

HAMLET
eue yo puredo guardar st¡s secretos y no los rníos propios. Adernás,
curnáo trr=a esponja le hace uraa preglJnta, ¿qr-ré podrÍa responderle
el hijo de rln rey?
ROSENCRANTZ
¿Me tornáis por r¡na es¡>onja, señor?
HAMLET
Si, señor, Ltna esponja qr:e ctn-rpa y se hincha. con los favores, las
recompensas y la atrtoridad del rey. Pero tales servidores le hacen
su rnejor servicio al rey sólo aI frnal: cuando el rey necesita. lo qtre
han vénido chr:panedo, pues sirnplernente los exprime, y gstedes
quedan secos nr¡evarnerrte.
Shakespeare / Aleería HAMLET ACT:O IV. escena 2 páeina 86

ROSENCRANTZ
No os entiendo, señor.
HAMLET
Me alegro. La.s agudeza-s duerrnen en oídos tontos.
ROSENCRANTZ
Señor, debéis decirnos dónde está el ca.dáüer y h:.ego ir con nosotros
donde el rey.
HAMLET
El cadáver está con el rey, pero el re5r no está con el cadáver. El rey
es l¡¡aa cosa-..
GUILDENSTERN
¿Una cosa., señor?
HAMLET
LJna cosa de nada. Llévenrne donde está. ¡A la una-, a las dos y a las
trest
[Mutis Harnlet corriendo y Todos tra.s é1]
r

Shakespeare / Alesría HAMLET ACTO IV. escena 3 pár-'in; 87

Escena Tres
[Entran el Rey y otros dos o tres cortesanos]
REY
¡1e rnandado a buscarlo y a traer el cadáver. ¡Qué peligroso resulta
qlre ese hornbre ande strelto! Sin ernbargo no puedo castigelrlo
severarnente: Hamlet es rnr.ry qr-rerido por el fanático pr:eblo. El
pqeblo rao jntzga cora el razonan¡tiento sino cola la ernoción, y
condenará rni sentencia. y no sr¡ crirnen. Por eso, para qrre todo siga
tranqrrilo, est+ repéntina partida de Harnlet debe parecer algo
la.rgarnente rneditado y decidido con rnr-rcha anticipación. Los rnales
d.esesperados sólo se alivian con desesperados rernedios.

[Entran Rosencrantz y Gtrildenstern]


REY (cont.)
¿Qué pasa? éQtlé ntreva.s?
ROSENCRANTZ
No podernos sa.carle adónde ha escondido el cadáver, señor.
REY
¡Pero dónde está Harnlett
R.OSENCRANTZ
Afuera, señor. Bajo cr-rstodia. Esperando entrar.
REY
Qtre entre.
ROSENCRANTZ
¡Eht ¡Traigan al prínciPel
[Entra Flarnlet, bajo custodia]
REY
Dirne, Harnlet. ¿Dónde está Polonio?
I{AMLET
En una cena..
REY
¿una cena? ¿Dónde?
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO IV. escena 3 ' páeina 88

HAMLET
No donde corne, sino donde es cornido. IJn cierto contingente de
gusanos politiqueros eslá rneüéndole eI diente. El gusa.no es el
único ernperador de la cornida.. Engordarnos anirnaLes para
engordarrros, y nos engordarnos para engordar gusanos. El rey
gordo y el pordiosero flaco sora apenas dos rnanjares disüntos... dos
platos de la rnisrna rrresa. Ese es el frn.
REY
¡Vaya., vayat
HAMLET
Un pordiosero pesca. con r¡n cebo; eI sebo es 1¡rr gr-rsa¡io que se ha
cornido a L¡¡a rey; luego, el pordiosero se co¡rre el pescado qu.e se
había cornido a ese gLrsano.
REY
éQr¡é quieres decir con eso?
HAMLET
Solarnente qtriero dernostrar qrre todo un rey prrede transita.r por los
intestinos d.e un pordiosero.
REY
¿Dónd.e está Polonio?
HAMLET
En el cielo. Manda buscarlo allá. Pero si tt¡ rnensajero no lo
encuentra, búscalo tú rnisrno en el otro sitio. Pero en serio, si no 1o
encuentras dentro de este rnes... podrás olisquearlo aI strbir las
escalera.s de la galería--
REY
[A sr-rs servidores]
Id a buscarlo allá.
HAMLET :

No hay aprlro, no se rnoverá hasta qrre lleguen.

[Muüs senzidores]
REY
Harnlet, este acto rne obliga a despedirte de inrnediato. Por trr propia
segr-rrida.d, qtre yo estirno tanto corno larnento profundarnente 1o qrre
r

has hecho. Prepérrate, erttonces. El barco está listo y el vientoqlre


es
favorable, trls acornpa.ñantes espera.n, y todo está pronto Para
partas a. Inglaterra.
HAMLET
¿A Inglaterra?
REY
SÍ, Ha-rnlet.
HAMLET
Bien, está.
REY
Bien y nauy bien, si supieras rnis propósitos.
HAMLET
No, pero corrozco a un ángel qrre los obsen¡a de cerca. Pues bien, ¡a
Inglaterra.l Adiós, qrrerida. madre.
REY
SoY tu querido Padre, Fla:nlet'
HAMLET
No señor, rni rnadre; Pa'dre Y rnadre son rnarido y rnujer, rnarido Y
mr:jer son Lrna rnisrna- carrre, por 1o tanto, rni rnadre. ¡Varnos,
vatlaos, a, Inglaterra!

[Muüs Harnlet bajo cr-lstodia]


REY
Siganlo de cerca. Pónganlo pronto a bordo. No dernoren- Quiero
qrre parta. esta r¡isrna noche. Todo lo qr:e concierne a este viqje está
listo. La.s instrucciones selladas. ¡váyanse prontot
[Mr:tis todos menos el ReY]
REY
Rey de Inglaterra: si en algo rne estirnas --y has de estirnarrne
múcho, qü. si no... la. espada da.nesa trabrá de recordarte las
cicatrices que lleva.s de mi conqtrista... tLr Iao podrás ver_ con
indiferencia rni deseo. Y es rni deseo qrte cr¡rnplas lo qrre orijo en
esas cartas qr:e te errvÍo: la inrnediata' e insta¡tánea rnuerte de
Harnlet. ilJazlo, rey de Inglaterral porqrre él es trna frebre qIJ'e recofTe
enftrrecidá todas rnis venas, y tú ptredes y debes ctlrarrne de este
Shakespreare / aleería HAMI-ET ACTO IV. escena 3 página 90

rna.l. Hasta'qlue yo no sepa gue está rnu.erto, y sea. cr¡al fi,rere rni
forttrna, no podré corrlenzar a ser feliz.
Escena.4

[Entran Fortirnbra.s y sl¡ ejército]


FORTIMBRAS
Capitán: saluda de rni parte aI rey de Dinarnarca. Dile qr:e sólo con
su perrniso Fortirnbras podrá tracer Ia prornetida marcha a- través de
su territorio.
CAPITAN
AsÍ lo traré, señor.
F'ORTIMBRAS
Vayan pronto.
[Mtrtis todos sigfriendo sLl carnino, Irlenos el capitán. Entran Hamlet,
Rosencrantz, Gtrildenstern y otros]
HAMLET
Eluen hombre, ¿de qrrién sorr estas ftrerzas?
CAPTTAN
De Noruega, señor.

Qué ca-rnpaña han ernprendido, por favor-..


. CAPITAN
Avanzan sobre Polonia.
HAMLET
¿Quién las corna.nda?
CAPITAN
Fortirnbras, el sobrino del viejo Rey de Norrrega-.
HAMLET
¿Van sobre la capital de Polonia o sobre algún lqgar fronterizo?
CAPITAN
A decir verdad, y sin exagerar, Señor, rnarcharnos a conqrristar un
pedacito de terrerro. Y no tendrernos rnás reco111perasa que el
áerecho de proclarnar que ha. sido conqrristado. Yo ni siqrriera lo
cultiva.ría, qüe rro Ine aarian cinco ducados, ni cinco, de renta al
Shakespeáre / Alegría HAMLET ACTO IV. escena 4 página 92

año. Ni tarnpoco sacarÍan rnás aJ noruego ni a-l polaco si d.e hecho 1o


pusieran a la venta en 1tr:t rerna_te.
HAMLET
Elueno, entonces los polacos no 1o defenderán.
CAP,ITAN
Por supr:esto qrre sí, ya lo üenen fortificado
HAMLET
Pues entonces... dos rnil alrrla.s y veinte rnil dr¡cados no bastarán
p€rra. resolver qrrién se qtreda con esa bagatela. O§ doy la.s gracias.

CAPITAN
Adiós, señor.
[Muüs Capitán]
ROSENCRANTZ
¿Queréis ya rnarchar, señor?
HAMLET
Yo os a.lcanzo. Adelantaos L¡n poco.
[Muüs todos rrlenos Hamlet]
HAMLET (cont.)
Córno cada cosa. qr.re rne enctrentro
se confabula contra rní acica.teándome a tornar
rni torpe verrq¿ar::za.'

