Dictamen MIntra Vacaciones

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Septiembre, Octubre

2017 2020
2020
Dictamen del Ministerio del Poder Popular para el
Proceso Social Trabajo, acerca del otorgamiento
de las vacaciones

Antecedentes del Dictamen


El pasado 18 de septiembre la empresa Cigarrera Bigott dirigió una consulta al Ministerio
del Trabajo sobre la siguiente duda que se les plantea:

¿en los actuales momentos se puede otorgar el disfrute de las


vacaciones a los trabajadores que han permanecido activos y que
hayan cumplido con el tiempo necesario para solicitar el disfrute?

Con fecha 21 de septiembre del 2020, el Ministerio del Trabajo respondió la interrogante
planteada mediante Dictamen CJ Nº 01, y lo hizo en los términos siguientes:

Fuentes del Derecho consideradas por el Dictamen


En primer lugar hay que destacar que el Dictamen acoge como fuente del derecho, el
Convenio 132 de la OIT que en su artículo 10 establece:

La época en que se tomarán vacaciones, siempre que no se fije por


reglamentos, contratos colectivos, laudos arbitrales o de otra manera
compatible con la práctica nacional, se determinará por el empleador,
previa consulta con la persona empleada o sus representantes.

Al fijar la época en que se tomarán las vacaciones, se tendrán en


cuenta las exigencias del trabajo y las oportunidades de descanso y
distracción de que pueda disponer la persona empleada

En segundo lugar, el Dictamen toma en cuenta lo establecido por el Decreto del Ejecutivo
Nacional Nº 4160 del 13/03/20 en el cual se declaró el Estado de Alarma para atender la
Emergencia Sanitaria del Coronavirus y que, entre otras cosas, prohibió la asistencia a los
lugares de trabajo, salvo en los casos de excepción previstos.

Por último, el Dictamen atiende a lo establecido en la LOTTT sobre la interrupción de las


vacaciones por causas no imputables al trabajador:
Conclusiones del Dictamen
Considerando las disposiciones normativas anteriores así como la intención, espíritu y
propósito de las mismas, el Dictamen concluye en lo siguiente:

1) El período de cuarentena no constituye un día de descanso, ni de vacaciones ni


festivo, sino que es una medida de salud pública, una emergencia sanitaria con una
fase de confinamiento preventivo obligatorio; un completo cierre de actividades no
esenciales.

Por lo tanto, no se puede exigir al trabajador que use sus vacaciones durante la
cuarentena, en caso de que se decida que no asistan al trabajo.

Esta primera conclusión es muy importante ya que implícitamente establece la categoría de


los trabajadores a los cuales se refiere el Dictamen: a aquellos que no están laborando
porque sus respectivos centros de trabajo están cerrados y sin actividad laboral, por
ordenarlo así el referido Decreto de Alarma.

2) Por lo tanto se suspenden parcialmente (las vacaciones), mientras dure el


aislamiento social, vinculada a la facultad del patrono de organizar y dirigir las fechas
de otorgamiento de vacaciones a sus trabajadores, ya que no podrán otorgarse o
ser compensadas en dicho período.

Sin duda alguna, el Dictamen reconoce que es un derecho del empleador organizar las
fechas de otorgamiento de las vacaciones a sus trabajadores, al hacer referencia a la
programación anual que debe realizarse en todo centro de trabajo, pero limita esa facultad
al prohibir que esos días de asueto sean imputados al período de confinamiento forzoso.

3) Según la interpretación de dicho Decreto de Alarma –continúa el Dictamen- no


estamos en presencia de un tiempo para esparcimiento o que permita al trabajador
dar una adecuada utilización a su tiempo libre, aunado a que por el temor a la
propagación del virus se cerraron las escuelas, teniendo la familia que encargarse
de ayudar a los escolares en la educación a distancia.

Así que deberá aplicarse lo dispuesto por el Artículo 190 de la LOTTT y las vacaciones se
interrumpirán por ser un hecho no imputable al trabajador:

Artículo 190.

Las vacaciones que se interrumpan por hechos no imputables al


trabajador o a la trabajadora, se reactivarán al cesar esas
circunstancias.

