Juicio Ejecutivo
Juicio Ejecutivo
Juicio Ejecutivo
En estos procesos, los Juzgados y Tribunales ejercen la potestad de ejecución, dictando las
resoluciones judiciales previstas en la ley para que el acreedor ejecutante, obtenga, por vía
de apremio, el cumplimiento de la obligación documentada en el título ejecutivo.
JUICIO EJECUTIVO
El juicio ejecutivo se considera como una variante del proceso de ejecución. El proceso de
Ejecución tiende a obtener una actividad física, material por parte del organismo
jurisdiccional porque en eso de distingue del proceso de cognición. En el proceso de
cognición, la actividad que desarrolla el juez es puramente intelectual. En el proceso de
ejecución por el contrario se le pide al Juez una conducta física, un obrar, que haga actuar
la declaración judicial que por haber quedado ejecutoriada y dictada en el ejercicio de una
acción de condena, es susceptible de ejecución. En el Juicio Ejecutivo se supone que esa
declaración judicial de la que se pide cumplimiento, de la que se pide su ejecución (por eso
se llama ejecutivo este juicio), está contenido en el título ejecutivo. Ese título ejecutivo
viene a ser el presupuesto especial del juicio ejecutivo. Está considerado por la ley el título
ejecutivo como que él encierra una presunción vehemente de certeza, de verdad, es decir, la
declaración contenida en el título ejecutivo se presume que es cierta, que es indiscutible,
por eso dice Carnelutti que en proceso de cognición este proceso versa sobre pretensiones
indiscutibles. Pero esta consideración que se hace del título ejecutivo no satisface a muchos
expositores, a muchos tratadistas porque ella no explica por ejemplo las ejecuciones
injustas, es decir, no se puede equiparar la declaración contenida en una sentencia definitiva
firme con la declaración contenida en un título ejecutivo; porque, en primer caso la
sentencia judicial que se ha emitido después de haberse instruido, sustanciado el juicio con
pleno conocimiento de causa, (esta declaración judicial) si que es verdaderamente
indiscutible, de tal manera que las resoluciones que se dicten en un procedimiento de
ejecución de Sentencia, ninguna de ellas tiene el carácter de definitiva, son resoluciones
más o menos transcendentes, pero la sentencia, la resolución definitiva es la que se trata de
ejecutar casualmente.
De modo que no es cierto que el proceso ejecutivo éste eliminado por completo la fase de
cognición, de conocimiento, de instrucción por parte del organismo jurisdiccional en el
juicio ejecutivo y también es necesaria que se dicte un sentencia definitiva, con
posterioridad con esa sentencia definitiva dictada en el juicio ejecutivo es que quedarían
abiertos los procedimiento de apremio, los procedimientos de ejecución de sentencia.
De modo que el conocimiento del juez se reduce en un principio a examinar este título, a
examinar su apariencia, a ver si está asistido de todos los requisitos de fondo y de forma
para merecer la tutela privilegiada que indica la vía ejecutiva. Pero ello no quiere decir que
de plano se pase a ejecutarle porque se da oportunidad al deudor, al ejecutante en el juicio
ejecutivo común, a contradecir ese título, a examinar a excepcionarle y entonces es viene la
fase cognoscitiva, el debate va a surgir frente a la oposición que deduzca el ejecutante, al
título ejecutivo, a la demanda ejecutiva.
Hay conocimiento sumario breve, por qué? Porque el título ejecutivo la ley presume que es
una arma que usada derechamente por el acreedor, por el actor, por el ejecutante,
difícilmente puede perder el pleito, su pretensión porque el título ejecutivo provee la prueba
plena y completa del derecho. De modo que la actitud del juez cuando se presenta una
demanda ejecutiva, es muy distinta a cuando se presenta una demanda ordinaria, la actitud
del juez es expectante, el comunica la de demanda al demandado, espera las pruebas del
actor y del reo y según las alegaciones y las pruebas, así se vuelve la controversia
estimando la demanda o rechazándola
Ahora en un forma más restringida que antes, pero siempre existe lo que se llama
procedimiento de oficio en el juicio ejecutivo, antes era amplísima la facultad del juez para
revocar el auto de solvendo, hoy día, ha quedado restringida.
