Resquicios

Resquicios
“Que todo aquel

que desee adueñarse de las palabras
lo haga porque
en su corazón se inscriba
la sensación, prístina”.
j.c.r.r.
Una madrugada rara de febrero, 2021.

Simbologías del amor:
los hay espectros,
cumulonimbus,
aves de rapiña,
alergias nerviosas
y llantos de medianoche.
Pero como dije alguna vez,

yo ya no lloro:
quiero decir que de mis ojos
no brota líquido altamente emocional
alguno.
Me he llegado a preguntar
si soy capaz de sentir.
(¿Dónde yacen las lágrimas
que no se lloran?
Conciliábulo que se gesta
insolente, de todo aquel
espectro demoníaco-arbóreo
que de mí no mana).
2
Eclipse
no soy nada más que esto,

que cualquier sombra extraña
que se proyecta siempre distinta
distante sobre el asfalto
y me persigue esto
de no saber
si el día o la noche
si la noche o el día
no quiero perder jamás la vista

ni obviar significado alguno
de pronto todo se me hace tan nuevo
que me asusta
intento con terquedad

traducir figuras
que se me presentan todas
como un fulgor ajeno:
jamás nunca mío
entendí el por qué de mi cuerpo

todo errático en el movimiento
mira que no somos más

que quienes se sorprenden
porque algún día los astros
el mundo reinventen
en un juego eterno
de si el sol o si la luna
regirán el ritmo del mundo
bajo un manto,
todo tierno
todo este canto

deviene llanto,
algún delirio.
3
Me perdí en un secreto que me sabe a arena. Cruje el mineral
dentro de la boca. He aceptado
tan condescendiente siempre la forma del sonido. Y aunque no
quisiera escucharlo vibraría
eterno dentro de mí. Nunca tengo muchas cosas que decir. No me
puedo negar jamás a
saborear el petróleo: ya ni sé a qué sabe. No distingo más
allá del sonido áspero, que avanza
lentísimo, resignado. Como si nada. No me mueve ni el destello
ni la luz. Mi mejor recuerdo
es una sensación háptica, infanto-vergonzosa. La recreo en
ocasiones, medio durmiente yo,
el recuerdo despierto. Es un roce que asemejo con la luz. Me
negaste mis verdades. Mi única
verdad es el recuerdo. Mi única verdad son mis secretos. A
veces se dejan ver a través del
corazón, visillo incapaz. No me importan las promesas ni los
parches. No tengo la solución
a ningún problema. Por mientras, todo me parece un lindo
sueño, pesadilla o diluvio de
cualquiera de mis sombras que se rompen. No tengo la solución
a ningún problema, más,
miro de reojo cada uno de los recuerdos que resuenan
acariciando la memoria.
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algo queda
destello
o brisa opaca
consecuencia de la
detonación
no es un secreto
ni una mentira
es otra extraña forma
nunca antes empleada
en este siglo
hallaré alguna dimensión

en un viejo registro epistolar
recibirás el llanto
neo-canto
en formato .pdf
6
Lo que ha de caer
Leve,
sentiré el mundo
en mis manos.
Me alimentó la luz del sol:
alimentó todo lo que vive dentro mío,
el dolor y el cansancio, pero
ya no siento vergüenza
no tanta
de que me vean solo
intentando descifrar
atento
el canto de las aves.
Se me aparecen
en cada sueño;
en tamaños diminutos,
se posan en mi mano
y yo siento viva
la emoción infantil,
incluso en el instante onírico.
Y en esa dicha
se me revelan paisajes
todos llenos de agua
inundados por rocas.
Y en el sueño no le temo al mar
y me asombra el deseo persistente
de querer sumergirme
sin advertir
ninguna demostración
de cobardía
en mi cuerpo-sueño.
Sin embargo,
no se concreta la inmersión,
mi forma no se funde
con el elemento,
no se confunde la sensación
y me extingo
impasible
frente al roquerío
todo gris, quieto.
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I
Me confesé
en silencio:
estoy medio roto,
y en un lugar que no debería.
Me perdí en
cualquier sombra
y en un llanto,
aceite de roca.
II
Todas mis cartas decían lo mismo:

que por qué quien quiera que fueras.
Me llegó un susurro insulso
lo titulé
cuarta epifanía
y dice
"no descansa el que espera".
III
No dios, no love.
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IV
Y si no tengo
siquiera
con qué llenar el vaso.
Yo ya no lloro.
Se me transformó el sentimiento
en cualquier otra cosa
aún más molesta.
Una lágrima espesa
que no es absorbida
por ninguna superficie.
VI
Amor hesitation.
La parte por el todo,
la duda. Y viceversa.
VII
Reluce un eco
cae como gotera
una vez fulminado
el siniestro.
A veces puedo hacer

