Chequeo Prevuelo
Chequeo Prevuelo
Chequeo Prevuelo
Una vez que se tiene un plan de vuelo y el piloto está preparado (física y mentalmente) para
realizarlo, antes de echarse a volar es necesario comprobar que el aeroplano está operativo,
es decir someterlo a un chequeo prevuelo (preflight check).
El objetivo de esta operación es determinar, desde el punto de vista del piloto, las
condiciones de operación del aeroplano, es decir, si éste se encuentra en un estado
adecuado para realizar un vuelo seguro.
Las operaciones a realizar no son muchas ni complicadas, pero todas ellas son importantes;
por ejemplo: comprobar el nivel de aceite y rellenar si es necesario puede evitar una parada
de motor en vuelo.
La inspección debe ser una tarea rigurosa y sistemática, siguiendo paso a paso todas y cada
una de las operaciones detalladas en una lista, la cual suele incluirse en una sección propia
en el Manual de Operación del aeroplano. Podemos haber realizado el mismo chequeo
cientos de veces y saberlo perfectamente de memoria, pero a pesar de ello debemos seguir
siempre la lista. Esta es la única manera de asegurar que no se olvida ninguna operación del
chequeo.
Normalmente, las escuelas proporcionan una lista escrita dividida en distintos apartados,
cada uno correspondiente a una fase de operación:
Preparación de cabina (Entering Cockpit o Cockpit), Revisión exterior (Preflight Check),
Antes de arrancar (Before Starting Engine), Arranque (Engine Start), Después de arrancar
(After Starting Engine), Rodaje (Taxiing), Prueba de motores (Ground Check), etc... Estas
listas son muy escuetas (ejemplo: Batería...ON) y no necesitan mucha explicación, por lo
que vamos a centrarnos en los detalles que parecen importantes y sobre todo en la revisión
"exterior".
La lista de chequeo no lo es todo. Las listas no suelen incluir una serie de tareas previas de
suma importancia: cálculo de carga y centrado, estado del tiempo y previsiones
meteorológicas a lo largo de la ruta a seguir, distancia para el despegue en las condiciones
actuales, cantidad de combustible suficiente, rendimiento previsto del avión para el vuelo
en esas condiciones, posibilidad de aterrizaje en aeródromos alternativos, estado físico y
emocional de la tripulación, etc...
Preparación de Cabina.
El objetivo de este chequeo como su propio nombre indica es: acomodar la cabina para el
vuelo, desbloquear los controles y dispositivos de mando, y comprobar que los indicadores,
marcadores, fusibles, funcionan correctamente y están en servicio. Las operaciones más
destacadas de esta fase son:
• Con la batería ON y las magnetos OFF, checar que no hay fusibles saltados, la cantidad
de combustible que marcan los indicadores, que la bomba de combustible y el indicador de
presión de este funcionan, que la luz de aviso del alternador está encendida (todavía no lo
hemos activado), etc...
Algunas cosas pueden parecer en principio que no tienen sentido pero si lo tienen: en la
lista presentada en la figura, seleccionar el depósito menos lleno tiene el propósito de que
este sea el que suministre combustible durante el arranque del motor; como después de
arrancar se vuelve a cambiar de depósito, esto nos asegura que la prueba de motores y el
despegue se realiza alimentando al motor con el depósito más lleno. La batería se procura
que esté ON el tiempo estrictamente necesario para no gastarla innecesariamente.
Naturalmente, aunque hay una buena cantidad de tareas comunes, cada aeroplano tiene su
lista propia.
No solo hay chequeos que se realizan en unos aviones pero no en otros sino que la misma
tarea se realiza de forma distinta según el avión. Por ejemplo: la preparación de cabina de
una Cessna-150 no incluye el chequeo de la bomba de combustible porque carece de ella, o
se comprueba tren abajo solo en aviones con tren retráctil.
Inspección exterior.
