Ensayo Bibliologia

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EL REFORMADOR MATÍN LUTERO Y LA SOLA ESCRITURA

JULIA ERMISENDA FERNÁNDEZ RIVERA.

DOCENTE: Isaías Godoy.

ASIGNATURA: Bibliología

Seminario Reformado Latinoamericano

Villanueva – Honduras

09-04-2021
BOSQUEJO

Introducción

I. Aspectos generales de Martín Lutero y Sola Escritura.

I.I. La Reforma Protestante

I.II. Antecedentes

I.III. La Vida de Martín Lutero

I. IV. La Sola Escritura

II. ¿Cómo Martín Lutero llego a conocer el principio de la Sola Escritura?

III. ¿Cómo Martín Lutero enseño la Sola Escritura?

IV. ¿Cómo Martín Lutero defendió la Sola Escritura?

V. ¿Qué ejemplos de Martín Lutero debe seguir el cristiano de hoy?

Conclusiones
Introducción

Martín Lutero fue un gran teólogo que se dedicó a defender la palabra de Dios

gracias a él se conoce la reforma. El presente ensayo muestra la vida del Reformador

Martín Lutero, sus aspectos generales y la Sola Escritura. Lutero nació en Eisleben en

1483, hijo de una familia de origen campestre y dueña de una mina. Atendía la escuela

latina en Mansfeld desde 1488, continuando sus estudios en Magdeburgo y luego en

Eisenach. En 1501, empieza sus estudios en Erfurt con la intención de hacerse abogado. En

1505, tomó una decisión que iba a cambiar el curso de su vida de manera radical. Decidió

entrar al monasterio Augustino en Erfurt. Esa decisión, junto a la búsqueda de un Dios de

Gracia y la voluntad del mismo, culminó en el desarrollo de la reforma de la iglesia. Las

experiencias negativas que Lutero tuvo con los medios eclesiales de gracia, no solo

favorecieron la crítica respecto al lamentable estado de las prácticas en la iglesia, sino más

bien obligaron a una revisión fundamental de la teología medieval. 1 “Por amor a la verdad y

por el anhelo de alumbrarla”, introduce Martín Lutero (1483-1546) las 95 tesis que clavara

en la puerta de la iglesia del castillo de Wittenberg en 1517. Palabras ciertas, pues en ellas

expresaba no tanto un desafío a la Iglesia, o las bases para un cisma teológico o una

polémica doctrinal,2 Sola Scriptura– Sólo la Escritura Este lema define la función de las

Escrituras como única autoridad sobre la iglesia. Así como los protestantes del siglo

1
Bibliografías, Teólogos reformados, http://inp-biografias.blogspot.com/2008/09/martn-
lutero.html#comment-form (Consultada el 28 de Marzo del 2021).
2
Harold Bloom, Los Lemas de la Reforma- Las Solas de la Reforma, (en la revista TIME de Junio, 1999) 1.
dieciséis y diecisiete rechazaron la autoridad del papado, los protestantes contemporáneos

deben hoy rechazar toda autoridad extra-escritural sobre la iglesia. Cualquier autoridad,

organización, experiencia, liderazgo o práctica dentro de la iglesia debe estar sujeta al lema

de "Solo la Escritura".

I. Aspectos generales de Martin Lutero y Sola Escritura

I.I. La Reforma Protestante

El pensamiento y la obra de Martín Lutero se inscriben en ese gran movimiento

religioso de principios del siglo XVI denominado la Reforma protestante, que finalizó con

la supremacía eclesiástica, religiosa y política de la Iglesia de Roma en Europa creando

iglesias protestantes de diferentes denominaciones. Aunque la Reforma fue esencialmente

un movimiento religioso, produjo importantes cambios en casi todos los aspectos de la vida

social, económica y política, con grandes repercusiones en la historia moderna del mundo

occidental.

