1.2 Exclusión Educativa. Definición y Factores
1.2 Exclusión Educativa. Definición y Factores
1.2 Exclusión Educativa. Definición y Factores
Definición y factores
En determinadas ocasiones hablar de conceptos como exclusión, marginalidad, fracaso escolar nos aleja de la naturaleza de los procesos que los
contienen, y sin quererlo nos despegamos de ellos, en ocasiones por falta de capacidad para analizarlos, otras
para intervenir sobre ellos, otras por
el sentimiento de carga que desarrollar la labor docente con todos sus rigores nos exige.
Por eso se nos ha ocurrido ejemplificar situaciones de exclusión cotidianas que en nuestra experiencia como miembros
de diversas comunidades
educativas hemos vivenciado, sólo pretendemos simplificar o hacer más cercano un concepto con el que convivimos intensamente. Estas son
algunas ejemplificaciones:
a. Alumno de 2º Primaria que reiteradamente llega tarde al Centro y se le castiga manteniéndolo un tiempo fuera del aula, el alumno no es
responsable de ese hecho puesto que es la familia la que acompaña hasta la puerta del colegio al niño.
b. Alumna de 4º Primaria que es etiquetada constantemente como agresiva por sus compañeros y por los padres de los mismos debido a que
utiliza insultos cuando se ve en situaciones que no sabe manejar. Esta conducta es consecuencia del rechazo que la
alumna percibe en su
entorno, pero tanto los alumnos como sus familias simplifican el hecho intentando culpabilizarla.
c. Alumno de 6º Primaria que refleja una trayectoria de hurtos desde pequeño, con una familia con problemas relacionados con el consumo de
drogas que ha desencadenado que el niño haya sido acogido por la familia de la madre. Uno de sus compañeros le
invita a pasar una tarde
a su casa y el aprovecha para sustraerle un juego de ordenador. Se descubre a sí mismo llevando el juego al aula, por lo que el centro toma
la decisión de convocar al Consejo Escolar para imponerle una sanción.
d. Alumno de Secundaria que suspende reiteradamente debido a múltiples dificultades y se achaca su falta de estudio como única causa del
fracaso escolar.
e. Alumna de nacionalidad extranjera que superada gran parte de sus barreras lingüísticas en la secundaria, llega al Bachillerato donde
constantemente recibe el mensaje (no explícito) por parte de algunos docentes que éste no es el lugar adecuado para
continuar con su
formación.
Podríamos enumerar seguramente muchos más, ¿Cuáles forman parte de la normalización de la exclusión con la que convives?
Para ahondar en la definición del concepto de exclusión educativa vamos a conocer a otro gran referente de la inclusión y la exclusión en España,
es el profesor de la Universidad de Murcia, Juan Manuel Escudero. Creemos que es clara y concisa la definición que él mismo recoge en el Informe
que UNICEF en el año 2017 publicó titulándolo:
Factores de la exclusión educativa en España: Mecanismos, perfiles y espacios de intervención
.
Nos parece de especial importancia el capítulo dedicado a la Voz de los Estudiantes que te invitamos a leer para entender mejor también este
concepto desde la mirada del alumnado que tan bien queda recogida en el trabajo de documentación que han
realizado desde esta organización.
Por último te invitamos a que conozcas esta reflexión del profesor Juan Manuel Escudero en el que aborda sintéticamente el papel que la escuela
tiene en la exclusión educativa, la referencia del vídeo es Fundación Bofill (2016), ¿Qué papel tiene la escuela en la exclusión educativa?-Juan
Manuel Escudero, corresponde a una grabación realizada en el marco del Seminario Internacional ABJOVES, celebrado por la Universidad
Autónoma de Barcelona durante el 12 y 13 de mayo de 2016.
Juan Manuel Escudero. Entrevista: "¿Qué papel tiene la escuela en la exclusión educativa?" del canal Fundacio Bofill (Todos los derechos
reservados)
2. Factores de la Exclusión Educativa
Como SIIS indica “se trata de un modelo holístico que permite identificar la multidimensionalidad de las formas de exclusión educativa, aunque –en
función del contexto territorial, social y escolar– pueden expresarse de manera diferente”.
En la tabla titulada Modelo de factores de exclusión educativa, se resumen algunos de los principales factores de la exclusión educativa
registrados en el informe anteriormente citado:
NIVELES
DE INTERVENCIÓN
Es necesario que le dediques un tiempo extenso a pasear por esta tabla e ir parándote en cada una de sus filas y columnas, pensando qué
decisiones implica cada una de estos factores en tu práctica docente y en la calidad de los procesos inclusivos que
recibe el alumnado con el que
trabajas.
Hemos creído necesario incorporar este concepto en esta última parte del Bloque 1 porque consideramos que no podemos olvidar las
consecuencias de las políticas y prácticas educativas en el alumnado excluido y en la sociedad en su conjunto.
