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SESIÓN 06: 

LA DISCIPLINA

DENOMINACIÓN: UNA DISCIPLINA ADECUADA.  

FUNDAMENTACIÓN: 
La disciplina a menudo se asocia con sustantivos como control, regulación, orden,
autoridad, restricción, castigo y verbos como entrenar, ejercitar, enseñar, entrenar,
educar, adoctrinar. De igual manera, la disciplina es un aspecto de la crianza de los hijos
y tiene diferentes formas de administración. Así también, ayuda a los niños a entender
las expectativas que tienen respecto a su comportamiento, y lo que sucede cuando ellos
se portan mal. Por último, la disciplina ayuda a los niños a que puedan controlar su
propio comportamiento.
Biswal et al, (2019) refieren que el proceso de socialización en la familia comienza con
disciplinar al niño en una edad primeriza. En el nivel más básico, se espera que el niño
se comporte de una manera social y culturalmente aprobada. Cualquier forma de
desviación de las normas socioculturales ampliamente aceptadas se considera un
comportamiento indisciplinado. Un niño puede mostrar un comportamiento
indisciplinado en presencia o ausencia de otros. Si bien comprende y controla el
comportamiento indisciplinado en ausencia de otros, es de suma importancia
comprender y controlar dicho comportamiento cuando hay otros presentes.

OBJETIVO: Establecer estrategias disciplinarias para facilitar una correcta formación


para los niños.

METODOLOGÍA: 
1)   INICIO: Los moderadores se presentan y brindan una pequeña introducción acerca
de la sesión que se abordará, antes que se dé inicio a la primera dinámica se aplicará un
pretest para evaluar el nivel de conocimiento de los participantes sobre el tema a tratar.
Después se aplica la dinámica de inicio que se denomina “Como la palma de mi mano”,
con el objetivo de romper el hielo y establecer confianza. Finalmente de forma aleatoria
se realizarán preguntas generales acerca del concepto e importancia de la disciplina
pequeña, lo cual generará un mayor nivel de atención de parte de los participantes.
2) DESARROLLO: Mediante diapositivas los moderadores realizan una exposición a
profundidad de la disciplina positiva explicando temas como: Concepto,
condicionamiento operante, estilos de crianza, técnicas principales y los beneficios, así
mismo exponen las estrategias cognitivo – conductuales que se pueden implementar en
el proceso disciplinario. Posteriormente se realizará la segunda dinámica denominada
"Disciplina en marcha", la cual supone una técnica de modelado en la cual los
moderadores representarán una situación, para luego solicitar a los participantes que
emulan una respuesta similar. En caso que la respuesta sea percibida por los
moderadores como adecuada se les dará un pequeño reforzamiento mediante
felicitaciones. De otro modo, si la respuesta no es la deseada, se orientará al participante
hacia una respuesta más acorde hasta poder encontrarla.
3) CIERRE: Los moderadores realizarán un conversatorio con la finalidad de que los
participantes puedan reflexionar acerca de lo que se desarrolló en toda la sesión, a sí
mismo se mostrará un video a modo de reforzamiento. Posteriormente se plantea a se
aplicará el post test para así corroborar que comprendieron el tema y si generó un
impacto positivo en ellos (Anexo 02). Para finalizar esta sesión se agradece la
participación de cada padre de familia obsequiando un diploma de reconocimiento para
demostrar que valoramos su tiempo y esfuerzo en realizar las dinámicas elaboradas con
entusiasmo, por lo cual tienen todo nuestro aprecio (Anexo 09). 
MARCO TEÓRICO: 
De acuerdo con Cuervo (2010) la disciplina es un aspecto universal de las estrategias de
socialización adoptadas por padres y cuidadores en todas las culturas para enseñar a los
niños los valores y comportamientos normativos de su sociedad. López (2013) indica
que las prácticas disciplinarias pueden ser ya sea poder-asertivo (castigo físico,
amenazas o retiro de privilegios), amor-retraimiento (reteniendo atención, afecto o
aprobación) o inductivo (razonamiento, recordando a los niños las reglas y explicando
el impacto del comportamiento de los niños hacia los demás). La forma en que se
disciplina a un niño es un indicador de los estilos de crianza adoptados por los padres y
es un área de discordia con la retórica anti-azotes contrarrestada por el cristiano
fundamentalista de la patria potestad estricta ya veces punitiva. Torio et al, (2008)
refieren que Diana Baumrind postuló tres modelos de crianza, es decir, autoritario,
autoritario y permisivo. Capano y Ubach (2013) manifiestan que Maccoby y Martin
propusieron otras dos dimensiones clave de crianza de los hijos, estas eran la capacidad
de respuesta y la exigencia. Ramírez (2005) afirma que la capacidad de respuesta es el
grado de calidez, aceptación y participación de los padres, mientras que la exigencia es
el grado en que los padres son estrictos o controladores. La fusión del alcance de estas
dos dimensiones es la clave. Capano y Ubach (2013) afirman que el modelo tripartito de
Baumrind evoluciona el modelo de cuatro tipologías de la crianza de los hijos:
Padres autorizados: Ramírez (2013) asegura que son exigentes y receptivos, supervisan
e imparten estándares claros para la conducta de sus hijos, son asertivos pero no
intrusivos ni restrictivos, sus métodos disciplinarios son solidarios, en lugar de
punitivos. Quieren que sus hijos sean asertivos, socialmente responsables,
autorregulados y cooperativos. Los padres autorizados fomentan el dar y recibir
verbalmente, y comparten con el niño el razonamiento subyacente su política. Ejercen
un control firme en los puntos de divergencia entre padres e hijos, pero no bloquean al
hijo.
Padres autoritarios: Girardi y Velasco (2006) indican que son muy exigentes pero no
responden, esperan que se obedezcan sus órdenes sin explicación. Estos padres
proporcionan entornos bien ordenados y estructurados con reglas claramente
establecidas. Favorecen las medidas punitivas y contundentes para frenar la voluntad
propia en puntos donde las acciones o creencias del niño entran en conflicto con lo que
creen que es la conducta correcta. No fomentan el dar y recibir verbalmente, creyendo
que el niño debe aceptar su palabra por lo que es correcto.
Padres permisivos: Para Capano et al, (2016) estos son muy receptivos pero no
exigentes ni directivos, es decir, son no tradicionales e indulgentes, no requieren un
comportamiento maduro, permiten una autorregulación considerable y evitan la
confrontación. Ellos no establecieron reglas o estándares para sus hijos y no los
responsabilizan por sus acciones.
Padres no involucrados: Capano et al, (2016) señalan que no responden ni son
exigentes. Los padres no involucrados pueden estar emocionalmente desapegados y
deprimidos debido a muchas tensiones en sus vidas que no tienen tiempo para sus hijos.
A ellos no parece que les importe lo que hagan sus hijos o en lo que se conviertan. 
ANEXOS:
ANEXO 01: MODELO DE PRE Y POST – TEST
Conteste las oraciones cuando F sea falso y C cuando sea correcto.
Las agresiones físicas corrigen la conducta de los hijos. 
Comunicarse con gritos hace que los hijos escuchen.
Humillar a los niños hace que estos sean mucho más responsables 
Para educar bien a los niños hay que castigarlos y tener el control para que éstos
entiendan que quien tiene el poder es el padre.
El propósito a largo alcance de los padres es ayudar a sus niños en el desarrollo de su
autoestima y las destrezas de la vida que ellos necesitan para que sean seres humanos
efectivos, felices y puedan contribuir al bienestar de su familia y la sociedad.
Los psicólogos recomiendan que los padres no necesitan ser adiestrados en cómo ser
buenos padres.
Los niños deben aprender que cometer errores es algo que no es correcto.
Si quieres entender a la gente, pon atención a lo que hace y no a lo que dice.
Prometer algo a un niño y luego olvidarse es una forma de desanimarlo. 
Hay cuatro metas erróneas que llevan a conductas negativas. Estas son: Llamar la
atención, el poder, la venganza y la conducta de incapacidad.
Evite las rutinas, ya que hace que tanto el niño, como el adulto se cansen.
La alabanza y la premiación enseñan a los niños a depender de ser juzgados por otros,
en vez de confiar en su sabiduría y evolución propia.