que no llueva
si tengo que esperar
en un borde mohoso de la vida.
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VIII
Todo escenario
tan tranquilo
tiende a tramar y
desatar pequeños torrenciales
inminentes
de tan acumulados
que permanecieron
durante todo este tiempo.
IX
Ni el olor de tu pieza
ni el sentir de tu ropa
en tu cuerpo tibio
te traerán de vuelta
a todo eso que creíste cierto.
Todo
de
nuevo.
Me fue regresada
toda esta tonta escritura infantil.
Y consigo revive la vergüenza.
Tanta tontera piensa tu tonta cabeza,
tonta.
Una tos,
cualquier espasmo,
un pequeño suspiro se atreverá
otra vez a abrir
la herida toda infectada.
Estertor.
13
1 DE ENERO
Mi piel la herida abierta

ocultaré mi nombre
fugaz
entre cualquier hierba
no temeré
tanto al delirio
mi piel perece
ante el sonido
mi piel descansa
en el espacio
que no ha nacido
mi piel rasguño
eterno, involuntario
es el roce
de cualquier rama
arbusto perenne:
todo lo ajeno
parece nunca
marchitarse.
Frente a mí
solo se yerguen
estructuras grises.
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Correspondencia I
Me dejé llevar por la fuerza del agua, sin prever la

inestabilidad como característica esencial del elemento.
Profundo, intenté nadar y, como en sueños, se retorció cada
una de las leyes físicas que rigen el espacio en el que vives.
Se opone entonces el alquitrán opaco a cualquier atisbo de
acción. La embestida querosene te obliga a hundir los pies en
la arena extraña y se confunden en la amalgama terrosa. Cuando
estás en la orilla sientes como es que el mar te lleva.
Ilusión óptica o fenómeno mortal. Me dejé llevar en toda
sensación que en la piel se manifestaba. Aún en la orilla, con
el equilibrio bípedo, recolecté un par de piedras con las que
construí mi alfabeto. En vano, el peso de mis piedras intentó
hacerle frente al oleaje que no ofrece tregua. Las humedeció
la sal, las confundió entorpeciendo el sentido de mi plegaria.
Es que yo no tenía botella y el mar no se encauzaba a ningún
destino. Como si no hubiese nada más allá. En el horizonte
persiste la memoria, el oleaje imperceptible y la profundidad
que me asusta por desconocida. Ya no envío mensajes sin
destinatario. Ya no digo sin antes callarme. No me alimento de
la duda, indigesta. Intentaste alguna vez gritar bajo el agua.
Viste como el sonido se hace burbuja y se pierde entre las
partículas oceánicas. Me vi morir en la superficie. Sin
embargo, me dejo rozar por cualquier otro elemento. De pronto
no quiero la dicha ni el amor certero. No buscaré la
revelación en los espejismos ni el la memoria tozuda que
yergue monumentos de la ilusión. Hubo tiempos en los que no
veía nada.
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Correspondencia II
Hace rato que ya no sueño. Hubo un periodo de mi vida en que

soñaba, soñaba incansablemente. Soñaba tanto que no quería
soñar. Ahora solo quiero soñar. Despierto y no pasa nada.
Quiero y necesito saberme en otro lugar. Ya no sueño, pero de
seguro alguna vez te conté un sueño. A veces despertaba
riendo, avergonzado. ¿Que qué me daba tanta risa? No sé, no me
acuerdo: se lo dejaba a mi mente. A algún músculo que se
retorcía suave entre la vigilia y cualquier otro lugar,
desconcertado. No puedo vivir un solo día sin reírme de mi.
Probablemente eso, algún gesto absurdo, incluso ajeno, si yo
creo que somos capaces de reflejarnos en los demás, no crees
tú. No sé si cuenta precisamente como sueño, pero el otro día
medio dormido escribí lo siguiente: "voy a colgar/mi corazón
en la vitrina/a ver si por último/en el reflejo alguien se
mira". Me expongo y pienso en lo vulnerable que soy, como
cuando yo-me-espejo y veo a alguien que no soy yo detrás del
reflejo. Te pediría me escribieras de vuelta, pero toda carta
que no es enviada no recibe contestación. El recuerdo
permanecerá incólume.
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Suspensión n°1
Amarás el amor, la forma de todos tus amores. Entenderás

