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Fecha de entrega: 7 may

Tarea 2 Géneros discursivos del ámbito académico y características de la redacción científica.

Los contenidos de la unidad 2 son los siguientes

- Géneros discursivos del ámbito académico.

- Estructura del trabajo científico.

- Normas técnicas para la elaboración del trabajo académico-científico.

- Lectura y escritura del trabajo académico-investigativo.

- Elementos de redacción científica y estilo. -

Uso apropiado del lenguaje y la organización del trabajo académico-científico el orden y el estilo
den presentación es libre. sin embargo deben estar trabajados todos los puntos. Se les recuerda
que los trabajos deben tener citas y referencias. La citas tienen una calificación de 1 punto y las
referencias igualmente 1 punto.
REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
UNIVERSIDADA NACIONAL ABIERTA
ESPECIALIZACION EN DERECHOS HUMANOS

Géneros discursivos del ámbito académico y características de la redacción


científica

Docente
Prof.: José Rodolfo Contreras

Alumno
Jesús Antonio Linares Campos
7.943.780

Caracas, Mayo 2.021


Géneros discursivos del ámbito académico.

Los géneros discursivos parten de los procesos mentales que se implican a la


hora de la comunicación, los cuales se vinculan de forma compleja al contexto, el
ambiente y en relación con los otros sujetos a través del lenguaje.

El uso de la lengua se lleva a cabo en forma de enunciados (orales y escritos)


concretos y singulares que pertenecen a los participantes de una u otra esfera de
la praxis humana. Son las variadas formas que adquiere la comunicación según la
estructura del acto comunicativo, el número de interlocutores, la finalidad del
discurso y el ámbito en el que nos encontremos.

¿Cuáles son los tres aspectos de los géneros discursivos?

Los tres momentos, aspectos mencionados, el contenido temático, el estilo y la


composición, están vinculados indisolublemente en la totalidad del enunciado,
texto y se determinan, de un modo semejante, por la especificidad de cada esfera
de uso de la lengua que elabora sus tipos relativamente estables de enunciados.

¿Qué es un género discursivo ejemplos?

Son los géneros discursivos que hacen referencia a la comunicación cotidiana


e informal, que se caracteriza por ser simple, espontánea y elocuente. Por
ejemplo: una conversación entre amigos. Géneros discursivos secundarios. ... Por
ejemplo: un texto literario, un discurso político o un informe científico.
Estructura del trabajo científico.

La estructura del trabajo a grandes rasgos deberá contener los siguientes


aspectos fundamentales: elementos preliminares; cuerpo del trabajo y, por último,
elementos finales.

En lo que respecta a los elementos preliminares deben reflejarse los siguientes:


I. Portada del trabajo de grado,
II. Dedicatoria, Agradecimientos y reconocimientos,
III. Carta de aprobación del tutor(a);
IV. Resumen
V. Índice general;
VI. Índice de figuras y de cuadros;
VII. Índice de símbolos y, por último,
VIII. Principales aportaciones que se considera que se realizan con el trabajo.

El cuerpo del trabajo presenta y describe los pasos que rigen el método científico,
haciendo alusión al menos a los siguientes enfoques:
I. Marco Teórico Referencial
II. El Problema
III. Metodología
IV. Análisis e Interpretación de los Resultados;
V. Conclusiones y Recomendaciones – así como Propuestas cuando el
estudio se orienta en la formulación y ejecución de un proyecto factible.
Finalmente, se describen los aspectos que deben tomarse en cuenta en el
momento de presentar las referencias bibliográficas y los anexos.
Normas técnicas para la elaboración del trabajo académico-científico.
¿Es obligatorio poner un encabezado en cada página? ¿Qué elementos debe
contener una referencia bibliográfica? Estas y otras muchas dudas se les plantean
a los estudiantes universitarios cuando deben abordar la elaboración de un trabajo
o documento académico en sus estudios. La mayoría de estas cuestiones tienen
respuesta en diferentes normativas internacionales o específicas de un área de
conocimiento, que sirven como referente para unificar criterios entre las diferentes
instituciones educativas o publicaciones especializadas.

El nuevo modelo educativo que propone el Espacio Europeo de Educación


Superior (EEES) aboga por incrementar el protagonismo de los estudiantes con la
implementación de métodos activos de enseñanza que les permitan desarrollar
habilidades y competencias para aprender por sí mismos.

