Derechos Humanos
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Derechos Humanos
En este Módulo se revisa el papel de las maestras y los maestros en la escuela, así como su
vinculación con las familias y la comunidad. Se resalta la importancia de que, sin importar
las condiciones de trabajo que prevalecen en los diferentes servicios educativos, las
maestras, los maestros, las familias y la comunidad constituyen un apoyo para favorecer el
máximo logro de aprendizaje en los alumnos.
El Módulo introduce la reflexión sobre la importancia de que las maestras y los maestros
noveles se integren al trabajo de la escuela como parte del colectivo docente, conozcan a
sus colegas, así como la forma en que se organiza y funciona la escuela. Pone énfasis en la
relevancia del trabajo colegiado, el diálogo y la reflexión sobre la práctica como elementos
fundamentales para la mejora del quehacer docente y la construcción de una cultura de
cambio en la escuela.
Asimismo, aborda la relevancia de lograr una vinculación, pertinente y oportuna, con las
familias y la comunidad para favorecer el aprendizaje de todos los alumnos.
Finalmente, incluye el análisis de desafíos que plantea la nueva escuela mexicana para
ofrecer un servicio educativo con inclusión, equidad y excelencia.
PROPÓSITO
Que las y los participantes reconozcan que las maestras y los maestros son parte de un
colectivo docente que incide, con la participación de las familias y la comunidad, en la
formación integral de todos los alumnos.
Se espera que las y los participantes identifiquen algunos retos que pueden enfrentar en su
incorporación a una escuela, al ser parte de un colectivo docente y de una comunidad
escolar, así como las estrategias que ayudaron a otras maestras y maestros en el trabajo
con sus colegas, el apoyo que recibieron y buscaron de ellos y de los directores o
supervisores de zona escolar.
Propósito
Que las y los participantes identifiquen los retos que enfrentan las maestras y los maestros
al integrarse a una escuela, trabajar con las familias y con la comunidad.
ACTIVIDAD 1.1
En primer lugar el primer día de clases define como te tomaran los alumnos durante toda tu
estadía en la escuela. Los alumnos son muy receptivos al saber que eres nueva y que pueden
intimidarte ya que llegas a su ambiente por eso me gustaría tener un carácter estable y que
mantenga durante todo el día. Las emociones pues son de nervios, emoción, curiosidad y
felicidad. Las inquietudes sería conocer a mis compañeros docentes, al área administrativa y
todo el personal escolar; tratar de entablar una conversación amable.
ACTIVIDAD 1.2
Observa el video, “Los inicios del maestro. Escuela de maestros” (Min. 0 a 1:25), en el que
varios maestros comparten las sensaciones de sus primeros días en la escuela, al tiempo
que muestran diversas situaciones que ellos enfrentan en su trabajo cotidiano.
Enseguida lee tres relatos de maestras y maestros mexicanos acerca de sus experiencias en
el quehacer docente. Toma notas sobre las experiencias positivas o retos que
experimentaron las maestras o maestros. Escríbelas en un procesador de textos.
-Me bloqueaba, no pensaba bien cómo sería mi primer día, sólo pensaba en saludar y
después me quedaba en blanco.
-El primer impacto y contacto con el aula no es fácil, hay muchas cuestiones que uno no
puede anticipar, el shock de la realidad cuesta.
-Uno de los miedos es que hayas preparado una clase que piensas que está muy bien pero
realmente hasta que no empiezas no sabes lo que va a pasar.
Relatos:
[…]
En los primeros días sentía algo de temor llegar a la escuela, pero con base en la
orientación de mis compañeros maestros fui aprendiendo a elaborar “mi preparación de
clases”, a preparar material didáctico y demás documentación que era requisito presentar.
Hoy en día que miro hacia el pasado, pondero honrosamente la organización de los Centros
de Cooperación Pedagógica, que eran reuniones con todos los maestros, hasta de una
semana, preparados y dirigidos por el Inspector de la Zona. Estos Centros de Cooperación
Pedagógica fueron mi tabla de salvación; en ellos aprendí mucho; porque se presentaban
modelos de clase, se hablaba de métodos, técnicas y procedimientos como experiencias que
se habían tenido y con buenos resultados; se exponía cómo enseñar la gramática, la
aritmética, la geometría, la geografía, la historia y el civismo principalmente; se montaba
una exposición de trabajos manuales que nos servían de ejemplo para llevar a nuestras
escuelas; se organizaba cada día por las tardes una hora social que se ofrecía a la
comunidad que nos recibía y con ello aprendíamos coros, bailables, comedias y poesías. […]
En la Escuela Evolución y Trabajo del Gral. Rafael Buelna, trabajé como docente los años
más fructíferos de mi desempeño magisterial, nada menos que 15 años, o sea hasta 1971.
Tengo los más elocuentes recuerdos laborales de ese tiempo, con alumnos muy destacados,
muy entregados a su formación, con padres de familia que constituidos en asociación me
apoyaron en todo lo que fue posible, con compañeros maestros que dentro de nuestras
diferencias profesionales siempre trabajamos unidos.
Claro que no todo fue de maravillas, también tuve situaciones difíciles. Viene a mi mente
cuando en los libros de texto venía por primera vez el estudio biológico de la reproducción
humana, y, en ese entonces hablar del sexo en la escuela era tabú como también lo era en
la gran mayoría de los hogares. Así es que tocar este tema tuvo sus consecuencias, pues en
varias casas los papás les arrancaron las hojas a los libros donde venía ese estudio y, no
me escapé que una madre de familia llegara hasta la ventana del salón de clases y delante
de todo el grupo me insultara y me tratara de corruptor de menores. Consideré prudente
acudir al médico de la clínica […] para pedir su intervención con algunas conferencias a los
padres de familia y, estas pláticas nos ayudaron muchísimo y no volvió a presentarse
ningún otro incidente al respecto.
