Sinopsis de Muros Milán

SINOPSIS DE MUROS MILÁN
Los muros milán son una pared tablestaca de concreto reforzado conformada en
el subsuelo, los cuales son utilizados como elemento de sostenimiento temporal
en zanjas abiertas y para estabilizar excavaciones profundas en la construcción de
cimentaciones.
Estos elementos también se han ido utilizando como muros estructurales; en
cajones de metros, cimentaciones de edificios o muros de contención y protección,
por lo cual se ha confirmado que el muro milán puede ser un elemento estructural
definitivo y confiable.
En este trabajo se resumen los aspectos constructivos de los muros milán en
suelos blandos y granulares, poniendo pone énfasis en su empleo en las arcillas
blandas de la ciudad de México
Su diseño se basa en que puedan soportar los empujes horizontales de la masa
de suelo y su proceso constructivo puede ser: de forma convencional colado en el
sitio, por medio de piezas prefabricadas con avance modular o con piezas
prefabricadas con avance continuo.
Los muros milán convencional colado en el lugar, tienen como objetivo asegurar
que se alcance la calidad necesaria para su empleo como tablestaca y como
muros estructurales.
En el caso del muro con piezas prefabricadas con avance modular sólo permite
avances cortos en la excavación de la zanja, mientras que con piezas
prefabricadas con avance continuo. permite lograr un procedimiento continuo con
avances de excavación largos y aprovechamiento máximo del equipo de
construcción.
Uno de los aspectos que debe ser muy considerado en el proceso de diseño y
construcción, es el mecanismo de falla general que se puede dar ocasionado por
los colapsos de las excavaciones en las zanjas para los muros, las cuales
ocasionan una superficie de falla definida por un prisma inestable. La estabilidad
de la excavación debe analizarse para esta condición de falla general conforme la
resistencia del suelo y la profundidad de la excavación.
Los mecanismos de falla local que se pueden desarrollar son: humedecimiento y
reblandecimiento, flujo en granulares, falla por filtraciones y en zonas inestables.
Para poder tener el control de estabilizar las excavaciones se utilizan los lodos
estabilizantes, estos son diseñados para mantener un control en la obra por lo cual
también se les deben realizar pruebas como lo son: su densidad, viscosidad,
contenido de arena y la resistencia al corte.
Los estudios experimentales ratifican que la relación agua/cemento es el
parámetro más significativo que influye en la resistencia del lodo fraguante. Es
esencial considerar que el consumo de lodos en un cierto trabajo casi siempre es
superior al volumen teórico de la excavación.
Se propone adoptar como criterio para definir la resistencia final del lodo
fraguante: él que una vez endurecido sea 50% más resistente que el suelo al nivel
de desplante del muro, definida con la envolvente de los suelos blandos. No es
conveniente adoptar una resistencia mayor ya que, al endurecer por completo el
lodo a largo plazo se convierte en un material frágil y fisurable y con ello se hace
susceptible a las filtraciones.
El método recomendado para crear un análisis de estabilidad de las excavaciones
para los muros milán, consiste primeramente en recabar toda la información
geotécnica necesaria y en base a esta evaluar las condiciones de construcción,
posteriormente se analiza su factor de seguridad y se hace la revisión de su falla
local y fracturamiento hidráulico, finalmente se considerará si su nivel freático se
encuentra arriba del nivel teórico y se determinará si requiere el uso del lodo
bentonítico.
Como primer paso para la construcción de estos muros se debe hacer la
excavación de la zanja, la cual se realiza con maquinaria ligera o con
procedimientos manuales si se encuentra con alguna instalación. Se debe
seleccionar adecuadamente esta maquinaria acorde a su disponibilidad,
profundidad de excavación, la magnitud del proyecto y su costo.
Para asegurarse que se está siguiendo el procedimiento constructivo correcto, así
como evitar los errores que podrían afectar la calidad final del muro, se debe
implantar una rigurosa supervisión técnica.
El ciclo de excavación de una zanja se define como el tiempo requerido para
realizar las siguientes maniobras: instalar la máquina zanjadora, centrar y bajar la
almeja, excavar, subir la almeja, dejar que escurra el lodo bentonítico y vaciar el
material.
Posteriormente, se colocan las juntas de colado, las cuales son piezas de acero
que permiten confinar temporalmente uno de los extremos verticales de uno de
sus módulos durante el proceso del vaciado del concreto, formando una superficie
que permitirá la unión estructural con el siguiente módulo.
El paso siguiente es colocar el acero de refuerzo, el cual consiste en barras de
acero corrugadas y barras lisas para los estribos y el refuerzo por fricción.
Colocando estas varillas con el suficiente espaciamiento que permita el flujo libre
del concreto entre éstas y las paredes de la zanja.
Estructuralmente los muros milán son tratados como elementos de compresión
que prácticamente no soportan tensiones, bajo este criterio al existir sólo
compresiones no hay agrietamiento en el muro y por lo tanto puede ser tratado
como un elemento elástico.
Para poder introducir el concreto en las zanjas estabilizadas con lodo, se utiliza
como herramienta el tubo tremie, se empieza vaciando el concreto desde el fondo
de la excavación. Este proceso de colado se debe realizar en el menor tiempo
posible y sin discontinuidades.
El concreto utilizado para estos muros a diferencia del convencional; debe tener
fluidez para descender por el tubo tremie, compacidad para alcanzar su
resistencia aún sin vibrado, tiene que resistir a las condiciones químicas de su
entorno y un sangrado mínimo. De igual forma tiende a utilizar aditivos químicos
de acuerdo a los requerimientos que presente la obra.
Uno de los aspectos relevantes a lograr en el proceso de construcción es la
impermeabilización del muro, sin embargo, la penetración de agua del subsuelo se
puede dar a causa de juntas mal selladas, huecos que quedan en la masa del
concreto y por la permeabilidad natural esta masa. Cuando un muro es construido
correctamente debe tener juntas impermeables
Cuando existe una sobrecarga en una cimentación y se da una deformación
diferencial entre el material arcilloso que se encuentra en proceso de
consolidación y se adhiere y gravita sobre la cimentación, ocasiona una fricción
negativa. Si la cimentación tiene un muro milán, la fuerza descendente que aplica
el suelo al exterior del muro se debe evaluar. Ya que esta fuerza de fricción
negativa actuante en el muro influye directamente en su comportamiento a largo
plazo.
Uno de los aspectos más importantes para asegurarse que se está siguiendo el
procedimiento constructivo correcto, y evitar los errores que podrían afectar la
calidad final del muro, es implementar una rigurosa supervisión técnica.
Para realizar correctamente la supervisión de construcción de un muro milán, se
deben tener todos conocimientos teóricos necesarios para cada etapa
constructiva, además de la experiencia suficiente en esta área.
Finalmente, después de haber concluido con la correcta construcción del muro, se
debe realizar el monitoreo del comportamiento de este, con base a su
instrumentación adecuada.

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