Artículo: Ingeniería de Proteínas para El Mejoramiento de Enzimas
Artículo: Ingeniería de Proteínas para El Mejoramiento de Enzimas
Artículo: Ingeniería de Proteínas para El Mejoramiento de Enzimas
ARTÍCULO
Keywords: Protein structure, enzymes, protein engineering, rational design, directed evo-
lution.
Departamento de Acervos Digitales. Dirección General de Cómputo y de Tecnologías de Información y Comunicación – UNAM 2
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons
“Ingeniería de proteínas para el mejoramiento de enzimas”,
Claudia Martínez Anaya y José Fernando García Guevara
1 de diciembre de 2014 | Vol. 15 | Núm. 12 | ISSN 1607 - 6079
http://www.revista.unam.mx/vol.15/num12/art93
Introducción
L
a definición del diccionario de biocatalizador es: “aquella sustancia, en especial una
enzima, que inicia o modifica la velocidad de una reacción química sin ser ella misma
afectada por esta reacción”. Efectivamente, las enzimas son macromoléculas (nor-
malmente proteicas) que tienen la capacidad de aumentar la velocidad de las reacciones
en millones de veces comparadas con el tiempo que les tomaría ocurrir espontánea-
mente. Estas enzimas o biocatalizadores son energéticamente eficientes y prácticamen-
te todas llevan a cabo su función bajo condiciones moderadas: temperatura ambiente,
presión atmosférica y en ambientes acuosos. Además, generan muy pocos productos de
desecho. Sin embargo, para poder llevar a cabo procesos aplicados de manera rentable,
las capacidades de las enzimas pueden mejorarse mediante métodos de ingeniería de
proteínas (PEÑA-MONTES, 2008; SEGOVIA, 2010). Estos métodos tienen la finalidad de
generar variantes enzimáticas que sean aún más activas o duraderas, o que puedan ac-
tuar sobre sustratos diferentes al original o funcionar en condiciones diferentes a las que
trabajan de manera fisiológica dentro de su organismo de origen, tales como: temperatu-
ras elevadas, presencia de compuestos inhibitorios o solventes diferentes al agua. La cre-
ciente presión para llevar a cabo procesos ambientalmente amigables es un motor para
el uso de enzimas, por lo que su mejoramiento en el laboratorio es deseable.
Al emplear técnicas que intentan imitar la evolución natural en un proceso de
generación de variabilidad-selección, la ingeniería de proteínas utiliza diferentes estrate-
gias dependiendo del grado de conocimiento que se tenga sobre ellas. De una enzima es
posible conocer la secuencia del gen que la codifica, que es indicativa de su secuencia de
aminoácidos, según el código genético. A esta secuencia lineal de aminoácidos se le de-
nomina estructura primaria. La posición que los diferentes aminoácidos adoptan puede
resultar en la formación de hélices o láminas conocidas como alfa-hélices u hojas-beta
plegadas. En su conjunto, a éstas se les conoce como estructura secundaria. La forma
tridimensional del acomodo completo de todos los aminoácidos en el espacio se cono-
ce como estructura terciaria (Figura 1), y se determina experimentalmente, entre otras
maneras, mediante difracción de rayos X de arreglos cristalinos de las proteínas. Por esta
razón es que comúnmente se puede llamar también a la estructura tridimensional de una
proteína, estructura cristalina1.
[1] Se puede encontrar más Aunque la determinación de la estructura tridimensional de las proteínas se ha
información al respecto
de la estructura de
vuelto más cotidiana, solamente un pequeño porcentaje de las enzimas con las que se
las proteínas y de trabaja en los laboratorios cuenta con datos estructurales. Por este motivo, es muy co-
los métodos para su
análisis en: http:// mún tener datos de la secuencia primaria y secundaria de una proteína, pero no siempre
laguna.fmedic.unam. se conoce la estructura terciaria. Esta información determina el método que se quiera
mx/~evazquez/0403/
proteinas.html aplicar para llevar a cabo el mejoramiento de una enzima. En general, los métodos de
* Un ejemplo ilustrativo de ingeniería de proteínas pueden dividirse ampliamente en dos tipos: a) métodos de evolu-
la evolución dirigida de ción dirigida, y b) métodos de diseño racional. En muchos casos exitosos la combinación
proteínas se puede ver
en el siguiente video de ambos enfoques ha permitido mejores resultados.