[…]
Recuerdo bien mi primer día de clases, cuando la directora de la escuela, […] me presentó
al grupo que me asignó, total 45 alumnos de tercer y cuarto grados; luego se salió y me
dejó ahí parado frente a ellos, quienes sentaditos y cruzados de brazos, me miraban con
expectación, en espera de lo que iba a decir. Pero la verdad fue que en ese momento
desperté de mi indolente ignorancia y, me quedé callado unos minutos sin poder
pronunciar palabra. En mi mente se agolparon los reclamos de mi incapacidad que me
llevaron a reflexionar: ¿qué voy a hacer?, ¿cómo empezar?, ¿qué voy a enseñar? Y hasta
ganas me dieron de llorar. Comencé a hablar, me imagino que, sin ilación, pero había que
hacer algo y solo se me ocurrió iniciar como a mí me habían enseñado.
Relato 2. "¿Cómo llegué a ser maestra?".
[…]
La formación
En los setenta la escuela tradicional y la tecnología educativa tenían sentados sus reales,
los materiales didácticos eran productos casi artesanales, la formalidad y el rigor eran
parte de la vida del normalista. Nos enseñaron que seríamos profesores, y que en los
recreos teníamos que convivir con los alumnos, por lo que entre nuestros compromisos de
estudiantes estaba aprender a jugar rayuela, balero, canicas, trompo, “bebeleche”,...
[…]
El discurso nos dibujaba en la mente la imagen de ese maestro líder social, formal, sabedor
de todo un poco, consultor y autoridad de la comunidad. El “deber ser” estaba en cada
clase, en cada libro y cada trabajo, aunque los primeros descalabros los viví en la práctica,
donde los “niños” de este Valle de Mexicali eran en ocasiones más grandes y más altos que
yo; donde encontrábamos grupos de cincuenta alumnos que no coincidían con la teoría del
manejo de grupos; donde los pequeños no tenían suficientes libros de texto, sus salones
eran pequeños y muchos de ellos presentaban marcado rezago en su nivel de conocimiento;
donde mi hoja de ejercicios tenía un caballo y el niño escribía “coaco” o una gallina y él
escribía “coquena”.
El ejercicio
El siguiente peldaño dejó marca, una huella profunda de conciencia. Hoy entre las pláticas
los compañeros de generación recuerdan sus peripecias en otros lugares, algunos de ellos
con situaciones que jamás hubieran podido imaginar. Reviven las comunidades a las que
tenían que llegar en avioneta y mula, otras que les trajeron problemas con los caciques y
terratenientes, algunas más que vivían al amparo de supersticiones, brujerías y conjuros, o
donde el reto era aprender a comer la carne de los animales que allí había en la época que
la nieve les llegaba casi a las rodillas.
Para mí la realidad fue mucho más cercana, era el Valle, en el que me vi primero como “la
profe”, “la seño”, “la maestra”, cuando apenas rayaba los 18. Se aprende con el primer
“buenas taaardes” de 40 niños de 5º que ya no son de práctica sino todos tuyos, tu
responsabilidad, y 80 padres que en su mayoría se sostienen de un jornal y necesitan
muchas veces de la fuerza de trabajo de los hijos. El salón se llenaba de olores de
temporada y campo: a veces calabaza, otro cebollín, brócoli y más. Sin embargo, había una
paz que la ciudad no da.
Las siguientes páginas las escribieron grupos en zonas marginadas y periféricas de la ciu-
dad, que carecían de lo principal: confianza en los demás. Los pleitos de pandillas eran
comunes, las enfermedades por desnutrición y desaseo también. Las familias
disfuncionales y aquellas que dependían de braceros constituían el entorno de esa
comunidad que me dejó un enorme aprendizaje sobre lo que, como maestros, podemos, si
queremos, modificar.
Manuel Michaus dijo alguna vez entre otras cosas “no cunde una labor sin alegría, debe
traer al aula el que es maestro, un entusiasmo nuevo cada día”. Y así es, pero debemos
entonces de preguntarnos si realmente es la docencia y la educación a lo que queremos
dedicar el resto de nuestra vida. Porque cuesta mucho proponer o hacer cuando las voces
dicen “para qué”, “esto no tiene remedio”. Y te mueve la vida el conseguir un par de zapatos
nuevos que un niño no quiere usarlos, que todos los días los saca de la caja y los limpia,
porque no quiere que se le hagan viejos.
[…]
La experiencia
Se debe decir sí, acepto, cuando tenemos vocación o la convicción de que educar es
trascendente. El compromiso temporal o la conveniencia no son lo que nuestros hijos
necesitan.
[…]
Relato 3. "La Escuela Unitaria".
In memorian
[…]
La escuela a la que refiere este trabajo es unitaria, ubicada en el medio rural de clima
cálido, con una población de 153 habitantes dedicados al cultivo de la papaya.
Con una idea más cercana a lo que era la comunidad de entonces y las características
profesionales propias, el reto no parecía fácil: la construcción del sujeto maestro y la
construcción cotidiana de la institución a partir de las acciones de todos los actores.
Poco tiempo tardé en darme cuenta que el trabajo del maestro no se compone únicamente
de la tarea de enseñar, sino que para legitimar a la escuela ante la comunidad (Aguilar,
1996) es necesario realizar mucho trabajo extraenseñanza.
De esta manera, para que niños y niñas no matriculados asistieran a la escuela los padres
esperaron a que la organización escolar legitimara su existencia. Fue así como de haber 15
niños de primero a tercer grado la matrícula se incrementó hasta 33 de todos los grados:
11 de primero, seis de segundo, ocho de tercero, cuatro de cuarto, dos de quinto y dos de
sexto. Otro reto que representaba un problema lo constituyó la organización del tiempo,
espacio y recursos didácticos que eran necesarios para poder atender a todos los grados
simultáneamente.
