Obsolescencia Programada en Smartphones

Vida útil de nuestros teléfonos móviles en la actualidad
En la actualidad más del 68% de la población mundial cuenta con un dispositivo

electrónico móvil (celular) y es porque éstos cada vez se adaptan más a las necesidades
de los humanos como tomar fotos o videos, comunicarse con más personas sin importar
la distancia entre ellos, utilizar la web para múltiples beneficios, etc. Pero esto lleva a
que dependamos en muchos aspectos de éstos dispositivos y es así como los fabricantes
logran crear un mercado redondo y consumista en ésta época moderna, antes un celular
que solo cumplía necesidades básicas como hacer y recibir llamadas telefónicas, hora,
calendario y calculadora podía tener un ciclo de vida útil que variaba entre 5 y 10 años,
ahora con la llegada de los smartphones éste ciclo de vida se acorto a un promedio entre
2 y 5 años de vida útil gracias a la obsolescencia programada.
La obsolescencia programada es el método por el cual un fabricante busca que a largo
plazo su producto funcione deficientemente o no lo haga. En el caso de los celulares los
métodos son dejarlos sin algunas actualizaciones de software o que con el paso del
tiempo el desgaste de algunos componentes provoque daños en el dispositivo que en la
mayoría de los casos no se pueden reparar, o resulte muy costoso, cumpliendo así con
su ciclo de vida útil y consiguiendo que el consumidor deba comprar un nuevo
dispositivo logrando un beneficio para el fabricante. Esta idea surgió en el siglo 19
cuando industrias como Philips notaron que sus consumidores casi no compraban
nuevas bombillas debido a que la vida útil de estas era muy larga, tomando como
medida reducir estas horas de vida útil progresivamente para que así sus consumidores
necesitaran de estas con mayor frecuencia, desde entonces las industrias han
evolucionado buscando vender más sin tener en cuenta que esto genera mayor
contaminación ambiental y la gran industria de la telefonía móvil no es la excepción.
Las autoridades también han tomado medidas debido a que la obsolescencia
programada para muchos se considera una práctica comercial injusta, en el año 2018 en
Italia fue sancionada Apple, un reconocido fabricante de dispositivos electrónicos como
teléfonos celulares, computadores, tabletas, etc. Debido a que mediante una
actualización de software obligatoria dejó las baterías de algunos de sus modelos
inutilizables, logrando que sus consumidores les compraran nuevas baterías o en
algunos casos los nuevos modelos de estos dispositivos que para entonces eran mucho
más costosos. También se conocen casos donde mediante una actualización de software
los dispositivos simplemente dejan de funcionar, actualmente la empresa en la industria
de telefonía móvil con más obsolescencia programada es Apple, debido a que lanza muy
constantemente actualizaciones de software para sus dispositivos y con cada una de
estas los dispositivos más viejos van perdiendo características en base a los nuevos que
hay en el mercado, además de que muy constantemente saca nuevos modelos de sus
dispositivos con pocos beneficios con respecto al modelo inmediatamente anterior,
gracias a que esta empresa en la actualidad cuenta con un gran número de fieles
consumidores. Todo esto se logra creando una gran cultura consumista, desde las redes
sociales o comerciales de televisión debido a que los seres humanos consumimos por
impulso o gusto más que por necesidad y es allí donde está el error.
El hecho de establecerle una vida útil a un dispositivo electrónico como el celular el
cual la mayoría de sus consumidores ven como necesario e indispensable en su vida
diaria resulta gravemente perjudicial para el medio ambiente y por ende para nosotros
mismos, ya que por un lado conlleva a que haya también una mayor demanda de los
recursos naturales que son necesarios para la fabricación de estos dispositivos, puesto
que a medida que se cumple la vida útil de un teléfono celular, que cada vez se vuelve
más necesario en la vida de cada persona y se compra uno nuevo, se está consumiendo
también los materiales y recursos naturales invertidos en este nuevo dispositivo, los
cuales actualmente no tienen una medida o regulación mayor a las que ya existen por
minería en nuestro país y por otro lado los desechos que estos generan deben tener un
proceso de recolección adecuado, pues algunos de sus componentes le dan la calidad de
residuo peligroso y estos deben ser tratados según la Ley 1252 de 2008 y el Título 6 del
Decreto 1076 de 2015, y aun así en todos los casos primero llegan los productos y luego
de generar grandes cantidades de residuos se empiezan los proyectos para una correcta
recolección de estos, los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos si son regidos por
una ley en Colombia la Ley 1672 de 19 de junio de 2013, en donde se establecen
algunas obligaciones para los productores y comercializadores de estos dispositivos
pero pese a haber leyes que determinan el manejo de estos residuos, no hay una
referencia que determine una disminución de estos.
Nuestros gobernantes deberían empezar a ver más allá de los beneficios económicos y
comodidades que estos dispositivos nos generan y empezar regular a las grandes
industrias de la telefonía móvil, un método simple es exigir ciclos de vida más largos de
estos dispositivos para así permitir la importación y comercialización de estos dentro de
nuestro territorio nacional, así estos fabricantes emplearían la menor cantidad de los
recursos naturales necesarios para la producción de estos y reducirían en gran medida el
impacto ambiental que esta industria genera, un claro ejemplo de que esto es posible es
el de la bombilla centenario, la cual fue fabricada antes de que se conociera la
obsolescencia programada y que actualmente lleva funcionando más de 120 años.
También podría incentivar la creación de campañas dedicadas a la recolección de dichos
residuos peligrosos y altamente contaminantes para nuestro medio ambiente. Por otro
lado, nosotros podríamos empezar a quitarnos esa idea del consumismo por impulso o
gusto, propias del ser humano moderno e iniciar con el consumismo por necesidad,
cuidar de manera adecuada nuestros teléfonos móviles y siempre que se pueda realizar
la reparación de estos en lugares donde se recicle este tipo de tecnología, así
combatimos de la mejor manera a la obsolescencia programada y reducimos el impacto
ambiental generado por esta industria.
En conclusión, actualmente no se llevan los controles adecuados para combatir la
obsolescencia programada, la vida útil de nuestros teléfonos móviles no puede ser tan
corta ya que motiva al consumismo y esto conlleva a un mayor impacto ambiental
negativo. Debemos empezar a cambiar nuestras costumbres y no solo con los teléfonos
móviles, actualmente casi todas las industrias nos inducen al consumismo y realmente
en Colombia los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos aumentan de manera
exponencial sin notar una disminución, la obsolescencia programada ya no es algo que
solamente afecta nuestra economía, sino que también pone en duda nuestra
supervivencia en este planeta.i
i
Andromides – abril de 2019 – se consultó en Medio Ambiente
https://n9.cl/1oyh8
 Macias Gómez abogados - Impactos ambientales de la obsolescencia programada - noviembre 29 de 2017
https://n9.cl/pmc30

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En la actualidad más del 68% de la población mundial cuenta con un dispositivo

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