Configuraciones 53
Configuraciones 53
Configuraciones 53
FIGURA
Núm. 53
CION Enero-diciembre de 2022
ES
Rolando Cordera Campos P
resentación 3
POLÍTICA
Y ELECCIONES
DESARROLLO
E INFRAESTRUCTURA
Salomón Chertorivski U
na oportunidad perdida. La cancelación
del naicm y la construcción del aifa 27
Flavia Tudela D
os Bocas: insostenibilidad energética 48
AGENDA
DEL ESTADO
REFORMA
ELECTORAL
LIBROS
RECIENTES
CON
FIGURA
CION
ES
Revista de la Fundación Pereyra y del Instituto de Estudios para la Transición Democrática
Director: Rolando Cordera Campos • Subdirectora editorial: Eugenia Huerta
Consejo de redacción: Antonio Ávila Díaz • Rosa Elena Montes de Oca • Ciro Murayama Rendón • Emilio Ocampo
Arenal† • Ramón Carlos Torres • José Woldenberg
Comité editorial: Antonella Attili • Bernardo Barranco • María Amparo Casar • Luis Emilio Giménez Cacho •
Anamari Gomís • Marta Lamas • Julio López G. • Rafael Pérez Pascual • Teresa Rojas • Nora Rabotnikof • Carlos
Roces† • Luis Salazar • Adolfo Sánchez Rebolledo† • Raúl Trejo Delarbre
Configuraciones 53, enero-diciembre de 2022. Director y editor responsable: Rolando Cordera Campos. Número de
certificado de reserva de derechos al uso exclusivo del título 04-2011-101712165400-20. Certificado de licitud
de título (en trámite). Insurgentes Sur 1793-201 “C”, Col. Guadalupe Inn, Alc. Álvaro Obregón, 01020 Ciudad
de México. Impreso en Offset Rebosán, S.A. de C.V., Acueducto 115, 14370 Ciudad de México. Distribución:
nosotros mismos.
Diseño original: Rafael López Castro • Tipografía y formación: Socorro Gutiérrez
ISSN 1405-8847
Los artículos son responsabilidad de los autores. Tiraje 500 ejemplares.
La revocación de mandato
en tres episodios
Lorenzo Córdova Vianello* y Ciro Murayama Rendón**
U
no de los principales retos que ha enfrentado el Instituto Nacional
Electoral (ine) en sus más de ocho años de existencia fue, sin duda algu-
na, la organización del proceso de votación en torno a la revocación
de mandato del titular del Poder Ejecutivo federal.
La historia es larga, pero puede resumirse en tres episodios.
Primero, la aprobación y promulgación de la reforma constitucional en diciem-
bre de 2019 que incorporó al artículo 35 el derecho de la ciudadanía a promover
la revocación de mandato del presidente de la República en caso de pérdida de
confianza. Esa reforma introdujo varios artículos transitorios que gravitaron direc-
tamente sobre el primer ejercicio de revocación. En primer lugar, contempló que
el ejercicio era aplicable para el presidente constitucional en funciones, aun cuan-
do éste fue elegido en 2018 para un periodo que terminará el 30 de septiembre de
2024, de tal manera que hubo una suerte de retroactividad de la norma. También
se especificó que la revocación debía solicitarse por “la pérdida de confianza” en
el gobernante por quienes impulsaran el ejercicio, es decir, por personas interesa-
das en que el gobernante abandonara su cargo antes de tiempo. Además, se esta-
bleció un plazo de 180 días para que se aprobara la legislación secundaria de la
revocación.
Sin embargo, el Legislativo no atendió el plazo que se había dado y, ante la
inexistencia de legislación secundaria, pero con un artículo constitucional transi-
torio posibilitando el inicio del ejercicio de revocación al final de 2021, fue necesa-
rio que el ine comenzara con la reglamentación de los procedimientos para hacer
viable esa novedosa figura constitucional de democracia directa.
Así que contrariamente a lo sostenido por los promoventes del ejercicio, el
ine siempre asumió la obligación de organizar el proceso de revocación de man-
dato. Ejemplo de ello es que, a pesar de la omisión legislativa de más de 630 días,
1 Acción
de inconstitucionalidad 151/2021 contra la Ley de Revocación de Mandato. Véase en
<https://www2.scjn.gob.mx/juridica/engroses/cerrados/Publico/Proyecto/AI151_2021PL.pdf>.
* * *
mx/xmlui/handle/123456789/124697>.
3 Suprema Corte de Justicia de la Nación. Controversia Constitucional 203/2020.
A la opinión pública:
El Consejo General del Instituto Nacional Electoral (ine), órgano colegiado y
máxima autoridad de la institución, por mayoría aprobó el acuerdo de posponer
temporalmente algunas actividades preparatorias para la organización de la eventual
consulta de Revocación de Mandato. En un órgano colegiado las diferencias de opi-
nión y de votos son naturales y se respetan, pues así se toman las decisiones y for-
man parte del debate público.
Las decisiones del Consejo General del ine pueden no ser compartidas por las
distintas fuerzas y actores políticos; por ello, la legislación prevé que éstas pueden
ser impugnadas, como en este caso lo hicieron quienes se sintieron agraviados por
tal medida. Serán los órganos jurisdiccionales quienes decidan en última instancia
sobre este asunto lo que en derecho corresponda y, el ine, como siempre, acatará
esas decisiones.
Por ello es muy preocupante que el Presidente de la Cámara de Diputados pre-
tenda convertir un diferendo legal en una persecución penal, con denuncias ante la
Fiscalía General de la República contra consejeros y consejeras que votaron a favor
del acuerdo mencionado, así como contra el Secretario Ejecutivo, quien no vota las
decisiones del colegiado. Se trata de una acción injustificada y sin sustento jurídico,
que busca inhibir la independencia con la que los miembros del Consejo General
valoran y votan los asuntos que les competen.
Por encima de las diferentes posiciones que hemos adoptado sobre esta y otras
decisiones, las consejeras y consejeros electorales del ine rechazamos las denuncias
penales contra cualquiera de nuestras y nuestros compañeros y toda forma de intimi-
dación y vulneración de nuestra autonomía. Las diferencias de criterio en casos en
los que válidamente puedan sustentarse diversas soluciones en el marco de nuestras
atribuciones legales, no deben ameritar la persecución penal, sobre todo, cuando
quienes las adoptan han explicado públicamente los motivos de su decisión.
En un Estado democrático de derecho las diferencias de opinión no se persi-
guen como delitos.
Suscriben: Lorenzo Córdova Vianello, consejero presidente, Norma Irene De la
Cruz Magaña, Uuc-kib Espadas Ancona, Adriana Margarita Favela Herrera, José Mar-
tín Fernando Faz Mora, Carla Astrid Humphrey Jordan, Ciro Murayama Rendón, Dania
Paola Ravel Cuevas, Jaime Rivera Velázquez, José Roberto Ruiz Saldaña y Beatriz
Claudia Zavala Pérez.
En una determinación que permitió recuperar las vías legales para resolver
las controversias en materia electoral, el 29 de diciembre de 2021 el Tribunal Elec-
toral del Poder Judicial de la Federación (tepjf) ordenó al ine realizar las adecua-
ciones necesarias a su presupuesto sin afectar sus obligaciones constitucionales
(destacadamente el servicio de registro en el padrón electoral y la emisión de la
10
* * *
El tercer episodio narra cómo, de forma preocupante por el precedente que signi-
fica, la revocación de mandato pasará a la historia como uno de los procesos en
los que más se han violado las leyes electorales. De manera deliberada y sistemáti-
ca, las y los principales promotores de la revocación de mandato incurrieron en
faltas graves contra la legalidad que ellos mismos aprobaron, desafiando abierta-
mente a la autoridad electoral y poniendo en riesgo el proceso mismo.
En primer lugar, hay que destacar la presentación de firmas falsas para con-
vocar a la revocación de mandato. Como ya se dijo, la Constitución establece que
se necesita contar con al menos 3% de los ciudadanos inscritos en el Listado Nomi-
nal. En la revisión, el ine detectó que la asociación civil Que Siga la Democracia
entregó casi 18 000 firmas de difuntos, más de 40 000 credenciales para votar cuya
vigencia había caducado, y más de 1 200 que se encontraban con suspensión de
sus derechos políticos (por estar en prisión).9
Otra falta frecuente de quienes promovieron la revocación fue la instalación
de mesas en decenas de plazas públicas del país recabando firmas para una “ratifi-
cación de mandato”, figura inexistente en nuestro marco legal.
El ine, para verificar que los apoyos ciudadanos para realizar la revocación
fueran auténticos, llevó a cabo una visita de verificación domiciliaria prevista en la
propia Ley de Revocación de Mandato —actividad que fue impugnada por More-
na, pero que el tepjf señaló como necesaria para corroborar la autenticidad de las
firmas—. El desaseo por parte de los promoventes fue tal que en esa visita se
verificación del procentaje de firmas de apoyo de la ciudadanía requerida para la revocación de man-
dato. 29 de enero de 2022. Véase en <https://repositoriodocumental.ine.mx/xmlui/bitstream/handle/
123456789/126774/CGex202201-31-ip-2.pdf>.
11
12
56789/133148/CGex202204-10-ap-7.pdf?fbclid=IwAR3e8AvKJ2_Vb09g6l2p4KlWEYtBnzgsrmwmQF2
mfqgoXXlxvgvlTNJTinw>.
13
Con independencia de que los actores políticos se encuentren conformes con las
resoluciones de la autoridad, es indispensable que se respeten los mandatos de éstas,
puesto que de lo contrario se pone en duda la legitimidad de todo el proceso demo-
crático y se pone en riesgo el funcionamiento de las autoridades. Según lo reportado
por la autoridad administrativa, de las 18 medidas cautelares en contra de personas
servidoras públicas, se detectaron 15 casos de incumplimiento. Asimismo, al resolver
diversos recursos de revisión en el procedimiento especial sancionador, esta Sala
Superior confirmó al menos 6 casos.
