ESTUDIO CRITICO 100 Años
ESTUDIO CRITICO 100 Años
ESTUDIO CRITICO 100 Años
I. ANTECEDENTES HISTORICOS
Las raíces de la Guerra de los Cien Años se remontan a la conquista del trono
inglés por Guillermo el Conquistador en 1066. Como duque de Normandía,
Guillermo -y, posteriormente, sus herederos- participaba tan activamente en la
política feudal de Francia como en el gobierno de Inglaterra. Tanto económica
como culturalmente, Inglaterra se había convertido en colonia de Normandía, y
los intereses de los nuevos reyes "ingleses" seguían firmemente asentados en.
FRANCIA:
Reyes Ingleses
Durante la guerra reinaron en Inglaterra cinco reyes:
Eduardo III (1327-1377), hombre de sentido práctico, de carácter enérgico y
que fue excelentemente ayudado por su hijo el Principe Negro.
Ricardo II (1377-1399), su nieto, débil a pesar de sus crueldades, que le
hicieron impopular y le costaron la destitución y la vida, ya que murió encerrado
en el castillo de York.
Enrique IV de Lancaster (1399-1413), nieto también de Eduardo III, legado al
trono por una sublevación, reorganizó el ejército, lo que aprovechó su hijo.
Enrique V (1387-1422), el gran rey inglés del siglo XV, notable militar y
prudente político.
Enrique VI. El último rey inglés de la guerra, débil e irresoluto.
Reyes Franceses
En Francia reinaron igualmente cinco reyes. Los tres primero, contemporáneos
de Eduardo III, fueron:
Felipe VI (1328-1350), caballeresco y brillante, símbolo de la indisciplinada
nobleza francesa.
Juan el Bueno (1350-1364), impotente para dominar la anarquía nobiliaria.
Carlos V el Prudente (1364-1380), sagaz político.
El sucesor de Carlos V fue Carlos VI (1380-1422), cuyo reinado coincide co el
de los tres reyes ingleses, Ricardo II, Enrique IV y Enrique V. Carlos VI,
afectado de locura a consecuencia de un accidente de caza, llevó a Francia al
borde de la ruina.
El último rey de la guerra en Francia fue Carlos VII (1422-1461),
contemporáneo de Enrique VI y restaurador de la nacionalidad francesa.
TERRENO:
Territorios de FRANCIA
TROPAS DISPONIBLES:
Las primeras referencias del empleo de artillería de asedio por los franceses
fue en 1.375 durante el asedio de Saint-Sauveur-le-Vicomte, las tropas
francesas rompieron con éxito las murallas de la fortaleza con 32 bombardas
que pesaban más de 1 tonelada, y disparaban bolas de piedra de 50 kg. Los
ingleses quedaban muy atrás en los acontecimientos ya que sólo tenían un par
de esas armas antes de 1.400.
EL EJÉRCITO INGLÉS, estaba basado en los hombres de armas (men-at-
arms), infantes montados llamados pikeman o billman y arqueros, estos eran la
mayoría y la relación era de 1 a 3 llegando de 1 a 4. También había se
reclutaron otros tipos como los hobelards que eran una especie de caballería
ligera, que montaban los hobbies o hobins que eran caballos pequeños y
ligeros, y que se empleaban en misiones de reconocimiento, aunque siempre
combatían pie a tierra como infantería pesada, iban dotados de una pica o un
bill (precursor de la alabarda). Otros reclutados eran los bidowers o infantería
ligera gascona, que iban armados con jabalinas. Con el paso del tiempo solo se
emplearon hombres de armas y arqueros.
por primera vez los 5 cañones “rivaldis”, Su calibre era de 30 a 36 mm. Tenía
un alcance de varios centenares de metros.
Froissart afirma que los ingleses tenían 400 cañones en el cerco de St. Malo en
1.378, aunque la mayoría posiblemente fueran volvorinas o culebrinas
disparadas por un solo sirviente.
