C. Astudillo

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PRUEBA DE HISTORIA MODERNA

BACHILLERATO EN HUMANIDADES

Estudiante: Constanza Yesenia Astudillo Gonzalez.


Fecha de entrega: 10 abril 2023

1- Defina el concepto de Renacimiento europeo, explicando en qué consiste el


desarrollo del individuo, el resurgimiento de la antigüedad y el descubrimiento
del hombre y del mundo. Asimismo, explique cómo se desarrolla el movimiento
humanista en el Renacimiento y qué relaciones mantiene con Oriente. (Burke –
Burckhardt – Brotton)

El Renacimiento europeo fue un movimiento cultural, el cual se originó en Europa


Occidental en los siglos XV y XVI. Consiste en una etapa de cambio entre la Edad
Media y la Edad Moderna. Vale decir, que estos cambios se encuentran en los
aspectos económicos, social, político y sobre todo del individuo. Burckhardt (1860)
en “La cultura del Renacimiento en Italia” analiza un conjunto de sucesos durante el
Renacimiento, profundizando en los diversos acontecimientos que influyeron en la
formación de la sociedad y la cultura europea. Por consiguiente, desarrolla
conceptos claves los cuales son: 1) El desarrollo del individuo 2) El resurgimiento
de la antigüedad 3) El descubrimiento del hombre y del mundo”.

En primer lugar, para Burckhardt (1860) “El desarrollo del individuo” se relaciona
con la idea de que el individuo debe tener la capacidad de un pensamiento crítico y
autónomo y a su vez desarrollar su propia perspectiva del mundo o entorno, en otras
palabras “el sentido moderno de la gloria”. Además, sostiene que el desarrollo del
individuo se logra a través de la educación y la formación (metodología que
entregan los humanistas). En efecto, para el autor la educación no debe estar
orientada en el aprendizaje de habilidades y conocimientos prácticos, sino en la
formación de la personalidad y al mismo tiempo fomentar la creatividad y la
individualidad. Por otro lado, cuando se enfatiza el desarrollo de lo subjetivo es
común que el individuo se perciba a sí mismo como el eje central de la creación
divina, relacionándose directamente con el Dignitas Hominis que cataloga al Homo
Novus como un universo individual, y adquirir una aspiración por obtener nuevos
conocimientos que le posibiliten sobresalir y ser valorado por el diálogo histórico.

Asimismo, Pico della Mirandola se refería a la Dignitas Hominis como la dignidad


inherente de la persona humana, que se deriva de su capacidad para alcanzar la
perfección y la divinidad a través del conocimiento y la razón. Además, sostiene
que el ser humano tiene una posición única en el universo y que su dignidad se
deriva de su capacidad de elegir y determinar su propio destino. En segundo lugar
“El resurgimiento de la antigüedad” Burckhardt (1860) menciona que el
Renacimiento europeo tuvo relación con la época carolingia (VIII-IX), ya que fue
en este periodo que se comenzó a desarrollar un nuevo pensamiento, la cual sienta
las bases para el Humanismo. Dicho esto, en la época carolingia se llevó a cabo un
proceso de recuperación y difusión de obras clásicas. Sin embargo, no fue hasta el
Renacimiento cuando se llevó a cabo un redescubrimiento y revalorización de la
cultura clásica. Asimismo, este movimiento cultural caracterizado por el
Humanismo se basó en el estudio de la filosofía, literatura y arte de la antigua
Grecia y Roma.