En ese sentido, tal y como se señala a continuación, el hecho de que diversos
funcionarios públicos hayan soslayado los mandatos de la Comisión de Quejas y
Denuncias del ine refleja una situación preocupante, ya que generan los siguientes
efectos: • La falta de credibilidad y confianza en las instituciones y autoridades; • Un
14
* * *
15
La historia aquí narrada puede ser leída como un recuento de hechos que
pusieron en riesgo nuestra democracia, pero es también el relato de la determina-
ción de las autoridades electorales para hacer valer su autonomía, independencia
e imparcialidad, y aplicar las leyes vigentes sin distinción ni reservas, y sin ame-
drentarse frente al poder en turno.Ω
12 <https://www.internet2.scjn.gob.mx/red2/comunicados/noticia.asp?id=6928>.
16
L
as elecciones del 5 de junio de 2022 fueron una muestra de cómo trabaja nues-
tro sistema electoral. Más de 11.7 millones de ciudadanas y ciudadanos de
Aguascalientes, Hidalgo, Oaxaca, Tamaulipas, Durango y Quintana Roo tuvie-
ron el derecho de elegir a la persona que desempeñará, por los próximos
seis años, la gubernatura de sus respectivos estados. En las últimas dos
entidades se eligió también a los integrantes del Congreso y ayuntamientos, res-
pectivamente. En total hubo 436 cargos en contienda.
Con las elecciones celebradas en dichas entidades federativas, el Instituto
Nacional Electoral (ine) ha organizado y colaborado en la organización de 330
procesos electorales en los que la ciudadanía acudió a las urnas para ejercer su
derecho al voto de manera libre. Dicha cifra incluye elecciones federales y locales
(ordinarias y extraordinarias), las dos elecciones de dirigentes partidistas (prd y
Morena), la asamblea constituyente de la Ciudad de México y los dos recientes
procesos de participación ciudadana (consulta popular y revocación de mandato).
A partir de lo ocurrido el 5 de junio es posible obtener conclusiones positivas
de nuestro sistema electoral en por lo menos cuatro aspectos: organizativos, medi-
das de inclusión y paridad, arbitraje y certeza en la información de los resultados.
I. Aspectos organizativos
Las elecciones locales de junio sirvieron para ratificar el importante papel que
desempeña la ciudadanía en la organización de las elecciones. En México, desde
hace más de 30 años, las elecciones son organizadas por la autoridad electoral,
pero en cada actividad participan mujeres y hombres comprometidos con la demo-
cracia. Todo ello con el firme propósito de evitar la desconfianza que generaba
la participación de servidores públicos en la recepción y conteo de los votos de la
ciudadanía.
Por ello, en la ley electoral se establecen mecanismos de insaculación (sor-
teo) para seleccionar a la ciudadanía mayor de 18 años que está inscrita en el lista-
do nominal que podrá participar como integrante de la mesa directiva de casilla.
El sorteo permite garantizar el cumplimiento del objetivo referido: certeza de que
en la integración de casillas habrá imparcialidad.
Ese binomio con la ciudadanía es muy importante para la recreación de la
democracia en nuestro país y siempre ha sido un elemento fundamental para inyec-
tar confianza a los procesos electorales. En tan solo cuatro años (para las elecciones
de 2018, 2021, revocación de mandato y las pasadas elecciones locales) el ine ha
requerido la participación de casi 3.3 millones de ciudadanas y ciudadanos y
ha logrado que más del doble haya manifestado interés en participar (cuadro 1).
* Jefe de oficina de la Presidencia del Consejo General del Instituto Nacional Electoral.
17
Dichas personas son debidamente capacitadas por el ine de acuerdo con las
distintas funciones que la ley establece para el día de la jornada electoral. De
hecho, es tan grande el compromiso democrático de la ciudadanía y el apoyo que
le brindan a la autoridad electoral, que el pasado 5 de junio desempeñaron sus
funciones 91.32% de las personas que fueron capacitadas.
En otras palabras, 9 de cada 10 personas que fueron capacitadas y seleccio-
nadas para desempeñar alguna función en las casillas instaladas el día de la elec-
ción, destinaron buena parte de su tiempo en dejar todo listo para que sus vecinas
y vecinos ejercieran su derecho al voto y, a la conclusión de la jornada de vota-
ción, realizar debidamente el cómputo de los sufragios.
Otro dato que debemos destacar de las pasadas elecciones locales es que sola-
mente 6.48% de los funcionarios de casilla fueron tomados de la fila de electores;
esto es, un porcentaje menor que en las elecciones de 2021, donde fue 8 por ciento.
Las anteriores cifras son relevantes, pues no podemos olvidar que, en tan solo
un año, la ciudadanía ha sido convocada a participar con la autoridad electoral en
un proceso electoral federal, una consulta popular y una revocación de mandato.
Esto es, ante los constantes llamados a participar por parte de la autoridad elec-
toral, la ciudadanía sigue demostrando su convicción democrática y su interés de
colaborar con el sistema electoral mexicano.
Otro aspecto por el cual se considera que las elecciones pasadas fueron un
éxito organizativo es el relativo a la instalación de casillas. De las 20 993 casillas
aprobadas para funcionar el 5 de junio, solamente 22 no se instalaron. Dicha situa-
ción ocurrió en Oaxaca por conflictos sociales en algunos municipios, esto es,
cuestiones ajenas a la autoridad electoral (cuadro 2).
Ello es un logro importante del ine, pues una de las muchas actividades que
realiza la autoridad electoral en los meses previos a la jornada electoral es ubicar y
seleccionar los lugares donde serán instaladas las casillas para garantizar condicio-
nes de accesibilidad. También hay una gran operación logística para que los paque-
tes electorales sean entregados con la debida anticipación a quienes se desempe-
ñarán como presidentes de casilla y, con ello, todo pueda estar listo para recibir la
votación en el horario que establece la ley.
El hecho de que solo 0.10% de las casillas no se instalara refleja la eficiencia
del ine en la implementación y ejecución de sus procesos para garantizar las con-
18
19
20
21
22
18 61 42 31 2 9
28 23 30 27 1 2
Fuentes: * Sistema Integral de Quejas y Denuncias del Instituto Nacional Electoral. ** Acuerdo del
Consejo General del Instituto Nacional Electoral por el que se efectúa el cómputo total y se realiza
la declaratoria de resultados del proceso de revocación de mandato del presidente de la República
elegido para el periodo constitucional 2018-2024 (ine/CG202/2022).
23
24
25
V. Conclusiones
Gracias a la colaboración entre el ine y los respectivos Oples en la organización de
los procesos electorales, México ha ido construyendo un modelo robusto que per-
mite que la ciudadanía ejerza libremente sus derechos políticos.
Pese a los recortes presupuestales que sufrieron el ine y los Oples, debe reco-
nocerse que las autoridades cumplieron de manera eficaz con sus atribuciones,
generando certeza en la ciudadanía y en los actores políticos en cuanto a que las
etapas del proceso electoral estaban marchando correctamente.
Si bien existieron fenómenos climatológicos y problemas de inseguridad en
algunas entidades de la República, habrá que estudiar detenidamente cuáles fue-
ron las razones que propiciaron que el nivel de participación de la ciudadanía en
algunas entidades fuera bajo, particularmente en Oaxaca, con 38.97 por ciento.
Mientras ello ocurre, debemos señalar que las elecciones del 5 de junio fue-
ron una muestra de que el sistema democrático electoral funciona bien. México
no necesita modificar abruptamente el sistema electoral y menos con propuestas
que no parten de diagnósticos claros y objetivos.
Ante los intentos del gobierno federal de refundar el sistema electoral con una
iniciativa de reforma constitucional, hay que señalar que con el modelo electoral
incorporado en nuestra Constitución desde 2014, se han celebrado 57 elecciones
para las gubernaturas y el nivel de alternancia es cercano a 70%. Hoy hay condi-
ciones reales para que cualquier fuerza política pueda llegar al poder y, depen-
diendo de la gestión gubernamental, haya o no alternancias. Así debe ser la demo-
cracia en su vertiente electoral.Ω
26
E
l crecimiento poblacional, el ensanchamiento de las manchas urbanas, el
desarrollo de las economías y la mayor necesidad de conectividad global
son algunas de las razones por las que, en muchas zonas urbanas en el
mundo, aeropuertos originalmente construidos en lo que eran las afueras
del núcleo urbano —y con capacidades acordes con el tiempo que los
vio nacer— hayan tenido que mudarse o, al menos, plantearse esa posibilidad.
El caso del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (aicm) no es la
excepción. La construcción de la primera terminal para la aviación civil, Puerto
Aéreo Central, comenzó en 1928 en las afueras de la ciudad de México. La inaugu-
ración oficial de un aeropuerto con pista, terminal y torre de control, cercano a lo
que hoy conocemos no llegaría, sin embargo, sino hasta 1952.
En 1930, la ciudad tenía 1.2 millones de habitantes; en 1950 pasó a tener 3, y
hoy somos más de 9 millones.1 Entre 1940 y la actualidad, el pib capitalino creció
10 veces.2 En ese mismo periodo, el número de viviendas pasó de 600 000 a 2.7
millones,3 un crecimiento de más de cuatro veces. A consecuencia de este desa-
rrollo económico, y del impacto urbano resultante, el aeropuerto ya no está en las
afueras sino en medio de la zona más densamente poblada del Valle de México.
Hoy, la capacidad aeroportuaria de Ciudad de México está rebasada. Como
se muestra en la gráfica 1, el aicm multiplicó por 4 el número de sus operaciones
* Diputado Federal por el Partido Movimiento Ciudadano.
1 Instituto Nacional de Estadística y Geografía (inegi). Censos de Población y Vivienda 1930,
1950 y 2020, en <https://www.inegi.org.mx/programas/ccpv/>.
2 V. Soto, “Generación del producto interno bruto mexicano por entidad federativa, 1940-
ccpv/>.
27
252
223
79
36
18.9 21 24
2.6 10.4
Fuente: elaboración propia, con datos del sistema de aeropuertos mexicanos y estadísticas del aicm,
en <http://www.amivtac.org/spanelWeb/file-manager/Biblioteca_Amivtac/Libros-AMIVTAC/sistema-
metropolitano/El-sistema-metropolitano-de-aeropuertos-a-seis-anos-de-su-establecimiento.pdf>
y <https://www.aicm.com.mx/estadisticas-del-aicm/17-09-2013>.
Por ello, desde hace varios sexenios comenzaron a ser evaluadas distintas
posibilidades: en los noventa, por ejemplo, fue activado el Aeropuerto de Toluca.
Sin embargo, el primer avance serio —el planteamiento de una mudanza— fue el
que comenzó en el sexenio del presidente Fox con un concurso entre dos opcio-
nes: Texcoco, en el Estado de México, y Tizayuca, en Hidalgo. La primera resultó
ganadora, pero se topó con un levantamiento social en la zona de Atenco: ante
una negociación deficiente que no ofreció un precio justo como contraprestación
a la expropiación de los terrenos de ese ejido, sus pobladores se manifestaron
para frenar el inicio de la construcción. El gobierno desistió y optó por construir la
Terminal 2 del aicm, entendida como solución apenas temporal para darle algunos
años más de viabilidad y crecimiento.
Con la experiencia de los problemas enfrentados en el sexenio anterior, la
administración del presidente Calderón inició la compra de terrenos en Texcoco,
con modificaciones al trazo original para evitar las zonas que habían causado el
conflicto y así consolidar la posibilidad de concretar la fallida mudanza. Sin embar-
go, tras la crisis económica de 2008-2009 no hubo condiciones adecuadas para ini-
ciar una obra de esa magnitud.
Fue en el sexenio del presidente Peña cuando, con los terrenos adquiridos
en la administración anterior, comenzaron los concursos arquitectónicos. Resultó
28
29
* * *
dad”, dividido en dos entregas que pueden consultarse y descargarse mediante los siguientes links:
<https://cutt.ly/lKNaj4r> y <https://cutt.ly/JKNazAb>.
30
2019, en <https://cutt.ly/RK1fzNT>.
31
www.youtube.com/watch?v=f5YoWFnIUSQ&t=51s>.
13 “Advierte iata a Seneam falta de seguridad aérea”, Portal A21MX, carta completa en <https://
a21.com.mx/index.php/aerolineas/2022/05/05/advierte-iata-seneam-falta-de-seguridad-aerea>.
14 Portal A21MX: muestra ifalpa preocupación por incidentes en el aicm, en <https://a21.com.
mx/aeropuertos/2022/05/05/muestra-ifalpa-preocupacion-por-incidentes-en-el-aicm>.
15 El País, “La compatibilidad entre el aifa y el Benito Juárez: el debate sin cerrar sobre el espacio
aéreo”, en <https://elpais.com/mexico/2022-03-20/la-compatibilidad-entre-el-aifa-y-el-benito-juarez-
eldebate-sin-cerrar-sobre-el-espacio-aereo.html>.
32
el aifa”, en <https://lajornadaestadodemexico.com/persisten-pendientes-de-movilidad-hacia-el-aifa/>.
33
18 Cuenta Pública 2019, Estado analítico del ejercicio del presupuesto de egresos en clasifica-
34
La necesidad de la mudanza
Hasta aquí he expuesto argumentos más o menos presentes en la agenda nacio-
nal, que muestran cómo la construcción del aifa fue —y es— una mala deci-
sión. No obstante, en todos los años en que fue discutida la necesidad de un
traslado del aicm, o de una ampliación de la capacidad aeroportuaria de la Zona
22 Auditoría Superior de la Federación (asf). Minuta de las reuniones de trabajo entre la asf y el
Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México, en <https://www.asf.gob.mx/Publication/5206_Minuta_
reuniones_ASF__Grupo_Aeroportuario>.
23 Auditoría Superior de la Federación (asf). Informe del resultado de la fiscalización superior
contralacorrupcion.mx/aeropuerto-santa-lucia-dedazo-militar/>.
35
36
37
Fuente: Gobierno de la Ciudad de México, “La Opinión de la Ciudad”, 2016, p. 44, en <https://cutt.ly/
lKNaj4r>.
los usos para actividades económicas abarcan sólo 6% (entre ellos, el industrial es
el predominante).
Que el actual aeropuerto se encuentre absorbido por el crecimiento urbano
de la ciudad tendría que ser suficiente para cuestionarse la pertinencia de la conti-
nuidad de su funcionamiento. El simple hecho de que un gran número de perso-
nas habite en los conos de aproximación de los aviones y sus inmediaciones
representa un peligro latente. Si a esto sumamos las afectaciones a la salud mental,
el empobrecimiento que se ha generado en la zona y la oportunidad de haberla
aprovechado para incentivar una vocación económica diferente, hay razones sufi-
cientes para continuar preguntándonos cuánto tiempo más será sostenible esta
situación: más temprano que tarde, habrá que abandonar el aicm.
38
Conclusión
La Zona Metropolitana del Valle de México creció, y con ello su población, y la
actividad económica se amplió. La necesidad de replantear su capacidad de conec-
tividad aérea —tanto de personas como de carga— no era sino natural.
39
40
E
Preámbulo
l Tren Maya es una iniciativa gubernamental propuesta por el presidente
de la República. Se habló de ella durante las campañas presidenciales de
2018 y se insistió en el tema después de las elecciones del 1 de julio y du-
rante el periodo de transición.
Este proyecto no responde a una demanda ciudadana, ni de quienes
viven en la península de Yucatán y menos aún de los pueblos mayas.
El proyecto se justifica como un proyecto integral de desarrollo regional, que
responde al abandono y retraso de la región y se orienta a atender desigualdad y
pobreza que prevalece en la mayoría de la población, urbana y rural, con especial
impacto en las comunidades indígenas.
Al igual que otros megaproyectos que se han diseñado y construido a lo largo
del territorio nacional durante décadas —mismos que han provocado rezago social,
concentración de riqueza e impactos ambientales profundos—, el Tren Maya no es
el resultado de un diálogo democrático, sincero y profundo, con los pobladores de
la península respecto de hacia dónde quisieran impulsar el desarrollo a futuro, invo-
lucrando a todos los sectores, a toda la población y especialmente al pueblo maya,
con el propósito de reducir la desigualdad y eliminar pobrezas inaceptables, gene-
rar condiciones de bienestar para todos y mantener un entorno natural que respete
su riqueza biológica y cultural, y que propicie el diálogo democrático y el respeto
de los derechos humanos.
41
42
43
44
45
46
Conclusiones
Podemos coincidir en que durante muchos años las políticas públicas han aban-
donado al sur-sureste del país. En especial reconocemos los altos índices de des-
igualdad presentes en la población que reside en la península de Yucatán. La pre-
gunta que nos formulamos es ¿cómo atender y con qué modelo de desarrollo
enfrentar el rezago social en la región?
Quizá se repiten una vez más los mismos errores del pasado. Se trata de impo-
ner un modelo de desarrollo de “arriba abajo”, sin dialogar con la población a la
que se dirige el proyecto, sobre todo a las comunidades rezagadas y más pobres.
Construir un modelo de desarrollo a partir del diálogo franco y honesto con
las comunidades quizá habría puesto sobre la mesa alternativas distintas, otro
modelo de desarrollo, otro u otros proyectos, la atención a necesidades que para
las comunidades son prioritarias.
Las demandas de las comunidades son muchas y muy añejas. Se reconoce el
rezago educativo, deficiencias en salud, alimentación y vivienda. La identidad cul-
tural y su fortalecimiento requiere reconocimiento, apoyo y desarrollo. ¿Por qué
no preguntarles a los pueblos que visión de futuro tienen? ¿Qué quieren para sus
hijos y nietos? ¿Cuáles son sus necesidades más urgentes? ¿Cómo proteger su iden-
tidad y cultura? ¿Qué requieren para proteger su riqueza natural y garantizar el uso
sustentable de sus elementos?
Hemos equivocado el camino al momento de decidir qué es lo mejor para un
pueblo, sin siquiera consultarlo.Ω
47
E
l Sistema Nacional de Refinación (snr) tiene actualmente en operación seis
refinerías en el territorio nacional y una en Estados Unidos (Deer Park,
en Houston, Texas), que se sumó al sistema en enero de 2022. La refinería
Ing. Antonio Dovalí Jaime, en Salina Cruz, Oaxaca, tiene la mayor capa-
cidad, con 178 000 barriles diarios (bd); sin embargo, se inauguró en 1979
por lo que requiere modernización y mantenimiento para lograr que opere a por
lo menos 70% de su capacidad inicial. La refinería de Salamanca, Guanajuato, Ing.
Antonio M. Amor, es la más antigua aún en operación; se inauguró el 30 de julio
de 1950, y actualmente procesa 134 000 bd. Le siguen en antigüedad la refinería
de Minatitlán, Veracruz, Gral. Lázaro Cárdenas del Río, que comenzó a operar el 22
de febrero de 1956, con capacidad actual de 122 000 bd; la refinería Francisco I.
Madero, en Tampico, Tamaulipas, inaugurada en 1958, actualmente con una capa-
cidad de procesamiento de 95 000 bd; la refinería Miguel Hidalgo en Tula, Hidal-
go, que comenzó a operar en 1976, y cuenta con capacidad para procesar 178 000
bd, y la refinería Ing. Héctor R. Lara Sosa en Cadereyta, Nuevo León, con una
capacidad actual de 115 000 bd, muy inferior a los 275 000 bd que procesaba
cuando se inauguró, el 18 de marzo de 1979. En total se estima que durante el pri-
mer trimestre de 2022 el snr tuvo la capacidad de procesar 822 000 bd de petróleo
crudo (Pemex, 2022).
En este sistema todavía no figura la refinería Olmeca en Dos Bocas, Paraíso,
Tabasco, que ha estado en el centro de un debate en las últimas semanas. Se inau-
guró, pero no entra aún en operaciones, ya que la obra tiene menos de 70% de
avance. Se planea que cuando se concluya tenga la capacidad de procesar 340 000
barriles diarios de petróleo crudo, que equivale a una quinta parte de la extrac-
ción actual de Pemex. Los expertos estiman que a finales de 2023 o principios de
2024 la refinería comience a producir gasolina.
La justificación para construir una nueva refinería en estos momentos, cuando
prácticamente todos los países invierten en nuevas energías limpias y sostenibles,
es el interés que tiene la presente administración en garantizar la soberanía energé-
tica a partir de la autosuficiencia. De acuerdo con la Secretaría de Energía, actual-
mente se importa casi 80% de la demanda de combustibles; en el caso de la gasoli-
na para el sector transporte, por ejemplo, se importa 70% de los 715 000 barriles
diarios consumidos en promedio (Sener, 2022). Se proyecta que Dos Bocas pueda
producir 172 200 bd de gasolina y diésel, 125 400 bd de diésel de bajo azufre, 9 400
48
49
50
51
52
Referencias
asea (2018), Resolutivo público para la Manifestación de Impacto Ambiental Regional Refi-
nería Dos Bocas, en <http://104.209.210.233/gobmx/repositorio/DIAGNOSTICO_
DE_ACCESIBILIDAD/DE/Resolutivo_vPublica.pdf)>.