Con la disolución de los principios fundamentales del Medioevo y el surgimiento de

las nuevas corrientes intelectuales del humanismo y el Renacimiento, se dieron las

condiciones propicias para el desarrollo de la Reforma protestante, especialmente en los

territorios de habla alemana, en donde el fervor religioso se entremezclaba con el disgusto

hacia la Iglesia romana.3

La Reforma fue denominada “protestante” después de la segunda Dieta de Espira

(1529), en la cual los dirigentes luteranos firmaron una enérgica protesta dirigida al

3
Jean Delumeau, La Reforma, Barcelona, (Labor, 1985), 142.
Emperador manifestando su disconformidad y reafirmando su fe con ahínco. Las cuatro

tradiciones protestantes principales que surgieron de la Reforma fueron la luterana, la

calvinista, la anabaptista y la anglicana, cada una con importantes implicaciones en la teoría

y la práctica políticas.

I.II. Antecedentes:

El desafío de Lutero a la autoridad de Roma es la culminación de un largo proceso

en el cual se combinan una serie de elementos, circunstancias y condiciones que rebasan los

aspectos meramente religiosos. La Reforma no comienza con el famoso episodio de las 95

tesis de Lutero (31 de octubre de 1517), sino en una serie de fermentos de reforma religiosa

profundamente sentida en la Iglesia ya desde finales del siglo XII. Además, durante siglos

hubo una continua lucha por la supremacía del poder político terrenal entre los papas y los

poderes seculares.

La sumisión a Roma, los impuestos, las extensas posesiones de la Iglesia en toda

Europa libres de cargas, la inmoralidad de muchos eclesiásticos en todas las jerarquías del

clero, y otras cuestiones relacionadas con el desarrollo de las monarquías nacionales,

produjeron una gran animosidad en contra de la Iglesia católica. La denominada

“cautividad babilónica” de los papas en Avignon durante el siglo XIV y el consiguiente

Gran Cisma provocaron graves daños en la autoridad de la Iglesia, dividiendo a sus

partidarios en seguidores de uno u otro Papa. Se reconoció la necesidad de una reforma, y

pese a los debates y los programas, no se instituyó ningún cambio en el concilio de

Constanza (1414-18).

En el siglo XIV el inglés John Wycliff atacó al Papa por las mismas cuestiones por

las cuales Lutero lo haría más adelante. Tradujo la Biblia al inglés y predicaba en esa
lengua. Su seguidor en Bohemia, Jan Hus, es ejecutado por herejía en 1415, desatando las

guerras husitas reprimidas por las fuerzas combinadas del Papa y el Emperador. Lutero

subrayó posteriormente que no luchaba contra los papistas a causa de su licenciosa vida,

sino en contra de su doctrina. Hus y Wycliff “han fustigado sólo su conducta, pero cuando

se ataca la doctrina es cuando se agarra al ganso por el pescuezo”.

El mundo de la cristiandad estaba siendo socavado como resultado de una

combinación de factores. Desde lo ideológico, movimientos tan divergentes como el

misticismo, con su énfasis en el encuentro directo con lo divino, y el nominalismo, que

enfatiza lo concreto, desafiaron sin quererlo la estructura jerárquica y corporativa de la

Iglesia de Roma. Los humanistas, con el entusiasmo de sus nuevos descubrimientos en el

campo de la cultura clásica, favorecían el estudio de Grecia y Roma más que las sutilezas

de los teólogos escolásticos. El descubrimiento de América, las nuevas ideas de Copérnico,

y sobre todo la expansión de la información a través de la imprenta, que expuso nuevos

horizontes del conocimiento no asequibles anteriormente.

En lo político, el Imperio estaba acosado por la conciencia de sentimientos étnicos y

nacionales. La consecuencia eran que las agresivas demandas de los grupos nuevos no

podían ser satisfechas por los representantes de las tierras alemanas: los príncipes y los

nobles. La Reforma suministró una nueva teología de la autoridad política y de la relación

entre el hombre cristiano y la autoridad. En cuanto al contexto social, el sistema feudal

estaba siendo amenazado por el crecimiento de una nueva clase, la burguesía, interesada en

el comercio y el intercambio. Los pequeños pueblos se iban convirtiendo en centros


urbanos, y existía un nuevo sentimiento de independencia de los señores feudales. Los

campesinos explotados estaban listos para rebelarse, y así lo hicieron durante la Reforma.4

La Reforma de Lutero se produce en un período caracterizado por el tránsito del

feudalismo al capitalismo, con grandes alteraciones sociales, resistencia de los perjudicados

a la nueva coyuntura, difíciles cambios de mentalidad, y descontento del campesinado en

una Europa desproporcionadamente rural. Si bien Lutero ayudó a darle forma y dirección a

muchas de las nuevas tendencias, gran parte de lo que sucedió posteriormente quedó fuera

de su dirección, intención y dominio.