ANEXO 02: DINÁMICA “COMO LA PALMA DE MI MANO” 


Esta actividad es para concientizar a los padres de familia acerca de que si realmente
conocen a sus hijos como la palma de su mano. Se les solicita a los padres de familia
que levanten la mano los que han dicho que conocen a sus hijos como la palma de sus
manos. Posteriormente, se les solicita a los padres de familia si alguna vez han pensado
en que si conocen a sus hijos como la palma de sus humanos. Se les pide que la bajen y
luego se les entrega una hoja de papel para que dibujen la silueta de una de sus palmas,
después ya de acuerdo al tiempo transcurrido, la podrán recortar o no. En este punto se
les solicita a los padres de familia que sin ver la palma de su mano, remarquen las líneas
que esta tiene en la silueta, se les dará un minuto aproximadamente. Culminado el
tiempo se les preguntará si su palma y el dibujo son idénticos. 

ANEXO 03: DIAPOSITIVAS


ANEXO 04: DINÁMICA “DISCIPLINA EN MARCHA"
De acuerdo al ejemplo que se observa en el vídeo “Disciplina Positiva” los moderadores
ejemplificarán una alternativa de solución, y luego solicitarán a los participantes a que
generen alternativas al problema que se visualiza en el video.
https://www.youtube.com/watch?v=ivlVWCQqkWM&t=66

ANEXO 05: VIDEO 


https://www.youtube.com/watch?v=YPc8EIb3DUU&t=212s
ANEXO 06: FICHA DE INFORMACIÓN
ANEXO 07: DIPLOMA DE RECONOCIMIENTO

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