TIEMPO:
Línea de TIEMPO
* A mediados del siglo XII, El rey angevino inglés Enrique II era de hecho más
poderoso que su supuesto señor, el rey de Francia, porque gobernaba
un imperio mucho más rico y productivo. En su lucha por limitar el poder de los
soberanos ingleses, el rey de Francia Felipe Augusto apoyó la rebelión de uno
de los hijos de Enrique II, Ricardo Corazón de León, que lo sucedió en el trono
en 1189.
* Tratado de París (1259)
Enrique III de Inglaterra (1207-1272), heredó el trono siendo muy pequeño,
trajo consigo un período de zozobras y temores
*Eduardo I de Inglaterra, hijo de Enrique III, no se conformó con esta situación
de sometimiento: construyó una base de poder militar y económico muy
superior a la de su padre y quiso colocar de nuevo a su corona en una posición
de fuerza en el continente. Inició hostilidades contra la Francia de Felipe
III (que duraron cuatro años: de 1294 a 1298) pero, más dedicado a consolidar
su poder en el interior de la propia Inglaterra.
*La guerra de San Sardos y Eduardo III
Entre 1324 y 1325 se produjo una nueva guerra entre Inglaterra y Francia, es
conocida así por los historiadores por el poblado donde tuvieron lugar las
principales acciones. La corona inglesa pasó pronto a manos de Eduardo III,
que era solo un niño, pero a pesar de todo no estaba dispuesto a dejarse
vencer con tanta facilidad. El rey de Francia, Carlos IV murió, como sus
antecesores, sin dejar heredero varón.
*La maldición de los Capetos
Luis IX de Francia (San Luis).
La muerte de Carlos IV era el fin de la poderosa y prolongada dinastía de
los Capetos. Había sido fundada por Hugo Capeto en 987, y había dado una
larga serie de poderosos monarcas que incluía a Luis VI, Luis VII y Luis VIII,
todos ellos comandantes en las Cruzadas. Tras la muerte del rey
siguiente, San Luis, orientador y capitán de la cruzada contra los cátaros, la
dinastía Capeto tuvo aún otro poderoso rey: Felipe el Hermoso. Con él
comenzó la decadencia: Felipe destruyó a la antigua y noble Orden del Temple,
llevando al juicio y a la hoguera a muchos de sus dirigentes, en especial a su
último Gran Maestre Jacques de Molay.
* Felipe IV murió en 1314, en el curso del mismo año de la ejecución de los
templarios, La supuesta maldición de los templarios terminó de cumplirse el 1º
de febrero de 1328 al fallecer el rey Carlos IV dejando solo dos hijas (una
póstuma) y ningún varón para heredar. En apenas 14 años, y luego de cuatro
breves reinados, la dinastía de los Capetos se había extinguido .
Uno de los datos más importantes a tener en cuenta es que no se mantuvo una
guerra durante 116 años día tras día, si no que fue un período de tiempo en
guerra donde también hubo momentos de paz.
El primer periodo de lucha tiene lugar entre los años 1337 y 1360. En este
tiempo destacan las victorias del ejército inglés, que ya contaba con un ejército
casi nacional (pues era un país prácticamente unido) frente a los ejércitos
franceses, que más que llamados por el rey eran llamados por los señores
feudales.
Destacan las batallas de Crécy (año 1346) y la batalla de Poitiers (año 1356),
que tuvieron como resultado la conquista de Calais por los ingleses y el
aprisionamiento del rey de Francia Juan II. Finalmente, se firmó en 1360
el Tratado de Brétigny que consistía en la cesión de Aquitania, junto con otros
territorios, y la renuncia de Eduardo III (rey inglés) a la corona francesa.
Este tratado trajo cierta paz a ambos reinos, hasta que en España comenzaron
las guerras de sucesión al trono de Castilla y ambos países intervinieron.
Reinado de Carlos VI
Una vez que terminaron los conflictos con Escocia y Gales, volvió a dirigir toda
su atención al reino de Francia. Lo primero que hay que mencionar, es que
evitó ir al conflicto bélico a través de un matrimonio concertado con la hija de
Carlos VI, pero en 1415 el tratado de paz terminó y Enrique V invadió
Francia.
Juana de Arco
Juana de Arco fue uno de los personajes más relevantes en este momento
histórico. Ella sentía que era la elegida de Dios para poder liberar al pueblo
francés de las tropas inglesas y, con sólo 17 años de edad, reunió a un grupo
de soldados y consiguieron deshacer el asedio de las tropas inglesas en
Orleans en el año 1429.
Juana pasó a ser conocida como la Doncella de Orleans y fue inspiración para
multitud de personas, no sólo soldados, si no también campesinos que vieron
un líder a la que seguir.
La historia comenzó a ser más favorable para Francia, quien consiguió que
Borgoña retirara su apoyo a Inglaterra y fueron reconquistando los territorios
ingleses.
Finalmente, fue en la batalla en Castillon en el año 1453 la que puso fin a
la Guerra de los Cien Años.
La Guerra de los 100 años supuso un gran cambio para el reino francés,
consiguiendo una identidad nacional que anteriormente no existía, pues
estaba distribuida en feudos. A su vez, se consigue un estado íntegro donde se
habla de súbditos y no de vasallos.
1) 1337 – 1360. Se caracteriza por las victorias inglesas por los franceses,
como en Crécy (1346) o Poitiers (1356). En esta fase Inglaterra consiguió
conquistar Calais, en el Norte de Francia, y destacaron las victorias
de Eduardo “el Príncipe Negro”, hijo del rey de Inglaterra Eduardo III y el
aprisionamiento del rey de Francia Juan II tras la batalla de Poitiers. Tras este
periodo desfavorable para Francia, se firmó el Tratado de Brétigny en mayo de
1360, por la que Francia cedería Aquitania y otros territorios y Eduardo
renunciaría a la corona francesa.
2) 1360 – 1396. El tratado de Brétigny supuso una paz relativa en las décadas
siguientes. Acabaron las hostilidades abiertas, pero supuso que el escenario
bélico se trasladara a la Península Ibérica en la lucha por la sucesión al trono
de Castilla, en la que Francia e Inglaterra tomaron parte activa. Después de
que Enrique de Trastámara, apoyado por Francia, acceda al trono de Castilla
en 1369, Francia interviene de forma más directa en las posesiones inglesas de
Francia, recuperando zonas cedidas a los ingleses en 1360, provocando que
volvieran las hostilidades entre Francia e Inglaterra. En los años sucesivos, el
Cisma de Occidente de 1378 y conflictos internos en ambos países acabó por
desgastarlos hasta que en 1396 se firma un nuevo pacto entre franceses e
ingleses, casando a Ricardo II, rey de Inglaterra, con una hija del rey de
Francia Carlos VI, manteniendo una tregua por la posesión de los territorios
que entonces tenía cada país.
3) 1396 – 1422. Esta fase de la guerra se caracterizará por una fase inicial en
el que no se tiene una guerra abierta hasta que al final de este periodo
retornaran las hostilidades directas de forma favorable a Inglaterra. El apoyo de
los franceses a los escoceses en las guerras que mantenía contra Inglaterra,
agravió las relaciones diplomáticas, que trajo como consecuencia que
Inglaterra devolviera la moneda firmando el tratado de Bourges en 1412 con los
borgoñeses, consiguiendo un poderoso aliado en contra del rey de Francia. En
1415 regresan las hostilidades, consiguiendo Inglaterra importantes victorias en
Azincourt (1415) y Harfleur (1416). Los principales conflictos se habían
trasladado al Norte de Francia, con una guerra de asedios de Inglaterra en
Normandía, consiguiente conquistar y colonizar territorios. Tras esta fase de
victorias, Inglaterra consigue dar un buen golpe firmando el Tratado de
Troyes en 1420, por la que Eduardo V pretendía asumir la corona francesa con
la ayuda de los borgoñeses en detrimento del delfín de Francia Carlos. Esto se
truncó tras las muertes de Eduardo V de Inglaterra y Carlos VI de Francia, ya
que dejó como heredero a Enrique VI, de un año de edad, por lo que asumió la
regencia Juan, el duque de Bedford.