Antes de Lutero, muchos cristianos consideraban que la Iglesia de Roma había

perdido sus tradiciones espirituales y que se preocupaba excesivamente por el poder

temporal. El aumento de la alfabetización y la impresión de libros a fines del siglo XV

hicieron que muchos cristianos redescubrieran a los antiguos cristianos comparándolos

desfavorablemente con la Iglesia Católica Romana, y sus métodos para financiar las

diversas construcciones en las que ésta estaba abocada fueron muy criticados. Dichos

métodos incluían las indulgencias (pagos por la remisión que hace la Iglesia de las penas

debidas por los pecados), la venta de reliquias, la venta de misas para los muertos,

peregrinajes espirituales, y el logro de “méritos” por donaciones.

Los reformadores, basados en su interpretación de la Biblia, muestran una postura

del cristiano en el mundo diferente de la católica, de la cual surge una visión de la autoridad

política con importantes consecuencias futuras tales como su reforzamiento, sin abandonar

la explicación teológica de que la autoridad derivaba su poder directamente de Dios.

I.III. La vida de Martin Lutero

4
Quentin Skinner, Los fundamentos del pensamiento político moderno, (México, FCE, 1986, Tomo II), 114.
Lutero nació en 1483 y sus primeros años estuvieron limitados a una vida

convencional de educación de tipo medieval y eclesiástica. Hijo de un pequeño empresario

minero, vivió en Turingia hasta los 14 años, trasladándose a estudiar a Magdeburgo, luego

a Eisenach, y en 1501 a la Universidad de Erfurt, dominada por el occamismo. Obtiene el

título de Magister Artium en 1505, pero un incidente cambió su vida: al volver de la

universidad a su casa en julio de 1505 recibió durante una violenta tormenta un rayo que

casi lo mata, rogándole ayuda a Santa Ana y prometiendo convertirse en monje. Dos

semanas más tarde entra en el monasterio agustino de Erfurt, y se ordena como sacerdote en

1507.5

En 1510 va con una delegación a Roma, donde le impresiona la mundanidad del

clero, y en 1511 es transferido a enseñar a la Universidad de Wittenberg, donde

posteriormente se va a doctorar en teología en 1512. Durante este período tuvo la famosa

“experiencia de la torre”, que le dio una nueva visión acerca de los textos bíblicos.

La meta de sus preocupaciones era cómo lograr la salvación eterna, llegando a un

resultado negativo: la voluntad humana era incapaz, por sí sola, de superar el estado de

pecado y alcanzar la justificación ante Dios. No era suficiente con la voluntad, los ayunos,

las vigilias y las penitencias. “El justo vivirá por su fe” había escrito San Pablo, y de aquí

surge la doctrina de la justificación por el puro acto y sentimiento de creer. Los cristianos

se salvan por la fe, no por sus esfuerzos o méritos, que es el don de la gracia de Dios.

Esta doctrina contiene el concepto de predestinación, ya que es la Providencia

divina la que otorga o no esta fe. Por lo tanto, la gracia divina quedaba identificada con la

misma justificación y negada su consecución por las simples obras del cristiano. Estas son

5
Daryl Aaron, Los 40 Cristianos más Influyentes, (Dalas Texas). 115.
conclusiones de Lutero a partir de su interpretación de San Pablo y de ciertos párrafos de la

obra de San Agustín.

En 1517 expone en la puerta de la iglesia de Wittenberg sus 95 tesis en la lengua de

la Iglesia (latín), con la esperanza de precipitar un debate acerca de las indulgencias para las

grandes obras de los papas Julio II y León X. Pero las tesis fueron secretamente traducidas

al alemán y ampliamente difundidas, debido a la insatisfacción con las prácticas de la

Iglesia en tierras germanas. Un tema que no parecía demasiado trascendente se convierte en

un gran problema que logra captar el interés y el apoyo popular para con la figura de

Lutero.

La condena del Papa León X hace que Lutero proclame que el Papado no tiene

poder con respecto a la relación del hombre con Dios, empeorando las cosas. Se realiza un

debate en Leipzig en 1519, en el cual Lutero expresa más claramente los límites del poder

del Papa. El conflicto final ya es inevitable, y en 1520 aparecen los escritos reformadores

esenciales, en los que se precisan la doctrina luterana y se desarrolla su determinismo

místico y religioso hasta las últimas consecuencias.

En estos escritos (“La cautividad babilónica de la Iglesia”, “Tratado sobre las

buenas obras”, “La libertad del cristiano” y “A la nobleza cristiana de la nación alemana”)

Lutero afirma que la autoridad última de la iglesia no es el Papa, el concilio o el Estado

sino la palabra de Dios. Una persona no se salva por sus propios méritos, obras o logros,

sino por la gracia de Dios a través de la fe. Insiste en que cada creyente es un sacerdote,

responsable por sí mismo y sus prójimos ante Dios. Ningún sacerdote o institución puede

responder por cualquier ser humano.


En la controversia con Roma los abusos iniciales contra los cuales protestó

quedaron a un lado, y emergió una nueva concepción de la Cristiandad que rechazaba las

bases mismas de la Iglesia medieval. Lo único que podía hacerse era una reforma total,

llegando Lutero a ciertas convicciones definitivas y fundamentales. Una de las principales

era la norma de que la vida de la Iglesia sólo podía tomarse de las Sagradas Escrituras. De

ahí el rechazo a la infalibilidad del Pontífice en asuntos de fe. Es más, Lutero llegó a la

conclusión de que los concilios no podían ser confiables ya que las decisiones de varios de

ellos habían sido contradictorias.

En 1520 una bula papal había condenado todos los escritos de Lutero, dándole 60

días para retractarse, y el 10 de diciembre de ese año Lutero quemó la bula pontificia como

símbolo de su ruptura con Roma. En un intento por frenar los acontecimientos, el

emperador Carlos V y los príncipes alemanes y eclesiásticos se reunieron en 1521 en la

Dieta Imperial de Worms, instando a Lutero a retractarse. Pero éste se negó una vez más,

ratificando su postura y afirmando que el concilio y el Papa podían equivocarse pero no las

Escrituras. Ese mismo año es excomulgado como hereje.

El Emperador condenó a Lutero, pero el elector Federico el Sabio lo recluyó en su

castillo de Wartburgo para protegerlo de posibles ataques papistas. Es allí que comienza a

traducir las Sagradas Escrituras, una contribución fundamental al desarrollo de la lengua

alemana. Mientras tanto, en Wittenberg empieza a tomar forma la reorganización de la

liturgia y de las iglesias locales bajo el liderazgo de sus colegas Melanchton y Zwinglio

(Zwilling). Comienzan a aparecer autoproclamados profetas que dicen recibir revelaciones

sobre las escrituras y pretenden reorganizar radicalmente a la sociedad. Lutero vuelve a

Wittenberg para solucionar estos problemas, que crecen tanto como su irascibilidad.
La Iglesia católica estaba apoyada por los interesados en preservar el orden

tradicional -el emperador, algunos príncipes y el alto clero-, mientras que el luteranismo

estaba apoyado por los príncipes del norte de Alemania, el bajo clero, los comerciantes y

amplios sectores del campesinado, quienes interpretaban la situación como una posibilidad

para obtener una mayor independencia tanto religiosa como económica.

Cuando los campesinos interpretaron la nueva libertad del cristiano como algo que

favorecía sus propios intereses y se rebelaron, Lutero mostró su peor parte. Si bien

comprendía y simpatizaba con su situación, su juicio fundamentado teológicamente era que

su acción abriría al mundo a la anarquía y que la autoridad constituida debía, por tanto, ser

apoyada en todos los aspectos. Denunció a los campesinos y apoyó los esfuerzos de los

príncipes por restablecer el orden. Durante la controversia y en plena guerra de los

campesinos, se casó con una monja que había abandonado los hábitos.