2. El auto de solvendo
El auto de solvendo es el auto en que despacha la ejecución, es el primer auto que se dicta
en el juicio ejecutivo.
Vamos a ver ahora cómo surgió en el derecho procesal el título ejecutivo, cómo ha
evolucionado.
Pues bien, reconocido ese derecho por el deudor ante el juez se dictaba por este juez el
preceptus de solvendus y se pasaba a la ejecución de la declaración. Ya no había necesidad
de juicio.
Posteriormente con la relevancia que adquirió la función notarial se admitía que esas
declaraciones pudieran hacerse ante notario, y es que los notarios manejasen en un
principio la jurisdicción voluntaria, se les llamaba jueces tabularios. Pues bien, ese
reconocimiento de la deuda hecha ante notario será suficiente para tenerse por indiscutible
el derecho del actor, es verdad que el preceptus de solvendus no lo dictaba el notario, lo
dictaba siempre el juez, pero de ahí se pasaba directamente a la ejecución. Últimamente (se
puso en los documentos que autorizaban los notarios, no como una cláusula de estilo, de tal
manera que era lo corriente que los deudores al suscribir obligaciones, simultáneamente
reconocían el derecho del actor ante notario y eso era suficiente para que esa declaración,
considerada indiscutible, pudiese pasarse de ella a la ejecución de la misma. Así es como
nació pues, el título ejecutivo. Es decir, prescindiendo de la sentencia, del conocimiento
previo del juez, porque esa es la novedad del juicio ejecutivo. Las sentencias judiciales
desde luego son susceptibles de ejecución inmediata y son susceptibles de ejecución
inmediata las ejecutorias que contienen estas sentencias, presten merito ejecutivo eso es
razonable y normal.
Pero que declaraciones contenidas fuera de las sentencias judiciales presten merito
ejecutivo, eso es lo anormal, es decir que sin haber intervenido para nada un juez, sin
haberse informado, sin haber instruido un expediente acerca del derecho de las partes, la ley
considera que ese derecho es indiscutible cuando se encuentra plasmada en un documento
que no sea sentencia judicial, es el caso de los títulos ejecutivos extrajudiciales,
contractuales y que nacieron en esa forma en el derecho común italiano, es decir pues,
atemperando el rigor de la sentencia, de la necesidad de recurrir a los jueces se llego a
admitir como buenos los reconocimientos que los hacían los deudores esporádicamente
ante notario, luego como una regla, todo deudor en una cláusula de estilo interviniendo,
compareciendo como parte ante un Notario cuando reconocía la deuda se consideraba que
el Notario como depositario de la fé pública tenía suficiente autenticidad para estimar que
ese reconocimiento era cierto, indiscutible el derecho y por lo mismo podía pasarse a la
ejecución.
Pero este título ejecutivo por sí mismo no explica las ejecuciones infundadas, porque
antiguamente se decía que en el juicio ejecutivo la pretensión procesal estaba identificada
con la pretensión material lo cual no ocurre en el juicio ordinario, la pretensión que se
presenta es meramente procesal, es decir la legitimación ad – causan ese el objeto de la
sentencia, es la sentencia la que va a decir si ese actor que se presentó como tal es el actor
en el sentido material, es decir, titular de derecho, cuando presentó su demanda él dice que
es titular de derecho pero no lo ha probado, de la prueba que presente será o resultará el
reconocimiento, la tutela que el juez rinde en la sentencia definitiva.
En cambio, en el juicio ejecutivo existe esa identidad, es decir la pretensión procesal
identificada con la pretensión material, por qué? Porque se pide la ejecución se pasa
directamente a la ejecución, porque el título ejecutivo releva al juez de entrar, de abrir fase
cognoscitiva porque ese título ejecutivo demuestra que ese actor, ejecutante, es ciertamente
el acreedor, es innegable a los ojos de la ley.