A manera de resumen mencionaré que las actividades que los alumnos estaban
acostumbrados a realizar eran la copia de lecciones o la resolución de cuentas de cualquier
tipo, mientras la maestra enseñaba con el método silábico a leer y escribir a los niños de
primero.
La realidad es que ninguno de los niños de primero a tercer grado sabían leer, y eso de
hacer cuentas tampoco se les daba muy bien porque a la maestra no le alcanzaba el tiempo
para revisar el producto de cada niño y menos hacer confrontación de resultados.
La escuela unitaria
No tengo como propósito el describir el proceso que se llevó a cabo para lograr el resultado
después de tres años de trabajo, por lo cual me limitaré solo a citar el resultado alcanzado
en cuanto a los siguientes tópicos: organización del tiempo, del espacio y utilización de los
recursos didácticos.
El espacio
La escuela contaba con dos salones, en uno de los cuales se realizaban las actividades
escolares porque estaba totalmente terminado; el otro carecía de ventanas y puertas.
La organización del espacio fue modificándose con el tiempo hasta llegar a definir algunas
situaciones que funcionaban en cualquier circunstancia: cada uno de los grados formaba
un grupo de trabajo, por ejemplo, los niños y niñas de primer grado, uno; las y los de
tercero, otro, etcétera. Cada uno estaba dispuesto con el frente hacia alguna de las cuatro
paredes del aula, de tal manera que no se interrumpieran las actividades de un grupo
cuando había trabajo colectivo o explicación del maestro.
Alrededor, colocados hacia las paredes, estaban ubicados los rincones de matemáticas y
español, el museo de historia, el laboratorio, el lugar de las noticias, el tendedero
pedagógico, etcétera.
Los espacios fueron definidos por todos en las asambleas escolares: desde el lugar en don-
de se colocaría cada área, hasta lo que debiera colocarse en ellas.
El tiempo
El tiempo es el elemento social que influye más directamente en el trabajo docente, tiene
una dimensión fundamental a través de la cual el trabajo del profesor es construido o
interpretado por él mismo (Salgueiro, 1998). El tiempo influyó determinantemente en el
modelo de enseñanza.
Si hablamos de un maestro con un solo grupo, sabemos que diariamente dedica de cuatro
a cinco horas a las labores propias de enseñanza y extraenseñanza de su grupo; pero, en
este caso, en una escuela unitaria completa, había que dedicarle las mismas cuatro horas
para atender los programas de seis grados. ¿Cómo organizar temporalmente en cuatro
horas lo que se planteaba para 24 horas diarias?
Después de probar varias opciones, la más productiva fue la que involucró a los alumnos
en su propio aprendizaje, esto se logró mediante las asambleas que se llevaban a cabo los
viernes al final de las jornadas y cuya descripción se hará en otro momento.
[…]
ACTIVIDAD 1.3
Responde las preguntas siguientes con base en las notas que tomaste en la Actividad 1.2.
Organiza las ideas principales en una tabla.
¿Qué aprendizajes o experiencias positivas tuvieron las maestras y los maestros de los
relatos, en relación con el trabajo junto a otros colegas y las familias, así como la vinculación
con la comunidad?
1. Tener un Consejo de maestro donde ellos aprendieran más, que les brindaron
modelos de clase, métodos, técnicas y procedimientos como experiencias que se
habían tenido y con buenos resultados; se exponía cómo enseñar la gramática, la
aritmética, la geometría, la geografía, la historia y el civismo.
2. Poder dialogar con la gente de la comunidad, además de conectar a la población con
otras instancias como salud, agua potable, luz etc; porque al llegar a una escuela
multigrado es un verdadero reto ya que la mayoría se encuentra en lugares
marginados y el pensamiento de las personas por la misma falta de educación es
muy cerrado.
3. Como maestros, podemos, si queremos, modificar.
4. No cunde una labor sin alegría, debe traer al aula el que es maestro, un entusiasmo
nuevo cada día
5. Sabemos si somos o no verdaderos maestros por el juicio certero de la sociedad a la
que servimos. Son ellos quienes valoran el desempeño y marca de nuestros pasos a lo
largo del camino.
6. Un maestro madura, no acumula; comparte y no guarda; construye, no ejerce la
crítica ácida; se cuestiona y nunca pierde la capacidad de asombro; aprovecha su
experiencia para hacer lo que antes no podía.
7. Se debe decir sí, acepto, cuando tenemos vocación o la convicción de que educar es
trascendente. El compromiso temporal o la conveniencia no son lo que nuestros hijos
necesitan
8. El trabajo del maestro no se compone únicamente de la tarea de enseñar, sino que
para legitimar a la escuela ante la comunidad (Aguilar, 1996) es necesario realizar
mucho trabajo extraenseñanza.
9. Consideraremos como trabajo extraenseñanza toda actividad que no implica la
transmisión de contenidos curriculares (Aguilar, 1996) y que resulta ser el sostén de
la existencia material y social de la escuela, por lo cual representa la infraestructura
real sobre la que se asienta la posibilidad de enseñar. Algunas actividades de este
tipo cumplen a la vez un papel educativo como queda expresado en el siguiente
párrafo.
10. Las principales tareas extraenseñanza a realizar fueron: la presentación a la
supervisión escolar de la documentación completa, tareas relacionadas con la
disciplina y el orden, inscripciones de alumnos, búsqueda de recursos económicos
para mejorar el aula y los recursos didácticos, demostraciones educativas, festivales
del Día de la Madre y clausura; también, limpieza diaria del edificio escolar, baños,
salón y patio; participación en concursos, confrontaciones, intercambios y la
olimpiada del conocimiento; reuniones con la sociedad de padres de familia;
campañas de vacunación, reforestación, etc.; servir de vínculo entre la comunidad y
el Programa Solidaridad para instalar el agua potable, entre otras.
