Consolidando.
Consolidando.
Consolidando.
Juan 17: 12. Cuando estaba con ellos en el mundo, yo los guardaba en tu nombre; a los que me diste, yo los
guardé, y ninguno de ellos se perdió…
La consolidación es un proceso que involucra atender al recién nacido, prestándole los primeros
cuidados para su formación espiritual. Es algo así como la parte final de la evangelización, y
tiene como propósito afirmar el proceso mismo de conversión.
Una persona que ha hecho su decisión de fe, es un bebé que acaba de nacer. Esto quiere decir
que este nuevo convertido requiere de una atención inmediata; necesita afecto, cuidado y leche
espiritual.
De esa atención inmediata depende que este bebé espiritual pueda subsistir. De no hacerlo, lo
más probable es que el mundo lo absorba nuevamente, su vieja naturaleza tome control de su
vida; el diablo con la ayuda del mundo procurarán apartarlo de su fe.
La consolidación es el proceso mediante el cual podemos asegurar, conservar y multiplicar la
cosecha. Juan 15: 16.
¿Quién está llamado a hacer esta consolidación?
Todas las personas que estén comprometidas en las células ( Todo el equipo de trabajo debe de estar
dispuesto, preparado y entrenado para consolidar ), todo el que dice ser cristiano.
A. IMPORTANCIA DE LA CONSOLIDACIÓN.
Es de suma importancia tener en cuenta a cada persona que hace su decisión de fe en la célula,
en la iglesia, en la calle o en cualquier otro lugar. El propósito de esta consolidación es el de no
perder de vista a la persona que ha aceptado a Cristo como su Salvador, confirmar esta entrega
de datos e incorporar al nuevo creyente en la iglesia y en la ruta de Crecimiento. No olvidar que
la consolidación básica tiene que ver con la atención inmediata al recién convertido.
Además, es importante porque:
- Se cuida a cada convertido que Dios pone en nuestras manos, valorándolo como Dios lo
hace, hasta que sea consciente que forma parte del cuerpo de Cristo.
- Se le da la guíanza para que pueda tomar los pasos correctos en su caminar diario. Ejemplo:
Enseñarle como pasar tiempo a solas con él Señor, etc.
Conclusión:
Cuando una persona acepta al Señor Jesucristo como su Señor y Salvador, es decir, tiene un
nuevo nacimiento, es indispensable que reciba atención inmediata y adecuada, similar a cuando
nace un bebe, que recibe el cuidado de la madre y del médico, de inmediato y adecuado.
La labor del consolidador es igual, pero en el área espiritual.