Esta consecuencia es aplicable tanto a los trabajadores que laboren en centros de trabajo
que estén sin ningún tipo de actividad laboral, como a aquellos que trabajen en actividades
expresamente exceptuadas por el Decreto de Alarma.

4) Por último, se exhorta a los empleadores y trabajadores a negociar una nueva fecha
para el disfrute efectivo, reconociendo así el principio de autonomía de la voluntad
de las partes.
Nuestros comentarios y recomendaciones
Aun cuando el Dictamen resulta bastante ambiguo y no establece de manera expresa a que
categoría de trabajadores se está refiriendo, es posible sin embargo, extraer de su texto,
algunas conclusiones importantes:

1) El Dictamen resalta fundamentalmente que no deben imputarse los días de


descanso, de vacaciones o festivos, al período de confinamiento, ya que éste se
trata de una medida de salud pública establecida en el Decreto del Estado de Alarma
para atender la emergencia del Coronavirus. En este sentido establece una
prohibición de computar los días no laborados durante el período de confinamiento,
al período de vacaciones.

Por lo tanto, el Dictamen no se refiere a aquellos trabajadores que no estén en


confinamiento, y que se encuentren laborando en forma presencial durante el
período de la pandemia, como son los del sector salud, expendios de alimentos,
servicios públicos y tantos otros. Tampoco se refiere a aquellos trabajadores que
–aun estando en confinamiento- están laborando en teletrabajo y que cumplen
igualmente con su jornada de trabajo y soportan además de la carga del trabajo
intelectual, las actividades domésticas de atención y cuidado del hogar y de la
familia.

2) En nuestra opinión, no es la intención del Dictamen, impedir a estos trabajadores


que puedan disfrutar de su asueto de vacaciones, siempre y cuando se den los
siguientes supuestos:

a. Que el trabajador se encuentre prestando labores efectivas bien sea en


forma remota o presencial.
b. Que el trabajador tenga un año ininterrumpido de servicios.
c. Que las haya solicitado formalmente.
d. Que no sean una imposición unilateral del empleador.
e. Que sean el resultado de un acuerdo de voluntades entre las partes, y el
trabajador expresamente manifieste que solicita su descanso anual, aun
cuando entiende que, debido al período de confinamiento, no podrá hacer
uso de lugares públicos de esparcimiento, sino que las disfrutará en su hogar
con su familia.

3) Lo anterior se refuerza en el in fine del Dictamen cuando establece “se exhorta a


los patronos y patronas y a los trabajadores y trabajadoras a negociar una nueva
fecha para el disfrute de las vacaciones de manera efectiva”.

Así pues que, en principio, el trabajador puede solicitar sus vacaciones y


disfrutarlas, siempre y cuando lo haga en la oportunidad legal para hacerlo y medie
convenio entre las partes, ya que si bien la LOTTT contempla que las empresas
deben garantizar no sólo el derecho a unas vacaciones remuneradas, sino también
a un disfrute efectivo de las mismas, entendiendo por tal, el descanso prolongado
para la recuperación física y mental de las cargas laborales y el aprovechamiento
de este tiempo a libre disposición del trabajador, sea para que se destine al
compartir familiar o al esparcimiento personal, no es menos cierto que las
obligaciones cumplidas a distancia o presenciales, requieren también de un
descanso anual, más allá de que el trabajador pueda viajar o trasladarse a otros
destinos.

Los trabajadores que están prestando sus servicios en alguna entidad que se encuentra
exceptuada de suspender sus actividades y que continúan prestando servicios durante el
Estado de Alarma pueden disfrutar sus vacaciones siempre que se documente que han sido
solicitadas justificadamente, ya que no hay duda de que los difíciles tiempos que estamos
viviendo, aunado a las responsabilidades laborales tienen un efecto perjudicial para la
salud, y por lo tanto, un tiempo sin responsabilidades laborales es importante para mitigar
este efecto, aun cuando exista una restricción a la libre circulación y estén limitadas las
distintas vías de comunicación y los espacios públicos para el descanso o el esparcimiento.

Tal como lo acota el Dictamen, el período de vacaciones “cumple una función reparadora
que posibilita que el trabajador repose tanto física como “espiritualmente”, que se liberen
de la rutina diaria que supone la carga laboral”.

GIRAN ABOGADOS & ASOCIADOS


agonzalez@giranlaw.com

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