La presentación es esencial para que los docentes puedan valorar los trabajos
sin dificultad

En este marco, los trabajos académicos cobran relevancia dentro de la


actividad de los alumnos, ya que representan una vía importante para ampliar su
habilidad y capacidad de investigar, reflexionar en profundidad sobre un tema o un
área determinada y aprender a estructurar, sintetizar y presentar de forma
adecuada la información. Este último aspecto, aunque parezca el menos
relevante, es sin embargo esencial para que los docentes responsables de la
evaluación de los trabajos puedan valorarlos y analizarlos sin dificultad y para que
los estudiantes se habitúen a elaborar los documentos con unos criterios y
estándares formales genéricos.

Aspectos formales genéricos

Más allá de los contenidos, el principal referente que hay que tener en cuenta
para la redacción y elaboración de un trabajo académico son las indicaciones
específicas del profesor, que se basan por lo general en las establecidas por el
departamento en el que se integra o por la misma facultad o universidad.

Las normas de Vancouver, ICONTEC o APA son algunas de las más comunes,
Estas pautas son, a menudo, un compendio personalizado de las normativas que
distintos organismos especializados elaboran y actualizan de forma periódica para
unificar criterios de presentación y estructura en diferentes ámbitos de
conocimiento. Las normas de Vancouver, las del Instituto Colombiano de Normas
Técnicas (ICONTEC) o las de la American Psychological Association (APA) son
algunas de las más comunes en el ámbito académico y de investigación.

Entre las recomendaciones genéricas de estilo formal y que se pueden


encontrar en la mayoría de estas normas destacan las siguientes:

Tipo de papel: el tamaño de papel recomendado para los documentos


académicos es Din A-4. En general, los trabajos se deben presentar escritos por
una sola cara y en papel de color blanco.

Márgenes: para la buena legibilidad es importante que el texto "respire", por


eso se debe dejar un mínimo de margen inferior, lateral y superior de 2,54 cm,
aunque para los laterales se recomienda que sea superior (aproximadamente 3,5
cm.)

Interlineado: el número de líneas por página no debe exceder de 30 (incluidas


notas de pie de página o referencias) y el texto se presenta a doble espacio entre
líneas o triple para separar títulos, subtítulos o gráficos. Se debe revisar que no
queden líneas huérfanas (una línea suelta al final de la página) o viudas (una línea
suelta al comienzo de una página).

Tipografía: el tamaño máximo de letra recomendable es de 12 puntos y debe


ser uniforme en todo el texto. Los tipos de letra más habituales son la Curier, CG
Times, Times New Roman, Sans Serif y similares. En cuanto a los estilos, se
puede utilizar la negrita, cursiva o subrayada para resaltar diferentes partes del
texto, pero es conveniente no abusar de estos recursos.

Encabezamiento y numeración: las páginas deben ir numeradas en la esquina


superior o inferior derecha, a unos 2,5 cm del borde de la hoja. Es recomendable
que todas las paginas incluyan un encabezamiento para facilitar la identificación
en caso de separarse del resto del documento.

Normativas para textos científicos y técnicos


Las distintas disciplinas académicas tienen sus propias particularidades. Por
eso, para cada área de conocimiento es conveniente elegir el estilo que se use
con más frecuencia entre los especialistas. En el ámbito de las Ciencias de la
Salud, lo más común es guiarse por los requisitos de uniformidad marcados por el
Comité Internacional de Editores de Revistas Médicas (ICMJE), más conocidos
como normas o estilo Vancouver. De hecho, más de 500 revistas especializadas
de este ámbito se rigen por estos criterios para la publicación de sus artículos.

Para cada área de conocimiento es conveniente elegir el estilo más frecuente

En el entorno científico universitario también es habitual publicar de acuerdo a


los lineamientos establecidos por el Council of Science Editors. Se utilizan
principalmente en el área de la biología, pero también en biomedicina, bioquímica
y otras disciplinas científicas afines.