Centro Interdisciplinario de Biodiversidad y Ambiente (Ceiba) (diciembre de 2018), “Asea
reconoce que desmonte en Dos Bocas no tiene autorizaciones”, en <https://ceiba.
org.mx/asea-reconoce-sin-autorizacion-desmonte-en-dos-bocas/>.
Centro Mario Molina (2014), Atlas de peligro al Cambio Climático como instrumento de
adaptación del Sector Petrolero, en <http://centromariomolina.org/libro2/Atlas_peli-
gro_CC_sector_petrolero.pdf>.
Cullen, J.M., “El arranque de Dos Bocas: la carta de López Obrador para lograr la autosu-
ficiencia energética de México”, El País, 1 de julio de 2022, en <https://elpais.com/
mexico/2022-07-01/el-arranque-de-dos-bocas-la-carta-de-lopez-obrador-para-lograr-
la-autosuficiencia-energetica-de-mexico.html#?rel=mas>.
Cullen, J.M., “López Obrador defiende la ‘autosuficiencia’ en gasolinas en la inauguración
de la refinería de Dos Bocas”, El País, 1 de julio de 2022, en <https://elpais.com/
mexico/2022-07-01/lopez-obrador-defiende-la-autosuficiencia-en-gasolinas-en-la-inau
guracion-de-la-refineria-de-dos-bocas.html>.
Estrada Porrúa, F., “Los costos de la inacción en cambio climático para México”, Nexos, 18
de abril de 2022, en <https://medioambiente.nexos.com.mx/los-costos-de-la-inaccion-
en-cambio-climatico-para-mexico/#:~:text=Actualmente%20los%20costos%20
econ%C3%B3micos%20por,de%202600%20millones%20de%20pesos>.
imco (2022), “Refinería de Dos Bocas: ¿hacia un sector energético más competitivo?”, en
<https://imco.org.mx/refineria-de-dos-bocas/>.
53
54
E
l Estado mexicano, como organización con ventaja competitiva en la vio-
lencia que controla un territorio, impone reglas del juego, establece dere-
chos de propiedad y propicia las condiciones para el desempeño de la
economía,1 se encuentra inmerso en profunda crisis y no cabe duda de
que requiere reformas estructurales de fondo para que el orden social
sea viable. La capacidad estatal para reducir la violencia se encuentra seriamente
cuestionada, mientras que las condiciones para un desempeño económico pro-
ductivo, capaz de generar prosperidad en el largo plazo, están claramente obsta-
culizadas por un sistema de incentivos perversos derivados de privilegios mono-
polísticos, protecciones particulares y capacidad arbitraria de la autoridad, en la
que la interacción individual, particularmente entre los poderosos, ha determina-
do el acceso a la riqueza y ha limitado las oportunidades de los más débiles.
La disputa política polarizada que vive hoy México no es sino el reflejo de una
crisis profunda del orden social mexicano. El debate subyacente no es si el Estado
debe reformarse, sino sobre cuáles son las características que esa transformación
debe tener. Mientras que durante las últimas tres décadas ha avanzado la apertura
política con un claro sentido democratizador, las reformas económicas han sido
erráticas. Si bien los mercados se abrieron a la competencia exterior, el énfasis en
las llamadas reformas estructurales para abrir sectores estratégicos de la economía
dejó de lado el cambio institucional para garantizar con eficacia los derechos de
propiedad, para eliminar las protecciones monopolísticas orientadas políticamente,
para reducir las barreras de entrada a la competencia económica, pera reducir cos-
tos de transacción y para generar certidumbre a partir de un sistema judicial autóno-
mo y no venal, que resuelva las disputas con base en un orden jurídico de cobertura
universal. Las protecciones corporativas y clientelistas desincentivan la creación de
organizaciones representativas, ya sea sindicales o de la sociedad civil.
El Estado mexicano ha reducido sus márgenes de autonomía frente a los
poderes fácticos. Su incapacidad histórica para cobrar impuestos se traduce en
55
La transición inacabada
La crisis estatal que vive México es producto de un inacabado proceso de transi-
ción entre dos tipos de patrón institucional: el del Estado natural u orden social de
acceso limitado y el del orden social de acceso abierto. La diferencia entre ambos
se define por el acceso al reconocimiento y la protección estatal de las organiza-
ciones económicas, sociales y políticas. Si el acceso es condicionado a característi-
cas personalistas, se tiene un orden de acceso limitado, mientras que hay un orden
abierto cuando este acceso se basa en rasgos impersonales, se desarrollan dere-
chos de carácter universal y los individuos pueden interactuar en amplias áreas de
las relaciones sociales sin tener que conocer las características personales de
aquellos con quienes interactúan.2 Durante el último medio siglo, el orden social
de acceso limitado que ha caracterizado a México a lo largo de su existencia
alcanzó su madurez y, gradualmente, fue dando paso a un proceso de apertura
que, sin embargo, se ha empantanado, en buena medida debido al misoneísmo de
las organizaciones crecidas al amparo de las protecciones estatales y que han
sacado provecho del sistema de privilegios característico de un Estado natural.
En los Estados naturales, el acceso a las protecciones estatales se encuentra
limitado a los poderosos, que forman coaliciones para contrarrestar mutuamente
56
3 Idem.
57
58
59
60
61
62
63
64
65
66
Inventario Nacional de lo Militarizado realizada por el Programa de Política de Drogas del cide, en
<https://ppdata.politicadedrogas.org>.
67
68
69
en la Constitución se reconoció a las organizaciones políticas como entidades de interés público por
medio de las cuales se formaba la opinión nacional.
El otro gran cambio que introdujo la reforma se refería al sistema electoral. Se adoptó constitu-
cionalmente un sistema mixto de integración de la Cámara de Diputados (las reformas no tocaron al
Senado) que suponía la elección de 100 diputados por el principio de representación proporcional
de un total de 400. Se mantenía la elección de mayoría relativa para 300 distritos, mientras que se
creaban entre tres y cinco circunscripciones nacionales en las que se elegirían diputados por listas
cerradas presentadas por los partidos registrados. Los partidos que alcanzaran al menos 60 constan-
cias de mayoría no tenían derecho al reparto proporcional y si, entre dos o más partidos con dere-
cho a reparto, juntaban 90 constancias de mayoría, entonces el reparto proporcional se reduciría a la
mitad. Resulta claro que el sistema estaba pensado para reservar al pri el espacio de la mayoría relati-
va, y los 100 escaños elegidos en las circunscripciones plurinominales estarían destinadas a darle
representación a la oposición.
70
71
18 “Entre1939 y 1946 el nivel del salario real cae a la mitad; entre 1946 y 1970, se produce un
ascenso de 112% […]. Entre 1939 y 1946 el salario obrero en el sector industrial cae 50%. Hasta 1952,
es apenas 8% mayor que el de seis años atrás. En consecuencia, el salario obrero sufre un descenso
real de casi la mitad entre 1939 y 1952, años altamente inflacionarios. A la par, la productividad del
trabajo en el mismo sector, el industrial, crece 50% […]. Se puede resumir el ciclo entre 1939 y 1968
viendo sus dos fases y sus resultados. Durante la primera fase se observan altas tasas inflacionarias,
caídas sostenidas del salario real y un aumento extraordinario en la productividad del trabajo. En la
segunda se registran bajas tasas inflacionarias, ascensos sostenidos del salario real, y un aumento de
72
la productividad ligeramente menor que el incremento salarial. Al terminar el ciclo en 1968, el sala-
rio real apenas logra el nivel obtenido en 1939. El salario real para 1970 es sólo 16% superior al nivel
de 1940. […] ¿Qué pasó durante este ciclo? Se sabe que la productividad avanzó significativamente y
que el producto nacional bruto creció cerca de 500%. En la interpretación clásica del periodo,
Leopoldo Solís ha afirmado que el crecimiento y la industrialización del país se financiaron con las
exportaciones agrícolas, primero, y con el endeudamiento externo y el turismo después. Nosotros
pensamos que dicha idea no es falsa, sino incompleta. Creemos que un estudio de mayor profundi-
dad podría demostrar que la falta de cohesión e independencia política de la clase obrera permitió
una enorme desvalorización de la fuerza de trabajo, con el subsecuente aumento en la tasa de
explotación. Lo anterior, aunado a la sobreexplotación de un campesinado cada vez más empobreci-
do, fue lo que realmente ‘financió’ el crecimiento económico del periodo” (Bortz et al., La estructura
de salarios…, pp. 50-51).
19 “Los gobiernos posrevolucionarios expandieron progresivamente su capacidad administrati-
va en el sector laboral en la medida que intentaban controlar la crisis de participación que implicaba
la entrada de los trabajadores urbanos e industriales en la arena política. El efectivo control de la
élite gobernante sobre los medios de coerción y la capacidad institucionalizada para regular las rela-
ciones obrero-patronales, lo mismo que las restricciones legales que se impusieron a la formación
de sindicatos, a las actividades internas de los mismos y al ejercicio del derecho de huelga, contribu-
yeron enormemente a la relativa autonomía en la toma de decisiones de los hacedores de políticas.
Poner atención en los marcos institucionales y legales en los que se daban las interacciones de Esta-
do y trabajadores resulta esencial para entender cómo operaban los controles sobre el trabajo en el
periodo posrevolucionario” (Middlebrook, The Paradox of Revolution…, p. 4).
73
había terminado la época clásica del régimen y los pactos originarios se estaban fracturando, el arre-
glo corporativo permitió que los ajustes y recortes se dieran en relativa calma laboral: sólo una parte
disidente del sindicato magisterial se movilizó con cierta eficacia, mientras que el resto de las movili-
zaciones sindicales de protesta fueron desactivadas con facilidad y la inmensa mayoría de los sindi-
catos acataron sin chistar la caída sustancial de los salarios reales. Esto contrasta notablemente con
lo ocurrido durante el mismo periodo en Argentina, donde hubo 13 huelgas generales a lo largo de
la presidencia de Raúl Alfonsín (Carrera, “Las huelgas generales…”). En México no ha habido una
sola huelga general en siete décadas.