¿Qué retos enfrentaron las maestras y los maestros en los diferentes contextos,
relacionados con el trabajo junto a otros colegas y las familias, así como la vinculación con
la comunidad?
Utiliza la lista de cotejo para verificar que estén contenidos todos los criterios solicitados en
la tabla.
De acuerdo con algunos autores “el ingreso y los primeros días en la nueva escuela son
determinantes para el nuevo docente porque condicionan muchas de sus conductas
posteriores. Este hecho es muy importante en el caso de los noveles en la profesión, pues
experimentan el ‘choque con la realidad’. La forma en que se produce el ingreso y los
primeros contactos de los profesores nuevos con su trabajo y sus colegas influye
acelerando o demorando el periodo de integración al grupo y la adaptación a la escuela”.
(Antúnez, 2004)
Por ello, esta Lección promueve el análisis sobre la integración de las nuevas maestras y
maestros a la escuela, la importancia de conocer a los compañeros de trabajo y las ventajas
que esto representa para aprender y mejorar las prácticas.
Finalmente, se propone revisar lo que significa el aprendizaje entre pares, como un medio
para la mejora continua del trabajo escolar, a través del cual se favorece el diálogo
informado entre las maestras y los maestros, se comparten logros y dificultades, así como
los retos pedagógicos enfrentados y la manera como han sido atendidos, de modo que al
escucharse, discutir, analizar y reflexionar en torno a las experiencias compartidas, todos
puedan hacerse de nuevas herramientas que favorezcan la enseñanza y el aprendizaje de
los alumnos.
Propósitos
Actividad 2.1
Completa el cuadro donde identifiques aspectos del trabajo escolar que quisieras conocer y
las acciones que realizarías para lograrlo.
Actividad 2.2
A partir de los fragmentos revisados, elabora un mapa mental sobre las principales
contribuciones que los maestros expresan sobre el intercambio de experiencias del trabajo
educativo con otros colegas.
(SELECCIÓN DE FRAGMENTOS)
Fragmento 1
“El comentario más general sobre las ventanas que abre el mejoramiento de la práctica es
el acceso a la experticia de otros: ‘yo he tomado experiencias positivas exitosas de
algunas compañeras y las he puesto en práctica y me dan buenos resultados’ (Ent6_Esc1)’.
‘Escucho cómo da la clase mi compañero para ver qué le puedo aprender para dar mi clase
o, al contrario, si yo le puedo aportar a él. Es enriquecernos entre los dos’ (Ent7_Esc1)”.
Fragmento 2
“El Consejo Técnico Escolar (CTE) ha abierto la posibilidad de una mayor comunicación
entre el personal docente de la escuela, como afirma una de las profesoras: ‘antes no
teníamos mucha comunicación los maestros. Ahora creo que el Consejo nos ha servido
para comunicarnos un poquito más’ (Ent7_Esc1); ‘años atrás que no teníamos Consejo
Técnico, no había oportunidad nunca de intercambiar ideas y mucho menos de ver
la problemática en conjunto’ (Ent7_Esc1). Este trabajo de equipo redunda en una mejor
atención a los estudiantes: ‘yo creo que los alumnos sí se sienten más atendidos,
observados; […]. Desde el momento en que se hacen las cosas en equipo, creo que puedes
abarcar un poquito más y en este caso sientoque sí estamos reforzados en
atender más a los alumnos’ (Ent6_ Esc2); ‘antes cada quién jalaba por su lado’
(Ent5_Esc1).”
Fragmento 3
“En nuestra escuela los maestros nos apoyamos mucho en cuestión de saber otras
estrategias. Qué estrategia me puede ayudar que a otro compañero le pudo haber servido
para yo implementarla y tener mejores resultados con los alumnos, verdad. Y pienso que
eso ha sido un apoyo, una retroalimentación para nosotros, este ayudarnos con nuevas
estrategias para que haya un avance significativo en los muchachos. Estamos trabajando
ahorita mucho con los niños con rezago y al estar viendo resultados de los compañeros y
vemos niños que han tenido un avance significativo y hay niños que no lo han tenido, que
han tenido un pequeño avance solamente, pero también eso es falta del apoyo de los padres
de familia.
—Ahorita que entré la vi trabajando con monitores. ¿Esto es algo que usted ya hacía?
—No, no, no. Es algo que empecé a trabajar porque los compañeros estaban diciendo que
trabajar con monitores les había dado resultado, entonces empecé a trabajarlo y sí, sí me
ha dado resultado, lo único que veo es los niños al levantarse se inquietan mucho y se hace
un poco de desorden, pero no, ya me estoy acostumbrando y a los niños les encanta apoyar
y los niños saben que no tienen que dar respuestas sino ayudar a que el niño piense . Pero
sí, me ha dado resultados el trabajo con monitores (EM4A)”.
Fragmento 4
“Un aspecto interesante de lo que ocurre en el CTE es que ayuda a los profesores a dar
sentido a ciertas prácticas: ‘cuando se empezó a implementar el CTE, muchos compañeros
vimos que la planeación era importante porque nos iba a ayudar en el aula a mejorar la
atención a los grupos y centrar lo que se estaba haciendo en el temario de la materia. Así
que, cuando siguió esa parte de que la planeación era una parte importante, se disparó,
haz de cuenta que la mayoría de las personas empezó a entregar sus planeaciones y se
empezó a centrar más el trabajo académico en ese sentido’. (Ent4_Esc2)”.
