El Papiro de Tulli
El Papiro de Tulli
El Papiro de Tulli
c
Pero, ¿qué contenía exactamente el Papiro Tulli para que todos hablaran elogios
de él? Muy sencillo: el relato de la aparición de una extraña bola de fuego en los
cielos y las extrañas consecuencias que ello produjo como la lluvia de peces y
aves, es decir, el primer testimonio OVNI de la Antigüedad.
Si bien nadie ha visto jamás este papiro (lo que aparece aquí arriba es una
reconstrucción) la primera referencia conocida apareció en una revista
estadounidense en el año 1953. En él se publicaba por primera vez, casi veinte
años después de su adquisición, la transcripción del hierático y la traducción.
Cuatro años más tarde, en el número 87 del Boletín de la Sociedad Astronómica
de España y América (septiembre de 1957), apareció la primera traducción al
castellano, realizada no directamente del jeroglífico sino de la edición inglesa
publicada en la mencionada revista Doubt; traducción que, errores incluidos, fue
luego empleada por varios investigadores del fenómeno OVNI.
La traducción del Papiro Tulli que aquí presentamos ha sido realizada tomando
como referencia la edición del texto jeroglífico aparecida en la revista italiana I
Misteri en su número 9, año 1 (Noviembre 1995), traducida por el investigador
Solas Boncompagni:
"En el año 22, tercer mes de la estación de peret (la germinación) en la hora sexta
del día (14 h.) [...] dos escribas de la Casa de la Vida vieron un círculo de fuego
que estaba viniendo por el cielo. No tenía cabeza. Su olor era desagradable.
Entonces, ellos tuvieron miedo y huyeron, [...] y fueron a decírselo a Su
Majestad. Todo está recogido en la Casa de la Vida. Su majestad reflexionó sobre
lo que había pasado. Han transcurrido muchos días después de lo ocurrido [...]
Son numerosos al igual que todo [...] Ellos brillan en el cielo como el sol lo hace
sobre las cuatro columnas que sujetan el cielo. [...] Entonces los círculos de fuego
[...] El ejército del rey estaba (en aquel lugar) y Su Majestad los vio (con sus
propios ojos). Esto sucedió después de la hora de la última comida. Allí arriba
(en el cielo), ellos se marcharon hacia el sur. Del cielo cayeron peces y aves [...]
algo inaudito desde el comienzo de los tiempos. Su majestad colocó incienso
para apaciguar a Amón Re, Señor de las Dos Tierras [...] en un documento de la
Casa de la Vida [...] eternidad".