Existen múltiples definiciones de este concepto. A nosotros nos parece interesante la elaborada por Ander-Egg (1999:144), que propone concretar
el concepto de la siguiente manera: “[…] Se manifiesta en el hecho de que un alumno/a o un grupo de alumnos/as
no alcanzan el nivel de
conocimientos y capacidades exigidos para el logro de determinados objetivos educativos”. Estadísticamente se refiere al colectivo de personas
que no han logrado completar con éxito las distintas etapas de
enseñanza obligatoria, ya sea por abandono escolar prematuro, por dificultades
graves de aprendizaje, entre otros.
De esta manera se concreta el fracaso en aquellos alumnas y alumnos que han evidenciado un bajo rendimiento académico y no logran la
adquisición de un conjunto de conocimientos mínimo, a las personas que abandonan la escolarización obligatoria
antes de obtener el título
correspondiente, a las personas que terminan la escolarización obligatoria sin lograr el título correspondiente y, a las personas que en la edad
adulta sufren consecuencias sociales y laborales por no haber logrado una correcta
preparación académica.
Nos gustaría que le dedicaras 15 minutos a visionar este vídeo donde el profesor Escudero aborda con especial brillantez, a nuestro entender, cuál
es la relación entre los dos conceptos exclusión y fracaso escolar y las causas que lo sostienen:
Si después del visionado quieres abordar con más profundidad este concepto tan necesario de entender cuando hablamos de inclusión y
exclusión, te proponemos la lectura voluntaria del artículo titulado FRACASO ESCOLAR, EXCLUSIÓN EDUCATIVA: ¿De qué se excluye y cómo?,
escrito por Juan Manuel Escudero en el año 2005.
Las barreras para el aprendizaje y la participación son todos aquellos obstáculos y dificultades que el alumnado experimenta para poder
incorporar aprendizajes y competencias, integrarse en la comunidad educativa y poder participar de
manera afectiva dentro y fuera de ella.
El concepto fue acuñado en el año 2002 por Tony Booth y Mel Ainscow, “En el Index se exonera el concepto de “necesidades educativas
especiales” por el de “barreras para el aprendizaje y la participación"”(Calvo,
2016).
Estas barreras pueden ser de todo tipo, aparecen por las circunstancias y problemas sociales y económicos que afectan la vida de los individuos.
Podríamos clasificarlas del siguiente modo:
Físicas: carencia de accesibilidad física, dificultades para la accesibilidad a la comunicación, carencia de condiciones arquitectónicas en la
escuela, etc.
Actitudinales
o sociales: prejuicios que se tengan con relación a las discapacidades, sobreprotección, ignorancia, discriminación, etc.
Curriculares: metodologías inadecuadas, tradicionales o grupales que no benefician a todos los alumnos, formas de organización y evaluación
que no toman en cuanta las condiciones o necesidades individuales de los alumnos, estilos de evaluación
rígidos y poco adaptables, etc.
Se entiende entonces que las barreras para el aprendizaje y la participación trascienden el ámbito meramente educativo, por lo que tocan y afectan
también al profesorado, al personal administrativo, a la familia y al Estado. Echeita (2002) refleja las
siguientes dimensiones de estas barreras en el
ámbito escolar:
El «Index for inclusion» presenta tres dimensiones para abordar la eliminación de estas barreras de participación y aprendizaje: creación de
culturas, elaboración de políticas y desarrollo de prácticas inclusivas.
1. Crear culturas inclusivas: “Se pretende crear una comunidad escolar segura, acogedora, colaboradora y estimulante en la que cada uno es
valorado como eje fundamental para que todo el alumnado tenga mayores niveles de logro” (Calvo, 2016).
2. Elaborar políticas inclusivas: “Asegurar la inclusión plenamente en el desarrollo del centro educativo, para mejorar el aprendizaje y la
participación de todo el alumnado. Esta dimensión entiende el “apoyo” como aquellas actividades que
aumentan la capacidad de un centro
educativo para atender a la diversidad del alumnado” (Calvo, 2016).
3. Desarrollar prácticas inclusivas: “Busca que las prácticas del centro educativo reflejen la cultura y las políticas inclusivas escolares”(Calvo,
2016).
4.1. Principales barreras
Queremos abordar con mayor profundidad este apartado con el fin de poder habilitar un adecuado diagnóstico de las barreras que nos afectan de
manera consciente o inconsciente a nuestra práctica educativa cotidiana, de esta manera pensamos que facilitaremos
la labor de intervención y
eliminación de las mismas. Destacamos las siguientes:
2. Barreras socioeconómicas
La realidad socioeconómica a la que pertenece el alumno facilita o no que pueda tener capacidad para adquirir los materiales necesarios para
desarrollar la propuesta didáctica, incluso para que sus condiciones físicas sean adecuadas para el aprendizaje.