Cuando estaba trabajando en una guardería teníamos un sistema de rotación cada tres
meses, mudábamos de sala, atendíamos a niños de 43 días de nacidos hasta 4 años, así era
difícil adaptarse y cuando una se adaptaba enseguida era movida de sala, así que era muy
pesado pero mediante la convivencia con las maestras y poder preguntar cómo distribuían el
tiempo, el espacio, qué más calmaba a los niños, y sobre todo, con los niños que tenían
rasgos que eran signos de maltrato o abuso, poníamos mucha atención y compartíamos sus
actitudes mientras nos reuníamos para saber la opinión de las demás. Nos apoyábamos en
la medida de lo posible. Lo que aprendí es a trabajar en equipo porque a pesar de estar en
salas distintas había maestras con mucho más experiencia que las demás.
Actividad 2.4
Lee el texto de Ana María Cerda e Isaura López “El grupo de aprendizaje entre pares: una
posibilidad de favorecer el cambio de las prácticas cotidianas de aula”, en el cual
identificarás algunos elementos sobre por qué el diálogo y el aprendizaje entre pares es
fundamental para la mejora de la práctica docente.
El saber docente existente en cada uno de los profesores y en sus comunidades educativas
ha estado “encerrado” entre las paredes del aula o en las estructuras institucionales. La
falta de espacios para analizarlo en profundidad y compartirlo ha sido una característica de
nuestro sistema educativo. Abrir este espacio significa iniciar conversaciones profesionales
que rescaten y reconstruyan el saber pedagógico acumulado.
El saber pedagógico
El oficio de enseñar tiene una larga tradición. Lleva siglos realizándose y aunque cambia en
cuanto a los individuos, contextos y épocas históricas, hay ciertos aspectos que se
mantienen. La constante más relevante se refiere a la capacidad para diseñar y organizar
“tareas” para que todos los alumnos y alumnas puedan aprender los conocimientos,
habilidades, competencias y actitudes que la sociedad ha legitimado como los válidos de
aprender.
Este oficio es social, porque es compartido por un grupo de sujetos que poseen una
formación común, trabajan en una misma institución, la escuela, y están sujetos a reglas
del juego comparables (marco curricular, planes, programas, normativas, etc.). Esto hace
que las representaciones o prácticas de cada profesor o profesora, adquieran sentido en
relación a esta situación colectiva en que realizan su trabajo. El saber profesional docente,
si bien es personal, tiene un fuerte componente social; es un saber legitimado socialmente
a través de ciertas estructuras y orientaciones que le permiten a cada profesor o profesora,
el ejercicio de la profesión.
La práctica docente
El hacer cotidiano que realiza el docente, en tanto práctica, lo entendemos como un hacer,
que tiene a la base concepciones, creencias, conocimientos implícitos y/o explícitos que es
necesario asumir lo más conscientemente posible para que se haga efectiva la
transformación de las prácticas docentes.
Procesos reflexivos
Entonces, se puede decir que el saber del oficio se puede transformar a partir del diálogo y
reflexión que realizan grupos de docentes acerca de su práctica cotidiana. Para que este
diálogo- reflexión sea efectivo, es decir, para que contribuya a cambiar percepciones y
conceptualizaciones es necesario que se realice en forma sistemática y que esté muy
apegado a la práctica cotidiana.
Una práctica recurrente en las escuelas es, por ejemplo, que los alumnos formen filas antes
de entrar a clases. Cuando los docentes plantean preguntas a propósito de esta acción, se
da inicio a un diálogo pedagógico y a una reflexión crítica de ese hacer. Las preguntas
pueden ser: ¿Cuánto tiempo toma esta actividad? ¿Con qué sentido se realiza esta acción?
¿Dónde se aprendió el valor de esta acción? ¿Cuándo y por qué se habrá instalado esta
práctica en el sistema escolar?
¿Qué estarán aprendiendo los alumnos con esta práctica: qué valores, qué actitudes? ¿Son
esos aprendizajes los que requieren los alumnos para insertarse al mundo?
Considerando que el saber del oficio de enseñar si bien tiene componentes teóricos, es
básicamente experiencial en el sentido que está relacionado con habilidades individuales, y
que además, es un trabajo que realiza el profesor en solitario frente a los alumnos, se hace
indispensable generar condiciones para que pueda ser analizado y debatido con otros. Es
relevante que los docentes puedan objetivar la propia práctica, lo cual no puede ser solo
producto del esfuerzo y la responsabilidad individual de los docentes, sino que de la
institucionalidad escolar en su conjunto. Para ello es necesario que se reconozca en el
discurso público la necesidad de tal diálogo y reflexión, ya que ello viabilizará que el saber
pedagógico del docente pueda ir reconstruyéndose a partir de las demandas que la sociedad
le hace a la educación.
La práctica docente puede ser analizada con distintos propósitos, desde distintos
paradigmas y enfoques, y por distintos especialistas. No obstante, si se desea analizar la
práctica para encontrar las claves o señales respecto de cómo enseñar para producir
aprendizajes en los alumnos, dicho análisis requiere de la concurrencia indispensable de
los propios profesores y profesoras, por cuanto son ellos y ellas quienes “tienen” el saber
pedagógico, ese saber hacer propio de la profesión, y a partir de la experiencia común que
comparten, pueden hacer análisis cualitativos que tengan directo impacto en el propio
quehacer profesional.
Esta actitud de apertura da cabida a un genuino análisis respecto de los por qué y los para
qué de la práctica profesional y permite crear las confianzas para buscar y probar
alternativas de acción conjunta. Por esto, los diálogos no pueden circunscribirse a las
experiencias exitosas; todas las experiencias merecen ser compartidas y analizadas entre
los docentes, pues de todas ellas es susceptible aprender, en tanto se dan en contextos
similares y abordan problemáticas comunes.
