Historia de La Industria

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 5

HISTORIA DE LA INDUSTRIA

Desde el origen del ser humano, este ha tenido la necesidad de transformar los
elementos de la naturaleza para poder aprovecharse de ellos, en sentido estricto ya
existía la industria, pero a finales del siglo XVIII, y durante el siglo XIX, cuando el
proceso de transformación de los recursos de la naturaleza sufre un cambio radical,
que se conoce como revolución industrial.

Este cambio se basa en la disminución del tiempo de trabajo necesario para


transformar un recurso en un producto útil, gracias a la utilización de un modo de
producción capitalista, que pretende la consecución de un beneficio aumentando
los ingresos y disminuyendo los gastos. Con la revolución industrial el capitalismo
adquiere una nueva dimensión, y la transformación de la naturaleza alcanza límites
insospechados hasta entonces.

La industria fue el sector motor de la economía desde el siglo XIX y, hasta la


Segunda Guerra Mundial, la industria era el sector económico que más aportaba al
Producto Interior Bruto (PIB), y el que más mano de obra ocupaba. Desde entonces,
y con el aumento de la productividad por la mejora de las máquinas y el desarrollo
de los servicios, ha pasado a un segundo término. Sin embargo, continúa siendo
esencial, puesto que no puede haber servicios sin desarrollo industrial.

El capital de inversión en Europa procede de la acumulación de riqueza en la


agricultura. El capital agrícola se invertirá en la industria y en los medios de
transporte necesarios para poner en el mercado los productos elaborados.

En principio los productos industriales aumentan la productividad de la tierra, con lo


que se disminuye fuerza de trabajo para la industria y se obtienen productos
agrícolas excedentarios para alimentar a una creciente población urbana, que no
vive del campo. La agricultura, pues, proporciona a la industria capitales, fuerza de
trabajo y mercancías. Todo ello es una condición necesaria para el desarrollo de la
revolución industrial.
Gracias a la revolución industrial las regiones se pueden especializar, sobre todo
debido a la creación de medios de transporte eficaces, en un mercado nacional y
otro mercado internacional, lo más libre posible de trabas arancelarias y
burocráticas.

Una nueva estructura económica, y la destrucción de la sociedad tradicional,


garantizaron la disponibilidad de suficiente fuerza de trabajo asalariada y voluntaria.

En los países del Tercer Mundo, y en algunos países de industrialización tardía, el


capital lo proporciona la inversión extranjera, que monta las infraestructuras
necesarias para extraer la riqueza y las plusvalías que genera la fuerza de trabajo;
sin liberar de las tareas agrícolas a la mano de obra necesaria, sino solo a la
imprescindible. En un principio hubo de recurrirse a la esclavitud para garantizar la
mano de obra. Pero el cambio de la estructura económica, y la destrucción de la
sociedad tradicional, garantizó la disponibilidad de suficientes capitales.

Tipos de industrias

Industria pesada: utiliza fábricas grandes en las que se trabaja con grandes
cantidades de materia prima y de energía.

Siderúrgicas: transforman el hierro en acero.

Metalúrgicas: trabajan con otros metales diferentes al hierro ya sea cobre, aluminio,
etc.

Cementeras: fabrican cemento y hormigón a partir de las rocas industriales.

Química ligera: producen ácidos, fertilizantes, explosivos, pinturas y otras


sustancias.

Petroquímicas: elabora plásticos y combustibles.

Automovilística: se encarga del diseño, desarrollo, fabricación, ensamblaje,


comercialización, reparación y venta de automóviles.

También podría gustarte