4) 1422 – 1453. Al inicio de este periodo, el duque de Bedford había puesto en
vigor el Tratado de Troyes, con lo que se creó una división en Francia entre
partidarios de ingleses y franceses. Los ingleses tuvieron un inicio exitoso,
interviniendo en el Norte de Francia para afianzar su poder y consolidando sus
territorios en Normandía, llegando hasta el río Loira. Pero a partir de 1429, el
transcurso de la guerra cambió de forma favorable para Francia. En el asedio
de Orleans en 1429 apareció Juana de Arco, que levantó la moral francesa y
consiguió varias victorias. El delfín Carlos se coronó rey de Francia en Reims
en 1429 y Enrique VI hizo lo propio en la catedral de Nôtre-Dame de París en
1431. Esta ficticia doble monarquía ponía de manifiesto la división interna en la
que estaba sumida Francia. Tras estos hechos y la quema de Juana de Arco
en la hoguera en 1431, se abre un periodo favorable para Francia, obteniendo
importantes victorias que tuvieron mayor importancia cuando en 1435 Borgoña
retira su apoyo a Inglaterra. En los años finales de la guerra los franceses
fueron conquistando poco a poco los territorios ingleses en Francia, hasta que
la victoria sobre los ingleses en Castillon el 17 de julio de 1453 puso fin a la
Guerra de los Cien Años.
ARMAMENTO
. Los ingleses se dieron cuenta rápidamente del impacto que el arco largo
podía producir en el campo de batalla.
Equipamiento de un arquero inglés. Autor Gerry Embleton para Osprey
Las flechas tenían una longitud de unos 90 cm, y pesaban de 60 a 100 gr,
tenían distintas clases de puntas, unas arponadas para largas distancias y que
cuando se clavaban eran muy difíciles de extraer, y las había con punta de
punzón que se usaban para perforar las corazas y se empleaban a cortas
distancias y tiro tenso, tenían flechas de caza o de “cabezal amplio” que
dejaban extensos cortes cuando perforaban la carne, causando una rápida
pérdida de sangre. Las flechas estaban hechas de maderas ligeras como las
de álamo. Cada arquero portaba dos haces de 24 flechas, que se llevaban
sujetas al cinturón o bien en aljabas de lino, las flechas de repuesto se llevaban
en cofres o toneles.
Instrucción de arqueros ingleses. Autor Peter Dennis para Osprey
Artillería: Los ingleses utilizaron por primera vez los cañones en la batalla de
Creçy en 1345, el Inventario Real inglés menciona por primera vez los 5
cañones “rivaldis”.
Froissart afirma que los ingleses tenían 400 cañones en el cerco de St. Malo en
1.378, aunque la mayoría posiblemente fueran volvorinas o culebrinas en
España eran denominadas trueno de mano, eran armas de fuego ligeras
disparadas por un solo sirviente.
Estas grandes bombardas eran muy difíciles de manejar, y tenían una cadencia
de dos o tres disparos al día.
Lanza francesa finales del siglo XIV yprincipios delXV (de 4 a 10 hombres).
Arriba un paje llevando de la mano el destrero; detrás el gendarme montando
un palafrén; detrás un escudero o ecuyer que lleva el casco, la lanza y escudo
del caballero, montando un palafrén; detrás otro escudero o coutilleur con
lanza corta. Debajo dos arqueros montados en rocines y un varlet o sirviente
montado en un rocín llevando de la rienda otro con la impedimenta, detrás dos
infantes provistos de armas astiles
V. REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS