Interaccion Medicamentosa
Interaccion Medicamentosa
Interaccion Medicamentosa
De acuerdo con los mecanismos que pueden dar origen a una interacción, se pueden
clasificar:
1
f) Interacciones fármaco-tabaco.
a) Incompatibilidad de formas farmacéuticas
Se habla de formas farmacéuticas incompatibles cuando se asocian para su administración y
uno o varios de sus principios activos son inactivados entre sí. Las incompatibilidades son
importantes cuando se adicionan fármacos a los sistemas de infusión líquidos por vía
endovenosa. En todos los casos que sea posible se debe limitar el número de medicamentos
introducidos en una ampolla de perfusión para evitar interacciones. Existen algunas reglas
básicas:
- No se pueden asociar entre si fármacos ácidos o fármacos básicos, presentan el
riesgo de precipitar el fármaco menos ionizado.
- La asociación de compuestos ácidos y básicos tiene el riesgo de provocar la
formación de sales insolubles. Así la heparina, ácido ascórbico y diferentes penicilinas
reaccionan con sustancias básicas como fenotiazinas, bases xanticas formando
precipitados
- La asociación de sustancias proteicas o lipopeptidicas con sales minerales u
orgánicas esta desaconsejada por el riesgo de provocar la inactivación de los
primeros. Toda preparación de naturaleza proteínica debe ser administrada sola.
Además, en el caso de la insulina, se fija a los recipientes de vidrio, por lo que no
puede administrarse en infusión continua por vía intravenosa.
2
Las formas no ionizadas de los fármacos son liposolubles y se absorben por difusión pasiva.
El aumento o disminución de la concentración de fármaco absorbido va a repercutir de
manera importante en el efecto.
La modificación del pH gástrico afecta, por consiguiente, la absorción de fármacos. Los
antiácidos modifican el ph gástrico y modifican la absorción de agentes del tipo salicilatos
que son ácidos débiles, debido a que el cambio e ph facilita la ionización, lo que dificulta la
absorción. La quelacion o la combinación química resultante de la administración de dos
fármacos pueden también alterar la absorción.
Los fármacos que alteran el tránsito intestinal como los evacuantes intestinales, aceleran el
paso de los medicamentos en la luz intestinal dificultando su absorción, por lo contrario, los
astringentes lo retardan, facilitando en algunos casos la absorción
El flujo sanguíneo también influye, el alcohol es un agente que aumenta el flujo sanguíneo
gástrico y por ello aumento la absorción de la ASA a este nivel, aumentando la toxicidad de
ambos agentes sobre la mucosa gástrica.
La administración parenteral también puede salir interferida por fármacos vasodilatadores o
vasoconstrictores. La vasoconstricción producida por el tabaco puede reducir la absorción
intradérmica de la insulina
- Interferencia en los procesos de distribución
Tras la absorción, los fármacos son distribuidos a todo el organismo por medio de la sangre.
La llegada de los fármacos a los tejidos se encuentra asociada a factores complejos, a veces
poco conocido. Influye de manera importante el flujo sanguíneo en cada órgano o sistema, el
grado de unión del fármaco a las proteínas plasmáticas, fundamentales a la albumina, y la
naturaleza química de la molécula que requiere o no procesos relacionado con el transporte
activo a través de la membrana biológica. De especial relevancia es la capacidad del fármaco
para unirse a las proteínas plasmáticas, que son las que ejercen una mayor influencia en la
distribución por el organismo. El complejo fármaco-proteína plasmático es inactivo y guarda
equilibrio con el fármaco que circula libre y que es farmacológicamente activo.
Si dos o más fármacos se administran juntos, el que tenga mayor afinidad o este en mayor
concentración desplazara a otro de la molécula proteica soporte. Agentes anticoagulantes,
analgésicos pirazolonicos, salicilatos, fenamatos, oxicams, derivados del ácido propionico y
algunas benzodiacepinas poseen alta unión a proteínas plasmáticas, pudiendo desplazar a
otros fármacos.
3
El fármaco desplazado incrementa su concentración, con lo que el efecto aumentara
proporcionalmente. Por ejemplo, la administración de piroxicam puede incrementar 3 o 4
veces la concentración plasmática de la sulfamida libre en plasma, lo mismo ocurre con la
administración conjunta de anticoagulantes orales, antidiabéticos orales, antidepresivo
tricíclicos, metotrexato y fenitoina.