En los programas impulsados desde el CPEIP que privilegian el aprendizaje entre pares,
como Talleres Comunales, Pasantías Nacionales, Redes Pedagógicas, se ha podido apreciar
que cuando los propios grupos de docentes y la institucionalidad correspondiente en cada
caso crean condiciones para el trabajo grupal sistemático, se logra efectivamente que los
docentes expliciten sus ideas; se esfuercen por develar sus creencias y preconcepciones;
compartan las experiencias suspendiendo, en la medida de lo posible, los juicios de valor;
analicen diferentes enfoques pedagógicos, y lo más significativo, que experimenten y
evalúen nuevas formas de trabajo en el aula para generar mejores formas de enseñanza.
Si bien esta apuesta del aprendizaje entre pares ha estado presente en diversos programas
de formación continua en distintos períodos históricos, hoy se ha retomado como una
opción medular en aras de recuperar las confianzas perdidas producto de las vicisitudes
políticas por las que ha debido transitar el gremio docente. Antes, por el proceso de
municipalización y las secuelas que aún subsisten, y ahora, por las frecuentes críticas que
–simplificando la complejidad del fenómeno– reciben los profesores por los resultados de
aprendizaje de los alumnos. Todo ello, ha provocado en no pocos docentes, inseguridad,
frustración así como sentimientos de incomprensión y soledad.
Pero esta opción no solo es válida para que el profesorado pueda recuperar confianzas y el
sentido de su quehacer profesional; también es válida, y es lo más relevante, para producir
transformaciones en las prácticas de enseñanza acordes a las demandas que hoy la
sociedad le hace al sistema educativo. Para producir estas transformaciones, es importante
que los procesos reflexivos, antes señalados, sean apoyados por docentes más expertos (por
ejemplo, Profesores Guía, Maestros de Maestros) o por agentes externos, cuando se
requiera.
Brindar a los docentes la posibilidad de interactuar con sus pares para mejorar sus
competencias pedagógicas, es una orientación de política que apoya la credibilidad en los
procesos de actualización pedagógica y que potencia en el profesorado, la generación de
procesos de construcción conjunta respecto de cómo enseñar.
... un real y efectivo perfeccionamiento no se produce cuando uno asiste a una institución y
es ente presencial, sino que el verdadero perfeccionamiento se produce cuando se da a
conocer una necesidad y los involucrados se organizan, planifican, desarrollan actividades
y se asumen tareas y compromisos. En lo personal y profesional, para mí este ha sido el
mejor perfeccionamiento en el que he participado porque es mío, junto con mis colegas
aporté para que resultara, con la ayuda de ellos planificamos todo lo necesario para
mejorar nuestras prácticas pedagógicas y así poder lograr aprendizajes significativos en
nuestros alumnos.
Se puede transformar a partir del diálogo y reflexión que realizan grupos de docentes
acerca de su práctica cotidiana. Para que este diálogo- reflexión sea efectivo, es decir, para
que contribuya a cambiar percepciones y conceptualizaciones es necesario que se realice en
forma sistemática y que esté muy apegado a la práctica cotidiana.
¿Qué retos crees que pueden presentarse en los procesos de aprendizaje entre pares?
Utiliza la lista de cotejo para verificar que estén contenidos todos los criterios en la
elaboración de tu escrito.
En esta Lección, las y los participantes identificarán la importancia de que las maestras o
maestros se piensen como parte de una comunidad y se sientan integrantes de un colectivo
que tiene metas comunes relacionadas con el desarrollo integral de los alumnos y el
máximo logro de aprendizaje. En este sentido, la nueva escuela mexicana promueve un
trabajo pedagógico que no consiste en formar a un grupo de alumnos en igualdad de
condiciones, sino a individuos con características propias, resultado de vivir en contextos
distintos, con costumbres, formas de relacionarse y comunicarse diversas.
Se pretende que la Lección aporte a la comprensión sobre el papel de la maestra o el
maestro de educación básica en el cumplimiento y promoción de los derechos de los
alumnos, así como en procurar ambientes inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles, en
los cuales se fortalezcan los valores para una cultura de paz.
Asimismo, las y los participantes analizarán que la vinculación de las familias en el trabajo
educativo de las escuelas está basada en el ejercicio de los derechos a participar y decidir
con corresponsabilidad y exigencia de una educación de excelencia, incluyente y con
equidad para sus hijas e hijos; en su capacidad de tomar decisiones informadas de acuerdo
con la especificidad de su contexto y expectativas no solo como familias sino como parte de
una comunidad escolar que considera la diversidad de condiciones sociales, étnicas o
lingüísticas, tal como lo establecen la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos y la Ley General de Educación.
Propósito
Que las y los participantes identifiquen los rasgos que distinguen la corresponsabilidad de
la escuela y las familias en la educación de las niñas, niños y adolescentes, así como el
papel de las maestras y maestros para lograrlo.
Actividad 3.1
Es la base principal de educación para todos los alumnos, son quienes dan los primeros
ejemplos de comportamiento y los primeros en dejarles ver los valores como personas.
Además en el transcurso de la educación de los niños deben estar presentes pues en las
edades iniciales se cimentan muchos aspectos de su personalidad y son otra parte del
equipo para que se logre una educación integral.
Enseguida, revisa los planteamientos de la Ley General de Educación, págs. 47 a 51, acerca
de la participación de las familias en la tarea educativa, y completa tu escrito con las ideas
que te parezcan más relevantes.
Las acciones que se deriven de la aplicación del párrafo anterior, en ningún caso
implicarán la sustitución de los servicios del personal de la escuela, tampoco generarán
cualquier tipo de contraprestación a favor de los particulares.