animado: http://youtu.
be/r7mSweNf54c
Departamento de Acervos Digitales. Dirección General de Cómputo y de Tecnologías de Información y Comunicación – UNAM 3
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons
“Ingeniería de proteínas para el mejoramiento de enzimas”,
Claudia Martínez Anaya y José Fernando García Guevara
1 de diciembre de 2014 | Vol. 15 | Núm. 12 | ISSN 1607 - 6079
http://www.revista.unam.mx/vol.15/num12/art93
Figura 1. Se muestra la
secuencia lineal (indicada
por las fechas pequeñas) que
corresponde a la estructura
primaria de una proteína.
Cada bloque indica el
nombre del aminoácido
con el código de una sola
letra, ejemplo: G = glicina.
El color de esta secuencia de
aminoácidos corresponde al
lugar que ocupa en el espacio
en la formación de hélices u
hojas (estructura secunda-
ria). La estructura terciaria
o tridimensional resulta
del plegamiento de toda la
cadena de aminoácidos, y en
este ejemplo se indica con
color el lugar dentro de toda
la proteína del fragmento de
en medio.
Evolución dirigida
Cuando la información estructural de una enzima es limitada, la producción adecuada
de la proteína en el laboratorio es suficiente para llevar a cabo ensayos de evolución
dirigida. En este caso, la teoría de la evolución conocida para las especies, en la que la
acumulación de mutaciones genera variabilidad, es aplicada en la evolución dirigida de
proteínas, aunque en escalas de tiempo miles de veces más cortas.
Para este propósito el gen de la enzima de interés es sometido a la técnica co-
nocida como PCR (por sus iniciales en inglés: polymerase chain reaction), en la que el
fragmento de DNA que codifica a la enzima es copiado y replicado millones de veces por
una enzima polimerasa de DNA. Si esta polimerasa replica al DNA introduciendo errores
que no son reparados, al final de la reacción de PCR se tendrán millones de moléculas
portadoras de cambios (o mutaciones) con respecto a la original. Cuando se desconoce
qué secuencia de aminoácidos es la que conferirá una mejor actividad a la enzima, es
deseable que los cambios que se producen en la reacción de PCR ocurran al azar y con
poca frecuencia (para evitar generar muchas variantes inactivas) (Figura 2).
Las técnicas actuales en el laboratorio permiten manipular o controlar la tasa de
error durante la replicación de un gen, pudiendo llegar a tener de 2 a 8 mutaciones por
cada 1000 pares de bases replicadas. Las poblaciones de moléculas variantes que llegan
a obtenerse con este método deben ser posteriormente clonadas en un vector para su
producción y la verificación del cambio enzimático buscado (Figura 3). Los genes de la o
las variantes que presenten cambios positivos pueden ser sometidos a nuevos ciclos de
PCR para intentar obtener aún mejores actividades. Cuando la mutagénesis ocurre a lo
largo de toda la secuencia proteica, el número de variantes generadas es inmenso y en
la práctica es posible el análisis de sólo una fracción infinitesimal de estas colecciones
(también llamadas librerías).
