Hora Santa Platicas 2022
Hora Santa Platicas 2022
Hora Santa Platicas 2022
Sacerdote: Hoy estamos aquí, todos juntos, con nuestro gran amigo, Jesús Eucaristía. Estamos en
manos de Dios, nos tiene bien agarrados, y nos sentimos seguros.
Señor Jesús, acompáñanos, ven a nuestras vidas, danos la luz necesaria para ver tus huellas en nuestra
historia, danos la fuerza para seguir adelante y ayúdanos a vivir con ojos limpios y corazón íntegro.
Padre nuestro… Ave María, Gloria… Canto.
Sacerdote: Somos una piedra tosca que el Padre ha extraído de la cantera de la vida. Sobre esta piedra
el Espíritu Santo tiene que esculpir la figura deslumbradora de nuestro Señor Jesucristo. Padre
nuestro… Ave María, Gloria… Canto.
Sacerdote: Toda la vida con Dios se dirige a esto; y esto la justifica: repetir otra vez en nosotros los
sentimientos, actitudes, reacciones, reflejos mentales y vitales, la conducta general de Jesús. Padre
nuestro… Ave María, Gloria… Canto.
Guía: Dispongamos todo nuestro ser, olvidemos nuestras habituales preocupaciones y entremos en
comunicación con el Señor que quiere hablarnos hoy en esta Hora Santa.
Mujeres: Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el cielo, Padre amoroso del pobre; don, de tus
dones esplendido; luz que penetras las almas; fuente del mayor consuelo.
Hombres: Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo, tregua en el duro trabajo, brisa
en las horas de fuego, gozo que enjuga las lágrimas y reconforta en los duelos.
Mujeres: Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos. Mira el vacío del hombre si Tú
le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no envías tu aliento.
Hombres: Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las manchas, infunde calor de vida
en el hielo, doma el espíritu indómito guía al que tuerce él sendero.
Todos: Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos. Por tu bondad y tu gracia, dale al esfuerzo
su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu gozo eterno. Amén.
Todos: Oh Dios, de quien procede toda paternidad en el cielo y en la tierra; Padre, que eres
Amor y Vida, haz que cada familia humana sobre la tierra se convierta, por medio de tu Hijo,
Jesucristo, «nacido de Mujer», y del Espíritu Santo, fuente de caridad divina, en verdadero
santuario de la vida y del amor para las generaciones que siempre se renuevan.
Haz que tu gracia guíe los pensamientos y las obras de los esposos hacia el bien de
sus familias y de todas las familias del mundo.
Haz que los jóvenes generaciones encuentren en la familia un fuerte apoyo para su
humanidad y su crecimiento en la verdad y en el amor.
Haz que el amor, corroborado por la gracia del sacramento del Matrimonio, se
demuestre más fuerte que cualquier debilidad y cualquier crisis, por las que a veces pasan
nuestras familias.
Haz, finalmente, te lo pedimos por intercesión de la Sagrada Familia de Nazaret, que
la Iglesia en todas las naciones de la tierra pueda cumplir fructíferamente sumisión en la
familia y por medio de la familia.
[1]
Tú, que eres la Vida, la Verdad y el Amor, en la unidad del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.
I PARTE
“AGRADEZCAMOS AL SEÑOR POR LA FAMILIA QUE NOS HA DADO”
[2]
II PARTE
“PIDAMOS PERDÓN POR LOS PECADOS DE LAS FAMILIAS”
Coro 1.- La alegría del Padre, es ofrecer los brazos abiertos al hijo que regresa arrepentido.
La alegría del hijo, es abrir su corazón para derramar, hasta la última gota de sangre para
purificarnos de nuestros pecados, y la alegría del Espíritu Santo, es llenar con su presencia,
de paz y de gracia, el alma de los penitentes.
Pidamos, pues, perdón, todas las familias, porque hemos pecado mucho de
pensamiento, palabra, obra y omisión.
Todos.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro 2- Por los esposos divididos y distanciados que se han dejado de amar.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro 1.- Por las infidelidades matrimoniales que abren heridas profundas en el corazón de
su pareja.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro 2- Por los esposos rutinarios que han convertido el amor en una obligación.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro 1.- Por los esposos egoístas, que esperan solo recibir servicios y muy poco quieren
darlos.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro 2.- Por los esposos violentos, de palabra y de obra, que rompen la paz y la sana
convivencia familiar.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro1.- Por los esposos que se hieren y se difaman ante los demás.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro2.- Por los esposos rencorosos, que guardan las ofensas y son incapaces de perdonar.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro1.- Por los esposos indiferentes ante su familia, que se encierran en su mundo y no abren
la puerta de su intimidad para compartirla con su familia.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro2.- Por los esposos que viven en mutua soledad, compartiendo una misma casa y una
misma familia.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro1.- Por los esposos que divorciados, que sufren y hacen sufrir a toda su familia.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro2.- Por los que viven en unión libre, que por desidia o mala voluntad, no arreglan sus
vidas, para darles a sus hijos y a su amor, el testimonio y la fuerza de la gracia.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro1.- Por los que destruyen la vida familiar, mediante el adulterio, creando
distanciamientos, riñas y escándalos.
[3]
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro2.- Por los padres que les niegan una mejor vida a sus hijos.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro2.- Por los padres que escandalizan y dan mal ejemplo a sus hijos.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro1.- Por los padres que maltratan y golpean.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro2.- Por los padres que descuidan, voluntariamente la recta educación de sus hijos.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro1.- Por los padres que no dedican tiempo para estar con sus hijos y muy poco los
escuchan.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro2.- Por los padres que no acompañan a sus hijos en el desarrollo y crecimiento.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro1.- Por los padres que se despreocupan de sus hijos y no les importa corregir sus malos
hábitos y comportamientos.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro2.- Por los abusos y malas intenciones de algunos padres para con sus propios hijos.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro2.- Por los padres que poco preparan a sus hijos, espiritual e intelectualmente, para
enfrentar la vida.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro1.- Por los padres que irresponsablemente se ausentan del hogar, teniendo poca
presencia ante sus hijos.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro2.- Por los padres que no respetan la libertad de sus hijos, ni se interesan en formarlos
para que sepan decidir bien, por ellos mismos.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro1.- Por los padres que confunden a los hijos y los desorientan.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
Coro2.- Por los padres que consienten los vicios de sus hijos y hasta los apoyan y de alguna
forma, los fomentan.
T.- Perdón, Señor, y ten misericordia de nuestras familias.
CANTO:
III PARTE
“SUPLICAMOS EL BIENESTAR DE NUESTRAS FAMILIAS”
[4]
Guía.- Porque vivimos siempre necesitados y el Señor quiere que le pidamos con insistencia
y sin desfallecer.
Suplicamos y pedimos con grande fe, pensando que Dios es quien mejor conoce lo
que necesitamos.
Buscamos en todo momento hacer su voluntad, por encima de lo que pedimos, porque
sabemos que Él siempre nos dará lo mejor.
Pero, lo que más le pedimos, es que venga a nosotros su Reino, ahora y en la hora de
nuestra muerte.
Pidamos, pues, con toda confianza a nuestro Padre que siempre nos escucha.
ORACION FINAL
Dios padre, creador del cielo y de la tierra,
por los méritos de tu Hijo Jesucristo y por
la acción del Espíritu Santo en nuestros corazones,
te alabamos y te damos gracias por el don de la vida e imploramos
tu luz y fuerza para afrontar los momentos difíciles y de sufrimiento,
sin perder nunca la esperanza.
Ayúdanos a reconocer, a respetar y amar la vida humana.
que experimentemos la solidaridad, dentro y alrededor de la familia,
con atención solicita, vigilante y cordial en las pequeñas y humildes cosas de cada día.
Que la familia de origen matrimonial entre un hombre y una mujer siga siendo el santuario
de la vida.
Que nos empeñemos por el bien común, trabajando para que las leyes e instituciones del
Estado respeten, defiendan y promuevan el derecho a la vida, desde la concepción hasta la
muerte natural, y que todos a una nos empeñemos en difundir la cultura de la vida. Amén
Bendición.
[6]