- Interferencia a nivel del metabolismo
Los fármacos, para facilitar su eliminación, van sufriendo una serie de procesos, metabólicos
con el fin de conseguir moléculas más liposolubles. Aunque el metabolismo puede tener
lugar en distintos tejidos, la mayoría de los fármacos se metabolizan en el hígado a través de
las oxidasas de oxidación mixta dependientes del citocromo P-450. El citocromo P-450 es
todo un grupo de isoenzimas responsables del metabolismo de muchos de los fármacos que
se prescriben con frecuencia. La isoforma más habitual es la 3 A 4, que representa el 60% de
las isoenzimas a nivel hepático y el 70% de las formas intestinales. Cuando se utilizan
concomitantemente dos fármacos que comparten la misma vía metabólica pueden aparecer
interacciones. En muchas ocasiones un fármaco estimula su propio metabolismo o el
metabolismo de otros, por lo que la eficacia terapéutica o la toxicidad pueden modificarse por
la acción de otro. La modificación de los efectos del fármaco puede producirse bien por
inducción de las enzimas metabolizadoras o por inhibición de las mismas:
Inducción enzimática. Existen una serie de fármacos que actúan a nivel del hepatocito
aumentando el tamaño y contenido enzimático del retículo endoplásmico. Cuando se
inducen las enzimas que metabolizan un fármaco, este es biotransformado más
rápidamente y disminuye su concentración plasmática.
Inhibición enzimática. Si un principio es eliminado principalmente por
biotransformación hepática, la inhibición o bloqueo de las enzimas implicadas en su
metabolismo prolonga la vida media y acumulación durante el tiempo que se estén
administrando los fármacos.
- Interferencia a nivel de los procesos de excreción
La excreción de fármacos tiene lugar fundamentalmente a través del riñón. El fármaco se
concentra una vez filtrado en los túbulos renales donde en función de su grado de ionización
va a ser de nuevo reabsorbido o bien excretado. El grado de ionización de muchos fármacos
depende del pH del medio en que se encuentran, por ello la alcalinización de la orina
favorece la eliminación de fármacos ácidos como ASA, sulfonamidas y barbitúricos y la
4
acidificación de la orina favorece la excreción de morfina, procaina, anfetaminas o quinidina,
etc.
Algunos fármacos atraviesan los túbulos renales con ayuda de moléculas transportadoras, un
fármaco puede competir con otras por esas moléculas transportadoras y modificar el proceso
de eliminación. La penicilina es antibiótico que se elimina por secreción tubular, cuando
estaba recién descubierta era un medicamento caro y de alguna manera había que evitar
que se eliminara, se recurrió al probenecid, agente que inhibe el transporte tubular de
penicilina. Igual ocurre con otros ácidos orgánicos que se excretan principalmente por
secreción tubular, se ven inhibidos en este mecanismo y permanecen más tiempo en plasma.
En la actualidad se utiliza este mecanismo de interacción de probenecid con azidotimida para
prolongar la vida media de este agente antirretroviral y los intervalos entre las dosis en el
tratamiento del SIDA.
La aspirina disminuye el aclaramiento renal de metrotexato (antineoplásico), pudiendo llegar
este último agente a niveles tóxicos e incrementar sus efectos depresores de la medula ósea.
c) Interacciones en la fase farmadinamica
Las interacciones fármacodinámicas son aquellas en los que los efectos de un fármaco se
ven alterados por la acción de otro fármaco en su lugar de acción. En ocasiones los fármacos
compiten directamente por determinados receptores. Ejemplos los agonistas beta 2,
salbutamol y agonistas de receptores beta adrenergicos, como el propanolol.
- Interacciones aditivas o sinérgicas
La administración conjunta de dos fármacos que pueden producir el mismo efecto
farmacológico, los efectos pueden ser aditivos. Los efectos aditivos pueden ser tanto los
principales de los fármacos como los adversos así puede producirse una interacción, como
ser los fármacos anticolinergicos antiparkinsonianos (efecto principal) con las butirofenonas
(efectos adversos colaterales) que pueden originar una grave toxicidad anticolinergica.