cuáles son las cosas que no te pertenecen. No buscarás lo
que no te sea entregado. Entregarás, sin embargo. Sabrás
resistir el frío. Resistirás el intento desesperado de
escapar. Nadie pertenece a nada. Ni aquí ni a nadie.
Entenderás la forma de todos los amores que te sean
entregados. Aceptarás el amor, aceptarás. Nuevamente vas a
entregar. Existirá el dolor, inevitable. Existirán todas las
demás cosas. Importante es no intentar ocultarlas. Volverás
a entregar. Te quedarás siempre que quieras. Te retirarás
cuando lo estimes conveniente. Recibirás todo lo que se te
sea entregado. Y vas a agradecer, al principio o al final.
Apreciarás la risa ajena a tu alrededor. Si nadie se ríe,
reirás tú. Contemplarás la acción ajena. Te va a enternecer
el interés, genuino o no. Recibirás la brisa así mismo como
al calor. No detestarás a ninguno. No pondrás ninguno por
sobre otro. No eres mejor que nadie. Escucharás atento.
Entenderás lo que te dicen. Entiendes porque prestas
atención. Entiendes por qué prestas atención. Apreciarás el
círculo que se dibuja frente a ti. Devolverás eso que no es
tuyo. Devolverás lo que no te pertenece. Los refugios, las
historias, los relatos. Contemplarás el presente. Vas a
volver a entregar. Intentarás no hacer daño y te
equivocarás. Acudirás al evento, desierto. No convocaron a
nadie más que a ti. Entenderás el proceso. Avanzarás en
contra de la corriente. Resolverás el asunto pendiente.
Recordarás, siempre recordarás: “soy quien he sido”. No te
negarás: conocerás tus sentires y la razón por la que te
intriga la copa del árbol. Mirarás las estrellas. Volverás y
en silencio cálido entenderás.
19
veré de cerca la muerte
creeré que mi destino,
creeré firmemente que mi destino
es desfallecer
en medio de la hierba seca
sin dejar huella alguna
como si algún ánima
del aire o la tierra
me abdujese
o me absorbiese,
respectivamente.
20
DE FENESTRA
hay hierba que crece

en terreno indeseado
se sugiere, cada cierto tiempo,
arrojar por la ventana
los sucesos del corazón
21
EPIFANÍAS
22
TODO LO QUE QUIERAS VER
SE PRESENTARÁ
FUGAZ FRENTE A TUS OJOS:
SI TIENES SUERTE,
PODRÁS RECORDARLO EN EL FUTURO
EN LA EVANESCENCIA
DE LA MEMORIA INFANTIL
23
UNA VERDAD
NOS SERÁ CONTADA
ENTRE EL FUEGO
Y EL DESTELLO
DE UNO (1)
DOS (2)
OJO(S) QUE TITILA(N)
FRENTE AL MAR
Y AL CIELO
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TENDRÁS EN TU CORAZÓN
EL SABOR DEL SOL
25
NO PEDIRÁS EXPLICACIONES
NI PALABRAS DE CONSUELO
LA VERDAD LLEGARÁ
Y ADOPTARÁ LA FORMA
DE UN ESCALOFRÍO
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DE PRONTO
NO QUIERO
NI EL AMOR CERTERO
NI LA DICHA
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PASARÁ TODO ESTO
VOLVERÉ A SENTIR EL AMOR
LEVE
28
NO SOY QUIEN
PARA PEDIRLE A LA VIDA
QUE SE DETENGA
SI CON CADA GOLPE DE TERNURA
ME ESTREMEZCO
EN RUIDO CIEGO
29
CUALQUIER ERROR
SERÁ PERDONADO
POR UN INELUDIBLE
OLVIDO
30
A CUALQUIER COMUNIÓN
LE PRECEDE
EL CANTO DE LOS ÁNGELES
31
32

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“Que todo aquel

Una madrugada rara de febrero, 2021.

Pero como dije alguna vez,

no soy nada más que esto,

no quiero perder jamás la vista

intento con terquedad

entendí el por qué de mi cuerpo

mira que no somos más

todo este canto

hallaré alguna dimensión

Todas mis cartas decían lo mismo:

A veces puedo hacer

Mi piel la herida abierta

Me dejé llevar por la fuerza del agua, sin prever la

Hace rato que ya no sueño. Hubo un periodo de mi vida en que

Amarás el amor, la forma de todos tus amores. Entenderás

hay hierba que crece

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