Departamento de Acervos Digitales. Dirección General de Cómputo y de Tecnologías de Información y Comunicación – UNAM 4
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons
“Ingeniería de proteínas para el mejoramiento de enzimas”,
Claudia Martínez Anaya y José Fernando García Guevara
1 de diciembre de 2014 | Vol. 15 | Núm. 12 | ISSN 1607 - 6079
http://www.revista.unam.mx/vol.15/num12/art93
Departamento de Acervos Digitales. Dirección General de Cómputo y de Tecnologías de Información y Comunicación – UNAM 5
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons
“Ingeniería de proteínas para el mejoramiento de enzimas”,
Claudia Martínez Anaya y José Fernando García Guevara
1 de diciembre de 2014 | Vol. 15 | Núm. 12 | ISSN 1607 - 6079
http://www.revista.unam.mx/vol.15/num12/art93
Diseño racional
El diseño racional se refiere a la capacidad de predecir los cambios requeridos para lograr
alguna función preconcebida de una enzima. Esta estrategia requiere de un conocimien-
to profundo de la estructura de una enzima y de su sitio activo, que es el lugar en donde
se lleva a cabo la catálisis (Figura 4), o de los cambios moleculares que ocurren durante la
reacción, debido a que la función está estrechamente relacionada a la estructura.
Como se mencionó anteriormente, la determinación de las estructuras cristalo-
gráficas de muchas proteínas ha permitido que las bases de datos en donde se deposita
esta información estén en constante crecimiento. Por otro lado, existen herramientas
computacionales cada vez más poderosas que permiten la generación de modelos tri-
dimensionales de proteínas para las cuales no hay datos cristalográficos, y que se basan
en la información de proteínas homólogas cuya estructura ya ha sido determinada. Al
contar con una estructura (real o modelada)los aminoácidos que forman el sitio activo
de la enzima (también conocidos como residuos) pueden ser visualizados , así como otros
residuos clave cercanos a éste, residuos que se encuentran en la frontera entre los di-
ferentes fragmentos que componen una enzima, o aquellos que le permiten movilidad.
La identificación de estos puntos clave permite proponer cambios que resulten en una
actividad diferente a la original. El cambio necesario puede ser a nivel de sustitución de
aminoácidos específicos, los cuales, por ejemplo, adicionan o eliminan carga eléctrica, o
son más o menos voluminosos para acomodar a sustratos de cierto tamaño requerido,
Departamento de Acervos Digitales. Dirección General de Cómputo y de Tecnologías de Información y Comunicación – UNAM 6
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons
“Ingeniería de proteínas para el mejoramiento de enzimas”,
Claudia Martínez Anaya y José Fernando García Guevara
1 de diciembre de 2014 | Vol. 15 | Núm. 12 | ISSN 1607 - 6079
http://www.revista.unam.mx/vol.15/num12/art93
como puede verse en el ejemplo del siguiente video. Otros cambios involucran la adición
o eliminación de pequeñas regiones de una proteína para promover o restringir los cam-
bios conformacionales que ocurren durante la catálisis.
http://youtu.be/kg2hcJtpSRs
Ejemplo 1
Para eliminar restos biológicos de la ropa, algunos detergentes incorporan en su fórmula
enzimas como proteasas, lipasas o amilasas. Las enzimas añadidas deben ser estables
en las condiciones de lavado que incluyen la presencia de surfactantes, agentes oxidan-
tes y, en ocasiones, altas temperaturas. La subtisilina es una proteína con actividad de
proteasa –es decir, que destruye otras proteínas– que probó ser útil al ser incorporada
en detergentes. Sin embargo, se encontró que el aminoácido metionina, cercano al sito
activo, es susceptible a ser oxidado y esto reduce la actividad catalítica de la enzima.
Con base en este dato se planteó modificar dicho residuo por cada uno de los otros 19
aminoácidos para identificar un reemplazo de la metionina resistente al daño oxidativo
(ESTELL et al., 1985). Los resultados del trabajo mostraron que, en general, los cambios
por aminoácidos pequeños conservaban la actividad mientras que aminoácidos grandes
o cargados eléctricamente provocaban una disminución considerable en la misma. El
cambio de metionina por serina o alanina mantuvo actividades suficientemente buenas
y generó resistencia al daño oxidativo. Este caso ejemplifica la solución a un problema de
Departamento de Acervos Digitales. Dirección General de Cómputo y de Tecnologías de Información y Comunicación – UNAM 7
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons
“Ingeniería de proteínas para el mejoramiento de enzimas”,
Claudia Martínez Anaya y José Fernando García Guevara
1 de diciembre de 2014 | Vol. 15 | Núm. 12 | ISSN 1607 - 6079
http://www.revista.unam.mx/vol.15/num12/art93
inestabilidad de la enzima que fue abordado al generar una pequeña librería de variantes
del sitio único responsable de esta inestabilidad.