- Síndrome serotoninergico
En la década de los 50 se describió una reacción tóxica grave potencialmente mortal por
tratar a los pacientes con iproniazida (IMAO) además de la administración de petidina
(meperidina). Los síntomas característicos se producen en 3 áreas principales: alteraciones
del estado mental (agitación, confusión, estado maníaco) disfunción vegetativa (diaforesis,
diarrea, fiebre, escalofríos) y trastornos neuromusculares (Hiperreflexia, descoordinación,
temblores)
- Cambios en la motilidad gastrointestinal
5
La mayor parte de los fármacos se absorben en gran medida en la porción superior del
intestino delgado, los fármacos que afectan a la velocidad de vaciado gástrico también
pueden modificar su absorción.
- Inducción o inhibición de la unión a proteínas transportadoras
6
del sistema microsómico hepático que es el principal responsable de la metabolización de
muchos fármacos
. Sin embargo, por aplicación del principio de precaución, como normal general se puede
indicar que debe evitarse la ingesta conjunta de medicamentos con leche, café, té y
complementos de fibra y minerales.
Se han descrito numerosas interacciones atribuibles a determinados componentes bioactivos
de los alimentos, tales como algunas aminas biógenas (histamina y tiramina), ciertos
compuestos fenólicos (las furanocumarinas del zumo de pomelo y las isoflavonas de la soja),
el ácido glicirretínico del regaliz, la cafeína, la fibra alimentaria y, por descontado, el alcohol.
El uso combinado de plantas medicinales y medicamentos puede alterar la acción
terapéutica provocando desde una sobreexposición al fármaco (con riesgos toxicológicos)
hasta una pérdida significativa de su eficacia. Cuando aparece un efecto inesperado de un
fármaco, o una pérdida de eficacia del mismo, a pesar de que la dosificación sea la
adecuada, hay que pensar en la posibilidad de una interacción y no relacionarlo siempre con
una presunta idiosincrasia del individuo que presenta la respuesta anómala.
Para poder confirmar una interacción es necesario disponer de suficientes datos para que
puedan obtenerse conclusiones significativas, compensando posibles diferencias dietéticas y
de estilo de vida y también diferencias interindividuales que, obviamente, también existen.
Las experiencias con animales de laboratorio tienen un interés limitado, ya que su
alimentación y su cronobiología no son las mismas que las de los seres humanos.
En el caso de estudios de interacciones realizados con voluntarios humanos, hay que contar
con todos sus requerimientos técnicos y éticos. Es habitual que los datos procedan de
estudios clínicos con pocos individuos y quizás esta sea la causa de que no siempre los
resultados sean reproducibles en estudios posteriores. Sin embargo, al igual que en el caso
de las observaciones aisladas, son datos de interés que es conveniente tener en cuenta
porque en muchos casos son los únicos que hay.
“para muchos científicos y profesionales del ámbito de la salud, el conocimiento de las
interacciones entre fármacos y alimentos ha llegado a ser una responsabilidad”.
Tipos de interacciones entre alimentos y medicamentos
Las interacciones entre alimentos y medicamentos pueden clasificarse en función de cuál de
ambos sustratos es el que ve modificada su función por la presencia del otro
• Interacciones alimento-medicamento (IAM): la alimentación, los alimentos, o sus
componentes, naturales o adicionados, pueden hacer variar la biodisponibilidad o el
7
comportamiento farmacocinética si se afectan los procesos de absorción, distribución,
metabolización y excreción o farmacodinámico si se afecta directamente la acción
farmacológica.
• Interacciones medicamento-alimento (IMA): los medicamentos pueden modificar la
absorción, utilización metabólica y eliminación de los nutrientes y afectar al estado
nutricional.
e) Interacciones Fármaco-tabaco
No se han realizado estudios sistemáticos sobre las interacciones entre la nicotina y otros
medicamentos administrados simultáneamente. Los procesos metabólicos en el hígado
principalmente se estimulan por los productos de combustión del tabaco y no por la nicotina.
El humo de tabaco induce las enzimas del citocromo P450 CYP1A1, CYP1A2 y posiblemente
CYP2E1 Los fumadores, por lo tanto, metabolizan varios medicamentos más rápidamente, y
lo contrario de esta situación es que durante el abandono del hábito de fumar se puede
8
aumentar la actividad de los fármacos en cuestión porque ahora se metabolizan más
lentamente.