¿Qtré es un hornbre,
si el único interés de sr¡ vida
es corrrer y dorrnir?
LIn a.nirnal, y nada rnás.
Cierta.rnente aqtrél que nos creó
dotándonos de inteligencia tan grande
qtre abarca el pa-sado y el ftrturo,
no nos dio esa capacidad diwina. de razonar
para qtre la dejá,rarnos enrnohecerse
por fa.lta de trso.
Pero yo, por este rni tÍrnido escrúpulo
de pensar y pe¡asar y repensar
hasta. la últirna consect¡encia de mis actos
con irnposible rninr¡ciosidad
--estos raciocinios.rníos qtle so¡f, en realidad
Lrna parte de prtrdencia y tres de cobardia--
por ello es que yo no sé por qrré
todavía estoy vivo;
vivo y persistiendo en decir
esto Lray qr:e hacerlo
pero sin tracerlo,
a pers¿¡.r de qr-re tengo rnotivo,
y voltrntad,
y frrerza,
y rned.ios para hacerlo.
Ejernplos tala gra¡ades y sólidos
colr:'o la propia. tierra
rne salen aI pa.so para irnptrlsarrne a actuar.
Vean a. este ejército y este prÍncipe valiente
qtre les hacen rnuecas de br-rrla
a las consecrtencias irnprevisibles de srt ern.presa,
y arriesgan todo, str wida, sus hornbres, srl fortuna,
¡por una sirnple cáscara de hurevo!
¿Qr¡é papel hago yo, entonces,
qtre tengo r:n padre asesinado
y u.na. rnadre rnancillada
y dejo dorrnir estos acicates a rni razórt y a rni sangre?
¿Y rnientras tal:.to, para rni vergüenza.,
veo a. este prÍncipe lanzar a veinte rnil solda.dos
a rJ.rra. rnr¡erte inrninente
por r¡na sirnple fantasía, trn artificio del honor?
Se rnatarán por un territorio
inca¡ia'- de albergarlos durante la luctra
y qL!,3 no será suñciente pa.ra enterrar a sLls rntlertos..r
¡Ah, qrre desde este rnornento en adelante,
rnis pensarnientos sea¡x sangrientos,
o ¡:r.o valgan nada!
shakespeare / Alegría HAMLET ACTo IV. escena 5 pásina g¿

Escena 5
[Entran la Reina, Horacio y un Caballero]
REINA
¡No he de trablar con ella!
CABALLERO
Está rnlry turbada, en realidad enloquecida,
hace falta tenerle cornpasión.
REINA
¿Qué desea.?
CABALLERO
Flabla rnuctro de st¡ pa.dre, dice qtre esct¡cha que hay rna-lda.des
en el rntrndo y rnlrrrnrra. y se azota- el pecho y se enfi.¡rece con
las briznas de trierba. y habla cosas qtre tienen rnedio sentido;
quienes escuchan están rnezclando slls palabras ya fiaezcladas
para darles sus propios significados.
HORACIO
Seria btreno trablarle porque ella. podrÍa sernbrar conjeturas
peligrosas er¡ rnentes rnalwadas.
REINA
Que entre, entonces.
,;i
[Muüs Caballero]
REINA (cont.)
(aparte)
A rni akna errferma, fiel a. sr-rs pecados,
cada rnornento le anuncia Llna desgra.cia:
tan lÍquida es la culpa qtre rebasa
el ánfora de wicios soterrados.
Entra Ofelia, loca.
OFELIA
¿Dónde está la bella Reina de Dinarna.rca?
REINA
¿Qtré tienes, qr-rerida Ofelia.?
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO IV. escena 5 páeina ss

OFELIA
ICanta]
¿Córno te conocería
dueño de rni corazórt?
Por el sombrero de conchas
las sandalias y el bordón...
REINA
Dios rnío, dulce niña, ¿qué significa esa canción?
OFELIA
éQué dices? No, te 1o ruego, ñjate:
Icanta]
Ya rntrrió y se fue, rni doña,
ya rntrrió y se fi-re...
A sr¡ cabezr',la. yerba tan verde
y a sr¡s piés una piedra tan fuerte-
(habla)
¡4iát
REINA
Pero no, Ofelia...
OFELIA
Por favor f-rjate:
(canta)
Sr: rnortaja fue blanca corno nieve
1t
Entra eI Rey.
REINA
Dios rnÍo, rnirad esto, señor.
OFELIA
llenecita de rnr,ry dr:lces flores...
pero nadie lloró, pero nadie 11oró
con verdaderos a-nlores.
REY
¿Córno estás, bella niña.?
OFELIA
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO IV. escena 5 página ge

¡Pues que Dios te adore! Dicen que la lechr:za fue hija de un


panadero. Señor, sat)errros 1o que sorlos pero no sabes en qr:é
nos convertirernos. ¡Dios se siente a vtrestra rnesa.t
REY
Está pensando en sn padre.
OFELIA
Os ruego, ni rnedia pa,labra de esto. Pero ctrando te pregr:nten 1o
que pasa, diles lo sigr-riente:
[Canta.]
Ya llegó la. ñesta
de San Valentín;
rnuy de rnadrugada
ya estoy por aqtrí.
Jtrnto a tr¡ verrtana
soy virgen a:rsiosa
de ser convertida
en tu nlreva. esposa.
Entonces é1 se levantó
Jr rnuy de prisa se vistió,
y la pr:erta. pronto abrió
' y a sr: dorrnitorio la virgen entró...
¡Que ya no era virgen cr.rando al fin saliót"
REY
¡Bella Ofelia....t
¡ OFELIA T

Sí, por cierto, escr¡cha,. No, sin falta.r al Cielo, ya voy a terrninar,
¡escuchal
ICanta]
¡Por Dios y por los santos de los cielos!
lQué dolor, qué desdicha y qué vergüenza.t
I-os gal.anes tran de hacértelo
sin casi proponértelo
con sólo qr:e les brindes
ocasión, y que te rindas.
¡Por los clavos,
que la ctrlpa es de strs clavost
Ihab1a,]
Y ella le dice:
Icanta.]
Bienarnado, a:etes de revolcarrne
tÍr me trabia.s prometido desposarlne.
I
!

--¡
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO IV. escena 5 páeina gz
I

Ihabla] I

Y é1, escrtchen, le contesta:


!
Icanta]
Por cierto, 1o asegr-rro .l

por el sol yo te lo jr:ro,


que contigo trubiera estado !

ahora rnisrno ya- casado I

si conrnigo no te tu¡bieras acostado. (

REY I

¿Desde cr¡ándo está asÍ?


I

OFELIA I
¡Ojafá qr:e todo salga bien! Debernos tener pa.ciencia, pero no puedo
contenerrne y lloro pensando en 1o qrre }:an puesto ba.jo tarrta tierra (

frÍa. Mi herrnano habrá de enterarse. Les agraderco sr-¡ buen


consejo. Que venga rni coche. Br-renas noches, señoritas, buenas
I

noches, caballeros, bt¡enas noches señor.itas, btlenas noches, 1

buena.s noches. I

[Mutis Ofelia] ,l

1
REY
Sígr.rela de cerca., y-cr:ídala rnr:cho, te 1o lrrego' I

[Mr:tis Horacio y el Caballero]


I

REY (cont.)
Ay, es ponzoña, de la proftrnda pena: procede rje la rnuerte de su (

pa-dre. Y ahora, Gertrud, obserr¡a córno... I

Ay Gertrrd, Gertrld, crrando las penas llega.n, no vienen una por


rlna., cosao exploradores, sino en grandes ejércitos: prirnero, sll I

padre irrtlerto. Ltrego, la partida. de tu hijo, siendo él r¡risrno el rnr-ry


violento responsable de slr propio jr:sticiero exilio. Y el pueblo
I

excita.do y conñrndido, cora pensamientos tr:rbios y rnalignos acerca. I

de la. r¡auerte del buen Polonio --t¡e sido insensato aI entelrarlo con
apuro y en secreto. Ahora la pobre Ofelia enloqrrece y por úlümo, y
I

tan terrible corno todo lo a:rterior, sr¡ herrnano Laertes ha vuelto I

secretarnente de Francia y atrora se alirnenta de sr-r propio dolor y i

vive dentro de trna nr¡be. No fa.ltan qr:ienes le infecta.n los oídos con
pestilentes versiones sobre la rnr¡erte de su padre. Y é1, sin conocer I

Ia verdad, no dudará en acr¡sa.rrne de ese crirnen a rní. Ah, querida


Gertrud, esto es como un tiro de rnetralla., que rrle da rnr¡chas
rnr¡ertes al rnisrno tiempo.
Shakespeare / Alegría -HAMLET ACTO-IV. escena 5 oáeina ge

[Ruido dentro. Entra r¡n rnensajero]


REINA
iQué rurido es ese, por Dios?
REY
¡Mis guardias sr-rizos! ¡Que defiendan las puertas! iQué es lo que
pasa?
MENSAJERO
Salvaos, señor: el joven I-a.ertes, irnpetuoso coulo el rnar
ernbravecido, arrolla a. vuestros gtrardias. La plebe lo llarna su señor
y, corno si el rnr¡ndo recién ahora cornenzara a existir, olvidando la
tradición y la costrrrnbre, grita.n "¡Elegirnos nosotros nr:estro reyl" Y
alz.a:;t, los brazos, y tiran al aire los sornbreros, vociferando "¡Le.ertes
será reyt ¡La.ertes reyt" :

REINA
¡Qué alegres ladran, siguiendo LrIaa. pista falsal ¡Falsos perros
daneses, han eqtrivoca.do el rastro!
REY
Han roto las pr:ertas.
[Entra La.ertes con otrosl
I.AERTES
¿Dónde está el ReV? Arnigos, quédense afi:era. r:

TODOS
No, rao. ¡Querernos entrarl ¡Entrarl
LAERTES
ks rtrego, déjenrne entrar solo.
ToDos
Está bien, está bien.
T,AERTES
Les agradr%,o. Gtrarden las puertas.

LAERTES (cont.)
Oh, Rey indigno y vil, dewuélverne a rni padre.
I
(
(

oágina gg
-l
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO IV' escena 5 (

REINA I

Ca.kna., Laertes. I

LAERTES
Si yo tuviera una sola gota de sangre calrrta, esa gota rne estaria
I

la
griia.ndo bastardo, Y 1e pondría' clrenaos a rni padre, Y a' rni madre i

actrsa.ría de rarnera--
REY
rebeldÍa. tan desrnedida'? Déjalo,
¿Crrá,] es la cal]Sa, Laertes, d'e rrna tal divinjdad era llra rey qlre la
Gertrud. No ternas por nar. Hay
Dirne, Laertes' ¿por
tra.ición no tiene sino'qrre rnirarlay retrocede'
suéltalo, Gertrud. Habla,
qué. estás ta.n, attera'doa Déjaio,
rnuchacho.
I-AERTES
¿Dónde está rni Padre?
REY
Mtrerto.
REINA
Pero el reY no 1o ha matado'
REY
Déjalo: qLre Pregrrnte lo qr:e qr-riera'
LAERTES la. lealtad, al
¿Córno rnr:rió? No me dejaré rnaniprrlar. . ¡j\l diablo a' los cielosl
y la-cortesía! ¡DesafÍo
inñerno los votoJ, i*"ott"iÉncia. y. no flae irnporta,
etre suceda Io qrre tra de suc-ed"i, ¡pero habré de
¿;; * u"'.g^;;i rnás cornpleta. pór h rn,erte d. oP pa.drel
REY
¿Y qr.rién ha de irnPedírtelo?
I.AERTES
Só1o rni propia voluntad, no la' del rnundo entero'
REY -
r^ -^!rar
Elr¡en Laertes, de saber +t't
dr oe
con ceÍteza coÍ1o fi¡e la rnuerte de tu
padre,¿habríasdelanzartecontratodos'arnigosyenernigos'
ctrlpa.trles e inocentes?
I-AERTES
Shakespeare,/ Alegría HAMLET ACTO IV. escena 5 Dáeina roo

SóIo contra los enernigos de rni padre.


REY
¿Quieres saber, entonces, qtriénes son?
LAERTES
He de abrirles los brazos a srrs arnigos y alirnentarlos con rni propia.
sangre.
REY
Vaya, trablas ahora coÍro trn buen hüo y r-¡n noble caballero. Qr-re
soy inocente de la. rnuerte de tu padre, y que la larnento como el qtre
rnás, será tan cla.ro para ti corno el rnisrno cielo.
[Rtrido adentro "déjenla entrar"]
I.AERTES
.¡Qué pasat ¿Qué es este ruido?
Vtrelve a entrar Ofelia.
LAERTES
¡Fiebre, calcÍnarne la rnentet ¡Lagrimas de sal, qrrérnerrrrre la h¡z de
los ojost Cielos, ¿es posible que La razon de r:na doncella, sea ta.n
frágil corno la vida. de r¡n anciano? ¡Oh, rosa- de rnayo, querida niña.,
br¡ena. herrnana, dr-rlce Ofelia.t
OFELIA
Le llevaron cara a.l cielo
sobre una tabla de pino
a la. nino nino nirro,
a la. nino nino nín.
Mr¡cha"s lágrirnas llovieron
sobre sr¡ turnba..
[A Laertes]
¡Adiós, palornita,t
I-AERTES
Si tuwieras tus sentidos y tra.taras de pedirrrre vengal:za., no podrÍas
converrcerrne tanto-
OFELIA
Tienes que canta.r
[Canta, siernpre a Laertes]
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO IV' escena 5 página rol

Abajito, abajito, abajón


que se va., se nos va- el viejito viejón'
IHaf:la]
egé bien noÁ viene este estribillo ¿no? Te cuento ura secreto: fr:e el
falso escudero eI que se robó a la Lrija de su señor'
LAERTES
Tiene sentido su locura...
OFELIA
[A alguien ausentel
AqrrÍ tienes rolllero, para eI rectrerdo. Te rUego, arnor, recr¡érdarne.
Y aqrrí hay pensarnientos, para qrre pienses en rní-
[AI Re¡r]
AquÍ tLngo hinojo plara adularte rrrtrcho, y aguileñas rnala.gradeci{as.
Y rnarga.rita.s tarnbién, tan traicioneras: son para ti.
[A la Reina]
AqrrÍ hay un poquito de ruda, para ti, y un poqr:ito Pa.ra. rnÍ, para
arrepentirnos. Pero claro, eso sÍ: nOs pondrerraos la ruda ca'da l¡raa a
srt frf.anera.
[A Laertes]
Y a ti te darÍa l¡na.s wioleta.s, que son de lealtad, Pero ya todas se
marctritaron ctrando rnr¡rió rni pa.dre. Me dicen qrre trrvo rrruy br:en
frn.
ICanta.]
Pues sólo mi dulce arnor
era toda rni alegria....
T.AERTES
Todo lo wuelve dr-rlzura y belleza.
OFELIA
¿Y no volverá ot¡a vez?
¿Y otra vez rao volverá?
No, porque Ya está r¡ar¡erto
y a sr.t sepulcro se va,
¡ya nunca rnás volverá!
Su cabello corno nieve
de plata, era su cabello,
ya se ha, rnuerto, se ha rnarctrado,
son vanos ntlestros larnentos.
Iha.bla]
¡Dios se aPiade de su alrna! Y de todas la"s aknas cristiana.s, se lo
ruego a. Dios. Dios sea con todos.
Shakesoeare / Aleería HAMLET ACTO IV. escena 5 páeina roz

[Mutis Ofelia]
LAERTES
Oh, Dios, ¿lo has visto?
REY
Laertes, déjarne conrnoverrne con tu dolor, ¡no rne niegtres ese
derecho! Pero ven aqui conrnigo: ve y escoge a tr¡s rnás sabios
a.rnigos, y ellos podrán escr.rchar rnis razorres y juzgar entre tú y yo.
Si yo tengo alguna responsabilidad, ya sea directa o err forrna oculta,
sobre la rnuerte de tu padre, te daré a ti todo rni reino, rni vida, rni
corona, y todo lo qtre es rnio. Pero si no es así, debes te¡aer paciencia
que yo he de a5rudarte a darle satisfaccio¡aes a tu honor.
I
LAERTES
Sea corno decÍs. Pero ¿córno rnt¡rió, por qrré tan oscr'lro funeral?
¡Por qr:é lo han enterrado sin honores ni trofeos ni arrnas sobre sr¡s
restos y ningún rito ni cerernonia forrnalt Todo eso es trna afrenta el
cielo y a ta üerra., y debo averiguar cr¡ál es la catrsa.
REY
Y a.sÍ será. Y donde esté el ctrlpabie, pues qr:e ca.iga el peor de los
ca.stigos. Te ruego, verl conrnigo al:ora.
IMuüs]
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO IV' escena 6 página ¡F.rror! Marcador no definido.

Escena 6

[Entran Horacio y Marcelo, qr:ien trae una carta]


MARCELO
La trajeron lrnos rnarineros, señor. La ca-rta- es del prÍncipe Harnlet'
Tarnbién trajeron rrna carta Para. el reY.
HORACIO
¿tInos rnarineros?
MARCELO
sí, señor: d.os carta.s del príncipe: tlna para. vos y otra para- el Rey'

Gracias, br¡en Marcelo.HoRAclo


[Mutis Marcelo]
HORACIO
[I-el
"Floraéio: Ño habiarnos navegado ni dos día's hacia lnglaterra cr:a:rdo
]

rro" p"."iggió r,rn barco piráta rrrlry gLrerrero. Como no podíarnos


hr¡ir, nos prepara-rrros para hacerle frente. En el cornbate, abordé str
nave. en esé instanté e[os se alejaron de piratas npestro barco, de rnodo
que solarnente yo caí prisionero. Estos se han portado
cbnrnigo "orrró banáoleros rnisericordiosos, pero Tarnbién sabÍan
perfectarnente por qué 1o hacÍan: tuve qLre recoÍlPensarlos.
llevan r¡na carta .ái. p"r. rni tÍo padre. Ven donde yo esto5r -los
pira.tas te indicarán el carnine-con la rapidez con qu'e htrirías de la
intrerte. Tengo cosa.s qr:e decirte al oído- que te volverán rmrdo.
Rosencrantz y OtrltdenstLrn sigUen su carnino hacia Inglaterra' De
ellos tengo rnuctro que contarte. Hasta. pronto. Tu amigo de
siernpre, Flarnlet".
IMutis]

i,
lr
Shakespeare / Alesría I{AMLET ACTO IV. escena 7 pásina ro+

Escena 7

[Entran el Re5r y Laertes]


REY
Corno ves, soy inocente y puedes considerarrne tu arnigo. Ya has
' oído córno aqr:el qtre rnató a tu padre atenta.ba tarnbién contra rni
vida.
LAERTES
Parece que así fue. Pero decidrne... por qrré no habéis actr¡ado
contra. ese peligro corrro hacía falta., en defensa propia.
REY
Atr, sí: por dos rázolfes rnLry partictrlares, qrle quizás te parezcan
leves, pero para rní son poderosa.s. La reina, sr-r rnadre, vive y rnuere
por Ha.rnlet, y yo a rr:i vez --por virturd rnía y para rni desgracia-- la
llevo tan ligada a rni propia e><istencia que nada ptredo hacer sino
por ella-. El otro rnotivo que rrre irnpide hacer público todo esto es el
gran arnor que el ptreblo le üene a Harnlet. La plebe, olwidando
todas sus falta.s, htrbiera convertido sus vicios en virtr:des y sus
crÍrnenes en honestas acciones; tanto qrre rnis propósitos se habrÍan
vuelto contra rní y rnis flechas hr¡bieran herido rni propio pecho.
I..AERTES
Y asÍ he perdido a un padre y he visto enloqr-recerse a rni pobre
herrnana. Pero llegará pronto rni venganza
,.