Después de la Dieta de Augsburgo de 1530, la Reforma se convierte en un asunto de

los príncipes y los Estados. Lutero sigue activo completando la traducción de la Biblia,

escribiendo sermones, y polemizando con el papado. En los últimos años de su vida,

creyendo que el día del Juicio Final estaba cerca, escribió contra los anabaptistas (facción

radicalizada de los reformadores) y una violenta invectiva contra los judíos. Murió en 1546.

I.IV. Sola Escritura

Este lema define la función de las Escrituras como única autoridad sobre la iglesia.

Así como los protestantes del siglo dieciséis y diecisiete rechazaron la autoridad del

papado, los protestantes contemporáneos deben hoy rechazar toda autoridad extra-escritural

sobre la iglesia. Cualquier autoridad, organización, experiencia, liderazgo o práctica dentro

de la iglesia debe estar sujeta al lema de "Solo la Escritura".


Predicar fielmente y escuchar atentamente la Palabra de Dios tiene que volver a ser

un acto central en la adoración cristiana. La aplicación de las enseñanzas bíblicas a la vida

práctica y cotidiana de los cristianos y de la iglesia es nuestra tarea continua. El

entendimiento y la implementación práctica de las verdades bíblicas son indispensables

para la salud, el cuidado y la disciplina de la iglesia.

II. ¿Cómo Martin Lutero llego a conocer el principio de la Sola Escritura?

Fue por medio del estudio de la Biblia y la iluminación del Espíritu Santo. La Sola

Escritura es la causa formal de la reforma protestante. La reforma protestante del siglo XVI

se disparó por el purgatorio, las famosas indulgencias donde la gente pagaba de antemano

para estar en paz con Dios. La respuesta de Lutero ante el asunto de las indulgencias es la

de quien, habiendo encontrado una “solución evangélica a sus propias deudas, le es

imperdonable que la gente fuera privada de su dinero difícilmente ganado a cambio de

promesas carentes de valor”. Sin embargo, tres años más tarde, en los tratados de 1520,

Lutero ha abandonado la posición abierta al diálogo y sujeta de la autoridad eclesiástica,

que había claramente manifestado en las tesis. En 1517 Lutero escribe: “yo aplaudo y sigo a

la Iglesia en todo”, mientras en 1521 declara abiertamente que el Papa es el anticristo y

sostiene su desafío a la Iglesia aun ante la Dieta imperial en Worms. En otras palabras, la

querella doctrinal inflamada por el asunto de las indulgencias

III. ¿Cómo Martin Lutero enseño la Sola Escritura?


La enseño fielmente con claridad y sencillez. La enseño al pueblo con y sin

educación. La enseño por medio de la lectura bíblica devolviendo al pueblo la posibilidad

de poder tener acceso directo a la Biblia. Lutero hizo que el pueblo considerase la

verdadera religión, no como una simple profesión o un sistema de doctrinas, sino como la

vida misma en Dios. Por fin la luz del evangelio rasgo las tinieblas en que vivía y el alma

de Lutero ardía por conducir a los oyentes hacia el cordero de Dios que quita el pecado del

mundo. 6 Lutero afirma que la autoridad última de la iglesia no es el Papa, el concilio o el

Estado, sino la Palabra de Dios. Y es en ese contexto que Jesús le pide al padre que le

glorifique a él, para que Dios.

IV. ¿Cómo Martin Lutero defendió la Sola Escritura?

La defendió con valor y perseverancia. Pero también con fundamento. El llego a la

conclusión que la justificación es solamente por medio de la fe sin las obras. El presento

una defensa o apología de esta doctrina ante las autoridades eclesiásticas de su tiempo. El

desafió todo lo que se interpuso en su camino con tal de defender el principio de Sola

Escritura como la única regla de fe y conducta de la iglesia.