“Sobredosis”, por este fenómeno, han sido descritos para teofilina, imipramina, haloperidol,
tacrina, cafeína, fenacetina, fenilbutazona, estradiol y pentazocina. La absorción de insulina
dada por inyección subcutánea también se reduce al fumar, con el resultado mayores dosis
son requeridas en fumadores. Después de dejar de fumar, este proceso se invierte
(reducción de la dosis de insulina). Del mismo modo, debido a que se sabe que fumar
aumenta la secreción de catecolaminas, las dosis más altas de bloqueadores de los
receptores b requeridos en los fumadores pueden necesitar reducirse después de dejar de
fumar. La clozapina, un fármaco neuroléptico usado en medicina psiquiátrica, reduce el
metabolismo de la nicotina (Haustein, K. Groneberg, D. 2010).
El humo del tabaco contiene varios hidrocarburos aromáticos policíclicos. (PAHs) que son
inductores potentes de CYP1A1, CYP1A2 y en menor medida CYP2E1. Los HAP también
pueden inducir glucuronoconjugación.
• Aunque el CYP1A1 no es importante para el metabolismo de los fármacos, varios de
los medicamentos son sustratos de CYP1A2.
El metabolismo de estas drogas puede ser inducido por el humo del tabaco,
potencialmente resultando en un mayor aclaramiento de la droga y consecuencias
clínicamente significativas como la reducción en los efectos. Los fumadores pueden
requerir dosis más altas de estos medicamentos.
• Los HAP causan estas interacciones farmacocinéticas con los medicamentos, no la
nicotina. Por lo tanto, la terapia de reemplazo de nicotina (TRN) no causará estos
efectos
• El humo del tabaco y la NRT están implicados en varias interacciones
farmacodinámicas farmacológicas. La nicotina puede tener un efecto alerta,
contrarrestando así la acción de otras drogas.
• El prescriptor debe considerar una reducción de dosis de medicamentos si se
metabolizan por CYP1A2, si un paciente deja de fumar. Del mismo modo, las dosis de
ansiolíticos e hipnóticos deben revisarse, a menos que la TRN sea iniciada. Si un
paciente comienza a fumar, se metabolizan dosis de drogas por CYP1A2 puede
necesitar un aumento mientras que las dosis de ansiolíticos y los hipnóticos pueden
necesitar revisión (Dickman, A. 2012).
f) Interacciones fármaco-alcohol
9
El etanol puede interactuar con otros fármacos de cuatro maneras distintas:
Producir acción farmacológica aditiva, por lo tanto, depresión del SNC.
Inducir una tolerancia cruzada con otros fármacos, especialmente después del uso
crónico.
Una lista de medicamentos que pueden interactuar con alcohol se presenta en la siguiente
tabla
FARMACOS EFECTO EN LA ADMINISTRACION SIMULTÁNEA
ANTICOAGULANTES Aumento de la probabilidad de sangrado
ANTICONVULSIVOS Disminución de la efectividad anticonvulsiva
ANTIDEPRESIVOS Disminución de la actividad antidepresiva y elevación de la
presión sanguínea.
ANTIHISTAMINICOS Incremento de la somnolencia.
ANTIHIPERTENSIVOS Aumento de la presión arterial
DIURETICOS Aumento de la hipotensión y diuresis
ESTIMULANTES DEL SNC Efecto estimulante reducido
Referencias Bibliográficas
Herrera, J. (2003). Manual de farmacia clínica y atención farmacéutica. Elsevier.
Madrid: España. Pp:263-282
Vidal, C (2012). Interacción entre alimentos y fármacos. Disponible en :
https://www.kelloggsnutrition.com Fecha de consulta : 16/03/2019
Gomez. A (2001). Alimentos medicamento interacciones. Disponible en :
http://www.elsevier.es fecha de consulta : 16/03/2019
Samano. M (2011).Interacción alimento/medicamento. Disponible en .
www.mscbs.gob.es fecha de consulta : 16/03/2019
Zamora . e (2018). Interacción entre alimentos y fármacos disponible en
:https://www.edruida.com fecha de consulta : 16/03/2019
Barar, F. (2015). Essentials of Pharmacotherapeutics. 7º Ed. S. CHAND PUBLISHING.
New Dehly. India. Pp: 72
10
Dickman, A. (2012).Drugs in Palliative Care. 2º Ed. Oxford Medical Publications.
Gread Britain. Pp:16
Haustein, K. Groneberg, D. (2010). Tobacco or Health?. 2º Ed. Springer Heidelberg
Dordrecht London New York. Pp: 324-325
11