LA DIGNIDAD Y LA RAZÓN

La dignidad de la naturaleza humana requiere que enfrentemos

las tormentas de la vida. (Mahatma Gandhi)
El pensamiento filosófico contribuyó a desarrollar esa visión universal del hombre como
merecedor del respeto de sí mismo y de los demás, que constituye una característica
distintiva de su condición humana. No obstante, en ellas sigue siendo objeto de debate
cuestiones de fondo tales como: ¿Qué debemos entender por dignidad? ¿En qué se
fundamenta su valor? ¿Cómo se expresa jurídicamente la dignidad?
Adentrase al estudio de la razón resulta de por sí complejo. La razón es estudiada de
diferentes disciplinas científica, como es el caso de las ciencias sociales y en particular de
la filosofía, pero cabe mencionar que también forma parte de estudio de lingüísticas,
psicología, política, sociología. Sin embargo, por el hecho de mostrar distingos en su
naturaleza, resulta confuso y en base a eso surgen términos como racionalidad,
razonabilidad, entre otros derivados del término razón que en realidad no son
contradictorios, sino más bien, complementarios a ella. Encontrar la naturaleza exacta de la
razón sería encontrar la verdad absoluta. Empero, “la razón” ha sido estudiada a
profundidad por la filosofía, de los cuales se desprende una vasta historicidad del
pensamiento del hombre.
LA DIGNIDAD
Origen de la dignidad
En su sentido originario “dignidad” (lat. dignus) significó igual, del mismo precio o valor,
de donde se derivaría la acepción de algo justo o merecedor de respeto. La tradición
religiosa desarrolló su concepción sobre la dignidad a partir del concepto Imago Dei, sobre
cuya base elaboró los rasgos universales y distintivos de la persona humana y fundamentó
la obligación de respetarla dada su condición de intermediaria entre el Creador y lo creado.
El pensamiento filosófico contribuyó a desarrollar esa visión universal del hombre como
merecedor del respeto de sí mismo y de los demás, que constituye una característica
distintiva de su condición humana. Gracias a esta forma de pensar, las ciencias sociales
actuales reconocen que la actitud de respeto hacia la persona humana tiene por base su
dignidad, en la cual se originan los derechos humanos.
La dignidad humana
La filosofía moral de Kant es un referente obligado a la hora de interpretar la dignidad. A
pesar de haber sido ampliamente criticados, sus planteamientos sobre este tema siguen
siendo paradigmáticos.
Según Kant (1998), la autonomía es el “fundamento de la dignidad de la naturaleza humana
y de toda naturaleza racional”. Por ello considera que la dignidad es la propiedad intrínseca
“de un ser racional que no obedece otra ley que aquella que él se da a sí mismo”. La
autonomía confiere a los seres racionales un valor en sí, “interno”, en tanto que los

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independiza del accionar de las leyes naturales. Este hecho valoriza en términos absolutos
al ser racional porque lo hace sujeto de la “legislación misma” y no un mero objeto.
Si tomamos a la naturaleza humana como base de la dignidad, entonces se podría concluir
con certeza que la dignidad:
 Es sumamente democrática, porque todos por definición la tienen.
 No es enajenable, de ahí que nadie bajo ninguna circunstancia pueda quitarle la
dignidad a un ser humano.
 Es puramente cualitativa y, por tanto, no admite distintos niveles: es la misma para
todos.
LA RAZÓN
Origen de la razón
Los que implantaron el gusto por la razón, fueron Tales de Mileto (Mileto-Jonia),
Anaximandro y Anaxímenes a principios del siglo VI, desde allí se inicia con los
cuestionamientos, dudas, juicios, diálogos y debates pero teniendo conocimientos y el
conjunto de estos conocimientos se convertirá en una ciencia con verdades verificables.
Pero, ya en el siglo VI hacia tras los griegos vivían en el mundo de las creencias,
especulaciones y de la imaginación, le daban importancia a los Mitos que son una
estructura de pensamientos simbólicos, percepciones, interpretaciones de una realidad, pero
no de una realidad verdadera que te presenta la ciencia.
Grecia fue la ciudad en donde cobijo a los grandes filósofos y la iniciadora de la
experiencia de una cultura racional, según la historia de la filosofía nos da a conocer que
Tales de Mileto, Anaxímenes y Anaximandro fueron los que implantaron ese gusto por la
razón en especial Tales a principios del siglo VI, desde allí se inicia con los
cuestionamientos, dudas, juicios, diálogos y debates pero teniendo conocimientos ya que el
conjunto de conocimientos metódicos y sistemáticos se convertirá en una ciencia con
verdades verificables, demostrables. Pero desde el siglo VI hacia tras los griegos vivía en el
mundo de las creencias, especulaciones y de la imaginación dándole mayor importancia a
los Mitos (estructuras del pensamiento simbólico), percepciones de una realidad, pero no de
una realidad verdadera demostrable que te presenta la ciencia (López, 2003, p. 1). “Es en
Grecia que por primera vez surgió 1a idea de pedir a la consideración del mundo por la
inteligencia, y no solamente a una revelación sobrenatural o a la tradición, lo que debe ser
tenido por la verdad” (Margot, s.f., p.1).
Aproximación a la naturaleza de la razón
Se sigue pregonando aún: “El hombre es un animal racional”, por ende, posee instinto que
le permite emitir de manera inmediata sobre su buena o mala acción. Sin embargo, no
podemos fiarnos de ello para emitir un juicio correcto y seguro, para ello, se tiene en cuenta

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los principios o morales o también, la base fundamental: la razón humana que de ella han
devenido todas las demás verdades.
Ahora bien, se conoce al concepto más común sobre la razón: “La razón es la facultad
del ser humano de pensar, reflexionar para llegar a una conclusión o formar juicios de
una determinada situación o cosa. La palabra razón proviene del latín ratio, rationis que
significa “cálculo, razón o razonamiento”. Esto, no quiere decir que la razón está exenta
del error.
En primer lugar, respecto a la razón humana se tomará a Fagothey (1973) quién
menciona en su libro “Ética teoría y aplicación”:

La razón humana no funciona en un vació, sino que necesita algunos datos para
seguir adelante, algunos hallazgos a partir de los cuales el proceso del razonamiento
pueda tomar su origen. Los deriva de la experiencia y, en el campo ético, no solo del
examen de nuestra propia conducta, sino también de las observaciones de la vida
humana a nuestro alrededor y de los actos que vemos que los hombres realzan
(p.91-92). Dicho en otras palabras, Fagothey afirma que la razón humana no puede
darse de la nada o que el ser humano no puede poseer razón sino ha llevado a cabo
el proceso de razonamiento que se basa en la experiencia y en el campo ético tiene
que ver con la conducta que adopta el ser humano ante diversas situaciones de su
vida diaria. Cuno (2010) afirma: “Generalmente entendemos por (razón) aquella
facultad de conceptuar, juzgar, ordenar, relacionar y estructurar nuestras ideas,
pensamientos y conocimientos” (p.206).
Es decir, la razón nos permite la formulación de juicios y no podemos formular
juicio, sin antes conocer datos.

La acepción sobre la “razón” hace referencia a la cualidad o característica propia de la

naturaleza de la persona en donde suceden los diferentes procesos mental como el pensar,
juzgar y la formación de conceptos, etc. La esencia que lo distingue al hombre de los
animales es la razón definida como: «Toda acción intelectual que nos pone en contacto con
la realidad, por medio de la cual topamos con lo trascendente» (Cuno, 2010, p.206). Debido
a la actividad y al proceso mental que realiza el hombre, le permite comprender la realidad
y juzgarse a sí mismo y aspectos del individuo.