Normativa para Ciencias Sociales y Humanidades

En Ciencias Sociales y Humanidades, los estilos más utilizados son el Chicago,


el de la American Psychological Association (APA) y el de la Modern Language
Association (MLA). El primero de ellos es el de más antigüedad (1903) y se aplica,
en general, para escritos de las materias de historia, arte, música o literatura, entre
otras. En su web se puede consultar de forma gratuita una guía rápida de la última
edición publicada.

El estilo de la APA está generalizado en el ámbito de la psicología, pero


también se emplea en educación, ingeniería o en el entorno empresarial. En su
portal está disponible un tutorial con las reglas básicas y en este enlace de la
Universidad de Alicante se puede revisar en español una ejemplificación reducida
de esta normativa. En lengua y literatura es frecuente tomar como referente el
estilo MLA, utilizado por más de 1.100 publicaciones especializadas de todo el
mundo. En el documento 'La cita documental', de Mabel Kolesa y Carolina de
Volder de la Universidad de Buenos Aires, se pueden consultar los principales
elementos y ejemplos de referencias en los estilos de la MLA y de la APA.
Normas bibliográficas

La bibliografía y las citas forman parte esencial de cualquier trabajo académico


de calidad y dan solidez al texto. Su función es acreditar los datos de las fuentes
referenciales en las que se basa el documento y facilitar la búsqueda y
localización de las mismas por parte del lector. La información básica que debe
incluir una referencia bibliográfica es el dato del creador y la identificación de la
creación (autores, título y edición). Puede completarse con datos adicionales,
como los editores, el año de publicación o el número de páginas, entre otros.

Aunque en un principio no parece difícil, la tarea entraña cierta dificultad en


cuanto surgen las primeras dudas: ¿cómo se escribe una referencia si son 15
autores los creadores?, ¿se organizan por orden alfabético o por orden de
aparición?, ¿de qué modo se señala una referencia electrónica? Un marco general
internacional para unificar criterios en este sentido lo constituye la norma de la
Organización Internacional para la Estandarización ISO 690-2010, cuyas
principales directrices se pueden consultar en el manual ‘Bibliografías y su
ortotipografía’, una guía práctica para la aplicación de esta norma redactada por
Javier Bezos. De la versión anterior de esta norma (ISO 690-1987), existe un
equivalente en castellano: la UNE 50-104-94, de la Asociación Española de
Normalización y Certificación (AENOR).

Lectura y escritura del trabajo académico-investigativo.


La lectura y la escritura resultan indiscutiblemente un componente esencial de
la formación universitaria; son transversales a todas las prácticas discursivas
propias de la cultura académica y científica: las monografías, los informes, las
ponencias, los coloquios, las respuestas de parcial, los ensayos y artículos
científicos. Se trata de acciones o prácticas concretas, que ocurren en contextos
de aprendizaje y con fines específicos: hacer una exposición en clase, defender
una monografía, publicar los resultados de una investigación o participar en un
debate.
Sin intención de querer agotar el tema hemos elegido un recorrido por los
textos académicos y científicos que con frecuencia se leen y se escriben en la
universidad,

junto con algunas pautas de redacción y revisión de textos. El manual se organiza


en seis módulos: El texto, Los géneros académicos y científicos, La estructura de
los trabajos académicos y científicos, La referencia bibliográfica, La redacción
científica y La revisión del texto.

El texto: Cada vez que se utiliza el lenguaje se produce un texto, el cual puede
ser definido como una unidad de lenguaje en uso. En este manual trabajaremos el
texto como producto de una actividad verbal de carácter social, lo que implica
destacar en él la intención del emisor, la situación de comunicación en la que se
produjo y su carácter estructurado. Para que un texto se considere tal, no puede
ser apenas una sucesión de oraciones, sino que debe ser coherente y cohesivo.
La coherencia implica que se perciba el texto como un todo; la cohesión supone
que las oraciones están conectadas entre sí por elementos concretos.

Coherencia: es la adecuación a la situación comunicativa en la que tiene lugar


(consistencia en registro) y la adecuación de las distintas oraciones que lo forman
en relación con el significado (cohesión). La consistencia en registro se manifiesta
a través de tres factores:

- campo: es la acción social en que se produce el texto, lo que se está


haciendo en ese momento, el marco institucional en que se inserta el texto (dar
una clase, conversar con un amigo, etc.). Esto incluye el tema del texto.

