Variedades Lingüísticas
Variedades Lingüísticas
Variedades Lingüísticas
VARIEDADES LINGÜÍSTICAS
Las distintas formas de hablar una lengua pueden agruparse, de acuerdo con sus
semejanzas, en variedades lingüísticas tales como las variedades geográficas, sociales,
situacionales y adquisicionales.
Las variedades geográficas o regionales están referidas a las formas de hablar según el
lugar o la región donde se viven. Así, hay un castellano colombiano, mexicano,
peruano, etc. A la vez, dentro de cada uno de estos países, encontramos variedades
regionales, particulares. En el Perú el castellano que se habla en Piura es distinto al de la
selva o de la sierra.
Las variedades sociales se consideran propias de los grupos que viven en una
determinada región. Así, por ejemplo, si examinamos el caso de Piura, encontramos que
los jóvenes piuranos no hablan como los adultos, ni estos como los ancianos; es decir,
que cada grupo maneja una variedad social particular.
Ahora bien, los miembros de los grupos sociales también varían su forma de hablar
según la situación comunicativa. Es decir, según con quien están, donde están. En
efecto, hablamos de manera diferente cuando estamos con amigos o con una persona
que recién conocemos, o hablamos diferente si estamos en una fiesta o si estamos en un
salón de clases. Cada una de estas maneras de hablar de acuerdo con la situación
comunicativa recibe el nombre de variedad situacional o registro.
2. DISCRIMINACIÓN LINGÜÍSTICA
Existe una variedad de castellano que no se adquiere de manera espontánea, como las
otras, sino que se aprende en la escuela junto con el acceso a la lengua escrita. Esta
INSTITUCIÓN EDUCATIVA JEC “CALLANCAS”
“AÑO DEL DIALOGO Y LA RECONCILIACIÓN NACIONAL”
Sin embargo, la escuela no suele distinguir los diferentes usos que se puede dar a una
lengua y ha promovido a la variedad estándar como la única “correcta”. Las
calificaciones “correctas” o “incorrectas”, sin embargo, no expresan propiedades
naturales de una lengua, sino valoraciones que algunas personas les atribuyen. Desde el
punto de vista de la lingüística, no hay ningún sustento que indique que una lengua sea
mejor que otra o que una variedad sea mejor que otra. El valor de una lengua y sus
variedades está en el hecho de que sirven para comunicarse. Por lo tanto, la idea de que
la variedad estándar sea la correcta es un prejuicio social sin mayor fundamento
científico. Más bien, este prejuicio ha hecho creer a la gente que su habla espontanea es
un “mal castellano”, que refleja su “falta de cultura”, y que la única forma de “hablar
bien” es dominando los rasgos lingüísticos propios de la variedad estándar.
Ahora bien, ¿Qué podemos hacer para revertir esta situación? Si la consideración de
ciertas variedades como correctas o incorrectas refleja un prejuicio social y no existe
ningún problema lingüístico con ellas, ¿cómo podemos revalorizar los diferentes
castellanos del Perú? en primer lugar, debemos considerar valiosas a todas las
variedades lingüísticas, porque todas permiten comunicarnos. En segundo, lugar
aprendamos a usar las variedades según nuestras necesidades. Por ejemplo, si tengo
que realizar una exposición en clase utilizaré la variedad estándar; si conversamos con
nuestros amigos, el lenguaje con el que solemos hablar con ellos; y así, según sea el
caso.