La escuela pública tiene un papel
fundamental en hacer desaparecer esa barrera, no obstante, debemos ser conscientes que el nivel socioeconómico impacta a nivel global en el
desarrollo del aprendizaje del alumnado. Hemos comprobado por ejemplo como
la incorporación de la escuela virtual durante el período de
confinamiento, por ejemplo, ha aumentado esa brecha de desigualdad que a veces es menos evidente en el contexto presencial. Afecta a la
capacidad del alumno de tener recursos más allá de
la escuela para seguir formándose, al apoyo educativo que puede recibir en casa, a las
actividades extracurriculares que pueda desarrollar y en definitiva al conjunto de situaciones que se dan día a día en su formación.
3. Barreras actitudinales
El rechazo, la segregación, la exclusión han formado parte de la historia de la escuela cuando normalizar la diversidad se convierte en una tarea
llena de actitudes de desconocimiento, de ignorancia o de falta de habilidades para relacionarse con la misma.
Afecta a todos los niveles
socioeconómicos, pues nadie está exento de poder ser objeto del rechazo de los demás por manifestarse “diferente”. Lo hemos vivido con los
alumnos que por su nacionalidad, por su necesidad educativa especial, por su género,
por su orientación sexual han sido excluidos por escuelas
donde se obviaba estas diferencias en pro de un marco normalizador absolutamente excluyente.
Este tipo de exclusión intervienen todos los agentes del sistema educativo que incorporen prejuicios y prácticas a veces no reconocidas
segregadoras.
4. Barreras arquitectónicas
No son pocos las escuelas que no reúnen las condiciones ideales para facilitar el aprendizaje y la inclusión. Y no sólo afecta a la facilidad para que
alumnos con necesidades especiales motóricas puedan acceder con facilidad y autonomía en su interior,
sino también a otro tipo de barreas que
afectan a la capacidad del profesorado en realizar propuestas de trabajo inclusivas, como podría ser el caso de los equipos de trabajo cooperativo
en el aula, que en demasiadas ocasiones se encuentran con aulas
donde operar adecuadamente es casi imposible. Por tanto, la mirada sobre las
barreras arquitectónicas debe ser más global y analizar en qué medida afecta a la participación de toda la comunidad educativa y por tanto al
aprendizaje que se desarrolla en
el seno de la misma.
5. Barreras prácticas
Están relacionas con el diseño de programas curriculares que sean versátiles, flexibles y adaptables a cada comunidad escolar e incluso a cada
individuo en particular; prácticas metodológicas que potencien las capacidades de los alumnos y que afectan
por su puesto al currículum y a su
evaluación.
6. Barreras comunicativas
La calidad de la comunicación, afecta no sólo a las habilidades comunicativas que dentro del aula desarrollan docentes y alumnado (su claridad
comunicativa, su empatía, o asertividad por ejemplo), también afecta al tiempo que planificamos para que todos
tengamos nuestro espacio para
comunicar dentro del aula, para dar espacio a las voces de todos y todas, y por supuesto habilitando las adaptaciones comunicativas que pueda
conllevar la presencia en el aula con alumnado o docentes que pudieran necesitar
diferentes herramientas que faciliten la comunicación con los
otros, como podría ser en el caso de alumno o profesorado con deficiencia visual o auditiva.
También hay otras maneras de conceptualizar las barreras y en ese sentido nos parece más que sugerente este artículo escrito por Jaume
Carbonell para Diario de Educación (2019), titulado "Abajo las diez barreras que impiden una educación inclusiva y emancipadora", en el que
la
clasificación que el autor desarrolla también acoge otras dificultades a las que se enfrenta la escuela para poder incorporar las prácticas inclusivas.
Y por último, también nos parece muy interesante cuál es la percepción de los y las docentes respecto a las barreras que identifican en su labor de
facilitador inclusivo. Para ello acudimos a las conclusiones de una investigación realizada en la
Universidad de León con 80 docentes trabajando en
la etapa de Primaria y Secundaria. El artículo escrito por Gonzalez-Gil, F., Martín-Pastor, E., Poy Castro, R. (2019 se titula Educación inclusiva:
barreras y facilitadores para su desarrollo. Un estudio desde la percepción del profesorado. Revista de curriculum y formación del
profesorado. VOL.23, Nº1.
Una nueva propuesta de lecturas para cuando encuentres el momento para profundizar en el significado de exclusión y fracaso escolar:
Moreno Yus, M. Á. (2013). La guetización escolar, una nueva forma de exclusión educativa.
Revista de educación, (361), pp. 358–378.
Pàmies, J., y Castejón, A. (2015). Distribuyendo oportunidades: El impacto de los agrupamientos escolares en la experiencia de los estudiantes.
RASE: Revista de la Asociación de Sociología
de la Educación, 8(3), pp. 335–348.
Rodríguez-Martínez, C., y Blanco García, N. (2015). Diferencias de género, abandono escolar y continuidad en los estudios.
Revista Ibero-
americana de Educação, 68, pp. 59–78.
Tarabini, A. y Bonal, X. (2016) (dir). Los principios de un sistema educativo que no deje a nadie atrás.
Save the Children. Julio/2016