- tenor: es el conjunto de relaciones sociales que existen entre los


participantes (docente-alumno, amigo-amigo, etc.). Incluye ubicación, género y
acontecimiento. Debemos considerar emisor y receptor.
- modo: es el canal por el que se transmite el texto. Esto incluye el medio
(oral, escrito), el tipo de texto (narrativo, conversacional, etc.) y el registro (la
variedad del dialecto elegido)

Cohesión: se manifiesta a través de relaciones léxico-gramaticales. Estas


relaciones son las que indican que un texto no es una mera suma de oraciones
sino una unidad de significado.

Las relaciones cohesivas gramaticales son:

- referencia: se establece a través de pronombres. Un pronombre funciona


como una instrucción de búsqueda: hay que buscar en el texto la expresión a la
que refiere. Según el lugar en que se encuentre esa expresión, la referencia puede
ser:

· anafórica: en una posición anterior en el texto,


· catafórica: en una posición posterior,
· endofórica: dentro del texto,
· exofórica: fuera del texto;

Sustitución: consiste en reemplazar una expresión por otra. La expresión no


es sinónima, pero en el contexto refiere a lo mismo;

Elipsis: es la sustitución por cero, se elimina un elemento que ya apareció


mencionado;

Conjunción: indica de qué manera lo que sigue se relaciona con lo que ya ha


sido mencionado. Las conjunciones pueden ser: aditivas (agregan información),
adversativas (contrastan información), temporales (ordenan en el tiempo),
causales, consecutivas (indican causa-consecuencia).

La cohesión léxica obedece a elecciones que se llevan a cabo dentro de


campos semánticos particulares. Un campo semántico es un espacio textual en el
que se espera la aparición de determinadas palabras en relación con el tema
tratado y el contexto de situación. Las relaciones cohesivas léxicas son:
Reiteración: es la repetición de una misma palabra, un sinónimo, un antónimo
o una palabra general dentro del texto (un hipónimo, un hiperónimo);

colocación: consiste en agrupar palabras porque pertenecen a un campo


semántico común, por ello tienden a co-ocurrir en los textos (la presencia de una
hace esperable la presencia de otras que vienen asociadas en determinados
contextos)

Tipos de textos; Reconocer la especificidad de los tipos de textos que circulan


socialmente es útil para poder entender y producir textos adecuados a cada
situación de comunicación. Tener competencia discursiva implica distinguir una
crónica periodística de una nota de opinión, una biografía de un retrato; también
implica producir adecuadamente un aviso clasificado, una consigna de examen, un
informe de un alumno, entre otros. La preocupación, tanto de la lingüística como
de la didáctica de la lengua, por definir la especificidad de cada tipo de texto lleva
a veces a diferencias terminológicas. Según la bibliografía con la que se trabaje,
se encontrarán los modelos textuales bajo el nombre de “superestructuras”,
“géneros discursivos”, “formatos discursivos”, etc.

Secuencias textuales: Desde el punto de vista de su organización interna, los


géneros discursivos, y en particular los géneros académicos y científicos, se
caracterizan por el predominio de un tipo de secuencia – descriptiva, narrativa,
explicativa o argumentativa.

La descripción: presenta objetos, personas, lugares, sentimientos, utilizando


detalles concretos; pone en evidencia la percepción que tiene el autor a través de
sus sentidos. La trama descriptiva presenta especificaciones y caracterizaciones
de objetos, personas o procesos a través de sus rasgos distintivos. Se acumulan
datos e impresiones, lo que permite aprehender el objeto descrito como un todo.

La narración: presenta una historia, expone un suceso o una serie de sucesos.


La trama narrativa se caracteriza por presentar hechos organizados
temporalmente o sobre una relación de causa-efecto. Importa también el marco en
que suceden los hechos y los personajes que los realizan.

La exposición: presenta y explica ideas, sujetos y argumentos, aclara fines y


muestra la organización. Tiene como objetivo explorar y presentar información. Se
basa en hechos y objetivos. Busca informar, describir y explicar. Sigue modelos
estructurales. Busca claridad.