V. ¿Qué ejemplos de Martín Lutero debe seguir el cristianismo de hoy?

El creyente debe imitar a Lutero en su convicción de que la Biblia es la única regla

de fe y conducta. Debe imitarlo en su interés de conocer la verdad de primera mano por

medio del estudio exhaustivo de la escritura y la guianza del Espíritu Santo. Debe imitarlo

6
Orlando S. Boyer, Bibliologia de grandes Cristianos, (EDITORIAL VIDA Deerfield, Florida 33442-8134), 9.
en su valor de desafiar al sistema y defender las verdades fundamentales del evangelio

hasta las últimas consecuencias. Debe imitarle en su manera de vivir por fe.

CONCLUSIONES

Martín Lutero no fue un hombre perfecto, y desde la perspectiva actual tampoco la

totalidad de su pensamiento. Algunos autores sostienen que Lutero guardaba algunos

resabios de antisemitismo, algo inadmisible para el protestante de tan solo unas décadas

después y mucho menos para el de hoy en día. Aun así, a favor de Lutero, vale mencionar

que su mejor discípulo y amigo, el que lo ayudó en la traducción de la Biblia, era judío. Su

nombre, Philipp Melanchton.

Lutero no había objetado el bautismo de los niños, cosa que sí haría Menno Simons,

luego los anabaptistas como Hubmaier y finalmente los bautistas como Roger Williams.

Tampoco renegó del uso de la vestimenta sacerdotal romana entre otras cosas y aún tenía

en mente una Iglesia unificada con un líder único.

Pero debemos comprender el contexto histórico que rodeó a Lutero. Él era un

hombre formado en el seno de la Iglesia católica, que tuvo la oportunidad, la visión y el

coraje de pretender cambiarla, cosa que finalmente no pudo hacer. Pero su aparente fracaso

se cambió en rotundo éxito, ya que nació un movimiento claramente distintivo que los

propios romanos llamaron "Protestantes" Martín Lutero, fue un hombre que sincero y

entregado a Dios tuvo el privilegio de dar forma al trabajo de muchos antecesores


reformadores, algunos laicos y otros sacerdotes, quienes solieran pagar con precio de

sangre su visión.

Lutero abrió la puerta a través de la cual comenzó a filtrar la luz de la Gracia para

todo el mundo que la aceptase. A Martín Lutero le fue concedido por la historia el honor de

ser llamado el Padre de la Reforma, un movimiento que seguiría con cambios y mejoras

hasta hoy en día. Quizá nunca se llegue a la perfección en esta tierra. Más en Gloria, junto a

él y otros héroes o no tanto, podrá finalmente completarse en plenitud y perfección

conforme al proyecto de Cristo.

Sola Scriptura– Sólo la Escritura Este lema define la función de las Escrituras como

única autoridad sobre la iglesia. Así como los protestantes del siglo dieciséis y diecisiete

rechazaron la autoridad del papado, los protestantes contemporáneos deben hoy rechazar

toda autoridad extra-escritural sobre la iglesia. Cualquier autoridad, organización,

experiencia, liderazgo o práctica dentro de la iglesia debe estar sujeta al lema de "Solo la

Escritura".

Predicar fielmente y escuchar atentamente la Palabra de Dios tiene que volver a ser

un acto central en la adoración cristiana. La aplicación de las enseñanzas bíblicas a la vida

práctica y cotidiana de los cristianos y de la iglesia es nuestra tarea continua. El

entendimiento y la implementación práctica de las verdades bíblicas es indispensable para

la salud, el cuidado y la disciplina de la iglesia.


Bibliografía

Aaron Daryl, Los 40 Cristianos más Influyentes, Dalas Texas. 115.

Bibliografías, Teólogos reformados, http://inp-


biografias.blogspot.com/2008/09/martn-lutero.html#comment-form (Consultada el 28 de
Marzo del 2021).

Delumeau Jean, La Reforma, Barcelona, Labor, 1985, 142.

Harold Bloom, Los Lemas de la Reforma- Las Solas de la Reforma, en la revista


TIME de Junio, 1999, 1.

Orlando S. Boyer, Bibliologia de grandes Cristianos, (Editorial VIDA Deerfield,


Florida 33442-8134), 9.

Skinner Quentin, Los fundamentos del pensamiento político moderno, México, FCE, 1986,
Tomo II, 114.

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