No pierda.s el streño por eso. Yo arné a trr padre corno a rní rnisrno, y
podrás irnaglnar que yo...
[Entra Lrn rnensajero con cartas]
REY
éQué pasa? ¿Qué noticias?
MENSAJERO
[Jna carta., señor, del príncipe Ha.rnlet.
REY
¿De Ha"rnlet? ¿Qtrién la trajo?
MENSAJERO
a

Marineros, señor, rne dijeron' No los vi. Me la dio Marcelo. El las


recibió de qr.rien la trajo'
1
A
REY
e1
Laertes, habrás de escr¡ckrarla' á
[Al mensajero] d
Déjanos Ya.
[Mutis rnensajero]
cl
REY a
II-yendol
"Altivo y'podeioso Rey: sal¡ed qrre he llega'do
reino. tüaá.¡. he cle pédiros vuestra
reales ojos. EntonceJ os haré el relato
venia pa'ra.
--después
desnudo a' wuestro
conternplar
de obtener
wuestros
vuestro
-l
á
perrniso para ello-- de córno fue qtre pr:de regresar en forrna tan ¿
iaplaa. y por dernás extraña. I{a.rnlet" ¿
c4
LAERTES
clernás? o es algún engaño, y nada
¿Qué significa? ¿Han vuelto losletra'?
d
áé esto és cierto. ¿Conocéis su c4
REY ¿
Es la de F{arnlet. ."Desnrldo". Y aqui, corno postdata', dice "solo". al
¿Me puedes exPlicar esto? d
LAERTES
Tarnpoco 1o entienclo, señor. Pero perrnil$dle que verrga. Só1o tÍrt".Puedo
J
¿
penJa.r qrre tre de viwir para decirle en stl cara' "¡Esto 1o hiciste
¿
REY
Si es 'a"sÍ corrro podría ser de otra rrianera-- ¿habrás de ¿
obedecerrne?
--Y
c
LAERTES é
Por cierto, señor, si es qr¡e r:o rrae ordenáis tra-cer las paces' é
REY é
Solarnente hacerlas contigo rnisrno. Pondré en efecto un plan qrre é
no
vengo rnadr:rando, y habrá de caer en la tra,,,pa; y de sr:_rntlerte r:n
a nadiál- ro, trasta su propia rna'dre dirá qrre ha sido C
=" "-.rlpr.rá
accidente. c
I-AERTES C
C
C
C
C
C
C
e
e
q
e
It
Shakespeare / Aleería . HAMLET. ACTO IV- escena 7 páeina ros

Señor, ordenadrne 10 qtre debo tra"cer; sólo os pedirÍa qrré yo fuera el


instrr.rrnento de su rnuerte.
REY
Es de jusücia. Pero 1o qtre desearnos tracer, debernos tracerlo
cr¡ando 1o desearnos. Porqr:e tiene tantos carnbios, tropiezos y
dernora.s el deseo corr:o hay lengtras y rrr¿u3.os y circunstancias en
este rnr¡ndo. Y entonces ese desear 1o postergado se convierte en r¡n
inútil suspiro de angusüa, qr:e hace daño y alivia al rnismo üernpo.
Pero varnos: Harnlet regresa. cQtré podrías tú hacer para rnostrarte
hijo de trr padre en las accione§, rnás que en la.s palabras?
LAERTES I

¡Corta.rle la. garganta en trna iglesiat


REY
Cierto, qr¡e ningún lugar debe darle santr:ario al asesino. La
venganza no debe tener fronteras. Pero, btren Laertes, ¿trarás lo que
voy a pedirte? Qr-réda.te recltrido en tus aposentos. Harnlet se
enterará pronto de que has vr¡elto. Harnlet es conocido por buen
espadachin. Y tt'r ta.rnbién. Llstedes se enfrentarán en Ltr:r duelo,
arnistoso por cierto. Pero yo haré rrfa. apuesta fuerte. Harnlet, quien
es rrruy generoso y a.jeno a toda suspicacia, no exa"rninará las armas.
De esta" forrna tir podrás rrrr¡y fáciknente, con ltn peqtreño ardid,
escoger una espada" que no tiene el botón que. se trsa en estos
dr¡elos. Podrás asi, corr un hábil golpe, verf.gar la rnr.rerte de tr-r padre.
LAERTES
Lo haré; pero tarnbién habré de envenena.r la pr:nta de",i,la- espada.
Cornpré'r:na. pócirna. de u.n crJ.r€uldero, tan rnortal qtre si se rnojá con
ella r-rna. daga, con sólo tracer naanar la sangre no habrá rernedio ni
catapla.srrra. en este rntrndo qtre salve de la rntrerte al que es trerido.
Mojaré cora 'ese líqrrido mi espada y asÍ, aurrqr¡e solarnente lo
rasguñe, rnorirá.
REY
Pensernos rr¡.ás en este asunto, penseuros qrré otros ardides pr:eden
a5rudarnos. Qr.re si esto falla, y se descubren ntrestras intenciones,
sería rnejor qt¡e raLrnca. las hr¡biérarnos tenido. Por eso, este proyecto
debe tener L¡rt reerrpla-o, una segurrda instancia qr¡e nos salve si la
prirnera. fa.lla. Espera. Espera. Déjarne ver. Yo traré r¡na apuesta
ftrerte... ¡Ya lo tengo! Cuando con el ejercicio r¡stedes se acaloren y
tengan sed --y deben ser tus ataqrres rnr¡y violentos cora este fin--, y
cr¡ando Harnlet pida de beber, yo le habré ofrecido ya urr cáliz
preparado. Si bebe apenas un sorbo --y aunque haya esca.pa.do de
espa.d a ponzofrosa-- ntrestro propósito se
ttr habrá curnplido. Pero,
¿qué Pa-sa?, ¿qué es esto?
[Entra la Reina]
REINA
tlna clesgracia sigue los pasos de la otra.."' Tü herrnana se ha
ahoga-do, La.ertes.
LAERTES
¿Atroga.do? ¿Adónde, Por Dios?
REINA
Hay trn sau.ce qlle crece por encirna de r¡n ar:royo
qrré refleja sLls hojas sobre slrs a'glJas cristalinas;
óf"U. se puso a 1:acer allí las rnás fantásticas guirnalda.s
de ortiga§, rnargarita.s, y esas la-rgas flores púrptrras
a las qtre pastores soeces les dan un nornbre ot>sceno
pero q.re tas castas doncellas llarnan dedos de rnuerto;
y allí cornienza a treParse
en las rarnas pendientes de ese salJce
para. decorarlo colf sl¡s gr:irnalda's
cuando trna envidiosa. r€una se ronlpe
y Ofelia, cae al girniente alroyo con sLts flores'
Sus ropas florecen a, st¡ alrededor dentro del a'gtra y,
corrro si fi¡era tlrta' sirena-,
la sostienen a flote ttn rnornerato
rnientras ell.a sigue cantando retazos de vieja's coplas,
corrro inconsciente de str propia- desgracia
o corrf.o si fi:ese una criatura de las agu'as'
Pero no podia Pasar rnás qtre un insta'nte
antes q¡.re sr-rs ro1las,
ya pesa.das por su propia ernbria'guez
la arrastraran hacia el fondo,
cortando su canción rnelodiosa
para trundirla, Por fin, en cenagosa mr¡erte'
LAERTES
Dios r¡aío, tra rmrerto ahogada, entonces'
REINA
SÍ, se tra ahogado, se ha ahogado.
LAERTES
Shakespeare / Alegría FtrAMLET ACTO IV. escena 7 página roa

j No qrriero da-rte rnás lágrirnás, Ofelia. Las prohíbo: Pero es


sin
ernbargo natura.l. Cuando terrninen las lágrirrras, seré un hornbre
rrtlevarnente. Adiós, señor. Gritaría palabras de fuego, si este llanto
no las sofocara".
[Mutis Laertes]
REY
Sigárnoslo, Gertn:dis. ¡Tanto hice por caknar su fi:ria! Ahora terno
qrre esto la haga renacer. Sigá,rnoslo ya.
[Mutis todos]

Fin del Ctrarto Acto


OUINTO ACTO

Escena 1

Entran dos payasos con picas y palas'


PAYASO IJNO
. ¿Puede recibir cristiana septrltura' quien de propósito busca sll
ProPia salvación?
PAYASO DOS
Yotedigoqtresí,oseaqlrecavadereclrasrrturnba..
PAYASO I-]NO
¿Ycórnoptre<leser,salvoqueseahogaraendefensa'propia?
PAYASO DOS
Así 1o han averiguado'
I

PAYASO TJNO
Noptred'eserporquernira':aqr:íestáelagrra.Bien.AquÍestála
9e ahoga
p"r§orr.. Bieá. si esta. persona va hacia esta agua y_fijate bien'
entonces es, rnal qtre le pese, que esta persona se atroga, ahoga sino
pero si el agua va a la pJr=ort. y la a.hoga., entonces no se
q..Jf. áG;. ior lo'ta.nto: aqr-rel qrré no es culpable de sr-r propia
rntlerte, no a'corta su propia vida'
PAYASO DOS
pe.ro si esta no hubiera sido una rnujer noble, no le hubieran dado
cristiana sePultura.
PAYASO I.JNO
Atrí sí qrre est.ás diciendo algo. Y es una lástirrra qne las gentes
grandes tengan rnás perrniso en este rnundo pa-ra ahogarse o
álga.s" grre-st¡s igualeá cristianos. Y rnás aún nosotros. Pero una
pregunta, y si no la contesta's, confiésate'
PAYASO DOS
Dispara.
PAYASO UNO y el
¿Quién construye rnás fuerte que eI albañil, el armador
carpintero?
PAYASO DOS

lt

il
i

il
:l

tl
OUINTO ACTO

Escena 1

Entran dos payasos corr picas y palas'