En tercer lugar, Burckhardt (1860) propuso la idea del “Descubrimiento del hombre
y el mundo” el cual consiste en el cambio de la percepción de la humanidad hacia sí
misma y hacia su entorno, basándose en la idea de que el Renacimiento y
específicamente el humanismo condujo a un cambio en la forma en que los seres
humanos se veían a sí mismos y al mundo. Por consiguiente, el Homo Universalis
es el concepto utilizado para esta descripción que consiste en configurar la
concepción del ser humano como alguien que se dedica por completo a la
adquisición de conocimientos a través del estudio de la Época antigua. Un caso que
ilustra estas ideas es el poeta moderno Petrarca ya que, se presenta como una figura
fundamental en la transformación de la cultura europea durante el Renacimiento,
tanto por su enfoque en la poesía lírica, como por su estudio e interés de la literatura
clásica. Por otro lado, el Monte Ventoso es una metáfora utilizada por Pico della
Mirandola para expresar la idea de que el individuo puede elevarse por encima de su
naturaleza animal y unirse con Dios a través del conocimiento y la razón, idea
fundamental en el pensamiento humanista del Renacimiento.

Por último, Burckhardt hace referencia a la importancia que se le dio al estudio de la


poesía, ética, historia, retórica y gramática. En primer lugar, la poesía se enfatiza en
la importancia de la literatura como forma de expresión artística y como medio para
transmitir ideas. Los humanistas creían que la poesía era una herramienta para
explorar la naturaleza humana y la relación entre el hombre y el mundo. En segundo
lugar, la historia funcionará como una fuente de conocimiento y una forma de
entender el pasado y el presente. Los humanistas se dedicaron a investigar y estudiar
la historia antigua para obtener una mejor comprensión de la cultura y la
civilización clásica. En tercer lugar, la retórica se utilizo como una herramienta
esencial para la comunicación efectiva y persuasiva. Los humanistas se interesaron
por la retórica clásica para mejorar la calidad de escritura y discurso. Finalmente, la
gramática se enfatiza en la importancia del estudio del lenguaje y la literatura como
una forma de entender la cultura y civilización. Los humanistas se dedicaron a
estudiar el latín y las lenguas maternas para comprender mejor la literatura clásica.

Por el contrario, Brotton (2003) en “El bazar del renacimiento: sobre la influencia
de oriente en la cultura occidental” nos expone otra perspectiva del Renacimiento
europeo. Específicamente, de los intercambios culturales y comerciales entre estas
regiones geográficas. Además, resalta que los logros del Renacimiento no es más
que una invisibilización del Oriente, dado que varios aspectos de esta época
provienen de las distintas partes de éste. En primer lugar, una de las grandes
influencias en el Occidente fue el comercio, ya que Europa estaba interesada en
adoptar distintos elementos de la cultura de Oriente, como el conocimiento técnico-
científico y artísticos, métodos para comerciar, mercancías etc. Posteriormente, tras
el desarrollo de bienes, una de las grandes innovaciones, gracias a Fibonacci quien
trajo el sistema árabe de “números indoarábiga”, fue la “letra de cambio” consiste
en un método financiero que se obtuvo en el Renacimiento para facilitar el comercio
y las transacciones económicas.
Por otro lado, el Sultán Mehmet (líder del imperio Otomano) que conquistó
Constantinopla, capital del Imperio Bizantino, tuvo una gran influencia en el
desarrollo del Renacimiento en europeo, fomentando el intercambio cultural entre el
Imperio Otomano y Europa, lo que permitió a los europeos entrar en contacto con
las ideas y conocimientos del mundo islámico. En consecuencia, tuvo un impacto
significativo en la cultura y el pensamiento europeo, influyente en la literatura,
filosofía y artes. Abordando a otro aspecto, tanto Brotton en su obra, como Burke
(1998) en su texto “El renacimiento europeo” nos dan una idea completa de los
Humanistas y su influencia en el Renacimiento siendo clave en la época. En este
sentido, según Brotton el humanismo renacentista comienza con Petrarca quien es
escritor y erudito italiano del siglo XIV. El programa petrarquiano consiste en la
unión de la búsqueda filosófica de la verdad individual y el desarrollo en la sociedad
por medio del uso de la retórica y la persuasión. Asimismo, el concepto Studia
Humanitis, mencionado por Brotton y Burke, se enfoca en la educación integral de
las personas, incluyendo la educación en las artes y las humanidades, lo que
permitirá a los individuos desarrollar su capacidad de expresión y conocimiento
para una mayor comprensión del entorno.