Pero esta consideración no explica las ejecuciones infundadas, de ser así, muchos juicios
ejecutivos los pierden los ejecutantes, y es claro por el merito de la oposición que llegan a
la ejecución, de las excepciones opuestas, es decir, en el título ejecutivo no siempre se
encuentra todo el material del cual pueda deducirse la justicia, la certeza del derecho del
actor, del poseedor del título ejecutivo, puede ser que exista el material que venga a
neutralizar ese título y desde luego no le presenta el actor, lo presentará el ejecutado y ese
material sea suficientes para desvirtuar la certeza de título ejecutivo, el elemento de prueba.
Esta oposición que va a versar en la fase cognoscitiva en ese procedimiento sumario, en esa
estación, no es una estación de juicio ordinario porque es un término de prueba más breve,
y por eso se le llama hoy día con los españoles y así lo considera la Corte Suprema de
Justicia como un proceso sumario de naturaleza cualitativa.
1. acreedor cierto
2. un deudor también cierto
3. una deuda liquida
4. plazo vencido o mora como dice nuestro Código
5. finalmente el título ejecutivo;
De modo que en el juicio ejecutivo como dice Emilio Reus, no se trata de decidir o de
conocer, sobre lo derechos dudosos o controvertidos, se trata más bien de llevar a ejecución
lo que consta, lo que aparece en el título ejecutivo, derechos claros, definidos, indiscutible,
pero toda esta jurisprudencia antigua se ha modificado, hoy el juicio ejecutivo más bien
constituye una modalidad del juicio de cognición, del proceso de cognición solo que la fase
cognoscitiva queda reducida a su mínima expresión. En el juicio ejecutivo el juez le cree al
actor, cree por lo menos hasta ese momento que tiene la razón y por ello es que condena in
nomine litis inaudita parte al ejecutado a pagar. (En el juicio ordinario el juez cuándo
ordena pagar? Cuando queda dicta sentencia, y sin no paga en el acto le embarga sus
bienes, pero eso no queda firme).
4. Naturaleza jurídica
La naturaleza jurídica del juicio ejecutivo es la de un proceso sumario por razones
cualitativas. La palabra ejecutiva denota la idea de ejecución. En vista de esta naturaleza del
juicio ejecutivo es que se ha admitido por la Corte Suprema de Justicia que dentro de este
juicio existe lo que se ha de llamar procedimiento de oficio, esto consiste en la facultad que
conservan los jueces o tribunales para denegar la ejecución aún cuando ya la hubieren
admitido inicialmente, aún cuando se deduzca la oposición pertinente los jueces y
tribunales han conservado esta facultad, esta jurisdicción para denegar la ejecución,
revocando el auto de solvendo que inicialmente dictaron o proveyeron cuando a juicio de
ellos por un estudio mejor lleguen a la conclusión, a la convicción de que le faltan al título
ejecutivo alguno de los requisitos de fondo o de forma, requisitos sin los cuales la ley no lo
considera como título ejecutivo bastante o suficiente.
Juicio ejecutivo universal: Es cuando hay desequilibrio patrimonial, esto es cuando los
bienes del ejecutado no son suficientes, bastantes para satisfacer los créditos que se
reclaman, en ese caso se necesita de una pérdida proporcional en todos los acreedores
porque los bienes del deudor no son suficientes, tienen que prorratearse a base de los bienes
que tiene el deudor en su poder. Este juicio da lugar a un procedimiento colectivo que en el
derecho se denomina juicio de concurso de acreedores o juicio de quiebra si se trata de
comerciante, pero se llama juicio ejecutivo porque siempre se procede inaudita parte,
además se procede con un título ejecutivo. Para pedir la declaración de quiebra de un
concurso, previa declaración de insolvencia, se necesita el título ejecutivo, así es que el
juicio es ejecutivo universal, y recibe el nombre de concurso o de quiebra por el
procedimiento colectivo que entraña.
El juicio ejecutivo también de acuerdo con nuestro código puede ser: de dar, de hacer, o de
no hacer, según la naturaleza de la obligación, objeto de la pretensión ejecutiva. Sabemos
que hay obligaciones de dar, de hacer, o de no hacer, sabemos en qué consiste dar, el dar
naturalmente también puede referirse a especies o cuerpos ciertos, a cantidad de dinero, a
géneros. Ese es el juicio ejecutivo que está primeramente tratado en el código porque ahí se
dan las reglas generales para todos los juicios ejecutivo, cuando se ha terminado de ver el
juicio ejecutivo de dar, enseguida el código trata del juicio ejecutivo de hacer, pero en el
juicio ejecutivo de hacer, ya solo estudia las modalidades particulares que ameritan estas
clases de obligaciones, el juicio ejecutivo de hacer, se refiere a las obligaciones de hacer, es
un hecho debido por el deudor, hecho material, hecho jurídico.
Y por último el juicio ejecutivo de no hacer. Se presenta esta demanda cuando está en mora
el deudor de no hacer, cuando viola el compromiso, ahí la mora es automática, ni en la civil
hay que intimar al deudor de no hacer porque automáticamente se coloca en estado de mora
cuando lo que le estaba prohibido hacer. Estas demandas se resuelven en daños y perjuicios
por lo general, a menos que lo hecho violando la obligación de no hacer pueda ser destruido
pero no siempre pueden serlo, por eje. Usted se obligo a no trasmitir y trasmitió, ahí como
va ha destruir lo que hizo, ahí se convierte en daños y perjuicios, hay imposibilidad pues,
material para destruir el hecho verificado, violando la obligación de no hacer.
Es un proceso de cognición que, por estar destinado a satisfacer una pretensión de ejecución
fundada en un título procesalmente privilegiado, se tramita por un procedimiento sumario que
reduce considerablemente los actos procesales destinados a facilitar el conocimiento del tribunal
sobre el fondo del asunto litigioso planteado. En este sentido, el juicio ejecutivo es la vía más
expedita con que cuentan los acreedores cuyo derecho se funda en un título ejecutivo. Uno de los
primeros trámites de este juicio es el embargo, con lo que se acentúa el carácter expeditivo del
proceso ejecutivo. Pero ello no debe autorizar para confundirlo con el proceso de ejecución, que
no termina en sentencia, mientras que el juicio ejecutivo sí acaba con sentencia. El procedimiento
del juicio ejecutivo, siendo un proceso de cognición, es esencialmente distinto del juicio ordinario
de mayor cuantía. Incluso es frecuente denominar ejecutante al demandante, y ejecutado al
demandado.
Esta ubicación, ocupada por los ejecutivos dentro de la clasificación de los tipos procesales, se
advierte no solo por la determinación del objeto litigioso, reducido a prestaciones de dar sumas de
dinero líquidas y exigibles, generalmente documentadas en instrumentos públicos o privados,
cuanto en el trámite particular que el legislador ha previsto para estas contiendas, creado a
semejanza del aplicable a la ejecución de sentencia de condena al pago de dinero. ESte último
espectro, traducido en el celeridad de trámites y etapas procedimentales, pero especialmente
tipificada en la sumariedad
del conocimiento judicial, que veda la oposición y examen de determinadas excepciones al
demandado, nos permite afirmar que los ejecutivos integran un capítulo aparte dentro de la
sistemática procesal.
El juicio ejecutivo, regulado en los códigos procesales que siguieron al código español de 1855 o
posteriores, no se encuentra incoado
sobre la base de una sentencia de condena, cuanto partiendo de títulos ejecutivos extrajudiciales.
La gran variedad de títulos ejecutivos, y mayor o menor fehaciencia de los mismos, ha motivado la
regulación de distintos juicio ejecutivos.