PAYASO I.JNO
¿Puede recit¡ir cristiana sepr-rltura quien de
propósito busca sll
ProPia salvación?
PAYASO DOS
Yotecligoqr-resÍ,oseaqtrecavaderechast¡tumba.
PAYASO TJNO
¿Ycórnoprrecleser,salvoqueseahogaraendefensa.propia?
PAYASO DOS
AsÍ Io han averiguado'
PAYASO UNO
NopuedeSerporqlrernira:aqrríestáelagua.Bien.Aquíestála
p"rSorr.. Bien. Si esta. persoraa va hacia esta a.gua Y_fijate 9e .I-og.
entonces es, rnal qtre le peée, que esta persona se a.troga, ahogabien'
sino
Pero si el agua va a la p":t=o.. y ta a.froga, entonces no se propia
q..Jrá-;G;. Por to'ta.nto: Jqrrel qrré no es culpable de sr-r
rnu.erte, no a-corta su propia vida'
PAYASO DOS
pero si esta rro hr-rbiera sido r¡na rnujer noble, no le hubieran dado
cristiana sePultura.
PAYASO UNO
Ahí sí qr. e estás dicienclo algo. Y es t¡na lástirrra qlre las gentes
gra.ndestenganrnásperrnisoenesternrrndoPa.raalrogarseo
qrre-slrs igualeá cristia¡ros_. Y rnás aún nosotros. Pero trna
"otáar=e
pregtrnta, y si no la con'testa's, confrésate'
PAYASO DOS
Dispara.
PAYASO UNO y el
¿Qr:ién construye rnás fuerte que el albañil, eI armador
carpintero?
PAYASO DOS

II

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ti
Shakespea¡e / Aleería HAMLET ACTO V. escena l' , páeina rro

El constructor de pa.tíbr-rlos, porqrre sus edifrcios sobreviven rnil


inquilinos.
PAYASO (JNO
Me gusta tu ingenio. La. verdad qrre el patÍbulo viene al caso. Pero le
viene al caso a los qtre perdieron st¡ caso. Pero otra vez, vanf.os.
PAYASO DOS
¿Quién construye rnás fuerte que el albañil, el arrnador y el
carpintero?
PAYASO L]NO
Dirne eso y sáIvate del patíbulo.
PAYASO DOS
¡Vaya, ya lo sél
PAYASO T'NO
Al grano.
PAYASO DOS
- ¡Diablos, ya no lo sél
Entran Ha.rnlet y Horacio a lo lejos.
PAYASO IJNO
No te tortr¡res más los sesos con eso, porque trn br¡rro no se
ertdereza. por más que 1o azotes. Y la próxirna vcz que te 1o
pregr:nten, contesta 1o sigr-riente: es el sepulturero, porqr¡e las casas
qrre construyen drrran hasta el día del juicio final. Anda y tráerne la
botella de licor.
Mutis Paya.so Dos.
SEPULTURERO
[cava y ca¡ata]
Cuando era joven y rnr-rcho enarnoraba
todo rnuy útil a mí rne parecía
para rnatar el tiernpo qrre pasaba
aunqr-¡.e de nada br¡eno rne serwía.

HAMLET
¿No tiene este tipo corrciencia de sr¡ oficio que canta rnientra.s cava
Lrna sepu.ltura?
Shakespeare / Alesría HAMLET ACTO V. q§cena 1 , páeina rlr

HORACIO
La costurnbre le ha hecho fácil la tarea.
SEPULTURER.O
ICanta]
Pero eI tiernpo agazapado y traiciorrero
rne ha cogido del cogote con slr gar.ra
rnetiéndonne ela la tierra
con máno cn:el y frera
¡sí señor, y se a,cabó la fa.rrat.
[Arroja r-rna. calavera]
HAMLET
Esa calavera ttrvo r:n tiernpo su lengtra-, podÍa cantar. Y esta podrÍa
ser la calva de un politico, qtre este brr¡to a}ora a:roja al suelo.
HORACIO
Podría ser, señor.
HAMLET
O de r:n cortesano, qLre rnr¡y bien podía decir "Elueraos dÍas, dulce
príncipe... ¿Córno estáis, dulce principe?" Voy a hablarle a este tipo.
¿De quién es esta tr:rnba, oiga?
SEPULTURERO
Mia, señor.
[Canta.]
Hay qtre hacerle r¡na carna de tierra
'. a este hr¡ésped qr:e viene de la sierra.
HAMLET
Por cierto, es tllya, ya que estás rneticio en e1la.

SEPULTURER.O
Y usted est.á a.fi.rera de ella, por lo tanto no es suya. Por rni pa.rte,
estoy rnetido pero no he rnenüdo, porque sí es rnía. Ia tumba.
HAMLET
No, las tr.rrnt¡a-s son de los rnr:ertos, rao de los vivos. Si qrre tras
rnenüdo, ya que pr:edes rneterte y salirte de ella.
SEPULTURERO
LJna rnentira. bien rnetida, señor, sÍ, tenéis rañrt pero vais rmrerto y
a la turnba corrr.o cualqtrier cristiano.
Shakespeare,/ Aleería HAMLET ACTO V. escena I página rr:

HAMLET
¿Ah sí? ¿Para quién ca,va.s esa turnba?
SEPULTIJRERO
PAra na.die, señor.

HAMLET
¿Córno a.sÍ?
SEPULTURERO
Porqr:e ahora ya rao es nadie y que Dios se apiade de su a1ma
porqrre... sabe usted... parece que se rnató en ofensa propia.
HAMLET
Dirás en defensa propia.
SEPLILTURERO
No señor, porc1r:e es ofensa qu.e rrrata.rse a sí rnisrno anf,raqr¡e lo haga
defendiendo a Dios.
HAMLET
[A Horacio]
Este üpo es absolt¡ta.rnente preciso en su.s decires. Tenernos qrre
hablar clarísirno, o sns exquisiteces laos matan.
[al Sepulturero]
¿Desde hace cuánto eres sepr:lturero?
SEPULTURERO
De todos los dÍas qrre üene el año, rne tocó corrlenz¿Lr en este ofrcio el
rnisrnÍsirno día qLre nLrestro diñ¡nto Rey Harnlet le ganó el duelo al
viejo rey Fortirnbras de Noruega.
HAMLET
¿Yctránto tra.ce de eso?
SEPULTIJRERO
¿Qtré, no lo sabe? Cualquier idiota. 1o sabe. Fr.e el rnisrno dÍa que
nació el joven Harnlet. Ese qrre se volvió loco y lo despacharon a
Inglaterra..
HAMLET
Ah, cararnba, y ¿por qtré lo despactra.ron a Ingla,terra?
SEPULTLIRERO ]

¿Por qr-ré? Pues porque estaba loco. Harnlet va a recuperar el


sentido por allá. O si no, pues por allá no irnporta rnucho.
(.

Shakesoeare / Aleería HAML,ET ACTo v. escena I páeina rrs

HAMLET
¿Córno así?
SEPIJLTURERO
No se nota, la locura, en lnglaterra. AIIá todos son rnás locos qpe é1.

HAMLET
¿Y córno asÍ se volvió loco ese tal Harnlet?
SEPIJLTURERO
Pues dicen qtre de Llrra- forrna rrrt.¡y extraña.
HAMLET
¿Córno fr:e?
SEPLILTURERO
Y?ya, pues perdiendo larazón.
HAMLET
¿Pero qué cosa dio lugar a eso?
SEPLILTURERO
¿Ltrga.r? Pues aqtrí nornás, en Dinarnerrca, en Elsinor. I

HAMLET
Dirne, ¿de qr:ién es esa calavera?
SEPULTURERO
¡Atr, qrré hijoeptrta ta.n loco fi¡e eset ¿De quién ciee usted que fue
esta. ca.lavera?

HAMLET
No, si no lo sé.
SEPLILTURERO
Esa calavera, señor, fue del rnisrrrÍsirno Yorick, el bufón del Rey.
HAMLET
¿Esto?
SEPIJLTURERO
Eso rnisrnito. ¡Hiioeputa chistoso qr¡e fr¡e el tipot
HAMLET
Dios rnÍo, pobre Yorick. Yo 1o conocí, Horacio. (Jn hornbre de
infrnito trtlrnor, de gran irnaginación. Me cargó en sus hornbros,
jugando, tantas veces... Y ahora... qr,ré trorrible es irnaginárselo.
Aqrri colga-ban esas hrejillas que tre besado en no sé cuanta.s
oca.siones. ¿Dónde están tus brornas a.trora, Yorick? ¿T\.rs trllcos,
ttrs canciortes, tus'ctristes que hacÍan reÍr a carcaja.das a toda. la
rnesa? ¿Ni uno solo puedes decir para. reirte de esta. tu sonrisa.?
¿Ah? ¿Qr¡é traces af.í con la boca abierta? ¿No contestas? Vete,
vete al dorrnitorio de rni carrra y díselo, dile que se'pinte la cara, qtre
se la cr-¡.bra corr tln dedo de pintura... Igual trabrá de terrninar en
esto, tarde o ternprano. He-,la reírse de eso. Por favor, Fforacio,
dirne r¡na cosa
HORACI()
CQué cosa, señor?
HAMLET
¿Crees tú qure Alejandro el Grandeya se parezca a esto?
HORACIO
Así será, segurarrente.
HAMLET
¿Y que huela igual? ¡puajt
[Arroja la calavera]
HORACIO
Igtral, señor.
HAMLET :
Este ñn es el final de tod.o y de tod.os, Hora.cio. Córno no pensar qLre
el noble polvo de Alejandro puede convertirse en trn ta-pón de barril.
HORACIO
SerÍa pensar con dernasiada rnintrcia, señor.
HAMLET
No, no, escucha.: Alejandrcr rrrt¡ere, Alejandro es enterra.do, Alejanclro
se rn¡elve polvo, el polvo es tierra, de la tierra se hace la. arcilla, y de
la arcilla se fa.brican los ta.pones de ba.rril. Así es, Horacio. ¡Pero
rnira, rnirat AhÍ viene el rey.
[Entran el Rey, la Reina, y el cadáver de' Ofelia. con otros cortesÉu:ros y urr
Sacerdote.]
-,
páeina rrs
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO V' escena I I

HAMLET (cont.)
EIfeY,loscortesa.rros.¿Aqrriénentierran?Yconritostan
incorriptetos. ParecerÍa qtrJel rntrerto se qr:itó la vida con stl propia
rnano.Hasidor:nnoble.Escondárnonosarnirar,Horacio.
[Se retira con Hora"cio]
LAERTES
¿No Lrábrá rnás cerernonia?
SACER.DOTE
No, ningr-lna .-á": ProfanarÍarnos los ritos de los rnt¡ertos qr-l'e
cristia-rros, si le
pasaron a naeJor vrda. con la a5ruda de sacrarnentos
áiérarnos un réqr:iern cantado'
LAERTES
eonla.n-a en la tierra., y que s1l carne beIla. y pura haga crecer habrá
las
de
viotéás. Y yo te cligo, áaclerdote €urr¿rrgo, qrre--rni trerrnana
ser r¡n arcañgel en el cielo cr:a¡rdo tú eites amlla.ndo en los inñernos'

HAMLET
Por Dios, es Ofelia"
REINA
Flores Para la dr.¡lzura' Adiós'
[Echa flores dentro de la turnba]
1,o anliaba que fueras la esposa de rni Harnlet. Yo qrrerría haber
adorna.do tLr lecho de boda§, dulce niña, y no regar flores en tlt
trrrnba.
I.AERTES
-qrre
orr, caigan desgracias inf-rnita's sobre
" la. cabeza del que te t}jzo
entáqjrrecer cot acto-tan indigno. Y no la cubran de tierra hasta que
no la traYa abrazado Llna vez rnás'
[Safta dcntro de la turnba'] ^^--.-+.
r- - -¿^ convertir
Ahora. arrojen el polvo sobre 1oÁ vivos y los rrr'uertos, hasta'
esta turnba en Lrn rllonte ta.n alto cofno el Olirnpo.
HAIVILET
[Adelantándose]
¿Qrriénsr¡freaqrrícontantowildesplante?¿DequiénesSoneSaS
frasás .ngustiadas qtre hacen deteneise de pavor a las estrellas en el
cielo? eqrí estoy yo, Flarnlet el Danés'
[Se arroja a la tr¡rnba con Laertes]
Shakespeare / Alesría HAMLET ACTO V. escena 1 páeina rre

LAERTES
¡E1 dernonio se lleve tu akna.!

ILrrchan]
HAMLET
¡fr[o rezas bien!
REY
¡Sepárenlos!
REINA
¡Ha-rnlet, ÉIa.rnlet!
TODOS
¡Caballeros!
HORACIO }
¡Por favor, buen señor, tra.nqr:ilizaosl
[Los separan y salen de la. turnba]
HAMLET
Yo amaba a. Ofelia. Cuarentarnil herrnanos, cora todo srl €Lrnor
reunido, no podrían igrralar rni arnor. ¿Tfr qr:é haría.s por ella?
REY
Está loco, La.ertes.
REINA
Por el arnor de Dios toléralo, Laertes.
FIAMLET
Dios del cielo, rnrréstr€une 1o que haría.s. ¿LlorarÍa.s? ¿Peiearías?
¿Te arrancarías las uñas? ¿Beberías winagre? ¿Te cornerias trn
cocodrilo? ¡Yo 1o harél ¿Vienes aqrrí a gemir? ¿A avergoÍ:rzarrrre
saltando dentro de sr: ttrrnba? Déjate enterrar vivo junto con ella- ¡y
yo también lo haré! Y si hablas de rnontañas, ¡qLre nos entierren
juntos bajo rnontañas! No, que si gritas y te desesperas, ¡yo tarnbién
ptredo n¡glr iguat qr:e túl
REINA
Es solarnente sr¡ locr¡ra, su delirio lo ha.ce ponerse a.sí. Despr:és ca,e
en rln silencio pesaroso.
HAMLET
7-
I

Shakespeare / Alesría HAMLET ACTO V. escena I - página rrz

[A Laertes]
¡óyerne, La-ertes! ¿Por qué rne tratas así? Yo sierrrpre te quise. Pero
no irnporta.. Por rnás que haga el rnisrno Hércules, el gato ha, de
rnar¡llar y el perro ganarle la partida.
REY
Por favor, Floracio, cuÍdalo rnr¡clro.
[Mutis Harnlet y Horacio]
REY
[A La.ertes]
Fortalece ttr paciencia con 1o qtre te dije anoche. Haré qr¡e sea de
inrnediato 1o qrf,e tenernos planteado. Esta turnba tendrá l¡n
rnont¡rnento wivo. Pronto wendrá la trora. de estar tranquilos. Hasta
entonces que la paciencia guíe nr:estros a.ctos.
[Mutis todos]
Shakespeare / Aleería - HAMLET ACTO V. escena 2 página lre

Escena 2
[Entran I{arnlet y Horacio]
HAMLET
Pues bien, basta de este asr:nto. Atrora verás el otro. ¿Recuerdas
todas las circunstancias?
HORACIO
Las recr:erdo, señor, rnr.ly bien.
HAMLET
Tenía yo Lrna, lucha en el corazótt qlre no rne dejaba dorrnir. De
pronto, en Lln a¡ranque de audacia --y bendita sea la anrdacia-- salÍ
de rni carna.rote envuelto en rni capa, busqtré a. üenta.s en la
oscr¡ridad p¿rra encontrarlas, las hallé, pesqtré el Paquete y
rápidarnente regresé a. rni carna.rote para viola.r sus carta.s y
enterarrne de su irnporta.ntísirna rnisión. Y lo qtre encontré en esas
bartas, Flora.cio --qué villa.nÍa tan regia-- ft¡e r¡na orden pÉrra el rey de
Inglaterra. Si¡:l dernorar ni trn instante, no, ni siquiera dándose el
tiernpo para afilar el hactra del verdugo, pues... habría de corta.rrne
la cabeza.
HORACIO
¿Bs posible?
HAMLET
Aqtrí está la, carta. Góza-la. con tiernpo. ¿Pero va.s a. escr¡char lo qr:e

HORACIO
Sí, por favor.
HAMLET
Me senté a. inventar lalleva,s órdenes. [,as escribi con elegancia y
corrección. ¿Quieres sa.l¡er 1o qr:e puse?
HORACIO
SÍ, señor.
HAMLET
tJn apasionado ruego de parte del Rey al soberano de Inglaterra., su
fiel tribtrtario, para que, si es que qtrería qrre e1 a.rrror floreciera errtre
los dos corrro una flor, si es que la paz habría de enseñorearse de sus
reinos, y rntrchos'siesqrres'irnporta.ntisirnos de este üpo, pues el Rey
!

,i
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO V. .escena 2 pági4a rrg
I

de Inglaterra. debería, sin demora, súbitarnente dar rntterte a los dos


I

portaáores de la carta.: el bello Rosencrantz y el precioso I

Gtrildenstern. I

HORACIO I

¿Córno fr:'e sellada esa ca.rta-?


HAMLET I

En esto tarnbién parece que los cielos rne aSrudarorr. Yo lleva.ba


conrnigo el viejo sello de mi padre, cuya copia. ahora r¡sa este
rnalvado. Dobté rni carta. igual qrre la original, le prrse el sello, la
devolví al luga.r donde robé ésta qrre aquí tienes ¡y rnis condiscípr¡los
ntutca supieron del carnbio! Ahora bien, al día sigr:iente fue nu.estro
combate y lo qrre sigr:e ya. lo conoces.
HORACIO
O sea que Roserrcraratz y Guildensterrr van Por lana..
HAMLET
Yo no los cargo a rni conciencia. Se la habían rnerecido. Es Ímy
peligroso para. los rnediocres interponerse ela la.s luchas entre
grandes enernigos.
HORACIO
¡Por Dios, qué rey tenernosl
HAMLET
Dime tú, ¿no te parece que estoy jr:stificado si lo rnato? A é1, que
a.sesinó a rni padre, prostituyó a rni rnadre, se interpuso entre el voto
popr:lar para elegirrne corno rey y rni legÍtirna esperanza, y luego
atentó contra- rni propia vida. ¿No es perfectarnente de conciencia
rnatarlo con este brazo? ¿Y no sería crirninal dejar qr:e este cáncer
nos siga corroyendo y siga. haciendo rnaldades?
HORACIO
Pronto le llegarán noticias de Inglaterra, de lo qrre debe haber
pasado por allá.
HAMLET
Sí, será nauy pronto. Pero mientras tanto, el tiernpo es rnÍo. Y se
rnata a rtn trornbre en Ineflos de 1o qtre Se ctlenta, hasta t¡no. Pero
Iarnento rngctro, br¡en Floracio, haberrne propasa.do con Laertes,
porqLre veo en sr,l cai.lsa. la irnagen de la rnía. Tra.taré de ser su
a.rnigo nr¡evarnente. Pero es gt-re la ostentación qtre hizo de su pena
rne enfureció y no 1o ptrde resistir.
Shakespeare / Ategría HAMLET ACTOV. escena2 pásina rzo

HORACIO
Silencio, señor. Algrrien viene.
[Entra Osric, un cortesano]
OSzuC
Sr¡ señoria sea ntlevarnente bienvenido a Dinarnarca.
HAMLET
Muchas gracias, señorito.
[Aparte a Hora.cio]
¿Conoces a. esta libéh-rla.?
HORACIO
No, señor.
HAMLET
Tienes st¡erte.
OSRIC
Dulce señoría, si vt¡estra señoría no estrrviera octrpado, le
transrnitiría algo de parte de str rna-jestad el Rey.

fY:fltraré, señor. pero dele al sombrero s,.r l¡so correcto. Es


para la cabeza, señor.
OSzuC
Agradezro a sll señorÍa. Hace rnr¡ctro calor.
,.1

HAMLET
No. Creedrne. Hace frío. El viento sopla del norte.
OSzuC
SÍ, sí, hace Lrn poco de frío, en efecto-
HAMLET
Y sin ernbargo creo qr.re es!á derna.siado trúrnedo y caltrroso para rni
gusto.
OSRIC
Sí, sí, dernasiado, señor, está el tiernpo rrruy pesado y húrnedo y
caluroso, corno si dijéra.rnos --es decir-- no sé córno diiérarnos. Pero
señor, slr majesta.d el Rey rne ha rogado hacer 'de wttestro
conocirniento qr:e ha hecho una gr€ur apuesta'sobre vuestra ca'beza
señor. El asr¡nto es el sigr:iente-
HAMLET
[Señalándole el sornbrero]
Por favor, señor, recr¡.erde...
OSRIC
No, no, rni buen señor; así estoy córnod.o, os 1o jr:ro. Señor, ha
llegado a la corte Laertes. creed.rne, es lln cabálero insigne, de
exqrrisitos rnodales y e¡:l ñn, ostenta toda. una diaderna d.e ,Irt¡d""
cabalÍsirnas.
HAMLET
señor, por cierto que es en ta.l medida un pulqtrérrirno dechado d.e
tesoros ese cora-zón tan apolíneo, que se torna indeseable e>q)resar
con vocablos la infinitr¡d de trofeos que él alberga., a.fiterza-d"¡.ro
inctrrrir en tr.ipertrólica rnetáfora.
OSRIC
Str alteza 1o ha definido infaliblernente.
HAMLET
Pero v¿unos a. la. concerniencia. ¿por qué envolvernos a este noble
caballero ert' nuestro aliento?
OSRIC
¿Señor?
HORACIO
[a Harnlet]
SerÍa mejor hablarle en idiorna exEranjero.
HAMLET
iQué rnotiva la alta.norninación de ese gentilhornbre?
OSRTC
¿Laertes?
H()RACIO
Se le acabaron la-s frases de oro.
HAMLET
Ese rnismÍsirno señor, rni señor.
OSRIC
Sé que no sois ignorante...
Shakespqare / Aleería HAMLET ACTO V. escena,2 páeina rzz

HAMLET
Menos rnal qr:e no Io pensáis, qr:e si lo pensarais.l.
OSRIC
No sois ignorante de la excelencia de Laertes en...
HAMLET
De ninguna de sr:s excelencias, señor.
OSzuC
Su e><celencia en la esgrirna.
HAMLET
¿Cuál es su arrna?
OSRIC
Flspada y daga.
HAMLET
Esa.s son dos de strs arrnas. Pero seguid.
OSRIC
Sr-r rnajestad el Rey ha apostado con Laertes seis caballos bereberes
contra seis espadas francesas rnuy elegantes, señor, con sr¡s
correa.jes inrnaculadarnente diseña-dos en el rnejor estilo de París...
HAMLET
¿Ypor qué tra apostado aqtrello?
..OSzuC
El Rey, alteza, ha apostado, a7teza., que en doce asaltos entre vos y el
otro caballero, pues el otro caballero no os dará rnás de tres toques.
El rey ha apostado nr¡eve a tres; y sería de verlo de inrnediato si
vuestra alteza rne diera la respr:.esta.
HAMLET
¿Y qué pasa si digo qrre no?
OSRTC
Vale decir, señor, si os presentaréis para este duelo, es la pregunta.
HAMLET
Señor, estaré paseanedo por esta galería. Es rni trora de descanso. Si
str rnqjestad así lo desea, qrre traigan la,s a.rrna.s. Si el ca.ba.llero está
dispuesto y su rna.jestad no carnbia de opinión, ganaré la apuesta
r
1

Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO V- escena2 oágina rz:

para é1, si es que resr¡lta así. De otra forrna, no ganaré nada rnás
que rni vergüenza y uno qtre otro rasgrrño.
OSRIC
¿Transrnito entonces este mensaje, su alteza-?
HAMLET
Sí, señor, después de las elegancias ql¡e vuestra na.ttrraleza os dicte.
OSRIC
La reina desearía, señor, que hablarais algunas palabras cariñosas
con La.ertes a.ntes de enta.blar el duelo.
HAMLET
Mr¡y bien rne aconseja
OSRIC
Encorniendo rnis respetos a vuestra aJteza.
HAMLET
La wuestra", la. vrf,estra, señor rnío.

[Mutis Osric]
I{AMLET
¡Este tipo saludó rnuy respetuosarnente a. sr¡ teta antes de rnarnar
recién nacido!
HORACIO
Vais a perder la apuesta, señor.
HAMLET
No lo creo. Desde que La.ertes se fue a Francia he estado entrenando
contintrarnente. Ganaré la apr:.esta- Pero no te irna.ginas la angtrstia
qtre siento aqr.:Í, en el coraút. En fin, no irnporta..
HORACIO
No, señor, [o...
HAMLET
Son tonterías; es el tipo de presentirniento qrre qrrizás preocuparia a
una rnujer.
HORACIO
Si algo no os gr¡sta, si tenéis una intuición, seguidla. Yo iré a
detener el duelo, les diré qr-re no os sentís bien.
Shakespeare / Alegría HAMI-EJ- .ACTO V- escena,? páeina rze

HAMLET
De ninguna forrna; desafio los atrgurios: hay llna especial
providencia que interviene trasta el caída de un gorrión. Si ha de ser
a.hora, no será rnás tarde; si no ha de ser rnás tarde, será ahora; si
no ha de ser a.hora, siernpre habrá de ser. Hallarse listo lo es todo.
Ya qr-re ningún hornbre sabe lo que le espera, ya que no conocernos
lo qr:e hr¡biéra.rnos sido despr:és de rnr¡ertos, porqrre ya estarrros
. rnrlertos, ¿qué irnporta entonces rnarcha.rse tarde o pronto? Deja
e pase 1o qr're ha de Pasar, ÉIoracio.

[Entran el Rey, la Reina, La.ertes, Osric, y otros not¡les y cortesanos con espadas
y guantes. LIna. rnesa y jarros de vino.]
REY
Vet:, Harnlet, vera y recibe esta rnano de rni rnano.
[El rey pone la rnano de La.ertes en la de Harnlet]
HAMLET
Darne tu perdón, Laertes. Te he agravia.do. Pero perdóname colIlo
l¡uen caballero. Los presentes saben, y tú tarnbién lo habrás oÍdo,
córno rne ha ca.stigado el cielo corl Llraa. horrible locura. Lo que yo
haya hecho en contra de ti y de tu honor, declaro atlora rnisrno que
ha sido rni loctrra. ¿Harnlet ha agraviado a Laertes? No, no tra sido
Harnlet. ¿Quién, entonces? Su locura. SÍ, Laertes, es a.sí: el agrawio
tarnbién recae sobre Harnlet, porque str locura es la. peor enerniga
del pobre Fla.rnlet. Delante de estos testigos Io proclarno: he
disparado Llraa. flecha sobre la casa,, y he trerido a. rni propio
herrnano. l

LAERTES
En los sentirnientos acepto esta satisfa.cción, a- pqsa.r de que el
corazótl debiera. impulsarrne a la verlg:aJaza. Pero err cuanto a rni
honor, espera.ré a que dictarninen los jueces más respetados. Ellos
d.irán si puedo aceptar vtrestras palabras sin rnancilla-r rni
reputación. Pero trasta entonces, recibo como arnistad la arnistad
qrle rne ofrecéis, y no la traicionaré.
HAMLET
Adrnito de br¡en grado esas palabras, y te aseguro qlre entablaré este
ctr¡elo contigo cor¡to con t¡n herrnano, con igual franqtreza y lealta.d.
Dadnos las a.rrna.s. Varnos.
LAERTES
Varnos, dadrne trna a rní.
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO V. escena 2 páeina rzs

HAMLET
La.ertes, yo voy a. ser rrn buerr blanco. Con rni torp,ez,a, tr¡ rnaestría
brillará corno rlna estrella en la rnás oscl¡ra noche.
LAERTES
Os br¡rláús de rní, señor.
HAMLET
No, por Dios, no.
REY
Dales la.s arrnas, Osric. Sobrino Flarnlet, ¿conoces la apr:esta?
HAMLBT
Perfectarnente, señor. Vuestra alteza ha apostado al perdedor.
REY
No lo creo. Los he wisto a los dos. Pero corno la opinión general es
favorable a Laertes, yo apr-¡esto por ti.
I.AERTES
[Por su espáda]
Esta está rnlJy pesada. Déjenrne probar otra.
HAMLET
Esta rne gusta. ¿Todas las espada.s son del rnisrno largo?
[Se preparan para el duelo]
OSzuC
SÍ, señor rnío.
REY
Pongan las copas de vino sobre esa Inesa,. Si Harnlet asesta el
prirner golpe o el segundo, o se desqrrita. devolviéndolo en el tercer
asalto, qtre dispa.rera a t¡I3. tiernpo todos los cañorres, Porqlle el Rey
beberá a Ia salud de Harnlet. Y ectraré trna perla err rni copa, ttna
perla rnás rica qr:e la qr:e han trsado cr¡a.tro reyes strcesivos de
Dinarnarca en slts cororaas. Dadrne las copas, y que el tirnbal le
trable a- las trornpetas, las trornpetas a los cañones de rnuralla, los
cañones a los cielos y los cielos a la tierra, todos diciendo: "¡Ahora el
Rey Cla.trdio bebe a la sal¡d de str hijo Harnlett". Varnos, corniencen.
Y r-rstedes, jr:eces, obserrzen con cuidado.
Shakespeare / Alegría HAMLET ACTO V. escena 2 pásina rze

HAMLET
Varnos, arnigo.
LAERTES
Varnos, señor.
[Dueto]
HAMLET
TJno.

LAERTES
No.
HAMLET
Jueces.
OSRTC
Sí, tocado, palpablernente tocado.
I.AERTES
Ptres bien, v¿Lrnos de nr¡evo.
REY
tJn rnornento. Deténganse. Denrne de beber. Harnlet, esta. perla es
tuya.; aqtri brindo a. tu saltrd.

[Trornpetas y ca.ñones adentro]


REY
Den1e la copa.
HAMLET
Prirnero este asalto. Déjenla atrí. ¡Varnos!
IDuelo]
HAMLET (cont.)
Toca.do otravez. éQué dices?
LAERTES
Un toqtre, r:n toqrre, sí, 1o adrnito. :

REY
Nr.¡estro hijo triunfa.rá.
l'-
I

i
tl

REINA
Pero está sin afiento. Torna, Harnlet, torna mi pañuelo, sécate
frente; la reina brinda a tr¡ salud, Hamiet. la

I{AMLET
¡Dulce señora!
REY
No bebas, Gertrrrdis.
REINA
Si lo haré. Te 1o ru.ego, perrnÍterne.
[Bebe]
REY
[Aparte]
Es la copa envenenada. Es dernasiado tarde.
REYNA
Ven, déjarne seca.rte la cara.
LAERTES
Señor, ¿lo ataco al..ora?
REY
Pienso qu.e no.

LAERTES i

[Aparte] 'l
Y sin ernbargo, ca-si me arrepiento.
!
HAMLET
Va'rrros' el tercer a.salto, Laertes. Te Lraces d.e rogar. Va.rnos, ,l

rnejor violencia. lferno qtre te burles de rnÍ. con tu


I

LAERTES !
¿Eso dices? ¡Varnos, entoncest ,¡

IDtrelo] I

.l
OSRIC
¡Nada p€rra ningtrnot I

LAERTES I

¡En guardia, en grrardiat (

(
(

.(

I
l
(
.(

.t
Shakesoeare,¿ Aleería I{AMLET ACTO V. escena 2 páeina rze

[Laertes Lriere a Ha.rnlet. Lr:ego, en la pelea, carnbian espadas y Harnlet hiere a


La.ertes]
REY
¡Sepárenlos, qrre se han enfurecido!
HANILET
No. ¡Ven, vert, en guardiat ¡Ven!
[I-a Reina cae]
OSzuC
¡La reina, la reina, cuidadot
HORACIO
Sangran de arnba.s partes. ¿Córno vais, señor?
OSRTC
¿Córno vais, Laertes?
I-AERTES
Vaya, corno un pájaro que cae en su propia. trarnpa, Osric. Me han
dado rnuerte con toda justicia. Y con rni propia arrna.
HAMLET
¿Córno está la reina,?
REY
¡Se desrnaya de verlos sangrar!
REINA
No, rro, el vino, el vino --ah, qrrerido Hamlet-- el vino, el virro, rne han
envenenado.
HAMLET
¡Oh, a.sesinatol lGr¡ardia.sl ¡Cierren la.s puertasl ¡TraiciÓn!
¡Tra.iciónl ¡A br-rscarlal ¡A encontrarlal
T.AERTES
¡Aqrrí está, Flarnlet, aqrrÍ estál Hamlet, tir ya. has rntrerto. Ninguna
rnedicina de este rnr:ndo te ptrede curar. No hay en ti rnedia hora de
vida. El instrurnento traicionero está en tr¡ ma:ro, sin botón y
envenenado... y la traición se ha vuelto contra rní; rrrÍrarne, aqr.rí
estoy para ntrnca rnás levantarrne. Tu madre tra. rnrrerto
errvenenada: no puedo rnás; el rey, el rey es el ctrlpable.
Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO V. escena 2 página rzg

HAMLET
¡Tarnbién la punta enverrenada! ¡Entonces, veneno, curnple tu
propósitot

[Hiere al Rey]
TODOS
¡Traiciónl ¡Tra-iciónt
REY
Defiéndanrne, defréndanrne, arnigos, que sólo estoy herido.
HAMLET
Torna, rnaldito rey incestr-roso y asesino. Tórnate esta poción. Aquí
está tu perla, ¿no? SÍguela a rni rnadre.
[Mr.rere el Rey]
I-AERTES
Se tra hecho justicia, es rtn veneno prepa.rado por él rnismo. Darne
tu perdón, Fla"rnlet, y torna el rnío. Qr-re la. rntrerte y la de rni padre
no recaigan sol¡re ti. Ni tLr rntrerte tarnpoco sobre rni akna.
HAMLET
¡Que el cielo te libre de esas culpasl Yo te sigo. Ya rntlero, Flora.cio.
¡Adiós, desventurada Reina! Ustedes qure obsenran estos sl¡cesos,
pálidos y terntrlorosos, rnudos testigos o público ingenr:o para esta
representación... si yo ttrviera üernpo --pero ya viene la mr:erte, ta.n
estricta, viene a, arresi.arrrre-- aI., yo podría contarles... pero no
irnporta. Hora.cio. Me inuero. Tú vivirás; habla de rní y de rni ca.Llsa
con verdad, a qrrienes se interesen por sa-berla.
HORACiO
Ni 1o pienses: aqr:í queda algo de verreno todavía.
HAMLET
Si eres hornbre de honor, danrre esa copa: suéltala; por los cielos,
¡dárnelat Oh br:en Horacio, qué nornbre tan rnaldito viviría tras de
rní si no llegara a saberse la verdad. Si a.lguna- vez ftriste rni arnigo,
posterga toda.wía la felicidad de la rntrerte y qrrédate en este rnr:rrdo...
' respira un poco rnás con el dolor de conta.r rni historia..
[Marcha a 1o lejos y tiros dentro]
Shakespea¡'e / Aleería HAMLET ACTO V. escena 2 página reo

HAMLET (cont.)
iQr¡é ruido de guerra. es ese?
OSRTC
El joven Fortirnbras, qlre regresa victorioso de conquistar Polonia,
sah¡da con esa desca-rga a los ernba,jadores de Inglaterra.
HAMLET
Ah, Horacio, ya rrrtlero. Este potente veneno rne nr-rbla la. razón.
¡Vaya, no viviré p¿rra. escu.ctrar las noticias de Inglaterra! Y supongo
qlre elegirán por rey... al joven Fortirnbra.s. DaIe tú rni voto
rnoribundo. Díselo a.sÍ, con los sucesos, rnás o rnenos, que han
causa.do todo esto. El resto... es silencio.
HORACIO
Aquí se rorrape r¡n noble corazó¡r'.
Buenas rroches, dtrlce príncipe,
y qrre bandadas de ángeles
te lleven arfl-úIándote a ttr desca.nso.

[Se esctrcha una rnarcha, adentro]


HORACIO
¿Por qrré viene aquí el tarnbor?
[Entran ForLirnbras y los ernbaja.dores de Inglater.ra, con ta.rnbores, ba.nd.eras y
serwidores]
FORTIMBRAS
I ¿Dóncle está este espectáculo? :

HORACIO
iQr¡é quieres presenciar? Si es algg para llenarte de asornbro y de
arra-rgura., no busqtres rnás.
F'ORTIMBRAS
Esos cadáveres hablan de rnatanza. ¿Por qrré la rnr:erte tra. cegado
las widas de tantos not¡Ies a t.tra rnisrno tiernpo?
EMBAJADOR DE INGI-ATERRA
Horril¡le cr:adro. Nuestras noticia.s de Ingla.terra llegan dernasiado
tarde. Ya no e><iste qrrien debía recibirlas. Rosencrantz y
Guildenstern han rnl¡.erto. ¿Quién nos 1o tra.brá de agradecer?
HORACIO
Esa boca no, aunqtle trrviera vida- para Lracerlo,
.t

Shakespeare / Aleería HAMLET ACTO V. escena 2 - página r: r

que el Rey nr:nca dio orden para rnatarlos.


Pero yo le Lrabla.ré a-l rrrrndo, todavÍa ignorante,
' de córno sr¡cedió todo 1o visto;
escr¡charéis historias de a-ctos cárnales,
sa-ngrientos y rnon strLrosos,
de dedr:cciones falsas, rntrertes casr:ales,
de asesinatos inducidos por la astucia y la. violencia- y,
a-l ñn, de rnaqrrinaciones fallidas
que recayeron en sr.ls propios inventores.
Todo esto yo podré rnuy ñelrnente relataros.
FORTIMBRAS
Qtriero esctrctrarlo pronto. En cuanto a rni persona, corf dolor
a.brazo rni suerte. Tengo derechos rnuy antigrros sobre esta nación
de Dinarnarca qrre ahora reclamaré, haciendo r¡so de esta ocasión.
No pr:edo negarrne a ella..
HORACIO
De eso tarnbién yo pr:edo trablar para daros el voto de Harnlet, y ese
voto arrastrará tras de sÍ a. muchos rnás. Pero ha.gárnoslo pronto,
para caknar la"s rnentes de los hornbres, qu.e está:r enardecidas, no
sea- qu.e, por error o por intrigas, sobrevengarl. nLlevas y rnás fuertes
rnaquinaciones.

Que cinco ca.pita.nes lleven a Harnlet, corno un soldado, al ti¡rnulo


rnortuorio. Porqtre hubiera sido r:n buen rey de haber reinado. Y
que se Ie hagan los ritos de r¡n gLrerre{o. Llévense los cadáveres.
Este especüáctrlo es rnás propio de un carnpo de ba.talla qr:e de un
palacio. Vayan, y c:rle los ca.ñones disparen.
[Marcha rnorturoria. Mutis, llevando los cadáveres. Después de 1o cua-l sr¡ena
una descarga de artillerÍal
FIN DE LA TRAGEDIA
Miraflores, rrrayo de 1975
Barranco, 30 de enero de 1995
Miraflores, 29 de agosto de L999

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