Por otra parte, una de las grandes innovaciones que benefició al humanismo de
manera significativa fue la llegada de la “imprenta” (perteneciente de la
posmodernidad), ya que lograba que los textos de distintos humanistas tuvieran un
mayor alcance. Además, permitió la creación iconográfica influyendo de manera
efectiva a las personas analfabetas. Por consiguiente, se transformó en una cultura
que se relacionaba a través de la comunicación a relacionarse a través de la lectura y
escritura, una cultura que no se dejaba influenciar de los ideales religiosos y
políticos.

En conclusión, tras analizar el texto de Berckhardt y Burke, el Renacimiento fue un


periodo de gran florecimiento en la cultura, el arte y la ciencia. Se caracterizó por el
surgimiento de nuevas ideas, un interés por el humanismo y una exploración de las
artes y las ciencias que llevaron a grandes avances en la tecnología y la cultura. A
comparación de Brotton que, a pesar de exponer las innovaciones y logros del
Renacimiento, nos plantea otra perspectiva el cual consiste en que este periodo
también se caracterizó por la oscuridad la superstición y la opresión. Por otro lado,
fue una época en que la gente comenzó a cuestionar las ideas establecidas y a
explorar nuevas formas de pensar, esto llevó a una mayor diversidad en la sociedad,
así como a un mayor respeto por la individualidad y la libertad personal. Para
finalizar, dejo planteada las siguientes preguntas: ¿Cómo se relacionó el
Renacimiento con otros eventos históricos de la época? ¿Cómo fueron tratados y
afectados diferentes grupos sociales durante el Renacimiento, incluyendo a mujeres,
minorías y personas de diferentes orígenes étnicos y culturales?
2- Defina el concepto de estado para la Europa de los siglos XV y XVI, analizando
su relación con el carácter nacional y centralizado. Del mismo modo, analice en
qué medida los reinos europeos controlan los poderes locales y articulan una
nueva estructura del estado. De esto, explique el papel del príncipe nuevo, la
corte, la burocracia y el ejército. (Tenenti – Antón Pelayo – Simón Tarrés –
Mackenney)

Para comenzar, el concepto de Estado para la Europa de los siglos XV y XVI según
Mackenney (1993) en el texto “La Europa del siglo XVI: expansión y conflicto” y
Tenenti (2003) en el texto “Los estados europeos y guerras de Italia” se define como
una corporación política que posee un territorio específico, bajo un sistema legal y
una autoridad “centralizada” que ejerce el poder sobre la sociedad. Mackenney
declara que en esta época los Estados europeos comenzaron a definirse como una
sociedad política independientes con monarcas o líderes que buscaban aumentar el
poder y controlar a la sociedad a través de la creación de leyes e imposición de
impuestos. Por otro lado, Tenenti sostiene que la aparición del estado estuvo
relacionada con el desarrollo de las guerras y la necesidad de mantener ejércitos y
burocracias eficientes para administrarlos. Dicho esto, las estructuras políticas se
transformaron de ciudades-estado y monarquías feudales a Estados más
centralizados y poderosos, el poder político y económico se concentró en las élites
gobernantes y se consolido en torno a la figura del monarca.

Asimismo, en el texto “Afirmación monárquica y procesos de integración política”


por los autores Pelayo y Tarrés (2002) podemos establecer algunas diferencias entre
el Estado Moderno y Feudal:

- Organización política: El Estado feudal, se basaba en un sistema de


relaciones de vasallajes, donde los sr. Feudales tienen el control de sus
tierras y ejércitos. En el Estado moderno, el poder político se concentraba en
una figura central, el rey o la monarquía.
- Soberanía: En el Estado Feudal, la soberanía estaba fragmentada en
diferentes poderíos y territorios, mientras que el Estado Moderno residía en
el Estado central y se ejercía en todo el territorio nacional.
- Relación entre Iglesia y Estado: En el Estado Feudal, la iglesia tenia un
papel importante en la organización política y social, mientras que en el
Estado moderno la iglesia paso a un segundo plano y el estado asumió el
control.

Sumado a esto, este cambio de un Estado Feudal a un Estado Moderno lo podemos


ver en el caso de Aragón. Los autores destacan que la consolidación del poder real y
la integración política se produjo de una manera diferente a la de Castilla, ya que la
unificación de las coronas de Castilla y Aragón tuvo lugar bajo a los Reyes
Católicos. En cambio, en Aragón el proceso de integración política se produjo a
través de un sistema de instituciones políticas y administrativas específicas.
En segundo lugar, la relación entre el carácter nacional y centralizado en el contexto
del surgimiento de los Estados en Europa durante el siglo XVI en base a Mackenney
se sostiene que el carácter nacional de un Estado se refiere a la identidad compartida
por los ciudadanos de un territorio, que se basa en aspectos como la lengua, la
cultura, la religión y la historia. Por lo tanto, esta identidad nacional se convirtió en
un elemento clave en la formación de los Estados en Europa, que buscaba
consolidar el poder en torno a un líder o monarca fuerte y centralizado. Por otro
lado, la centralización se refiere a la concentración del poder político y
administrativo en un centro de poder, como la capital del Estado.

Por otra parte, los autores Pelayo y Tarrés abordan, esta relación entre carácter
nacional y centralizado en un enfoque en la monarquía española. Sostiene que la
creación de una identidad nacional en la monarquía española se basa en el proceso
de centralización política y administrativa, buscando unificar sus diversos territorios
y crear una identidad compartida entre los españoles, basada en la lengua, la cultura,
la religión y la historia. Es por eso, que la monarquía para lograr este objetivo
implemento políticas centralizadas que buscaban establecer un sistema legal y
administrativo, como también fortalecer el poder del monarca y la autoridad del
Estado. Según esto, estas políticas incluyen la creación de instituciones
centralizadas como el Consejo de Castilla, la Inquisición y la Real Audiencia.

Asimismo, analizan la evolución de los reinos europeos durante la transición del


feudalismo al Estado moderno. En este contexto, los autores destacan la relación
existente entre los diferentes reinos europeos que se producen. Sin embargo, los
autores señalan que la transición del feudalismo al Estado moderno no fue un
proceso homogéneo en Europa, sino que se produjo de manera diferente en cada
reino. Aunque, también destacan que hubo procesos de influencia y convergencia
entre ellos, en los que los reyes y las élites políticas de cada reino se inspiraron en
las experiencias y los modelos políticos de otros reinos. Por otro lado, analizan las
fuerzas sociales y políticas que impulsaron los procesos de integración política en
Europa durante la transición del feudalismo al Estado moderno. En este sentido, los
autores destacan que las fuerzas sociales y políticas que impulsaron la integración
política en Europa fueron diversas y se produjeron en diferentes aspectos, como el
económico, el social y el cultural. Algunas de estas fuerzas fueron:

- El creciente poder de las monarquías, que se apoyaron en el desarrollo de la


burocracia y de los ejércitos permanentes para consolidar su poder y
expandir su territorio.
- El auge de las ciudades y de las élites urbanas, que se estrenó en políticos
relevantes y que impulsaron la creación de instituciones políticas y
administrativas para defender sus intereses.
- La aparición de nuevas formas de pensamiento y de cultura, como el
humanismo y la Reforma, que cuestionaron el papel de la Iglesia y del poder
feudal y que propiciaron la aparición de nuevas formas de organización
política y social.
En tercer Lugar, el concepto de “príncipe nuevo” desarrollado por Pelayo y Tarrés
se refiere a la figura de un monarca que, a diferencia de los monarcas tradicionales,
no pertenece a una procedencia establecida, sino que accede al trono mediante un
proceso de elección o designación. Asimismo, se analiza como una figura que ha
sido utilizada en distintos contextos para reforzar la legitimidad del poder
monárquico y superar crisis políticas. Sumado a esto, la figura del príncipe nuevo ha
sido una estrategia efectiva para asegurar la continuidad de la monarquía en
momentos de crisis, ya que permite la renovación y modernización de la institución
sin tener que recurrir a soluciones drásticas. Sin embargo, la elección de un nuevo
príncipe puede generar conflictos en el seno de la sociedad y el Estado, ya que
puede ser percibida como una imposición externa que no tiene en cuenta las
tradiciones y la historia del país. Por lo tanto, el éxito o fracaso de éste, surgió en
gran medida de su capacidad para adaptarse a las circunstancias políticas y
culturales.

Posteriormente, según Tenenti y Mackenney la corte era un aspecto significativo en


la formación del Estado moderno europeo que tenía distintas funciones. En primer
lugar, era el centro del poder político y administrativo, donde se tomaban las
decisiones que afectaban a la vida de la sociedad y se dirigía la política exterior del
estado. Además, se establecen las normas y los valores culturales que definían la
identidad del Estado y de sus elites gobernantes. En segundo lugar, tenía una
función social y cultural, sirviendo como lugar de encuentro y de intercambio entre
las elites políticas y culturales. Dicho esto, la corte fomentaba la creación de una
cultura aristocrática y cosmopolita, que se expresaba en las artes, literatura y
música. Por último, cumplía una función simbólica y ritual, a través de la
celebración de ceremonias y festividades que reforzaban el prestigio y la autoridad
del monarca y del estado. Vale destacar, que los miembros de la corte eran elegidos
por el monarca en función de su lealtad y capacidad para servir.

Para finalizar, para Pelayo junto con Tarrés y Tenenti tanto la burocracia como el
ejercito desempeñaron un papel fundamental en el estado de Europa. Por un lado, la
burocracia se convirtió en una herramienta clave para la gestión de los asuntos
públicos y fue utilizada por los monarcas para consolidar su poder y controlar a la
nobleza y burguesía. Además, permitió la creación de un sistema de leyes y aplicó
las bases para la creación de un estado de derecho moderno. Luego, en cuanto al
ejército se destaca que la creación permanente de éste fue uno de los cambios
principales que tuvo lugar en la organización militar europea, permitiendo a los
estados mantener una presencia militar constante en el campo de batalla y reducir la
dependencia de los mercenarios y los contingentes feudales. Asimismo, tuvo un
impacto significativo en la sociedad y la economía europea, al generar un mercado
de armas y municiones como también fomentar el desarrollo de técnicas y
tecnologías militares avanzadas.

En conclusión, Europa experimentó importantes cambios políticos y sociales, lo que


llevo a la reorganización de las estructuras del estado y al fortalecimiento del poder
central, buscando fortalecer su autoridad sobre distintas regiones y reducir el poder
de los poderes locales, mediante al sistema burocrático centralizado, permitiéndoles
supervisar de cerca la administración de sus territorios. Además de los sistemas
judiciales consolidando sus ejércitos nacionales para mantener el orden y, en
consecuencia, transcender a la formación de estados modernos.

Bibliografía

- Brotton, J. (2003). Bazar del Renacimiento. Ediciones Paidós Ibérica.

- Burckhardt, J. (1860). La cultura del renacimiento en Italia. Porrúa, S.A.

- Burke, P. (1998). El Renacimiento Europeo. Centros y Periferias (M. Chocano,


Trad.). CRÍTICA.

- Mackenney, R. (1993). La Europa del siglo XVI (F. Bouza, Trad.). AKAL.

- Pelayo, J., & Tarrés, A. (2002). Afirmación monárquica y procesos de


integración política. En Historia moderna universal (pp. 105–124).

- Tenenti, A. (2003). La Edad Moderna Siglos XVI-XVIII. Crítica (Grijalbo


Mondadori).

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