Ejemplo 2
En este estudio se requería el cambio de especificidad de sustrato de una enzima, es
decir, que ésta prefiriera actuar sobre un compuesto diferente al que transforma natu-
ralmente. El objetivo fue invertir la especificidad de la enzima xilosa reductasa de una
levadura llamada Pichia stipitis, que naturalmente utiliza NADP como cofactor, para que
en su lugar utilizara NAD en la reacción. Este cambio disminuiría el desbalance oxidativo
poco favorable en la producción de alcohol a partir de xilosa. Este trabajo tuvo un en-
foque semi-racional usando una combinación de diseño racional y evolución dirigida. La
estrategia utilizada consistió en el análisis de la estructura tridimensional de la proteína
para identificar y hacer una lista de los aminoácidos que están involucrados en el reco-
nocimiento del cofactor(KRAHULEC et al., 2009).
Al momento del estudio, la enzima xilosa reductasa no contaba con datos crista-
lográficos de estructura, pero fue posible predecir un modelo estructural por su parecido
a proteínas homólogas con estructura conocida. En el modelo estructural se identifica-
ron 6 aminoácidos involucrados en el reconocimiento del cofactor lo que los convertía
en candidatos a ser modificados. Dos de los sitios candidatos se mutaron al azar simultá-
neamente en una primera ronda de mutación, y la variante con mejor actividad se eligió
como molde de una segunda ronda de mutación donde se cambiaron otros dos sitios
de la lista inicial. Una tercera ronda de mutaciones se realizó con la mejor mutante de
la segunda ronda. La variante final pasó de preferir dos veces NADP a preferir 25 veces
NAD. Esta estrategia se basó en el uso de la información estructural de la proteína lo que
redujo considerablemente el número de variantes posibles, lo cual fue de gran ayuda
debido a que el método de selección no permitía abarcar el análisis de muchas variantes.
Ejemplo 3
En este ejemplo se abordó el problema de la degradación de compuestos tóxicos in-
troducidos al ambiente por procesos industriales y agrícolas mediante la estrategia de
barajeo de DNA. Como sistema, se eligieron dos enzimas llamadas atzA y triA, que pre-
sentan solamente nueve aminoácidos de diferencia entre sí. Éstas inician la hidrólisis de
los compuestos s-triazinas, una mediante la eliminación de cloro (desclorinación) y la
otra mediante la eliminación del grupo amino (desaminación) de los compuestos atrazina
y melamina, respectivamente. Las s-triazinas comenzaron a usarse recientemente como
herbicidas, pesticidas o en plásticos, por lo cual su liberación en el ambiente ha sido
extensa. Para el estudio se diseñó una familia de 15 compuestos distintos de s-triazinas.
Posteriormente, se combinaron las secuencias de ambos genes para crear una colección
de variantes para examinar su capacidad hidrolítica contra cada uno de los sustratos. De
esta colección se identificaron enzimas que hidrolizaban cinco de ocho sustratos que no
eran hidrolizados por las enzimas parentales. Mientras que para los otros siete sustratos,
donde las enzimas parentales mostraban algo de actividad, la librería produjo variantes
con actividades mejoradas que presentaron hasta 150 veces más actividad que la mejor
Departamento de Acervos Digitales. Dirección General de Cómputo y de Tecnologías de Información y Comunicación – UNAM 8
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons
“Ingeniería de proteínas para el mejoramiento de enzimas”,
Claudia Martínez Anaya y José Fernando García Guevara
1 de diciembre de 2014 | Vol. 15 | Núm. 12 | ISSN 1607 - 6079
http://www.revista.unam.mx/vol.15/num12/art93
enzima parental. Además de esto, fue posible extraer, a partir de las variantes encontra-
das, algo de información acerca de la relación entre la secuencia y la función en estas
enzimas(RAILLARD et al., 2001).
