Elis Regina
Elis Regina
Elis Regina
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cerrando el verano.
Es la promesa de vida
en tu corazón...
Elis Regina Carvalho Costa, más popularmente conocida como Elis Regina, nació en Porto
Alegre un 17 de marzo de 1945.
Inició su carrera muy tempranamente. A los 7 de edad, en 1952, se presentó en una emisora
de radio local, pero no pudo abrir la boca, debido al pánico escénico. Cuatro años, a los once,
participa en el programa de radio para niños O Clube do Gurí en la Radio Farroupilha y así logra
su primer contrato profesional. Luego (en 1959) fue contratada por Rádio Gaúcha y en 1960
viaja a Río de Janeiro donde firma contrato con el que graba su primer LP, Viva a Viva a
Brotolândia. Aparece cinco años más tarde un nuevo disco, Dois na bossa que fue récord de
ventas.
Pero su consagración llegaría en 1965. En ese año, una multitud se sentó frente al televisor
para disfrutar del primer Festival de Música Popular Brasileña, al que Elis se presentó con el
tema ‘Arrastao’. Su actuación ese día fue un hito fundacional: al abrir sus brazos imitando al
Cristo Redentor, ingresó definitivamente en el olimpo de los ídolos brasileños.
Tenía 20 años y ganaba 15.000 dólares al mes con sus grabaciones y actuaciones en radio y en
TV donde conducía su propio programa.
Tuvo un hijo con Ronaldo Bôscoli, su primer esposo y quien la acompañaba en la tele. Cuando
el pequeño tenía unos dos años, Elis Regina se enamoró de su pianista, César Camargo
Mariano, con el que tuvo otros dos pequeños, Pedro y Maria Rita, quien también se dedicó a
cantar.
En 1969 la entrevista la escritora Clarice Lispector para la revista Manchete. Lispector la
describe y la presenta así:
Clarice Lispector: ¿Por qué cantas, Elis? ¿Sólo porque tienes una voz magnífica? Conozco
personas con una gran voz que no cantan ni en el baño.
Elis Regina: No sé, Clarice. Pienso que comencé a cantar por una absoluta y total necesidad de
afirmación. Yo me sentía completamente una basura, sabía que tenía una buena voz, y
entonces esa fue la manera que encontré de escapar de mi complejo de inferioridad. Fue mi
manera de hacerme notar.
-Es que el escenario está tan ligado a mi manera de ser, a mi evolución, a mis traumas, que yo
pienso que separarme del escenario sería lo mismo que castrar a un semental: él deja de tener
motivo para existir.
Elis tenía una personalidad que le permitía exteriorizar todo lo que pensaba: “En este país, sólo
hay dos que cantan: Gal Costa y yo”. En 1969, recordemos que Brasil soportaba por esos años
una dictadura militar igual que el resto de sus países vecinos, definió al gobierno como “una
camarilla de gorilas” dedicada a la persecución de los artistas. Su enorme popularidad la salvó
de la prisión. Tiempo después cantó el himno nacional de Brasil durante las Olimpiadas del
ejército, lo que generó rechazo entre parte de sus seguidores, lo que la hirió profundamente.
Elis pasó el resto de su vida tratando de explicar que había sido obligada por los militares a
presentarse.
A finales de los años sesenta y principios de los setenta, ayudó a popularizar el trabajo del
movimiento Tropicalia, grabando canciones de músicos como Gilberto Gil y también cantó
temas de músicos hasta entonces poco conocidos, como Milton Nascimento.
Elis incursionó en diversos géneros: del choro y la música tradicional brasileña a la bossa nova,
pasando por el samba, el rock, el jazz. También grabó tangos, como Uno de Discepolo.
Su presencia artística más memorable quizás esté registrada en los álbumes Em Pleno Verão
(1970), Elis & Tom (1974, del cual escuchamos esta versión de Aguas de marzo), Falso Brilhante
(1976), Transversal do Tempo (1978), Saudade do Brasil (1980) y Elis (1980).
Su corta pero intensa carrera llegó a su fin el 19 de enero de 1982, día que la encontraron
muerta en su departamento de San Pablo. Oficialmente, la causa de su muerte fue sobredosis
de cocaína y alcohol, pero siempre sobrevoló la duda de si no había sido la dictadura militar la
que la había mandado matar. Tenía 36 años.
Sin embargo, quedan sus memorables grabaciones, videos y demás registros que nos ayudan a
recordarla. La voz de una grande, una diosa…¡Una voz grandiosa!
'Para la novela' Brillante ", Elis hizo su última grabación. Le pedí que grabara ′′ Me vuelves
loca". (Me vuelves loco" de Armando Manzanero, traducida por Paulo Coelho)
Y yo dije:
Ella se reía de ella en el otro lado. Al escuchar esta grabación de Elis, nos damos cuenta de la
llevada arañada, susurrada, cariñosa, afectiva, femenina que le dio a la música. ' '