Capítulo II
I. Hacer que sus hijas, hijos o pupilos menores de dieciocho años, reciban la
educación preescolar, la primaria, la secundaria, la media superior y, en su caso,
la inicial;
II. Participar en el proceso educativo de sus hijas, hijos o pupilos menores de
dieciocho años, al revisar su progreso, desempeño y conducta, velando siempre
por su bienestar y desarrollo;
III. Colaborar con las instituciones educativas en las que estén inscritos sus hijas,
hijos o pupilos, en las actividades que dichas instituciones realicen;
IV. Informar a las autoridades educativas, los cambios que se presenten en la
conducta y actitud de los educandos, para que se apliquen los estudios
correspondientes, con el fin de determinar las posibles causas;
V. Acudir a los llamados de las autoridades educativas y escolares relacionados con
la revisión del progreso, desempeño y conducta de sus hijas, hijos o pupilos
menores de dieciocho años, y
VI. Promover la participación de sus hijas, hijos o pupilos menores de dieciocho años
en la práctica de actividades físicas, de recreación, deportivas y de educación
física dentro y fuera de los planteles educativos, como un medio de cohesión
familiar y comunitaria.
En caso de incumplimiento de alguna de las obligaciones a las que se refiere este artículo
por parte de madres y padres de familia o tutores, las autoridades educativas podrán dar
aviso a las instancias encargadas de la protección de los derechos de niñas, niños y
adolescentes para los efectos correspondientes en términos de la legislación aplicable.
Artículo 130. Las asociaciones de madres y padres de familia tendrán por objeto:
I. Representar ante las autoridades escolares los intereses que en materia educativa
sean comunes a los asociados;
II. Colaborar para una mejor integración de la comunidad escolar, así como en el
mejoramiento de los planteles;
III. Informar a las autoridades educativas y escolares sobre cualquier irregularidad de
que sean objeto los educandos;
IV. Propiciar la colaboración de los docentes, madres y padres de familia o tutores,
para salvaguardar la integridad de los integrantes de la comunidad educativa;
V. Conocer de las acciones educativas y de prevención que realicen las autoridades
para que los educandos, conozcan y detecten la posible comisión de hechos
delictivos que les puedan perjudicar;
VI. Sensibilizar a la comunidad, mediante la divulgación de material que prevenga la
comisión de delitos en agravio de los educandos. Así como también, de elementos
que procuren la defensa de los derechos de las víctimas de tales delitos;
VII. Estimular, promover y apoyar actividades extraescolares que complementen y
respalden la formación de los educandos;
VIII. Gestionar el mejoramiento de las condiciones de los planteles educativos ante las
autoridades correspondientes;
IX. Alentar el interés familiar y comunitario para el desempeño del educando, y
X. Proponer las medidas que estimen conducentes para alcanzar los objetivos
señalados en las fracciones anteriores.
Capítulo III
Artículo 131. Las autoridades educativas podrán promover, de conformidad con los
lineamientos que establezca la autoridad educativa federal, la participación de la sociedad
en actividades que tengan por objeto garantizar el derecho a la educación.
Artículo 132. La autoridad de cada escuela pública de educación básica y media superior,
vinculará a ésta, activa y constantemente, con la comunidad. La autoridad del municipio
dará toda su colaboración para tales efectos.
a) Coadyuvar para que los resultados de las evaluaciones al Sistema Educativo Nacional
contribuyan a la mejora continua de la educación, en los términos del artículo 136 de
esta Ley;
b) Proponer estímulos y reconocimientos de carácter social a alumnos, docentes,
directivos y empleados de la escuela, que propicien la vinculación con la comunidad,
con independencia de los que se prevean en la Ley General del Sistema para la
Carrera de las Maestras y los Maestros;
c) Coadyuvar en temas que permitan la salvaguarda del libre desarrollo de la
personalidad, integridad y derechos humanos de la comunidad educativa;
d) Contribuir a reducir las condiciones sociales adversas que influyan en la educación,
a través de proponer acciones específicas para su atención;
e) Llevar a cabo las acciones de participación, coordinación y difusión necesarias para
la protección civil y la emergencia escolar, considerando las características y
necesidades de las personas con discapacidad, así como el desarrollo de planes
personales de evacuación que correspondan con el Atlas de Riesgos de la localidad en
que se encuentren;
f) Promover cooperativas con la participación de la comunidad educativa, las cuales
tendrán un compromiso para fomentar estilos de vida saludables en la alimentación
de los educandos. Su funcionamiento se apegará a los criterios de honestidad,
integridad, transparencia y rendición de cuentas en su administración. La Secretaría
emitirá los lineamientos para su operación, de conformidad con las disposiciones
aplicables;
g) Coadyuvar en la dignificación de los planteles educativos, a través del Comité Escolar
de Administración Participativa, de acuerdo con los lineamientos que emita la
Secretaría, y
h) Realizar actividades encaminadas al beneficio de la propia escuela.
En la Ciudad de México, los consejos se podrán constituir por cada una de sus
demarcaciones territoriales.
Artículo 134. En cada entidad federativa, se podrá instalar y operar un consejo estatal de
participación escolar en la educación, como órgano de consulta, orientación y apoyo. Dicho
consejo, será integrado por las asociaciones de madres y padres de familia, maestras y
maestros.
Artículo 136. Los consejos de participación escolar o su equivalente a que se refiere este
Capítulo se abstendrán de intervenir en los aspectos laborales, pedagógicos y
administrativos del personal de los centros educativos y no deberán participar en
cuestiones políticas ni religiosas.
Artículo 137. Las personas beneficiadas directamente por los servicios educativos de
instituciones de los tipos de educación superior y, en su caso, de media superior que así lo
establezcan, deberán prestar servicio social o sus equivalentes, en los casos y términos que
señalen las disposiciones legales. En éstas se preverá la prestación del servicio social o sus
equivalentes como requisito previo para obtener título o grado académico correspondiente.