21 A pesar de que uno de los puntos históricos del programa político del pan había sido el des-
mantelamiento de los controles corporativos sobre los sindicatos, una vez que Vicente Fox llegó a la
Presidencia de la República en 2000, la reforma de la parte formal del arreglo fue dejada de lado y
los panistas comenzaron a utilizar los mecanismos institucionales formales en los que se sustentaba
el proteccionismo que limitaba la libre formación de sindicatos para garantizar tanto la aquiescencia
política de las organizaciones encuadradas en el sector obrero del pri como para evitar el desarrollo
de nuevas opciones de organización para los trabajadores.
22 La excepción fue el Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos
y Similares de la República Mexicana, el cual resistió un intento del gobierno panista de utilizar la
atribución gubernamental de la “toma de nota”, por medio de la cual la Secretaría del Trabajo y Pre-
visión Social reconocía o no a las dirigencias laborales, para favorecer a un grupo distinto al del caci-
que sindical que había heredado el liderazgo de su padre. Con este artificio jurídico se habían deci-
dido desde el gobierno las disputas en los liderazgos durante la época clásica del pri, siempre para
beneficiar a los más dóciles. Los mineros no aceptaron la injerencia gubernamental y la camarilla se
impuso. El gobierno intentó entonces ejercer la acción penal contra el líder, acusado de múltiples
delitos, pero éste se exilió en Canadá. El gobierno de Fox desistió de volver a enfrentarse a los líde-
res sindicales tradicionales. El dirigente minero resistente acabó formando parte de la coalición de
Andrés Manuel López Obrador.
74
23 Entre las medidas a las que se comprometió el gobierno mexicano destacan: 1) la creación
de órganos independientes e imparciales encargados de las elecciones sindicales, de las disputas por
los contratos colectivos, la conciliación y el registro sindical; 2) la creación de tribunales laborales; 3)
la elección de líderes sindicales, y en general la participación de los trabajadores en los asuntos sin-
dicales, mediante el voto personal, libre y secreto; 4) la solución de los conflictos de representación
sindical mediante voto secreto y con plazos claros; 5) la verificación de que los contratos colectivos
vigentes son conocidos y cuentan con el apoyo de los trabajadores; 6) la verificación de que los nue-
vos contratos colectivos sean conocidos y cuenten con el apoyo de los trabajadores, además de que
el lugar de trabajo ya esté en funcionamiento; 7) la verificación de que las revisiones salariales y con-
tractuales cuenten con apoyo de la mayoría de los trabajadores cubiertos por el contratos colectivos
(Calvillo y Vargas, “Reforma laboral…”).
75
Conclusión
La ilusión de cambio que se mantuvo en México a lo largo de los últimos 20 años
suponía que el país transitaría en el corto plazo a un orden social abierto, sin
barreras para la entrada a la competencia tanto política como económica. El orden
tradicional, sin embargo, ha mostrado ser más resistente de lo esperado. El tránsito
inconcluso a un Estado que extienda las protecciones estatales al conjunto de la
sociedad, garantice derechos universales y genere las condiciones para la innova-
ción y el aprovechamiento del cambio tecnológico se ha enfrentado al misoneís-
mo de las organizaciones y los actores sociales beneficiarios de los privilegios y
las protecciones particulares del antiguo régimen, a la resistencia política de secto-
res con mapas mentales refractarios a la apertura competitiva y a las evidentes
exclusiones del proceso de apertura que, desde la década de 1980, supuso que la
magia del libre mercado le abriría al país las puertas de la Arcadia: bastaba con eli-
minar las protecciones y barreras al intercambio de mercancías para que la mano
invisible nos transportara al reino de la felicidad idílica. Se emprendió, así, un pro-
ceso de reformas económicas que se suponía permitirían que México aprovechara
plenamente sus ventajas competitivas en el mundo, pero sin los mecanismos para
garantizar el reconocimiento y la proteccion del Estado a los sectores de la pobla-
ción tradicionalmente excluidos o considerados como clientelas cautivas de los
intermediarios políticos.
Si bien se alcanzó un nuevo arreglo en la política, que ha permitido la com-
petencia entre diversos partidos, y gradualmente se fueron eliminando los espa-
cios de control estatal de la economía, los resultados no han sido los ofrecidos: el
crecimiento ha sido mediocre y la exclusión social se ha agudizado, mientras la
prosperidad sostenida sigue siendo una aspiración inalcanzable y la violencia se
ha descentralizado de una manera desconocida desde los tiempos de la Revo-
lución. La narrativa del actual gobierno, que clama encabezar una “cuarta trans-
formación de la vida política y social de México”24 es reflejo del agotamiento del
arreglo institucional, pero yerra, desde mi perspectiva, en el sentido del cambio
necesario. Sin embargo, tampoco los esbozos opositores, empeñados en la defen-
sa de las reformas emprendidas durante las dos primeras décadas del siglo, alcan-
zan a llegar al fondo de lo que es necesario desmontar para recuperar la viabilidad
de México como unidad política, económica y social.
¿Por qué ni la democracia ni el libre mercado lograron cumplir sus pretendi-
das promesas? Porque la apertura política y económica se ha dado sin una reforma
profunda del Estado, que lo desmonte como aparato distribuidor de privilegios y
76
77
Referencias
Acemoglu, D., y J.A. Robinson, Por qué fracasan los países: Los orígenes del poder, la pros-
peridad y la pobreza, México, Planeta–Paidós Booket, 2014.
Atuesta, Laura, “Las cuentas de la militarización”, Nexos, marzo de 2017.
Bortz, Jeff, et al., La estructura de salarios en México, México, Universidad Autónoma
Metropolitana/Azcapotzalco, 1985.
Calvillo, Elizabeth, y Eduardo Vargas, “Reforma laboral: ¿el fin de la simulación sindical?,
Revista Común, 27 de agosto de 2019, en <https://revistacomun.com/blog/reforma-
laboral-el-fin-de-la-simulacin-sindical/>.
Carrera, Nicolás Íñigo, “Las huelgas generales, Argentina 1983-2001: un ejercicio de perio
dización”, Programa de Investigación sobre el Movimiento de la Sociedad Argentina,
Documento de trabajo 33, Buenos Aires, 2001.
Cejudo, Guillermo M., y Damián Lugo, “Una burocracia profesional como elemento crucial
en la implementación de políticas públicas”, Revista de Administración Publica, LVI,
3, 2019.
Coatsworth, John H., Los orígenes del atraso: nueve ensayos de historia económica de
México en los siglos xviii y xix, México, Alianza Editorial Mexicana, 1990.
Elizondo Mayer-Serra, Carlos, La importancia de las reglas. Gobierno y empresario después
de la nacionalización bancaria, México, Fondo de Cultura Económica, 2001.
Ley del Servicio Profesional de Carrera en la Administración Pública Federal, D.O, 10 de
abril de 2003.
Madrazo Lajous, Alejandro, Rebeca Calzada Olvera y Jorge Javier Romero Vadillo, “La ‘gue-
rra contra las drogas’. Análisis de los combates de las fuerzas públicas 2006-2011”,
Política y Gobierno, 25, 2, 2018.
Middlebrook, Kevin J., The Paradox of Revolution. Labor, The State and Authoritarianism
in Mexico, Baltimore, The Johns Hopkins University Press, 1995.
North, Douglass C., Structure and Change in Economic History, Nueva York, W.W. Norton
& Co., 1981.
North, Douglass C., John Joseph Wallis y Barry R. Weingast, Violence and Social Orders,
Cambridge, Cambridge University Press, 2009.
Rath, Thomas, Myths of Demilitarization in Posrevolutionary Mexico, 1920-1960, Chapel
Hill, The University of North Carolina Press, 2013.
78
79
L
as “elecciones más grandes de la historia” en México se vieron manchadas por
hechos de violencia. Misiones internacionales de observación electoral, la
onu, la oea y el gobierno de Estados Unidos consideraron alarmante la intro-
misión del crimen organizado en los comicios.
La noche del viernes 4 de junio de 2021, dos días antes de esas eleccio-
nes, Remigio Tovar fue “levantado” afuera de su casa en el municipio de Cazones
de Herrera, Veracruz. Después, su cuerpo fue abandonado en una carretera con
varios impactos de bala. Moribundo, fue trasladado a un hospital en Poza Rica,
pero no hubo forma de salvarle la vida. Dos días después, Remigio Tovar resultó
elegido presidente municipal de Cazones de Herrera bajo las siglas del partido
Movimiento Ciudadano (mc), con más de 5 000 sufragios, equivalentes a 49% de la
votación emitida.
Un día antes de las elecciones, por órdenes de la dirigencia de mc, Tovar fue
sustituido como candidato por su coordinador de campaña, Omar Ramírez Fuen-
tes, ante el Organismo Público Local Electoral (ople) de Veracruz, pero obviamen-
te el nombre del difunto apareció en las boletas, impresas con meses de antela-
ción. Muerto, Remigio Tovar ganó las elecciones.
La postulación de Omar Ramírez se decidió luego de una reunión encabeza-
da por José Manuel del Río Virgen, un operador muy cercano al líder del partido
Movimiento Ciudadano, Dante Delgado, responsable de la Comisión de Candida-
turas y personaje de larga trayectoria en la política veracruzana. En esa reunión
participó también Miguel Ángel Uribe, suplente de Tovar en la planilla registrada
ante el ople veracruzano.
En un documento redactado por Del Río Virgen, fechado el 5 de junio y firma-
do por cuatro testigos, Ramírez y Uribe aceptaron el acuerdo de que la Comisión de
Candidaturas de mc valoraría los perfiles de ambos personajes y decidiría la mejor
opción. Después, dicha comisión decidió que el candidato debía ser Omar Ramí-
rez, jefe de campaña de Tovar, y no quien aparecía como su suplente en la planilla.