Consiste en una inspección visual que se realiza "dando una vuelta" alrededor del
aeroplano, razón por la cual algunos manuales en inglés se refieren a ella con el nombre de
"walk around" (caminar alrededor).
Tras realizar la preparación de cabina, el piloto sale por una puerta del avión y camina
alrededor, verificando una serie de puntos, para volver a subir por la misma puerta. Este
"rodeo" sistemático y no anárquico impide que se quede algún elemento sin verificar.
Ala derecha. A medida que se camina alrededor del ala, comprobar que la superficie de la
misma y especialmente las superficies de control y el borde de ataque, no tienen daños,
grietas o abolladuras. También, que no hay tornillos o remaches sueltos.
1. Flaps. Las bisagras y varillas que los mueven no deben tener holgura.
2. Alerones. Deben moverse sin ningún impedimento. Chequear bisagras sin holgura.
3. Extremo del ala. Inspeccionar su estado, comprobando además las luces de navegación
y anticolisión.
4. Rueda del tren. Debe tener la cubierta en buen estado y una presión de inflado correcta.
No debe presentar huellas de fuga del líquido de frenos.
7. Hélice. La hélice no debe tener melladuras, grietas o fisuras. Manejarla con cuidado,
como si estuviera "viva". Si la hélice es de paso variable, no debe presentar huellas de
pérdida de aceite del mecanismo.
El aceite usado en aviación tiene una mayor viscosidad que los usados en otros muchos
motores y se vuelve muy espeso cuando está frío. Gire a mano un par de vueltas de la
hélice para vencer la resistencia creada por la película de aceite frío entre el pistón y los
cilindros. Esto ayuda a arrancar el motor y reduce la carga sobre el mecanismo de arranque
y la batería.
El cono delantero de la hélice o "spinner" debe estar en buen estado, sin golpes ni
melladuras.
8. Rueda de morro y otros. Checar que la rueda de morro tiene la cubierta en buen estado y
una presión de inflado adecuada. Empujar el morro hacia abajo para comprobar el
amortiguador y el retorno del mismo a su posición inicial. No deben existir señales de
pérdida de líquido hidráulico.
Comprobar las luces de aterrizaje, con cuidado porque se gasta mucha batería.
En caso de reducción por correa dentada, comprobar la tensión y estado de la misma.
En aeródromos cercanos a bosques y descampados, si el avión pasa tiempo sin moverse
puede suceder que los pájaros hayan anidado en la parte delantera del motor, a veces en la
entrada de aire. Mirar.
Algunos aviones, tienen una válvula de drenado del motor en un lateral del morro. En
ese caso drenar siguiendo las mismas pautas que con los depósitos.
Ala izquierda. La revisión del ala izquierda es similar a la del ala derecha. Algunos
dispositivos a chequear, tales como el tubo de pitot y el mecanismo de detección de pérdida
se encuentran en este ala.
10. Fuselaje. Inspeccionar la condición general del fuselaje, que todas las antenas estén
bien fijadas y los paneles o puertas de acceso de equipaje bien cerradas.
Empenaje trasero. Al llegar a esta parte del aeroplano, se inspecciona principalmente el
estado de las superficies de control de cola (timón de dirección y timón de profundidad).
11. Cola. Los estabilizadores y superficies de control deben estar en buenas condiciones,
libres de daños. Estas últimas (timón de profundidad y timón de dirección) deben moverse
sin impedimentos y tener sus bisagras bien conservadas.
Es muy importante comprobar que el tornillo o mecanismo que mueve el timón de
profundidad está bien fijado y sin síntomas de daños.
Comprobar las superficies de compensación, y la luz anticolisión de la cola.
Algunos aeroplanos tienen una antena en la parte superior del estabilizador vertical,
comprobar.
Obviamente, el malfuncionamiento de cualquier elemento inspeccionado o una revisión no
satisfactoria debe dar lugar a la cancelación del vuelo.