Importancia de la razón práctica:

La razón práctica sólo tiene validez inmediata para el yo y consiste en determinarse a sí
mismo, pero Kant afirma el primado de la razón práctica sobre la especulativa: lo primario
en el hombre no es la teoría, sino la praxis, un hacer. "La crítica de la razón práctica en
general tiene pues, la obligación de quitar a la razón empíricamente condicionada, la
pretensión de querer proporcionar ella sola, de un modo exclusivo, fundamento de la
determinación de la voluntad." Además, el hombre no puede conocer o probar por razón

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especulativa la existencia de Dios, o el mundo como conjunto, por tanto, lo que la crítica de
la razón debe hacer es demostrar que las cuestiones Dios, mundo, alma, no son "teóricas"
sino "prácticas", es decir, morales.
La razón es considerada elemento constitutivo de lo humano. "Sujeto vivo" es ya una
tautología. Todo sujeto humano para ser tal, implica el estar vivo; en el concepto de sujeto
humano está ya contenido el concepto de viviente. Se puede por tanto hablar simplemente
de sujeto. Lo propiamente humano es entonces la autoconciencia, el sujeto es
autoconciencia. Esto significa: el sujeto es el acto de reflexión sobre sí, el acto de ser
consciente de sí mismo, el ser consciente de que existe como tal y tal ente (cf. Rojas, 2002).
Como dice Miranda (1999: 17), el animal existe pero no sabe que existe, el ser humano
existe y sabe que existe, ahí está la gran diferencia (Rojas, 2005).
Tipos de razón:
Razón teórica: La razón es teórica, cuando busca mediante el ejercicio intelectual, conocer
la naturaleza, cualidades y relaciones - expresadas en leyes, axiomas, conceptos, etc. - de
un determinado objeto. Su denotación conceptual, se circunscribe al uso explicativo y
comprensivo de la razón, y es por ello que sólo se limita a determinar su objeto, sin
relacionarse con él. Lo que se pretende destacar con esta afirmación, es que a través del
conocimiento teórico no actuamos ejerciendo algún cambio en la realidad, sino que nos
limitamos a determinar los objetos de acuerdo a ciertos conceptos y reglas del
entendimiento (p.211).
La razón práctica: La razón práctica es la razón en su uso práctico (moral) o función
práctica, y en tal sentido, se dirige a la elección de acuerdo con la ley moral y, cuando ello
es físicamente posible, a la realización de la decisión en la acción. A diferencia de lo que
sucede con la razón teórica, la razón práctica sí se relaciona con su objeto, convirtiéndolo
en realidad, pues el conocimiento práctico es aquel que tenemos con relación a la facultad
que determina nuestras acciones en conformidad con ciertos motivos, razones o principios
para actuar. Esa facultad activa y generadora es una voluntad racional que nos permite
presuponer que sabemos lo que hacemos cuando actuamos (p.212).
III. CONCLUSIONES:
- La dignidad humana tiene su fundamento en la propuesta moral de que cada vida humana
tiene significado y valor intrínseco.
-la dignidad es la propiedad intrínseca que caracteriza al ser humano por su capacidad
racional.
-Fueron Tales de Mileto, Anaxímenes y Anaximandro quienes implantaron el gusto por la
“razón” a principios del siglo VI en la ciudad de Grecia.

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-Los Estoicos llamaron a la razón el Hegemonikon o facultad que dirige y orienta al
hombre, para que no se pierda en el mundo de los sentimientos y pueda vivir según su
esencia racional que lo caracteriza.

-El Filósofo es el hombre en quien el elemento racional predomina con mayor intensidad
producto de su actitud inquieta e interrogativa frente al mundo y frente a sí mismo.

-La presencia del conocimiento permite que la razón pueda resolver problemas, extraer
conclusiones, enjuiciar, opinar y cuestionar la realidad exterior y su realidad interior.

-La razón no solo es una actividad intelectual, si no que se apoya en el conocimiento y la

voluntad para el accionar del hombre.

-La razón es correcta cuando es ejercida racionalmente, es consiente con ella misma y fiel a
su propia ley.

-La razón teórica de Kant busca mediante la actividad o ejercicio intelectual conocer como
son las cosas.

-La razón práctica de Kant se ocupa de cómo debe ser la conducta humana en relación con
la ley moral.

IV. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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