Artículo 139. Los medios de comunicación masiva, de conformidad con el marco jurídico
que les rige, en el desarrollo de sus actividades contribuirán al logro de los fines de la
educación previstos en el artículo 15, conforme a los criterios establecidos en el artículo 16
de la presente Ley.
Artículo 140. La Secretaría promoverá, ante las autoridades competentes, las acciones
necesarias para dar cumplimiento al artículo anterior, con apego a las disposiciones legales
aplicables.
Es la base principal de educación para todos los alumnos, son quienes dan los primeros
ejemplos de comportamiento y los primeros en dejarles ver los valores como personas.
Además en el transcurso de la educación de los niños deben estar presentes pues en las
edades iniciales se cimentan muchos aspectos de su personalidad y son otra parte del
equipo para que se logre una educación integral.
Actividad 3.2
El vínculo Escuela-Familia.
¿Por qué es importante vincular a los padres de familia con la tarea de la escuela?
¿Qué deben considerar las maestras, maestros y directivos al solicitar a las familias
su participación?
¿Qué papel tiene la familia para que las niñas, niños y adolescentes ejerzan su
derecho a la educación?
Actividad 3.3
Revisa los videos donde diversos actores escolares platican sus experiencias en el trabajo
entre la escuela y la familia.
Jorge Adrián Vargas, director de la Escuela Primaria Rural Federal Julián M. Castillo,
poblado de Pencuyut, Tekax, Yucatán.
Dulce Chan, madre de familia de la Escuela Primaria Rural Federal Julián M. Castillo,
poblado de Pencuyut, Tekax, Yucatán.
Yolanda Parra, profesora en la Escuela Primaria Rural Federal Julián M. Castillo, poblado
de Pencuyut, Tekax, Yucatán.
Imagina que en la escuela a la que te incorporas te asignan realizar una exposición dirigida
al colectivo escolar sobre el vínculo entre la escuela y la familia. Considera lo revisado en
esta Lección y elabora una presentación en Power Point.
Utiliza la lista de cotejo para verificar que estén contenidos todos los criterios en la
elaboración de tu presentación.
LECCIÓN 4. DESAFÍOS PARA EL COLECTIVO DOCENTE EN LA NUEVA ESCUELA
MEXICANA
Es importante reconocer que las maestras y los maestros cuentan con saberes pedagógicos
únicos, especializados, inherentes a la profesión que requieren ser valorados por ellos
mismos, la sociedad en general y el Sistema Educativo. Esto implica tener confianza en su
quehacer pedagógico, en el conocimiento que tienen de sus alumnos y del contexto en el
que se ubica la escuela.
En este sentido, se presentan otros desafíos que enfrenta la nueva escuela mexicana y el
papel de las maestras y los maestros para lograr que esta ofrezca una educación inclusiva,
con equidad y de excelencia. Esto exige revalorizar al magisterio, abrir la escuela a la
comunidad, así como transformar las creencias pedagógicas y las culturas escolares.
Propósito
Que las y los participantes analicen algunos de los desafíos que enfrenta el sistema
educativo mexicano y reflexionen acerca del papel de la maestra o maestro en la
construcción de una nueva escuela mexicana.
Actividad 4.1
Lee el texto “Desafíos de la nueva escuela mexicana" e identifica las ideas principales. Para
apoyarte en el análisis de la lectura puedes utilizar esta tabla.
La nueva escuela mexicana reconoce y valora a las maestras y maestros como servidores
públicos conscientes de su responsabilidad social y educativa, en los que se confía la
formación de la personalidad, cultura, cosmovisión y actuar de los alumnos; mujeres y
hombres profesionistas bien preparados, competentes, honestos y sencillos, sensibles y
atentos a las problemáticas de los alumnos, madres y padres de familia, así como de la
comunidad en general.
Para cumplir los fines y objetivos de la educación, es fundamental el trabajo que realizan
las maestras y maestros de nuestro país, con el propósito de desarrollar las capacidades
intelectuales, físicas, morales y espirituales de sus alumnos; fomentar en las niñas, niños y
adolescentes, elevados sentimientos y gustos estéticos; forjar convicciones ciudadanas y
patrióticas que dignifiquen la condición humana y favorezcan su integración racional,
amable y comprometida con el medio social y natural en el que viven.
Las maestras y los maestros son reconocidos y valorados por ser modelos de personas y
profesionales a quien seguir, que inspiran a otros para poder salir de la inercia de pobreza,
marginación, maltrato, injusticia e ignorancia en la que viven muchas personas; admirados
por los conocimientos y competencias que poseen, pero también por el trato respetuoso que
dan a sus alumnos, así como por las decisiones que toman cotidianamente en el salón de
clase basadas en la justicia, el respeto, la inclusión y la equidad.
Resulta necesario avanzar hacia una organización educativa que haga más flexibles los
tiempos y los espacios de la escuela, que responda a las necesidades e intereses de los
alumnos; que promueva la reflexión, la investigación e innovación; que establezca
relaciones democráticas entre educadores y alumnos. Esto requiere además, considerar al
conocimiento como una construcción colectiva, valorar el saber de todos los actores
responsables de la tarea educativa en las escuelas y reconocer las diversas maneras de
comprender la realidad. las dignas, y equipadas con lo necesario para brindar una
enseñanza de excelencia
Actividad 4.2
Con base en las ideas principales identificadas en el texto “Desafíos de la nueva escuela
mexicana”, elabora un video tutorial de máximo 5 minutos, en el que expliques a otros
colegas estos desafíos.
Para orientar la construcción del video tutorial utiliza la lista de cotejo. Asimismo, puedes
apoyarte en este ejemplo.