La argumentación: presenta hechos, problemas, razonamientos de acuerdo


con una opinión, que normalmente es la del autor. En la trama argumentativa se
organiza una demostración a partir de un tema, proposición o hipótesis. Se
explican y confrontan ideas, se acumulan pruebas, se ejemplifica y se llega a
determinadas conclusiones, que pueden ser explícitas o no. Tiene como objetivo
influir y modificar opiniones. Pone énfasis en el intelecto y/o las emociones. Puede
tener estructuras definidas.

Secuencia expositiva: Tiene como objetivo explorar y presentar información.


Se basa en hechos y objetivos. Circula en el ámbito académico y laboral. Busca
informar, describir y explicar. Sigue modelos estructurales. Busca claridad.Por
ejemplo: informes, exámenes, cartas, ensayos, manuales, literatura científica,
noticias, entrevistas…

Secuencia argumentativa: Tiene como objetivo influir y modificar opiniones.


Pone énfasis en el intelecto y/o las emociones. Circula en el ámbito académico,
laboral y político.

estructuras definidas: Puede ser real o imaginado. Por ejemplo: ensayos,


literatura científica, artículos de opinión, ensayos, cartas, editoriales.

- Elementos de redacción científica y estilo.


Para escribir un buen artículo científico debes conocer y aplicar los cuatro
principios de la redacción científica:
1. Precisión- precisión significa usar las palabras que comunican exactamente
lo que quieres decir. Tu meta es transferir información desde tu cerebro al texto y
de allí al cerebro del lector, quien no puede pedirte que aclares sus dudas, ni
mucho menos leerte la mente. Para escribir con precisión es necesario que
desarrolles la capacidad de escribir para el lector. Considera estos ejemplos:

El plancton se distribuyó mejor en ambas bahías. El autor de esta oración sabe


qué significa "mejor", pero ¿lo sabe el lector? Mejor puede significar rápidamente,
uniformemente, según se esperaba, o varias otras cosas.

El propósito de este trabajo fue determinar la flora intestinal de las palomas.


¿Qué significa determinar? ¿Describir, identificar, cuantificar?

Las larvas recién nacidas son color miel. ¿Tiene la miel siempre el mismo color?

2. Claridad- claridad significa que el texto se lee y se entiende rápidamente. El


artículo es fácil de entender cuando el lenguaje es sencillo, las oraciones están
bien construidas y cada párrafo desarrolla su tema siguiendo un orden lógico.
Compara los dos párrafos siguientes. Nota que el primero se entiende fácilmente
pero el segundo es casi imposible de comprender. La diferencia no estriba en el
idioma, recuerda que podemos escribir bien en cualquier lengua.

La hierba guinea, introducida desde África, es una planta perenne de


crecimiento erecto, adaptable muy bien a suelos tropicales y resistente a la
sequía. Es muy apetecible para el ganado y se utiliza principalmente como hierba
de pastoreo, aunque también se recomienda para la producción de heno, ensilaje
o hierba de corte. Su uso como forraje conservado, para empleo durante la época
seca, es limitado debido al bajo contenido de carbohidratos solubles en agua y a
su baja población de bacterias productoras de ácido láctico.

3. Brevedad- brevedad significa incluir solamente la información que es


pertinente al contenido del artículo y comunicarla con el menor número posible de
palabras. Debemos ser breves porque mientras más largas y complejas son las
oraciones, mayor es la probabilidad de afectar la claridad del mensaje y confundir
al lector. Las primeras oraciones a continuación son más largas que las segundas,
pero dicen exactamente lo mismo.

Los muestreos fueron un total de 27 y se realizaron por la noche. Se hicieron


27 muestreos por la noche.

Las observaciones con respecto a las condiciones de temperatura y salinidad


en cada localidad estudiada nos permiten establecer, de una manera general, que
éstas no presentaron grandes variaciones. La temperatura y la salinidad no
variaron mucho en las localidades estudiadas.

4. Formalidad- formalidad significa emplear el idioma al nivel adecuado para


este tipo de comunicación. El artículo científico se redacta con un lenguaje libre de
palabras y giros típicos de la conversación cotidiana. No escribimos en un artículo
“recolectamos un montón de ejemplares”, sino “recolectamos muchos ejemplares”.
Tampoco decimos “hicimos un boquete en la tierra”, sino “excavamos un hueco en
el terreno”. Retomaremos este tema más adelante y veremos ejemplos
adicionales.

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