Conclusión
El uso de biocatalizadores podría satisfacer la creciente demanda de procesos industria-
les limpios. Sin embargo, la producción de enzimas a gran escala es todavía costosa. El
uso de enzimas que resistan, por más tiempo, las diferentes condiciones operacionales,
podría ayudar a aliviar este problema. La ingeniería de proteínas es una alternativa para
la producción de actividades específicas tomando como base lo que la naturaleza ha
creado. El conocimiento cada vez mayor sobre la genética y bioquímica de las proteínas,
junto con el número creciente de secuencias de proyectos de secuenciación masiva y
que se encuentran públicamente disponibles, y sobre la estructura de diferentes tipos
de proteínas, han facultado el desarrollo de técnicas que en su conjunto permiten iden-
tificar residuos clave para la manipulación y confección de enzimas con características
mejoradas.
Glosario de términos
Aminoácido: Bloque de construcción de las proteínas que se une con otro en sus extre-
mos para formar cadenas. Existen 20 aminoácidos diferentes en las proteínas encontra-
das en la naturaleza.
Proteína: Cadena compuesta por los 20 aminoácidos con un orden específico indicado
por el gen que la codifica.
Secuencia: Es el orden en que se encuentran los aminoácidos (que forman las proteínas)
o los nucleótidos (que forman el DNA) en una cadena lineal.
DNA: También llamado ADN, es la molécula que guarda la información para especificar la
secuencia de las proteínas (entre otras funciones) en los seres vivos.
Gen: Cadena de DNA que contiene la información que indica la secuencia específica de
una proteína.
Polimerasa de DNA: Un tipo particular de enzima cuya función es replicar nuevas cade-
nas de DNA.
Departamento de Acervos Digitales. Dirección General de Cómputo y de Tecnologías de Información y Comunicación – UNAM 9
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons
“Ingeniería de proteínas para el mejoramiento de enzimas”,
Claudia Martínez Anaya y José Fernando García Guevara
1 de diciembre de 2014 | Vol. 15 | Núm. 12 | ISSN 1607 - 6079
http://www.revista.unam.mx/vol.15/num12/art93
Lipasas, proteasas, amilasas: Proteínas que degradan grasas, proteínas y almidón, res-
pectivamente.
Agentes oxidantes: Son compuestos que aceptan electrones en una reacción de oxida-
ción/reducción.
NADP, NAD: Son sustancias que actúan en conjunto con algunas proteínas para permitirles
llevar a cabo reacciones de oxidación/reducción.
Cofactor: Moléculas que actúan en conjunto con algunas proteínas para permitirles lle-
var a cabo su función, como el NADP o el NAD.
Departamento de Acervos Digitales. Dirección General de Cómputo y de Tecnologías de Información y Comunicación – UNAM 10
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons
“Ingeniería de proteínas para el mejoramiento de enzimas”,
Claudia Martínez Anaya y José Fernando García Guevara
1 de diciembre de 2014 | Vol. 15 | Núm. 12 | ISSN 1607 - 6079
http://www.revista.unam.mx/vol.15/num12/art93
Bibliografía
[1] ESTELL, D.A., T.P. Graycar, y J.A. Wells, “Engineering an enzyme by site-directed
mutagenesis to be resistant to chemical oxidation”. Journal of Biological Chemistry,
1985. 260(11): p. 6518-6521.
[4] RAILLARD, S., et al., “Novel enzyme activities and functional plasticity revealed by
recombining highly homologous enzymes”. Chemistry & Biology, 2001. 8(9): p. 891-
898.
Departamento de Acervos Digitales. Dirección General de Cómputo y de Tecnologías de Información y Comunicación – UNAM 11
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons