Bonos Del Fundador
Bonos Del Fundador
Bonos Del Fundador
nominal, pero que contienen algún tipo de derecho o privilegio a favor de su titular.
De acuerdo con los artículos 110 y 111 de la Ley General de Sociedades Mercantiles
(LGSM), estos documentos tienen la naturaleza de títulos valor.
¿Forman parte del capital social?
Aunque los bonos del fundador sean títulos de crédito al igual que las acciones,
estos no se computarán como parte del capital social, tal y como lo indica el
precepto 107 de la LGSM.
Derechos inherentes
La principal ventaja de los bonos del fundador es que conceden beneficios
económicos a sus titulares distintos a los derechos que tienen por ser accionistas,
lo cual se traduce en una mayor participación de las utilidades que la empresa
genere al cierre de cada ejercicio. El porcentaje de participación a los fundadores
queda al arbitrio de las partes, pero no puede exceder del 10% de las utilidades
anuales y, en caso de establecer otro tipo de beneficio, este no debe menoscabar
el capital social ni el porvenir de la entidad, pues de lo contrario el pacto será nulo.
Vigencia
Los privilegios de los fundadores no son a perpetuidad. El numeral 105 de la LGSM
indica que estos no podrán exceder de más de 10 años a partir de la fecha de
constitución de la sociedad.
Restricciones
El beneficio que ampare el bono del fundador no debe satisfacerse hasta que los
demás accionistas hayan percibido un dividendo del 5% sobre el valor de sus
acciones.
Además, los bonos no darán derecho a sus titulares a participar en el haber social
que resulte de la disolución de la sociedad, ni para intervenir en la administración.
Canje
Se estima que los bonos de fundador pueden ser convertibles en acciones, ya que
el artículo 109 de la LGSM indica que “Los tenedores de bonos de fundador
tendrán derecho al canje de sus títulos por otros que representen distintas
participaciones, siempre que la participación total de los nuevos bonos sea
idéntica a la de los canjeados”. En dicho supuesto, el canje les atribuye a los
titulares un derecho sobre el capital social, el cual se representará con la emisión
de los correspondientes títulos accionarios.