Omar Ramírez recibió la constancia de mayoría el 9 de junio, pero dos sema-
nas después fue detenido como presunto autor intelectual del asesinato, junto con
un personaje al que sólo se identificó como Gustavo “N”. Siete meses después, la
Fiscalía de Veracruz detuvo a José Manuel del Río Virgen, exdirigente de mc, fun-
80
en_el_proceso_electoral_federal_y_local_en_Mexico_2020-2021.pdf>.
2 <https://www.etellekt.com/informe-de-violencia-politica-en-mexico-2021-J21-etellekt.html>.
81
* * *
* * *
Otro candidato de mc fue asesinado el 13 de mayo, a plena luz del día y en un acto
de campaña. Abel Murrieta, exfiscal del estado de Sonora, aspiraba a la alcaldía de
Cajeme y su homicidio cimbró a la sociedad sonorense, pues era un personaje con
una presencia pública notable.
El sur de Sonora —donde se ubica Cajeme— es un punto estratégico para el
tráfico de precursores químicos con los que se producen drogas que son trafica-
das hacia Estados Unidos. El Ayuntamiento de Cajeme era gobernado por Morena
desde 2018, con Sergio Pablo Mariscal, quien no pudo obtener la candidatura para
buscar la reelección. En su lugar fue postulado Javier Lamarque Cano, quien final-
mente ganó las elecciones con más de 59 000 votos (36.8%). mc terminó en cuarto
lugar en el municipio, con 14.5% de la votación.
El asesinato de Abel Murrieta sigue sin ser esclarecido.
* * *
82
La Misión expresa su más profunda preocupación por la extrema violencia que afec-
ta a la política mexicana. La principal amenaza al proceso electoral han sido los altos
niveles de violencia, incluyendo el asesinato de candidatas y candidatos, precandida-
tas y precandidatos, funcionarios públicos, equipos de las campañas, así como de
familiares de estas personas. Si bien la violencia estuvo focalizada en determinadas
zonas, la Misión expresa profunda consternación ante la brutalidad de los hechos y
su impacto sobre la sociedad,3
Más allá de esta solvencia técnica general y de sus eventuales dificultades, el proceso
electoral y político mexicano enfrenta retos significativos. El primero es la violencia
que empaña la campaña con el asesinato, los atentados y los secuestros contra can-
didatos, políticos y autoridades, en particular del nivel local. Las cifras suelen retener
la cantidad de muertos, pero ese dato sólo representa la cara más notoria y extrema
de la violencia.4
3 <InformePreliminarMVEMexico2021_OEA.pdf> (ine.mx).
4 <619248e31bde791ccee0746ec58b9543-0.pdf> (te.gob.mx).
83
* * *
5 <ATA-2022-Unclassified-Report.pdf> (dni.gov).
84
* * *
Veracruz fue el estado más afectado por la violencia política en las elecciones de
2021. En dicha entidad, gobernada por Morena desde 2018, ocurrieron 8 de los 30
asesinatos vinculados directamente con las elecciones.
José Alfredo Gaspar Gutiérrez, conocido como “Freddy Gaspar”, aspirante a
la candidatura de Morena a la alcaldía de Misantla, fue asesinado el 16 de mayo.
El morenista buscaba la candidatura para evitar la reelección del edil Javier Her-
nández Candanedo, también de Morena. Finalmente, la coalición Morena-pt-pvem
decidió apoyar la reelección del alcalde, por lo que “Fredy” Gaspar anunció públi-
camente que no lo apoyaría. “No podemos convalidar ni ser partícipes de las
imposiciones, donde no fue considerada la voluntad del pueblo y menos cuando
no es incluido el trabajo y la lucha de los que realmente han caminado”, escribió
en sus redes el 6 de mayo. Una semana después el político desapareció y su cuer-
po fue hallado en un basurero.
El 6 de junio, el edil de Morena fue reelegido con 11 223 votos (39.3 por ciento).
* * *
85
* * *
* * *
86
* * *
* * *
La denuncia de la oposición
El 23 de agosto de 2021, los dirigentes nacionales del pan, pri y prd viajaron a Wash-
ington para llevar a la Organización de Estados Americanos un expediente sobre la
87
* * *
6 El juego de los narcos por el poder total en Sinaloa - Ríodoce (riodoce.mx).
88
89
A
hora más que nunca conviene reflexionar sobre lo que parece ser una cap-
tura de la Corte Suprema por parte de los conservadores en Estados Uni-
dos y sobre el efecto que eso tiene en la legitimidad de la institución.
Como se sabe, en el caso Dobbs vs. Jackson Women’s Health Organi-
zation, resuelto en junio de este año, la mayoría de los integrantes de
la Corte concluyó que la Constitución del país no protege la libertad reproductiva
de las mujeres y, en consecuencia, los estados tienen actualmente una enorme
capacidad para decidir si prohíben o permiten el aborto.
Nos interesa mostrar que esta resolución no es una casualidad ni una sorpresa,
sino el producto de un largo proceso de captura, por parte del Partido Republicano,
de la judicatura federal. Dicho de otro modo: los cinco votos que borraron de la
Constitución el derecho de las mujeres a decidir son sólo el último eslabón de una
larga cadena de acciones que ha debilitado la independencia del Poder Judicial en
Estados Unidos y esto, en el mediano plazo, podría generar una contrarrevolución
de las libertades. La nueva mayoría de jueces conservadores podría seguir la argu-
mentación de Dobbs para eliminar la protección constitucional al uso de anticon-
ceptivos, a las relaciones entre personas del mismo sexo y al matrimonio igualitario.
Al respecto, la legitimidad del Poder Judicial rara vez proviene de las urnas. A
diferencia de lo que sucede con los poderes Ejecutivo y Legislativo, la judicatura gana
su legitimidad por la solidez e imparcialidad con las que resuelve conflictos entre ciu-
dadanos y entre estos y las autoridades. Una Corte legítima es aquella que cuenta con
la independencia necesaria para interpretar correcta y convincentemente la Constitu-
ción y las leyes, sin interferencias indebidas de otros poderes o actores políticos.
El Judicial es, por supuesto, un poder político en el sentido más amplio del
término, pero jamás debe ser una instancia puramente partidista. Aunque está per-
meada por las preferencias ciudadanas y la opinión pública, es una institución que
incluso debe ir en contra de las mayorías legislativas cuando se trata de garantizar
los derechos de todas y todos, especialmente los de los grupos más vulnerables.
Su función es encontrar el difícil equilibrio entre la Constitución y la democracia,
entre la protección de los derechos y la regla de la mayoría.
90
91
92
93
94
95
Introducción
A las mujeres se les ha dicho que el progreso del feminismo
sería más rápido si solamente fueran menos estridentes.
A. Srinivasan
E
n la última década, la lucha por la igualdad de género ha adquirido un
nuevo protagonismo en la discusión política y en la vida cotidiana de
México. Las feministas se han expresado contra las violencias, las injusti-
cias y las discriminaciones de muy diversas formas y con éstas han logra-
do transformar leyes obsoletas, cambiar conciencias, transfigurar la polí-
tica, modificar el orden doméstico e instituir acciones antidiscriminatorias.
En el siglo xx, las cuotas de género se introdujeron como una forma de com-
pensación por la injusticia histórica sufrida de parte de grupos identificables, y
representan una prueba del compromiso de la sociedad para reparar esa injusti-
cia.1 Las cuotas son un sistema de acción afirmativa desarrollado para abrir espa-
cios con el propósito de que las mujeres ocupen puestos en la toma de decisiones.
Las cuotas trajeron consigo la necesidad de revisar los prejuicios y los este-
reotipos en torno a la negociación. Los estereotipos de género llevan a algunas
personas a especular que los hombres son mucho mejores que las mujeres al nego-
ciar.2 La literatura reciente sobre negociaciones demuestra que cuando las mujeres
negocian en nombre de otras personas, presentan resultados tan exitosos como
los de los hombres.3
Exceptuando sus desigualdades en materia de paridad económica y las inacep-
tables violencias, México ha sido un ejemplo mundial en la promoción del empo-
deramiento político de las mujeres, mientras que en el resto del mundo sólo se ha
cerrado 24.7% de la brecha de empoderamiento político global.4 Este reconoci-
96
97
98
Las feministas requerimos pasar del apoyo que nos prestamos a una alianza política
en la que haya lugar para la diversidad y el disenso […] ¿acaso no existe la posibili-
tendencias de los feminismos. Entiendo por feministas institucionales a quienes deciden expresar
su participación política en el feminismo por medio de instituciones, partidos políticos, organiza-
ciones de la sociedad civil. Sin embargo, existen muchas críticas a este tipo de participación políti-
ca. “Una discusión fundamental para las distintas feministas es si la respuesta a la violencia debe ser
la violencia; para unas resulta contraproducente mientras que otras la ven como una forma de auto-
defensa. […] las feministas mexicanas no son las primeras, ni serán las últimas, en recurrir a accio-
nes que se consideran violentas: hagamos memoria de las sufragistas” (Lamas, Dolor y política…).
Por ejemplo, destaca la lucha de las sufragistas británicas, como Emmeline Pankhurst, Rosa May
Billinghurst y Sophia Duleep Singh, quienes estuvieron dispuestas a infringir la ley para visibilizar
sus causas. La sufragista Emma Goldman argumentaba que las feministas institucionales “logran
sólo un bien superficial para las mujeres” y por ello era “necesario generar un movimiento desde el
ámbito doméstico” (Bianchi, “El pensamiento anarcofeminista…”). Este escenario de finales del
siglo xix en Inglaterra resulta extrañamente familiar para el México del siglo xxi; feministas mexica-
nas han emprendido acciones que se consideran violentas e incluso han infringido la ley para posi-
cionar su mensaje político. La discusión respecto a cuál es la mejor forma en que las mujeres
“deben” expresarse políticamente ante las constantes violaciones a sus derechos humanos se ha
vuelto una discusión pública en el país.
21 Affidamento es el acto por medio del cual las mujeres podrían encontrarse con otras iguales
99
Estudio de caso:
de las cuotas a la paridad constitucional en México
Las mujeres pertenecen a todos los lugares
donde se toman decisiones.
Ruth Bather Ginsburg
100
25 El 7 de noviembre de 2011, María Elena Chapa Hernández, María de las Nieves García Fer-
nández, María Cruz García Sánchez, Esther Morales Pérez Refuge, Rocío Lourdes Reyes Willie, María
Fernanda Rodríguez Calva, María Juana Soto Santana, Martha Angélica Tagle Martínez, María de los
Ángeles Moreno Uriegas y Laura Cerna Lara interpusieron un juicio ante la Protección de los Dere-
chos Políticos-Electorales del Ciudadano para impugnar el acuerdo del Instituto Federal Electoral
(SUP-JDC-12624/2011), que mencionaba los criterios para el registro de candidaturas.
26 Alcocer, Cuota de género…, p. 38.
27 En 2007, María del Carmen Alanís se convirtió en la primera mujer magistrada en ocupar la
101
El proceso de negociación
La perspectiva de género desempeñó un papel importante en el éxito de las nego-
ciaciones para la paridad transversal de género. A diferencia de los distintos parti-
dos políticos, la Red de Mujeres en Plural tenía un objetivo y una estrategia clara y
meditada. La primera estrategia fue el establecimiento de una alianza de mujeres
en diferentes funciones de liderazgo y posiciones políticas para defender la causa
en su sector.
La Red de Mujeres en Plural se preparó intuitivamente para negociar utilizan-
do una perspectiva de género. La preparación tradicional para la negociación
consta de seis pasos: conócete a ti mismo, conoce a tus adversarios, reflexiona
sobre las convenciones de negociación, considera la logística de la situación, orga-
niza negociaciones simuladas y establece tus puntos de aspiración.31 En cambio,
un enfoque de negociación con perspectiva de género propone la siguiente estra-
tegia: “Entrar en el paso, adaptar nuestros consejos generales a la situación especí-
fica, prestar atención a las diferencias, pero evitando estereotipar a los individuos,
cuestionar tus suposiciones, escuchar activamente”.32
Las feministas institucionales habían hecho su tarea, ya que presentaron inter-
na y públicamente la lógica de sus argumentos y salieron adelante a pesar de las
resistencias de los líderes de los partidos políticos. Por ejemplo, tan pronto como el
presidente Peña Nieto presentó la iniciativa, la Red de Mujeres en Plural emitió un
manifiesto público en periódicos y medios sociales en el que presionaba por la
paridad total y por sanciones a los partidos políticos que infringieran la ley. Sus
acciones coordinadas para convencer internamente a los líderes políticos y para
condenar públicamente la falta de apoyo a la paridad tuvieron un efecto inmediato.
102
103
104
Referencias
Alanís, M.C., Entrevista para esta investigación, en la Universidad de Cambridge, Reino
Unido, 2020.
Alcocer, J., Cuota de género: una sentencia histórica, Instituto Electoral y de Participación
Ciudadana del Estado de Jalisco, 2013.
Amanatullah, E.T., y M.W. Morris, “Negotiating gender roles: Gender differences in asserti-
ve negotiating are mediated by women’s fear of backlash and attenuated when nego-
tiating on behalf of others”, Journal of Personality & Social Psychology, 98(2), 2010,
pp. 256-267.
Arrieta Ceniceros, L., y D. Ramírez Arriaga, “La negociación política en el cambio institucio-
nal de la dinámica legislativa. A propósito del Pacto por México”, Estudios Políticos
39, 2016, pp. 121-147.
105
106
M
éxico forma parte de una desafortunada constelación de países que
han seguido una tendencia de progresiva erosión de su democracia.
Durante los últimos cuatro años, nuestro país enfrenta un acelerado
proceso de destrucción institucional que, a diferencia de otros
momentos en los que las democracias se han desplomado de golpe,
la nuestra se está desmantelando pieza por pieza, producto de decisiones del Eje-
cutivo y su coalición gobernante.
En nuestro balance sobre la democracia mexicana,1 desde el Instituto de
Estudios para la Transición Democrática (IETD), sostenemos que: “El Presidente
de la República y su coalición (Morena) desde finales de 2018 y hasta la fecha han
protagonizado una vasta operación política bajo la forma de leyes, decretos o de
iniciativas que están trastocando a casi todos los elementos del sistema constitu-
cional democrático. Desde la división de poderes hasta el federalismo; desde la
libertad de prensa hasta la libertad de gestión y de cátedra en las universidades;
desde la laicidad del Estado hasta la representación en el Congreso; desde la inde-
pendencia judicial a la autonomía de las autoridades electorales”.
En este tiempo, el gobierno de México ha mostrado una abierta propensión
a violar la Constitución y las leyes en distintos ámbitos y a negarse a estar sujeto
al control de instituciones, agencias de transparencia y rendición de cuentas y
órganos autónomos, como el Instituto Nacional Electoral (INE). El embate con-
tra el INE no es nuevo, pero resulta cada vez más grave en virtud de que ha
pasado de una retórica del Presidente y su partido para denostar a la autoridad
1 Instituto
de Estudios para la Transición Democrática, 2021: el estado de la democracia (el
caso mexicano), 2021, en <https://ietd.org.mx/2021-el-estado-de-la-democracia-el-caso-mexicano/>.
107
108
109
2. Reducir el pluralismo:
110
111
La iniciativa indica que los integrantes del INEC y los magistrados del TEPJF
se elegirían por voto universal. Esta propuesta podría parecer simplemente
estrambótica, pero lleva consigo la intención de capturar a los árbitros electorales.
Implicaría una reforma constitucional y un horizonte de elecciones en que, inevi-
tablemente, el Poder Ejecutivo llevaría la ventaja al nominar a la tercera parte de
los candidatos y candidatas a ser votados por la ciudadanía, más los que pudiera
imponer o negociar en el Poder Legislativo (o con sus respectivas mayorías, hoy
Morena y su coalición conforman mayorías simples en ambas cámaras) y en el
Judicial, sobre los cuales tiene también influencia. El modelo unos consejeros y
magistrados seleccionados bajo el más amplio consenso y tomando en cuenta su
competencia técnica, se cancelaría y con ello las garantías de imparcialidad y
autonomía de las autoridades electorales.
Debemos subrayarlo: la intentona consiste también en que los estados dejen
de administrar y organizar sus propias elecciones, que carezcan de autoridades
administrativas y jurisdiccionales, que cedan sus facultades para emitir sus leyes
electorales y que renuncien a su libertad y soberanía constitucional para determi-
nar la dimensión de sus Congresos y la composición de sus ayuntamientos. La
reforma no solo es antipluralista sino abiertamente antifederalista y en esa medi-
da, anticonstitucional.
Primera obligación:
defender al INE y al sistema nacional electoral
Defender al INE y su autonomía es hoy una obligación absoluta. De acuerdo con
la Encuesta Nacional de Cultura Cívica (ENCUCI) 2020, el INE es la institución civil
con mayor confianza de la ciudadanía con 60%, por encima de la Presidencia de la
República que cuenta con el 52%. Estudios demoscópicos más recientes, como la
encuesta de El Financiero,4 revelan que al 26 de octubre de 2022, el 68% de las
112
113
1] El sistema electoral funciona y cuenta con una aprobación ciudadana cer-
cana al 70%. Las últimas elecciones, 2018 y 2021, mostraron el profesionalis-
mo de las autoridades electorales ante comicios cada vez más complejos en
contextos de exigencia muy altos. La elección más grande de la historia se
realizó en medio de la pandemia y los niveles de eficacia y participación fue-
ron los más altos de los que se tenga registro. El INE puede organizar las
elecciones de 2024 y México puede volver a tener elecciones libres, impar-
ciales, competidas, legales, objetivas y transparentes en 2024 con las reglas
actuales, las mismas con las que el presidente López Obrador ganó en las
urnas en 2018.
2] El INE es una institución central para las mexicanas y los mexicanos. Su
defensa es un compromiso democrático. Los grandes cambios políticos que
ha vivido el país se explican en buena medida, por la existencia de las autori-
dades electorales (especialmente la alta competitividad con 68% de alternan-
cias y el pluralismo existente en los gobiernos y Congresos de todo nivel). El
reconocimiento y la confianza en el INE se deben al esfuerzo sostenido de
miles de mexicanos y funcionarios que se comprometen con la legalidad, la
certeza y la transparencia de las tareas y decisiones del INE, institución enca-
bezada por ciudadanas y ciudadanos que fueron designados como conseje-
ros generales por unanimidad o por amplio consenso de las mismas fuerzas
políticas que integran el Congreso, y que constituyen parte del reconoci-
miento a la institicionalidad electoral. A menos de un año del inicio del pro-
ceso electoral 2023-2024, aprobar alguna reforma que no se haya probado en
una elección intermedia supone un riesgo alto e innecesario para el arbitraje
electoral. Y mucho mayor si no está soportada por diagnósticos rigurosos
que incluyan a la autoridad electoral.
3] Como se puede ver, la iniciativa de reforma electoral del presidente
Andrés Manuel López Obrador atenta contra el venturoso proceso de refor-
mas electorales que desde 1977 se había empeñado en ampliar la pluralidad
política y la representación, en dotar de reglas del juego claras, ciertas y
transparentes, en hacer cada vez más equitativa la competencia electoral,
lograr la imparcialidad de las autoridades electorales y la legalidad de los
procesos comiciales. Por decir lo menos, la propuesta del Presidente implica
una regresión, menos pluralismo, menores condiciones para la competencia
equilibrada y pérdida de autonomía de los órganos electorales.
4] El intento de regresión autoritaria formulado por el Presidente es una
apuesta para volver a las condiciones predemocráticas del México previo a la
transición a la democracia: a) partido hegemónico; b) presidencialismo de
enormes capacidades constitucionales y metaconstitucionales, con un Presi-
dente en el vértice del mecanismo de decisión y negociación; c) subordina-
ción de poderes (Legislativo y Judicial) al Ejecutivo; d) federalismo formal,
114
115
Ciudad de México
7 de noviembre de 2022
116
En defensa
de la democracia
E
stamos aquí reunidos con un solo objetivo claro y trascendente: defender
el sistema electoral que varias generaciones de mexicanos construyeron,
que ha permitido la convivencia y competencia de la pluralidad y la es-
tabilidad políticas, la trasmisión pacífica de los poderes públicos y la
ampliación de las libertades.
Todo eso, constituye un patrimonio común y por ello estamos aquí, ciudada-
nos de muy diferentes orientaciones políticas y extracciones sociales, militantes de
partidos, integrantes de organizaciones sociales y personas sin filiación política
que deseamos que México sea la casa que nos cobije a todos.
Estamos aquí ejerciendo nuestros derechos. El derecho a manifestarnos, a opi-
nar, a reunirnos de manera pacífica para expresar nuestras preocupaciones y aspira-
ciones. Somos parte de una marea de opinión que aprecia y defiende la democracia.
Como país fuimos capaces de edificar una germinal democracia. Dejamos
atrás el país de un solo partido, de un presidencialismo opresivo, de elecciones sin
competencia ni opciones auténticas, de poderes constitucionales que funcionaban
como apéndices del Ejecutivo, de medios de comunicación mayoritariamente ofi-
cialistas, para abrirle paso a la expresión y recreación de la diversidad política, a
elecciones libres, disputadas y creíbles, a Congresos plurales, gobiernos de dife-
rente orientación, pesos y contrapesos en el entramado estatal y sin duda una
espiral virtuosa que amplió el ejercicio de las libertades.
Y para que ello fuera posible se requirió de movilizaciones, luchas, denun-
cias, acuerdos —muchos acuerdos— y sobre todo conformar normas e institu-
117
118
119
Ciudad de México
13 de noviembre de 2022
120
El Derecho en movimiento*
Ricardo Becerra**
H
e sido invitado, y doy las gracias por ello, a este foro auspiciado por
la Suprema Corte de Justicia, para presentar un libro singular, que da
tanto gusto leer, lleno de asuntos que importan a cualquier ciudadano
mexicano medio —como yo— y cuyo autor resulta ser, además, un
buen amigo.
Otras tantas gracias por hacerme parte de esta lujosa mesa, con estudiosas a
las que sigo la pista y leo desde hace mucho tiempo: la doctora Gabriela Torres
Mazuera y naturalmente la doctora Nora Rabotnikof a quien admiro y con quien
discuto en secreto a cada rato. Un privilegio escucharlas y estar con ustedes.
Confieso que no fue tan fácil redactar las ideas que siguen —aunque pocas—
porque este es un libro raro, un volumen que trata de muchas cosas al mismo
tiempo y que exige, por eso mismo, mucha concentración y la decisión mental
para optar por una de sus hebras a lo largo de su lectura.
Por eso, quizá, haya que formular una advertencia: estamos en la presenta-
ción de un libro que no trata sobre algo muy específico, sobre un tema, un proble-
ma, una disciplina o un asunto de actualidad. Lo que estamos discutiendo es algo
muy infrecuente en el medio académico de México: un programa intelectual o,
dicho de otro modo (con perdón anticipado de la redundancia), la forma de pen-
sar de un pensador original.
Son 11 ensayos que se proponen escapar del universo de las autorreferencias
del derecho, ese mundo según el cual necesitas ser abogado “para entendernos”, y
por el contrario, estamos ante escritos que se abren y giran bordando disciplinas
distintas en un mismo ensayo, en un mismo párrafo.
El primer ensayo “Análisis sociológico de la propiedad” es un ejemplo de lo
que digo, pero esta peculiaridad de escritura abierta a muchas disciplinas aparece
una y otra vez a lo largo de la selección de ensayos y de sus 370 páginas.
* Texto leído en la presentación del libro de Antonio Azuela, El derecho en movimiento. Once
ensayos de sociología jurídica, selección y prólogo de Fernando Escalante, México, Editorial Tirant
Lo Blanch, 2021.
** Presidente del Instituto de Estudios para la Transición Democrática.
121
* * *
122
Todos los ensayos suscitan interés, son originales, muestran la manera de trabajar
de esculpir y de pensar de Antonio Azuela, pero hay uno que sobresale por su bri-
llantez y la concentración de información de todo orden, para llevarnos de la
mano hacia una historia política de la capital del país. Hablo de “Ocho episodios
jurídicos que marcaron la Ciudad de México entre 1940 y 2005”.
Con la técnica cinematográfica de “corte con salto”, nuestro autor es capaz de
proyectar la película rápida de 60 años de la metrópoli con una erudición y una
pasión que a ratos evoca vientos de gran historiador. Sus capítulos son:
1. La gran regularización de la tierra urbana ocurrida en la posguerra pero a
toro pasado. La ciudad empezó a ser el monstruo que es, y el gobierno, decretos
en mano, iba atrás del proceso demográfico.
2. Esa urbanización irregular no hizo más que crecer y al cabo tuvo que diseñar
jurídicamente su carta de naturalización en el sistema jurídico, pero también en el
sistema político. Si había que organizar campesinos, si había que organizar obreros,
ahora había que organizar colonos móviles y movilizables cada vez más decisivos.
3. Aquel sistema político tuvo la sabiduría de crear anillos intermedios de dis-
cusión y de debate público todavía en un ecosistema autoritario, y el mundo urba-
no fue el que primero lo exigió y lo creó. Clases medias, universidades, colegios
profesionales, ingenieros, arquitectos, difusos emisarios de la opinión pública
tuvieron sus cámaras de resonancia en aquel país vertical e incluso pudieron
infringir derrotas señeras al Presidente y al Regente de entonces.
4. La vivienda del siglo xxi apareció en 1964 (literalmente apareció): el conjun-
to ultramoderno de Tlatelolco. La gran colmena de edificios de departamentos ubi-
cados en un viejo y tradicional pueblo de la ciudad de México, que resolvería ejem-
plarmente la demanda habitacional de la ciudad, tanto en su aspecto constructivo
como en su aspecto financiero y social. El terremoto de 1985 y los años que siguie-
ron evidenciaron que en aquel lugar no se había solucionado ni lo uno ni lo otro, en
una de las ironías urbanas más crueles que puedan contar las crónicas de la ciudad.
5. La perpetua regularización del cinturón ejidal que rodea casi por cada metro
cuadrado a la Ciudad de México.
6. La promulgación de la Ley General de Asentamientos Humanos como con-
vocatoria de reorganización del país, que expresó un divorcio duradero entre el
123
* * *
Es verdad que la densidad de cada uno de los ensayos seleccionados permite una
discusión en sí misma: ¿es la propiedad privada un derecho fundamental? ¿La Cons-
titución de la República, aloja derechos de primera categoría, frutos del bloque de la
última generación, como los derechos de propiedad; y por otro lado, hay derechos
de segunda, viejos artefactos de la posrevolución como el derecho a la vivienda o el
pobre salario mínimo? ¿Por qué la expropiación adquirió tan mala fama en México,
incluso en sectores que cabría esperar la rehabilitaran? ¿Por qué en los 24 años de
vida democrática del país, conforme el Poder Judicial y los jueces adquirieron más
autonomía en más campos, al mismo tiempo fueron ganando terreno lecturas más
conservadoras y más proclives a los argumentos e intereses de los propietarios? ¿Por
qué el fenómeno decisivo de nuestra vida en común —el hacinamiento urbano en
metrópolis astrosas— no ha tenido una respuesta gubernamental que siquiera se
acerque en magnitud e intensidad? ¿Cómo es posible que la concentración humana
más grande de América (São Paulo me perdone) no haya conseguido sustituir su
aeropuerto, cuya necesidad económica se palpa todos los días y cuyo riesgo para la
seguridad humana se plantea a cada despegue y cada aterrizaje, cada 59 segundos
en medio del pobrerío de tres millones de habitantes del oriente? ¿Qué explica esa
trabazón jurídica y sociológica instalada entre nosotros hace dos décadas?
* * *
No quiero terminar esta reseña de la obra que nos ofrece la editorial Tirant Lo
Blanch sin proyectar ante ustedes la imagen de un episodio que ilustra vivamente
las posibilidades de los escritos y las ideas del profesor Azuela.
124
125
A
ntes de entrar en materia quiero hacer público mi agradecimiento a Héctor
Aguilar Camín. Gracias a su generosidad entré, junto con Raúl Trejo
Delarbre, a escribir en el legendario diario Unomásuno; luego me abrió las
puertas de Nexos e incluso, con Luis Miguel Aguilar y Rafael Pérez Gay,
me propuso dirigir la revista; en La Jornada lo recuerdo bien como
subdirector, y cuando iba a redactar el editorial del periódico, Héctor con un
ancho y efectivo plumón, corregía de manera categórica y efectiva mis balbuceos.
Aprendí y aún envidio la concisión y contundencia de su pluma. Es un ensayista
claro y por momentos elegante. Sus textos resultan sugerentes, ricos, polémicos.
Pues bien, cuando me invitaron a esta mesa redonda no sabía bien qué hacer.
La obra ensayística de Héctor es amplia y variada y no resulta sencillo abarcarla.
Opté al final por hacer un comentario sobre Nocturno de la democracia mexica-
na1 por dos motivos: a) en ella Héctor recoge parte de su producción anterior, y b)
es relativamente reciente y anunciaba mucho de lo que por desgracia nos está
sucediendo.
Ya en el libro, el haz de temas resulta (para mí) inabarcable. Decidí por ello
dejar de lado la primera parte, el repaso panorámico que Héctor hace de la histo-
ria del país, el del México prisionero de su pasado, el de la exaltación de la violen-
cia y el que minusvalora los episodios constructivos, el que alimenta el victimis-
mo, el que recrea la pulsión liberal a contracorriente de la tradición, el de los
intentos de modernización fracasada, el de los virreyes, caudillos y presidentes y
los mecanismos sui generis de transmisión del poder; el de la nación conservado-
ra contrapuesta a la liberal, que subraya las continuidades entre el porfiriato y los
gobiernos emanados de la Revolución, sin reparar en las muchas de sus rupturas,
o el de las relaciones de amor y odio con Estados Unidos. Cada uno de esos enun-
ciados suscita y merece una discusión. Pero opté por armar mi comentario con
base en nueve grandes temas que se encuentran desarrollados en las partes 2 y 3.
Esos apartados serán: 1) democracia y neoliberalismo, 2) ley y costumbre,
3) la democracia como proceso, 4) los retos (no atendidos) de la democracia, 5) la
irrupción criminal y su impacto, 6) el populismo, 7) la traducción de votos en esca-
ños, 8) las elecciones de 2018, y 9) las previsiones sobre el actual gobierno.
1. Como bien apunta Aguilar Camín, a partir de 1968 “se abre entre la socie-
dad y el gobierno una fisura moral”. Se reclaman libertades expropiadas, un “aire
126
127
128
129
130
131